Universidad Central Del Ecuador. Nutrime PDF
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NUTRIMENTOS DE PLANTAS.
CIENCIASDE LA VIDA
Contenido
CAPÍTULO I. ............................................................................................................................. 1
INTRODUCCIÓN. ..................................................................................................................... 1
1.1. Resumen histórico......................................................................................................... 3
1.2. Elementos esenciales. ................................................................................................... 4
1.3. Características y propiedades físicas del suelo. ............................................................. 5
1.4. . Densidad Real de las Partículas - Dr......................................................................... 12
1.6 Porosidad. ................................................................................................................... 13
1.7 Permeabilidad. ............................................................................................................ 15
1.8 Temperatura del suelo ................................................................................................. 15
1.9 Color........................................................................................................................... 16
1.10 humedad del suelo. .................................................................................................. 18
1.11 RETENCIÓN DEL AGUA EN EL SUELO. ........................................................... 26
1.12 HUMEDADES CARACTERÍSTICAS DE LOS SUELOS. ..................................... 27
1.13 MOVIMIENTO DEL AGUA EN EL SUELO. ........................................................ 37
1.14 LA ABSORCIÓN Y TRANSPORTE DEL AGUA EN LA PLANTA. .................... 42
CAPÍTULO II. .......................................................................................................................... 69
REVISION DE QUIMICA AGRICOLA................................................................................... 69
CAPÍTULO III........................................................................................................................163
EL NITRÓGENO DEL SUELO Y EN LA PLANTA, Y SU IMPORTANCIA EN LA
AGRICULTURA. ....................................................................................................................163
CAPÍTULO IV. ......................................................................................................................186
FÓSFORO EN EL SUELO. .....................................................................................................186
CAPÍTULO V..........................................................................................................................198
EL POTASIO EN EL SUELO. ................................................................................................198
CAPÍTULO VI. .......................................................................................................................224
NUTRIENTES SECUNDARIOS. ............................................................................................224
CAPÍTULO VII. ......................................................................................................................265
MICRONUTRIENTES. ...........................................................................................................265
CAPÍTULO VIII. .....................................................................................................................290
ANALISIS DE SUELO, ANALISIS FOLIAR Y TECNICAS DE DIAGNOSTICO.................290
CAPÍTULO IX. .......................................................................................................................310
FERTILIZANTES Y RENTABILIDAD. ..................................................................................310
CAPÍTULO X..........................................................................................................................329
i
LOS NUTRIENTES Y EL AMBIENTE. ..................................................................................329
CAPÍTULO XI. .......................................................................................................................341
DIAGNÓSTICO DE LA FERTILIDAD DEL SUELO Y ESTADO NUTRIMENTAL DE LOS
CULTIVOS. ............................................................................................................................341
CAPÍTULO XII. ......................................................................................................................374
MANEJO DEL RIEGO Y CALCULOS EN FERTIGACION ..................................................374
CAPÍTULO XIII. .....................................................................................................................392
MANEJO DEL AGUA EN FERTIGACION............................................................................392
BIBLIOGRAFÍA .....................................................................................................................421
ii
CAPÍTULO I.
INTRODUCCIÓN.
Los propósitos del estudio de la FERTILIDAD física de suelos son: conocer el rango de
valores de las propiedades físicas y procesos físicos del suelo y sus efectos sobre el desarrollo
de las plantas; desarrollar métodos sencillos y económicos para evaluar esas propiedades,
aprender a manejar el complejo físico del suelo de acuerdo con los requerimientos de los
cultivos, utilizando los métodos de labranza, adiciones de mejoradores de suelo, o con base en
otras prácticas que generen cambios temporales o permanentes que favorezcan a los cultivos.
Además, se incluye la evaluación de los cambios en las propiedades físicas del suelo debidas
a la influencia de los elementos del ambiente y de las prácticas de manejo de suelo que realiza
el hombre.
En la actualidad, el ser humano aplica sus conocimientos de las propiedades físicas del suelo
en una gran cantidad de prácticas agrícolas, tales como la preparación del terreno para la
siembra, la selección del método de riego más adecuado para cada tipo de suelo, la
determinación de calendarios y láminas de riego, la recuperación de suelos afectados por
sales, sodio, iones tóxicos para las plantas, manto freático elevado, costras en la superficie del
suelo, prácticas de conservación de suelo y agua, y otras prácticas.
La Fertilidad del Suelo es una cualidad resultante de la interacción entre las características
físicas, químicas y biológicas del mismo y que consiste en la capacidad de poder suministrar
condiciones necesarias para el crecimiento y desarrollo de las plantas.
1
elementos minerales –fertilidad química- pero que no está provisto de buenas condiciones
físicas y viceversa.
Igualmente, la fertilidad del suelo no es suficiente para el crecimiento de las plantas; el clima
juega un papel importante y determinante en muchos casos. Por ejemplo se puede tener un
suelo fértil y que dadas las temperaturas extremas no es capaz de producir buenas cosechas,
entonces en un suelo fértil, no productivo.
La fertilización puede ser definida como la adición de elementos que las plantas necesitan
para vivir con la finalidad de obtener cosechas rentables y de buena calidad nutritiva e
industrial, causando el mínimo impacto ambiental. Por esta razón es necesario conocer la
planta que se va a nutrir con el fertilizante, el suelo que se va a fertilizar para aumentar su
reserva nutritiva y el fertilizante que se va a aplicar con el objeto de tener el menor impacto
en el ambiente y en producto cosechado.
Para responder esas preguntas son necesarias las investigaciones, fuente del conocimiento
tecnológico que debe ser difundido a los agricultores,
2
1.1. Resumen histórico.
La nutrición vegetal como una rama de la Fisiología vegetal tiene su desarrollo condicionado
a los avances de las ciencias Agrarias. Para Aristóteles, la planta era un animal invertido, en
lugar de presentar la cabeza al aire, fija su boca en el suelo para de allí extraer todo lo que
necesita para su crecimiento, la alimentación viene del suelo, lo que le permite a las plantas
desarrollarse y dar frutos: las hojas tendrían para la planta, la importancia y la utilidad de una
vestimenta que la embellece y protege los frutos contra el calor del sol. A diferencia de los
animales, la planta retiraba del suelo los alimentos ya digeridos (Carles, 1959, citado por
Malavolta, 1976)
En la edad media, Van Helmont, fue el primero en realizar un experimento con plantas. El
puso 300 libras de suelo en una caja en la que planto una estaca de sauce que peso 2,5 kilos.
El suelo fue regado con agua y protegido contra el polvo. Cinco años después la planta se
había transformado en un árbol de 68 kilos y el peso del suelo solamente había disminuido
180 gramos. La conclusión fue que el aumento de peso fue causado por el agua o en otras
palabras el alimento principal con el que las plantas formaban sus partes fue el agua.
En el siglo XVIII aparecen las bases de la química moderna y con ella mayores luces para la
nutrición vegetal. En 1774 Priestley descubrió el oxigeno notando que las plantas verdes
pueden mejorar el aire que está contaminado por la presencia de animales y el hombre.
En 1976 Ingenhousz publico su trabajo en el cual observo que el oxigeno es producido por las
plantas verdes expuestas a la luz siempre que ellas estén en atmosfera que contenga CO2.
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Boussingault, comenzó sus ensayos en 1840 usando suelos artificiales insolubles, arena,
cuarzo y carbón de azúcar mojados con soluciones de concentración conocida. Sus resultados
dieron sustentos a la teoría de la nutrición mineral de plantas avanzada por Liebig,
demostrando la posibilidad de cultivar plantas en un medio diferente al del suelo natural.
En 1860 Sachs publica los resultados de los experimentos que demostraron que las plantas
terrestres son capaces de absorber sus alimentos en soluciones acuosas sin la ayuda del suelo
y que es posible por ese método no solamente conservar las plantas vivas por largo tiempo
sino también acumular grandes cantidades de materia orgánica y cosechar semillas capaces de
germinar. Para Sachs, a mas de C, H, O los elementos esenciales para el crecimiento de las
plantas eran 9 : N, P, K, Ca, Mg, S, Fe, Na, y Cl. En futuras investigaciones se fueron
determinando las necesidades de otros elementos en pequeñísimas cantidades usadas en las
soluciones nutritivas y cronológicamente son los siguientes investigadores;
Boro (Warngtong, 1923); Cloro Broyer (1954); Cobre Lipman (1931); Manganeso, Mazé,
(1914); Molibdeno, Arnon (1939); Zinc, Chandler, (1931); Cobalto, Delwiche, (1961); Sodio,
Browel (1957); Niquel, (Nielsen, 1984, Brown 1987); Selenio, (Campen, 1991, Miller,
1991).
Los criterios indirectos son tres: 1) la carestía de un elemento impide que la planta complete
el estadio vegetativo o reproductivo de su ciclo de vida, 2) la carencia de un elemento no
puede ser reemplazada por otro elemento3) el elemento debe estar implicado directamente en
la nutrición de las plantas.
4
1.3. Características y propiedades físicas del suelo.
Hay muchos conceptos de suelo dependiendo del ángulo y enfoque que se le de al mismo. Sin
embargo, resumiendo todos ellos podemos llegar al siguiente:
El término “suelo”, se refiere a la capa más superficial de la corteza terrestre que ha sufrido
los efectos del clima, y se ha fragmentado en partículas (meteorización). Inicialmente se
formapor la desintegración y descomposición de rocas a través de procesos físicos y químicos
(minerales), y han sufrido los efectos de la actividad y acumulación de residuos de numerosas
especies biológicas (orgánicas). El suelo pude ser estudiado y descrito desde varios puntos de
vista, por lo tanto la Ciencia del Suelo se estudia con base en varias disciplinas separadas pero
interdependientes.
El suelo suministra soporte físico y anclaje para muchas plantas, así como diversos nutrientes.
Sin embargo, no es simple soporte o recipiente de agua y sales nutritivas; es un medio
complejo que influye en las actividades fisiológicas de las plantas, debido a que el sistema
radical no sólo viven en él sino que crecen a través del suelo, y sus propiedades físicas,
químicas e hídricas tienen fuertes interacciones en el sistema radical vivo que debe valorarse
antes de que se pueda comprender la vida de la planta que crece en él.
Textura.
La textura está expresada por la distribución del tamaño de las partículas sólidas que
conforman el suelo, esto es la composición granulométrica (disposición de los componentes
minerales según el tamaño de las partículas) del suelo. Supone una propiedad física muy
5
importante para la agricultura, ya que condiciona el comportamiento del suelo en cuanto a
aireación, drenaje, capacidad de retención de agua y facilidad de laboreo.
Cuando se observa detenidamente un suelo agrícola, se percibe tanto a la vista como al tacto
que está formado por piedras y partículas de muy diversos tamaños. En el conjunto de las
partículas del suelo se clasifican, según su diámetro en tres fracciones con distintos
comportamientos físicos: arenas, limos y arcillas. Las proporciones relativas de cada una de
estas fracciones configuran la textura del suelo.
De esta muestra se separan los elementos gruesos, que son el conjunto de piedras, gravas y
arenas de mayor tamaño, de diámetros superiores a 2 mm. El resto de la muestra se denomina
tierra fina y es lo que se utiliza como base para las determinaciones analíticas del suelo,
incluida la determinación de la textura. No obstante conviene estimar la cantidad de tierra fina
sobre el total del volumen del suelo
De acuerdo con las proporciones de arena, limo y arcilla, los diversos suelos se clasifican en
doce clases de textura (escala U.S.D.A.) o en once clases texturales (escala I.S.S.S.).
La identificación de las distintas clases texturales se realiza usando los llamados diagramas
triangulares de textura en los cuales en cada uno de los vértices se representa una fracción de
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textura pura (100% de arena, limo o arcilla) y las líneas paralelas al lado opuesto a ese vértice
son líneas con idéntico contenido de esa fracción.
A.- Determinación:
La textura del suelo se determina por medio del llamado análisis mecánico. Se toman en
cuenta únicamente las fracciones con diámetro inferior a 2 mm. El análisis comprende tres
etapas:
- Separación de las partículas minerales (ligadas generalmente por materia orgánica, por
cationes de Calcio o por óxidos de Hierro).
- Preparación de una solución estable del suelo, donde las partículas se pongan en suspensión.
- Sedimentación de las partículas del suelo. La sedimentación de la partículas finas se rige por
la ley de Stokes la cual expresa la relación entre la velocidad de decantación en un líquido, de
una partícula esférica y el diámetro de dicha partícula.
Existen varios métodos para separar las partículas de acuerdo a su tamaño. El comúnmente
empleado en los laboratorios de suelo es el método del hidrómetro con el cual se determina el
peso específico de la solución del suelo a intervalos prefijados. Se emplea por lo general el
"Hidrómetro de Bouyocuous" que está directamente calibrado en porcentaje de partículas en
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suspensión. De acuerdo al porcentaje (a base de peso) en cada fracción del suelo, se definirá
la textura de éste, recurriendo al triángulo de texturas.
Estructura.
Es la forma en la cual las partículas primarias que conforman el suelo (arena, limo y arcilla)
se asocian entre sí, formando agregados o terrones (minerales, materia orgánica y poros) y
creando así la estructura del suelo. Las estructuras granular, prismática y de bloques son las
más favorables para las plantas. Cuando se realizan labores agrícolas en exceso (aradas,
rastreos, etc.) y además en condiciones excesivamente húmedas, la estructura del suelo se
deteriora rápidamente. En consecuencia se reduce la aireación del suelo y se dificultan la
infiltración y la percolación del agua en el suelo.
Las fuerzas que unen las partículas primarias dentro de los agregados son de naturaleza
bastante débil, con lo cual estos son susceptibles a ser destruidos con relativa facilidad. Entre
los factores desfavorables para la estructura se encuentran el laboreo excesivo o inadecuado,
la disminución del contenido en materia orgánica, el impacto de la gota de lluvia y la
compactación por el uso de equipos agrícolas o el pisoteo del ganado. Por estos motivos la
estructura juega un papel muy importante en la productividad de los suelos. La Figura 2
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muestra algunas estructuras características de los suelos. Las clasificaciones de la estructura
de los suelos son muy variadas, siendo la más empleada la del Soil Survey Staff, que
caracteriza según la forma y ordenación de los agregados, su tamaño y estabilidad.
De bloques Granular
columnar laminar
A.- Morfología
Desde el aspecto morfológico la estructura del suelo se define por una forma, un tamaño y un
grado de manifestación de los agregados.
1) Forma.
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Migajosa. Agregados porosos de forma redondeada (no se ajustan a los agregados vecinos).
Típica de los horizontes “A”.
Granular. Agregados sin apenas poros en su interior, de forma redondeada (no se ajustan a los
agregados vecinos). Es similar a la migajosa pero con los agregados compactos. Típica del
horizonte “A”.
Angular (o en bloques angulares). Agregados de forma poliédrica, con superficies planas, de
aristas vivas y con vértices. Las caras del agregado se ajustan muy bien a las de los agregados
vecinos. Típicamente en los horizontes arcillosos, como son los horizonte “B”.
Subangular (o en bloques subangulares). Agregados de forma poliédrica, con superficies no
muy planas, de aristas romas y sin formación de vértices. Las caras del agregado se ajustan
moderadamente a las de los agregados vecinos. Típicamente en los horizontes arcillosos,
como son los horizonte “B”.
Prismática. Cuando los bloques se desarrollan en una dirección (vertical) más que en las dos
horizontales. Presente en los horizontes más arcillosos, a veces horizontes. “B” y en ocasiones
horizonte “C”.
Columnar. Prismas con su cara superior redondeada. Estructura menos frecuente en suelos
arcillosos a veces salinos.
Laminar. Cuando los agregados se desarrollan en dos direcciones (horizontales) más que en la
tercera (vertical). Típica de los horizontes arenosos, como los horizonte “E”.
Sin estructura. Cuando no hay desarrollo de agregados. Horizontes de partículas sueltas
(pulverulentos) o masivos (endurecidos).
2) Tamaño
Por el tamaño de los agregados las estructuras se clasifican en: gruesa, media, fina y muy fina.
Los tamaños corresponden al tamaño dominante de la vista
3) Grado de desarrollo
Los agentes responsables de la estructura son la textura y materia orgánica y determinan las
las características hídricas del suelo. También influyen el pH, CO3=, óxidos e hidróxidos de
Fe, y la actividad biológica.
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B.- Micromorfología
Los agregados que están en la superficie del suelo se dispersan por el impacto de las gotas de
lluvia, esta ingresa hacia el interior de los agregados, y va comprimiendo el aire que había
hasta un momento en que el aire comprimido rompe para salirse y resquebraja el agregado.
La densidad aparente se ve afectada por la estructura del suelo, es decir que su grado de
compactación, así como por sus características de expansión y contracción, que dependen a su
vez del contenido de agua.
La densidad aparente es la expresión de la relación entre la masa del suelo seco a 105ºC por
24 horas y el volumen total, incluyendo los espacios porosos de suelo. Tomado tal como
aparece en el perfil del terreno; en este volumen se incluyen no sólo las partículas de suelo,
sino también los espacios de aire y materiales orgánicos. En definitiva, este valor depende de
la textura, la estructura y el grado de compactación del suelo. En suelos arenosos la da puede
ser tan alta como 1.6 g/cm3. En francos cercana a 1.2 g/cm3 y en suelos arcillosos cercana a
1.0 g/cm3. Los suelos orgánicos o suelos volcánicos tienen densidades menores a 1.0 g/cm3
(suelos humíferos de 0.7 a 1.0 g/cm3, suelos de turba de 0.2 a 0.5 g/cm3).Un suelo agrícola
medio, cultivado, puede tener un valor de densidad aparente de 1,3 - 1.35 g/cm3 .
La Densidad Aparente es el peso seco por unidad de volumen del suelo, el cual incluye el
volumen ocupado por las partículas sólidas y el volumen de los poros, se lo calcula con la
formula 1 y en la Tabla 1 se presentan valores típicos del Da.
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Donde: Da = Densidad aparente del suelo [g/cm3]
Ws = Peso seco de una muestra del suelo, [g]
Vt = Volumen total de la muestra del suelo [cm3]
A veces la densidad se expresa como peso específico. Siendo la relación entre la masa de
sólidos y el volumen ocupado por esos sólidos. En la mayoría de los suelos la densidad media
de partículas oscila entre 2.6 y 2.78 g/cm3, siendo bastante confiable el valor de 2,65 g/cm3 .
Para suelos con contenido de materia orgánica mayor al 5% este valor no es adecuado.
La densidad real es el peso seco por unidad de volumen de las partículas sólidas del suelo,
(formula 2.)
Ws [g]
Dr [ g/cm3 ] = ————— …………. (2)
Vs [cm3]
Donde: Dr = Densidad real de las partículas [g/cm3]
Ws = Peso seco de una muestra del suelo [g]
Vs = Volumen ocupado por las partículas sólidas de la misma muestra del suelo [cm3]
El peso específico real de las partículas minerales del suelo es = 2.6 g/cm3. La presencia de
materia orgánica reduce este valor.
Existe una relación entre el volumen y la masa entre las tres fases del suelo, parámetros que se
consideran básicos en la caracterización de las condiciones físicas del suelo. (Figura 4)
dr = Ms / Vs (g/cm3 )
da = Ms / Vt (g/cm3 )
f = Vf / Vt x 100 (%)
Hg = Mw / Ms (g /g)
Hv = Vw / Vt ( cm3/ cm3 )
S = Vw / Vf X 100 (%)
fa = Va / Vt x 100 (%)
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Figura 1.4: Diagrama esquemático del suelo
Donde:
La masa de las fases indicadas en el diagrama anterior como: masa del aire (Ma) = 0; masa
del agua (Mw); la masa sólida (Ms) y la masa total (Mt). Los volúmenes componentes son
indicados como: volumen del aire (Va); volumen del agua (Vw); volumen de sólidos (Vs);
volumen de poros (Vf = Va + Vw) y volumen total (vt).
1.6 Porosidad.
La porosidad es un índice del volumen relativo de poros en el suelo. Este valor se encuentra
por lo general en el rango 0.3 – 0.7 (30 – 70 %). Los suelos de texturas gruesas tienden a ser
menos porosos que aquellos de textura fina, aunque el tamaño promedio de los poros
individuales es mayor en el primero que en el segundo tipo de suelo. En los suelos con alto
contenido de arcilla, la porosidad es muy variable, a medida que el suelo se expande o
contrae, se agrega o dispersa, se compacta y se parte. La porosidad total no revela nada acerca
de la distribución de poros por el tamaño, que es por sí misma una importante propiedad del
suelo, en relación al riego. Se determina por medio de la fórmula 3.
Da [g/cm3]
P[%] = ( 1 - ——————— ) x 100 ………. (3)
Dr [g/cm3]
Donde:
P= Porosidad total de la muestra del suelo, [%]
Da = Peso específico aparente del suelo, [g/cm3]
Dr = Peso específico real de las partículas [g/cm3]
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Se consideran por separado los macroporos que representan los poros más grandes, que son
los que contribuyen a la aireación del suelo y que se utilizan para la circulación del agua,
mientras que los microporos se refieren a los poros más pequeños que se utiliza para el
almacenamiento del agua.. La porosidad de aireación es separada de los poros del agua en
base al tamaño de los poros que retiene el agua con una succión de 1/3 de atmósferas.
Existiendo una relación entre la porosidad y la capacidad de campo, donde los microporos
están repletos de agua. Porosidad total se determina con la fórmula 4.
Donde:
Los poros pueden clasificarse en función de su tamaño medio en: macroporos (más de 0,2
mm); poros medios (de 0,2 a 0,02 mm); poros finos (de 0,02 a 0,002 mm) y muy finos
(menores de 0,002 mm). Para que el suelo esté bien aireado el tamaño de los poros es muy
importante, ya que el agua drena por gravedad a través de los de tamaño superior a 0,05 mm.
Es decir, para el crecimiento de las plantas el tamaño de los poros resulta de mayor
importancia que la porosidad total. En conjunto, ambas características están directamente
relacionadas con las propiedades de aireabilidad del suelo. Para la agricultura son deseables
porosidades con tamaños de poros que supongan un equilibrio entre las necesidades de
aireación del suelo y de capacidad de retención de agua.
En general, los suelos de estructuras granular y migajosa y de texturas francas son los que
presentan porosidades más equilibradas. En cambio, los suelos sin estructura o con estructura
poco definida y los de texturas extremas suelen tener porosidades inadecuadas; las texturas
arenosas suponen buena aireación pero poca capacidad de retención de agua, al contrario que
las texturas arcillosas.
Ejemplo:
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En una muestra de suelo tomada con cilindro metálico se conocen los datos siguientes:
De acuerdo con el diagrama esquemático del suelo como un sistema de tres fases, figura 4 la
porosidad es igual a f= (Vf / Vt) x 100, donde Vf es igual al volumen de los poros , (Vf =
Va + Vw) y Vt es igual al volumen total.
Por ejemplo un suelo mineral con densidad aparente de 1.45 g/cm3 tiene una porosidad de
45.3%.
1.7 Permeabilidad.
Se evalúa por la velocidad de infiltración que representa el caudal de agua que puede pasar
por unidad de tiempo. Valores de dm/hora corresponden a suelos muy permeables, cm/hora
dan suelos permeables y mm/hora para suelos poco permeables.
La velocidad de infiltración no es siempre la misma para un mismo suelo, pues depende de las
condiciones de humedad que presente. Cuando el suelo se encuentra seco la infiltración tiene
sus máximos valores y luego conforme cada vez está más húmedo su capacidad de admitir
más agua es cada vez menor hasta que en condiciones de saturación total alcanza un valor
constante.
La temperatura del suelo en sus capas superficiales está ligada a la temperatura del aire;
depende, pues, del régimen térmico del clima de la zona. Hay suelos que están
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permanentemente congelados, como ocurre en muchas zonas de Alaska, mientras que, en el
extremo opuesto, existen otros en zonas cálidas que superan los 40°C. La temperatura del
suelo influye en muchos aspectos agrícolas, como la germinación de las semillas o el
desarrollo radical de las plantas.
Otra área de gran interés es la de la influencia de la temperatura del suelo sobre la actividad
de su flora microbiana. La actividad microbiana se detiene cuando las temperaturas
descienden por debajo de 0°C o superan los 40°C. En esas temperaturas extremas el suelo no
evoluciona.
1.9 Color.
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El color es una propiedad física que se encuentra relacionada con la capacidad de absorción
de la radiación solar. Obviando el efecto del contenido en humedad del suelo, puede decirse
que los suelos oscuros absorben más radiación solar que los claros, dado que éstos tienen
mayor reflactancia (reflejan más y absorben menos la radiación); en definitiva, los suelos
oscuros suelen ser más calientes. Sin embargo, el contenido en humedad modifica este efecto.
A menudo los suelos oscuros tienen contenidos más elevados en materia orgánica que los
claros y, por consiguiente, retienen más agua. Como quiera que el agua precise
proporcionalmente más cantidad de calor que el suelo para elevar su temperatura, puede
ocurrir que un suelo oscuro no sea más caliente que uno claro.
El color del suelo se utiliza en la práctica como referencia acerca de su composición, como
indicativo de muchos procesos edafológicos y como parámetro para su clasificación
sistemática. Por ejemplo, en relación con la composición, los colores claros suelen estar
asociados con abundante presencia de caliza y se interpreta que los colores oscuros señalan un
mayor contenido en materia orgánica. En lo que se refiere a los procesos edafológicos, un
horizonte de color azulado, grisáceo o verdoso indica gran falta de aireación y permite
deducir que el suelo está inundado durante largos períodos del año; otro fenómeno que induce
a pensar que a veces hay falta de aireación es la presencia de vetas de color óxido en un
determinado horizonte. Para la clasificación sistemática del suelo, su color se determina
siguiendo el sistema estandarizado de las tablas de color Munsell, que identifica cada color
con una determinada clave.
Los agentes cromógenos son diversos, los colores más comunes son:
- Color oscuro o negro. Normalmente debido a la materia orgánica (cuanto más oscuro es el
horizonte superficial más contenido en materia orgánica se le supone). Cuando esta localizado
en nódulos y películas se le atribuye a los compuestos de hierro y, sobre todo, de manganeso.
- Color blancuzco. Debido a los carbonatos o al yeso o sales más solubles. En los horizontes
aluviales es consecuencia del lavado de las arenas (constituidas por cuarzo y en menor
proporción, por feldespatos).
- Colores rojos. Óxidos férricos tipo hematites. Medios cálidos con estaciones de intensa y
larga sequía.
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- Colores abigarrados grises y rojos/pardos. Compuestos ferrosos y férricos. Característicos de
los suelos pseudogley con condiciones alternantes de reducción y oxidación.
- Colores grises verdosos/azulados. Compuestos ferrosos, arcillas saturadas con Fe++. Indican
intensa hidromorfía, suelos gley.
Existen diferentes maneras de expresar el contenido de humedad del suelo, que se halla dentro
de los espacios porosos, en condiciones normales. Para trabajos prácticos, se considera agua
del suelo, la que puede ser liberada por desecación en una estufa a 105 - 110ºC hasta su peso
constante. Aplicando este procedimiento se consiguen valores reproducibles, aunque todavía
queda cierta cantidad de agua ligada a las partículas coloidales, y algunos compuestos, como
por ejemplo la materia orgánica, puede sufrir pérdidas por oxidación.
Humedad gravimétrica.
Es el porcentaje de agua que contiene el suelo con relación al peso del suelo seco. Se expresa
en la fórmula 6.
Donde:
Ejemplo:
En un suelo mineral que se halla saturado, la Hg puede oscilar entre 25 y 60%, dependiendo
de la densidad aparente. El contenido de agua a saturación generalmente es más alto en los
suelos arcillosos que en los arenosos. En el caso de los suelos orgánicos o en suelos de origen
volcánico el contenido de agua a saturación en base a la masa puede exceder el 100%.
Humedad volumétrica.
La relación entre el volumen de agua y el volumen total del suelo se le conoce como
contenido volumétrico de agua o fracción volumétrica de agua en el suelo. En suelos arenosos
el valor a saturación es del orden de 40 a 50% y en suelos arcillosos de 60%, en este último
caso, el volumen relativo de agua a saturación puede exceder la porosidad del suelo seco,
debido a que los suelos arcillosos se hinchan, sobrehumedeciendose, en la fórmula 9 se
expresa la humedad volumétrica para porcentaje:
Ejemplo:
Calcular la humedad volumétrica de una muestra de suelo que tiene un volumen total de 840
cm3 y un peso 1092 g. el peso de suelo seco es de 1013 g.
El uso de la Hv para expresar el contenido de agua es más conveniente que la Hg, debido a
que se puede usar directamente en el cálculo de flujos y cantidades de agua agregadas al suelo
por el riego o por la lluvia, y en el cálculo de cantidades extraídas del suelo por
evapotranspiración o drenaje. También la Hv representa la profundidad de agua por unidad de
profundidad del suelo (cm/cm).
Hv = Hg (da/dw) ……..(10)
19
Donde:
De igual modo como se expresa el agua precipitada en una lluvia, la cantidad de agua del
suelo se puede expresar en longitud de altura de agua (Lámina). La relación de longitudes es
la misma que la de volúmenes, ya que en ambos casos la superficie de la base es la misma. La
expresión de la humedad en longitud se expresa en fracción, así en el ejemplo, anterior, la
humedad volumétrica es de 9. 4 %, lo que significa que el volumen del suelo con base la
unidad y altura de un metro, el agua ocuparía una altura de 0.094 m. Por lo tanto, la humedad
expresada en longitud sería: 0.094 m de agua por metro de suelo.
Ejemplo:
Hv = Hg x da / d w
Donde:
20
Dw = densidad del agua = 1
Hv = Hg x da
En los 25 cm más superficiales:
Hv = 35.94 x 1.3 = 46.72 %
Existen 0.47 cm de agua en 1 cm de profundidad
0.47 x 25 = 11.75 cm de agua
En los restantes 75 cm:
Hv = 40 x 1.35 = 54%
Existen 0.54 cm de agua en 1 cm de profundidad
0.54 x 75 = 40.5 cm de agua.
Lámina de agua total:
11.75 + 40.50 = 52.25 cm.
1.10.1 Estado energético del agua en el suelo.
Desde el punto de vista de la agricultura, junto con el conocimiento del agua en el suelo, es
imprescindible conocer la energía con que el agua está retenida, ya que los movimientos de la
misma hacia la planta, la atmósfera y hacia otras zonas del suelo son procesos regulados por
diferencias de estados energéticos
La disponibilidad del agua del suelo para las plantas depende, no tanto en la cantidad de agua
presente, sino de su estado de energía, lo que determina la mayor o menor dificultad que
tienen las plantas para absorber el agua.
De las dos principales formas de la energía del agua, (Cinética y Potencial), la cinética puede
despreciarse, ya que depende de la velocidad del agua en el suelo, y ésta es extremadamente
baja. Por consiguiente, en la relación suelo – agua- planta el estado energético en cada punto
viene determinado únicamente por la energía potencial, expresada por la diferencia de
potencial con respecto a un estado de referencia. Por comodidad se emplea el término
potencial en lugar de energía potencial.
El potencial del agua en el suelo se lo puede expresar como energía libre, que es la energía
que puede transformarse en trabajo. Se puede medir en unidades de presión: pascal (Pa),
kilopascal (kPa), atmósfera (atm), kg/cm2 o metros de columna de agua (mca).
Equivalencias:
Cada una de estas fuerzas dan lugar a un potencial parcial que actúan con independencia unas
de otras siendo una magnitud escalar, se pueden descomponer en suma algebraica de tantos
componentes como fuerzas distintas contribuyen al potencial total, y así isotérmico las
constituyen los siguientes componentes.
T = p + s + m + o
Donde:
Es la parte potencial del agua que se debe a la fuerza de la gravedad, mediante el cual al
añadir agua a un suelo seco, ésta se mueve hacia abajo debido a la acción de la gravedad.
Este potencial desempeña un papel importante en la eliminación de los excesos de agua del
suelo. Es positivo para los puntos situados encima del sistema de regencia, y negativo para los
puntos situados debajo del sistema de referencia.
La sociedad Internacional de la Ciencia del Suelo lo define como “La cantidad de trabajo que
debe realizarse por unidad de cantidad de agua para transportar de manera reversible e
isotérmica, una cantidad infinitesimal de agua desde un depósito que contiene una solución de
idéntica composición del suelo, situado a una altura especificada, hasta el agua del suelo en el
punto considerado”.
22
Según elegimos la altura a que se sitúa el depósito de referencia, los potenciales
gravitacionales serán positivos o negativos. Para alturas de referencia inferiores a la del punto
en estudio, los potenciales gravitatorios serán negativos y seran positivos en caso contrario.
Debido a la interacción del agua con las partículas sólidas del suelo (matriz del suelo). Como
consecuencia de estas interacciones se reduce la movilidad de las moléculas de agua cercanas
a la superficie sólida y, por lo tanto se reduce también su energía libre. Tiene valor nulo
cuando no hay interacciones (en suelo saturado) y valor negativo cuando las hay (suelo no
saturado).
Se considera como la parte potencial del agua que se debe a las fuerzas de atracción del agua
por las superficies sólidas del suelo (matriz del suelo) y a las fuerzas de atracción molecular
entre las propias moléculas del agua. El conjunto de estos dos tipos de fuerzas hace que el
agua sea retenida por adsorción, por capilaridad en los suelos por debajo del nivel de
saturación.
La sociedad Internacional de la Ciencia del Suelo lo define como “El trabajo que debe
realizarse por unidad de cantidad de agua pura, para transportar de manera isotérmica y
reversible, una cantidad infinitesimal de agua desde un depósito que contiene una solución de
idéntica composición a la del suelo, situado a una altura y con presión gaseosa externa similar
al punto considerado, hasta el agua del suelo”.
Hay ocasiones que se emplea la expresión “tensión” o “succión matricial”, indicando con ello
la succión necesaria para liberar el agua retenida en el suelo. Su valor es el mismo que el
potencial matricial pero de signo opuesto.
Se debe sobre todo, a la presión hidrostática en los suelos saturados. Expresa la presión de la
columna de agua por encima del sistema de referencia.
La sociedad Internacional de la Ciencia del Suelo lo define como “La cantidad de trabajo que
debe realizarse por unidad de cantidad de agua pura, para transportar de manera isotérmica y
reversible, una cantidad infinitesimal de agua desde un depósito que contiene una solución de
idéntica composición a la del suelo, sometida a la presión atmosférica, hasta el agua del suelo
en el punto considerado”.
23
De acuerdo con el convenio de signo antes expuesto, si el punto en cuestión está por debajo
del nivel freático, es positivo, mientras que en suelos subsaturados se hace nulo.
Es la parte del potencial del agua que resulta de la existencia de presiones distintas a las del
punto de referencia, como por ejemplo ocurre en suelos saturados, por la presión hidráulica
existente por debajo del nivel freático.
Se debe a la interacción del agua con los iones en disolución. Como consecuencia de estas
interacciones se reduce la movilidad de las moléculas de agua que rodean al soluto. Cuanto
mayor sea la concentración del soluto tanto menor será la movilidad de las moléculas de agua
y su energía libre. Tiene valor nulo para el agua pura y valor negativo cuando hay sustancias
disueltas y que exista una membrana semipermeable. En la práctica, en vez de medir la
presión osmótica se mide conductividad eléctrica, ya que ambas están relacionadas.
La sociedad Internacional de la Ciencia del Suelo lo define como “La cantidad de trabajo que
debe realizarse por unidad de cantidad de agua pura, para transportar de manera reversible e
isotérmica, una cantidad infinitesimal de agua desde un depósito de agua pura situado a una
altura determina y a presión atmosférica, hasta otro depósito que contiene una solución
idéntica a la del suelo, en el ponto que se considera y que está situado a la misma altura y a la
misma presión que el depósito de referencia”.
De acuerdo a este concepto siempre el valor será negativo, ya que el agua fluiría
espontáneamente desde un depósito de agua pura hasta otro con solución similar a la del
suelo. Al igual que en el caso del potencial matricial, se designa como tensión o succión
osmótica, al valor del potencial osmótico cambiando de signo.
Comúnmente se elije como estado de referencia (e. d. r.) un depósito de agua pura (sin
solutos) y libre (con interfase agua-aire-planta), a la misma temperatura y altura que el punto
considerado del suelo y a la presión atmosférica existente en un citado punto, con lo cual y de
acuerdo con las definiciones expuestas, el potencial total del agua en un punto del suelo es
“La cantidad de trabajo que debe realizarse por unidad de cantidad de agua pura, para
transportar de manera isotérmica y reversible, una cantidad infinitesimal de agua desde un
recipiente situado a una altura elegida arbitrariamente, que contiene agua libre y pura y a la
presión atmosférica, hasta el punto considerado.
24
En el estudio de las relaciones suelo-agua-planta, el efecto de los potenciales de presión y
gravitacional es de poca importancia para la absorción del suelo por parte de las plantas, por
lo cual muchas veces es considerado solamente la suma algebraica de los potenciales
matriciales y osmótico. Al valor obtenido de esta manera de denomina potencial de esfuerzo.
s.
s = m + o
Al opuesto del potencial de esfuerzo de denomina “succión de agua del suelo” que vendrá por
lo tanto expresada como la suma de las tensiones matricial y osmótica. En materiales
vegetales, se hace uso del llamado “potencial biológico” que expresa la suma del potencial
matricial, osmótico y el de turgencia (es un potencial de presión producido por presiones
físicas presentes en la células turgentes).
b= m + p + t
Trabajo / Volumen = M L2 T -2 / L3 = M L -1 T -2
-1 -2
La expresión dimensional M L T corresponde a una presión, por lo que el potencial
volumétrico se expresa en unidades de presión, generalmente en bares o atmósferas.
En este caso, el potencial se expresa en unidades de longitud, es decir en altura del líquido
equivalente.
25
Las tres maneras de expresión del potencial están relacionadas para su interconversión, por las
siguientes expresiones:
A una misma tensión el suelo retiene más agua cuando la textura es más fina.
A medida que disminuye la tensión, los suelos arcillosos muestran un descenso más atenuado
del contenido de humedad que los suelos arenosos, debido a que aquellos presentan una
distribución más regular del tamaño de los poros.
A tensiones bajas (suelo próximo a la saturación), los suelos con buena estructura contienen
más agua que los suelos compactos debido a la mayor porosidad de aquellos.
26
A valores más altos de la tensión, los suelos compactados pueden almacenar más agua que los
suelos bien estructurados, debido a que con la compactación se reduce el tamaño de los poros
grandes.
