Riggs Vs Palmer
Riggs Vs Palmer
Riggs Vs Palmer
Palmer → el iusnaturalismo vs
iuspositivismo
¿Qué posición hubiera asumido usted sobre la cuestión si hubiera integrado tan ilustre tribunal?
El Derecho a través de la historia ha pasado por etapas en donde las corrientes de pensamiento
no necesariamente han coincidido, es más han presentado tesis antagónicas, a continuación te
presentamos el caso: Riggs vs Palmer, análisis.
Iusnaturalismo vs Iuspositivismo
No concordamos con la siguiente tesis del Señor Juez Hans, quiero destacar que hemos aplicado
esas normas para resolver todos los casos relacionados con sucesiones testamentarias con
anterioridad a este pronunciamiento, y en ningún momento objetamos el contenido de sus
disposiciones. ¿Será que en este caso nos disgusta la solución que el derecho ofrece y
pretendemos por eso reemplazarlo por nuestras propias valoraciones?
1.- Primero, debemos de enfatizar nuevamente que el derecho positivo lo hemos logrado edificar
gracias a la formalización del derecho natural, hablamos en la forma en que como sociedad
hemos tecnificado los elementos que integran a las leyes humanas para que sean eficaces y
válidas.
Hemos, pasado por una serie de errores y ensayos para lograrlo, pero siempre teniendo presente
los derechos naturales que históricamente siempre han estado presentes, ya desde una visión
divina o razonable, pero lo cierto es que existen y no podemos ir en contra de ellos ahora que se
presenta este caso.
2.- Como segunda objeción, sobre la tesis presentada, consideramos que una vez teniendo en
nuestros alcances las leyes humanas fundamentadas en los derechos naturales, se debe
garantizar su aplicación de manera justa primordialmente, bien, mediante un ejemplo de Orrego
quedará más clara nuestra idea “el delito de hurto. En todos los sistemas jurídicos dicho delito
es castigado penalmente. En mucho de éstos la sanción depende del objeto y del valor de lo
robado.
Así, no puede sancionarse igualmente a quien hurta una billetera que a que que asalta un banco,
etcétera” (Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, s.f.).
Esto, nos permite decir que no se puede castigar penalmente de la misma manera al nieto que
asesino a su abuelo con un solo fin, quedarse con la herencia, esto a pesar de los años de cárcel
que se le dé por las normas, habrá cumplido su fin y nosotros no hicimos nada para evitarlo.
En este sentido, la perspectiva de los abogados del nieto, quienes argumentan que debe de
respetarse la ley, mediante la fórmula “la ley es la ley” en este caso no debe de ser así; pues
bien mediante la historia de la humanidad podemos encontrar situaciones realmente
vergonzosas que nos dejarán “inermes contra toda clase de crueldades y arbitrariedades.
No se niega que las normas no prohíben al nieto cobrar la herencia, pero estaríamos afirmando
una injusticia, de allí la importancia de hacer valer los derechos naturales, específicamente ahora
que el derecho positivo no tiene regulada el acto realizado por el nieto, ahora es cuando el
derecho natural debe de reaparecer en escena, en este sentido por la “consecuencia de las
fuerzas vitales y de los cambios sufridos por el organismo social” (Basave, s.f., pág. 52) en este
caso provocado por el asesinato del abuelo con el fin de acelerar el trámite sucesorio.
Hablamos de esos derechos naturales como el “conjunto de criterios y principios racionales-
supremos, evidentes, universales--- que presiden y rigen la organización verdaderamente
humana de la vida social, de acuerdo con las exigencias ontológicas del hombre” (Basave, s.f.,
pág. 54).
Estos principios evidentes, supremos y universales que nos referimos son los siguientes,
fundamentado en Agustín Basave (s.f), a pesar que menciona otros, para este caso sólo
retomamos cuatro por considerarlos fundamentales:
La filosofía griega.
El de los juristas romanos afirmaban la existencia de un derecho superior al positivo, común a
todos los pueblos y épocas.
El cristianismo lo retomo allá por la edad media constituyendo la necesidad de liberar a la
persona de la tutela absorbente del Estado, de modo que un sistema jurídico no fuera sólo la
expresión de la voluntad de los gobernantes” (Fernández, 2008).
También durante los últimos siglos:
Además las mismas ideas de fondo inspiraron el pensamiento secular de los representantes del
siglo XVI y fueron la base esencial para la aparición de la doctrina de los derechos naturales
surgida en los siglos XVII y XVIII. Durante el siglo XIX y hasta la primera mitad del siglo XX sufrió
fuertes embates críticos, pero resurgió con fuerza después de la Segunda Guerra Mundial.
Actualmente, sus defensores no se limitan a grupos religiosos, como lo pone de manifiesto la
proliferación de corrientes preocupadas por dotar de fundamentos racionales a la doctrina de los
derechos humanos. Su larga vida, y la pluralidad de propuestas que se han considerado
históricamente como pertenecientes a esta doctrina, explican las dificultades que existen para
poder exponer de forma breve en qué consiste el iusnaturalismo. (Socorro & Cruceta, s.f.).
