Que Es El Camino Neocatecumenal AngelHernandez
Que Es El Camino Neocatecumenal AngelHernandez
Que Es El Camino Neocatecumenal AngelHernandez
Sus estatutos fueron inicialmente aprobados el 29 de junio de 2002, de forma temporal por cinco
años ad experimentum, por el papa Juan Pablo II. Posteriormente, a comienzos de 2008, se
expidió el decreto en el cual los estatutos se aprobaron definitivamente, y el mismo año,
el cardenal Stanisław Ryłko, presidente del Consejo Pontificio para los Laicos, entregó el decreto
de la aprobación definitiva de los estatutos del Camino Neocatecumenal.
El movimineto está difundido 120 países, y cuenta con con 97 seminarios Redemptoris Mater
y 450 familias misioneras. Se estima que alrededor de mas de un millón de personas habían
formado parte de sus más de 17 mil comunidades, de los cuales trescientos mil se encontraban
en España.
Fundadores
El iniciador del movimiento es Francisco José Gómez Argüello Wirtz, más conocido como Kiko
Argüello, nacido en León, en1939, aunque su familia se trasladó siendo él muy niño a Madrid.
Sus estudios y profesión son la de pintor. Inició el movimiento Neocatecumenal junto con
la española Carmen Hernández y el sacerdote italiano Mario Pezzi. Los dos primeros forman de
modo vitalicio el llamado "Equipo responsable internacional". Kiko fue designado consultor
del Pontificio Consejo para los Laicos en 1993 por Juan Pablo II, y confirmado por los papas
posteriores. En 2011 fue nombrado consultor del Pontificio Consejo para la Promoción de la
Nueva Evangelización.
Durante su época como estudiante universitario frecuentó entornos marxistas y ateos, donde
no encontró la solución a sus problemas existenciales; tampoco en su familia ni en el ambiente
culto, universitario, existencialista y antifranquista del convulso período de los años cincuenta y
principio de los sesenta del siglo XX hasta que se convirtió tras sentir dentro de él la certeza de
que Dios existía. Necesitado que se vio de una formación seria cristiana acudió a Cursillos de
Cristiandad donde se quitó sus prejucios contra la Iglesia y se formó como catequista. Estudió
Bellas Artes en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid. En 1959, recibió el
Premio Nacional Juvenil de Pintura.
Argüello inició el llamado Camino Neocatecumenal en 1964, con la fundación de la primera
comunidad neocatecumental en Madrid, en un barrio de Vallecas llamado Palomeras Altas, un
poblado de chabolas de itanos , quinquis y trabajadores inmigrantes de clase baja, inspirado en
la vida y los escritos de Charles de Foucauld. Tanto en su época de activismo político en
ambientes culturales antifranquistas de Madrid, como una vez iniciado el Camino, demostró
tener una capacidad de liderazgo y un carisma notable.
A pesar del peso fundacional de Kiko Argüello, es fundamental en el inicio del movimiento
la presencia de Carmen Hernandez y Mario Pezzi (sacerdote).
Carmen Hernández, que coincidió con Kiko ya desde el mismo principio en las chabolas de
Palomeras, nació en Ólvega, aunque de muy pequeña se trasladó con su familia
a Tudela (Navarra), donde pasó la mayor parte de su infancia y juventud.
Estudió la licenciatura en Química en Madrid. Tras licenciarse, decidió dedicarse a contribuir a la
misión de la Iglesia católica y se retiró al Instituto de Misioneras de Cristo Jesús. Tras una estancia
en dicho instituto, obtuvo la licenciatura en Teología. Luego, inspirada por el Concilio Vaticano II,
Hernández pasó dos años en Israel para profundizar su comprensión de la Biblia y la importancia
de la catequesis. De retorno a España, fue testigo de la primera comunidad catecumenal en
Palomeras Altas, en los suburbios de Madrid, y se unió a aquel grupo coordinado por Kiko
Argüello.Inspirados ambos por el carisma de Carlos de Foucauld, buscaron hacerse presentes
entre los pobres.
A lo largo de su vida Carmen Hernández rechazó títulos honoríficos y premios; sin embargo, junto
con Argüello, aceptó un título honorario de la Universidad Católica de América en Washington D.
C. en 2015, en reconocimiento por «su dedicación a los pobres y el buen trabajo que han hecho
por la Iglesia». Falleció el 19 de julio de 2016 a los 85 años.
De particular importancia es tambien Mario Pezzi, que nació en Gottolengo , Italia, en 1941.