Una para el humedecimiento y otra para el secado. Debido a este fenómeno, llamado
histéresis, para una determinada tensión, el contenido de agua de un suelo es mayor cuando se
está secando que cuando se está humedeciendo.
El tratamiento del agua del suelo en la bibliografía de física de los suelos ha evolucionado
considerablemente a lo largo de los últimos años hasta llegar al estudio de potenciales
considerados en el tema anterior.
Las partícula que forman la matriz sólida del suelo, son de forma muy irregular y variada y
dejan entre si los poros, donde espacios relativamente amplios se comunican entre sí a través
de otros espacios mucho más estrechos con efecto capilar.
El agua del suelo se presenta principalmente en películas delgadas, bien limitadas por
partículas sólidas o por fases gaseosas (meniscos de aire).
Es el agua adsorbida de una atmósfera de vapor de agua, como resultado de las fuerzas de
atracción sobre las moléculas de agua, de la superficie sólida de las partículas del suelo.
Es el agua retenida en los poros pequeños del suelo que poseen efecto capilar y que está
retenida por tanto, fuerzas debidas a la tensión superficial.
Es aquella que ocupa temporalmente el volumen de aireación, que fluye bajo la acción de la
gravedad, al no poderla sostener el suelo.
En realidad y pese a la gran difusión de los dos conceptos, es prácticamente imposible dividir
el agua que un suelo retiene, entre agua capilar y agua adsorbida, ya que el agua, debido al
carácter polar de su molécula, no forma nunca capas monomoléculares sobre las partículas
sólidas y por otro lado existen capilares de diámetro suficiente para unas pocas moléculas de
agua solamente.
Desde el punto de vista de su utilización por las plantas cabe diferenciar los siguientes estados
del agua del suelo.
Saturación.
Un suelo está saturado cuando todos sus poros estan ocupados por agua. Esta situación se
presenta después de una lluvia copiosa o de un riego abundante, o cuando existe un estrato
impermeable a poca profundidad.
Cuando a un suelo saturado se le deja drenar el agua sobrante pasa al subsuelo por la acción
de la gravedad. El agua eliminada de esta forma, que no ha sido retenida por el suelo se llama
agua libre o gravitacional.
Cuando el estado del suelo saturado se prolonga, el sistema radical de las plantas no acuáticas
se muere por falta de respiración.
Capacidad de Campo.
28
Partiendo del estado anterior, cuando el suelo ya no retiene más agua por gravedad se dice
que se encuentra a capacidad de campo (CC). En este estado, el agua ocupa los poros
pequeños y el aire ocupa una gran parte del espacio de los poros grandes.
A capacidad de campo, el agua queda retenida en los espacios capilares o espacios que existen
entre las partículas del suelo y en esas condiciones es absorbida por las plantas con mayor
facilidad. Dicha capacidad de campo es mayor en los suelos arcillosos que en los arenosos.
A medida que el contenido de humedad en el suelo disminuye, para las plantas es cada vez
más difícil absorberla, llegando a un nivel en que, si no reciben agua adicional, se ponen
mustias y ya no pueden recuperarse. Dicho nivel se denomina punto de marchitez
permanente, el cual no debe esperarse para dar un nuevo riego.
29
Cuando un suelo está en el Punto de Marchitez Permanente (o límite inferior de
almacenamiento de agua útil en el suelo), el agua está retenida a una tensión equivalente a 15
atmósferas o bares, aunque puede variar de 10 a 20 atmósferas, cifra más baja para suelos
muy arenosos y la más alta para suelos muy arcillosos, estado en el cual, a la planta le cuesta
mucho absorberla y se marchita, y muere si no se les provee de agua oportunamente. Un suelo
arenoso en el punto de marchitamiento permanente puede contener menos de un 5% de
humedad volumétrica, en cambio, uno arcilloso un 30% o más. El agua retenida corresponde
al agua higroscópica más el agua capilar no absorbible.
En la práctica, es oportuno regar cuando las plantas han extraído el 50 por ciento de esta
humedad volumétrica. Corresponde al agua retenida entre los dos límites de potencial, y es el
agua que las plantas pueden absorber sin dificultad. Por ejemplo si la Capacidad de Campo de
un suelo es de un 50% y el Punto de Marchitez Permanente de un 30%, la Humedad
Aprovechable es de un 20% (50 - 30). Cuando se ha agotado el 50% de esta agua (10%) se
debe regar, a este concepto se denomina Umbral de Riego o factor de agotamiento (f).
Con vistas a las aportaciones de agua de riego interesa conocer el contenido de humedad,
mientras que con vistas a la disponibilidad de esa agua por las plantas interesa también
conocer su estado de energía. Ambos parámetros se relacionan dentro de un mismo suelo,
pero dada la gran variabilidad de los mismos (junto con otros factores que también influyen)
se hace necesaria la determinación de ambos en cada caso particular.
30
A. Medición directa de humedad a CC y PMP.
La obtención del valor de humedad del suelo resulta de primordial interés para el diseño,
planificación y manejo de sistemas de riego. Si no se dispone de los servicios de un
laboratorio de suelos para la determinación de los contenidos de retención de humedad de
suelo a Capacidad de Campo y Punto de Marchitez Permanente, una buena aproximación a
estos valores puede obtenerse de la siguiente manera en forma gravimétrica:
1. Inmediatamente después de un riego o lluvia intensa que haya saturado el suelo, seleccione
un sector representativo del potrero y cúbralo con una lona o plástico impermeable, que evite
la evaporación desde el suelo.
2. A las 24 a 48 horas después del evento, extraiga muestras de suelo de entre 100 a 200 gr en
cada capa. Deposítelos en una cápsula hermética o en una bolsa plástica y séllala.
3. Pese las muestras en una balanza de lectura de décimas de gramo, sin abrir o destapar la
muestra. Registre la lectura como PSH + PE (Peso del suelo húmedo más Peso de envase).
4. Una vez pesada la muestra, déjela en un horno o estufa a 105°C por 24 horas y pese la
muestra seca. Si utilizó bolsas plásticas previamente, asegúrese de extraer la totalidad de la
muestra de suelo de la bolsa antes de ponerla en el horno, pesando el envase plástico (PE) y el
envase nuevo utilizado en el horno de secado.
En cualquier caso, debe existir absoluta certeza del peso del envase, debido a que este valor se
debe restar al peso de suelo.
De este modo, la fórmula anterior nos indica la relación porcentual en el contenido de agua en
una muestra de suelo, quedando expresada como:
HgPMP = 0.55 x Hg CC
Otro método para la medición directa del potencial hídrico Mediante diversos instrumentos se
mide algún componente del potencial o la suma de varios de ellos. El instrumento más
utilizado es el tensiómetro, que mide el potencial matricial del suelo. Consta de un tubo
cerrado lleno de agua; un extremo termina en una cápsula de cerámica porosa y en el otro
extremo lleva un manómetro o medidor de vacío.
Cuando el suelo se seca succiona agua del tubo a través de la cápsula de cerámica, creando en
éste un vacío parcial que es detectado por el manómetro. Cuanto más seco esté el suelo,
mayor cantidad de agua succiona del tubo, creándose un vacío mayor, lo que significa que
aumenta la lectura del manómetro. Por tanto, la lectura del manómetro será tanto más elevada
cuanto más seco esté el suelo. Si en estas condiciones de sequedad el suelo recibe agua, se
verifica el proceso contrario, es decir, que el tubo succiona agua del suelo y el manómetro
indica una lectura más baja.
Los Tensiómetros tienen longitudes de 30, 60 y 90 cm; se gradúan en centibares, con escala
de 0 a 100. El rango de utilización es de 0 a 80 centibares, pues para valores más altos entra
aire en la cápsula y la lectura deja de ser significativa. Estas lecturas son indirectamente
proporcionales al contenido de humedad: las lecturas bajas indican un suelo con mucha
humedad, mientras que las lecturas altas indican poca humedad.
32
La lectura del tensiómetro es una indicación del esfuerzo de succión que realizan las plantas
para absorber el agua del suelo sin tener en cuenta la salinidad, por cuyo motivo hay que
calibrarlo para cada tipo de suelo.
El tensiómetro se instala en el suelo de tal forma que la cápsula de porcelana porosa esté en
contacto íntimo con la tierra explorada por el sistema radical. Para ello se abre un agujero con
ayuda de una barrena del mismo grosor que el tubo; a continuación se introduce el tubo y se
aprieta y se humedece la tierra de alrededor.
La profundidad del agujero será igual a la que deba ir la cápsula, pues de otra forma quedan
huecos que se llenan de aire o de agua y dan lugar a lecturas falsas. Igual ocurre cuando el
agujero es excesivamente ancho y no hay contacto íntimo entre la cápsula y el suelo.
En cultivos cuya zona activa de raíces es inferior a 40 cm se instala un solo tensiómetro por
estación. En cultivos con raíces activas a mayor profundidad conviene instalar dos
tensiómetros de distinta longitud, con el fin de conocer la evolución de la humedad a distintas
profundidades.
Los Tensiómetros deben colocarse en la zona soleada del suelo, que es la sometida a mayor
evaporación. Para que funcione correctamente hay que ponerlo a punto antes de su
utilización, para lo cual se siguen las instrucciones del fabricante. Estas incluyen llenar de
agua y sacar el aire mediante una bomba manual de vacío.
La interpretación de las lecturas varía con el tipo de suelo y de cultivo. De un modo general se
pueden dar las normas siguientes:
Lecturas de 0 a 10 centibares. Indican suelo saturado. Estas lecturas se dan en los días
siguientes al riego o a una lluvia copiosa.
Lecturas de 10 a 20 centibares. El suelo está a la capacidad de campo. En este intervalo se
interrumpe el riego que no sea por goteo, para evitar el desperdicio de agua y la pérdida de
elementos nutritivos. Este intervalo es el que debe mantenerse en riego por goteo.
Lectura de 30 a 60 centibares. Intervalo para iniciar el riego. La mayoría de las plantas cuyo
sistema radical está contenido en los primeros 50 cm. de suelo no sufren hasta que las lecturas
llegan al intervalo de 40 a 50. En riego por goteo esta humedad es escasa.
Lecturas superiores a 70 centibares. En la mayoría de los suelos y cultivos la lectura de 70
centibares indica que las plantas no disponen de toda el agua necesaria para un crecimiento
máximo.
33
Las tensiones del agua disponible son más bajas en los suelos arenosos que en los arcillosos.
Los Tensiómetros no sirven para lecturas de valores altos, de ahí que estos aparatos sean más
útiles en suelos arenosos que en los arcillosos.
Medición indirecta del potencial hídrico.-Otros instrumentos utilizados son los bloques de
resistencia eléctrica y los sensores de salinidad.
Los bloques de resistencia eléctrica miden el potencial matricial del suelo, pero no
directamente, sino mediante un parámetro relacionado con él, como es la resistencia al paso
34
de la corriente eléctrica. Cuando el suelo pierde humedad, el agua pasa del bloque al suelo,
disminuyendo la resistencia eléctrica de aquél.
La resistencia eléctrica del bloque depende de su contenido en agua, pero depende también de
otros factores, tales como: salinidad, temperatura y dimensionado del bloque. El efecto de la
salinidad se amortigua construyendo los bloques de yeso, con lo cual, al estar la solución del
bloque saturada de sulfato calcio, las variaciones de salinidad en la solución del suelo no
provocan variaciones apreciables en la solución interior del bloque, salvo que el suelo
contenga una cantidad considerable de sales.
Los bloques, que llevan en su interior unos electrodos, se instalan en el suelo a la profundidad
deseada. A efectos de regadío conviene instalarlos poco después de la siembra del cultivo,
para que las raíces crezcan alrededor de ellos y se asegure el contacto entre los bloques y el
suelo. En cada punto donde se quiere medir la humedad se colocan dos bloques: uno
superficial (de 20 a 30 cm) y otro a mayor profundidad (de 30 a 60 cm).
Los distintos modelos de bloques responden de diferente forma a los cambios de humedad del
suelo, por cuyo motivo cada fabricante debe suministrar los datos necesarios para la
calibración del aparato.
Sensores de salinidad. Estos aparatos miden el potencial osmótico del agua del suelo. Este
potencial, como la conductividad eléctrica de la solución del suelo, depende del contenido de
sales. Dado que ambos parámetros potencial osmótico y conductividad eléctrica están
relacionados, se puede medir indirectamente el primero a partir del segundo.
Los sensores de salinidad constan de unos bloques de cerámica porosa, que se colocan en el
terreno para que la solución del suelo pase a través de los poros de la cerámica. En su interior
hay unos electrodos que miden la resistencia eléctrica y, a través de ella, la conductividad
eléctrica. Para la calibración se emplean soluciones de conductividad eléctrica y temperatura
conocidas.
A falta de datos de análisis que den la humedad del suelo en estas fases, se puede calcular
estos valores, de un modo aproximado, a partir de datos analíticos más fáciles de obtener,
tales como la composición de la textura, entre las fórmulas más utilizadas están las siguientes.
Fórmula de Peele:
35
Donde:
Fórmula de Briggs:
Donde:
Pm = Humedad en el punto de marchitamiento, expresada como humedad gravimétrica, en
%.
Ac, L y Ar tienen el mismo significado que en la fórmula del cálculo de la humedad en la
capacidad de campo.
Fórmula de Gardner:
Donde:
En la literatura científica, varios autores incluyen en sus obras series de tablas en función de
las clases texturales, donde se asignan valores para capacidad de campo, punto de
marchitamiento permanente en porcentaje de peso.
36
Según Alfani.
Textura CC % PMP %
Arenosa 5–7 1–3
Franco – arenosa 8 – 13 4–6
Franca 12 – 18 4 – 11
Franca – arcillosa 18 – 23 9 – 10
Arcillosa 23 – 46 13 – 29
Textura CC % PMP %
Arena media 6.8 1.7
Arena fina 8.5 2.3
Franco – arenoso 11.3 3.4
Franco – Arenoso fino 14.7 4.5
Franco 18.1 6.8
Franco – limoso 19.8 7.9
Franco – arcilloso 21.5 10.2
Arcilloso 22.6 14.7
El agua se mueve a través de los poros del suelo que están interconectados. Los procesos
implicados en este movimiento son:
Entrada del agua en el suelo (infiltración y ascenso capilar desde la capa freática).
Redistribución del agua entre los diferentes puntos del suelo.
Salida del agua del suelo (evaporación, percolación y absorción por las plantas).
Flujo saturado, cuando todos los poros están llenos de agua. Este movimiento ocurre en los
suelos con capa freática circulante, lo que permite a las raíces de las plantas respirar el aire
disuelto en el agua. El potencial matricial es nulo, por lo que el flujo de agua viene
determinado por los potenciales gravitacional y de presión hidrostática.
37
Flujo no saturado, cuando los poros están parcialmente ocupados por agua. Este flujo viene
condicionado por los potenciales matricial y gravitacional.
Este método no sirve cuando el nivel de la capa freática está muy profundo. En este caso hay
que crear unas condiciones de saturación aportando agua a un agujero abierto en el suelo con
una barrena cuya profundidad alcance al suelo objeto de estudio. Se miden los sucesivos
descensos de nivel en función del tiempo.
38
Conductividad hidráulica (m/día) Evaluación (FAO)
<0,2 Muy lenta
0,2-0,5 Lenta
0,5-1,4 Moderada
1,4-1,9 Moderadamente rápida
1,9-3 Rápida
>3 Muy rápida
La conductividad hidráulica en suelos con buena estructura varía desde 0,01 a 1 metro/día,
correspondiendo las cifras más bajas a los suelos de textura fina, y las más altas, a los de
textura gruesa.
En general, el movimiento del agua en el suelo se debe a diferencias de potencial entre los
puntos en que se produce ese movimiento de tal manera que siempre fluye de menor a mayor
a menor potencial.
1.13.2 Infiltración.
La infiltración es el proceso de entrada del agua en el suelo desde la superficie del mismo.
Cuando se aplica el agua en toda la superficie del suelo, el flujo se produce en sentido
vertical, pero cuando se aplica sólo a una parte de la superficie, el flujo se produce en sentidos
vertical y horizontal.
La velocidad de infiltración.
39
Cuando la cantidad de agua aportada por la precipitación o el riego sobre pasan la velocidad
de infiltración, el exceso de agua forma charcos en la superficie del suelo, y si el suelo está en
pendiente se produce escorrentía superficial.
La infiltración acumulada.
Este método se utiliza en suelos en los que se establecen sistemas de riego por fajas,
compartimentos cerrados, aspersión y goteo. El cilindro central, de acero, debe tener un
diámetro de, al menos, 30 cm y una longitud superior a los 30 cm. Es recomendable que el
acero tenga un espesor de 5 mm y vaya provisto de un borde con filo, con el fin de clavarlo
con facilidad en el terreno sin deteriorar la estructura del suelo. El cilindro periférico tendrá
una longitud de 20-25 cm y un diámetro de, al menos, 30 cm mayor que el del cilindro
interior. La lectura de la altura del agua se hace mediante una regla graduada.
Este método consiste en medir los caudales de entrada y salida del agua que discurre a lo
largo de un surco. La diferencia entre ambos es la cantidad de agua infiltrada durante un
determinado período. Se utiliza este método en suelos en donde se haya de regar por surcos.
En el terreno que se pretende regar se trazan 3 surcos de 30-40 m de largo, con la misma
separación que hayan de tener los de cultivo. Se selecciona el surco del centro para hacer la
determinación de la infiltración.
Para hacer la medición del caudal, si no se dispone de aforadores Parshall, se cavan unos
pozos en los extremos del surco central, en donde se colocan unos baldes para medir los
caudales de entrada y salida.
Se deja correr agua por los 3 surcos al mismo tiempo, con el fin de que la infiltración en el
surco central se produzca de forma análoga a como se ha de producir en el riego. Se mantiene
constante el caudal de entrada.
Se anota la hora de entrada del agua en el surco y la hora en que llega al final del surco.
Se dejan pasar unos minutos después de que el agua haya llegado al final del surco, con el fin
de que el caudal se regularice y, a continuación, se efectúa su medición a la entrada y a la
salida del surco.
Se continúan las mediciones de caudal con diversos intervalos de tiempo a lo largo de, al
menos, 2 horas, hasta que el caudal de salida se haga constante.
Con los datos obtenidos se calcula la cantidad de agua infiltrada durante un tiempo
determinado, lo que permite calcular la velocidad de infiltración a lo largo del tiempo,
mediante la fórmula:
I = (Q1 – Q2 / b x L) x 10 x 3.600
I = Velocidad de infiltración, en cm/hora.
Q1 = Caudal de entrada, en 1/seg.
Q2 = Caudal de salida, en 1/seg.
L = Longitud que separa dos medidores, en dm.
b = Separación entre surcos, en dm.
41
1.14 LA ABSORCIÓN Y TRANSPORTE DEL AGUA EN LA PLANTA.
La absorción es paso del agua desde el suelo hacia la planta, se produce como consecuencia
de la diferencia de potencial existente entre el agua del suelo y el de la planta, y tiene lugar a
través de los pelos absorbentes del sistema radical. Por medio de los estomas de las hojas
también se pueden absorber pequeñas cantidades de agua.
Una pequeña parte del agua absorbida se incorpora a los tejidos de la planta (agua de
constitución), mientras que el resto pasa a la atmósfera por transpiración.
Por lo general, el mayor esfuerzo que ha de vencer las plantas es el potencial matricial; sin
embargo, los suelos salinos crean, a veces, un potencial osmótico tan bajo que las plantas no
absorben el agua y se marchitan, aunque el suelo se encuentre a capacidad de campo.
Cuando la raíz extrae agua del suelo, el potencial del agua baja en la zona que ha perdido
agua lo cual provoca un desplazamiento del agua adyacente. Estos desplazamientos de agua
por capilaridad son muy importantes para unas distancias de unos pocos milímetros. Desde
luego que también se producen desplazamientos a mayor distancia, pero no con suficiente
rapidez como para cubrir las necesidades de absorción de las plantas en las fases de mayor
crecimiento. En este caso, el crecimiento de las raíces hacia el agua es más efectivo que el
movimiento capilar del agua hacia las raíces.
La mayor parte de los procesos fisiológicos que realizan los vegetales están directa e
indirectamente relacionados con el abastecimiento de agua; entre las funciones más
importantes del agua en la planta podemos citar:
Como constituyente esencial del protoplasma, el agua puede llegar entre el 85 y 95% del peso
total. En otros tejidos vegetales en reposo el agua representa del orden del 15 – 20% del peso
total.
Es el disolvente de muchas otras sustancias esenciales para el desarrollo de la planta.
Compuestos estructurales de transferencia y de almacenamiento de energía necesitan del agua
como medio de transporte para distribuirse por todo el vegetal.
42
Participa en importantes reacciones químicas del protoplasma. Interviene directamente como
reactivo en la fotosíntesis, respiración, hidrólisis del almidón, etc.
Del agua almacenada en las vacuolas celulares depende la turgencia de las células y la rigidez
de la planta como conjunto.
Participa en la diseminación de estructuras vegetales como esperas, frutos y semillas.
-El agua tiene un elevado calor específico, calor latente de fusión y calor de vaporización.
Todas estas propiedades unidas al elevado contenido de las plantas en agua, facilitan la
regulación térmica de los tejidos vegetales.
-La molécula de agua en conjunto es eléctricamente neutra, pero una distribución asimétrica
de los electrones permite la aparición de dos polos con carga eléctrica positiva y negativa en
los extremos de la molécula ocupados por el hidrógeno y el oxígeno respectivamente. Las
moléculas de este tipo pueden unirse entre sí (cohesión) o con otras superficies (adherencia),
propiedades estrechamente relacionadas con los procesos de ascensión de agua en la planta.
La acción disolvente del agua se debe también a la existencia de los puentes de hidrógeno y a
la distribución asimétrica de cargas en la molécula de agua.
Capacidad de disolución e hidratación. El agua también es atraída por otras moléculas polares
alrededor de las cuales, gracias a la cohesión del agua, se generan capas de hidratación, que
disuelven a iones y moléculas o macromoléculas polares o mojan superficies sólidas.
Los fenómenos de difusión son los más importantes en las relaciones entre el agua y la planta.
La difusión permite a las moléculas de un cuerpo repartirse uniformemente entre las de otro
debido a la energía cinética de dichas moléculas.
En las plantas, las paredes y membranas celulares son permeables al agua líquida, a través de
la cual se producen desplazamientos de solutos. Los puentes de hidrógenos son los
responsables del transporte del agua en la planta, mientras que los fenómenos de difusión
están relacionados con la toma de agua por el sistema radical y con el paso del agua de la
planta hacia la atmósfera.
43
En la entrada de agua por el sistema radical de las plantas hay que considerar dos tipos
especiales de difusión: ósmosis e imbibición.
Fenómeno osmótico.
El término “presión osmótica” se lo puede definir como la presión necesaria para contrarrestar
el paso del agua pura hacia el interior de una solución acuosa a través de una membrana
semipermeable siendo directamente proporcional al número de moléculas de soluto disueltas
en una cantidad de disolvente.
El valor del potencial osmótico expresa la potencialidad que tiene una solución concentrada
de tomar agua debido a la presencia de solutos (presión osmótica). Cuanto más negativo sea
el potencial osmótico, mayor será esta potencialidad.
En una célula flácida, la turgencia es nula y el potencial hídrico es igual al potencial osmótico
(en valor absoluto igual a la presión osmótica). Al entrar agua en la célula el potencial
osmótico disminuye en valor absoluto y la presión de turgencia aumenta.
Célula flácida: t = 0 w = s
Célula en plena turgencia: t = s w = 0
Fenómeno de imbibición o hinchamiento.
En las células y tejidos vegetales muy desecados, los mecanismos de absorción de agua
inicialmente no están regulados por el fenómeno osmótico (potencial osmótico) sino por la
existencia en el citoplasma de determinados componentes orgánicos (sustancias coloidales)
con una gran capacidad para formar puentes de hidrógeno.
w = s + t + m
El agua en la Célula.
Los fenómenos hídricos de las plantas están determinados por los que ocurren en la las células
que las integran, ya que es en ellas donde fundamentalmente se encuentra el agua del vegetal.
La pared celular o membrana de secreción es una estructura relativamente rígida que rodea la
célula vegetal. En células jóvenes sólo existe la pared primaria compuesta fundamentalmente
por hemicelulosa y sustancias pécticas. Cuando la célula va madurando sobre esta pared
primaria se van depositando capas de celulosa en su cara interna y debido a su actividad del
citoplasma, constituye la llamada pared secundaria. La celulosa de la pared celular es
altamente permeable al agua y a las sustancias disueltas. Algunas células especializadas
sufren modificaciones en su pared por depósito de determinadas sustancias como lignina,
suberina, citita, sales minerales, compuestos tánicos, colorantes, citina y gomas; que alteran
la permeabilidad de estas paredes al agua.
En células vivas más del 50% del volumen de la pared primaria está ocupado por agua. El
agua está retenida mediante fuerzas mátricas que fijan sus moléculas a las fibrillas de la pared
por medio de puentes de hidrógeno y por fuerzas de capilaridad en los espacios entre fibrillas.
Las mencionadas modificaciones de la pared por depósitos de lignina, suberina, etc. ;
producen una reducción del espacio disponible en la pared para el almacenamiento y
movimiento del agua.
El núcleo es el orgánulo celular de mayor tamaño; todas las células vivas poseen núcleo. En
los vegetales, solo las células vivas del floema carecen de núcleo, estando su metabolismo
regulado por las llamadas células enejas. El núcleo desempeña un papel esencial como
depositario de la información genética de la célula y es responsable de las funciones vitales de
45
la misma. Rodeando al núcleo se encuentra una membrana lipoproteíca de naturaleza y
estructura semejante al plasmalema.
Permeabilidad celular.
La pared celular que rodea la célula es permeable al agua y los iones, pero la membrana
plasmática con su permeabilidad selectiva se opone a una entrada indiscriminada de
sustancias con lo que la célula queda protegida de cualquier fluctuación o cambio en la
composición del medio que la rodea.
El plasmalema es más permeable al agua que a los solutos. La entrada o salida de agua de la
célula viene determinada principalmente por el gradiente de concentraciones existente entre el
medio que la rodea y el interior de la misma.
46
Absorción celular del agua.
El agua es absorbida por la planta fundamentalmente por los pelos radicales debido a una
diferencia de concentración en la disolución celular y la del medio que la rodea, de modo que
mientras la concentración de solutos en el interior celular sea mayor seguirá entrando agua y
cualquier aumento en dicha concentración, provocara un aumento del la absorción.
Absorción Pasiva.
La mayor parte del agua absorbida por la planta tiene lugar por mecanismos osmóticos. La
transpiración que tiene lugar en la parte aérea de la planta, crea una fuerza de succión interna
que favorece la entrada de agua en el sistema radical. De esta forma, la entrada de agua tiene
lugar de forma pasiva.
Absorción Activa.
Aunque la absorción activa de agua no es muy significativa hay que considerarla como
resultado de la actividad del sistema radical con gasto de energía metabólica y relacionada
con la acumulación de sales. En realidad, la absorción de agua no exige gasto de energía, sino
que ésta se consume en la absorción de sales, aunque indirectamente las presión osmótica
creada es la responsable de le entrada pasiva del agua.
La absorción o transporte pasivo es el mecanismo por el cual una sustancia o ión se difunde a
través de la membrana protoplasmática, a favor de un gradiente de concentración (de la zona
más concentrada ala menos concentrada) sin necesidad del aporte de energía metabólica por
parte de la célula.
47
Absorción pasiva.
Cuando una célula o tejido vegetal pasa de un medio con baja concentración salina a otra con
concentración elevada de sales, se produce una entrada inicial, de iones seguida de una lenta
absorción sometida a regulación metabólica; devolviendo el tejido al medio pobre en sales,
parte de los iones absorbidos que se difunden desde el medio interno al externo.
a.- Intercambio iónico: La superficies celulares pueden presentar iones adsorbidos que pueden
ser intercambiados con otros que haya en la solución externa que está sumergido el tejido.
Estos iones adsorbidos serán osmóticamente activos y eso permitirá una mayor absorción del
medio externo, incrementando la concentración interior a valores más altos que los esperados
por simple difusión.
b.- Equilibrio Donan: Para explicar este sistema se pueden considerar dos compartimentos
separados por una membrana selectiva a través de la cual ciertos iones no son difusibles,
mientras que otros iones de pequeño tamaño pueden circular de un lado a otro. Esto da lugar a
una diferencia de potencial de difusión permanente.
Absorción Activa.
Recibe el nombre de “espacio interno”, el espacio de una célula o de un tejido donde pueden
penetrar los iones con gasto metabólico. Los iones pueden atravesar la línea de separación
entre los espacios externo e interno combinándose de forma selectiva con trasportadores. La
existencia de estos transportadores permite explicar que este tipo de absorción sea selectiva,
es decir independiente de la concentración que tengan determinados iones en el medio en que
se encuentre la célula.
El la absorción y transporte del agua por la planta se puede distinguir tres etapas bien
diferenciadas.
49
El aumento de la concentración de solutos en la célula o la disminución de supresión de
turgencia aumentarán la diferencia de potencial hídrico con la solución exterior y favorecerá
la absorción del agua, mediante un mecanismo de transporte pasivo en su mayor parte, (sin
consumo de energía metabólica).
Los procesos de captación de agua por parte de una raíz y de pérdida de vapor de agua por la
parte aérea de la planta (transpiración) se encuentra relacionada a través de las columnas
continuas de agua que hay en el xilema. Podemos decir que hay un movimiento de agua a
través del sistema.
La zona de la raíz con mayor eficacia en la absorción del agua es la zona pilífera, ya que en
ella existe un xilema diferenciado y epidermis, prácticamente sin suberificación, provista de
abundantes pelos radicales que aumenta enormemente la superficie de contacto con el suelo.
Teóricamente el agua puede seguir dos caminos para atravesar la corteza, uno extracelular (a
través de la paredes celulares y de los espacios intercelulares muy abundantes en la corteza
radical) y otro intracelular (atravesando la membrana protoplasmática y entrando en al
citoplasma y la vacuola). En este último caso, el paso de célula a célula se realiza a través de
los plasmodesmos.
La mayor parte del agua que atraviesa la corteza radical lo hace utilizando las vía extracelular
hasta llegar a la endodermos (capa más interna de la corteza) Debido a las características de
esta capa (células unidas íntimamente entre sí y la existencia de las bandas de Caspary), para
que el agua continúe su camino hacia el xilema ha de entrar en el protoplasma de sus células
(al igual que ocurría con las sales).
Por otro lado, aún cuando el movimiento del agua a través de las paredes celulares sea un
movimiento pasivo, al encontrarse las paredes atravesadas por plasmodesmos, este transporte
50
pasivo se verá afectado por los diversos factores que influyan en el estado del protoplasma
(aireación, inhibición de la respiración, temperatura, etc.)
Las plantas terrestres tienen en forma separada en el espacio el órgano capaz de absorber
sustancias inorgánicas y las estructuras fotosintetizadotas que transforman el material
inorgánico en material orgánico en presencia de luz y CO2. Por tanto, aparece la necesidad de
un transporte de sustancias entre el sistema radical y las hojas, transporte realizado por los
tejidos vasculares, ya que el simple movimiento por difusión de célula es demasiado lento.
Los vasos conductores del tallo penetran en la hoja formando venas que tienen uno o más
haces vasculares. Cualquiera que sea la disposición de los haces vasculares que abastecen la
hoja, hay una amplia red de venas de forma que el tejido conductor está muy cerca de todas
las células foliares.
Cuando el agua sale a los conductos vasculares se mueve de célula a célula fundamentalmente
a través de las paredes celulares, se evapora a través de las superficies de las células del
mesófilo, sale a los espacios intercelulares y se difunde este vapor hacia la atmósfera,
fundamentalmente a través de los ostíolos de los estomas.
La transpiración se realiza en su mayor parte por los estomas de las hojas y consiste en la
emisión del vapor de agua por la planta hacia la atmósfera que lo rodea. En muchas especies
vegetales, las distancias que separan el lugar de absorción del agua del de transpiración son
considerables, alcanzándose incluso en algunas plantas los 130 m de altura.
51
A continuación vamos a descririr las teorías propuestas para explicar el ascenso del agua en la
planta.
Si una planta transpira con velocidad de normal a intensa, el movimiento del agua se explica
fundamentalmente mediante la teoría de la cohesión.
A producirse la evaporación del agua por las superficies de la hoja, se reducirá el potencial
hídrico de las células del mesófilo en contacto con los espacios aeríferos de la hoja. Esto a su
vez provocara una salida de agua de las células mesofílicas más internamente, disminuyendo
por tanto el potencial hídrico de las mismas, lo que inducirá la salida de agua de los conductos
xilemáticos de los nervios foliares hacia las células. A su vez se reducirá el potencial hídrico
del xilema y esta disminución se transmite a lo largo de la columna continua del agua del
xilema hasta la raíz. El xilema de la raíz disminuye su potencial hídrico y provoca la entrada
de agua desde la superficie absorbente de la raíz hacia los conjuntos xilemáticos, con lo que
la columna de agua circula hacia arriba por flujo de masa.
La continuidad de la columna de agua es posible debido a que las moléculas de agua se unen
entre si por fuerzas de cohesión y a otras moléculas por fuerzas de adhesión, de ahí el nombre
de esta teoría. Así pues debido a la transpiración, el agua contenida en los vasos del xilema
quedara sometida a una presión negativa, a estado de tensión.
En general se acepta que el potencial hídrico de las células de las hojas y el del xilema son
semejantes y por lo tanto cuando aparece la savia por el pecíolo, el manómetro nos dará el
potencial hídrico de las células de las hojas.
52
La utilización de las cámaras de presión demostró que las hojas de los árboles tienen
potenciales hídricos inferiores a las de los arbustos y hierbas, y dentro del mismo árbol las
hojas situadas en las partes más altas tienen un potencial hídrico inferior a las de las básales.
-La diferencia de potencial hídrico originada por la transpiración sea suficiente para mover el
agua a las velocidades que se observa.
Las sales del suelo se absorben con gasto de energía, de forma que en el interior de la raíz se
alcanza concentraciones de sales superior a la del suelo. Al existir esta diferencia de
concentraciones, aparece un gradiente decreciente de potencial hídrico que provoca la entrada
del agua en la raíz y se produce una presión hidrostática que es lo que se llama “presión de
raíz”.
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El agua absorbida a consecuencia del proceso de absorción y acumulación activa de sales por
el sistema radical se considera que es la causa de la absorción activa del agua, aunque el agua
en sí misma entra y se mueve de forma pasiva (sin gasto de energía), atravesando la epidermis
y la corteza de la raíz y entrando en el xilema, siempre a favor de potenciales hídricos
decrecientes (concentraciones crecientes de solutos).
Una teoría elaborada para explicar este gradiente de sales fue propuesta por Crafts y Broker (
) , según la propuesta de estos investigadores las células de la corteza tienen alta actividad
metabólica ya que se encuentran en condiciones de buena aireación y las sales pueden
acumularse en forma activa en esta zona de la raíz.
Por el contrario las células del cilindro central tienen poco oxígeno y por tanto no dispondrán
de energía suficiente para acumular y mantener concentraciones altas de sales en contra de los
gradientes de concentración.
El agua sigue el camino de las sales moviéndose desde la solución del suelo, con baja presión
osmótica, hasta la savia del xilema con mayor presión osmótica. La existencia de la presión
de la raíz se pone de manifiesto por los fenómenos de exudación de la savia del xilema, que se
producen en muchas plantas herbáceas al decapitarlas cerca del suelo, o en los tocones de
árboles recién cortados. Los valores de esta presión se puede determinar atando un
manómetro al tocón o vástago cortado de una planta, mediante un tubo de goma: la impulsión
del agua tomada por el sistema radical hace que suba el mercurio por la columna. Utilizando
este sistema se han detectado presiones de 3 a 5 atmósferas.
El volumen de agua transpirada por las plantas intactas es muy superior al volumen de
exudado de tocones de plantas similares.
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En muchas especies (coníferas), o bien no se han observado presiones de raíz, o los valores
han sido tan pequeños que no se puede explicar el ascenso del agua hasta las copas de los
árboles.
Plantas intactas son capaces de absorber agua de los suelos más desecados o de soluciones
más concentradas, que el sistema radical de plantas cortadas el tallo.
La absorción del agua por la planta depende de las propias características del vegetal y de las
del medio que la rodea.
En definitiva, se considera que la absorción del agua del suelo por el sistema radical es
función de:
Diferencia de potencial hídrico entre las vacuolas celulares de la raíz y la solución del suelo.
Hay que tener muy en cuenta que la respuesta de las plantas al régimen hídrico del suelo no
dependen sólo del contenido en humedad de éste, sino también del clima y de los factores
propios de la planta ya que, aún cuando la transpiración es un proceso de evaporación de agua
y difusión de la misma a la atmósfera, sin embargo las superficies biológicas tiene
mecanismos de regulación que pueden interferir con las condiciones ambientales.
A.- Factores que radican en la planta, superficie radical y permeabilidad de las raíces.
Cuando mayor es el desarrollo del sistema radical de una planta, mayor será el volumen de
suelo explorado parámetro relacionado con la textura. La planta tendrá la posibilidad de
55
sobrevivir por más tiempo, aunque no aumente la cantidad de agua en el suelo por lluvias o
riego.
Las plantas efectúan absorción de agua suficiente para compensar su transpiración, aunque
sólo la mitad o incluso la cuarta parte de su sistema radical se encuentre en un suelo por
encima de su porcentaje de marchitamiento permanente. Ello permite indicar que una gran
parte de especies de plantas tienen un desarrollo del sistema radical superior al que necesitan
para proporcionarse de agua.
Las características de la atmósfera tienden a influir sobre la absorción del agua (a través de la
transpiración), pero son los factores del suelo los que fundamentalmente pueden actuar como
limitantes en la absorción de agua por el sistema radical, por ejemplo concentración de la
soluciones del suelo, la raíz absorbe debido a la existencia de un gradiente de potencial
hídrico decreciente desde la solución del suelo al protoplasma de las células de la raíz. Si la
presión osmótica de la solución del suelo es superior a la de las células de la raíz, el agua
saldrá de la planta en lugar de ser absorbida.
