La Plegaria Eucarística
La Plegaria Eucarística
La Plegaria Eucarística
EUCARÍSTICA
CATEGORÍA: SANTA MISA
1. Prefacio
Una vez que el celebrante concluyó la oración sobre las ofrendas, inicia
la Plegaria Eucarística con el Prefacio, en el cual se expresa
especialmente la acción de gracias. En nombre de todo el pueblo, el
sacerdote glorifica a Dios Padre y le da gracias por toda la obra de la
salvación o por un aspecto particular de ella referente a la fiesta del día
o al tiempo litúrgico (IGMR 79).
El celebrante principal extiende las manos y canta o dice “El Señor esté
con ustedes (vosotros)” y el pueblo responde “Y con tu espíritu”. Luego,
el sacerdote eleva un poco los brazos y dice: “Levantemos el corazón”,
a lo que responde el pueblo “Lo tenemos levantado hacia el Señor”.
Luego, con las manos extendidas (no las junta, como se hacía
anteriormente) dice “Demos gracias al Señor, nuestro Dios”, y el pueblo
responde “Es justo y necesario.” Durante las respuestas del pueblo, el
sacerdote permanece con las manos extendidas. Después, el
sacerdote, con las manos extendidas, continúa con el Prefacio (IGMR
148).
a) Epíclesis
En todas las plegarias se hace la epíclesis, es una invocación por la que
se implora la fuerza del Espíritu Santo para que los dones ofrecidos se
conviertan en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo, y para que la víctima
inmaculada que se va a recibir en la Comunión sirva para la salvación
de quienes van a participar en ella (IGMR 179).
c) Narración de la institución y
Consagración
En este momento es cuando que por las palabras y por las acciones de
Cristo se lleva a cabo el sacrificio que el mismo Jesús instituyó en la
última Cena, cuando ofreció su Cuerpo y su Sangre bajo las especies
de pan y vino, y los dio a los Apóstoles para que comieran y bebieran,
dejándoles el mandato de perpetuar el mismo misterio.
Los fieles que por razón de salud u otra causa razonable no estén
arrodillados, deben hacer una inclinación profunda mientras el
sacerdote hace la genuflexión (IGMR 43).
Los fieles que por razón de salud u otra causa razonable no estén
arrodillados, deben hacer una inclinación profunda mientras el
sacerdote hace la genuflexión (IGMR 43).
d) Intercesiones
Con las intercesiones de la Plegaria Eucarística se expresa que la Misa
se celebra en comunión con toda la Iglesia, tanto con la del cielo, como
con la de la tierra; y que la oblación se ofrece por ella misma y por todos
sus miembros, vivos y difuntos, llamados a participar de la redención y
de la salvación adquiridas por el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Cuando el papa celebra, dice: “conmigo, indigno siervo tuyo, que has
puesto a la cabeza de tu Iglesia”
e) Doxología final
Todas las plegarias eucarísticas concluyen con una doxología, con la
que se expresa la glorificación de Dios, que es afirmada y concluida con
la aclamación Amén del pueblo.