Es presbítero y teólogo, parte del grupo de Catequistas Itinerantes Internacionales e iniciador
del Camino Neocatecumenal . Se adhirió al recién nacido Camino Neocatecumenal en 1970 y allí
le fue encomendada la misión de ser quien representara a la curia en el equipo responsable del
Camino. De hecho, pronto se convertiría en el presbítero del Equipo responsable internacional
del Camino, uniéndose a sus iniciadores: Kiko Argüello y Carmen Hernández. En 1979, junto a
Kiko y Carmen, tendrá su primer encuentro con el papa Juan Pablo II en Castelgandolfo.
Hoy en día, su labor dentro del Camino Neocatecumenal es la de representar la visión teológico-
pastoral dentro del equipo responsable y de ser la figura que simbolice también a los sacerdotes
y personas consagradas que forman parte de esta realidad eclesial.
Según la definición de movimiento que hace Ratzinger siendo todavía cardenal basada en
cuatro elementos básicos podemos decir que el Camino Neocatecumenal es , en efecto un
movimiento eclesial. Estos cuatro elementos son : un componente carismático (habitualmente
portado por una persona que lo inicia), la constitución de una comunidad concreta, la vivencia
radical del Evangelio y la conciencia de su referencia y dependencia de la Iglesia.
El Movimiento Neocatecumenal se funda tras una experiencia profundamente carísmática,
de su principal fundador, Kiko, que le lleva a reconocer en los signos de los tiempos la
necesidad de profundizar en los frutos del bautismo que se plasma en la predicación del
kerigma, de la Pascua de Jesús. De esa manera se constituyen comunidades pequeñas que
permítan , a imagen de las primeras comunidades cristianas, mostrar y recibir el amor entre
los hermanos, testimonio básico de la evangelización. Esa profundización les lleva a a vivir
radicalmente el Evangelio en maneras y formas concretas que sirven de testiomonio efectivo.
Así mismo , desde el principio, Kiko se vió amparado por la Iglesia a través de la jerarquía ,
siendo paradigmático el apoyo inicial en momentos dificilísimos del Arzobispo Morcillo. El
movimiento ha mostrado constante y consistentemente su incardinación en la Iglesia local y
universal, estando siempre al servicio de los pastores.
Se trata de una moción carismática que surge de una profunda crisis existencial de su
principal fundador, Francisco Javier Gomez-Argüello Wirtz:
«En un momento trágico de mi existencia, entré en mi cuarto, cerré la puerta y grité a ese Dios:
` ¡Si existes, ven!, ¡Ayúdame porque ante mí tengo la muerte!´». «Intenté vivir como si Dios no
existiera. Fue entonces cuando se me cerró el cielo. Se me formó encima como un cielo de
cemento y la vida empezó a ser muy dura». «Había muerto interiormente y estaba literalmente
sorprendido de que la gente fuese capaz de vivir cuando yo no era capaz de hacerlo. La gente se
ilusionaba por el fútbol, el cine... sin embargo, a mí esas cosas no me decían nada (…). Me
preguntaba: «¿Pero cómo vive la gente?, ¿cómo logra vivir la gente?». Veía a la gente normal y
pensaba: «¿Pero no se preguntan: quién soy, quién me ha creado, qué es la vida?», «¿es que la
gente no se plantea esos problemas?», «¿no será que estoy un poco loco, que soy un narcisista,
un tipo raro?». Todo esto también me lo planteaba porque sentía que tenía sobre mí como una
manta mojada que me hacía buscar la verdad constantemente: «¿Quiénes somos y qué hacemos
en el mundo?» Para mí no era indiferente si Dios existía o no existía, sino que era una cuestión
de vida o muerte».1 A través del Neocatecumenado se abre en el centro de la parroquia un
camino de iniciación cristiana que desarrolla un trabajo pastoral de evangelización para adultos.
Esta evangelización trata de atraer a una fe viva a muchos hermanos quienes hoy viven un
cristianismo de costumbres y hábitos y permite que mucha gente sumergida en un mundo
secularizado tenga la posibilidad de encontrarse con Jesucristo a través de comunidades
cristianas que viven su fe en un nivel adulto del amor en la dimensión de la cruz y en una unidad
perfecta.
Kiko empieza a vivir en una chabola de Palomeras , compartiendo su tiempo con las personas
que viven allí (gitanos, quinquis, etc). No es hasta algo más tarde cuando con el apoyo del
arzobispo Morcillo empieza a trabajar sistemáticamente con ellos.
Se incorporan otros compañeros que son testigos de una palabra que, tomando carne entre
estas personas pobres que la acogían con alegría, produjo el nacimiento de una comunidad en la
oración y en una liturgia sorprendente como respuesta de todos estos hermanos quienes
bendecían al Señor por haberse acordado de ellos. Por tanto, en el espacio de tres años, vimos
aparecer ante nuestros ojos un trípode en el cual se basaría el Camino que el Señor estaba
creando: el embrión de un Catecumenado, en una Iglesia donde la comunión fraterna fuera
tomando entidad, en la cual el amor se tomara en una dimensión que sorprendía a todo el
mundo, en la dimensión de la cruz, donde es posible morir por el enemigo.