Las plantas halófitas, típicas de suelos salinos, tienen al protoplasma celular con presión
osmótica más elevada que el de las no halófitas, lo que les permite absorber agua de una
solución del suelo con concentraciones de sales elevadas (una hoja mesofítica puede tener un
potencial osmótico alrededor de -20 bares mientras que el potencial osmótico de las hojas de
algunas plantas halófitas puede ser inferior a -200 bares).
La Temperatura del suelo que lo rodea a al sistema radical influye directamente sobre los
mecanismos de absorción, e indirectamente a través de su efecto sobre la velocidad de
crecimiento del sistema radical, de forma que al descender la temperatura disminuye la
absorción.
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Suelos muy fríos o helados puede ocurrir la muerte de la planta como efecto de desecación
producido por la transpiración que no se ve compensada por la absorción de agua, muy lenta
en estas condiciones.
De todas quizá las más importantes sean la influencia de la viscosidad del agua y en la
permeabilidad de las membranas.
Aireación deficiente supone una menor cantidad de oxígeno con lo que disminuye la actividad
metabólica del sistema radical, baja capacidad de absorción activa de sales y por lo tanto
desciende el ritmo de absorción de agua.
Si la aireación deficiente se mantiene durante un tiempo muy largo, afectará al desarrollo del
sistema radical y en consecuencia disminuirá la absorción del agua.
Estas son las causas de que en suelos saturados de agua y con drenaje insuficiente, cuando las
condiciones atmosféricas favorecen la transpiración, puedan aparecer plantas con síntomas de
marchitez, debido a que la transpiración es intensa y el ritmo de absorción de agua es
demasiado lento.
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La cantidad de agua retenida en el suelo, por las micelas mediante la formación de puentes de
hidrógeno de tal forma que a medida que disminuye el contenido de agua en el suelo la
absorción de esta por la planta se hace más difícil..
El principio del agua disponible para la planta es la comprendida entre los límites de
capacidad de Campo y suelo en punto de marchitamiento.
El sistema radical de una planta absorberá agua siempre que el potencial hídrico de la raíz sea
inferior al de la solución del suelo.
En ocasiones puede ocurrir que las aportaciones por absorción superen a las pérdidas por
transpiración, sobre todo cuando ésta no se produce (de noche), en cuyo caso el exceso de
agua se elimina por las hojas en forma de gotas líquidas, a través de unas estructuras llamadas
hidatodos, mediante un proceso llamado gutación.
Es más frecuente que las pérdidas superen a las aportaciones, en cuyo caso se produce un
déficit hídrico, cuyos efectos negativos dependen de su intensidad y duración y del estado
fenológico de la planta.
El cierre total o parcial de los estomas se produce cuando la demanda evaporativa del aire (E)
es muy superior a las posibilidades de transpiración de la planta (T). La demanda evaporativa
del aire se incrementa bajo ciertas situaciones atmosféricas (temperatura elevada, humedad
relativa baja, viento seco y cálido), mientras que la transpiración se reduce ante ciertas
situaciones del suelo y de la planta (reducida humedad en el suelo, plagas y enfermedades de
las plantas, etc.).
La máxima producción vegetal se logra cuando las demandas de evaporación se igualan a las
posibilidades de transpiración, o sea, cuando la relación T/E es igual a la unidad. El agricultor
ha de procurar mantener esa relación lo más próxima posible a la unidad, de la forma
siguiente:
En la planta. Procurar un buen desarrollo foliar y radical mediante intervenciones tales como:
eliminación de malas hierbas, lucha contra plagas y enfermedades, laboreo, etc.
FERTILIDAD BIOLOGICA
Los microorganismos son los componentes más importantes del suelo. Constituyen su parte
viva y son los responsables de la dinámica de transformación y desarrollo. La diversidad de
microorganismos que se encuentran en una fracción de suelo cumple funciones determinantes
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en la transformación de los componentes orgánicos e inorgánicos que se le incorporan. Esto
permite comprender su importancia en la nutrición de las plantas al efectuar procesos de
transformación hasta elementos que pueden ser asimilados por sus raíces. La humificación de
la materia orgánica es un proceso netamente microbiológico.
La microflora del suelo está compuesta por bacterias, actinomicetos, hongos, algas, virus y
protozoarios. Entre las funciones más importantes que cumplen asociadamente en los
procesos de transformación están:
Solubilización de compuestos inorgánicos para facilitar la absorción por las plantas. Ejemplo.
Fosfato tricálcico a Fosfato monocálcico.
La mayor actividad de los microorganismos se realiza desde la superficie del suelo hasta unos
20 centímetros de profundidad. Las colonias de microorganismos permanecen adheridas a las
partículas de arcilla y humus (fracción coloidal) y a las raíces de las plantas que les
suministran sustancias orgánicas que les sirven de alimento y estimulan su reproducción.
Estas exudaciones dependen del buen estado nutricional de la planta y así favorecen el
crecimiento de los microorganismos que son importantes para ella. Su actividad y su
desarrollo están asociados a la disponibilidad de los substratos a transformar. La colonización
de algunos grupos microbianos sobre las fracciones orgánicas e inorgánicas dependen de la
función que sé este cumpliendo en la transformación (degradación de carbohidratos o de
proteínas, amonificación, nitrificación, oxidación, reducción, mineralización, solubilización).
60
Por lo tanto, mientras algunos microorganismos actúan sobre un substrato, otros se
desarrollan en los productos de la transformación.
Cuando terminan su función sobre la degradación del sustrato, los grupos microbianos que
estaban actuando principalmente disminuyen al máximo, se reproducen o entran en latencia y
se incrementa la población de otros que cumplirán funciones de transformación en los
productos del metabolismo del grupo microbiano anterior. Cada proceso químico
desencadenado por un microorganismo es una etapa en la descomposición de un material
orgánico o inorgánico. Una mayor cantidad de microorganismos en el suelo permite una
mejor actividad metabólica y enzimática para obtener plantas bien nutridas con buena
capacidad para producir.
Un suelo fértil es aquel que contiene una reserva adecuada de elementos nutrientes
disponibles para la planta o una población microbiana que este liberando nutrientes en forma
permanente hasta alcanzar un balance que permita un buen desarrollo vegetal.
Son los microorganismos más abundantes y pequeños (0,1 a 1 micras). Pueden ser aerobias
(crecen con oxígeno), anaerobias (crecen sin oxígeno) o facultativas (crecen con o sin
oxígeno). Pueden tolerar pH ácido (acidófilas), pH básico (basófilas) o pH neutro
(neutrófilas). En suelos ácidos algunas bacterias neutrófilas tienen la capacidad de neutralizar
el suelo donde se están desarrollando para cumplir su función.
Algunas bacterias producen endósporas y quistes latentes que les proporcionan resistencia a
las variaciones de temperatura, los niveles extremos de pH y a la desecación del suelo. De
esta forma pueden crecer de nuevo cuando encuentran condiciones favorables. Otras se
protegen de la depredación y de la desecación emitiendo una cápsula de sustancias mucoides.
Otras se desplazan en la solución del suelo mediante un flagelo para encontrar más fácilmente
el sustrato alimenticio.
61
Su capacidad de multiplicación les permite crear poblaciones muy grandes en un tiempo muy
corto, colonizando rápidamente los sustratos a degradar. La clase y abundancia de bacterias
presentes en una fracción de suelo dependen de los sustratos que la compongan y de sus
condiciones (suelo ácido, con materia orgánica alta, anegado, de sabana, etc). Los grupos
bacterianos que actúan primero sobre los sustratos disponibles son dominantes hasta que
termina su acción y luego dan oportunidad a que otros grupos crezcan en el residuo del
metabolismo de los primeros. Por lo tanto hay grupos bacterianos que permanecen y otros que
entran en latencia hasta que encuentran condiciones favorables para su crecimiento. Las
bacterias tienen especial importancia en la relación suelo-planta y son responsables del
incremento o disminución en el suministro de nutrientes.
Las bacterias beneficas del suelo son indispensables para recuperar la estructura perdidad por
las practicas agrícolas, para hacer disponibles los nutrientes que hay en el suelo y para
incorporarle la materia organiza que necesita para mejorar la fertilidad.
Entre los géneros bacterianos más importantes agrícolamente por la transformación de los
compuestos orgánicos e inorgánicos y que favorecen la nutrición de las plantas están:
Bacillus, Pseudomonas, Azotobacter, Azospirillum, Beijerinckia, Nitrosomonas, Nitrobacter,
Clostridium, Thiobacillus, Lactobacillus, y Rhyzobium.
Son microorganismos que se parecen a los hongos y a las bacterias. Crecen a manera de
micelio radial, forman conidias como los hongos pero las características morfológicas de sus
células son similares a las de las bacterias. Se encuentran en el suelo, las aguas estancadas, el
lodo y los materiales orgánicos en degradación. Se nutren de materiales orgánicos
(heterótrofos). Degradan desde azúcares simples, proteínas, ácidos orgánicos hasta substratos
muy complejos compuestos por hemicelulosas, ligninas, quitinas y parafinas. Por esto son
importantes en el proceso de transformación hasta la obtención del humus en el suelo.
Además son considerados como los mejores agregadores del suelo, pues son muy eficientes
produciendo sustancias húmicas.
En suelos bien aireados con alto contenido de materia orgánica alcanzan poblaciones muy
altas. Constituyen del 10 al 50% de la comunidad microbiana del suelo. Se desarrollan bien en
62
suelos con pH desde 5 hasta 7. Se reproducen por conidias y estas son resistentes a
condiciones difíciles de temperatura, acidez y humedad. Esto les permite germinar cuando se
restablecen las condiciones favorables para su desarrollo. En suelos secos los actinomicetos se
comportan muy bien.
Algunos actinomicetos producen antibióticos que regulan los patógenos de las plantas que
están en el suelo. Al agregar conidias de actinomicetos en un suelo contaminado con bacterias
y hongos fitopatógenos, crecen inhibiendo las poblaciones de los patógenos, regulando los
problemas hasta alcanzar un balance que le permita a las plantas obtener nutrientes y
desarrollarse.
Los géneros de actinomicetos del suelo más importantes para la nutrición de las plantas son:
Streptomyces, Nocardia, Micromonospora, Thermoactinomices, Frankia y Actinomyces.
Conforman una importante fracción de la biomasa total microbiana del suelo. Crecen en
forma de red extendiéndose como micelio hasta su estado reproductivo donde dan origen a
esporas sexuales o asexuales. Son importantes degradadores aerobios de material vegetal en
descomposición en suelos ácidos. Producen enzimas y metabolitos que contribuyen al
ablandamiento y a la transformación de sustancias orgánicas. También estas enzimas forman
parte de la actividad de otros microorganismos.
Los hongos metabolizan compuestos carbonados de muy difícil degradación como las
celulosas, las hemicelulosas y las ligninas. También degradan azúcares simples, alcoholes,
aminoácidos y ácidos nucleicos. Pueden ser parásitos o saprofiticos. Son muy importantes en
suelos con desechos de cosecha. Su crecimiento ramificado rápido y la intensa actividad
degradadora les permiten mantener un equilibrio en los ecosistemas del suelo.
Las raíces de las plantas están pobladas de hongos que aprovechan las exudaciones
radiculares constituidas por azúcares, aminoácidos, ácidos orgánicos, nucleótidos, enzimas,
vitaminas y sustancias promotoras de crecimiento. Los hongos movilizan nutrientes minerales
hacia las raíces de las plantas, aumentan la capacidad de retener agua en sequía, fijan
nitrógeno y fósforo y protegen las raíces de fitopatógenos por espacio y emitiendo sustancias
que los inhiben. Los hongos son muy activos en las plantas y prefieren los azúcares que estas
segregan por las raíces. También toman aminoácidos.
63
Algunos hongos entran en simbiosis con las raíces llamadas micorrizas. Son más activos en
suelos arenosos y pobres en materia orgánica. La simbiosis se ve favorecida por la pobreza
mineral del suelo.
Los géneros de hongos más importantes asociados a las raíces de las plantas son Aspergillus,
Penicillium, Rhizopus y Trichoderma. El Aspergillus y el Penicillium movilizan el fósforo y
el nitrógeno del suelo. El Trichoderma sostiene la humedad en las raíces en condiciones de
sequía.
Son la fuente primaria del suministro de nitrógeno a las plantas. Son fijadores del nitrógeno
atmosférico. Algunas bacterias, actinomicetos y algas verde azules (cianofíceas) reducen el
nitrógeno atmosférico a nitrógeno amoniacal y lo incorporan al suelo. Entre los géneros de
bacterias aerobias nitrofijadoras están Azotobacter , Azospirillum, Beijerinckia, Derxia,
Azomonas, y Oscillatoria.
La mayor actividad de las nitrofijadoras se alcanza con una humedad adecuada en el suelo y
con una fuente de carbono accesible como el material vegetal en descomposición (pajas, socas
o subproductos de cosecha). Por esto siempre están acompañadas por bacterias celulolíticas.
Necesitan de alcoholes, azúcares o ácidos orgánicos que se los suministran otros
microorganismos degradadores. El desarrollo de las nitrofijadoras se estimula con las
exudaciones que emite la planta cuando se encuentra bien nutrida.
Las bacterias del género Azotobacter tienen movimiento y forman quistes cuando encuentran
condiciones difíciles. Pueden fijar 40 kilogramos de nitrógeno por hectárea equivalente a 200
kilogramos de sulfato de amonio. Se han encontrado en suelos ácidos (5.5 de pH) y alcalinos,
pero prefieren los neutros.
Las bacterias del genero Azospirillum son móviles y crecen en suelos con pH cercanos a
neutro. En gramíneas actúan muy bien A. lipoferum y A. brasilense . No solo están en la
superficie de las raíces sino que las penetran e influyen en la nutrición de las plantas. Además
producen sustancias promotoras del crecimiento vegetal.
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Las bacterias del genero Clostridium pasterianum son anaerobias y se reproducen por esporas
cuando encuentran condiciones difíciles. Crecen en suelos anegados, compactados y en sitios
donde se dificulta la circulación de aire en el suelo. Toleran una acidez alta (hasta 4) y fijan
entre 3 y 10 miligramos de nitrógeno por gramo de fuente de carbono consumido. Son
importantes en suelos saturados de agua como el cultivo del arroz donde suministran
nitrógeno en el anegamiento.
Las algas realizan fotosíntesis y fijan al suelo entre 25 y 50 kilogramos de nitrógeno por
hectárea en un año. También agregan sustancias carbonadas al suelo que estimulan el
desarrollo de otros microorganismos. En cultivos de arroz se comportan muy bien por la
humedad, iluminación y temperatura adecuadas.
Las bacterias nitrofijadoras también actúan en las hojas de las plantas. Se desarrollan
poblaciones de las bacterias Pseudomonas, Azotobacter, Beijerinckia y también del
actinomiceto Streptomyces . A partir de las exudaciones foliares estas forman nódulos en las
hojas para fijar el nitrógeno, degradan los materiales orgánicos que se depositan sobre ellas,
producen enzimas de crecimiento para la planta y segregan antibióticos que protegen las hojas
de los ataques de los fitopatógenos. Se han reportado fijaciones hasta de 100 kilogramos de
nitrógeno por hectárea.
Los Rhyzobium son bacterias noduladoras que fijan simbióticamente el nitrógeno en algunas
leguminosas. Los actinomiceto Frankia y Actinomyces nodulan en plantas de porte arbustivo
o arbóreo. Los Rhyzobium son móviles en estados jóvenes y forman esporas cuando se
encuentran en condiciones difíciles. Crecen entre 0 y 47 grados centígrados. El crecimiento
óptimo entre 20 y 30 grados centígrados. El pH donde se desarrollan mejor está entre 4,5 y
7,5. Son aerobios aunque toleran escasez de oxígeno por un tiempo moderado.
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la planta al estar bien nutrida les suministre exudaciones importantes para los
microorganismos.
Las urobacterias son aerobias y actúan con la alcalinización que causa la urea al aplicarse al
suelo. Los géneros más importantes son: Bacillus, Clostridium, Pseudomonas, Micrococcus,
Acromobacter y Sarcina.
En suelos con poca fertilidad y una población baja de microorganismos la asimilación del
amónio o su nitrificación es mínima y por lo tanto se necesitan aplicaciones frecuentes de
urea para suplir las necesidades de nitrógeno en un cultivo establecido. El restablecimiento de
una flora microbiana permite una mayor asimilación del nitrógeno por las plantas y por lo
tanto la cantidad a utilizar puede ser menor.
LA NITRIFICACIÓN
El Nitrógeno del suelo se encuentra presente como diferentes compuestos químicos, pero la
mayor parte forma compuestos orgánicos (materia orgánica del suelo). Solo del 5 al 10% del
nitrógeno total se encuentra como formas inorgánicas: Amónio (NH4 +), Nitrito (NO2 -) y
Nitrato (NO3-). El Nitrito y el Nitrato se encuentran en la solución del suelo, mientras que el
amónio (catión) se encuentra como intercambiable o fijado a la estructura de algunos
minerales.
El Nitrógeno, bajo las diferentes formas en que se encuentra en el suelo, es el elemento más
susceptible de transformación por acción de los microorganismos. Estas transformaciones
ocurren simultáneamente y en diverso sentido, formando el ciclo del Nitrógeno en el cual hay
aportes o pérdidas al suelo, o cambio de un estado a otro. La nitrificación es un proceso
bacterial y aeróbico.
66
oxidan los substratos nitrogenados a Nitritos y Nitratos. Entre las bacterias están los géneros
Bacillus, Pseudomonas y Clostridium . Los actinomicetos nitrificadores son Streptomyces y
Nocardia y los hongos Aspergillus y Penicillium.
En los suelos de reacción ácida predominan los fosfatos insolubles de hierro y de aluminio.
Cuando se han utilizado enmiendas cálcicas se fija el fósforo como fosfato tricálcico. Las
bacterias de los géneros Pseudomonas, Achromobacter, Micrococcus, Aerobacter solubilizan
fosfatos inorgánicos en el suelo. Los hongos Aspergillus, Penicillium y Rhizopus solubilizan
fosfatos tricálcicos y rocas fosfóricas. En condiciones aeróbicas la degradación de la materia
orgánica libera grandes cantidades de CO2 como producto de la actividad respiratoria de los
microorganismos y que al reaccionar con el agua y los fosfatos insolubles los transforma en
fosfatos solubles así:
67
En condiciones anaerobias (anegamiento, compactación) en la degradación de la materia
orgánica se liberan ácidos orgánicos como el ácido málico, ácido tartárico, ácido cítrico, ácido
butírico, los cuales solubilizan los fosfatos de hierro y aluminio. Estos ácidos también
solubilizan la roca fosfórica.
El potasio es retenido por los constituyentes del suelo, pero sólo una parte es soluble y otra
gran fracción se fija quedando no intercambiable.
68
CAPÍTULO II.
Para recordar los fundamentos de la química se hará una revisión sobre los elementos
minerales que han sido encontrados en la naturaleza y compendiados en la tabla periódica. De
ellos se analizarán los 18 elementos considerados como esenciales para la nutrición de las
plantas, tema de este libro.
La tabla periódica actual obedece a un ordenamiento de los elementos de acuerdo a una serie
de características y propiedades que se repiten a lo largo de ella. La primera forma de
clasificar a los elementos fue según su número atómico (Z) o bien según su tamaño, por ello
el primer elemento que conforma la tabla periódica es el hidrógeno. Otra de las propiedades
que ayudaron a formar el sistema periódico es la que los elementos con configuraciones
atómicas externas similares se comportan de manera parecida en muchos aspectos, los cuales
serán descritos en los párrafos siguientes:
John Newlands observó que cuando los elementos conocidos se ordenaban de acuerdo con sus
masas atómicas, cada octavo elemento tenía propiedades similares. Newlands se refirió a esta
relación como la ley de las octavas. Sin embargo, esta ley no se cumple para elementos que se
encuentran más allá del calcio, y por eso la comunidad científica de la época no aceptó su
trabajo.
En 1869 el químico ruso Dimitri Mendeleiev propuso una tabulación más amplia de los
elementos basada en la recurrencia periódica y regular de las propiedades. Este segundo
intento de sistema periódico hizo posible la predicción de las propiedades de varios elementos
que aún no habían sido descubiertos. Por ejemplo, Mendeleiev propuso la existencia de un
elemento desconocido que llamó eka–aluminio, cuya ubicación debieraser inmediatamente
bajo el aluminio. Cuando el galio fue descubierto cuatro años más tarde, se encontró que las
propiedades predichas para el eka– aluminio coincidían notablemente con las observadas en el
galio. Actualmente la tabla está ordenada en siete filas horizontales, llamadas “periodos” que
indican el último nivel energético que tiene un elemento. Las 18 columnas (verticales) son
llamadas grupos, e indican el número de electrones en la última capa.
69
Características Generales de la Tabla Periódica
Se debe tener presente que la forma de la tabla periódica de los elementos más usada en
nuestros días que es la tabla larga, Figura 2.1, se muestran algunas característicasgenerales de
la tabla periódica de los elementos y se hace referencia a su nomenclatura.
Adviértase además, que esta longitud está en relación directa con el número de electrones que
caben en las diferentes capas de Bohr, y con el número de electrones que se pueden describir
con un valor dado del número cuántico principal en el modelo de Schrödinger.
Los períodos sexto y séptimo están "recortados" y los elementos cortados de ahí aparecen
separados de la tabla en la parte inferior; esto se hace para no tener una tabla demasiado larga,
aunque recientemente es común ver tablas que reincorporan a su período a estos elementos,
algunos denominan a este tipo de tablas extra largas.
Las columnas de la tabla se conocen como grupos o familias y contienen como ya se hadicho,
a los elementos que tienen propiedades similares y, desde el punto de vista de lateoría,
configuraciones electrónicas externas iguales.
Los elementos de la tabla periódica se pueden dividir en tres grandes conjuntos, a saber:
elementos representativos que conforman las primeras dos columnas y las últimas seisde la
tabla; metales de transición que constituyen diez columnas al centro de la tabla ymetales de
transición interna que comprenden las catorce columnas de la parte inferiorde la tabla.
Los dos primeros grupos de elementos representativos se conocen como bloque “s” (Figura
2.1), debido a que su configuración electrónica del estado fundamental termina en un orbital
“s”. El primer grupo está conformado por una serie de elementos metálicos (aexcepción del
Hidrógeno) y se denomina grupo de los metales alcalinos.
70
El segundo grupo es el de los metales alcalinos térreos.
Los grupos representativos del III al VIII integran el bloque “p”, dado que suconfiguración
electrónica más externa es de orbitales “p”. Algunos de estos grupos tienen un nombre
distintivo, particularmente el grupo VII que se conoce como familiade los halógenos (de las
palabras del griego que significan generador de sales) y el grupo VIII conocido como familia
de los gases nobles. Un nombre de uso menos común es el del grupo seis al que algunos
llaman de los calcógenos (de las palabras en griegoque significan generador de minerales
calcáreos). Los metales de transición forman el bloque “d”, debido a que lo que los diferencia
es el número de electrones en sus orbitales “d” externos. En el caso de los metales de
transición interna esta distinción se da a través de los orbitales”f”, por lo que forman el bloque
“f”. Algunos autores distinguen entre los dos renglones de transición interna llamándole al
primero de los lantánidos o tierras raras y al segundo de los actínidos. Los elementos con
número atómico mayor a 92, han sido preparados artificialmente y se les conoce como
elementos transuránidos por encontrarse en la tabla periódica después del Uranio.
Estructura atómica.- El átomo está constituido por un núcleo de unos 10-15 micrómetros de
radio, que contiene prácticamente toda la masa del átomo y se encuentra cargado
71
positivamente, y la corteza, formada por cierto número de electrones, cuya carga total es igual
y de signo contrario a la del núcleo, si el átomo está en estado neutro.
La corteza electrónica. Según el modelo de Bohr (aprox.1913), los electrones giran alrededor
del núcleo en ciertas órbitas permitidas en las cuales el movimiento resulta estable. A cada
una de estas órbitas o capas le corresponde un nivel de energía y cuanto más alejada esté del
núcleo, mayor será dicha energía. El número máximo de electrones por capa es 2n2, siendo
"n" el número de la órbita o capa, también llamado número cuántico principal.
NITRÓGENO (N):
72
La agricultura recibe N a través de los abonos orgánicos, el agua (lluvia) y los desechos
reciclados. Las plantas deficientes de N son pequeñas y verde amarillentas, esta amarilles
usualmente aparece primero en las hojas bajeras, mientras que las hojas superiores
permanecen verdes, ya que reciben parte del N de las hojas más viejas; encaso de deficiencias
severas, las hojas se tornan pardas y mueren, el rendimiento, así como el contenido de
proteínas se reduce. Un suelo se considera deficiente en N, sitiene menos del 0.5% de carbono
orgánico o menos de 280 kg/ha de N oxidable por permanganato alcalino.
Número atómico: 7
Densidad: 1,25 kg/m3
Masa atómica: 14,0067
Valencia: +/-3; +5
Radio medio: 65 pm (picómetros)
Radio atómico: 56 pm
Radio covalente: 75 pm
Estado: gaseoso
Punto de fusión: -210 ºC
Punto de ebullición: 195,8 ºC
Densidad (1 atm, 0ºC): 1,2506 g/l
Estado de oxidación común: -3, +3, +5
FÓSFORO ((P):
73
desarrollo y en semillas. Como resultado de esto, las deficiencias de fósforo se observan
primero en hojas maduras o bajeras.
Número atómico: 15
Densidad: 1,82 g/cm3 a 20ºC
Masa atómica: 30,97
Valencia: +1;+/-3;+5
Radio medio: 100 pm (picrómetros)
Radio atómico: 98 pm
Radio covalente: 106 pm
Estado: sólido
Punto de fusión (blanco): 44,1 ºC
Punto de ebullición (blanco): 280 ºC
Estado de oxidación: -3, +3, +5.
POTASIO (K):
Número atómico: 19
Densidad: 0,862 g/cm3 a 20 ºC
Masa atómica: 39,102
Valencia: +1
Radio medio: 220 pm
Radio atómico: 243 pm
Radio covalente: 196 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 65,65 ºC
Punto de ebullición: 774 ºC
Estado de oxidación: +1
74
El potasio actúa como un cofactor o activador de más de 80 enzimas del metabolismo de
carbohidratos y proteínas. Una de las más importantes la piruvato-quinasa, es una enzima
principal de la glucólisis y respiración.
En las dicotiledóneas las hojas se tornan cloróticas, pero a medida que progresa la deficiencia
aparecen manchas necróticas de color oscuro. La deficiencia de K se conoce comúnmente
como quemadura de los bordes de la hojas viejas.
En muchas monocotiledóneas, como es el caso de los cereales, las células de los ápices y
bordes foliares mueren primero, propagándose la necrosis hacia la parte más joven de la base
foliar. Ejemplo, el maíz deficiente de K presenta tallos débiles y las raíces se hacen
susceptibles a infecciones por patógenos que causan su pudrición.
CALCIO (Ca):
Es un elemento químico que pertenece a los metales alcalino-térreos del grupo II a de la tabla
periódica, no se encuentra en forma natural, sino formando compuestos que constituyen el
3,63% de las rocas ígneas y 3,22% de la corteza terrestre. Se encuentra como calcita en la
piedra caliza, tiza, conchas de ostras y corales.
Número atómico: 20
Densidad: 1.55 g/cm3 a 20ºC
Masa atómica: 40,08
Valencia: +2
Radio medio: 180 pm
Radio atómico: 194 pm
Radio covalente: 174 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 842-848 ºC
Punto de ebullición: 1487 ºC
Estado de oxidación: +2
La deficiencia de calcio está generalmente asociada a efectos de acidez del suelo y muchas
veces es difícil diferenciar una de la otra. Las hojas se muestran cloróticas, enrolladas y
rizadas. Se presentan raíces pobremente desarrolladas, carentes de fibras y pueden tener
75
apariencia gelatinosa. Los síntomas se observan cerca de los ápices de crecimiento de raíces y
tallos. La carencia de calcio también inhibe la germinación del polen y el crecimiento del tubo
polínico.
MAGNESIO (Mg):
Es uno de los metales alcalino-térreos del grupo II a de la tabla periódica, metal ligeramente
estructural, es de color blanco plateado, que no se halla libre en estado natural. El magnesio es
el octavo elemento más abundante en la corteza terrestre, siendo esencial en el metabolismo
de plantas y animales.
Número atómico: 12
Densidad: 1,74 a 20ºC
Masa atómica: 24,312
Valencia: +2
Radio medio: 180 pm
Radio atómico: 194 pm
Radio covalente: 174 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 651 ºC
Punto de ebullición: 1107 ºC
Estado de oxidación: +2
Las concentraciones de Mg en tejidos vegetales son variables, pero más bien altas. Más del
70% del magnesio se difunde libremente en la solución celular, aunque puede estar asociado a
componentes cargados negativamente, tales como proteínas y nucleótidos a través de enlaces
iónicos. Una gran cantidad de magnesio está probablemente enlazada a polifosfatos como el
Mg-ATP.
AZUFRE (S):
76
Es un elemento químico no-metálico, que pertenece a la familia del oxígeno, grupo VI a de la
tabla periódica. El azufre en la forma de sulfuros, sulfatos y azufre elemental constituye
aproximadamente 0,06% de la corteza terrestre.
Número atómico: 16
Densidad a 20 ºC: 2,07 g/cm3 (rómbico), 1,96 g/cm3 (monoclínico).
Masa atómica: 32,064
Valencia: -2; +4; +6
Radio medio: 100 pm
Radio atómico: 88 pm
Radio covalente: 102 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 112,8ºC (rómbico), 119ºC (monoclínico).
Punto de ebullición: 444,6ºC
Estado de oxidación: -2, +4, +6.
El azufre es absorbido por las plantas principalmente en la forma inorgánica como sulfato,
luego es reducido e incorporado a compuestos orgánicos. En el reciclaje del azufre, retorna al
suelo en la forma orgánica, donde se mineraliza por acción de microorganismos antes de ser
utilizado por las plantas superiores. La deficiencia de azufre se caracteriza porque la lámina
foliar se torna uniformemente amarilla o clorótica; presentándose la deficiencia primeramente
en hojas jóvenes, ya que este elemento no se redistribuye fácilmente de las hojas viejas hacia
las maduras, por ser poco móvil.
SODIO (Na):
El sodio es requerido por la mayoría de las especies que utilizan la vía metabólica C4 y con
metabolismo ácido de Crasuláceas (CAM) ya que es vital para la regeneración del ácido
fosfoenolpirúvico que es el que conforma la enzima fosfoenolpiruvatocarboxilasa (PEPC),
sustrato de la primera carboxilación de estas plantas.
77
Densidad a 20 ºC: 2,17 g/cm3
Masa atómica: 22,997
Valencia: +1
Radio medio: 95 pm
Radio atómico: 190 pm
Radio covalente: 154 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 801 ºC
Punto de ebullición: 1465 ºC
Estado de oxidación: +1
El sodio es un nutriente esencial que las plantas necesitan en muy bajas dosis. Sin embargo,
con dosis un poco altas la sal es tóxica
COBRE (Cu):
Número atómico: 29
Densidad: 8,92 g/cm3 a 20ºC
Masa atómica: 63,546
Valencia: +1
Radio medio: 135 pm
Radio atómico: 145 pm
Radio covalente: 138 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 1083ºC
Punto de ebullición: 2595ºC
Estado común de oxidación: +1, +2.
Las plantas presentan muy raramente deficiencias de cobre, ya que este elemento se encuentra
disponible en casi todos los suelos; las deficiencias de cobre son conocidas más que todo a
partir de estudios en cultivos hidropónicos y en suelos con alta materia orgánica.
HIERRO (Fe):
Número atómico: 26
Densidad: 7,86 g/cm3 a 20ºC
Masa atómica: 55,847
Valencia: +2 (asimilable); +3 (no asimilable)
Radio medio: 140 pm
Radio atómico: 156 pm
Radio covalente: 126 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 1535ºC
Punto de ebullición: 3000ºC 1
Estado común de oxidación: +2, +3, +4, +6
La planta lo absorbe de forma activa, como Fe2+, después de ser reducido el Fe3+, por una
reductasa férrica en el exterior de la raíz.
79
El efecto más característico de la deficiencia de hierro es la incapacidad de las hojas jóvenes
para sintetizar clorofila, tornándose cloróticas, y algunas veces de color blanco. El hierro se
acumula en las hojas más antiguas y es relativamente inmóvil en el floema, probablemente
debido a la formación de óxidos o fosfatos férricos.
MANGANESO (Mn):
Es un elemento químico, blanco grisáceo, quebradizo, más duro que el hierro, metal de
transición perteneciente al grupo VII b de la tabla periódica.
Número atómico: 25
Densidad: 7,20 a 20ºC
Masa atómica: 54,938
Valencia: +2
Radio medio: 140 pm
Radio atómico: 161 pm
Radio covalente: 139 pm
Estado: sólido
Punto de fusión: 1244 ºC
Punto de ebullición: 2097 ºC
Estado común de oxidación: +2, +3, +4, +6, +7
El manganeso es absorbido por la planta como Mn2+, tanto por la raíz como por las hojas.
Las necesidades cuantitativas son pequeñas, pero fluctúan más que para cualquier otro
micronutriente.
80
Produce una desorganización de las membranas del núcleo, de las mitocondrias y
especialmente de la membrana tilacoidal, las nervaduras tienden a desaparecer, se produce
una necrosis de cotiledones de plantas leguminosas.
CINC (Zn):
Número atómico: 30
Densidad: 7,13 g/cm3 a 20 ºC
Masa atómica: 65,37
Valencia: +2
Radio medio: 135 pm
Radio atómico: 142 pm
Radio covalente: 131 pm
Punto de fusión: 419 ºC
Punto de ebullición: 907 ºC
Estado común de oxidación: +2
Los síntomas de deficiencia se inician siempre en las hojas más jóvenes (baja movilidad), que
presentan zonas jaspeadas cloróticas intervenales que terminan necrosándose y afectando a
todo el parénquima foliar y a los nervios. El crecimiento es reducido (crecimiento en roseta),
hojas reducidas (microfilia), acortamiento en la longitud de los entrenudos, reducción de
floración y fructificación.
81
BORO (B):
Es un elemento químico, semi-metálico del grupo III a de la tabla periódica, esencial para el
crecimiento de las plantas, de amplia aplicación industrial.
El boro disponible para las plantas se encuentra en la solución del suelo como ácido bórico
H2BO3 a pH neutro, y hasta donde se sabe es la forma del nutriente utilizado por la planta.
Número atómico: 5
Densidad: 2,34 a 20 ºC
Masa atómica: 10,811
Valencia: -3
Radio medio: 85 pm
Radio atómico: 87 pm
Radio covalente: 82 pm
Punto de fusión: 2300 ºC
Punto de ebullición: 2550 ºC
Estado de oxidación: +3
La deficiencia de boro causa daños serios y muerte de los meristemos apicales. Las plantas
deficientes en boro contienen más azúcares y pentosanos, presentan tasas más bajas de
absorción de agua y transpiración que las plantas normales. El crecimiento en longitud de las
plantas cesa, presentándose un aspecto achaparrado.
MOLIBDENO (Mo):
Grandes cantidades de molibdato pueden ser absorbidas por las plantas sin efectos tóxicos. El
molibdeno existe en el suelo bajo tres formas, disuelto en la solución del suelo como ión
molibdato, adsorbido en forma intercambiable y no intercambiable, como constituyente de los
minerales del suelo y de la materia orgánica.
El molibdeno es absorbido por las raíces de las plantas en forma de ión molibdato.
82
Número atómico: 42
Densidad: 10,2 g/cm3 a 20ºC
Masa atómica: 95,94
Valencia: +6
Radio medio: 145 pm
Radio atómico: 190 pm
Radio covalente: 154 pm
Punto de fusión: 2610 ºC
Punto de ebullición: 5560 ºC
Estado común de oxidación: 0, 2, 3, 4, 5, 6
CLORO (Cl):
Número atómico: 17
Densidad: (1 atm, 0ºC) 3,214 g/litro
Masa atómica: 35,453
Valencia: -1
Radio medio:
Radio atómico:
Radio covalente:
Punto de fusión: -103ºC
Punto de ebullición: -34ºC
Estado común de oxidación: -1, +1, +3, +5, +7
83
El anión cloruro (Cl-) es absorbido por las plantas de la solución del suelo, sin embargo no se
ha reportado la pérdida de un cultivo por deficiencia de cloruro.
COBALTO (Co) +3
Número atómico: 27
Densidad: 8,9 g/litro
Masa atómica: 58,93
Valencia: +2 +3
Radio medio: 74 pm
Radio atómico: 125 pm
Radio covalente: 16 pm
Punto de fusión: 1495 ºC
Punto de ebullición: 2870 ºC
Estado común de oxidación: +2 +3
Co: Las plantas solo lo requieren si son capaces de fijar nitrógeno atmosférico por simbiosis.
Es un componente de la vitamina B12, la cual es imprescindible en muchas bacterias algas y
todos los animales.
SILICIO (Si):
84
El ácido silícico es absorbido por las plantas para ser transformado continuamente en
polímeros solubles. Se ha encontrado Silicio soluble dentro de la célula, en el citosol
(hialoplasma), en las membranas cloro plásticas y también en asociación con el RNA y el
DNA. Esta información sugiere que el Silicio puede tener una serie de sitios intracelulares de
acción lo que explicaría sus propiedades estimulantes en la resistencia de las plantas a
enfermedades. La presencia de Silicio en las plantas, hace que de las hojas y tallos se
incremente la cantidad de oxígeno que expulsan las plantas hacia la raíz llegando al
parénquima, oxidando de ésta manera la rizósfera (zona aledaña a la raíz), logrando que el Fe
y Mn reducido (forma en que lo toma la planta) se oxide, evitando una excesiva toma de éstos
elementos que pueden llegar a ser tóxicos para la planta.
Número atómico: 14
Densidad: 3,33
Masa atómica: 28,1
Valencia: +4
Radio medio:
Radio atómico:
Radio covalente:
Punto de fusión: 1410 ºC
Punto de ebullición: 2355 ºC
Estado común de oxidación: +2, +4, -4.
NIQUEL (Ni):
Las plantas lo absorben en forma de catión divalente que es muy escaso en la solución del
suelo, aunque puede ser más abundante en los suelos de serpentinas.
El níquel forma parte de la metaloenzima ureasa (que contiene dos átomos por molécula), la
cual descompone la urea en amoníaco y dióxido de carbono.
85
Número atómico: 28
Densidad: 8,90 (a 200 ºC).
Masa atómica: 58, 71
Valencia: +2
Radio medio:
Radio atómico:
Radio covalente:
Punto de fusión: 14530 ºC.