Fundamentado, lo dicho, reafirmamos la existencia de principios morales eternos y
universalmente verdaderos, por lo tanto, el contenido de dichos principios es cognoscible por el
hombre empleando las herramientas de la razón humana y como resultado puede considerar el
derecho positivo como al conjunto de normas dictadas por los hombres que se encuentren en
concordancia con lo que establecen los derechos naturales.
Para continuar con el ensayo, consideramos necesario responder las siguientes preguntas
fundamentales para dar una conclusión al caso Riggs vs Palmer.
¿Estamos obligados a obedecer las leyes que consideramos injustas por contrariar el derecho
natural al que estamos sometidos por el solo hecho de ser hombres?
De acuerdo a la segunda tesis del Iusnaturalismo, el derecho positivo solo es verdadero Derecho
si es conforme con el Derecho Natural (al menos si no viola gravemente los principios más
básicos del Derecho Natural). Es decir, para que un orden normativo humano (positivo) sea
Derecho es necesario que sea moralmente justo.
Si un ordenamiento jurídico positivo no concuerda con el Derecho Natural (o sea con la moral),
entonces no es simplemente que estemos ante un Derecho (positivo) injusto, ese ordenamiento
ni si quiera sería calificado como Derecho. Sería – según los iusnaturalistas- una simple
“apariencia de Derecho” o una “corrupción” del Derecho, pero no auténtico Derecho.
¿Podemos negar que los redactores del código civil poseyeran una concepción moral en la que
creían honestamente y que consideraba correcto respetar a rajatabla la última voluntad de un
testador aun cuando en ella favoreciera a su propio asesino?
Se puede mencionar que toda ley nace de una necesidad para poder satisfacerla, siempre y
cuando sea favorable y aplicable a todos por igual, ya sea como derecho o como una obligación;
por lo general las normas jurídicas están en favor de quien pueda ser beneficiado pero en este
caso también hay un afectado, entonces podemos entender que no se puede calificar al derecho
como tal, sino como una apariencia como lo define el iusnaturalismo, ya que no se puede
concebir y aceptar un acto que causara la muerte de un familiar solo para obtener un beneficio
personal.
¿Será que en este caso nos disgusta la solución que el derecho ofrece y pretendemos por eso
reemplazarlo por nuestras propias valoraciones?
El Iusnaturalismo a consideración personal NO pretende reemplazar al Derecho sino que se debe
actuar simplemente basándose en las normas y principios naturales que son parte de nuestro
Derecho tal como lo señala la primera tesis del Iusnaturalismo:
Sus normas y principios son naturales; es decir, lo que hace distinguir al hombre el bien
del mal por mera intuición de supervivencia.
Son verdaderos; en la medida que reflejan, describen o expresan fidedignamente esa
naturaleza; es decir, son merecedores de credibilidad.
Son cognoscibles, en el sentido de que los seres humanos podemos llegar a conocer y
entender esos principios de derecho natural.
Pues bien a todo esto tenemos contemplado que existen un sin fin de teorías del derecho, entre
ellas el Iusnaturalismo, que en simples palabras refiere al ¨derecho natural¨ podríamos decir que
está bien definida como el núcleo de la filosofía del mismo derecho puesto que en sus principios
menciona la relación que se tiene de manera universal del bien y el mal cognoscibles por el
hombre debido al ser racional que es dentro del marco moral que encierra la costumbre debido
a las diversas formas en las que nos desempeñamos (usos) aunque dentro de un marco supra
legal; reconocido por un ordenamiento jurídico.
Como ya vimos dentro de este caso cabe destacar que el eje moral y las ideas que se tienen de
esta teoría son principales; ya que el marco que se tiene sobre estos actos jurídicos son de basta
importancia pese a que tal vez no se tiene una conjetura o antecedentes de las acciones y la
idea de justicia sobre las que divergen los actores pues es que la idea que encierra este tema
abunda en origen y principio, razón y naturaleza en una realidad que supera ampliamente el
ámbito jurídico.
Para muestra de ello a pesar de no existir dentro del caso ley que complemente lo dicho en
relación con las diversas concepciones sostenidas del derecho que encierra el hecho frente al
sistema con el conjunto de normas en determinada sociedad y el hecho de hacerlas cumplir
generando el obsceno lemas “la ley es la ley” debido al valor moral de tales normas es por ello
que se establecen criterios de justicia y derechos fundamentales parte de la naturaleza humana,
normas positivas mismas de la naturaleza del derecho y que en este caso se podría entender
como desnaturalización referente al sometimiento y formulación contradictoria al derecho mismo,
una ley injusta no es ley pero que a pesar de esto se tiene en consideración como bien se
menciona que aunque se nos han enseñado que por encima de las normas dictadas por los
hombres, hay un conjunto de principios morales.
Es así que la relación entre el derecho y la moral desde diversos puntos puede verse cuestionable
dentro de sistema de lo jurídico ya que las son las normas y no las convicciones que establecen
lo permisible y lo punible, la obligatoriedad y legalidad. Es por ello que los precedentes son
fundamentales para el desarrollo de esta ciencia ya que asientan las bases del Derecho dentro
de los límites y fuera de estos con relación al hombre con referente a la disposición y arbitrariedad
que se toma en la naturaleza propia.
1.4. Bibliografía