EL MÉTODO Estudio
EL MÉTODO Estudio
EL MÉTODO Estudio
1) E: EXPLORACIÓN O PRELECTURA
2) P: PREGUNTAS
3) L: LECTURA
4) E: EXPOSICIÓN
5) R: REVISIÓN Y REPETICIÓN
Tratemos de descubrir ahora cuáles son esas señales que nunca hay
que pasar por alto antes de decidir si leer o no un texto. Atención a:
los títulos
los subtítulos
el índice
las ilustraciones
las acotaciones
2) P: PREGUNTAS:
¿Cuál? = Hecho
¿Cómo? = Desarrollo de los hechos
¿Conclusión? = De los hechos
¿Cuál? = Problema
¿Por qué? = Análisis
¿Discusión? = Pros y contras
¿Qué conclusión? = Solución
3) Estructura de proposición y presentación = PROPRE. Expresa una
afirmación clara y firme que el autor tratará de demostrar a fin de
persuadir.
La lectura comprensiva consiste en interiorizar una serie de instrucciones y pasos que podemos aplicar a
nuestro estudio para comprender y retener a la primera incluso los textos más complejos
e incomprensibles. Veamos cómo se hace:
Concentración y aislamiento
Para una buena lectura comprensiva debemos olvidarnos de hacerla mientras vamos en autobús o
mientras nuestro compañero de piso juega al Fornite a todo volumen. Hay que estar bien sentados, con
buena iluminación y en silencio para que no perdamos nuestra concentración. Pero, además, es
recomendable leer en papel y no en pantalla porque cansaremos menos la vista, podremos hacer
anotaciones más fácilmente y sobre todo porque un estudio de la Universidad de Valencia ha demostrado
que se comprende mejor lo que se lee si leemos en papel.
Punto por punto
Lo primero que debemos hacer es no leer todo el texto de carrerilla. Tener una idea general sobre de qué
trata nuestra lectura es bueno, pero eso se sabe rápidamente con el título y el resumen. Hay que dividir el
temario en puntos asequibles e ir poco a poco, porque si lo leemos todo de corrido, cuando lleguemos a
la última página habremos olvidado la mitad (o más). Así que el primer paso de la lectura comprensiva
es hacer separaciones con nuestro marcador de cada uno de los puntos que leeremos por separado.
Hay textos que ya los tienen: es posible que nos encontremos ante varias definiciones o capítulos cortos
sobre una misma asignatura y que no nos haga falta dividir más, pero si el texto es de corrido o los
apartados incluyen varias páginas, entonces debemos dividir. Normalmente, un punto y aparte nos va a
dar una buena pista de por dónde cortar.
¿Qué significa?
Para contestar a esta pregunta, debemos ir directamente a lo que no entendemos, a las palabras o
expresiones que no conozcamos o que nos hagan dudar, y contestarlas.
Comentar el texto
Además de las preguntas, debemos comentar lo que vamos leyendo. Como siempre recomendamos
en eTítulo, el estudio debe realizarse en voz alta, y más aun la lectura comprensiva, para que nuestra
memoria auditiva haga más eficiente el trabajo. Haz comentarios sobre el texto, di a qué te recuerda una
frase (aunque sea a una tontería sin relación), critica al escritor por pesado, argumenta por qué tal parte
te ha parecido interesante o lo contrario. Se trata de poner a trabajar el cerebro para que la información
se quede grabada y podamos recuperarla en el examen.
Pasa al siguiente punto
Y así sucesivamente. A primera vista nos puede parecer tedioso tener que hacer todo esto con todo el
temario de cada examen que nos pongan, pero realmente no tardaremos más de dos minutos y, con la
práctica, nos saldrá sin darnos cuenta.
Además, ir haciendo esto en cada punto del temario hará que el estudio nos resulte más entretenido y, al
final, veremos que hemos tardado menos tiempo en aprenderlo todo y que nuestras notas serán mejores.
¿Qué prefieres, leer varias veces un mismo texto para aprendértelo o leerlo una más despacio y quedarte
con todo?
Tú decides, nosotros lo tenemos claro: la lectura comprensiva es la herramienta de aprendizaje más útil
de un estudiante.