Punto de ebullición: 27320 ºC
Estado de oxidación: -1, 0, +1, +2, +3, +4.
Las leguminosas deficientes en Ni, acumulan urea que es el agente causal de la necrosis de los
folíolos. La urea es producida durante el metabolismo nitrogenado normal de las plantas
superiores y el Ni evita la acumulación de concentraciones tóxicas de urea. Las hojas de las
plantas que contienen niveles tóxicos de urea y muestran síntomas de necrosis, tienen niveles
de Ni que oscilan entre 0,01 y 0,15 mg por gramo de peso seco.
OTROS ELEMENTOS QUE LA PLANTA LOS TOMA DEL AGUA Y DEL AIRE
Este elemento es el más ligero de los gases conocidos en función de su bajo peso específico
con relación al aire. Este elemento en combinación con el oxígeno forma la molécula de agua,
que es considerado el símbolo de la vida en este planeta.
86
Las plantas toman el hidrógeno y el oxígeno de la molécula de agua, que es fraccionada por la
presencia del manganeso, para ayudar en el proceso fotosintético.
En el suelo el hidrógeno forma parte de la acidez activa del mismo, es el causante de la acidez
de la solución del suelo ya que al incrementarse el potencial hidrógeno en la solución, se
incrementa el grado de acidificación de la misma. El hidrógeno actúa en el suelo en la fase de
intercambio y es el encargado de compensar las cargas negativas provistas desde los coloides
del suelo, cuando las bases no se encuentran presentes en el mismo.
87
El oxígeno es un gas incoloro, inodoro e insípido, es aproximadamente 1.1 veces más pesado
que el aire y ligeramente soluble en agua y alcohol, se encuentra en el aire que respiramos, en
menor proporción que el nitrógeno. Es altamente oxidante, es decir, que actúa directamente en
todos los procesos de oxidación tanto en el suelo como en la planta. Es el gas más importante
para los seres vivos, sin él no sería posible la vida animal o vegetal. El oxígeno es
indispensable para el desarrollo del sistema radicular de las plantas y para la disponibilidad de
muchos elementos minerales que actúan como nutrientes de las mismas.
SULFATO (SO4)
El sulfato (SO4) se encuentra en casi todas las aguas naturales. La mayor parte de los
compuestos sulfatados se originan a partir de la oxidación de las minas de sulfato, la presencia
de esquistos, y la existencia de residuos industriales. El sulfato es uno de los principales
constituyentes disueltos de la lluvia. Una alta concentración de sulfato en agua potable tiene
un efecto laxativo cuando se combina con calcio y magnesio, los dos componentes más
comunes de la dureza del agua. Las bacterias, que atacan y reducen los sulfatos, hacen que se
forme sulfuro de hidrógeno gas (H2S)
FOSFATOS
El fósforo generalmente está presente en las aguas naturales en forma de fosfatos. Los
fosfatos se encuentran en los fertilizantes y los detergentes y pueden llegar al agua con el
88
escurrimiento agrícola, los desechos industriales y las descargas de aguas negras. Los
fosfatos, al igual que los nitratos, son nutrientes para las plantas. Cuando entra demasiado
fosfato al agua, florece el crecimiento de las plantas. Los fosfatos también estimulan el
crecimiento de las algas lo que puede ocasionar un crecimiento rápido de las algas.
Colocar bandas de fósforo con nitrógeno de amonio en los suelos alcalinos se recomienda
para aumentar la disponibilidad del fósforo.
La deficiencia de fósforo o magnesio en las hojas más viejas, o de calcio en las hojas más
jóvenes, son síntomas que indican un suelo excesivamente ácido.
CARBONATOS
Un carbonato es un compuesto químico, o sea una substancia formada por dos o más
elementos, en una proporción fija por peso. De esto se deduce la definición de carbonato que
se presenta a continuación:
Carbonato: Compuesto químico que contiene los elementos carbono (C) y oxigeno (O) en
forma del grupo CO3, conteniendo un átomo de carbono y tres átomos de oxigeno; por
ejemplo el carbonato de calcio CaCO3.
De los carbonatos él más importante, en abundancia y uso es el CaCO3, que forma las calizas
y mármoles, aragonito principalmente, pero existen muchos carbonatos, también útiles para el
hombre, como la siderita, Smithsonita o Calamina, Cerusita, Malaquita, azurita y magnesita.
89
BORATO
EQUIVALENTE QUÍMICO
Ejercicio:
Datos
Valencia del Ca 2
90
Peso Ca Peso solución CaCO3
40 100
Xg 200 =80g
Formula:
. .
Peso eq. Ca = = = 20
( )
eq. Ca= . ( )
= = 4eq Ca ó 400meq Ca
Resultan de la mezcla de dos o más sustancias puras diferentes cuya unión no produce una
reacción química sino solamente un cambio físico. Una sustancia (soluto) se disuelve en otra
(solvente) formando una sola fase. Los componentes pueden separarse utilizando
procedimientos físicos.
Soluciones empíricas:
Diluidas
Saturadas
Sobre saturadas
• Normalidad N
91
• Molaridad M
• Molalidadm
Porcentaje en masa (m/m): Cantidad de gramos de soluto disuelto en 100 gramos de solución.
Porcentaje masa a volumen (m/V): Cantidad de gramos de soluto disuelto en 100 mililitros de
solución.
Partes por millón (ppm): Cantidad de miligramos de soluto disuelto en 1 litro (ó 1 Kg) de
solución.
Ejercicios:
Datos
Fórmula
( ) ( )
PP= KKCl=
Resolución:
92
.
39.1 74.6 X= = 52.4g
.
X 100
Datos
Fórmula
( ) ( )
P/P =
K/KNO3 =
Resolución
.
39.1 101.1 X= =
.
X 100
Datos
Fórmula de la ureaH2NCONH2
Fórmula
93
( ) ( )
P/P = N/Urea =
Resolución
28 60 X= X= 46.6g
X 100
Datos
Incógnitas
Peso Urea = X
Peso NO3NH4 = Y
Y = 100 – X
Resolución
94
0.13X = 7,8
X = 60
Y = 100 – X = 40
Molaridad (M)
# de moles = ∗
* Peso Molecular = Suma de pesos atómicos de los componentes de una fórmula en gramos
(g)
Ejemplo:
Molaridad=
( ) ( )
Molaridad (M): Cantidad de moles de soluto disuelto en 1 litro de solución. Este concepto de
mol se aplica a la molécula de soluto disociada en iones.
Fracción molar (X): Cantidad de moles de soluto o de solvente con respecto al número total
de moles de la solución.
95
Ejercicios:
Datos
Volumen 1 m3
Fórmula
( )
M=
. . ( )
Resolución
M= .
=2 moles
Datos
Formula
( )
M=
. ( )
96
Resolución: M= = 0.192 moles
# Eq =
N=
( )
Reemplazo N=
( )
Relación entre la masa total de una sustancia y su volumen, se expresa en: g/ml = g / c.c. = g /
cm3
Gravedad Específica
Relación entre la masa de un cuerpo y la masa de un volumen igual de agua se expresa en: g/g
=1
Datos
97
Densidad HCl 1.19 g/cm3
Concentración 36 %
Fórmula
Peso Soluto = N Volumen
Resolución
.
0.1 2 = 7.3g HCl
Peso (%)
7.3 gHCl 36
.
V= V= =17.04cm3
.
A la cantidad del soluto requerida para saturar la solución se le conoce como “punto de
solubilidad” de la sal o compuesto y se lo determina como la cantidad de gramos de la
sustancia que pueden ser disueltos en 100 ml de agua a 20 o 25 °C. En todo caso siempre una
solución saturada está en equilibrio con el sólido presente y es por esta razón que si se añade
un gramo más de soluto a esta solución, este se separa y se precipita, pero si se produce un
incremento de la temperatura se produce la disolución del soluto convirtiéndose en una
solución sobresaturada cuyo equilibrio se rompe y se produce la recristalización y
precipitación debido a la presencia de un cristal que sirve de semilla para aglutinar al resto de
cristales.
Cuando se habla de los fertilizantes compuestos, es necesario indicar que éstos materiales
alcanzan un grado de solubilidad más elevado que el total de las sales individuales, es por esta
razón técnica que se recomienda el uso de este tipo de fuentes que por guardar una alta
estequiometría presentan mejores resultados que las fuentes simples.
Como regla general se tiene que los nitratos y los cloruros tienen solubilidades mayores que
los sulfatos y éstos últimos presentan solubilidades más altas que los óxidos, carbonatos y
bicarbonatos.
Como se ha podido observar durante estos últimos párrafos, la temperatura juega un papel
muy importante en el grado de solubilidad de los compuestos y esta variación está
directamente asociada con la energía absorbida o liberada cuando un mol del soluto se
disuelve en un solvente. Tomando en consideración la temperatura, el proceso puede ser de
dos tipos a saber: endotérmico si absorbe energía y exotérmico si libera energía. En el primer
caso la solubilidad aumenta con el incremento de la temperatura, un caso práctico puede ser la
disolución del nitrato de amonio en una disolución del 50 % en la cual la temperatura
99
desciende de 26 °C iniciales a –3 °C, es decir la solución se torna muy fría al final de la
reacción. Por otro lado en un proceso exotérmico la solubilidad disminuye a medida que
aumenta la temperatura, y como caso práctico se puede poner al ácido fosfórico que al
preparar una solución del 50 % provoca una elevación de temperatura de 24 °C a 34,3 °C.
El pH y su efecto en la solubilidad
100
fosfato cambia en medio ácido y en medio alcalino y es así como en pH menor a 5,5
predomina la forma H2PO4 -, fosfato di ácido, y cuando el pH es superior a 9, la forma
predominante es la del fosfato mono ácido, HPO4 2-.
Si por ejemplo se desea preparar soluciones fertilizantes a partir de dos fuentes muy
conocidas dentro del campo agrícola como son el fosfato di amónico DAP y el fosfato mono
amónico MAP, dependiendo del pH el (NH4)2HPO4 (DAP) tiene una solubilidad de 68,6
g/100 ml de agua a 20 °C, mientras que (NH4) H2PO4 (MAP) a la misma temperatura
alcanza únicamente a 36,8 g/l de agua. Estrada, 1997.
Si por ejemplo se desea preparar soluciones fertilizantes a partir de dos fuentes muy
conocidas dentro del campo agrícola como son el fosfato di amónico DAP y el fosfatomono
amónico MAP, dependiendo del pH el (NH4)2HPO4 (DAP) tiene una solubilidad de 68,6
g/100 ml de agua a 20 °C, mientras que (NH4)H2PO4 (MAP) a la misma temperatura alcanza
únicamente a 36,8 g/l de agua.
Es importante conocer cuando se tiene la presencia de sales de muy baja solubilidad, como es
el caso del yeso o sulfato de calcio, que por lo general se forman a partir de reacciones
químicas durante la mezcla de fuentes fertilizantes no compatibles, como ocurre muy
comúnmente con el uso del nitrato de calcio con cualquier fuente que contenga el ion sulfato,
como sulfato de hierro, por ejemplo. En estos casos lo recomendado es adicionar un ácido que
no tenga un anión en común con la sal a ser disuelta, como puede ser el caso del ácido nítrico,
el mismo que al incrementar la concentración de iones H+, permite un incremento en la
solubilidad del yeso y evita el taponamiento del sistema de riego.
La solubilidad de las fuentes fertilizantes, al igual que cualquier sustancia química, está regida
por el equilibrio que se establece en una disolución saturada y si este equilibrio se rompe por
disminución de las concentraciones iónicas de la parte disuelta, se podrá disolver más sólido
101
hasta recuperar el equilibrio. Pero si las concentraciones iónicas se aumentan, de seguro que
el soluto se precipita hasta alcanzar nuevamente el citado equilibrio.
Lo que en otras palabras se desea indicar es que para que se produzca la precipitación de una
sustancia será necesario que el producto de las concentraciones de los iones formados en su
disociación iónica, elevadas a sus respectivos coeficientes, sea mayor que su producto de
solubilidad.
Con el uso cada día más frecuente de la fertirrigación en la agricultura moderna en los países
Latinoamericanos, la oferta de sales fertilizantes que lleguen a cumplir con los exigentes
requerimientos de esta práctica de nutrición, es bastante buena, lo que permite al técnico o al
agricultor escoger de entre ellas las más convenientes y proceder a hacer su propia fórmula de
fertilización de acuerdo con las necesidades del cultivo.
Para el caso de un cultivo tomado como ejemplo, se han considerado las siguientesalternativas
de los elementos principales es su nutrición que son el nitrógeno, el fósforoy el potasio.
En la Tabla 2.2 se indican las fuentes nitrogenadas más factibles de usar en fertirriego, para lo
cual es necesario hacer la separación teniendo en cuenta el grado de pureza y solubilidad de
las mismas. Considerando el grado de pureza y de solubilidad las tres primeras fuentes de la
tabla, pueden ser usadas en fertirriego pero se debe considerar la procedencia del producto
para saber el grado de riesgo que pueda tener su uso a través del sistema de riego por su alto
contenido de impurezas o por su bajo grado de solubilidad.
Para el caso de algunas fuentes se requiere hacer otras consideraciones adicionales como del
contenido de substancias no deseadas, tal el caso de la urea donde se hace necesario
considerar el contenido del biuret, el cual puede llegar a grados de toxicidaden ciertos
102
materiales, o en el caso del nitrato de potasio donde se debe tomar en cuenta el contenido de
sodio, ya que en exceso puede actuar como un defloculante del suelo y reducir el movimiento
del agua en el mismo, o puede actuar como antagónico con el potasio, lo cual puede reducir
los grados brix de la fruta o problemas de post cosecha en flores.
Para el caso del sulfato de amonio por su reducida solubilidad al mezclarla con otras fuentes,
y por su incompatibilidad con el nitrato de calcio, tabla 2, es considerado como una fuente
con uso restringido en fertirriego.
Por este motivo es que se han desarrollado un buen número de otras fuentes con mejores
características y se las considera como fuentes con grado para uso en fertirrigación, tal como
se indica en la tabla 3. En la penúltima columna de esta tabla se hace constar los valores de
pH de cada fuente, cuando un gramo es disuelto en un litro de agua a 20 °C, y de ella se
deduce que existen fuentes que producen acidez y otras que producen alcalinidad, lo que da la
oportunidad de rotar entre ellas para no causar alteraciones graves en el pH de la solución del
suelo.
103
A más del pH de la fuente, es necesario conocer la conductividad eléctrica (CE), que es una
medida de la concentración de sales en un medio líquido. El concepto se fundamenta en que a
una mayor concentración salina se tiene una mayor conductividad de la electricidad medida
en un conductímetro o puente de salinidad; la unidad utilizada para medir la conductividad
eléctrica es el moho/cm que es la inversa del homio que es la unidad de resistencia en
electricidad, en la actualidad la unidad establecida es el Siem/m (S/m) que es un equivalente
directo del moho/cm. El conocimiento de este parámetro en las fuentes fertilizantes de es
mucha importancia en el uso de una agricultura intensiva para poder controlar por medio de
su dosificación y evitar así la salinización de los suelos lo que lleva por falta de un control
adecuado a problemas graves de desertificación.
Dentro de las fuentes fosforadas utilizadas para fertirriego, en verdad no existen muchas y
todas ellas están basadas en minerales como apatitas y fluorapatitas que son rocas formadas a
partir de residuos marinos que tienen en su composición fosfatos mono, di y tricálcicos,
siendo los primeros los más adecuados para ser usados en la fertirrigaciónpor su mayor
solubilidad.
En la tabla 2.3, se presentan las fuentes más comunes y probadas para ser usadas en
fertirrigación las mismas que están encabezadas por el ácido fosfórico, que es la fuente más
simple y más soluble de fósforo, pero que lamentablemente por su muy bajo pH (2,6) al
disolver un gramo en un litro de agua, no puede ser usada con mucha frecuencia por que llega
a provocar cambios muy bruscos en la matriz lo que disminuye la disponibilidad de las bases
y baja la capacidad de intercambio catiónico, además que afecta directamente a la biota del
suelo.
Como alternativas se tienen a los fosfatos mono y di amónicos, que por tener como
acompañante al elemento nitrógeno resulta ser una fuente interesante, pero por su mejor grado
de solubilidad el fosfato di amónico, soluble, es más recomendado (68,6 g/100ml a 20 °C)
comparativamente con el fosfato mono amónico con 36,8 g/100 ml, a la misma temperatura, y
si existe un problema de pH ácido esta es la solución al problema. Si se desea combatir de una
sola vez problemas nutricionales de fósforo y potasio, la fuente de fosfato mono potásico
puede ser usada aunque con menor grado de solubilidad que las anotadas anteriormente (22,7
g/100 ml a 20 °C) y a un costo más alto que las otras fuentes descritas.
104
Tabla 2.3. Fertilizantes Fosforados para fertirriego
Para el caso de las fuentes que llevan potasio en su formulación, al igual que para el nitrógeno
y el fósforo, existen algunas alternativas las mismas que reúnen las características deseadas
para ser usadas en fertirriego sin mayores riesgos de taponamiento o de toxicidad.
De los fertilizantes descritos en la tabla 2.3, se puede observar que la fuente más económica,
por su alto grado de concentración de potasio, es el cloruro de potasio que contiene el 60 % de
K2O y para mejorar su eficiencia se debe escoger el muriato de potasio blanco, ya que la
fuente de color rojizo por su alto contenido de hierro, tiene menor grado de solubilidad y
tiende a precipitar a nivel del sistema de riego, y es por eso que esta última es usada en
aplicaciones edáficas sin mayores limitaciones. El inconveniente en el uso continuo y único
del cloruro de potasio es el alto grado de cloro que se aplica en forma conjunta, lo cual puede
ir en detrimento de la calidad de algunos cultivos, razón por la cual se debe alternar con
fuentes que contengan otro ión acompañante que reemplace al cloro, como pueden ser los
nitratos o sulfatos, aunque estos últimos, decrecen en solubilidad y pueden ser causa de
taponamiento de goteros.
De lo indicado anteriormente se desprende que una fuente muy idónea para ser usada en
fertirrigación es el nitrato de potasio, con el único agravante que es su alto costo, en relación a
los demás. Si se advierte una deficiencia de fósforo a más de la de potasio, la mejor
alternativa resulta ser el fosfato mono potásico, que también tiene un costo un tanto alto.
105
Tabla 2.3. Fertilizantes potásicos para fertirriego
Las fuentes más usuales para los micro elementos han sido, hasta hace no mucho tiempo, los
sulfatos, pero debido a su grave problema de precipitación en la solución del suelo, se ha
tenido siempre que incrementar las dosis de estas fuentes para poder compensar las altas
pérdidas ocasionadas por este efecto. La formación de precipitados a nivel de los equipos de
riego no sólo que han sido causa de problemas de taponamientos sino de la pérdida de
eficiencia de los nutrientes que han sido aplicados, con la consecuente baja en rendimiento y
calidad de las cosechas.
En esta última década, las fuentes que existen en el mercado no sólo que han incrementado su
grado de solubilidad y con eso su eficiencia si no que han tratado de asemejarse a sustancias
naturales, para hacer que las plantas las absorban sin ninguna dificultad ya que no tienen que
ser metabolizadas antes de ser colocadas en el torrente circulatorio de la misma.
106
Las fuentes a las que se hace referencia son los quelatos, que son ácidos orgánicos sintéticos
que sirven como protectantes de los elementos minerales, protegiéndoles de problemas de
precipitaciones o formaciones de sales no deseadas. Estos ácidos orgánicos sintéticos,
conocidos como EDTA, DTPA, HEDDA, EDDHA, etc, han sido desarrollados con la
finalidad de dar la mayor eficiencia posible a las fuentes en función del pH del medio en el
que han sido aplicados. Es por eso que existen rangos de pH considerados como adecuados
para cada uno de ellos. Mucho énfasis se ha puesto para el caso del elemento hierro que por
estar sujeto a procesos de oxidación y reducción tiene una química muy compleja en el suelo.
Lo último que se ha lanzado al mercado de las fuentes de micro elementos quelatados, han
sido los quelatos con aminoácidos, que por ser sustancias que la planta las elabora en forma
permanente, son de una alta eficiencia y los tiempos de respuesta se han reducido a horas, en
vez de días o semanas cuando se usan otras fuentes. La limitación en su uso radica en su costo
alto, que se justifica si el cultivo a ser atendido es de alta rentabilidad.
Los minerales arcillosos, conocidos también como coloides inorgánicos, porque su tamaño es
menor a 2 micras (0.002 mm), están formados por dos estructuras químicas que son los
107
octaedros de aluminio y los tetraedros de sílice, estas dos estructuras al unirse entre sí dan
lugar a la formación de las arcillas tipo 1:1 y a las tipo 2:1, las primeras están conformadas
por un tetraedro de sílice y un octaedro de aluminio dejando un espacio interlaminar muy
estrecho en el cual no puede penetrar el agua, situación que hace que estas arcillas no se
expandan cuando están húmedas y no secontraigan cuando están secas; por otra parte las
arcillas tipo 2:1 están formadas por dos cristales tetraédricos de sílice y un octaedro de
aluminio, en el espacio interlaminares existe un espacio suficiente para el ingreso del agua
que expande a estas arcillas y al secarse se produce una contracción muy fuerte lo que hace
que suelos que tengan este tipo de arcilla se resquebrajen fácilmente, es por esto que se las
llama arcillas expandibles y contráctiles.
La caolinita es una arcilla de tipo 1:1, formado por sílice y alúmina con presencia de potasio,
oxígenos y OH que efectuarán los enlaces, este tipo de arcilla posee una baja
CIC al igual que la haloisita que pertenece a este mismo grupo con la forma de un tubo
enrollado por capas.
ESTRUCTURA DE LA CAOLINITA
Está formado por pequeñas capas hexagonales de superficie plana. En su estructura cristalina
se distinguen dos láminas, una formada por tetraedros, en cuyos vértices se situarían los
átomos de oxígeno y el centro estaría ocupada por el átomo de silicio, y otra formada por
108
octaedros, en cuyos vértices se situarían los átomos del grupo hidróxido y el oxígeno, y en el
centro el átomo de aluminio. (Figura 2.3 )
La carga permanente que posee este tipo de arcillas es muy pequeña y se origina por la
ruptura de enlaces o cargas residuales.
O enlace roto
MONTMORILLONITA
La montmorillonita es una arcilla de tipo 2:1, formado por sílice, alúmina y sílice, este tipo de
arcilla es expandible y contráctil permitiendo el paso del agua entre la interlámina. El 2
representa a las dos capas de tetraedros y el 1+1 indica que las dos capas de octaedros no son
iguales, ya que la capa octaédrica de la estructura 2:1 tiene la mayoría de los vértices
compartidos con las capas de tetraedros vecinos, mientras que los octaedros del espacio
interlaminar no comparten ningún vértice con los tetraedros (Figura ).
109
Figura 2.4 Estructura de la Montmorillonita (Adaptado de Grim, 1968)
En esta arcilla el 20 % del Al+++ es sustituido por el Mg++ dando lugar a la carga
permanente grande que tiene esta arcilla, debido a esta sustitución isomórfica.
LA CENIZA VOLCÁNICA
pH 6 CIC 33 cmolc/dm3
Una de sus características químicas más importantes es su alto poder de fijación del fósforo.
110
2.3 CAPACIDAD DE INTERCAMBIO CATIONICO (CIC)
La CIC se refiere a la clase y cantidad de mineral y de materia orgánica que forman parte de
las partículas del suelo, a los cuales se les denomina coloides. Como se ha visto ya, la porción
mineral del suelo está compuesta por partículas de muchos tamaños.
Las cargas están en relación con la clase y cantidad del mineral del suelo y de la materia
orgánica.
COMPLEJO DE CAMBIO
-El complejo de cambio actúa como almacén donde están fijados reversiblemente muchos de
los elementos nutritivos para las plantas.
- El complejo de cambio permite a las plantas absorber los elementos minerales a medida que
lo precisan. Esto es posible debido al intercambio de estos por substancias de carga positiva
como H+ o radicales orgánicos, que las plantas segregan.
111
- En tierras muy empobrecidas deben recuperarse los niveles de materia orgánica, y
posteriormente los de fósforo y potasio, entre otros elementos, para que los abonados
posteriores sean eficaces.
Los cationes de mayor importancia con relación al crecimiento de las plantas son el Calcio
(Ca++), magnesio (Mg++), potasio (K+), amonio (NH4+), sodio (Na+) e hidrógeno (H+). Los
primeros cuatro son nutrientes y se encuentran involucrados directamente con el crecimiento
de las plantas. El sodio y el hidrógeno tienen un pronunciado efecto en la disponibilidad de
los nutrientes y la humedad. En los suelos ácidos, una gran parte de los cationes son
hidrogeno y aluminio en diversas formas.
El suelo sirve como un reservorio de nutrientes para ser utilizados durante el crecimiento de
las plantas. Los iones fijados por la superficie del suelo no están sujetos a pérdidas por lavado
o lixiviación como suceden con aquellos que no están adsorbidos.
Por tal motivo el NH4+, un catión, no es lixiviado del suelo, mientras que el nitrógeno nítrico
(NO-3), un anión, puede ser lixiviado con el agua de percolación.
Nutrientes como el potasio (K+), magnesio (Mg++) y cinc (Zn++) deben ser incorporados en
el suelo con el objeto de colocarlos en la zona radicular de los cultivos.
Los nutrientes no se mueven desde la superficie del suelo a la zona radicular por efectode la
lluvia o irrigación en los suelos que contienen apreciables cantidades de arcilla y de materia
orgánica, ellos se mueven por procesos como el flujo de masas y por difusión o pueden ser
interceptados por las raíces en su proceso de crecimiento.
Un suelo franco arcilloso con un 30% de caolinita puede tener una CIC de 2 a 3 cmol c/dm3
El mismo suelo con 30% de montmorillonita puede tener un CIC de 30 a 40 cmol c/dm3
112
CAPACIDAD DE INTERCAMBIO CATIONICO TOTAL (CICT)
La CIC Total corresponde al número total de cargas negativas que posee el suelo, se lo
determina con la finalidad de conocer el tipo de mineral arcilloso presente en el suelo
(caolinita o montmorillonita), con fines fundamentalmente de clasificación de suelos.
CARACTERÍTICAS
- Corresponde al número total de carga negativa que posee un suelo y se la determina con la
finalidad de conocer el tipo de arcilla.
- Se puede obtener la CICT mediante la determinación de todas las bases, extraídas con
acetato de calcio y bicarbonato de sodio, usando como alternativa una solución saturada
Por lo tanto:
113
El porcentaje de saturación de bases determina la cantidad de la capacidad de intercambio
catiónico, que está siendo ocupada por las bases o iones de cambio; es decir, indica qué
proporción del total de las cargas negativas existentes en el suelo están ocupadas por cationes
útiles (Ca, Mg, K y Na).
El %SB es un parámetro excelente para indicar las condiciones generales de fertilidad del
suelo. De acuerdo al % de SB y al % de saturación de aluminio se encuentra tres tipos de
suelos:
Suelos Eutróficos (fértiles): %SB> 50%., Suelos Distróficos (poco fértiles):%SB <50%,
Suelos alíticos (muy pobres): % Saturación de Al > 50%.
EXPRESION DEL pH
log 10000000 = 7
114
A medida que aumenta el pH; hay disminución de acidez por lo que si hay aumento en pH la
solución es cada vez más alcalina. Se debe tener en cuenta que la concentración de iones
hidrogeno es una función logarítmica por lo que un valor de pH corresponde a una
concentración de iones más grande que el valor que antecede, esto pude ser un poco confuso
por lo que mencionamos un ejemplo:
Un pH de 4 contiene diez veces más hidrogeno q una concentración de pH=5 y este diez
veces más que un pH=6 y así sucesivamente.
Con la definición de pH dada anteriormente, la escala toma valores desde cero, un ácido
fuerte es el q tenga un pH de 1, por lo tanto la base más fuerte tiene un pH de 1, el punto
medio del pH es 7, que representa soluciones con un pH neutro, ni acidas ni básicas.
EXPRESIÓN DEL pH
pH + pOH = 14 a 25 °C
115
EL pH Y EL SUELO
Cuantos milivoltios debe medir una solución buffer pH 7? Debe medir 0 porque es neutro, los
OH con los H están iguales, La curva de calibración es una recta.
116
El primer punto de la curva corresponde al valor bajo, es decir pH 4 y el segundo punto de la
curva al valor alto, en este caso pH 7, si se va a leer un pH mayor a 7, éste es elvalor bajo y el
buffer pH 10 corresponde al pH alto. Antes la solución se media con un electrodo de vidrio y
un electrodo de referencia hoy existen los electrodos combinados.
Existen electrodos a los que se pueden dar mantenimiento ya que tiene un orificio por donde
se rellena con cloruro de potasio el cual hace contacto con el electrodo que es con un alambre
pequeño de plata, cuando se disuelve la plata y forma cloruro de plata, se mide la
concentración de iones H en la solución, la medida de pH que se reporta, es el momento que
se equilibró la solución de afuera con la solución de adentro, ese balance es el que da la
lectura del pH, el electrodo actúa como una membrana permeable. Se utiliza el ClK porque
los dos tienen el radio iónico de tamaño similar y pasan la membrana del electrodo.
Las medidas sobre muestras desecadas al aire son las más convenientes y las que más
comúnmente se realizan, por lo que es considerado este procedimiento como normal.Tanto
más diluida sea la suspensión de un suelo cuanto más alto será el valor del pH hallado, tanto
si es suelo ácido como si es alcalino, esto significa que se diluyen más los iones hidrógeno.
El pH en el suelo se mide en una suspensión de suelo y agua. Los factores que afectan al pH
en el lado ácido se dan entre la relación suelo-agua y el contenido de sales de la suspensión
suelo-agua.
El efecto de la suspensión suelo-agua es producir valores de pH más bajos entre más sea el
volumen que está ocupando el pH en el suelo o mezcla. Para darnos cuenta del efectoque
ocasiona la suspensión dependerá de la naturaleza del suelo, si existe gran cantidad de humus,
roca parental, mineralogía y otros factores que influyen en el suelo para determinar la
cantidad de concentración de sales.
117
El principal efecto de la concentración de sales sobre el pH es por el intercambio de cationes.
Adición de iones H
Los iones H que forman enlaces covalentes en losgrupos carboxilos (COOH), de la materia
orgánicas se disocian y ponen H en solución.
Por cada 500 g de NH4 añadido al suelo serequieren de 0.8 a 1.6 kg de CaCO3 para
neutralizar la acidez producida.
118
Se han podido establecer algunas correlaciones con respecto al pH del suelo, las cuales son de
importancia práctica así como también de interés científico. Entre estas interrelaciones con el
pH del suelo se tienen:
3. La disponibilidad de fósforo
ACIDEZ ACTIVA
ACIDEZ INTERCAMBIABLE
Es la presencia de los iones hidrógeno (H+) y a los iones aluminio (Al+++) fijados o
adsorbidos en forma intercambiable por las cargas negativas de los coloides inorgánicos y
orgánicos del suelo y que pueden ser extraídos por medio de una sal en
ACIDEZ NO INTERCAMBIABLE
Solución como el KCl 1 M. En los suelos ecuatorianos se ha establecido que las cantidades
del H+ en forma intercambiable, son tan pequeñas que la acidez de intercambio puede ser
sinónimo de la concentración del Al***, de tal manera que no es necesario realizar una
determinación separada del ión aluminio por absorción atómica o cualquier otro método de
laboratorio. Los suelos de la amazonia ecuatoriana, por estar en una zona de alta pluviosidad,
presentan concentraciones altas de aluminio e hidrógeno. La acidez intercambiable es nociva
119
para la gran mayoría de plantas, existiendo un grupo que presenta cierta resistencia o
adaptabilidad a los suelos con alta concentración de aluminio como es el caso del cultivo del
té.
Esta determinación es utilizada para el cálculo de la CIC Total y por lo tanto en el cálculo de
la saturación de bases (%SB) y para las recomendaciones de encalamiento.Tome, 1.997,
Navarro 2.000.
ACIDEZ POTENCIAL
Es aquella que nos da la suma total de iones H e iones A los presentes en la solución de un
extracto acuoso del suelo, por lo tanto es:
• No es necesario sacar la diferencia de estos dos valores ya que ambos tienen la misma
finalidad
120
Con estas determinaciones se pueden hacer algunas observaciones o inferencias que son muy
útiles cuando se realizan las interpretaciones de los análisis de suelos o se desea realizar una
recomendación de encalamiento. No es necesario realizar las dos determinaciones al mismo
tiempo en el laboratorio. Para el encelamiento de algunos suelos muy ácidos se utiliza la
diferencia de valores entre pH en agua y pH en CaCl2 lo que se conoce como delta pH.
Inferencias
En las regiones áridas el pH del suelo es generalmente más elevado que en las húmedas por
las razones siguientes:
• Precipitaciones que no drenan sino que se secan antes de colarse por el suelo pero que son
capaces de elevar por capilaridad las sales disueltas, haciéndolas pasar de los horizontes
inferiores a los superiores. (Gary, D., 1981)
121
Bajo cualquier condición de lluvia los suelos ácidos se forman más fácilmente de rocas ígneas
ácidas que las rocas ígneas básicas.
Así pues un correctivo del suelo puede actuar en la neutralización de la condición ácida como
la caliza o caliza dolomítica. La cantidad aplicada dependerá de la acidez total del suelo.
(Fassbender, 1980; Mora y Demanet, 1999).
Para lo anterior se necesita hacer un estudio de suelos para determinar la cantidad de cal
necesaria para reducir la acidez de intercambio y elevar el pH, dependiendo del potencial
buffer que el suelo analizado posea.
El pH del suelo es importante porque los vegetales sólo pueden absorber a los minerales
disueltos, y la variación del pH modifica el grado de solubilidad de los minerales. Por
ejemplo, el aluminio y el manganeso son más solubles en el agua edáfica a un pH bajo y al ser
absorbidos por las raíces son tóxicos a ciertas concentraciones.
Determinadas sales minerales que son esenciales para el crecimiento vegetal, como el fosfato
de calcio, son menos solubles a un pH alto, lo que hace que esté menos disponible para las
plantas.
Algunas plantas se desarrollan mejor en condiciones de pH ácidos mientras que otras no.
La cantidad de hierro aluminio y manganeso soluble en muchos suelos aumenta con la acidez.
Tanto el Fe como el Al forman compuestos de baja solubilidad con los fosfatos. En los suelos
de pH = 5 hacia abajo los fosfatos de Fe y Al se pueden formar, pero su baja solubilidad no
proporcionan fósforo a las plantas. La baja solubilidad del fósforo en suelos alcalinos resulta
122
de la hidrólisis del Ca3(PO4)2 en presencia de CaCO3, y esta reacción tiene un lugar de pHs de
8.0 a 8.5. García, Y., 1988
Los suelos solo llegan a ser ácidos cuando el abastecimiento de iones básicos, principalmente
Ca en el complejo coloidal, llega a ser agotado y es entonces cuando hay principio para opinar
que la deficiencia de Ca es una de las causas de restricción en el desarrollo de muchas plantas
en suelos altamente ácidos.
Cuando la acumulación de sales afecta la productividad del suelo se le denomina suelo salino.
El pH puede variar de 7.0 a 8.5.
La acidez o alcalinidad de los suelos indica que clase de plantas se pueden desarrollar mejor
en ese medio y da idea sobre los tratamientos que deben aplicarse como practica adecuada en
el manejo del suelo. (Fassbender, 1980; Mora y Demanet, 1999).
Para tener una idea general de las condiciones de fertilidad del terreno, la
determinación del pH en una solución acuosa o en una solución de CaCl2, actúa como
123
índice que tiene un mismo significado Las dos formas de determinación no son
complementarios ni opuestas entre sí. No hay necesidad en un laboratorio de realizar las
dos determinaciones ni presentar los dos resultados en sus informes. En todo caso el pH
determinado en CaCl2, puede presentar las siguientes ventajas para el laboratorio.
b) Reduce o quita la variación estacional (en la época más seca, un mismo suelo puede
presentar pH en agua más alto que la época lluviosa)
e) Se obtiene una mejor correlación entre el pH y el % SB. Cuanto más alto el pH mayor
es la saturación de bases del suelo, debido a una menor variabilidad de las lecturas del pH
en CaCl2. Tomé, 1.997.
Debido a una mayor precisión de las lecturas del pH en CaCl2, este se torna en un índice
más confiable que el pH en agua.
Esto es muy bueno tanto para quien va a interpretarlo y utilizar los resultados de los
análisis, cuanto para el responsable técnico del laboratorio, debido a que él puede percibir
probables errores analíticos cuando se ha perdido la relación entre el pH con otras
características, como contenido de calcio y magnesio, saturación de bases, presencia de
Al, etc.
124
Además, no es importante conocer la diferencia entre esas lecturas, debido a que ambas
tienen la misma finalidad. En los suelos con carga variable que presentan un ΔpH (delta
pH) positivo (que tiene predominancia de cargas positivas) el pH en CaCl2 es más
elevado que el pH en agua, condición muy común en suelos derivados de ceniza volcánica
de la serranía ecuatoriana, de manera especial los suelos ácidos del páramo (Tomé,
1.997.
En el caso de conocer los datos del pH del suelo, varias previsiones se pueden tomar
dada la importancia que tiene esta determinación. Según los valores encontrados
del pH del suelo, las condiciones favorables o desfavorables se advierten el momento
que el pH está hacia arriba o hacia abajo del valor neutro 7, pero se tornan realmente
críticas en los valores menores de 4,5 de pH en CaCl2, ó menores de 5,5 en agua, o pH’s
en agua y en CaCl2 mayores o iguales a 7.
1. Deficiencia de fósforo por proceso de fijación, en este caso el ion fosfato (H2PO4), se
combina con hierro o con aluminio, formando compuestos de baja solubilidad y por lo
tanto no disponibles para la planta, o los fosfatos están en forma de precipitados
3. Pero por otra parte la disponibilidad de microelementos, hierro, cobre, cinc, boro
manganeso son muy buenas, con excepción del molibdeno, cuya
disponibilidad disminuye con la reducción del pH.
125
7. Baja saturación de bases pero alta saturación de aluminio.
contenidos de Al+3.
OBSERVACIONES IMPORTANTES
4. Pero sí existe una relación directa entre el pH del suelo y la saturación de bases, y dentro
de las bases con el Calcio. Cuando mayor es el pH más alto será el %SB y el Calcio.
