Educacion para Las Personas Con Diabetes
Educacion para Las Personas Con Diabetes
Educacion para Las Personas Con Diabetes
DEFINICIONES:
INTRODUCCIÓN
La atención médica se fundamenta en un diagnóstico correcto y en la selección de
una terapéutica adecuada. Esto puede ser suficiente ante una enfermedad aguda,
sin embargo esto no sucede ante una enfermedad que se instala para toda la vida,
que imprime numerosas exigencias terapéuticas que el paciente y no el médico
deben cumplir. Para que el paciente pueda cumplir con estas exigencias requiere
estar capacitado para tomar decisiones informadas y asumir la responsabilidad de
su cuidado diario. De hecho la diabetes es una enfermedad de autocuidado. Es
decir el paciente toma un papel protagónica en el que primariamente acepta su
enfermedad y participa activamente y responsablemente en su plan terapéutico.
El paciente debe aprender a hacer ajustes ante las diversas contingencias de la
vida diaria, saber identificar las manifestaciones de alarma que le anuncian la
posible aparición de alguna complicación aguda y crónica.
En esta situación el papel del profesional de la salud trasciende mas allá de los
conocimientos etiopatológicos y terapéuticos de la diabetes, requiriendo además
EL EDUCADOR:
• Ayuda al paciente a que haga evidentes sus preocupaciones primarias,
identificando las áreas de mayor insatisfacción en su situación actual. El
paciente y el educador centran sus esfuerzos en éstas áreas.
• Discute su relación con el paciente en el manejo de la diabetes: La diabetes
es una enfermedad de automanejo en la que el educador actúa como un
consultante con experiencia. La educación pretende que el paciente pueda
tomar decisiones informadas acerca de su cuidado.
• Investiga el estado físico, emocional, psicológico, social, cognitivo del
paciente así como su práctica en el automanejo.
• Ayuda al paciente a identificar los problemas en el automanejo.
• Ayuda a identificar los sentimientos relacionados con la diabetes y su
manejo.
• El educador ayuda a identificar los resultados deseados.
• Proporciona información relevante basada en las necesidades y
preocupaciones del paciente.
• Describe las diferentes opciones en el tratamiento, sus costos y beneficios.
decidir cuales son los problemas del paciente, el profesional va a ayudar a que el
paciente los identifique, el profesional no va a establecer las metas de manejo, va
a ayudar a que el paciente las establezca, el profesional no va decir que es lo más
conveniente, el paciente debe identificar lo que más le conviene.
Educación y cuidado médicos forman una unidad indisoluble, es decir, la
educación es inseparable del programa terapéutico. El tratamiento de la diabetes
impone la adquisición de conocimientos y destrezas con un carácter aplicativo,
cambios en las conductas de alimentación y actividad física, readaptación en las
relaciones familiares, laborales, profesionales, así como motivación y hacer
consciente la importancia que tiene el control de la enfermedad.
EL PACIENTE:
• Selecciona metas e identifica las barreras y fortalezas para lograr las metas
del automanejo.
• Asume la responsabilidad de resolver problemas a través de adquirir y
aplicar los conocimientos y habilidades.
• Desarrolla habilidades para optimizar el apoyo familiar y social a través del
desarrollo de su capacidad de comunicación.
• Identifica las barreras y fuentes de apoyo.
• Establece opciones y elabora un plan en colaboración con el educador.
• El paciente lleva a cabo el plan.
• El paciente y el educador evalúan y revisan el plan.
EL PROGRAMA EDUCATIVO
El programa educativo para el automanejo debe integrar los componentes clínicos,
los psicosociales y del comportamiento, reconociendo la importancia que tiene la
experiencia de vivir con diabetes, que no tiene categorías clínicas, psicosociales y
de comportamiento, sino que todas actúan simultáneamente formando un todo.
Esto quiere decir que frecuentemente solo se enfocan los problemas clínicos
dejando a un lado los aspectos psicosociales y conductuales.
¿COMO ENSEÑAR?
El ser experto en un tema o en un área es una condición necesaria para poder
enseñar, sin embargo no asegura que sea un buen profesor, ya que para esto se
requieren cualidades y preparación. El saber mucho sobre un tema o área no
asegura que la persona sepa enseñar. La razón de esto es que la enseñanza y el
aprendizaje son dos procesos diferentes, que requieren habilidades diferentes
para llevarse a cabo. Estos procesos íntimamente relacionados en la docencia
institucionalizada se conjuntan en la denominación de proceso de enseñanza
aprendizaje.
1. La forma empírica que se lleva cabo sin una base teórica de acuerdo a una
conceptualización muy personal de lo que es enseñar, repitiendo los
modelos de los maestros con los que se han tenido experiencias
vivenciales como alumnos (Educación centrada en el maestro). Este
modelo no cuestiona la efectividad del proceso de enseñanza aprendizaje,
por considerar que está legitimado socialmente y por lo tanto no requiere de
cambios.
