Exp. 0100-2012-0-0401-JR-CI-03 - Sentencia

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EXPEDIENTE : 00100-2012-0-0401-JR-CI-03

DEMANDANTE : Flora Lourdes Huaracha Valencia


MATERIA : Cambio de nombre
VÍA PROCED. : No contencioso
ESPECIALISTA : Margarita Charapa Valenzuela
JUEZ : Dr. Ricardo Gil Sancho

El Señor Juez del Tercer Juzgado Especializado en lo Civil de la Corte Superior de Justicia
de Arequipa, Perú; Dr. Ricardo Gil Sancho, impartiendo Justicia en nombre del Pueblo
expide Sentencia en el Expediente N° 237-2012-0-0401-JR-CI-03 sobre Cambio de nombre,
supresión de nombre y/o adición de nombre.

SENTENCIA 65- 2012

RESOLUCIÓN N° 7
Arequipa, dos mil doce, julio treinta.-

VISTOS: Que a fojas seis, Flora Lourdes Huaracha Valencia, en


representación de su menor hijo Abel Cristian Huaman Huaracha solicita el cambio de nombre en
la partida de nacimiento 015994 de dicho menor que aparece como Abel Cristian Huaman
Huaracha, debiendo autorizarse el cambio de su apellido paterno de Huaracha por el de Valencia,
a fin quede en adelante como Abel Cristian Valencia Huaracha. Fundamentos de Hecho de la
Demanda: Manifiesta la demandante que el menor nació el veinticinco de mayo de mil
novecientos noventa y cuatro, habiendo sido reconocido únicamente por ella, siendo que desde
muy niño ha sufrido el descuido de su padre, quien nunca lo reconoció, y menos ha cubierto las
necesidades del mismo pese habérsele requerido constantemente, siendo la recurrente la única que
le ha brindado lo necesario para su subsistencia, siendo que al tener el menor a la fecha diecisiete
años de edad, le ha solicitado que le cambie el apellido Huamán, refiere además que desde
pequeño ha sufrido humillaciones por el apellido Huaman, que lo enmarcan como sinónimo de
“tonto” o retrasado, que en múltiples ocasiones al no poder realizar alguna actividad su hijo le
decían “eres un huaman”, que es por estos motivos que recurre al Despacho, solicitando se
ampare su pedido. Fundamentos de Derecho de la Demanda: Ampara su demanda en lo
establecido por el artículo 29 y 30 del Código Civil, 424, 425 749 inciso 5 del Código Procesal
Civil, artículo 2 inciso 1 de la Constitución Política del Estado. TRÁMITE: Se admite la
demanda a fojas diez, se efectuaron las publicaciones correspondiente en el Diario La Republica y
en El Peruano, las cuales obran en autos a fojas 13 y 14 respectivamente. Asimismo a fojas 25 se
llevó a cabo la audiencia de Ley, en la cual se admitieron y actuaron los medios probatorios
ofrecidos por la solicitante. Cumplido el trámite, la causa se encuentra expedita para ser
sentenciada.-------------------------------------------
Y CONSIDERANDO: PRIMERO: Que conforme lo establecen los artículos 188, 196 y 197
del Código Procesal Civil, los medios probatorios tienen por finalidad acreditar los hechos
expuestos por las partes, producir certeza en el Juez respecto de los puntos controvertidos y
fundamentar sus decisiones. Siendo que, la carga de probar corresponde a quien afirma hechos
que configuran su pretensión, o a quien los contradice alegando nuevos hechos, salvo
disposición legal diferente y que todos los medios probatorios son valorados por el Juez en
forma conjunta, utilizando su apreciación razonada. SEGUNDO: Flora Lourdes Huaracha
Valencia, en representación de su menor hijo Abel Cristian Huaman Huaracha solicita el cambio
de nombre en la partida de nacimiento 015994 de dicho menor que aparece como Abel Cristian
Huaman Huaracha, debiendo autorizarse el cambio de su apellido paterno de Huaracha por el de
Valencia, a fin quede en adelante como Abel Cristian Valencia Huaracha TERCERO: a) Que
estando a lo previsto en el primer párrafo del artículo veintinueve del código civil, se advierte
que en dicho dispositivo se establece que: “Nadie puede cambiar su nombre ni hacerle
adiciones, salvo por motivos justificados y mediante autorización judicial, debidamente
publicada e inscrita.”, norma de la que se desprende una PROHIBICION relativa al cambio o
adición del nombre pero que contempla una EXCEPCION la cual está referida a la existencia de
“motivos justificados” advirtiéndose que en la normativa legal vigente no se halla regulado
cuáles son esos motivos justificados que permitirán pasar la barrera de la prohibición y entrar a
la de la excepción, dejándose al criterio discrecional del magistrado la evaluación de tal extremo.
En tal circunstancia, corresponde merituar si los fundamentos alegados por la parte demandante
constituyen o no motivos justificados para que pueda o no accederse al Cambio de Nombre
solicitado. (b) Que, cabe traer a colación lo dispuesto en el artículo IX del Título Preliminar del
Código del Niño y del Adolescente, el cual establece: “En toda medida concerniente al niño y al
adolescente que adopte el Estado a través de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del
Ministerio Público, los Gobiernos Regionales, Gobiernos Locales y sus demás instituciones, así
como en la acción de la sociedad, se considerará el Principio del Interés Superior del Niño y del
Adolescente y el respeto a sus derechos.” (c) Asímismo, se tiene presente a la Convención
Internacional sobre los Derechos del Niño (CIDN) la cual ha elevado al Principio de Interés
Superior del Niño al carácter de norma fundamental, con un rol jurídico definido que, además, se
proyecta más allá del ordenamiento jurídico hacia las políticas públicas e, incluso, orienta el
desarrollo de una cultura más igualitaria y respetuosa de los derechos de todas las personas. Así
lo ha reconocido el Comité de los Derechos del Niño, establecido por la propia Convención, que
ha señalado que el interés superior del niño es uno de los principios generales de la Convención,
llegando a considerarlo como principio "rector-guía" de ella.1 (d) Así también se ha
pronunciado el Tribunal Constitucional peruano, señalando en el Exp. N° 4646-2007-AA:

1
Aguilar Cavallo Gonzalo. Elprincipio del interés superior del niño y la Corte Interamericana de
Derechos Humanos. En:
42. Aun cuando la Declaración de los Derechos del Niño constituye un hito, no es
menos cierto que no tiene la misma fuerza de ejecutoriedad que un Convenio o un
Pacto. Es por ello que tuvo una mayor relevancia la Convención sobre los Derechos del
Niño que permitió expandir la “ciudadanía” a la infancia [13]. A nivel de la Convención,
el niño es definido según sus atributos y sus derechos ante el Estado, la sociedad y la
familia. Se reconoce al niño como sujeto de derechos.
43. La doctrina del interés superior del niño que fuera ya recogida en la Declaración de
los Derechos del Niño, toma mayor fuerza en la Convención sobre los Derechos del
Niño [14], aprobada mediante Resolución Legislativa N.º 25278, recogiendo en el
Artículo 3º el Interés Superior del Niño, indicando que:
1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones
públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades
administrativas o los órganos legislativos, una consideración primordial a que se
atenderá será el interés superior del niño. 2. Los Estados Partes se comprometen a
asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar,
teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u otras personas
responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas
y administrativas adecuadas. 3. Los Estados Partes se asegurarán de que las
instituciones, servicios y establecimientos encargados del cuidado o la
protección de los niños cumplan las normas establecidas por las autoridades
competentes, especialmente en materia de seguridad, sanidad, número y
competencia de su personal, así como en relación con la existencia de una
supervisión adecuada. (resaltado agregado).
44. En esa línea, es relevante recordar que corresponderá a los Estados velar porque en
cualquier medida adoptada por instituciones públicas o privadas relativas a los niños,
sea imperativo tener como premisa de acción y dar atención prioritaria al interés
superior del niño, por encima de cualquier otra cuestión.
45. Sobre el particular, este Tribunal ya ha tenido oportunidad de pronunciarse acerca
del interés superior del niño mediante la sentencia recaída en el Expediente N.° 06165-
2005-HC/TC, en la que estableció que:
(…) La tutela permanente que con esta disposición se reconoce tiene una base justa
en lo que se ha señalado como interés superior del niño y del adolescente,
doctrina que se ha admitido en el ámbito jurídico como parte del bloque de
constitucionalidad del mencionado artículo 4º, a través del artículo IX del Título
Preliminar del Código de los Niños y Adolescentes y, en el espectro internacional,
gracias al principio 2 de la Declaración de los Derechos del Niño y al artículo
3º, inciso 1 de la Convención sobre los Derechos del Niño [15] (…). (resaltado
agregado)
En consecuencia, la Convención sobre Derechos del Niño vincula, respecto de velar por
el interés superior del niño no sólo a las entidades estatales y públicas, sino inclusive a
las entidades privadas, a fin de que en cualquier medida que adopten velen por el
interés superior del niño, el cual debe anteponerse a cualquier otro interés. El Estado
debe velar por la vigencia del derecho de acceso a la educación en situación de igualdad
y no discriminación; y ante cualquier situación en la que colisione o se vea en riesgo el
interés superior del niño, debe preferirse éste indudablemente ante cualquier otro. La
niñez constituye un grupo de interés y de protección prioritario del Estado, y es de cara
a ello que las políticas estatales deben dirigir sus esfuerzos.
CUARTO.- Que, respecto a los medios probatorios aportados en el presente proceso, se tiene:
(a) Que, de la partida de nacimiento del menor Abel Cristian Huaman Huaracha de fojas tres, se
tiene que el mismo ha sido reconocido únicamente por su madre la solicitante, que con la
declaración testimonial de Andrea Ambrosia Pilco Cruz, prestada en audiencia única, se tiene