126
5. Alta CIC Efectiva, a menos que se trate de un suelo arenoso, el cual puede tener un
pH elevado y una baja CIC Total y por lo tanto, será bajo también la CIC
Efectiva.
6. Puede ser un suelo salino o sódico, si es el sodio el que está presente, se trata de un
suelo de pobre estructura, bajo crecimiento radicular y de baja retención de agua
Un pobre crecimiento de las plantas, ya sea en suelos ácidos como alcalinos, tiene un
sinnúmero de razones, como. La solubilidad de los elementos nutritivos está
íntimamente relacionada con el pH. Algunos nutrientes son altamente insolubles a valores
de pH altos, mientras que otros son menos disponibles a valores de pH bajo. La
disponibilidad máxima para la mayoría de nutrientes ocurre en el rango de pH de 6,5 a 7,5.
Un pobre crecimiento de las plantas, puede ser el resultado de efecto directo del pH sobre
las células radiculares, causando una reducción en la permeabilidad y reduciendo la
absorción de agua y nutrientes. El citoplasma de las células consiste fundamentalmente de
proteínas y las moléculas de proteínas pueden ser alteradas grandemente en la presencia
El ácido sulfúrico producido en la reacción se ioniza y produce iones H+, los cuales causan
una reducción en el pH. La reacción que tiene lugar se expresa en las siguientes
ecuaciones químicas:
Existen otros productos que pueden ser utilizados como enmiendas, tal es el caso del
sulfato de hierro y aluminio, los mismos que se hidrolizan en el suelo (reaccionan con el
El sulfato de calcio, conocido como yeso, no cambia el pH del suelo. El azufre en el yeso
está ya completamente oxidado y el sulfato de calcio es una sal neutra. Por lo tanto, al no
129
existir el proceso de hidrólisis no se produce un exceso de iones H+ . Muchos suelos son
muy ácidos para un crecimiento óptimo de las plantas.
Los suelos ácidos son el resultado de un material parental con estas características, o pueden
ser el resultado de un excesivo lavado de las bases por la presencia de altas
pluviosidades, o pueden ser el resultado del uso continuo de fertilizantes formadores
de ácidos. En el proceso de nitrificación del amonio (NH+4) del que se trata en detalle
en el capítulo del nitrógeno, por cada molécula de NH4 que senitrifica, se producen 2
moléculas de H+, . La acumulación de los iones H+ causa el decrecimiento del pH del suelo.
La hidrólisis de la cal (CaCO3) en suelos ácidos produce un exceso de iones OH-, el cual
incrementa el pH del suelo. Una reacción simplificada puede ser descrita de la siguiente
manera:
Oxido de calcio (CaO) e hidróxido de calcio [Ca(OH)2 ], pueden ser usados como
materiales para incrementar el pH, pero debido a su condición de ser quemantes, se debe
manejar con mucho cuidado y bajo supervisión técnica, la reacción es más rápida que con
el carbonato de calcio.
Esta propiedad es de mucha importancia ya que evita tener cambios muy radicales en el
suelo, los mismos que podrían alterar la vida de las plantas y de los
microorganismos y la disponibilidad de los nutrientes.
En primera instancia se pensó que todas las soluciones debían ser llevadas a un pH neutro y
se utilizaron productos neutralizantes para producir un alargamiento de la vida media del
pesticida. Pero se encontró que estos productos no alargaban el período de reingreso ni la
actividad residual del plaguicida.
Así mismo se encontró que no todos los plaguicidas deben ser sometidos a
neutralización, por ejemplo productos con bases metálicas (estaño, cobre), se pueden
solubilizar y provocar efectos fitotóxicos.
Al momento se conoce que casi todos los plaguicidas, sean estos insecticidas,
fungicidas, herbicidas y algunos reguladores de crecimiento son afectados por el proceso
de hidrólisis.
131
Durante el proceso de hidrólisis se produce una metabolización del ingrediente activo
llegando a la formación de metabolitos que muchas veces nada tienen que ver con la
molécula original, siendo estos unas veces más tóxicos o a su vez muy inofensivos que
el ingrediente activo principal. Esto hace que el producto no actúe o se tenga que
incrementar la dosis para lograr el objetivo final. Muchos fabricantes, no proporcionan
información sobre la velocidad con que sus productos se descomponen. Esta
información se expresa como “vida media” del producto, o sea el período en el cual la acción
original del producto se reduce a un 50%.
Todos los suelos fértiles contienen por lo menos pequeñas cantidades de sales solubles.
Cuando un suelo tiene un exceso de sales solubles se le denomina suelo salino. Lamedida de
la conductividad eléctrica (CE) del suelo y de las aguas de riego permiteestimar en forma
cuantitativa la cantidad de sales que contiene. El análisis de la CE ensuelos se hace para
establecer si las sales solubles se encuentran en cantidadessuficientes como para afectar la
germinación normal de las semillas, el crecimiento delas plantas o la absorción de agua por
parte de las mismas.
132
Riego contínuo: riego permanente con bajo caudal.
Las sales solubles que se encuentran en los suelos en cantidades superiores al 0.1% están
formadas principalmente por los cationes Na+, Ca2+ y Mg2+ asociados con los aniones Cl-,
SO4 2-, NO3 - y HCO3-.
¿Qué es la conductividad?
Conductividad:
133
Cuando se habla de Conductividad Eléctrica de un suelo, usualmente se hace referenciaa la
Conductividad Eléctrica de su extracto de saturación. Y la Conductividad Eléctrica,como tal,
es determinada en un medio líquido. Se supone, aunque esto aún no ha sido demostrado, que
dicha conductividad corresponde a la Conductividad Eléctrica del líquido intersticial del
suelo. Esta última aseveración adolece de una falla. Para determinar la Conductividad
Eléctrica de un Suelo es necesario agregarle más agua y esta última contribuye a diluir el
contenido de sales de la solución intersticial, rebajando su conductividad original.
El valor obtenido suele ser menor a medida que se incrementa el nivel de dilución.
Marcha Analítica
Se toma una cantidad aproximada de 250 ml de suelo y se agrega agua destilada deionizada
hasta obtener una pasta saturada. Se extrae a continuación el extracto desde un embudo
Buchner con un filtro Whatman 42, por medio de un equipo de filtración alvacío. Deben salir
al menos 25 ml. Luego se lee la Conductividad Eléctrica por medio de un conductivímetro o
comúnmente llamado puente de salinidad, previamentecalibrado.
Cálculos
134
expresar en mmhos/cm, o en las unidades del sistema internacional de medidas en mS/cm o
en dS/m o uS/cm.
Unidades
Conductividad:
1 dS/m = 1 mmho/cm.
mg/L o ppm.
Reactivos y Equipos
Equipos
135
Interpretación de la C.E.
Aplicando agua moderadamente y permitiendo que las plantas absorban los excesos de sales
Los dos métodos comúnmente aceptados para medir el pH del suelo son la cinta indicadora y
el potenciómetro. Las cintas indicadoras se usan frecuentemente en el campo para
hacer una determinación rápida del pH. Las cintas deben ser utilizadas por personas
entrenadas para evitar errores, pero si se usan apropiadamente son confiables. Por supuesto,
el método más confiable ( y el más aceptado), es el del potenciómetro usado en los
laboratorios de análisis de suelos.
El requerimiento de cal de un suelo no solo se relaciona con el pH de ese suelo, sino también
con su capacidad tampón. La cantidad total y el tipo de arcilla y el contenido de materia
orgánica del suelo determinan que tan fuerte es la capacidad tampón del suelo... es decir
con que fuerza el suelo resiste el cambio de pH. La capacidad tampón se incrementa con
el incremento en la cantidad de arcilla y materia orgánica. Los suelos con alta capacidad
tampón requieren más cal para incrementar el pH que los suelos de menor poder tampón.
Los suelos arenosos, con bajas cantidades de arcilla y materia orgánica, tienen bajo poder
tampón y por lo tanto requieren menor cantidad de cal para cambiar el pH.
137
tampón. El pH se reduce en proporción al pH original y a la capacidad tampón del suelo.
Con la calibración de los cambios de pH en la solución tampón se puede determinar la
cantidad de cal necesaria para que el suelo llegue a determinado pH, generalmente alrededor
de 7.0. Existen varios de estos métodos en uso.
En los suelos dominados por arcillas de tipo 2:1 (esmécticas), la reducción en la saturación
de bases, causada por la pérdida de Ca, Mg y potasio (K), provoca acidificación. Esta
reducción en pH consecuentemente provoca la rotura de los cristales de las arcillas liberando
Al, el cual ocupa los sitios de intercambio de las bases perdidas. Estos suelos son característicos
de las zonas temperadas del mundo aun cuando están también presentes en áreas tropicales y
subtropicales. Estos suelos pueden ser encalados hasta un pH cercano a la neutralidad (7.0), sin
un cambio apreciable en su CIC (suelos de carga permanente). De hecho en estos suelos se logra
la mayor productividad a este pH.
Sin embargo, la práctica bien establecida de encalar hasta cerca de la neutralidad en estos
suelos predominantes en las regiones templa- das del mundo no es efectiva en la mayoría de
los suelos altamente meteorizados de los trópicos (Ultisoles y Oxisoles, dominados por
caolinita y óxidos e hidróxidos de Al y Fe) y en suelos derivados de cenizas volcánicas
(Andisoles).
En los suelos rojos tropicales, los minerales arcillosos son estables hasta un pH tan bajo como
5.0 y el Al y el Fe se encuentran atrapa- dos dentro de las estructuras de las arcillas y se
tornan tóxicos para la planta solamente cuando la caolinita y los óxidos e hidróxidos se
disuelven cuando el pH llega a un rango entre 5.0 y 5.3 liberando Al a la solución del
suelo. En estos casos la toxicidad de Al puede corregirse encalando el suelo hasta llegar a un
pH de 5.5 a 6.0, logrando la precipitación del Al tóxico como hidróxido de aluminio
[Al(OH)3] y causando al mismo tiempo un incremento apreciable en la CIC (suelos de
carga variable) como se demuestra en la Tabla 2.3. Por lo tanto, las recomendaciones de en-
calado para este tipo de suelos deben basarse en la cantidad de cal necesaria para
precipitar el Al intercambiable presente en la capa arable.
Los requerimientos de cal para la mayoría de los suelos tropicales puede predecirse
aplican- do la siguiente ecuación:
138
Tabla 2.3. Efectos de la aplicación de cal en un Ultisol rojo.
Tratamiento pH Ca Mg K Al CICE
------------------------------- meq/100 g ------------------------------
Sin cal 4.9 1.79 1.12 0.11 2.15 5.17
Con cal (4 t/ha) 5.8 7.90 6.73 0.14 0.09 14.86
* Se ha determinado que el factor en la ecuación anterior varía entre un rango que va de 1.5 a
3.3, con la mayoría de los valores entre 1.5 y 2.0. El valor exacto tiene que ser determinado
de acuerdo con las condiciones del sitio y la tolerancia del cultivo al Al (ver la Tabla 2.4).
Por lo tanto, como se demuestra en la Tabla 2.4, el uso del concepto del Al intercambiable
puede llevar a una estimación errónea de los requerimientos de cal en ciertos Andisoles. La
cantidad de cal necesaria para precipitar Al varía en los Andisoles dependiendo de facto- res
como altitud, clima e intensidad y estado de meteorización de la ceniza y únicamente se
puede determinar con exactitud mediante ensayos de campo en los sitios específicos.
La acidez del suelo afecta de diversas maneras el crecimiento de la planta. Ver el Concepto
de Producción 2-1. Cuando el pH es bajo (la acidez es alta), uno o varios factores
perjudiciales pueden deprimir el crecimiento del cultivo.
139
Tabla 2.4. Efectos de la aplicación de cal en las propiedades del suelo y el
rendimiento de varios cultivos en un Andisol.
La Figura 2.4 muestra como los rangos de pH influyen en la disponibilidad de nutrientes para
la planta y en la solubilidad de otros elementos en el suelo.
Muchos cultivos crecen mejor cuando el pH del suelo está en un rango de 6.0 a 7.0, pero la
acidez no retarda el crecimiento de todos los cultivos. Algunos cultivos necesitan condiciones
140
ácidas para crecer bien. La Tabla 2.5 compara los rangos deseables de pH para varios
cultivos.
Las propiedades del suelo cambian en diferentes áreas. El pH óptimo en una región podría no
serlo en otra. Estas diferencias en pH óptimo entre regiones pueden presentarse en cultivos
como maíz, soya y alfalfa, pero en otros cultivos como la papa pueden no ser evidentes.
Tabla 2-6. Especies de cultivos y pastos que crecen bien en suelos ácidos después de
haber recibido mínimas aplicaciones de cal.
pH 4.5 - 4.7 4.7 - 5.0 5.0 - 5.3
Saturación de Al ,% 68 - 75 45 - 58 31 - 45
Dosis de cal, t/ha 0.25 - 0.5 0.5 - 1.0 1.0 - 2.0
Cultivos adecuados Arroz de secano Caupí Maíz
(si se usan Yuca Plátano Fríjol
variedades Mango
tolerantes) Anacardo
Cítricos
Piña
Estilosantes
Centrocema
Paspalum
Sin embargo, en suelos tropicales con alto contenido de óxidos de hierro y aluminio, el
“sobre encalar” el suelo buscando llegar a valores de pH mayores que 6.0 puede reducir
141
drásticamente la producción, causar deterioro estructural del suelo, reducir la disponibilidad
de P e inducir deficiencias de zinc, boro y manganeso.
En suelos dominados por arcillas de tipo 2:1, prevalentes en las zonas temperadas del
mundo, la producción de los cultivos puede incrementarse significativamente cuando se
encala el suelo para obtener un pH cercano a la neutralidad. En el ejemplo de la figura
adjunta, la cal produjo un incremento de 2 t/ha en el rendimiento de maíz, en años secos y
un incremento de 0.8 t/ha en años húmedos. En todos los casos, Hel maíz fue a
decuadamente fertilizado. La cal y el fertilizante interaccionan efectivamente para
obtener altos rendimientos de excelente rentabilidad.
Cultivos como la papa y la soya pueden ser susceptibles a enfermedades y/o a deficiencia de
micronutrientes si el pH del suelo está sobre o por debajo de los requerimientos individua- les
de cada cultivo, sin importar su área geo- gráfica. Un conocimiento práctico del suelo, así
como del cultivo, es esencial para lograr encajar en los requerimientos óptimos de pH y
encalado.
Los procesos y reacciones por las cuales la cal reduce la acidez del suelo son muy complejos.
Sin embargo, una visión simplificada de estos procesos explicará cómo funciona la cal.
Como se mencionó anteriormente, el pH del suelo es una expresión de la actividad del H+.
Esta reacción libera H+ (acidifica) y a su vez incrementa la cantidad de Al+3 listo para
reaccionar nuevamente.
La cal reduce la acidez del suelo (incrementa el pH) al convertir parte del H+ en agua.
Cuando el pH es mayor a 5.5, el Al se precipita como Al(OH)3 eliminando la acción tóxica de
Las reacciones del encalado funcionan de la siguiente forma: Los iones de Ca+2 de la cal
reemplazan al Al+3 en los sitios de intercambio, y el ion carbonato (CO3 -2) reacciona con
142
el agua de la solución del suelo creando un exceso de iones OH-, que a su vez reaccionan
Debe recordarse también que el proceso rever- so puede ocurrir. Un suelo ácido puede
volverse más ácido si no se adopta un programa de encalado. A medida que los iones
básicos como Ca+2, Mg+2 y K+ son removidos, generalmente por la absorción de las
plantas, éstos pueden ser reemplazados por Al+3. Estos iones básicos pueden también
perderse por lixiviación, y en este caso también pueden ser reemplazados por Al+3. Este
En rotaciones que incluyen un cultivo de leguminosas con una demanda de pH alto, la cal
debe aplicarse de 3 a 6 meses antes de la siembra, especialmente en suelos muy ácidos. El
encalar unos días antes de sembrar alfalfa o trébol, por ejemplo, a menudo produce resultados
desalentadores debido a que la cal no tiene el tiempo suficiente para reaccionar en el
suelo. Los materiales de encalado más cáusticos (como el óxido y el hidróxido de calcio)
deben ser aplicados con suficiente tiempo de anticipación para prevenir daños a las semillas
que están por germinar.
Textura del suelo - Los suelos arenosos deben ser reencalados más a menudo que los
suelos arcillosos.
Dosis de N utilizadas - Dosis altas de amonio (NH4) generan una acidez considerable.
Neutralizante del CaCO3 puro es 100 y de esta forma se puede determinar por
comparación el valor de neutralización de cualquier material de encalado. Este valor se
denomina “valor de neutralización relativa” o “equivalente de carbonato de calcio”. Los
valores de neutralización relativa de varios materiales de uso común en encalado se presentan
en la Tabla 2.7.
143
Cantidad de bases removidas por los cultivos - Dependiendo del cultivo, del rendimiento y
de las partes cosechadas, se pueden remover cantidades substanciales de Ca y Mg del suelo.
Cantidad de cal aplicada - La aplicación de cantidades altas de cal generalmente re- duce
la frecuencia del reencalado, pero no se debe sobre encalar.
Cuando se mezcla una cantidad determinada de cal con el suelo, la tasa y grado de
reactividad son afectados por el tamaño de las partículas del material. Las partículas de cal
gruesas reaccionan más lentamente y en forma incompleta. Las partículas de cal finas
reaccionan más rápidamente y en su totalidad.
144
El costo de la cal se incrementa a medida que las partículas son más finas. Se recomienda
utilizar un material que requiera de un mínimo de molienda, pero que contenga la suficiente
cantidad de material fino para permitir un cambio rápido de pH. Como resultado de esta
condición, los materiales de encalado contienen tanto gránulos finos como gránulos gruesos.
Existe legislación en varios países que requiere que la cal para venta al público pase por
tamices de tamaños determinados. Esto garantiza que la cal tenga la suficiente calidad para
neutralizar la acidez del suelo.
La Figura 2-6 ilustra dramáticamente el efecto del tamaño y grado de reactividad de las
partículas de cal. Las partículas grandes, que pasa- ron un tamiz de 4 a 8 mesh (4 a 8
perforaciones por pulgada cuadrada), tuvieron solamente una eficiencia del 10% en términos
de reacción con el suelo. Las partículas más pequeñas, que pasaron un tamiz de 80 a 100
mesh, reacciona- ron completamente en el suelo.
A pesar de que la tasa de reacción de la cal depende del tamaño de las partículas, pH inicial y
el grado de incorporación en el suelo, es importante considerar la naturaleza química del
material de encalado. Por ejemplo, el óxido y el hidróxido de calcio reaccionan más
rápidamente que el CaCO3 . De hecho, la cal hidratada reacciona tan rápidamente que puede
esterilizar parcialmente el suelo. Si se aplica muy cerca a la siembra, puede inducir una
deficiencia temporal de K debido a la alta disponibilidad de Ca. En casos extremos, puede
ocurrir un retraso en el crecimiento de la planta y algún marchitamiento.
Parte de la cal con el primer pasó del tractor y el resto con los siguientes. En suelos arenosos
basta una sola aplicación e incorporación.
145
En algunos sistemas de cultivo, como los pastos perennes, la incorporación de la cal es so-
lamente posible antes de la siembra. Una vez establecido el pasto, la cal debe aplicarse en la
superficie. La cal aplicada en la superficie reacciona más lentamente. . . y en forma in-
completa. . . en comparación con la cal incorporada completamente al suelo. Por lo tanto
estos suelos deben ser reencalados frecuente- mente para evitar acidez excesiva en la zona
radicular.
MATERIALES DE ENCALADO
Muchos suelos en climas áridos tienen pH alto, lo cual puede afectar sus propiedades e
influenciar la productividad. Por supuesto, estos suelos no requieren de cal, sin embargo, su
pH alto afecta la disponibilidad de nutrientes, la fertilidad del suelo y el manejo de los
fertilizantes.
Suelos calcáreos - contienen CaCO3 libre no disuelto con pHs que se encuentran
generalmente entre valores de 7.3 a 8.4. La presencia de carbonatos libres influye en ciertas
prácticas de manejo como el uso de herbicidas, localización de P (debido a la fijación) y la
disponibilidad de micronutrientes, particularmente Fe. El reducir el pH de los suelos
calcáreos generalmente no es económico. Con manejo apropiado, estos pueden ser uno de
los suelos más productivos.
Suelos salinos - contiene sales en cantidades lo suficientemente altas para limitar el
crecimiento de los cultivos, debido a que las plantas no pueden absorber una cantidad
suficiente de agua para funcionar adecuada- mente. A menudo, las plantas que crecen en
suelos salinos exhiben síntomas de marchitamiento, a pesar de que el contenido de agua
del suelo es adecuado. El grado de salinidad se determina en el laboratorio midiendo la
conductividad eléctrica (CE). Los suelos salinos pueden ser recuperados desplazando
(lixiviando) las sales de la zona radicular, con agua de alta calidad. Debido a que los cultivos
difieren en su tolerancia a las sales, una práctica adecuada de manejo (PAM) consiste en
seleccionar aquellos cultivos que toleran mejor las sales. La Tabla 2.8 compara la
tolerancia a las sales de algunos cultivos comunes.
Suelos sódicos (alcalinos) - contienen cantidades excesivas de sodio (Na) en los sitios de
intercambio. Los suelos se clasifican como sódicos si la saturación de Na excede el 15 % de la
CIC. Generalmente tienen un pH igual o mayor a 8.5. El exceso de Na dispersa las partículas
147
de suelo, limitando el movimiento de aire y agua. Por esta razón, el agua tiende a
encharcarse en suelos sódicos. Estos suelos pueden ser recuperados reemplazando el Na en
el complejo de intercambio con Ca. La mejor fuente de Ca para este efecto es el yeso (sulfato
de cal- cio). Sin embargo, también se puede usar S elemental en suelos calcáreos. Para una
exitosa recuperación se requiere que el Na salga de la zona radicular por lixiviación, pero un
inadecuado movimiento del agua puede hacer este trabajo difícil. Una labranza pro- funda y/o
una aplicación de estiércol pueden ayudar a mejorar el movimiento interno del agua.
En algunas ocasiones los suelos sódicos pueden también ser salinos. Los suelos
salino/sódicos se caracterizan por tener una saturación de Na mayor al 15% de la fase de
inter- cambio, una alta CE y un pH igual o menor a 8.4. Su recuperación es igual a la de los
suelos sódicos.
Niveles de Tolerancia
Las partículas que tienen cargas opuestas se atraen entre ellas, mientras que
partículas con la misma carga se repelen. Debido a la química de las partículas de suelo,
especialmente de las arcillas y de la materia orgánica, sitios de cargas negativas se
desarrollan sobre sus superficies. La capacidad de intercambio catiónico se refiere a
148
la habilidad que tiene el suelo de atraer y retener cationes sobre su superficie e
intercambiarlos con otros en el medio ambiente circundante. Los cationes retenidos en la
superficie se denominan iones adsorbidos.
La CIC de la arena y del limo es casi insignificante, mientras que en los suelos que
contienen apreciables cantidades de arcilla pueden tener valores relativamente grandes
de CIC. Los diferentes tipos de arcillas presentan amplias diferencias en su CIC. Las
arcillas típicas de áreas tropicales con altas pluviosidades y temperaturas, tienen CIC mucho
más bajos que las arcillas de áreas más frías y áridas.
Básicamente, hay dos tipos de arcillas que pueden estar presentes en los suelos. Una de
ellas representada por la kaolinita, tiene una CIC pequeña de
El otro tipo de arcilla, representada por la montmorillonita, tiene una CIC mucho más
grande, tal vez de 100 - 150 meq/100 g., de arcilla (mmolc/dm3). La CIC de este tipo de
arcillas es debido a la sustitución isomórfica, en la cual los iones de tamaño similar pero
de diferente magnitud de carga han sido sustituidos uno por otro cuando los cristales de
arcilla se han formado. Esto da como resultado un desbalance de cargas negativas sobre la
superficie de los cristales de arcilla, así como también en los sitios a lo largo de los bordes
rotos. En este tipo de arcilla se habla de que posee cargas permanentes y no son dependientes
del pH.
149
Un suelo franco arcilloso, con un contenido de 30% de arcilla puede tener una CIC de
meq/100 g. (mmolc/dm3 ).
Los iones fijados o adsorbidos en la superficie del suelo son fácilmente disponibles para el
crecimiento de las plantas. Ellos pueden ser intercambiados con la solución del suelo,
donde la absorción por las plantas ocurre en forma inmediata, pudiendo también tomar
directamente de la superficie por intercambio iónico con las raíces de las plantas, pero a un
grado bastante limitado.
En cualquiera de los casos, el suelo sirve como un reservorio de nutrientes para ser
utilizados durante el crecimiento del cultivo. Los iones adsorbidos o fijados por las
superficies del suelo no están sujetos a pérdidas por lavado o lixiviación como
suceden con aquellos que no están adsorbidos.
Por esta razón el nitrógeno amoniacal (NH+ 4), un catión, no es fácilmente lavado o
lixiviado del suelo, mientras que el nitrógeno nítrico (NO-3), un anión, puede ser
lixiviado con el agua de percolación.
Nutrientes como el potasio (K+ ), magnesio (Mg++ ) y cinc (Zn++) deben ser
incorporados en el suelo con el objeto de colocarlos en la zona radicular de los cultivos.
Los nutrientes no se mueven desde la superficie del suelo a la zona radicular por efecto
de la lluvia o irrigación en los suelos que contienen apreciables cantidades de arcilla y de
materia orgánica.
150
CARACTERISTICAS DE LOS CATIONES
Algunos cationes son retenidos más firmemente por los sitios de adsorción que otros.
Los dos principales criterios que determinan la fuerza de atracción entre cationes y las
partículas de suelo son el tamaño de los iones y la magnitud de la carga de ellos.
Algunos iones, llamados monovalentes, tienen una sola carga positiva mientras que otros
llamados divalentes y trivalentes, tienen dos o tres cargas positivas,
respectivamente.. Algunos iones son relativamente pequeños en diámetro mientras otros
son considerablemente grandes. En algunos casos, los iones están enlazados a las moléculas
de agua (hidratados), lo cual incrementa el diámetro efectivo del ion. Los iones más grandes
son retenidos con menor firmeza que los más pequeños. Los iones con una mayor
magnitud de carga son adsorbidos más firmemente que aquellos con menor magnitud de
carga.
Los iones de sodio (Na+ ) son relativamente grandes, debido a que ellos están
hidratados y ellos tienen una sola carga. Por lo tanto, ellos son adsorbidos muy
ligeramente sobre la superficie del suelo. Los iones de calcio (Ca++) son
considerablemente más pequeños y tienen dos cargas positivas. Por lo tanto, los
En el proceso de recuperación de los suelos sódicos, se debe aplicar yeso como enmienda
y como fuente de calcio para reemplazar al sodio de los sitios de intercambio.
Luego se aplica agua para lavar el sodio de la zona radicular. Este es un buen ejemplo de
intercambio iónico que se usa para mejorar la producción de cultivos.
Los suelos que contienen apreciables cantidades de arcilla y materia orgánica, son
generalmente más fértiles que los suelos arenosos y pobres en materia orgánica, esto está
íntimamente relacionado con la capacidad de intercambio catiónico de estos suelos.
151
CAPACIDAD DE INTERCAMBIO CATIONICO TOTAL
La CIC Total corresponde al número4 total de cargas negativas que posee el suelo. Esta
característica del suelo se la determina con la finalidad de conocer el tipo de mineral
arcilloso presente en el suelo (Kaolinita o montmorillonita), con fines
fundamentalmente de clasificación de suelos. Su determinación se la realiza
mediante la saturación de las cargas negativas con Acetato de Amonio pH7 y luego la
En muchos laboratorios se consigue la CIC Total mediante la suma de todos los cationes
analizados, utilizando una solución extractora adecuada que bien puede ser Bicarbonato de
sodio (en Ecuador) ó acetato de calcio para los suelos ácidos de Brasil. Para el caso del
sodio, se analiza en una solución de pasta saturada, extraída con bomba de succión.
La suma de todos los cationes (Ca + Mg + K + Na + H + Al), se debe hacer utilizando las
Con fines de fertilización, la CICE es el parámetro más indicado para trabajar, debido a que
corresponde a las cargas del suelo que están disponibles para los procesos de intercambio,
es decir, que están ocupados por los cationes efectivamente intercambiables, que son
Ca, Mg, K, Na y Al.
Por lo tanto:
152
C.I.C. Efectiva = Ca+Mg+K+(Na)+Al ó
C.I.C Efectiva = SB + Al
%SB = Ca + Mg + K x 100
Ca + Mg + K + Na + (H+Al)
% = ∗ 100
153
Algunos suelos distróficos pueden ser muy pobres en Ca+2, Mg+2 y K+ y presentar
contenidos de aluminio intercambiable muy alto, llegando a presentar una saturación de
aluminio mayor al 50% y en este caso los suelos son clasificados como álicos.
Al+++ intercambiable > 0,3 meq/100 ml. Ó 0,3 cmolc /dm3 y % Saturación de Al > 50%
Por estos conceptos, se puede decir que todo suelo álico es distrófico pero no todo suelo
distrófico es álico. Tomé, 1.997 Es importante anotar que existe un alto grado de
correlación entre el pH y el % SB, lo cual puede verificar la existencia de
inconsistencias eventuales en un análisis, provenientes de errores analíticos o de
digitación.
En el caso de no estar seguro, se puede inferir el valor de %SB a partir del pH, se
La CIC de un suelo puede estar completamente saturada de bases, con casi todos los sitios
de intercambio llenos con bases intercambiables (Ca, Mg, K, etc.). Este es el caso general
encontrado en regiones áridas, donde el lavado de las bases no ocurre o puede
presentarse también en suelos recién encalados ya sea con fuentes calizas o dolomíticas
En condiciones de alta humedad provocada por el exceso de lluvias, estas bases son
lavadas y reemplazadas ya sea por iones hidrógeno o iones aluminio, en este caso el
porcentaje de saturación de bases es bajo, y se crea la necesidad de realizar un encalamiento.
La salinidad del suelo se refiere al contenido de sales solubles en el mismo. Las sales
son comúnmente mezclas de cloruros, sulfatos, bicarbonatos, nitratos y boratos de
sodio, magnesio y calcio. Cualquiera sea el caso: contenido total de sales, sales
individuales o combinación de las mismas en el suelo; ellas causan un retraso en el
crecimiento de las plantas, daño en los tejidos y decrecimiento en rendimiento.
154
FUENTES DE SALES
La meteorización de las rocas a través del tiempo es el origen de las sales solubles del
suelo. Donde la lluvia es copiosa, casi todas las sales han sido lavadas del suelo, en cambio
en regiones áridas los niveles de sales son altos. Sin embargo no todos los suelos de las
regiones áridas son salinos.
El agua de riego puede ser una fuente de sales y esta es la fuente más importante desde el
punto de vista agrícola. El uso de aguas salinas provenientes de pozos de seguro producirá
efectos salinos en el suelo. Además, el agua de los ríos que se usan para irrigación
progresivamente se hace salina, conforme avanza en su recorrido conforme va
llevando las sales que han sido lavadas de los suelos en la cuenca hidrográfica. Otra
fuente de salinidad puede ser la transportada por las aguas subterráneas y se mantiene
una tabla de agua cerca de la superficie del suelo y por capilaridad ascienden las sales y se
acumulan en la zona radicular de las plantas.
Conforme se produce el incremento de las sales en el suelo, se hace más difícil para las
raíces de las plantas absorber agua. Muchos cultivos sensitivos a las sales presentan
síntomas de insuficiencia hídrica con sus hojas achurruscadas. Existe un progresivo
decrecimiento en el desarrollo y rendimiento a medida que los índices salinos se
incrementan, como se muestra en el cuadro a continuación, para el cultivo de rosa:
% DE REDUCCION 0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
Ces dS/m 1,7 2,1 2,5 3,0 3,3 3,6 3,9 4,2 4,4 4,7
Cea dS/m 1,1 1,4 1,7 2,0 2,2 2,4 2,6 3,8 2,9 3,1
155
2. La concentración alta de sales puede estar en niveles tóxicos.
4. Ocurren cambios en el pH, debido a la presencia de carbonatos (pH 8,5) o del exceso
de sodio (pH > 8,5).
La alta concentración de sodio causa la dispersión de las arcillas que taponan los poros y
da como resultado una pobre aireación y una pobre infiltración del agua.
CONDUCTIVIDAD ELECTRICA
El conductímetro consiste en dos celdas de platino, las cuales se conectan entre sí por el
agua que pasa entre ellas, de allí que mientras más concentradas están las sales en esa
solución mayor es el paso de corriente.
156
previamente se han obtenido valores de correlación entre ellos y la CEe se use un factor de
corrección.
Cuando se usan los extractores o succionadores, para obtener la solución del suelo, es
imprescindible manejar los valores de la conductividad eléctrica, con las lecturas de los
tensiómetros, previamente calibrados, para saber con qué grado de tensión el agua está
retenida en el suelo. Lo más adecuado es obtener extractos de suelo en condiciones de
capacidad de campo, ya que son los valores que más se correlacionan con los que
se pueden obtener en el laboratorio.
EXPRESION DE RESULTADOS
Para el S.I. de unidades, lo correcto es expresar en S/m (Siems por metro). Se puede
utilizar el submúltiplo dS/m (desiSiems por metro), los valores son
numéricamente equivalentes a las unidades usadas anteriormente.
1 dS/m = 1 mmho/cm.
INTERPRETACIONES
157
El exceso de sales en la zona radicular, sin considerar el tipo de especie iónica
predominante, o sea cualquiera que sea la sal, perjudica la germinación, desarrollo y
productividad de las plantas.
Eso ocurre porque a mayor concentración de la solución las raíces requieren de mayor
energía para conseguir absorber el agua, efecto osmótico, energía que será desviada de los
procesos metabólicos esenciales.
Otro radical que presenta un buen grado de correlación positiva con la CE es el SO4 que
por ser un ión muy móvil en el suelo forma sales en forma muy fácil.
Pueden existir también efectos tóxicos directos de los iones presentes en exceso. Esos
efectos están íntimamente ligados a desarreglos en el funcionamiento de los sistemas
enzimáticos de las plantas.
Usando los datos de la conductividad eléctrica del extracto de saturación se pueden hacer
las siguientes relaciones:
b) ppm = 0,64 x C.Ee x 106 (en los límites de 100 a 5.000 microS/m). c) Concentración
total de cationes en meq/l.
158
Landon (1.984) elaboró una tabla en la que se da a conocer la respuesta de las plantas a
diferentes niveles de conductividad eléctrica del extracto de saturación del suelo.
CLASE PSI
No sódicos <7
Ligeramente sódicos 7 – 10
Medianamente sódicos 15 – 20
Fuertemente sódicos 20 – 30
Muy fuertemente sódicos >30
La conductividad eléctrica del agua de riego es también medida y se la reporta como CEa,
expresada en milisiems/cm (mS/cm). El análisis del agua de riego es más complicada y
el dato de la CEa no es suficiente para determinar la calidad del agua de riego. Tanto el
suelo como el agua de riego deben ser analizados para determinar los contenidos de sales
específicas.
159
Si la naturaleza del problema radica en los contenidos altos de sales, la mayoría de las
enmiendas de suelo desempeñan un papel muy pequeño para corregirlo. Sin embargo, los
problemas de salinidad pueden estar acompañados por problemas de sodio; si este es el
caso, el uso de enmiendas dará buenos resultados.
CE (dS/m)
0-1 Excelente. No necesita lavado de sales
1-2 Buena. Apenas necesita aplicarse un 10% de agua de lixiviación
Regular. Necesita de lixiviación del orden del 15%. Pérdidas de
2-3 cosecha no superiores al 10%
Mediocre. Necesita de lixiviación de 25% con una fertilización
esmerada y un buen manejo del agua, las pérdidas de cosecha ser
3-4 del 10 al 20% o menores, según el manejo
Mala. Puede utilizarse esporádicamente y nunca como agua de riego
definitiva. Con buena fertigación puede haber pérdidas de cosecha
4-5 del orden del 20 al 30%
Muy mala. Caso de utilizarse deber ser como caso extremo y a ser
5 posible en tierras sueltas.
PH 6-8
C.E <0,8 dS/m
RAS 0–4
FÓSFORO (P) 0,005 - 5,0 ppm
POTASIO (K) 0,013 - 0,26 meq/l
CALCIO (Ca) 2,0 - 6,0 meq/l
MAGNESIO (Mg) 0,5 - 2,0 meq/l
MANGANESO (Mn) 0,5 - 2,0 ppm
Sodio (Na) 0 - 0,22 meq/l
BORO (B) 0,2 - 0,8 ppm
COBRE (Cu) 0 - 0,2 ppm
CINC (Zn) 1,0 - 5,0 ppm
HiERRO (Fe) 2,0 - 5,0 ppm
160
AlUMINIO (Al) 0 - 5,0 ppm
MOLIBDENO (Mo) 0 - 0,02 ppm
CLORO (Cl) 0 – 140 ppm
FLUOR (Fl) 0 - 1,0 ppm
SULFATOS (SO4) 0 - 8,0 meq/l
CARBONATOS (CO3 ) <2 meq/l
BICARBONATOS <1,5 meq/l
Na2CO3 <1 meq/l
- 0 - 5,0 ppm
AMONIO (NH4) Indeterminado
SALES SOLUBLES 0,2 - 1,0 dS/m
Con los datos de contenido de sales y del grado de acidez de las aguas de riego, se está en
capacidad de definir la calidad de las mismas:
Agua dura: Es la que contiene más de 300 mg/l (ppm) del ion carbonato de calcio
(CaCO3 ).
Agua suave: Contiene menos de 100 mg/l (ppm) del ion carbonato (CaCO3).
Agua suavizada: Es aquella agua dura que ha sido tratada para remover los iones
Ca++ y Mg++, los cuales pueden ser reemplazados con sodio (Na+)
161
VALORES DE CALIFICACION DE AGUAS DE RIEGO
162
CAPÍTULO III
Las formas inorgánicas del nitrógeno del suelo incluyen a: NH4+, NO3-, NO2-, N2O, NO y
nitrógeno elemental.
Desde el punto de vista de la fertilidad del suelo los más importantes son: NH4+, NO3- y NO2 -
, en cambio el óxido nitroso y el óxido nítrico son las formas del nitrógeno que se pierde en el
proceso de des nitrificación, que se verá más adelante.