2. Otro modelo constituye una práctica docente más profesional y consciente,
que se caracteriza por basar sus acciones en los aspectos pedagógicos,
Psicológicos y Sociales que influyen en el proceso. Este modelo toma en
cuenta la preparación teórica del que enseña, para atender con
conocimiento de causa las particularidades de cada persona o de cada
grupo de personas durante el proceso de enseñanza aprendizaje. Esta es
una educación centrada en el alumno, que elimina la actitud de receptor
pasivo, que por lo contrario busca activamente información para obtener
conocimientos y un aprendizaje significativo, es decir que tenga una
aplicación práctica en su vida. Este modelo convierte al alumno, en nuestro
caso al paciente, en una persona activa motivada por sus propios intereses
y necesidades, en busca de información para resolver problemas y tomar
decisiones informadas para su autocuidado.
1. SUSCEPTIBILIDAD.
La percepción de susceptibilidad se refiere a las posibilidades de contraer la
enfermedad y a sus consecuencias negativas. ¿Qué tan vulnerable se siente
una persona a desarrollar diabetes y a las consecuencias negativas a que
puede dar lugar?
Una persona con diabetes se puede sentir poco vulnerable o susceptible a las
consecuencias de la enfermedad cuando piensa o cree que tiene una forma
leve o benigna de la enfermedad. Esta percepción puede ser generada por el
médico en un afán de no preocupar al paciente al comunicarle el diagnóstico
de diabetes.
Por lo contrario una persona con diabetes o un paciente que sufre las
complicaciones de la diabetes pueden sentirse más susceptible a los efectos
de la enfermedad.
De acuerdo con ésta teoría un mayor percepción de susceptibilidad hace mas
probable que la persona pongan en práctica su autocuidado.
Preguntas al paciente: ¿Qué tan grave cree que es la diabetes y por qué?
¿Cree que puede desarrollar las complicaciones de la diabetes?
La educación en éste sentido pretende desarrollar en el paciente la percepción
de riesgo, pero al mismo tiempo proveerlo de la capacidad para afrontarlo.
Escuchar lo que le paciente percibe y comprende acerca de la diabetes es uno
de los primeros pasos en el proceso educativo.
Las personas que se sienten extremadamente susceptibles pueden no ser
capaces de cambiar su comportamiento porque se sienten agobiadas y
fatalistas. El agobio y el miedo paralizan.
Informar los hechos tan positivamente como sea posible y no ocultar el hecho
que la diabetes en todos sus tipos y etapas es una enfermedad grave, en la
que un tratamiento inadecuado va a disminuir la calidad y expectativas de
vida. Enfatizar que un buen control siempre es posible y hace que los riesgos
disminuyan o incluso desaparezcan.
INTENCIONES DE COMPORTAMIENTO
Las intenciones de cambios en el comportamiento, junto con las creencias de
salud, locus de control y autoeficacia son predictores de cambio en el
comportamiento de autocuidado. Las intenciones de hacer cambios en el
comportamiento no tienen por lo general lugar de inmediato, sino meses después
del diagnóstico. Las intenciones de cambio son mejores en lo referente al
automonitoreo y ajustes en la insulina que en la alimentación y ejercicio físico, que
se perciben como mas difíciles.
En la evaluación de las intenciones de cambio en los comportamientos de
autocuidado cabe preguntar:
¿Con qué frecuencia planea Ud…
• Monitorear sus niveles de glucosa sanguínea?
• Ajustar sus dosis de insulina?
• Tomar sus medicamentos en los momentos indicados?
• Utilizar su plan de alimentación?
• Caminar o efectuar otro ejercicio?
La depresión afecta todos los aspectos de funcionalidad que integran una buena
calidad de vida. El educador debe investigar este trastorno emocional a través de
la identificación de los síntomas:
• Sentimiento de tristeza y vacío la mayor parte del tiempo o todo el tiempo.
• Pérdida de peso sin dieta o por lo contrario aumento de peso en el último
mes.
• Aumento o pérdida del apetito.
• Dificultad para conciliar el sueño nocturno o tener mucho sueño durante el
día.
• Sentirse muy inquieto o por lo contrario con mucha pereza física durante
casi todo el día.
• Marcado desinterés o gusto por las actividades habituales.
• Sensación durante la mayor parte del día de inutilidad y culpabilidad.
• Reducción en la habilidad para pensar, concentrarse y tomar decisiones
durante casi todo el día.
• Pensamientos recurrentes de muerte (sin miedo a morir), pensamientos
recurrentes de suicidio o intentos suicidas o con planes específicos para
cometer suicidio.