http://www.cecoch.cl/htm/revista/docs/estudiosconst/revistaano_6_1.htm/Elprincipio11.pdf
que el menor es víctima de discriminación, por su apellido “Huaman”, que le consta que cuando
el menor salía a jugar lo molestaban por su apellido, diciéndole “eres un huamán”, que incluso
ella en ciertas ocasiones ha tenido que defenderlo de los insultos, por lo que a criterio del
Despacho, es procedente accederse a su pedido. Que, en consecuencia, habiéndose acreditado
los fundamentos de la solicitud de la recurrente, a criterio de este despacho la solicitud debe ser
amparada conforme lo prevé el artículo 29 del Código Civil al encontrarse acreditada la
justificación para el cambio de nombre solicitada, por estos fundamentos: SE RESUELVE:
Declarar FUNDADA la solicitud interpuesta por Flora Lourdes Huaracha Valencia, en
representación del menor Abel Cristian Huaman Huaracha sobre Cambio de nombre, en
consecuencia, AUTORIZO el cambio del apellido paterno del menor Abel Cristian de Huaracha
por el de Valencia, debiendo quedar en adelante como ABEL CRISTIAN VALENCIA
HUARACHA. DISPONGO: a) Cursar Oficio a la Municipalidad Distrital de Cayma, a fin de
que se proceda efectuar la anotación marginal de lo sentenciado en el Acta de Nacimiento N°
015994del veinticinco de mayo de mil novecientos noventa y cuatro, debiendo dar cuenta al
Juzgado dicha Municipalidad acompañando copia certificada de la Partida Rectificada bajo
responsabilidad. Y por esta mi Sentencia así la pronuncio, mando y firmo en la Sala de mi
Despacho del Tercer Juzgado Civil de Arequipa. TÓMESE RAZÓN, HÁGASE SABER Y
CÚMPLASE.//. Interviniendo la especialista legal que suscribe por licencia del titular.-

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