Las formas orgánicas del nitrógeno en el suelo son aminoácidos, proteínas, amino azúcares y
otras formas complejas. Compuestos que se producen en la reacción del amonio con la
lignina, de la polimerización de quinonas y compuestos nitrogenados así como de la
condensación de azúcares y aminas. Otro grupo muy estable de aminoácidos y proteínas se
encuentran en combinación con arcillas lignina y otros minerales.
Hay una parte de materia orgánica en el suelo (como los residuos frescos de las cosechas) que
se descompone mediante una serie de reacciones de manera más o menos rápida y otra que es
relativamente estable, que no se descompone rápidamente a la que se denomina humus. La
cantidad de humus depende de la proporción del carbono respecto del nitrógeno (C: N). La
relación C: N de la materia orgánica estable es aproximadamente de 10:1. Como regla
general, cuando en los materiales orgánicos la relación C: N es mayor de 30 hay
inmovilización del nitrógeno durante el proceso de descomposición inicial.
163
El nitrógeno es necesario para la descomposición de la materia orgánica por lo
microorganismos heterótrofos del suelo y si el material orgánico que se descompone tiene
poco nitrógeno en relación al carbono presente (paja de trigo, tallos de cereales maduros), los
microorganismos utilizan el amonio o nitratos presentes en el terreno. Este nitrógeno permite
el rápido crecimiento de los microorganismos que proporcionan material con carbono al
suelo. (Figura 3.1)
El cultivo continuado con el uso adecuado de fertilizantes, junto con el retorno de residuos de
la cosecha puede mantener o incluso aumentar el nivel de materia orgánica. En un suelo es
importante el contenido de materia orgánica porque mantiene una buena estructura en los
suelos de textura fina y aumenta la capacidad de intercambio catiónico, con lo cual se reduce
la pérdida por lixiviación de elementos como el potasio, el calcio y el magnesio. Además
sirve como reservorio para el nitrógeno del suelo y mantiene la humedad.
Fuentes naturales:
164
Formas de N en el suelo
•Mineralización de la M.O.
•Nitrificación
•Denitrificación
•Volatilización
165
orgánicos, y el de nitrificación lo realizan bacterias autótrofas, que obtienen su energía de la
oxidación de sales inorgánicas y el carbono del CO2 de la atmósfera que las rodea.
Proceso de aminización:
Proceso de amonificación
En el proceso de amonificación las aminas y los aminoácidos liberados son utilizados por
Proceso de Nitrificación
166
Colectivamente se les denomina bacterias nitrificantes o nitrobacterias a las Nitrosomonasy a
las Nitrobacter. Debido a que normalmente el nitrito se transforma en nitrato con mayor
rapidez que el que se produce, los niveles de nitrito en los suelos suelen ser muy bajos en
comparación con los de nitrato.
Los factores que afectan al proceso de nitrificación son: el suministro del ión amonio, la
población de organismos nitrificantes, el pH, la aireación, la humedad la acidez de
intercambio del suelo y la temperatura del mismo.
DESNITRIFICACIÓN:
Desde un punto de vista ambiental, es deseable que se libere N2 ya que se reinicia el ciclo del
N2 en el agroecosistema. Sin embargo, muchas veces se liberan oxidos de N que promueven
el deterioro ambiental.
Los factores que inciden directamente en las cantidades de N perdidas por desnitrificacion
son:
• Contenido hídrico del suelo : O o que es lo mismo contenido de oxígeno, recordar que los
poros del suelo, pueden tener aire cuando el suelo esta seco, o agua, cuando esta saturado. Es
el principal factor influyente ya que regula las condiciones de óxido-reducción en el suelo:
Con elevados contenidos hídricos mayores al 70 – 80% del agua útil durante periodos
prolongados son predisponentes a la ocurrencia de destrificacion.
Temperatura: Todo proceso biológico está promovido por la temperatura. Por ende, son
esperables mayores pérdidas en primavera-verano que en otoño-invierno.
168
Textura del suelo: suelos arcillosos poseen mayores pérdidas desnitrificantes que los
arenosos,ya que en los primeros, tanto la actividad biológica como la fertilidad química del
suelo suelen ser mayores. En general, suelos más arcillosos poseen mayores niveles de
materia orgánica y por ende mayor actividad microbiana (más sustratos carbonadas)
pH: una reacción del suelo neutra o ligeramente alcalina promueve la desnitrificación por el
efecto de la actividad biológica bacterianana del suelo.
En suelos con pHs mayores que 6.3, cuando se agrega urea al suelo, ésta sufre un proceso de
hidrólisis, generando como productos de la reacción amonio (NH4 +) y aniónbicarbonato
(HCO3)
Reacciones de la urea
El proceso de volatilización se encuentra afectado tanto por factores del suelo como por el
manejo de los fertilizantes. En la tabla 3.1 se enumeran los factores que mayor impacto tienen
sobre la volatilización de NH3.
Factores de suelo
Obviamente, para que ocurra la reacción inicial de hidrólisis es necesario que exista
disponibilidad de agua en el suelo. La incorporación de la urea, ya sea mediante alguna
práctica de labranza o por acción del agua de lluvia o riego, reduce el N eliminado a la
atmósfera como NH3 ya que el fertilizante es muy soluble en agua y se desplaza hacia una
zona de menor actividad ureásica.
170
salino-alcalinos) de por sí volatilizan significativamente más quesuelos agrícolas con pH
moderadamente ácidos. En suelos con mayor capacidad bufferlos cambios en el pH por efecto
del fertilizante son menores y por ende la pérdida de N por volatilización es de menor cuantía.
En cuanto a la dosis de fertilizante, cuanto mayor sea ésta, más amonio será producidoy por lo
tanto la volatilización del NH3 será cuantitativamente más significativa. El método de
aplicación debe ser considerado sobre todo en sistemas de siembradirecta, debido a la gran
actividad ureásica de los rastrojos en superficie. No son recomendables las aplicaciones de
urea al voleo en cobertura total, sobre todo si existen otros factores predisponentes a la
volatilización. En estos casos se pueden utilizar fuentes que volatilicen menos como el UAN
o que prácticamente no volatilicen, como los fertilizantes que contienen N como nitratos o
amonio en suelos con pH moderadamente ácidos.
El nitrógeno en las plantas hace que la planta se desarrolle bien y que tenga un intenso color
verde en sus hojas, por ser constituyente de la clorofila. Los cultivos bien fertilizados con
nitrógeno tienen rendimientos mayores..
Las principales funciones que cumple el nitrógeno en el interior de las plantas son:
171
- Componente de proteínas y otras sustancias proteicas.
La deficiencia de nitrógeno:
Fósforo El fósforo es, como el nitrógeno, un importante nutriente de las plantas, pues forma
parte estructural de compuestos fundamentales para su fisiología y además desempeña una
función única y exclusiva en el metabolismo energético de la planta; sin su intervención no
sería posible la fotosíntesis. Una correcta nutrición fosforada tiene efectos muy positivos en el
buen desarrollo radicular y mejora la resistencia a plagas y enfermedades. La deficiencia de
fósforo afecta al metabolismo vegetal, la deficiencia de fósforo se manifiesta en las hojas por
coloraciones rojizas.
Funciones del fósforo en las plantas: Favorece el desarrollo de las raíces al comienzo de
lavegetación. Favorece el ahijamiento en los cereales, hace que sus cañas sean más resistentes
al encamado y forma mayor número de espigas. Imprescindible para la fotosíntesis.
172
La deficiencia de fósforo en los suelos produce los siguientes síntomas en la planta:
Coloraciones moradas. Floración tardía y deficiente. Fallos en la fecundación y cuajado del
fruto. Retraso en la maduración. Escaso vigor.
Potasio El potasio es uno de los nutrientes que en mayores cantidades requieren las plantas,
que incluso pueden llegar a consumirlo en exceso sin que se traduzca en mayores
rendimientos.
Se consideran cultivos muy exigentes en potasio aquellos que acumulan hidratos de carbono
en órganos de reserva. La deficiencia se manifiesta al principio en una cierta clorosis en las
hojas adultas, en cambio, un abundante suministro de potasio facilita el mayor crecimiento y
vigor de la planta.
Funciones del potasio en la planta: Aumenta el peso de los granos y frutos, haciendo a éstos
más azucarados y de mejor conservación. Estimula la formación de flores y frutos.
Regula las funciones de la planta. Aumenta la eficiencia del nitrógeno. Aumenta laresistencia
a las heladas al aumentar la concentración salina de las células.
Los síntomas más generales de déficit de potasio en las plantas son: Hojas con tonalidad
verde azulada, márgenes resecos y manchas pardas.Menor resistencia a las heladas y a la
sequía. Menor resistencia al ataque de hongos. Menor calidad de granos.
Amonificación
La amonificación es la conversión a ion amonio del nitrógeno que en la materia viva aparece
principalmente como grupos amino (-NH2). Los animales, que no oxidan el nitrógeno, se
deshacen del que tienen en exceso en forma de distintos compuestos. Los acuáticos producen
directamente amoníaco (NH3), que en disolución se convierte en ionamonio. Los terrestres
producen urea, (NH2)2CO, que es muy soluble y se concentra fácilmente en la orina; o
compuestos nitrogenados insolubles como la guanina y el ácido úrico, que son purinas, y ésta
es la forma común en aves o en insectos y, en general, en animales que no disponen de un
suministro garantizado de agua. El nitrógeno biológico que no llega ya como amonio al
sustrato, la mayor parte en ecosistemas continentales, es convertido a esa forma por la acción
de microorganismos que ayudan en la descomposición.
173
Nitrificación
El C lo consiguen del CO2 atmosférico, así que son organismos autótrofos. El proceso fue
descubierto por Sergéi Vinogradski y en realidad consiste en dos procesos distintos, separados
y consecutivos, realizados por organismos diferentes:
–.Lo realizan bacterias de, entre otros, los géneros Nitrosomonas y Nitrosococcus.
Desnitrificación
El proceso sigue unos pasos en los que el átomo de nitrógeno se encuentra sucesivamente
bajo las siguientes formas: nitrato → nitrito → óxido nítrico → óxido nitroso → nitrógeno
molecular
174
Expresado como reacción redox:
Volatilización:
La pérdida de nitrógeno (N) por volatilización del gas amoníaco (NH3) puede ser la principal
causa de la baja eficiencia de algunos fertilizantes amoniacales. Dichas pérdidas son el
resultado de numerosos procesos químicos, físicos y biológicos, cuya magnitud es afectada
por factores de ambiente, suelo y manejo tales como temperatura, pH del suelo, capacidad de
intercambio catiónico (CIC), materia orgánica, cobertura y calidad de residuos en superficie,
viento, tensión de vapor.
• Fijación simbiótica (Bacterias del género rizobium) 300 a 800 Kg N /ha / año
175
“revolución verde” en agricultura, esta práctica se ha sustituido por la utilización de
fertilizantes químicos a pesar del elevado alto coste energético y ambiental que supone.
Cuando falta oxígeno, como ocurre en terrenos encharcados, algunas bacterias son capaces de
respirar sustituyendo el oxígeno libre del que no disponen en esas condiciones, por el nitrato o
nitrito, formándose óxidos de nitrógeno y nitrógeno molecular, gases que escapan a la
atmosfera en un proceso de desnitrificación o reducción no asimiladora de nitrógeno, o en
contraposición con la reducción asimiladora efectuada por las nitrato reductasas de las
plantas.
El balance del nitrógeno en el suelo es la relación que existe entre ganancias y, pérdidas
deeste elemento, y viene determinado por el clima, tipo de suelo y, en su caso,
actividadesagrícolas. Las ganancias están representadas por las fijaciones biológica y
espontánea, ypor el abonado nitrogenado. Las pérdidas lo están por los procesos de
desnitrificación, lavado de nitratos y volatilización de amoníaco, a los que hay que añadir en
sueloscultivados las pérdidas que significan la exportación de las cosechas, que, en conjunto
ypara las tierras cultivadas, suponen una extracción de más de 200 millones de Tm. de
nitrógeno al año, cantidad muy superior a la incorporada por vía natural. La ribulosa-
difosfato-carboxilasa es la enzima que cataliza la fijación de dióxido de carbono, pero
también cataliza una reacción colateral-función oxigenasa- en la que se sintetiza el substrato
inicial de la fotorrespiración, por lo que una alteración de esta enzima, produciría una
176
disminución o desaparición de la actividad oxigenasa, mediante la manipulación de los genes
que codifican su síntesis, constituye una alternativa prometedora. Por otra parte, la producción
de fotosintato requiere ATP y poder reductor.
En último término el reductor deriva del agua, con lo cual una manipulación adecuada de los
genes descriptores de agua (genes lit, de watersplitting) conducirá a un mayor poder reductor
y a un incremento en la producción de fotosintatos.
Otra forma de incrementar la fijación de nitrógeno consiste en conseguir que las plantas que
forman simbiosis fijadoras puedan cultivarse con buenos rendimientos en condiciones
extremas. A este respecto presentan gran interés los genes osmorreguladores (osm) que
proporcionan protección frente a gran variedad de tensiones ambientales, tales como
sequedad, calor o exceso de sales, y que funcionan en numerosas bacterias.
La resistencia de las plantas a las diferentes plagas y pesticidas posee también un evidente
efecto indirecto sobre la fijación de nitrógeno. Por manipulación genética se puede transferir,
por ejemplo, un segmento cromosómico determinante de una resistencia a un hongo o a un
insecto de una especie vegetal que lo posee, a otra sensible, como la resistencia a la roya de
la especie silvestre Agropyrumelongatum, a trigo. Asimismo, otra posibilidad de la ingeniería
genética es la de mejorar la calidad nutritiva de las proteínas de las leguminosas. Para ello, la
localización cromosómica de los genes que codifican estas proteínas permitirá diseñar
experimentos de integración de caracteres seleccionados, presentes en otras especies
vegetales, cuya expresión en plantas de mayor interés agrícola, determinará la síntesis de
polipéptidos de mejor calidad. Finalmente, cabe incluir en este apartado los genes de
utilización de celulosa (cut, de celluloseutilization) y los genes de desnitrificación (den). La
celulosa representa una de las mayores fuentes de material orgánico del suelo,
proporcionando energía a bacterias heterótrofas fijadoras de nitrógeno libre; además, el
acoplamiento dentro de una misma bacteria de los genes cut y nif permitiría la conversión de
los desechos celulósicos, en alimentos, energía y productos químicos.
Por su parte, los genes den, son importantes en la fertilidad del suelo, donde anulan la
actividad de los genes de fijación de nitrógeno, con el resultado de que se necesitarían
mayores niveles de fertilizantes nitrogenados para compensar las pérdidas.
Mención aparte merecen los intentos de obtener un modelo químico capaz de imitar la
función reductora de la dinitrogenasa, y con tal fin se han conseguido construir complejos
químicos con molibdeno y hierro capaces de reducir la molécula de nitrógeno, aunque hasta el
177
momento de baja eficiencia. Sin duda, este fascinante campo puede ofrecer resultados
espectaculares en el futuro.
Al margen de todo lo anterior hay que considerar que en este tipo de investigaciones existe
siempre una partida de signos negativos, ya que cabe la posibilidad de que se llegue a
desequilibrar el funcionamiento del ciclo biogeoquímico del nitrógeno. En realidad, puede
decirse, con bastante seguridad, que antes de la fabricación a gran escala de fertilizantes
químicos y del extensivo cultivo de plantas que forman simbiosis con microorganismos
fijadores, la cantidad de nitrógeno extraído de la atmósfera por procesos naturales de fijación
estaba prácticamente compensada por la cantidad devuelta a la misma por desnitrificación y
volatilización del amoníaco. En la actualidad, sin embargo, existe un desequilibrio a favor de
la fijación, cuya cuantía puede ya superar en un 10 por ciento a la cantidad de nitrógeno
devuelta a la atmósfera.
178
del NO3- es convertido en una forma de energía superior, nitrito, (NO2-), luego en una mayor
forma de energía, amonio, (NH4+) y finalmente en nitrógeno amídico en la glutamina. Este
proceso consume 12 equivalentes de ATPs por molécula de nitrógeno.
Por otra parte, las leguminosas que presentan una forma simbiótica con bacterias que
transforman el nitrógeno atmosférico (N2) en amonio; proceso denominado, fijación biológica
del nitrógeno junto con la subsecuente asimilación del amonio en los aminoácidos, consume
16 ATPs por nitrógeno.
Las plantas asimilan la mayor parte del nitrato absorbido por sus raíces en compuestos
orgánicos nitrogenados. La primera etapa de este proceso es la reducción de nitrato a nitrito
en el citoplasma. La enzima nitrato reductasa (NR) cataliza la siguiente reacción:
Dado que el nitrito formado es altamente reactivo, siendo un ión potencialmente tóxico, las
células vegetales lo transportan inmediatamente después de ser generado por la reducción del
nitrato desde el citoplasma a los cloroplastos en las hojas, y a los plástidos en las raíces. En
estas organelas la enzima nitrito reductasa reduce el nitrito a amonio, siendo la reacción que
cataliza:
179
NO2-+ 6 Fdred+ 8 H+NH4+ + 6 Fdox+ 2 H2O
Figura 3.2: Acción enzimática en la reducción de NO3 a NO2 y del NO2 a NH4.
Las células vegetales evitan la toxicidad del amonio incorporándolo rápidamente en los
esqueletos carbonados para formar aminoácidos El paso primario de esta incorporación
involucra las acciones secuenciales de la glutamina sintetasa y la glutamato sintetasa. La
glutamina sintetasa (GS) combina el amonio con glutamato para formar glutamina:
La NADH-GOGAT está ubicada en los plástidos de los tejidos no fotosintéticos tales como
las raíces o las células vasculares de hojas en desarrollo. En las raíces la NADH – GOGAT,
está involucrada en la asimilación del NH4+ absorbida desde la rizosfera; en las células
vasculares de las hojas en desarrollo la NADH – GOGAT asimila la glutamina translocada
desde las raíces o de las hojas senescentes. La Fd – GOGAT se encuentra en los cloroplastos,
tiene una masa molecular de 165 kDa y participa del metabolismo del nitrógeno de la
fotorespiración
180
En la cual el grupo amino del glutamato es transferido al aspartato. Las aminotransferasasse
encuentran en el citoplasma, cloroplastos, mitocondrias, glioxisomas y peroxisomas. Las
aminotransferasas localizadas en cloroplastos tienen un importante rol en la síntesis de
aminoácidos, debido a que hojas de plantas con cloroplastos aislados expuestos a dióxido de
carbono marcado, rápidamente incorporan este carbono en glutamato, aspartato, alanina,
serina y glicina.
* Absorción iónica
* Fotosíntesis y Respiración
• Herencia
‐ El nitrógeno es el elemento químico más importante. El nitrógeno en las plantas hace que la
esta se desarrolle bien y que tenga un intenso color verde en sus hojas (constituyente de la
clorofila). Los cultivos bien fertilizados con nitrógeno tienen rendimientos mayores.
181
sus funciones biológicas. Esencial para la formación de la clorofila y la actividad
fotosintética. Alarga las fases del ciclo de cultivo.
Participación en la cosecha
El N como NO3
• Cuando el suelo está seco asciende a la superficie y no puede ser alcanzado por las raíces.
• El NH4 requiere de una metabolización muy rápida para evitar su acumulación en la savia.
182
Tabla 3.2: Fuentes de Nitrógeno
Al salir del diente inyector el amoniaco se expande gasificándose y varios procesos químicos
comienzan tan pronto se inyecta el amoniaco en el suelo. Uno de ellos es la conversión del
amoniaco gas en ion amonio (NH4+) cuando el amoniaco se pone en contacto con el agua,
partículas de arcilla y componentes orgánicos del suelo. En el proceso de conversión de NH3
en NH4+, la molécula del amoniaco acepta un ion hidrógeno (H+) de una fuente del suelo y
se transforma en ion amonio. La formación de ion amonio convierte el gas amoniaco que es
tóxico para la materia viva en una forma que puede ser usada por los microorganismos y las
183
plantas superiores. Las moléculas de amoniaco o el ion amonio formado por el amoniaco con
agua, arcilla o materia orgánica son atraídas por las partículas minerales de suelo
inmediatamente después de la inyección del amoniaco. El amoníaco puede ser absorbido en
suelos por los minerales o por los coloides del suelo por varias reacciones sumamente
importantes, desde el punto de vista del uso de los fertilizantes, por dos razones:
Los mecanismos de absorción del amoniaco en reacciones químicas fijan el amoniaco muy
fuertemente. La unión producida en la absorción química es de naturaleza electrostática ya
que las superficies por partículas de arcilla están cubiertas con cargas negativas. El ion se
sujeta a esta superficie por su carga positiva. El amoniaco o más correctamente los iones
amonio (NH4+), sujetos, se consideran comprendidos en la provisión de nitrógeno disponible
en el suelo.
En terrenos con pH ácido el ion amonio se fija sobre todo en los materiales arcillosos. Lo
mismo ocurre en terrenos alcalinos aunque en este caso la fijación sobre la materia orgánica
asume una notable importancia. En los terrenos ricos en cal el fertilizante se fija mediante una
relación de cambio con los iones Ca que en el momento de la inyección se encuentra sobre el
complejo absorbente.
Una vez inyectado y sobre todo cuando el amoniaco queda fijado no hay ningún riesgo de
pérdida ni por la lluvia ni por la simple evaporación. En el caso de los abonos que se dejan
sobre el suelo las pérdidas por evaporación del nitrógeno amoniacal son siempre mayores en
cualquier otro que en el amoniaco anhidro porque el enterramiento de este es instantáneo.
185
CAPÍTULO IV.
FÓSFORO EN EL SUELO.
Desde el punto de vista del material que aporta el nutriente, separaremos al fósforo del suelo en
dos grandes formas: fósforo orgánico y fósforo inorgánico
FÓSFORO ORGÁNICO
La principal fuente está constituida por los residuos vegetales y animales que se adicionan al
suelo. Los compuestos fosfatados más importantes de la materia orgánica son núcleoproteínas,
fosfolípidos y fosfoazúcares.
FÓSFORO INORGÁNICO
Fósforo soluble: son las formas aprovechables para las plantas en forma inmediata, es decir
son fosfatos en la solución del suelo. Su concentración es muy débil y fluctúa entre 0,2 y 0,5
mg/lt, o sea 200 a 400 gr/ha en 30 centímetros de espesor. En suelos muy ricos la
concentración puede llegar hasta 1 mg/lt (1 ppm) y en suelos pobres a 0,1 mg/lt.
Generalmente es una concentración constante y permanece así aunque varíe la relación suelo-
agua.
Este fósforo lábil puede estar adsorbido directamente por los bordes de las arcillas (cuando
están tienen cargas positivas como la caolinita a bajos valores de pH), o por uniones que usan
al calcio como puente (en las arcillas de tipo 2:1). También puede estar adsorbido por los
óxidos e hidróxidos de hierro y aluminio, que tienen un poder de fijación mucho mayor que el
de las arcillas.
186
Fósforo insoluble: es el que está formando parte de los minerales primarios y secundarios, y
constituye la gran reserva de fósforo inorgánico en el suelo. La insolubilización se puede
deber a la precipitación como fosfatos cálcicos en medio alcalino, o como fosfatos de hierro y
aluminio en medio ácido. Tanto en suelos ácidos como alcalinos, el fósforo tiende a sufrir una
cadena de reacciones que producen compuestos fosforados de baja solubilidad.
Por su tendencia a reaccionar dando formas fosforadas no disponibles para las plantas es que
debe ser considerado uno de los elementos más críticos.
Aunque las plantas lo contienen en menor cantidad que el nitrógeno, potasio, y calcio, tiene
como factor limitativo más importancia que el calcio y quizás más que el potasio
La fuente original de fósforo es el material madre, constituido por rocas fosfatadas, tales
como apatita, fluorapatita, vivianita, etc.
La cantidad de fósforo total de la capa arable de un suelo agrícola (suma del fósforo orgánico
e inorgánico) no está relacionada directamente con la disponibilidad
El fósforo al igual que el nitrógeno cumple un ciclo en la naturaleza con la diferencia que
mientras el nitrógeno es un elemento muy móvil en el suelo, el fósforo es poco móvil pero
altamente reactivo, por lo que es fácilmente fijado a los coloides o es fácilmente precipitado
en la solución del suelo en función del pH de la misma y la presencia de iones de Al, Fe,
Mn, Ca o Mg. (Figura 4.1)
187
Figura 4.1 Ciclo del fosforo en el suelo-plnata
0.05 mg P kg-1en la solución del suelo (contenido de agua 20%) significa que en los primeros
20cm habrá 25 g P por hectárea
En la solución del suelo la cantidad de fosforo que se necesita es apenas 1 ppm como
máximo, por lo tanto no es de mirar la cantidad de fosforo que coloco si no la frecuencia
con la que el fosforo está formando parte de la solución del suelo, existe el equilibrio en la
solución pero se debe reponer innumerables veces en el ciclo del cultivo, el fosforo sale de
la matriz y empieza a introducirse en la solución del suelo en forma permanente, continua
en concentraciones relativamente bajas, el fosforo llega a la zona radicular por efecto de
difusión lo que quiere decir que el fosforo va de una zona de concentración alta de
fosforo hacia una zona de concentración baja de fosforo que está alrededor del sistema
radicular y porque llega alrededor del sistema radicular porque ahí es donde se encuentra la
menor concentración de fosforo, y esto se debe porque la planta de esta nutriéndose y
absorbe todo el fosforo que llega cerca del sistema radicular, por lo tanto siempre existirá
188
una zona más baja de concentración de fosforo por efecto de difusión, por eso en cualquier
fertilización que se haga no se debe dejar de poner fosforo para poder tener siempre un
efecto positivo, esta reposición de fósforo es la buena nutrición de la planta con fósforo, en
otras palabras siempre se debe poner fosforo a la planta pero en pequeñas cantidades. En
los cultivos en general en el primer ciclo de cultivo por ejemplo se necesita 100 Kg/ ha de
fosforo coloco por lo menos un 60 %, y hasta cuando la necesidad se estabiliza, el otro 40
% restante se puede colocar en la siguiente fase. La concentración ideal de P en la solución
del suelo varía entre 0.2 y 0.3 ppm para la mayoría de los cultivos
Las plantas absorben el fósforo casi exclusivamente en la forma inorgánica, que está en la
solución del suelo. De esta manera, el P inorgánico disuelto satisface la demanda de los
cultivos por unas pocas horas durante el período de crecimiento, aún en suelos con un buen
abastecimiento de este nutriente. Por lo tanto, el fósforo deprimido en la solución debe ser
repuesto constantemente a partir de formas fácilmente extraíbles, tanto orgánicas como
inorgánicas, donde la desorción - disolución y mineralización – inmovilización son
procesos críticos en el abastecimiento de fósforo (Beck y Sánchez 1994).
FIJACION DE FOSFORO
La fijación de fósforo en el suelo es un proceso natural que puede llevar a una deficiencia
de este elemento aun cuando el contenido total de fósforo en el suelo pueda ser alto. La
fijación fosfórica es un proceso específico de adsorción que ocurre principalmente en los
suelos con altos contenidos de óxidos de hierro -hematita, goethita- y óxidos de
aluminio -gibsita- y minerales arcillosos -principalmente caolinita . Estos suelos son
típicos de zonas tropicales y subtropicales. Se verifica también en suelos derivados de
cenizas volcánicas (andisoles). A un bajo nivel de pH tienden a fijar los fosfatos y
aumentando el pH del suelo por medio de la aplicación de cal y materia orgánica, la
adsorción específica del fosfato se reduce.
El movimiento del fosforo en el suelo es muy poco ya que es un elemento poco móvil, se
moviliza más en suelos arenosos que en suelos arcillosos debido a que el suelo arenoso
posee poros más grandes y en mayor número que el arcillosos, se mueve por difusión, es
un proceso lento y de corto rango, depende de la humedad y de la temperatura del suelo, las
temperaturas bajas le vuelven al fosforo mas poco móvil de ahí que las acumulaciones del
189
fosforo las encontramos en las zonas bajas del suelo, a medida que subimos en altitud la
disponibilidad de fosforo es más bajas. Un análisis de suelo nos ayuda a saber en qué
concentración de fosforo el suelo posee para que la cantidad de fosforo no sobre pase los
300 ppm, ya que no es lo que la planta necesita y se vuelve un obstáculo para la absorción
de algunos micronutrientes como es el caso del zinc que no es asimilado por la planta en
altas concentraciones de fosforo, el hierro si el pH baja el fosforo con el hierro formarían
fosfatos de hierro y loa planta no absorberá ni fosforo ni hierro, por lo tanto una adecuada
temperatura 14 a 16 grados seria la adecuada para lo absorción del fosforo.
La concentración ideal del fósforo en el solución del suelo varía entre 0.2 y 0.3 ppm para
la mayoría de cultivos
La extracción utilizando la jeringa es mejor en suelos sueltos, que contiene gran cantidad
de materia orgánica, en suelos franco arenosos o arenas francas y suelos arenosos este
método de extracción de la solución del suelo funciona perfectamente, cuando se trabaja
con suelos más pesados es un poco más difícil.
Conectar la bomba a la manguera y succionar hasta que el vacúometro marque por lo menos
70 centibares, antes de desconectar la bomba cerrar la llave para no perder el vacío. Insertar el
emisor adosado a la línea de riego en el bidón de recolección para recibir la solución
fertilizante. Estas operaciones se deben hacer antes del riego.
Periodo de vacío: Durante las 20 a 24 horas siguientes a la operación Nº1, la solución del
suelo ingresa al interior del extractómetro producto del vacío provocado por la bomba.
190
Fig. 3.2 Estractor de solución del suelo
FIJACION DE FÓSFORO
La fijación o adsorción del fósforo en los coloides va a estar sujeto mucho al pH, tenemos
una superficie especifica esta es una superficie que va a estar en contacto directo con el
suelo, siempre se ha hablado de que un granulo grande mientras más grande es posee menor
superficie especifica por lo tanto si el granulo es menor a 2 micras o coloide forma un
cuerpo plano y tendrá mayor superficie de contacto.
Reacciones de un fosfato monomóico, aquí tenemos una fuente tenemos que es muy
higroscópico, absorbe cuando entra principalmente extrayendo el agua y empieza la
reacción, esa reacción hace que se forme el ácido fosfórico el H3PO4, alrededor del gránulo
se forma el ácido fosfórico, el pH de la solución puede llega alrededor 5.5., (Boschetti,
Quintero, Benavidezy Giuffre2001)
Si le cae un granulo de fósforo a la semilla le quema. Por eso hay que tener cuidado.
En el granulo al entrar en contacto con la solución tiene un pH de 1,5 alrededor del grano con
los ácidos como el ácido fosfórico.
Para aplicar el fosforo poner al fondo del surco tape y ponga las semillas para poner costales
en un terreno hay que saber calcular por medio de disoluciones para tener una aplicación
buena para que sean efectivas (Guo,Yost, Hue, Evenseny Silva2000).
Cuando se hace una aplicación efectiva la producción será buena en donde el fosforo actuara
de buena manera.
192
El fósforo es un elemento que estimula el desarrollo del sistema radicular y el
establecimiento temprano de las plantas. Es muy importante en la función reproductiva, por lo
que es abundante en flores y frutos.
Las plantas deben contar con este elemento para completar su ciclo normal de producción ya
que no existe otro nutriente que pueda sustituirlo.
Es el nutriente vital para la formación de semillas y, además, permite a las plantas soportar
inviernos rigurosos.
Cuando los suelos tienen deficiencia de fósforo disponible, la aplicación del fertilízante
adecuado promueve la maduración temprana de algunos cultivos (especialmente cereales) y
mejora la calidad del producto final.
Su falta es difícil de detectar en los cereales, sin embargo, en ciertas etapas del desarrollo del
cultivo puede darle un color verde oscuro con tonos morados (Guo, Yost, Hue, Evenseny
Silva2000).
Las plantas absorben el fósforo casi exclusivamente en la forma inorgánica, que está en la
solución del suelo. De esta manera, el P inorgánico disuelto satisface la demanda de los
cultivos por unas pocas horas durante el período de crecimiento, aún en suelos con un buen
abastecimiento de este nutriente. Por lo tanto, el fósforo de primido en la solución debe ser
repuesto constantemente a partir de formas fácilmente extraíbles, tanto orgánicas como
inorgánicas, donde la desorción - disolución y mineralización – inmovilización son procesos
críticos en el abastecimiento de fósforo (Guo, Yost, Hue, Evenseny Silva2000)
193
Necesidad de considerar la fracción orgánica del P en la evaluación de la fertilidad fosfatada
de los suelos
El P orgánico está compuesto por varias fracciones que varían desde las más fácilmente
utilizables por la planta hasta las más resistentes a la mineralización. Puede representar desde
un 15 al 80% del contenido total de P en el suelo, siendo normal en contar valores entre el 30
y 50% en muchos suelos. Cuando se trata de suelos pobres en fósforo, la mineralización de la
fracción orgánica, es importante en el reciclado ya que libera fósforo inorgánico a la solución,
contribuyendo a mantener un nivel adecuado de fósforo disponible para las plantas. Algunos
investigadores encontraron que la cantidad de P mineralizado en suelos de regiones templadas
puede alcanzar valores entre 5 a 20kg/ha/año, mientras que en los suelos tropicales puede
variar desde 67 a 157kgdeP/ha/año. Esto remarca la importancia que puede tener la fracción
orgánica del fósforo como fuente de fósforo disponible para las plantas y lo variable de su rol,
en función de las diferentes condiciones de suelo, de clima y prácticas de cultivo (Guo, Yost,
Hue, Evenseny Silva2000).
¿Cómo puede evaluarse la contribución del fósforo orgánico en la nutrición fosfatada del
cultivo?
Para separar las diferentes formas en que se encuentra el P en el suelo, incluyendo las
fracciones orgánicas se utiliza entre otras la determinación de laboratorio propuesta por
Hedleyetal. (1982). Con esta metodologías e pueden examinar los cambios producidos en las
fracciones de fósforo del suelo al agregar fertilizantes, y las posteriores modificaciones que
resultan de la extracción del cultivo, pudiéndose así evaluar la contribución de cada fracción:
orgánica e inorgánica, en la nutrición fosfatada de las plantas (Hedley,Stewary
CHauhan,1982).
Para responder a las preguntas habituales sobre si la fracción orgánica representa una fuente
importante para la nutrición fosfatada, se realizó un ensayo utilizando dos suelos
contrastantes de Entre Ríos: un Vertisol y un Inceptisol un arcilloso y otro franco limoso. La
experiencia comprendió cuatro tratamientos: testigo, sin el agregado de fertilizante fosfatado,
y dosis iguales de tres fuentes de fertilizante fosfatado: superfosfato triple (SFT), Roca
Fosfórica y Cama de pollo. La dosis igual a 240 mg de P de cada fuente se aplicaron a cada
maceta, 90 días antes de la siembra de lotus, que se dejaron crecer por un período de 9 meses
durante el cual se hicieron un total de 8 cortes
194
A la siembra, y cada vez que se hacían los cortes para medir la producción se tomaron
muestras de suelo para evaluarla distribución en las diferentes fracciones del P. Así se
determinó el fósforo orgánico (Po) e inorgánico (Pi) fácilmente disponible, que es el más
asociado a la nutrición de las plantas, fósforo moderadamente lábil que es la fracción que se
aprovecha en los cultivos siguientes, y el fósforo residual que prácticamente no aprovechan
las plantas (Hedley,StewaryChauhan1982).
Figura 4.2.Extracción acumulada de fósforo por el cultivo de Lotus para cada uno de los
tratamientos. (a) Suelo Vertisol (b) Suelo Inceptisol.
195
Estos parámetros de producción, rendimiento final y fosforo absorbido por la planta,
estuvieron estrechamente relacionados con las fracciones de Pen los distintos momentos
evaluados, permitiendo explicar los cambios observados. La aplicación de los distintos
fertilizantes aumentó inmediatamente los niveles de fósforo en la fracción inorgánica, pero
luego disminuyeron marcadamente a lo largo del tiempo que duró la experiencia. (Figura4.2).
La excepción fue la fracción residual que no mostró diferencias por efecto delos tratamientos
y permaneció sin modificaciones.
Las fracciones inorgánicas más fácilmente disponibles estuvieron muy correlacionadas entre
sí y con la extracción de P por las plantas, lo que indicaría que los distintos compartimientos
de creciente disponibilidad forman un "continuum" y que la variación en los contenidos de
fósforo de cada una de ellas estuvo muy relacionada con la nutrición fosfatada del cultivo.
También se observó una correlación positiva y significativa entre el fósforo orgánico del
suelo con la concentración de fósforo y con la producción de biomasa de las raíces, lo que
evidencia que el aumento de las fracciones orgánicas estuvo asociado a la producción de
raíces (Linquist, SingletonyCassman1997).
Con el agregado de las diferentes fuentes fosfatadas, las fracciones que mostraron su
contribución al fósforo disponible fueron las más inmediatamente disponibles. Ellas
reflejaron marcadamente el efecto de la remoción del fósforo por las plantas, constituyendo
los reservorios dinámicos en los suelos estudiados, a diferencia de lo que ocurre en suelos
más evolucionados como Ultisoles y Oxisoles, (suelos rojos lateríticos) donde el principal
destino del fósforo soluble incorporado con el fertilizante es fijado en fracciones desde donde
el fósforo es disuelto para cubrir los requerimientos de las plantas.
• La deficiencia de Fósforo suele comenzar en las hojas inferiores más viejas, por tratarse de
un elemento altamente móvil en la planta, al igual que el nitrógeno y el potasio.
•Hojas con un verde oscuro apagado que adquieren luego un color rojizo o púrpura
característicos y llegan a secarse.
196
•Además, el número de brotes disminuye, formando tallos finos y cortos con hojas pequeñas.
197
CAPÍTULO V.
EL POTASIO EN EL SUELO.
El potasio es uno de los elementos requeridos en grandes cantidades por las plantas. Se
encuentra en el suelo en cantidades variables y es absorbido por las plantas en forma del ión
K+. El contenido de potasio de los suelos y de los fertilizantes se expresa en forma de K2O,
tomando en este caso el nombre de potasa. Por lo general, los suelos contienen más potasio
que cualquiera de los otros nutrientes considerados como mayores para las plantas y la mayor
parte se encuentran en forma de silicatos insolubles como feldespatos y micas. En suelos muy
arenosos el potasio se infiltra aunque no tan rápidamente como el nitrógeno en forma de
nitratos. En suelos pesados o arcillosos la infiltración es lenta, ya que las partículas finas de
estos suelos tienen la propiedad de adsorber física y químicamente el potasio.
