Introducción A La Ingeniería Acústica
Introducción A La Ingeniería Acústica
Introducción A La Ingeniería Acústica
Unidad Zacatenco
6to Semestre
Señales y vibraciones
Boleta: 2016302163
Grupo: 6CV3
- ¿Qué es la Acústica?
La acústica (del griego ἀκούω 'oír') es una rama de la física interdisciplinaria que
estudia el sonido, infrasonido y ultrasonido, es decir ondas mecánicas que se
propagan a través de la materia (tanto sólida como líquida o gaseosa) (no pueden
propagarse en el vacío) por medio de modelos físicos y matemáticos.
- Evolución de la acústica.
- Historia:
De la Ilustración en adelante
El siglo XVIII vio grandes avances en acústica a manos de los grandes matemáticos
de la era, que aplicaron nuevas técnicas de cálculo a la elaboración de la teoría de
la propagación de las ondas. En el siglo XIX, los gigantes de la acústica eran
Helmholtz en Alemania, que consolidó la acústica fisiológica, y Lord Rayleigh en
Inglaterra, que combinó los conocimientos previos con abundantes aportaciones
propias en su monumental obra "La teoría del sonido". También durante ese siglo,
Wheatstone, Ohm y Henry desarrollaron la analogía entre electricidad y acústica.
El sonido se propaga a través del medio (aire, agua, tierra). Este debe ser elástico
y no vacío, para que las partículas microscópicas que forman la materia respondan
a las variaciones de presión que produce el sonido, lo cual se traduce en choques
entre estas partículas del medio. Según sean dichos choques, así será la
propagación. Los choques dependerán de dos cosas: por un lado, de las
características del sonido en la fuente (intensidad y frecuencia); lo más lógico es
que cuanta más intensidad tenga al sonido en la fuente, más fuertes serán los
choques y más presión sonora será detectable. Por otro lado, según sea el medio y
las partículas que lo constituyan, el sonido viajará a una velocidad u otra (cuanto
más cerca estén las partículas, más rápido chocarán, y por tanto, mayor velocidad
de propagación tendrá el sonido).
La velocidad del sonido depende del tipo de material por el que se propague.
Cuando el sonido se desplaza en los sólidos tiene mayor velocidad que en los
líquidos, y en los líquidos es más veloz que en los gases. Esto se debe a que las
partículas en los sólidos están más cercanas.
Como el decibel es una unidad relativa, para las aplicaciones acústicas se asigna el
valor de 0 dB al umbral de audición del ser humano, que por convención se estima
que equivale a un sonido con una presión de 20 micropascales, algo así como un
cambio de la presión atmosférica normal de 1/5 000 000 000. Aun así, el verdadero
umbral de audición varía entre distintas personas y para una misma persona,
depende de la frecuencia del sonido.
Se considera el umbral del dolor para el humano a partir de los 140 dB. Esta suele
ser, aproximadamente, la medida máxima considerada en aplicaciones de acústica.
El eco
Un eco es una onda sonora reflejada, cuyo intervalo entre la emisión y la repetición
del sonido, corresponde al tiempo que tardan las ondas en llegar al obstáculo y
volver. Normalmente, el eco es más débil que el sonido original porque no todas las
ondas se reflejan, algunas de ellas se pierden, y por lo tanto pierden energía.
Difracción
El término difracción viene del latín diffractus que significa quebrado. La etimología
alude al fenómeno por el que una onda puede contornear un obstáculo en su
propagación, alejándose del comportamiento de rayos rectilíneos. La evolución de
una onda sigue las leyes impuestas por la ecuación de D'Alembert que determina
los fenómenos de difracción. Para el caso de ondas monocromáticas (cualquier
onda puede considerarse una superposición de ondas monocromáticas), dicha
ecuación se convierte en la ecuación de Helmholtz, de la que partiremos para
abordar el proceso de cálculo de la amplitud de un campo ondulatorio que en su
propagación se encuentra con uno o varios obstáculos.
Reverberación
La reverberación es la suma total de las reflexiones del sonido que llegan al lugar
del receptor en diferentes momentos del tiempo. Auditivamente se caracteriza por
una prolongación, a modo de "cola sonora", que se añade al sonido original. La
duración y la coloración tímbrica de esta cola dependen de: La distancia entre el
oyente y la fuente sonora; la naturaleza de las superficies que reflejan el sonido. En
situaciones naturales hablamos de sonido directo para referirnos al sonido que se
transmite directamente desde la fuente sonora hasta nosotros (o hasta el
mecanismo de captación que tengamos). Por otra parte, el sonido reflejado es el
que percibimos después de que haya rebotado en las superficies que delimitan el
recinto acústico, o en los objetos que se encuentren en su trayectoria.