Kiko Arguello vive esta crisis en un entorno universitario de clase media alta, “pijo” se podría
decir, y decide emprender una búsqueda radical y disruptiva que le lleva a las chabolas de
un poblado marginal de Madrid en Palomeras, cerca de Entrevías, en Vallecas.
El Señor llama a Kiko Arguello y al pequeño grupo a su alrededor, a vivir un camino de
conversión, a través del cual descubren la inmensa riqueza de la fe en un catecumenado post-
bautismal. Durante este catecumenado, gradualmente, etapa por etapa, paso a paso, se
desciende a las aguas de la regeneración eterna, de forma que el bautismo que la Iglesia confió
1
Argüello, K. , El Kerigma: en las chabolas con los pobres, Ed Buenas Letras , Madrid 2012
en el pasado a los fiels, mediante la adhesión a él, se convierte en sacramento de salvación, en
buena noticia para todos los hombres.
Desde el comienzo Kiko y los suyos, a pesar de iniciar el movimiento en las chabolas y
cuevas de Palomeras, son incardinados por el arzobispo Morcillo en la parroquía mas
cercana, que ya de por sí era un miserable barracón. Cuando el Arzobispo de Madrid, en aquel
momento, Monseñor Casimiro Morcillo, se puso en contacto con esta realidad, que él apoyó con
entusiasmo, fue él mismo quien envió a los kikos a las parroquias que deseaban comenzar la
experiencia, mientras que les exhortaba a actuar siempre en unión con el párroco. Esta
experiencia se extendió rápidamente en Madrid y en otras diócesis españolas.
Este amor, hecho visible en una pequeña comunidad, fue el signo que llamó a la fe a mucha gente
cuyas vidas estaban alejadas de la Iglesia. El resultado fue que los sacerdotes de la parroquia de
San Frontis en Zamora y de Cristo Rey en Madrid nos invitaron a traer a sus parroquias la
experiencia de las catequesis que habían observado. Para gran sorpresa, incluso en estas
parroquias donde el entorno social era totalmente distinto al de las chabolas, vimos cómo nacían
comunidades en un camino hacia la conversión después del anuncio del kerigma y apenasdos
meses de catequesis.
En 1968 fueron invitados a ir a Roma, llevando una carta del Arzobispo de Madrid para el
Cardenal Dell'Acqua, entonces Vicario de Roma, y empezaron las mismas catequesis en la
parroquia de los Mártires de Canada. A partir de entonces se extendió por toda la diócesis
mediante la predicación de los catequistas elegidos de las primeras comunidades, y en muchos
otros países, en todos los continentes, incluyendo los paises misioneros.
Catequistas itinerantes
Muy pronto en la vida del movimiento, las peticiones hechas por los párrocos en muchas
diócesis dieron origen al carisma de catequistas itinerantes, quienes dejan su propia comunidad
por un cierto tiempo y se ponen a disposición para llevar el Neocatecumenado a las diócesis que
lo piden.
Muchos equipos de catequistas itinerantes, después de la experiencia de evangelización en su
propio país, han sido llamados por el Señor a abrir el Camino en otros países, de donde venían
numerosas peticiones - desde obispos hasta párrocos - particularmente desde 1972 en adelante.
Una de las mayores experiencias para los kikos es la capacidad de anunciar el Evangelio en
muchas partes del mundo, donde no solo se proclamamos el kerigma, sino que aparece un
camino para la gestación de la fe basado en una comunidad, a través del cual, con el tiempo, el
párroco puede pasar de una pastoral concentrada en los sacramentos a una pastoral de
evangelización.
Un camino concreto de evangelización para aquellos que están alejados; esa es la esencia del
Camino Neocatecumenal.
Desde el principio dem movimiento en las chabolas de Palomeras, Kiko contó con el impulso
del “Ordinario del lugar”, esto es, en este caso , el arzobispo de Madrid, D. Casimiro Morcillo,
el cual intuyó sin duda el origen de este movimiento en una moción real de Espíritu santo.
Los miembros del Camino, son enviados por los obispos a diversas misiones en parroquias
y ellos obedecen con celo. La extraordinaria expansion del movimiento está en este envoi
de la jerarquía de la Iglesia. El envío a la primera comunidad parroquial en San Frontis,
Zamora, a la parroquia de Cristo Rey, Madrid, a la parroquia de los Mártires Canadienses,
Roma, etc, etc, muestran lo que será la actividad del movimeinto en esos primeros años 60
del siglo pasado.