Según Navarro G. (2003), el potasio presente en los suelos aparece por desintegración y
descomposición de las rocas que contienen minerales potásicos. Los minerales que se
consideran generalmente como fuentes originales de potasio son los feldespatos potásicos:
Si3O3AlK, la moscovita: (SiO4)3H2Al3K, y la biotita: (SiO4)3Al2(MgFe)2(HK)2. La
disponibilidad de potasio en estos minerales, aunque baja, es del orden de biotita > moscovita
> feldespatos potásicos.
El potasio se halla también en el suelo bajo la forma de otros minerales como silvita: CIK,
silvinita CIK. CINa, carnalita: CIK. Cl2Mg. 6H2O, o kainita: inter estratificados, en los que
dos o más de los tipos precedentes pueden hallarse en la misma partícula.
Junto a este potasio mineral hay que incluir también en el procedente de la descomposición de
los restos vegetales y minerales.
Al igual que los dos elementos conocidos como macros, nitrógeno y fósforo, el potasio
también sigue un ciclo en la naturaleza, aunque es mucho más sencillo, debido a que es el
198
único elemento que no forma parte de ningún órgano de las plantas sino que se encuentra
formando parte de su torrente circulatorio.
Los feldespatos formados por ortoclasas y microclines cuya fórmula general es KAlSi3O8, se
encuentran principalmente en las fracciones de limo y arena, debido a la intemperización del
material parental. En los suelos altamente meteorizados se tiene muy poca ortoclasa y
microclines.
En las micas, conformadas por Muscovita y Biotita con un grado de estabilidad mayor en la
primera que en la segunda, el potasio se encuentra como componente de ellas. En el caso de la
Biotita, el hierro forma parte de su estructura, el mismo que causa una ligera fuerza en la
misma y cuando entra en el proceso de oxidación ayuda al rompimiento de ésta. Estos
minerales se encuentran principalmente en las fracciones de limo y arcilla.
En las micas arcillosas, como es el caso de los minerales Illíticos, que es una arcilla específica
que contiene potasio (IIlita), este elemento se encuentra en cantidades bastante considerables,
formando parte de materiales parentales poco meteorizados, en especial de las zonas
templadas. La clase de material parental determina en gran parte, la cantidad de potasio en el
suelo. El potasio en la corteza terrestre se encuentra en aproximadamente un 2,5 %, siendo el
contenido de potasio mayor en las rocas ígneas que en las sedimentarias, de allí que los suelos
derivados de cenizas volcánicas son ricos en potasio. El contenido de potasio varía en los
suelos generalmente entre 0,04 y 3 %; en casos excepcionales como en suelos alcalinos, el
contenido de potasio puede llegar a más de 6 %. El potasio que se presenta en los suelos
asociados a los silicatos, o sea el potasio estructural, representa la mayor parte del potasio en
el suelo; en cambio este potasio no es disponible directamente para la planta pero participa en
los procesos dinámicos con reacciones lentas. Desde el punto de vista del crecimiento de las
plantas, las formas químicas de potasio, son de mucha importancia.
A medida que las plantas remueven el potasio disponible, la reacción se revierte y el potasio
intercambiable pasa a la solución del suelo. Como resultado existe una constante fijación y
liberación de potasio en el suelo.
Durante el proceso de meteorización física, química y biológica, las fuerzas actúan sobre el
material parental y lo fraccionan en partículas más finas, arenas, limos y arcillas.
La cantidad relativa de las fracciones arena, limo y arcilla encontrada en el suelo, depende de
la clase de material parental (areniscas, piedras calizas o micas), de donde el suelo proviene.
Son las formas de potasio que están fuertemente unidas en la fase sólida mineral.
Ambas constituyen el potasio de reserva o de reposición de los suelos. El potasio fijo es el que
se ubica en el espacio interior de las láminas de silicio. El potasio estructural que es el que
está químicamente combinado en la estructura de los minerales del suelo. Ambas formas son
denominadas no-intercambiables.
El Potasio intercambiable
200
Es la forma iónica del potasio (K+) unido a los materiales coloidales, minerales y orgánicos.
Mantiene un equilibrio dinámico con el Potasio de la solución del suelo.
(Inmediatamente disponible)
Está inmediatamente disponible y puede ser absorbido por las plantas en forma inmediata.
Las cantidades presentes son muy pequeñas, apenas una mínima porción del potasio total del
suelo se encuentra en esta forma.
Velocidad de reposición
El potasio fijo, es el que regula el abastecimiento del potasio disponible del sistema en
período de alta demanda.
201
La velocidad a la cual el potasio se vuelve disponible para las raíces es afectada por la
cantidad de Ki, K no intercambiable y por la velocidad de difusión del potasio a través del
suelo.
El movimiento del potasio en el suelo varía ampliamente y depende del tipo de suelo y en la
mayoría de los casos el potasio se mueve con limitación. El potasio puede lixiviarse en suelos
arenosos y en suelos con muy baja capacidad de intercambio catiónico, pero donde se aplican
dosis normales de fertilizante, pérdidas por lixiviación de K son extremadamente pequeñas
bajo la mayoría de condiciones.
A menos que los niveles de potasio sean muy bajos, aplicaciones anuales de fertilizantes
potásicos son preferibles a aplicaciones masivas, intentando mantener niveles altos por
algunos años, debido a la posibilidad de fijación o lixiviación, esto generalmente para cultivos
anuales o semi-perennes. Para el caso de cultivos intensivos, hortícolas o florícolas, la
aplicación frecuente de potasio es la más adecuada, en bajas dosis y con fuentes de alta
solubilidad. Si se aplica K por fertirrigación, aplicaciones diarias mantienen al cultivo en
óptimas condiciones pudiendo alcanzar rendimientos muy altos y de calidad.
El potasio fijado es aquel que cuando se añade potasio al suelo es atrapado entre las partículas
de arcilla en forma no intercambiable. El potasio puede ser fijado por la fracción de arcilla, de
manera especial por las de tipo 2:1 y entre ellas la IIlita, la montmorillonita y la vermiculita,
mediante la introducción del potasio en el hexágono formado por los oxígenos en la estructura
de los tetraedros de sílice, que forma una de las tres capas de la arcilla, en las inter láminas.
La fijación se produce porque el diámetro del espacio formado por el hexágono de oxígeno es
de 2,8 Aº y el diámetro del potasio es de 2,66 Aº, lo que hace que el potasio quede retenido en
ese espacio.
202
MECANISMO PROPUESTO PARA LA FIJACIÓN DEL K.
En los suelos ácidos el Al+3 y el Al (OH)3 actúan como sostenes y no permiten que las dos
láminas se unan. Cuando las dos láminas o capas se juntan el potasio ubicado en los orificios
mantienen las capas juntas o pegadas fuertemente, produciéndose la fijación de este elemento.
Por otra parte el espacio interlaminar de las IIlitas de 3,5 Aº sólo permite la acumulación de
iones potasio (diámetro 2,68 Aº) y de NH4 + (diámetro 2,86 Aº). Para que se produzca este
fenómeno es necesario que se deshidrate el potasio y se introduzca en el espacio interlaminar
saturando las cargas electrostáticas. El K+ y el NH4 + fijado son accesibles a la planta
solamente bajo condiciones de ausencia de otras formas disponibles de K (cambiable) del
suelo.
Poder regulador:
En general, cuanto mayor sea el contenido de arcilla, mayor será su capacidad para regular el
potasio de la solución de suelo, cuando disminuye su concentración.
El poder regulador puede ser medido por la relación capacidad-intensidad o "relación Q/I"
(Beckett 1967).
La diferencia entre un suelo bien regulado y otro pobre-mente regulado, puede ser descripta
por la isoterma, "Q/I".
203
Dinámica de la liberación potásica
Las raíces de las plantas en crecimiento, producen una rápida disminución en la concentración
de potasio de la solución del suelo cercana a ellas (Conti , 2004).
Esto genera un proceso de difusión, con liberación del Ki adsorbido por las arcillas y de la
materia orgánica.
Una agricultura intensiva, requiere una gran velocidad de reposición de potasio a la solución
del suelo y ello está ligado solo a grandes cantidades de K intercambiable.
En los suelos que poseen en su composición mineralógica un predominio de arcillas del tipo
de las illitas y esmectitas, la fertilización favorece también el proceso de fijación de potasio,
ocupando el fertilizante los lugares interlaminares.
El Potasio es tomado por las raíces de la planta como el ión K+. Las raíces
204
las arcillas o la materia orgánica, este proceso es conocido como intercepción y se asume
que aproximadamente un 4% del potasio es tomado por este mecanismo y 7% es barrido
por las raíces por el flujo del agua que se mueve hacia la raíz, mecanismo conocido
como flujo de masas.
Esta baja cantidad se debe a la poca concentración de K en la solución del suelo. El sobrante
89%, se aproxima a las raíces por el mecanismo de difusión. A medida de que las raíces
Es importante considerar que el potasio (y todos los otros nutrientes), no únicamente fluyen
a través de la pared celular de las raíces. Se requiere de energía para mover los nutrientes
dentro de la raíz. Esta fuente de energía proviene del proceso de respiración de las
raíces, de la conversión de azúcares a CO2 y agua, procesos de los cuales se libera
energía. El otro mecanismo aceptado es el del proceso de ósmosis, en donde una
solución hipotónica se mueve hacia una hipertónica, a través de las membranas de las
células.
205
EL POTASIO EN LA NUTRICION DE LAS PLANTAS
Fotosíntesis
206
Por otra parte se considera que el potasio acumulado en la superficie de los
cloroplastos, durante el proceso de fotosíntesis, penetra a su interior con el fin de
neutralizar los ácidos orgánicos y mantiene un pH estable y adecuado para el
metabolismo. En relación a la eficiencia en la captación de la luz, el potasio juega un papel
muy importante ya que durante períodos de poca luminosidad este elemento ayuda en la
asimilación de la luzaumentando el proceso fotosintético, y siendo menos necesario
cuando el período luminoso es alto o normal.
FORTALECIMIENTO DE TEJIDOS
METABOLISMO DE CARBOHIDRATOS
También existen menos azúcares y almidones disponibles para el relleno de granos o frutos,
o como en el caso de la papa y banano se produce una reducción en el peso final. Como
consecuencia de todo esto existe una exhaustiva translocación de material desde las raíces,
los tallos y hojas a las áreas reproductivas.
207
METABOLISMO DE LAS PROTEINAS
Sin un adecuado suplemento de potasio, los aminoácidos libres (los mismos que están
combinados en la planta para formar proteínas) y los nitratos solubles se acumulan en
las partes vegetativas de la planta (tales como hojas, tallos y ramas), causando una
reducción total de proteínas en la planta.
El rol del potasio en el mantenimiento de una adecuada relación del agua en la planta
es un importante factor para el adecuado funcionamiento de los procesos metabólicos y
208
fotosintéticos. Las plantas que crecen con cantidades adecuadas de potasio mantienen
niveles internos más altos de humedad en las hojas, por lo contrario bajos niveles de
potasio producen deficiencias hídricas en las hojas llegando a morir, y los tallos y
ramas se secan.
Estos problemas ocurren a pesar de tener buena cantidad de agua disponible para la planta,
pero se acentúa en condiciones secas lo que causa un “estrés” de humedad en la planta.
Las plantas que reciben adecuado potasio tienden a tener tasas más lentas de
transpiración que las plantas deficientes en este elemento. Cuando las plantas con buenos
contenidos de potasio son expuestas a vientos secos y calientes aparentemente
cierran sus estomas mucho más rápido, por acción de las células guardianas, que las
plantas deficientes en potasio. El potasio actúa como un regulador de la presión
osmótica celular, hace disminuir la transpiración y contribuye a mantener la turgencia
celular.
209
que el potasio actúa a nivel de la síntesis de las proteínas en los diferentes pasos del proceso
incluyendo la unión del RNA a los ribosomas.
210
cierre de los estomas, está regulado por la presencia de potasio y es éste el fenómeno
fisiológico que protege a las plantas durante el estrés hídrico, causado por la deficiencia
de agua. El mismo principio que se aplica en el movimiento estomatal regula los
movimientos de las hojas bien sea ritmos circadianos o respuestas a estímulos mecánicos.
Es decir, el flujo de potasio manejado por una toma de hidrógeno y el acompañamiento del
cloro producen aumentos o disminuciones del turgor en los sitios encargados de ser motor
de los movimientos. El mecanismo de carga de la sacarosa dentro del floema se
relaciona con altas concentraciones de potasio en los tubos de sieve. Se ha
establecido que la presencia de potasio contribuye notablemente a la presión
osmótica total y al ritmo de flujo de fotosintatos desde las fuentes hasta los
vertederos o sitios de demanda.
Los contenidos de potasio en los tejidos de las hojas de la mayoría de cultivos oscila entre
el 1% al 5%, en función de su peso de materia seca, tomándose como valores de
suficiencia entre 1,5% y 3% en hojas que han alcanzado recientemente su madurez.
Los contenidos de potasio son considerados deficientes cuando los valores son
menores de 1,5% o en exceso si se sobrepasan el valor de 3,0%. Cuando el K se
encuentra en exceso sobrepasa los niveles de suficiencia en 2 o 3 veces. La suficiencia de
K puede ser tan alta como 6,0% a 8% en tejidos de tallos o algunos cultivos hortícolas.
211
mayor que la de nitrógeno. Si suficientes cantidades de potasio están disponibles en el
suelo, las plantas tienden a tomar K en exceso con relación a sus necesidades. Esto ha
sido denominado “consumo de lujo”, debido a que el exceso de potasio no incrementa los
rendimientos significativamente.
En muchos casos una fertilización potásica no surte efecto debido a la absorción escasa que
puede ocurrir de calcio y magnesio, en presencia de nitrógeno amoniacal.
Una respuesta a la fertilización con potasio tiene lugar cuando el nivel del elemento en el suelo
es menor a 40 ppm, la cantidad de fósforo disponible es adecuada y la proporción con calcio
es menor que 6.
El potasio presenta mejores respuestas cuando existe un buen balance con boro.
FORMAS SOLUBLES
Debido a que el potasio no existe en formas combinadas en la planta, puede ser extraído
fácilmente ya sea de tejido fresco o seco, la concentración extraída es esencialmente
igual a la determinada por el análisis total. En algunas hortalizas se considera deficiente el
212
contenido de potasio cuando en la savia de ramas frescas y pecíolos se encuentran
contenidos menores a 2.000 ppm de K (0,2% de K) y es considerado adecuado cuando
los contenidos de potasio son mayores a 3.000 ppm (0,3% de K).
Las plantas deficientes en K son fácilmente viradas y son muy sensibles al ataque de insectos
y enfermedades. El rendimiento y la calidad del producto final decaen notablemente y
su preservación en postcosecha se reduce notoriamente.
Las plantas llegan a ser sensibles a la presencia de amonio, llegando posiblemente a una
toxicidad por NH4 +. Debido a que el K+ es móvil en la planta, los síntomas de deficiencia
primeramente aparecen en tejidos más viejos.
Al igual que para el fósforo, existen muchos métodos de laboratorio para determinar el
potasio disponible para las plantas, y ellos varían dependiendo del tipo de suelo y de sus
características, especialmente del tipo de arcilla y su capacidad de intercambio
catiónico.
213
EXPRESION DE RESULTADOS
Las unidades que se han venido utilizando en los últimos tiempos para la expresión de
resultados de potasio disponible han sido: meq K+/100 g. ó meq K+/100 ml de suelo
Para este sistema los contenidos de K disponible pueden ser expresados en una de las
Es necesario considerar que por algún tiempo más, se seguirán usando las unidades
antiguas, por lo que se hace necesario conocer las equivalencias con las unidades nuevas:
Numéricamente son equivalentes entrsí: meq K/100 ml. = meq K/100 g. = cmolc/dm3
Los valores en mmolc/dm3 son 10 veces mayores que meq K/100 ml. ó meq K/100 g.
Para el cálculo de la suma de bases o CICE (Suma de K, Ca, Mg y Na) el K debe ser
Debido a que existen numerosas soluciones extractoras para potasio disponible, el primer
paso a darse para la clasificación de los valores para generar una recomendación
de fertilización corresponde al extractante que ha sido utilizado en el análisis. En un
resultado de análisis obtenido con el extractante Mehlich o Bray, no se puede consultar una
tabla de recomendaciones elaborada en base del extractante Olsen Modificado, o de la
Resina de intercambio catiónico o viceversa. La textura y la capacidad de intercambio de
214
cationes efectiva (CICE) de los suelos, están íntimamente relacionadas, siendo que los
suelos más arenosos poseen más bajo CICE.
Por lo tanto, para consultar una tabla de recomendaciones, se puede decir que el nivel de
K intercambiable o disponible, adecuado para las plantas, debe ser más alto para suelos
arcillosos y con alta CICE, que en suelos arenosos y con baja CICE. Para el caso de no
existir para una determinada región, una separación de suelos en clases texturales, para una
clasificación de potasio intercambiable, se puede usar la relación entre el contenido de K y
la CICE, usando el concepto de porcentaje de saturación de K, así:
/
% = ∗ 100
( ) /
Este valor debe estar entre 3 y 5% para la mayoría de los cultivos, en especial para los más
exigentes en K como el caso de banano, papa, caña de azúcar, tomate, etc.
Es un producto cristalino, soluble en agua que contiene cerca del 50 al 52% de potasio
(K) (60 - 63% K2 O). Es bajo en costo y más soluble que la mayoría de las otras fuentes
potásicas. Es más concentrado que otras formas y para la mayoría de cultivos es la mejor
fuente de potasio encontrada en el mercado. Como un fertilizante líquido claro, la
máxima concentración que se puede conseguir es de cerca del 8%. En fertilizantes en
suspensión, donde la arcilla atapulgita se usa para mantener los cristales finos en
suspensión, se puede conseguir concentraciones hasta el 25% de (K). En el mercado se
puede conseguir el cloruro de potasio de coloración rojiza que es el más común, o
el de color blanco que contiene exactamente la misma concentración del 60% de K20.
SULFATO DE POTASIO
Es una fuente cristalina soluble en agua que contiene del 42 al 44% de potasio (50-53%
K2O), 18% de azufre y menos del 2,5% de cloro. Se lo produce principalmente para
satisfacer los requerimientos de mercado de un fertilizante potásico con bajos contenidos
de cloro. El sulfato de potasio es más costoso por unidad de potasio que la forma de
cloruro. Es una fuente preferida para ciertos cultivos, tal es el caso de tabaco, papa, que
debe ser usada como papa frita.
Este producto contiene 18% de potasio (22% K2O), 11% de magnesio y 22% de azufre.
Es una fuente excelente de potasio y magnesio soluble en agua y es de gran importancia en
suelos donde existe la deficiencia de magnesio.
NITRATO DE POTASIO
Contiene cerca del 13% de nitrógeno y 37% de potasio (44% K2 O). Puede provenir como
un producto del tratamiento de los salitres sólidos potásicos con el cloruro de potasio o
216
por una combinación química de sales de potasio con ácido nítrico. El nitrato de potasio
tiene una solubilidad más alta que el cloruro y el sulfato de potasio a temperaturas mayores a
21º C.
El potasio y el magnesio compiten entre sí, por la absorción por parte de la planta. Esta
competencia aún no es muy clara de entenderla, pero está asociada con la absorción a
nivel de la superficie radicular, o con la translocación una vez dentro de la planta. En todo
caso, cualquiera que sea la razón se sabe que niveles altos de potasio en el suelo, reducen
la absorción de magnesio por la planta, por lo tanto agravando o iniciando niveles de
La asimilación de Mg++ por las plantas tiende a incrementarse en muchos suelos con el
aumento del porcentaje de saturación de magnesio en el suelo. El incremento del
porcentaje de saturación del K+ a menudo decrece la asimilación de Mg++, más que la del
217
K/Mg, con el objeto de maximizar los beneficios de la fertilización con K+ y Mg++ . La
tienden a absorber preferentemente los iones K+ más libremente que los iones de Mg++.
Mientras que las leguminosas tienden a absorber preferentemente más iones de Mg++ que
iones de K+.
Esta es la razón por la cual los problemas de tetanismo predominan cuando el mayor
porcentaje de la mezcla forrajera está constituido por gramíneas. La influencia de la relación
K/Mg, sobre el crecimiento de la planta depende en la cantidad de estos elementos
presentes en el suelo, propiedades físicas y químicas y el tipo de planta a ser desarrollada.
Como una regla general, el %SB debe estar en el rango de 6-12% para Mg y de 2-5% para
K, con el valor bajo para suelos arenosos ácidos y el valor alto para suelos arcillosos
pesados. El porcentaje de saturación de bases para Mg++ debe estar superior al 15% o
mayor para suplir Mg++ en forma adecuada para pastos gramíneas, de los que se alimentan
rumiantes susceptibles al tetanismo.
Es un nutriente esencial.
218
Tabla 5.2:.-Contenido de Potasio de Cultivos (kg ha-1)(Conti, 2004).
Activación de enzimas
Su presencia en las células determina: Cuantas enzimas se pueden activar. La tasa de las
reacciones químicas
Fotosíntesis
Enzimas activadas por K participan en la producción de ATP (fuente de energía dela planta).
219
El K juega un papel muy importante en el transporte a través del xilema.
El K en las raíces produce una gradiente de presión osmótica que lleva el agua dentro de la
planta.
La deficiencia hace que las plantas tengan menos habilidad para absorber agua.
Síntesis de proteínas
Cuando existe deficiencia no se forman las proteínas, aun cuando exista abundancia de N
disponible.
El nitrato, materia prima para la formación proteínas, se acumula porque se inhibe la actividad
de la nitrato reductasa enzima que cataliza el proceso
Transporte de azúcares
El K regula el movimiento de azúcares (a través del floema a) otras partes de laplanta para
utilización y almacenamiento. Este sistema de transporte es regulado por ATP, que a su vez es
regulado porK.
Síntesis de almidones
220
Con alto K los almidones se mueven eficientemente de las zonas de formación a los órganos
de almacenamiento.
Retarda la senescencia.
Resistencia a enfermedades
Se han prevenido más enfermedades de las plantas con el uso de potasio que con ninguna otra
sustancia.
221
El Potasio incrementa el grosor y la resistencia de los tallos en los cereales. La menor
cantidad de KCl produce tallos débiles susceptibles al volcamiento.
Fijación biológica de N
Se incrementa la fotosíntesis.
El potasio, es el catión mayor del líquido intracelular del organismo humano. Está
involucrado en el mantenimiento del equilibrio normal del agua, el equilibrio osmótico entre
222
las células y el fluido intestinal y el equilibrio ácido-base, determinado por el pH del
organismo.
Estas dos condiciones producidas por la deficiencia de potasio (K) como fotosíntesis reducida
y aumento de la respiración- reducen los carbohidratos de la planta.
Hojas y tallos. Plantas jóvenes presentan hojas verde oscuras, tallos cortos e internudos
cortos.
Manchas vidriosas.
Órganos de reserva (ej: tubérculos papa) de bajo cont. de mat. seca (SQM, 2006).
223
CAPÍTULO VI.
NUTRIENTES SECUNDARIOS.
calcio en los puntos de intercambio catiónico es consecuencia del tamaño del ión Ca++
224
hidratado, bastante pequeño en relación a su carga + 2. Esta circunstancia da a lugar a la
una capacidad de cambio muy elevada (300 cmolc/dm3) y porque algunos de sus
componentes orgánicos pueden formar quelatos con parte de los iones Ca2+. El calcio
cambiable del suelo presenta una relación importante con el pH y con la disponibilidad
de varios nutrientes. La cantidad de calcio y de otros cationes básicos desciende al
aumentar la acidez del suelo y aumenta cuando éste se hace más alcalino. El exceso de
carbonato cálcico amortigua el pH en un valor próximo a 8 que suele dar lugar a una baja
solubilidad del fósforo, hierro, manganeso, boro y cinc, causando a veces, deficiencias en
uno o más de esos nutrientes esenciales para la planta. En resumen, existen tres tipos de
componentes de Ca principales en el sistema suelo planta:
c) El Ca++ en la solución del suelo. Se encuentra como ión libre (Ca2+) o bien
combinado con grupos de escasa movilidad en la planta (oxalatos, carbonatos, fosfatos,
carboxilos, hidroxilofenólicos, etc.
Varios autores afirman que las raíces de las plantas no penetran en las capas de suelo
carentes de calcio, aunque las restantes condiciones sean favorables para su crecimiento y
aunque se encuentre calcio en otras capas. El contenido de este elemento en la planta
suele ser bastante alto, si bien varía mucho de unos cultivos a otros (0,5 a 3 % en función de
la materia seca)
225
REACCIONES DEL CALCIO EN EL SUELO
son el Ca++ cambiable y el Ca++ en solución. El Ca++ por su carga y reducida hidratación
del suelo, con la excepción de las posiciones que tienen gran afinidad por el K+ y por el
NH4+, que compite en cierta medida con dicho ion. Sin embargo, el Ca++ suele ocupar
entre el 30 y el 90 % de la capacidad total de cambio del suelo.
La mayoría del calcio intercambiable es disponible para la planta, a pesar de que el calcio
contenido en los minerales primarios y secundarios está disponible en forma muy lenta.
Razón por la cual, un análisis del calcio total no está muy relacionado con la asimilación de
calcio y la nutrición y crecimiento de las plantas.
226
El calcio es un elemento esencial para las plantas, pero a su vez es muy importante en el
suelo por otras razones. El mejora la estructura del suelo al agregar los coloides de
arcilla y humus y lo hace al suelo más granulado, esto hace que exista mejor aireación y
penetración del agua en el suelo, por lo tanto promoviendo un mejor lugar para el
crecimiento del sistema radicular de las plantas y de los organismos del suelo.
El calcio es parte constituyente de cada célula de las plantas. Mucho del calcio que se
encuentra en las plantas ocurre como pectato de calcio en y a lo largo de las paredes
celulares de las hojas y tallos. Estos depósitos concentrados de calcio engrosan y
fortalecen estas partes de la planta. Las plantas y sus componentes, tienen contenidos
variables de calcio y esto depende de la especie, variedad y condiciones de
crecimiento de las mismas. Las flores y semillas son generalmente bajas en calcio, una
cantidad relativamente grande de calcio está contenida en las hojas.
Este elemento es absorbido en menor proporción que el potasio. Sin embargo, se extrae
por la planta en cantidad muy superior, debido a que el contenido de calcio en la solución
del suelo es generalmente, unas 10 veces, mayor que el de potasio. Por otra parte, se ha
comprobado que el calcio puede ser absorbido sólo por las partes más jóvenes de la raíz,
en las que las células de la endodermis no se han suberizado.
Algunos investigadores mantienen que la vía de entrada del calcio es a través del espacio
libre intercelular, siendo transportado hacia el xilema sólo en las raíces, en las que la
endodermis suberizada no impide su paso. Según esta teoría, la absorción y transporte del
calcio en la planta serían procesos pasivos en contraste con los de otros elementos. El
calcio es un elemento relativamente inmóvil en la planta, no se redistribuye fácilmente
provocando un estrés por su deficiencia.
227
y varios procesos metabólicos. El calcio es un componente de la calmodulina, un
regulador de la membrana y de las actividades enzimáticas.
228
en el complejo de cambio y en la solución del suelo. Por esta razón siempre es recomendado
guardar un buen balance catiónico sea a bajas o altas concentraciones, pero que todos estén
dentro de su equilibrio natural. (Tabla 6.1)
Es también conocido que altas concentraciones de calcio, que por lo general están
asociados con una elevación del pH del suelo, promueven la carencia de hierro, de
manganeso, de cinc o de boro debido a la formación de diversos compuestos
insolubles.
Deficiencias de calcio en los cultivos rara vez se las encuentra. Sólo en condiciones de
extrema acidez, con calcio cambiable inferior al 20 % de la capacidad de cambio, es posible
que se registren deficiencias de este elemento en los cultivos. Aún así ya se ha visto que
algunas especies son capaces de obtener suficiente Ca++ con niveles aún más bajos. Los
síntomas de deficiencia de calcio son difíciles de determinar hasta que la deficiencia se
haga crítica. Los síntomas de deficiencia aparecen primero en los tejidos más jóvenes o
en los puntos apicales, debido a que el calcio es un elemento inmóvil en la planta. Las
hojas jóvenes y raíces a menudo se muestran quebradizas, retorcidas, cortas o
achurruscadas unas con otras. Esto es asociado, algunas veces, con una débil estructura
del tallo. La falta de crecimiento causa una concentración de nitrógeno en hojas jóvenes y
les dota de un color verde obscuro. En causas extremas de deficiencia, las hojas apicales se
tuercen, se tornan verde pálido y eventualmente se secan y mueren, siendo las puntas y
bordes las que se afectan primero. Pueden encontrarse deficiencias inducidas debidas a la
escasez de calcio en los frutos y órganos de almacenaje, tales como moteado de la manzana,
mal del corazón del apio y malformaciones diversas en tomate, pimiento, zanahoria, coles,
etc. El camino más obvio para corregir las deficiencias en el suelo, es mediante la
aplicación de cal (calcítica o dolomítica). En el caso de que el calcio sea requerido sin
aumento en el pH como resultaría por el uso de la cal, el yeso es también fuente
satisfactoria de este elemento.
DETERMINACION DE Ca EN EL SUELO
230
En la actualidad laboratorios como Agrobiolab de Ecuador, realizan la extracción del Ca y
Mg mediante una solución de bicarbonato de sodio, conocida como solución de Olsen
Modificada. En el extracto así obtenido, se determinan los dos elementos mediante el uso
del espectrofotómetro de absorción atómica (EAA), que consiste en un aparato con un
principio semejante al fotómetro de llama, pero en vez de medir los fotones emitidos por
los átomos de Ca y Mg, mide la cantidad de fotones, que son emitidos por una lámpara
llamada de cátodo hueco, que son absorbidos por los átomos de calcio o de magnesio, según
sea el caso.
La lámpara de cátodo hueco, emite un haz de luz monocromático con la longitud de onda
que es específica del elemento que se desea determinar, en este caso el calcio y el magnesio.
Los átomos de los elementos Ca y Mg que son excitados en la llama, que posee una
temperatura de más de 3.000 grados centígrados, absorben parte de esos fotones. Es decir,
que cuando mayor cantidad de átomos existen, la absorción es mayor y el haz inicial será
atenuado en relación a su punto inicial, atenuación que es registrada por el detector.
Los aparatos modernos, son completamente computarizados y la lectura final la
emiten directamente en concentración, sin ser necesario la elaboración de curvas patrones,
como se las hacía anteriormente.
INTERPRETACION DE RESULTADOS
Como en el caso del potasio, las cantidades de calcio en el suelo, están íntimamente
relacionadas con el pH o la acidez del mismo; el calcio es también utilizado en el cálculo
de la suma de bases que a su vez sirve para el cálculo de la Capacidad de Intercambio
Catiónica Efectiva (CICE) y de allí llegar al valor de saturación de base.
Debido a que el calcio en los suelos ácidos de las se halla sobre todo en la forma
cambiable y como minerales primarios no descompuestos, en la mayor parte de estos
suelos los iones de calcio se hallan presentes en la cantidad máxima en el complejo de
intercambio.
Al igual que cualquier otro catión, las formas cambiables y en solución se hallan en
equilibrio dinámico. Si disminuye la actividad del calcio en la fase de la solución, como
puede ocurrir por filtración o eliminación de las plantas, tiende a haber un
desplazamiento del equilibrio en la dirección opuesta, con la subsiguiente adsorción de algo
de calcio por el complejo de intercambio.
231
La cantidad absoluta de calcio cambiable presente, con frecuencia, no es tan
importante, para la nutrición de las plantas, como la cantidad presente en relación a las
cantidades y tipos de otros cationes retenidos por los coloides, o el grado de saturación
de calcio.
Por ejemplo, un suelo que tenga solamente 1.500 Kg. de calcio cambiable por
hectárea, pero con una baja capacidad de intercambio catiónico, puede suministrar bien a
las plantas una mayor cantidad de este elemento que un suelo conteniendo 9.000 ó 10.000
Kg. de calcio cambiable por hectárea pero con una alta capacidad de intercambio catiónico.
El grado de saturación del calcio es de considerable importancia a este respecto, por
cuanto la cantidad de este elemento retenido en forma cambiable por un coloide
disminuye en proporción a la capacidad total de cambio de este coloide, y la cantidad de
calcio absorbido por las plantas disminuye. El tipo de arcilla influye en el grado de
disponibilidad de calcio; las arcillas tipo 2:1 requieren un grado de saturación mucho
mayor para un nivel dado de utilización de las plantas que las arcillas tipo 1:1. Las
arcillas del grupo de la montmorillonita requieren una saturación de calcio del 70% o
más para que este elemento sea liberado con suficiente rapidez para el crecimiento de
las plantas. Las arcilla del grupo de la caolínita, por otra parte, son capaces de satisfacer
el requerimiento en
Ca++ de la mayor parte de las plantas a valores de saturación de tan solo del 40 al 50%.
De esta manera se puede esperar que si los valores de calcio están bajos, el suelo estaría
con un exceso de acidez o sea un pH bajo, una baja saturación de bases, posiblemente
una baja CICE y probablemente con una toxicidad de aluminio. En este caso la
aplicación de una calcita o una dolomita, resulta ser lo más adecuado ya que a más de
corregir la acidez, ayuda a elevar los tenores de calcio y magnesio.
En los suelos arenosos puede ocurrir que tanto el contenido de calcio y magnesio y la
CICE, estén bajos y al sacar el valor de la saturación de bases se encuentren valores
medianos o altos, lo cual puede ser erróneo, y en este caso el valor de la saturación de
bases es relativo, ya que puede dar una falsa indicación de fertilidad elevada. De allí la
importancia de clasificar los valores absolutos de calcio y magnesio. Los valores de
calcio utilizados por el laboratorio Agrobiolab de Ecuador, se presentan en la siguiente
tabla. Índices usados por la Universidad Central, de Ecuador para calificar los contenidos de
calcio en el cultivo de flores, bajo invernadero:
232
Unidades Bajo Suficiente Alto
Saturación de Ca en la CICE
De igual manera que en e caso del potasio, para el calcio se puede también calcular el
porciento de saturación de Ca en la CICE, mediante el uso de la siguiente fórmula:
El calcio es muy utilizado como enmienda o corrección, para solucionar problemas del
suelo, como la acidez o el exceso de sodio. En ambos casos, se trata de sustituir elementos
no deseables adsorbidos en el complejo coloidal por este elemento, que da una gran
estabilidad estructural del suelo. (Tabla 6.2)
La caliza (CaCO3) y el yeso (CaSO4 . 2H O) son los dos materiales que deben
2
tenerse en cuenta cuando se identifican necesidades específicas de calcio como
fertilizante. El superfosfato ordinario también puede servir ya que el 70% de su calcio se
encuentra en forma de yeso. Cuando se desea una sal neutra es mejor utilizar yeso. A
continuación se dan a conocer las fuentes que contienen calcio, más usadas en la agricultura
actual.
233
Tabla 6.2: fuentes de Calcio
Composición Aproximada
Como Como elemento puro
Material Fórmula Oxido
Piedra caliza CaCO3 8 a 12 29,3
Cal Dolomita CaCO3 + MgCO3 15,93 20,0
Cal hidratada Ca(OH)2 30,4 46,1
Oxido de calcio CaO 23 60,3
Nitrato de Ca Ca (NO3)2 60 19,4
Roca fosfórica 3Ca3(PO4 )2-CaF2 18,6 33,1
Superfosfatotripl e
Ca(H2PO4 )2 19,03 13,6
Yeso CaSO4 -2H2O 31,48 22,5
Quelato de Ca EDTA-Ca 13,29 9,5
Cianamida cálcica
CaCN2 53,86 38,5
Factores de conversion de ca
El magnesio fue reconocido como elemento esencial para el crecimiento de las plantas
a finales del siglo XIX y ratificado a inicios del siglo XX con el estudio de la estructura
química de la clorofila, donde el magnesio constituye el núcleo central, alrededor del cual
se forma la molécula de clorofila.
Este hecho demuestra la esencialidad del elemento magnesio en todas las plantas verdes. El
magnesio es probablemente requerido por todo tipo de platas, verdes y no verdes, para
cumplir reacciones enzimáticas que no están asociadas con la clorofila.
El Mg nativo del suelo proviene de la meteorización de rocas que contienen minerales como
biotita, hornablenda, dolomita y clorita. Siendo un catión, el Mg++ está sujeto a intercambio
catiónico. Se encuentra en la solución del suelo y se adsorbe a las superficies de las arcillas
y la materia orgánica. Los suelos generalmente contienen menos Mg que Ca debido a que el
234
Mg no es adsorbido tan fuertemente como el Ca por los coloides del suelo y puede perderse
más fácilmente por lixiviación. Además, la mayoría de los materiales parentales contienen
menos Mg que Ca. Muchos suelos contienen suficiente Mg para soportar el crecimiento
vegetativo, sin embargo, las deficiencias de Mg ocurren con más frecuencia en suelos ácidos
sujetos a alta precipitación y en suelos arenosos. Las deficiencias también pueden
desarrollarse en suelos calcáreos donde el agua de irrigación tiene contenidos altos de
bicarbonatos o en suelos sódicos.
La relación entre Mg y K puede ser un factor importante bajo ciertas condiciones. Por
ejemplo, el fertilizar con K reduce la absorción de Mg de los forrajes que se utilizan en el
pastoreo de ganado, lo que resulta en bajas cantidades de Mg en la sangre de los animales
dando lugar al desorden conocido como tetania de los pastos. La baja temperatura y
adecuada humedad en el suelo, en presencia de cantidades moderadas de K, resultan en una
alta absorción de K, en comparación con la absorción de Mg, lo que promueve la producción
de forraje con tendencia a producir tetania.
235
El magnesio es retenido por las partículas de suelo y esta fracción intercambiable se
encuentra en equilibrio con el magnesio de la solución del suelo. Un gran porcentaje de
magnesio total del suelo se encuentra en forma relativamente no disponible.
Excesos de magnesio pueden ocurrir en ciertas circunstancias, donde los suelos están
formados por serpentina en el subsuelo o están influenciados por aguas subterránea
altas en magnesio. El Mg que se encuentra en el suelo se agota mucho más rápido que el
calcio o que el potasio y los suelos arenosos tienden a presentar mayores deficiencias de
este elemento que los suelos de textura más fina que poseen un mayor capacidad de
intercambio catiónico.
