Orientación Del Rodete en El Modelo Definitivo
Orientación Del Rodete en El Modelo Definitivo
Orientación Del Rodete en El Modelo Definitivo
Los dientes naturales ocupan una zona de equilibrio en la boca, donde cada diente toma
una posición que es el resultado de todas las diversas fuerzas que actúan sobre él.
Cuando los dientes naturales son reemplazados por dientes artificiales, lo lógico es
colocar estos en una posición cercana como sea posible a la que ocupaban antes los
dientes naturales, lo cual permite que las mismas fuerzas que estabilizaban los dientes
actúen también para estabilizar los dientes artificiales de las prótesis completas.
En el paciente totalmente edéntulo, no siempre es fácil determinar dónde estaban los
dientes naturales en relación con rebordes alveolares reabsorbidos en forma total o
parcial. La mejor guía para determinar y diseñar la forma del arco en el rodete, consiste
en la utilización de referentes anatómicos relativamente estables.
Arco maxilar
Las líneas de soporte marcadas en los rebordes residuales del maxilar superior,
prolongadas en el zócalo en el sector anterior, las cuales se tomaran como referencia al
momento de orientar el rodete de oclusión.
Líneas de soporte en el arco superior con proyección sobre el zócalo en el sector posterior
para orientación del rodete de oclusión en la base de registro.
A. Vista lateral del rodete de oclusión superior, donde la cera que representa los
bordes incisales de los incisivos centrales, se encuentra aproximadamente unos 8
a 10mm por delante del centro de la papila incisiva.
B. Vista anterior del rodete de oclusión superior, donde se observa su orientación
tomando como referencia las líneas de soporte marcadas en el zócalo.
A. Para conseguir una correcta unión entre el rodete de oclusión y la base de registro,
a esta última se le coloca cera pegajosa Kerr en la zona de los rebordes residuales.
B. Una vez comprobado el correcto asentamiento del rodete de oclusión sobre la base
de registro, se flamea la superficie de cera que va a estar en contacto con la cera
pegajosa, la cual previamente también fue flameada, y se unen firmemente las dos
superficies.
Arco mandibular
En la mandíbula ocurre mayor pérdida ósea
sobre el lado labial del reborde residual
anterior. Esta pérdida también se observa en
bucal y lingual de del reborde residual en la
región del premolar, pero en la región molar se
observa principalmente en lingual del reborde
debido a la forma de corte transversal de la
mandíbula.
La curvatura de los rodetes de oclusión, que simulan la forma del arco de los dientes
posteriores, deben seguir la curvatura de la mandíbula, lo cual se visualiza trazando una
línea desde lingual de la papila retromolar, la cual se extiende hacia adelante hasta un
punto justo por lingual respecto de la cresta del reborde en la región premolar. Esta línea
ayuda a la colocación de las superficies linguales de los dientes posteriores.
La relación del rodete con el reborde edéntulo maxilar superior se obtiene al trazar sobre
el modelo definitivo las líneas de soporte que se localizan desde el sitio donde estaría la
cúspide del canino hasta la parte media de la tuberosidad o hasta el centro de la zona del
cuerpo piriforme, en el inferior. Estas líneas de soporte se deben proyectar sobre el zócalo
del modelo para orientar de manera adecuada los rodetes de oclusión con referencia al
reborde residual de cada una de las arcadas.
Líneas de soporte del arco inferior, trazadas desde el sitio donde se ubicaría el canino
hasta el centro de la papila piriforme. Con una regla se traza una línea en cada uno de los
rebordes residuales, referencia para orientar el rodete de oclusión.
Líneas de soporte del arco inferior con proyección al zócalo, las cuales servirán de
orientación al momento de ubicar el rodete de oclusión en la base de registro.
Una vez ubicado el rodete sobre la base de registro se procede a unirlo con cera pegajosa
por medio de una espátula 7ª caliente para que se adhiera a la base y a la cera del rodete;
los espacios entre la base y el rodete se llenan con cera sin hacer presión para evitar la
deformación de la superficie oclusal la cual debe ser plana en toda su extensión.
El rodete inferior debe tener una altura anterior de 8mm y una posterior de 5mm llegando
hasta la mitad de la papila piriforme.
A. La curvatura del reborde residual inferior no coincide con la porción recta del
rodete de oclusión.
B. Para no alterar el plano de oclusión, mediante recorte de la porción distal del
rodete y desgaste anterior de la cera tomando la curvatura del reborde residual, se
logra un adecuado acople entre las dos superficies.