A menos que el educador sea un profesional de la salud las personas con
depresión severa deben referirse a tales profesionales.
La ansiedad es otro trastorno emocional común en las personas con diabetes,
que al igual que la depresión afecta la práctica correcta del automanejo. El
educador puede identificar el estado de ansiedad a través de preguntas
específicas:
• Inquietud, insomnio o, nerviosismo, inquietud, o sentirse al borde del
desastre.
• Se fatiga fácilmente.
• Dificultad para concentrase o tener la mente en blanco.
• Irritabilidad.
• Tensión muscular.
• Trastornos del sueño ( dificultad para dormir, ausencia de sueño, sueño sin
descanso, sueño no satisfactorio )
CALIDAD DE VIDA.
Calidad de vida se refiere a la percepción personal de bienestar y de satisfacción
con la vida. La evaluación de la calidad de vida incluye diversos aspectos de
funcionalidad (social, emocional, física, sexual, laboral, familiar). La calidad de vida
tiene relaciones con la enfermedad y su manejo a través de las incapacidades o
molestias que le ocasionan, en particular las complicaciones crónicas y agudas de
la diabetes.
Para la evaluación de la calidad de vida se han desarrollado diversos instrumentos
que califican en escalas el grado de satisfacción (o insatisfacción), preocupación,
problemas, depresión, por mencionar solo algunos aspectos.
ESTRÉS.
El estrés agudo o crónico puede impedir la habilidad en el automanejo y control de
la diabetes. El estrés se puede definir como una reacción física y emocional a una
situación que se percibe como amenazante a nuestro bienestar que no podemos
manejar. Un estresor es una condición o situación que causa estrés.
HABILIDADES EN EL AUTOMANEJO.
EL APOYO SOCIAL.
El comportamiento en el autocuidado esta grandemente influenciado por el apoyo
que proporciona la familia, los amigos, los compañeros de trabajo y por proveedor
de la salud. La mayor parte del autocuidado tiene lugar en el contexto o ambiente
social de las personas.
El apoyo social ayuda al paciente a enfrentar positivamente la enfermedad, con
desarrollado de estrategias para cumplir con las demandas que imprime la
diabetes y su tratamiento. Al mismo tiempo ayuda a amortiguar los efectos del
estrés.
Las principales influencias sociales en el autocuidado son:
• Para el niño los padres.
• Para los adolescentes los amigos.
• Para los adultos el o la cónyuge, los amigos y compañeros de trabajo.
El apoyo social puede ayudar a las personas con diabetes a desarrolla estrategias
positivas de afrontamiento a las demandas de la enfermedad o aliviar los efectos
del estrés. Las personas con apoyo social son más capaces de involucrarse en el
automanejo al recibir soporte práctico y emocional.
El educador investiga las fortalezas y debilidades en el apoyo social del paciente a
través de preguntar por ejemplo: ¿Quién lo ayuda en sus esfuerzos para manejar
la diabetes?, ¿Qué es lo que hacen para ayudarlo?, El apoyo que le brindan, ¿es
práctico o emocional?, ¿Qué es lo mas difícil de manejar de su diabetes?, etc.
MADUREZ COGNOSCITIVA.
Los comportamientos de autocuidado son reflejo del grado de madurez cognitiva
que ha alcanzado la persona. Esto se refiere a la capacidad de razonamiento
acerca de conceptos abstractos que están ligados al manejo de la diabetes (por
ejemplo balance entre comida, insulina, ejercicio y cifras de glucosa sanguínea).
Los niños y jóvenes menores de 15 años de edad generalmente no han alcanzado
la suficiente madurez cognitiva para asumir la responsabilidad para un automanejo
independiente. Los padres frecuentemente motivados por la frustración o las
recomendaciones médicas, delegan la responsabilidad del cuidado a su hijos,
cuando aún no están listos cognitivamente ni suficientemente informados.
FACTORES ECONOMICOS.
El pago de los servicios de salud es un problema para las personas con diabetes
de tal manera que se ha estimado que el costo es tres veces mayor en
comparación al de las personas que no padecen diabetes. Buena salud y
autocuidado efectivo son difíciles de lograr en la gente que carece de recursos
para cumplir con sus necesidades básicas.
El educador investiga si el paciente cuenta con sistemas de apoyo médico para
recomendar su utilización (seguros médicos, instituciones de salud).
INFLUENCIAS CULTURALES.
Todas las personas tienen influencia en su diario vivir de sus antecedentes
culturales y religiosos. Algunos valores culturales pueden ser inconsistentes con la
práctica del automanejo. El algunas religiones se práctica el ayuno y en otras la
diabetes se puede ver como una manifestación de imperfección o contaminación.
Para otros por lo contrario puede ser fuente de apoyo para su superación.
BIBLIOGRAFIA.