Evidentemente, la trayectoria del sonido reflejado siempre será más larga que la del
sonido directo, de manera que -temporalmente- escuchamos primero el sonido
directo, y unos instantes más tarde escucharemos las primeras reflexiones; a
medida que transcurre el tiempo las reflexiones que nos llegan son cada vez de
menor intensidad, hasta que desaparecen. Nuestra sensación, no obstante, no es
la de escuchar sonidos separados, ya que el cerebro los integra en un único
precepto, siempre que las reflexiones lleguen con una separación menor de unos
50 milisegundos. Esto es lo que se denomina efecto Haas o efecto de precedencia.
Resonancia
El sonido en la música
Las cuatro cualidades básicas del sonido son la altura, la duración, la intensidad y
el timbre o color.
Altura o
Frecuencia de onda Agudo, medio, grave
tono
Altura
Para que los humanos podamos percatar un sonido, este debe estar comprendido
entre el rango de audición de 20 y 20.000 Hz. Por debajo de este rango tenemos
los infrasonidos y por encima los ultrasonidos. A esto se le denomina rango
de frecuencia audible. Cuanta más edad se tiene, este rango va reduciéndose tanto
en graves como en agudos.
Duración
Intensidad
Los sonidos que percibimos deben superar el umbral auditivo (0 dB) y no llegar
al umbral de dolor (130 dB). Esta cualidad la medimos con el sonómetro y los
resultados se expresan en decibelios (dB) en honor al científico e
inventor Alexander Graham Bell.
Una misma nota suena distinta si la toca una flauta, un violín, una trompeta, etc.
Cada instrumento tiene un timbre que lo identifica o lo diferencia de los demás. Con
la voz sucede lo mismo. El sonido dado por un hombre, una mujer, un niño tienen
distinto timbre. El timbre nos permitirá distinguir si la voz es áspera, dulce, ronca o
aterciopelada. También influye en la variación del timbre la calidad del material que
se utilice. Así pues, el sonido será claro, sordo, agradable o molesto.
- Sistema auditivo
La función del sistema auditivo no es otra que transformar las variaciones de presión
de las ondas sonoras al propagarse por el aire en impulsos eléctricos. Esta
información será luego transmitida por nuestros nervios acústicos hasta el cerebro,
donde se le asignará un significado. El sistema auditivo está formado por el sistema
auditivo periférico y el sistema auditivo central.
Está constituido por el oído, que a su vez se divide en tres partes: oído externo, oído
medio y oído interno. Cumple funciones en la percepción del sonido. Es decir,
transforma las vibraciones del sonido en impulsos eléctricos que llegan al cerebro.
Por otra parte, también cumple una función muy importante en el sentido del
equilibrio.
El oído interno: Finalmente, en esta parte del oído se ubica la cóclea, también
conocida como caracol. Es la encargada de transformar las vibraciones en impulsos
eléctricos, que pasarán al cerebro para ser interpretados.
Está formado por los nervios acústicos y las partes del cerebro dedicadas a la
audición. Aunque a veces no se considera demasiado relevante, se trata de una
parte fundamental en la audición. Es aquí donde se procesa la información recibida
por el oído, es decir, donde se da significado a los sonidos para su correcta
identificación.
En el proceso auditivo intervienen dos tipos de fases para que el resultado sea el
correcto:
- Ruido (sonido).
En el medio ambiente, se define como ruido todo sonido no deseado. Desde ese
punto de vista, la más excelsa música puede ser calificada como ruido por aquella
persona que en cierto momento desee o no oírla.
Por el contrario los ruidos son también sonidos simples o complejos pero
disarmónicos y de muy alta intensidad, generando intolerancia o dolor al oído y una
sensación de displacer al individuo.
Limites
Las entidades emisoras pueden producir un alto nivel de ruido, pero los límites son
ajustados a la capacidad sensorial de la persona, donde el ruido pasa de ser
tolerable a dañino, los entornos con más de 65 decibeles (dB) se consideran
inaceptables.
Contaminación acústica