Esta reducción es atribuida a la fijación del magnesio por reacciones con sílice soluble
o cloruro de aluminio y a una precipitación con Al(OH)3. Suelos de textura muy arenosa
en regiones húmedas muestran la mayor deficiencia de magnesio. Estos suelos
normalmente contienen pequeñas cantidades del magnesio total o intercambiable. Los
suelos son probablemente deficientes cuando contienen menos de 25 a 50 ppm de magnesio
intercambiable.
236
El magnesio intercambiable normalmente participa de un 4 a 20% de la CIC de los suelos,
pero en suelos derivados de roca con presencia de serpentinas, el magnesio intercambiable
puede exceder al calcio. La saturación crítica de magnesio para el crecimiento óptimo de
las plantas coincide cercanamente con este rango, pero en muchos casos, el % de
saturación de magnesio no debe ser menos de 10%.
ser severamente afectada por alta concentración de H+en suelos orgánicos donde el
aluminio intercambiable no es la causa mayor de la acidez. Deficiencias de magnesio
también pueden ocurrir en suelos con una alta relación de Ca/Mg intercambiables donde
ésta relación no debe exceder de 10/1. Altos niveles de potasio intercambiable pueden
interferir con la asimilación de magnesio en las plantas. Generalmente la relación
recomendada K/Mg es de <4/1 para flores, 3/1 para vegetales y 2/1 para frutos.
nm y una alta energía de hidratación equivalente a 1.908 J/mol. Por su calidad de catión es
237
retenido en la superficie de los coloides orgánicos e inorgánicos; esta forma intercambiable
del magnesio es disponible para las plantas y no es fácilmente lixiviado del suelo.
Su tasa de entrega puede ser fuertemente reducida por la acción de elementos tales como el
K, NH4 , Ca y Mn, además del H que resulta de un pH ácido. En efecto, ciertas pruebas
han demostrado que el magnesio es casi insoluble en suelos que tienen valores de pH de
6,2 a 8,0, lo que significa que los valores óptimos de pH para el aprovechamiento de
magnesio parece estar entre 5,5 y 6,2. Las deficiencias de magnesio por lo general se
encuentran es suelos ácidos y en suelos orgánicos que contienen carbonatos libres de
calcio. En suelos arenosos la deficiencia de magnesio se acentúa por las aplicaciones
altas de potasio. Altos contenidos de potasio en la solución del suelo, debido a
fertilizaciones recientes, o en condiciones de fertirriego, tienden a interferir la
asimilación de magnesio por las plantas. Deficiencias de magnesio pueden ocurrir en
suelos que han recibido continuas aplicaciones de materiales calcáreos bajos o ausentes de
magnesio.
EL MAGNESIO EN LA PLANTA
El magnesio (Mg) es absorbido por las plantas como un catión Mg++. Una vez dentro de la
planta, el Mg cumple muchas funciones. El Mg es el átomo central de la molécula de la
clorofila, por lo tanto está involucrado activamente en la fotosíntesis. El Mg y el N son los
únicos nutrientes provenientes del suelo que son parte de la clorofila, y por esta razón, la
238
mayoría del Mg en las plantas se encuentra en este compuesto. Las semillas también tienen un
contenido relativamente alto de Mg, aun cuando los cereales como el maíz tienen bajos
niveles en sus semillas. El Mg también interviene en el metabolismo del fósforo, en la
respiración y en la activación de muchos sistemas enzimáticos en las plantas.
El magnesio (Mg) es absorbido por las plantas como, Mg2+ en la solución del suelo, y llega
hasta el sistema radicular de las plantas por flujo de masas o difusión. El magnesio
intercambiable a nivel radicular es captado en menor proporción que el calcio. La
cantidad de magnesio tomado por las plantas, es usualmente menor a la de calcio o
potasio. La concentración de magnesio en la solución del suelo, es comúnmente de 5 a
50 ppm en regiones con clima templado, aunque también se han encontrado
concentraciones entre 120 y 2.400 ppm en suelos sometidos a cultivos intensivos o bajo
fertirrigación.
Resulta interesante notar cuan cerca las plantas y los animales están asociados a través de
la composición de la clorofila de las plantas y la hemoglobina de los corpúsculos rojos
de la sangre. Estos dos compuestos son químicamente similares, magnesio es el elemento
central de la clorofila y el hierro cumple el mismo papel en la hemoglobina. La fórmula de
la clorofila está dada por: C55 H72 O5N4Mg y la fórmula de los hematíes es
C34 H33 O5 N4Fe, lo que indica un alto grado de similitud.
239
un activador específico de un sinnúmero de enzimas incluyendo la de la
fosforilización, deshidrogenasa y carboxilasa.
Las funciones del magnesio en las plantas están relacionadas con su movilidad dentro
de las células, con su capacidad para interactuar con grupos fosforílicos, a través de un
enlace iónico, y para actuar como un elemento puente y formar complejos de
diferente estabilidad. Aunque muchos de los enlaces que envuelven Mg2 son iónicos,
algunos son parcialmente covalentes, como la molécula de clorofila.
El magnesio forma complejos ternarios con las enzimas, en los cuales los puentes
catiónicos son necesarios para estabilizar una geometría precisa entre las enzimas y el
substrato. Una alta proporción del Mg2+ total, está involucrada en la regulación del pH
celular y el balance entre cationes y aniones.
La función principal del magnesio y ciertamente la más familiar es la de ser el átomo central
de la molécula de clorofila. En hojas verdes sin embargo, sólo una pequeña proporción del
magnesio total está unida a la clorofila y aún bajo severas deficiencias de
magnesio este valor no excede de ~25%. Sobre un 70% del magnesio total puede ser
fácilmente extraído con agua. Cuando la provisión óptima de magnesio para el
crecimiento, entre 10 y 20% del magnesio total de las hojas está localizado en los
cloroplastos, menos de la mitad está unido a la clorofila; una proporción similar de
potasio (10-20%) está localizado en los cloroplastos. La proporción de calcio, sin
embargo, es usualmente mucho más baja. El citoplasma, como el resto de los otros
compartimientos de la célula, pueden contener otro 10- 20% del de magnesio y potasio.
Cuando son aplicados a altos niveles, estos cationes son almacenados en las vacuolas,
habiendo un cambio correspondiente en la distribución entre los compartimientos de la
célula. En las células de un tejido de una hoja madura, ~15% del volumen de toda la
célula está ocupado por los cloroplastos y el citoplasma, el restante 85% está ocupado
por la vacuola. Así una proporción del 20% del magnesio de la hoja está localizado en los
cloroplastos, los cuales ocupan sólo 5% del volumen total, lo que indica una muy alta
concentración de magnesio. Altas concentraciones de magnesio y potasio son requeridas
en los cloroplastos y citoplasma para mantener un pH alto entre 6,5 - 7,5, comparado con el
pH de la vacuola 5,0 – 6,0. La influencia del pH en la estructura de la proteína y por lo
tanto en la actividad enzimática, es dependiente de las estrictas regulaciones del pH de los
240
componentes de la célula, y cationes como Mg, K y Ca, que realizan esta función
reguladora. En los componentes de la célula el magnesio es también necesario para
la neutralización de ácidos orgánicos, el grupo fosforílico de los fosfolípidos y
particularmente ácidos nucleicos.
En las células de las hojas al menos el 25% del total de proteína esta localizado en los
cloroplastos. Esto explica porque una deficiencia de magnesio particularmente afecta el
tamaño, la estructura y la función de los cloroplastos incluyendo la trasferencia del
electrón en el fotosistema II. Bajos contenidos de clorofila en hojas deficientes de
magnesio, son causadas por síntesis de proteínas inhibidas , en vez de una falta de
magnesio por la síntesis de las moléculas de clorofila. Esto también explica porque en
plantas deficientes en magnesio los otros pigmentos de la planta también son afectados de
la misma manera que la clorofila.
Hay una larga lista de reacciones enzimáticas las cuales requieren o son promovidas por el
magnesio. Muchas de estas pueden ser categorizadas por el tipo general de reacción las
cuales ellas conforman, tales como la transferencia de fosfatos, o grupos carboxilicos.
El magnesio es tomado por las raíces de las plantas como un catión bivalente, el
mecanismo exacto aún no ha sido confirmado, pero a medida que avanza la
experimentación se ve como aceptable la teoría de generador metabólico de
transporte. La idea general es que la planta usa energía para la transportación de iones a
través de la membrana radicular para iniciar su movimiento dentro de ella. Al magnesio se le
considera un ión bastante móvil en la planta, tal como lo evidencia el aparecimiento de los
síntomas de deficiencia, primero en las hojas más viejas. Información técnica sugiere
que el magnesio no es del todo móvil en la planta, basada aparentemente en que
cuando la planta está bajo un estrés de magnesio, causado por la deficiencia de este
elemento, los tejidos en crecimiento activo reciben todo el Mg que entra a la planta y a
medida que las hojas maduran, una cantidad mayor de Mg es incorporada dentro de los
componentes de la pared celular los cuales pueden ser inactivados o inmovilizados. Si la
planta no recibe más magnesio desde el suelo, la molécula de clorofila se degrada. El
magnesio es traslocado a los tejidos nuevos y la deficiencia de magnesio aparece en
las hojas donde la degradación de la clorofila ocurrió.
243
El movimiento del magnesio en la planta y dentro de ella está también afectado por
lapresencia de otros iones. El potasio reduce la asimilación de magnesio, al igual que el
calcio pude ser antagónico no sólo en la toma a nivel del sistema radicular pero también
dentro de la célula a nivel enzimático. El nitrógeno tiene también importantes
implicaciones sobre el Mg. La forma de nitrógeno en el medio radicular tiene influencia en
la asimilación o distribución del Mg. El catión NH4 puede disminuir el contenido de
magnesio en la planta pero por otra parte el ion NO3 puede estimular su asimilación. Esto
implica que se debe aplicar una fuente de nitrógeno que contenga NO3 cuando otras
condiciones conduzcan a declinar la asimilación de magnesio por las plantas.
aplicación de altas dosis de K o por una alta disponibilidad de amonio (NH4+ ) en suelos con
bajos niveles de Mg.
244
La deficiencia de magnesio por lo general ocurre en suelos de textura arenosa gruesa y
profunda, con pH ácido de 5,2 o menos. Estos suelos por lo general tienen una baja
capacidad de intercambio catiónico y son excesivamente lixiviados. Datos de investigación
muestran que en suelos con pH 5,8 o mayores, rara vez muestran síntomas de deficiencia
aún cuando la disponibilidad de magnesio es baja. Los síntomas de deficiencia de
magnesio en las plantas aparecen primeramente en las hojas más viejas y los síntomas
incluyen:
Pérdida de un color verde saludable entre las venas, seguida de una clorosis, la cual puede
iniciarse en los márgenes o puntas de las hojas y progresar internamente. En muchos
cultivos se advierte una clorosis en bandas o franjas que siguen la dirección de la vena
central.
DETERMINACION DE Mg EN EL SUELO
Los átomos de este elemento Mg que son excitados en la llama, que posee una
temperatura de más de 3.000 grados centígrados, absorben parte de esos fotones. Es decir,
que cuando mayor cantidad de átomos existen, la absorción es mayor y el haz inicial será
atenuado en relación a su punto inicial, atenuación que es registrada por el detector. Los
aparatos modernos, son completamente computarizados y la lectura final la emiten
245
directamente en concentración, sin ser necesario a elaboración de curvas patrones, como se
las hacía anteriormente.
INTERPRETACION DE RESULTADOS
Como en el caso del potasio y del calcio, las cantidades de magnesio en el suelo, están
íntimamente relacionadas con el pH o la acidez del mismo; el magnesio es también
utilizado en el cálculo de la suma de bases que a su vez sirve para el cálculo de la
Capacidad de Intercambio Catiónica Efectiva (CICE) y de allí llegar al valor de saturación
de base. De esta manera se puede esperar que si los valores de calcio y magnesio están
bajos, el suelo estaría con un exceso de acidez o sea un pH bajo, una baja saturación de
bases, posiblemente una baja CICE y probablemente con una toxicidad de aluminio. En
este caso la aplicación de una dolomita, resulta ser lo más adecuado ya que a más de
corregir la acidez, ayuda a elevar los tenores de calcio y magnesio.
En los suelos arenosos puede ocurrir que tanto el contenido de calcio y magnesio y la
CICE, estén bajos y al sacar el valor de la saturación de bases se encuentren valores
medianos o altos, lo cual puede ser erróneo, y en este caso el valor de la saturación de
bases es relativo, ya que puede dar una falsa indicación de fertilidad elevada. De allí la
importancia de clasificar los valores absolutos de calcio y magnesio.
VALORES DE CALIFICACION DE Mg
Saturación de Mg en la CICE
De igual manera que en e caso del potasio y del calcio, para el magnesio se puede también
calcular el porcentaje de saturación de Mg en la CICE.
246
con buenas condiciones nutricionales. Para la mayoría de los cultivos, normalmente, s e
h a n e n c o n t r a d o los siguientes valores de saturación de cationes:
%Ca 60 %; % Mg 30 %; % K 10 %
Composición Aproximada
Material Fórmula Como Oxido Como elemento puro
Dolomita MgCO3 + 8 a 12 20
Sal de Epson MgSO4 - 7H2 O 15,93 9,6
Kieserita MgSO4 - H2 O 30,4 18,3
Fosfato de NH4 y MgNH4 PO4- 23
14
Mg H2 O
Oxido de magnesio MgO 60
36
Sulfato de K y Mg K2SO4 -18,6 11,2
Quelato de Mg EDTA Mg 15,75 9,5
Cloruro de Mg ClMg 14,94 9,0
El cloruro de magnesio, muy soluble en agua se los utiliza como abono foliar. La
solución saturada contienen un 9% de Mg. Generalmente va acompañado de un cierto
porcentaje de cloruro de calcio (CaCl2 ), limitándose el contenido de calcio a un 2%. Los
abonos de dos elementos, los cuales contienen el magnesio como sulfato o cloruro, tienen
las propiedades correspondientes de los dos productos como se utilizan casi
exclusivamente como abonos en el suelo; ambas formas pueden considerarse de igual
valor (aparte la tolerancia al cloro de algunas plantas). El nitrato de magnesio
prácticamente no se utiliza como abono por su alto costo.
Las calizas magnésicas se utilizan fundamentalmente como abonos del suelo, ya que
además de aportar magnesio, elevan el pH del mismo, entre estos productos se pueden citar
a los siguientes:
Silicato de magnesio, muy lento. La roca magnésica triturada se compone de silicatos ricos
en magnesio, en forma estable. Es necesario triturar muy intensamente este material
(65% < 0,032 mm) para conseguir que tenga una cierta actividad (aunque pequeña). La
acción de este abono es extremadamente lenta. Existe otra serie de compuestos que
podrían considerarse como abonos magnésicos de efecto muy lento pero que por diversas
causas no se utilizan, como es el caso del fosfato amónico magnésico. Los abonos con
porcentaje de Mg por debajo del 2,4% (4%MgO) no sirven como abonos magnésicos
aunque el contenido de Mg. puede destacarse en su composición.
248
ELECCION DE LA FORMA MÁS CORRECTA DE ABONO
Los efectos secundarios de los abonos magnésicos tienen poca importancia. Debe en todo
caso evitarse que se apliquen grandes cantidades de cloruro de Mg a las plantas que son
sensibles al cloro.
La dosis de Mg necesaria se determina mediante el análisis de suelos que debe ser realizado
por lo menos una vez al año. Dado que el peligro de sobre dosis de Mg es escaso, y que los
abonos magnésicos son relativamente económicos, bien se puede cometer el error de aplicar
un exceso de Mg, incluso en suelos salinos.
249
INTERACCIONES DEL MAGNESIO CON OTROS ELEMENTOS
El magnesio presenta interacciones importantes con el K y el Ca. Así, en los suelos ácidos
pobres en magnesio, la corrección exclusiva con materiales de calcio puede resultar en
deficiencias graves de este elemento. Deben realizarse las correcciones con materiales
mixtos (dolomitas). Por otra parte, un elevado contenido de K puede afectar igualmente al
Mg cambiable. En presencia de un alto contenido de calcio, un alto contenido de magnesio
puede ser la causa para agudizar la deficiencia de manganeso para los cultivos.
2.- La fuente a ser utilizada debe ser una cal dolomítica ya que es rica en potasio, pero
siempre guarda un buen equilibrio con el calcio, el cual es siempre más alto en la
250
formulación. La aplicación de un carbonato de calcio u otra caliza, debe hacerse siempre y
cuando el contenido de magnesio sea ya adecuado.
FACTORES DE CONVERSION DE Mg
El azufre es un elemento que ha venido siendo estudiado como nutriente esencial para el
crecimiento de las plantas desde el año 1.804, cuando el científico De Saussure
realizó varios trabajos, los que dieron la pauta para considerarlo como tal. Pero tuvo que
transcurrir un largo tiempo para que este elemento sea tomado en cuenta en la nutrición de
las plantas y es así como en el año de 1.860 los trabajos de Knop y Sachs, con soluciones
nutritivas, identificaron al azufre como el elemento que era el causante de un amarillamiento
en los ápices de las plantas, distinguiéndolo como un elemento poco móvil en la planta.
Quizá las razones más importantes para que el azufre no haya sido considerado dentro de
las prácticas de fertilización, inclusive bien adentrado el siglo XX, se debe al uso frecuente
de fuentes que contenían buenos tenores de azufre, tal el caso del superfosfato simple, que
tiene altos contenidos de yeso en su formulación.
Por otro lado el uso frecuente de plaguicidas a base de azufre que hasta hace no mucho
tiempo, fueron considerados como fungicidas casi irremplazables.
251
entre 12 y 20 % de azufre total. Pero, la gran mayoría se encuentra en forma elemental, y
no oxidada, siendo la segunda la forma disponible para la planta.
Una fuente natural de azufre constituyen las rocas ígneas y metamórficas en las cuales se
Los iones sulfato pueden estar en la solución del suelo que es el azufre más
fácilmente disponible para las plantas, pero es afectado por
ondiciones ambientales, velocidad de metiorización de la materia orgánica, movilización
del sulfato por percolación y necesidades típicas del cultivo, La atmósfera, aunque en
pequeña proporción, es otra fuente, de donde toman las plantas el azufre, su
contenido es de aproximadamente un 30 %. El azufre en la atmósfera está en forma de SO2,
principalmente.
Pero en zonas industriales, se encuentra como sulfatos, amónico sobre todo, y como ácidos
libres procedentes de la combustión de derivados petrolíferos con azufre. En zonas donde
precipita de la atmósfera hacia la superficie del suelo, en forma de lluvia ácida, la misma
252
que es la causante, especialmente en los países nórdicos, de la pérdida de grandes
extensiones de bosques naturales.
Las formas orgánicas están contenidas en la materia orgánica del suelo, formando grupos
sulfihidrilos unidos a carbonos o como grupos sulfato, con uno de sus oxígenos
unidos a un carbono. La forma orgánica más común de azufre es la que se encuentra
formando parte de los aminoácidos, como cistina y metionina. Son las zonas húmedas las
que contienen una mayor cantidad de azufre en forma orgánica, debido a la acumulación
de material vegetal el mismo que al descomponerse, por medio de una acción bacteriana,
puede ser transformada al ion sulfato y así puede ser asimilado por las plantas.
Los suelos de regiones áridas pueden contener hasta 1% de azufre, en sus capas
superficiales y principalmente en la forma de sulfatos de calcio, magnesio, potasio o sodio,
pero este azufre no siempre está disponible para los cultivos debido a su alto pH. La
meteorización, el lavado y la absorción de las plantas, reduce la cantidad de azufre mineral
en el suelo, de tal forma que la mayor parte del azufre se encuentra como componente de
la materia orgánica, que presenta una relación N/S entre 10/1 y 10/2 (en un ámbito de 6 a
8.1%).
La biomasa y la materia orgánica del suelo constituyen grandes depósitos de azufre sobre la
superficie terrestre. La relación de masa carbono/azufre en la materia orgánica del
suelo es característicamente casi de 100/1. El contenido de sulfato en los suelos se
incrementa con la aridez y la acumulación de sales.
253
REACCIONES DEL AZUFRE EN EL SUELO
Los fertilizantes a base de SO4-2, tienen un efecto residual corto, pero que puede ser
255
2SH2 + ½ O2 Thiobacteria 2S + 3H2 O + E
Como es obvio este es el proceso inverso al de oxidación, y guarda también una estrecha
comparación con lo que ocurre con el nitrógeno en el proceso conocido como
denitrificación, en el cual la falta de oxígeno produce la reducción del NO3 a N2,
provocando las consiguientes perdidas como gas a la atmósfera. En este proceso al
igual que en el del azufre participa un grupo de bacterias de tipo anaeróbico
autótrofas, facultativas, especializadas conocidas como bacterias sulfato- reductoras. El
proceso de reducción el azufre se lo puede expresar mediante la siguiente ecuación:
Los sulfatos que son añadidos a suelos encharcados (donde falta oxígeno) son reducidos
a sulfhídrico. Este último puede ser precipitado por hierro o metales parecidos,
produciendo una deficiencia de ellos en la planta, o escapar a la atmósfera como
gas. El pH del suelo a consecuencia de estas reacciones aumenta. Pero si estos suelos son
drenados el pH del suelo descendería drásticamente, debido a la oxidación del SH2 o
S a sulfatos, y haría imposible el desarrollo de cualquier cultivo.
PERDIDAS EN EL SUELO
El sulfato tiene una gran movilidad en el suelo, y se pierde fácilmente por lavado.
Además puede ser adsorbido por los coloides del suelo, especialmente en los suelos ácidos
con grandes cantidades de óxidos e hidróxidos de hierro y aluminio. Una ventaja es que
estos sulfatos pueden ser liberados posteriormente, en forma lenta, es decir que se
256
permite su disponibilidad a largo plazo. La materia orgánica es esencial para la retención
temporal, y la liberación a largo plazo del sulfato, hacia la disolución del suelo. Los suelo
ricos en arcillas almacenan más sulfatos que los suelos arenosos. Los suelo tropicales
tienen una mayor cantidad de coloides de carga positiva (hierro hidratado y óxidos de
aluminio), por lo que retienen más iones sulfato. Además, el azufre puede formar aniones
solubles que se pueden perder por lavado cuando aumenta su concentración en la solución
del suelo. En presencia de mucho calcio, el azufre forma yeso (CaSO4 .2H2 O) que solo es
ligeramente soluble, y puede precipitarse. En suelos áridos, las concentraciones de sulfatos
disueltos y de yeso precipitado son mayores, ya que casi no existe lavado. Si se mezclan
residuos vegetales pobres en S con el suelo, se produce una inmovilización del azufre. Un
contenido mínimo de 0,15 % es el mínimo requerido en los residuos, para que su
descomposición no reduzca el nivel de S en el suelo.
La retención del sulfato en el suelo, podría estar relacionada con el cambio aniónico
causado por cargas positivas desarrolladas en los hierros hidratados y los óxidos de aluminio
o en arcillas como la caolinita a pH bajo: retención de ion es sulfato mediante
complejos hidróxido-aluminio por coordinación; adsorción salina por atracción entre
la superficie de los coloides del suelo y la sal: y propiedades anfóteras de la materia
orgánica del suelo que desarrolla cargas positivas según las condiciones. En la
descomposición de los restos animales y vegetales una parte del azufre se puede perder a
la atmósfera en forma de dióxido de azufre. Factores ambientales pueden influir en la
acumulación de nutrientes en plantas y en la presencia de deficiencias también. Las
temperaturas bajas disminuyen la absorción radicular de nutrientes como el caso del
azufre. Los suelos pesados suelen tener más sulfatos que los livianos. Además los suelos
tropicales al tener mayor cantidad de coloides positivos que otros suelos adsorbe más
sulfato. Este poder de retención se lo atribuye al hierro hidratado y a los óxidos de aluminio.
Las principales funciones del azufre dentro de la planta son dos. Estructurales, formando
parte de las proteínas en la metionina, cistina y cisteína, y estableciendo puentes disulfuro
(S-S), que ayudan a los enlaces peptídicos (NH-CO), a estabilizar la estructura de las
proteínas. Metabólicas, ligándose a aminoácidos libres y a aminoácidos unidos a
proteínas, a vitaminas sulfatadas (biotina, tiamina o vitamina B1, y la coenzima A. La
coenzima A es el eslabón básico de conexión entre la glucólisis y el ciclo de Krebs; es
importante en la oxidación y formación de los ácidos triglicéridos, y en la síntesis de
aminoácidos.
Por lo general, la materia seca de las hojas jóvenes debe contener más de 0,15 a 0,20 %
de S. Se puede medir también según el S mineral (sulfato) presente en la planta,
expresado como porcentaje del S total, si el valor es superior al 20%, el suministro es
adecuado. La concentración de azufre orgánico en las hojas de las plantas está entre
0,2 y 0,4 %. El azufre es esencial para la acción de las enzimas implicadas en la
reducción de nitratos, por lo que la deficiencia provoca una dificultad en la síntesis de
aminoácidos y una acumulación de nitrógeno nítrico en los tejidos. El azufre es por lo tanto
necesario para la síntesis de aminoácidos como cisteína, cistina y metionina, es un
ingrediente esencial en la proteína; ayuda a mantener el color verde intenso en las plantas.
Activa la formación de los nódulos en las leguminosas, su deficiencia contribuye en la
258
falta de la fijación de N, que requiere de este elemento en su proceso. Aumenta la
resistencia de la planta frente a infecciones: estimula la producción de semillas;
procura el crecimiento más vigoroso de la planta; incrementa la concentración de
proteína cruda en forrajes; mejora la calidad de la harina de los cereales; incrementa el
contenido de aceite en oleaginosas; da mejor uniformidad y calidad a las hortalizas de
manera especial en las crucíferas.
La planta va a absorber el sulfato existente en la solución del suelo, que se regenera por la
desorción de las arcillas y los hidróxidos. El ion sulfato llega a la superficie de los pelos
radiculares por flujo de masas y por difusión. Además, las plantas pueden absorber azufre
directamente desde la atmósfera, que puede ser de emisiones volcánicas, de actividades
industriales. El azufre se acumula en la planta como ion sulfato. El azufre absorbido como
ion sulfato es reducido y luego incorporado en compuestos orgánicos. La reducción se
efectúa en dos etapas. La primera consiste en la formación de adenosín-5’fosfosulfato
(APS), denominado “sulfato activado”. La segunda etapa, corresponde a la
transformación del APS en 3’-fosfoadenisín- 5’fosfosulfato. Así el sulfato activado se
reduce e incorpora a aminoácidos como cistina cisteína y metionina, que luego pasa a
formar parte de las proteínas.
259
a medida que aumenta la disponibilidad de S. La cantidad de aminoácidos de mala
calidad también disminuye y la glicina que es una proteína de alta calidad aumenta. La
producción de proteína de buena calidad no depende solo de la cantidad de S pero también
de la capacidad de la planta de hacer proteína de buena calidad.
SINTOMAS DE DEFICIENCIA
SINTOMAS DE EXCESOS
Es un tanto difícil referirse a un exceso o toxicidad que sea causado por azufre, ya que, la
mayor parte de cultivos, pueden soportar aplicaciones de azufre que sobrepasan las
1.000 ppm de SO4-2. Aplicaciones foliares de azufre como fungicida, no causa problemas a
los cultivos, dentro de las dosis que han sido recomendadas. Un exceso de azufre en los
tejidos, puede avizorarse, cuando el contenido de azufre total es mayor a 0,40 % en función
de la materia seca producida. En todo caso se pueden encontrar problemas de exceso de
azufre cuando éste se encuentra como ion sulfato formando sales en unión de los
cationes y provocando el problema de salinidad el suelo. El lino y algunas gramíneas son
sensibles a altas concentraciones de sulfatos, por lo que se hace necesario su control
periódico, en base de un análisis foliar.
260
METODOS DE ANALISIS DE AZUFRE Y SU INTERPRETACION
El azufre tiene una dinámica muy semejante al nitrógeno, pero al encontrarse en forma
iónica, como SO4 actúa como un radical menos dinámico que el NO3 y por lo tanto puede
quedar retenido con mayor facilidad en los coloides del suelo y a su vez puede ser
intercambiado con otros aniones tal el caso del fosfato, carbonato o borato.
Por otra parte su dinámica es muy compleja ya que se encuentra en el suelo en varias
formas lo que hace que no estén muy disponibles para las plantas y a su vez dificulten para
su análisis. En todo caso en muchos países, entre esos el Ecuador, han realizado trabajos
de correlación, en especial en cultivos intensivos, usando como extractante el fosfato de
calcio, encontrándose resultados bastante aceptables, los mismos que han servido como
una guía parasu manejo en la fertilización. El análisis se lo complementa con una
determinación colorimétrica del ion SO4 -2 .
EXPRESION DE RESULTADOS
INTERPRETACION
Los valores de calificación para azufre determinado por el método del fosfato de calcio
se indican en la tabla siguiente Tabla de Interpretación de resultados de análisis de
azufre para los suelos de Ecuador. (Extractante fosfato de calcio).
Contenido de S
Calificación ppm
Bajo < 4,0
Medio 5 a 10
Suficiente 10
261
Contenidos altos de azufre, están relacionados con buenos contenidos de materia orgánica,
aún que su disponibilidad no sea muy acorde a las necesidades de ciertos cultivos.
Contenidos altos de SO4 tienen una alta correlación con la conductividad eléctrica del
suelo, es decir con el índice salino, ya que el ion SO4 es un radical muy fácil de unirse con
los cationes del suelo y formar las sales, que son las causantes del incremento de la
conductividad eléctrica.
Cuando esto sucede, es necesario drenar estas sales, mediante la aplicación de un exceso de
agua de buena calidad o si está en campo abierto, esperar la llegada de las lluvias. Un suelo
con altos contenidos de sulfatos, pero con un buen manejo del agua, es más fácil de
manejar que un suelo seco o mal drenado .
Una acumulación de azufre en el suelo, puede deberse a una falta de asimilación por parte
de la planta, debido a que el suelo se encuentra excesivamente húmedo. En estas
condiciones, la oxidación del S se restringe notablemente por la escasez de oxígeno y los
organismos oxidantes, al ser aeróbicos típicos, quedan altamente inhibidos.
Las fuentes fertilizantes más comunes, están constituidas por sulfatos, algunos muy solubles
y otros poco solubles en agua, por ejemplo el yeso es una fuente de calcio y azufre y de
efecto lento, debido a su baja solubilidad; lo mismo sucede con el superfosfato, cuya
composición es fundamentalmente anhidra (sulfato de calcio anhidro).
Las fuentes más comunes y que se encuentran disponibles en la mayoría de países son las
que constan en la Tabla 6.4
262
Tabla 6.4: Fuentes de Azufre.
Contenido de
Fuente Fórmula Quimica S (%)
Sulfato fosfato de amonio Varía 10 - 14
Polisulfato de amonio Varía 36 - 45
Sulfato de amonio (NH4)2 SO4 23,7
Tiosulfato de amonio (NH4)2 S2O3 26
Sulfato de cobre CuSO4 12,8
Sal de Epson MgSO4 + 7H2O 14,0
Sulfato de hierro FeSO4 11,5
Yeso CaSO4 + 2H2O 16,8
Sulfato de manganeso MnSO4 14,5
Sulfato de potasio y magnesio
K2SO4 + 2MgSO4 22
Sulfato de potasio K2 SO4 17 - 18
Azufre elemental S de 30 a 99,6
Dióxido de azufre SO2 50
Acido sulfúrico 100% H2 SO4 32,7
Ca(H2PO4 )2+CaSO4 +2
Superfosfato simple H2 O 11,9
Urea sulfatada Varía 4 - 13
Sulfato de cinc Zn SO4 +H2O 18
Sulfato amónico.- es el abono nitrogenado sintético más antiguo; soluble en agua, pero
poco higroscópico, lo que le da buenas características para su
almacenamiento, esta propiedad lo hace especialmente indicado para ser utilizado en las
zonas tropicales y subtropicales. Tiene un efecto fuertemente acidificante en el suelo. En el
suelo los iones amonio se transforman en ácido nítrico bajo la acción de las bacterias del
suelo. El ión sulfato en sí no influye en la acidez del suelo. Sin embargo, cuando dicho
ion es lixiviado, va acompañado de cationes básicos, cuya pérdida trae como
consecuencia un aumento de la acidez del suelo. Cuando el ion sulfato es absorbido por
las raíces de las plantas, puede disminuir indirectamente la acidez, debido a que para
compensar, dichas raíces dejan iones hidroxilo en libertad. En suelos neutros a ácidos
puede ser necesario encalar para compensar dicha disminución del pH del suelo. Es
necesario un material calcáreo que equivalga a 112 Kg de carbonato de calcio para
neutralizar la acidez producida por 100 Kg de sulfato de amonio. Esta fuente se la obtiene
haciendo actuar al NH3 sobre el ácido sulfúrico.
263
alcalinos puede ser muy beneficioso para diminuir el pH, neutralizar el sodio y aumentar la
disponibilidad de microelementos. Existen dos procedimientos de producción:
Sulfato potásico.-es una fuente alternativa para aquellos cultivos que son sensibles al cloro,
como la papa, el tabaco y muchas hortalizas. Es una sal blanca y soluble en agua y poco
higroscópica. En forma natural puede ser obtenido de minas ubicadas en muchos lugares
del mundo.
264
CAPÍTULO VII.
MICRONUTRIENTES.
Ocho de los 16 nutrientes esenciales para la planta se denominan micronutrientes. Ellos son:
boro (B), cobre (Cu), cloro (Cl), hierro (Fe), manganeso (Mn), molibdeno (Mo) Niquel (Ni) y
zinc (Zn).
Los micronutrientes son tan importantes para las plantas como los nutrientes primarios y
secundarios, a pesar de que la planta los requiere solamente en cantidades muy pequeñas. La
ausencia de cualquiera de estos micronutrientes en el suelo puede limitar el crecimiento de la
planta, aun cuando todos los demás nutrientes esenciales estén presentes en cantidades
adecuadas. La necesidad de micronutrientes ha sido reconocida por muchos años, pero su uso
masivo como fertilizantes es una práctica reciente. Varias son las razones para este
comportamiento. Entre las más importantes se pueden citar:
Incremento de los Rendimientos de los Cultivos - Mayores rendimientos por hectárea no solo
remueven una mayor cantidad de nutrientes primarios y secundarios, sino que también
mayores cantidades de micronutrientes. Los micronutrientes no se aplican tan
frecuentemente como los nutrientes primarios nitrógeno (N), fósforo (P), potasio (K) o como
los nutrientes secundarios. Por lo tanto, a medida que se remueven más micro- nutrientes,
algunos suelos no pueden liberar suficiente cantidad para cubrir las demandas de los actuales
cultivos de alto rendimiento.
265
RELACIONES SUELO-PLANTA
La capacidad del suelo para suministrar micronutrientes puede establecerse por medio de un
análisis de suelo, usando diferentes extractantes. La Tabla 7.4 describe algunos de los
extractantes utilizados para determinar la disponibilidad de los micronutrientes en el suelo.
Los datos analíticos obtenidos con estos extractantes son útiles únicamente cuando se han
correlacionado con la respuesta del cultivo a fertilizaciones específicas con micronutrientes en
el campo.
La fertilización con micronutrientes debe ser manejada como cualquier otro insumo de la
producción. Si se sospecha de una deficiencia de micronutrientes, ésta se debe confirmar
mediante herramientas de diagnóstico como el análisis de suelo, el análisis foliar, los síntomas
visuales de deficiencia y mediante pruebas de campo. Se debe desarrollar el hábito de
observar detenidamente el cultivo en crecimiento para detectar posibles áreas
266
problemáticas. El diagnóstico de campo es una de las herramientas más efectivas en el
manejo de la producción.
Boro
Maíz 25 días, hojas superiores <5 5-25 -
Remolacha Lámina de la hoja <16 16-18 -
Cobre
Maíz Hoja abajo de la mazorca <5 5-30 > 30
Soya Hojas recientemente maduras < 10 10-30 > 30
Trigo Tallo <8 8-10 -
Hierro
Maíz Hojas recientemente maduras 24-56 56-78 -
Arroz Hojas < 63 < 63 -
Soya Tallos ( 34 días) < 38 44-60 -
Manganeso
Maíz Hojas abajo de la mazorca - 19-84
Arroz Tejido superior <20 - > 2500
Trigo Tejido superior - 181-621 -
Soya Tejido superior <15 15 - + -
Molibdeno
Cebada Hojas de 8 semanas <0.03 - -
Zinc
Trigo Planta de 8-30 cm <15 15-150 >150
Maíz Crecimiento vegetativo <15 15-150 >150
Soya Hojas <20 20-50
Arroz Crecimiento vegetativo <20 20-250 -
Cloro
Plantas - <100 - -
267
Tabla 7.3. Remoción de micronutrientes en la parte cosechada de varios cultivos.
268
Tabla 7.5. Rango de pH para mejor disponibilidad de los micronutrientes.
Rango de pH para
Micronutriente Símbolo máxima disponibilidad
Boro B 5.0-7.0
Cloro Cl No es afectado
Cobre Cu 5.0-7.0
Hierro Fe 4.0-6.0
Manganeso Mn 5.0-6.5
Molibdeno Mo 7.0-8.5
Zinc Zn 5.0-7.0
En las siguientes páginas se discute cada uno de los micronutrientes en forma individual.
7.1 BORO
Las deficiencias de B son comunes en muchas partes del mundo. La alfalfa generalmente
responde al B, pero las respuestas también ocurren en un gran número en otros cultivos como
frutales, hortalizas, cultivos de aceite, leguminosas, etc. La palma aceitera es particularmente
sensitiva a la deficiencia de B y culti- vos como la canola y las leguminosas de grano tienen
un alto requerimiento de este nutriente.
269
La deficiencia de B generalmente detiene el crecimiento de la planta primero dejan de crecer
los tejidos apicales y las hojas más jóvenes. Esto indica que el B no se trasloca fácilmente en
la planta. A continuación se des- criben síntomas específicos de falta de B en algunos
cultivos:
Textura del suelo - Los suelos de textura gruesa (arenosos), compuestos principal- mente por
cuarzo, tienen una baja cantidad de minerales que contienen B. Las plantas que crecen en
esos suelos comúnmente presentan deficiencias de B.
Lixiviación - El B es móvil en el suelo y está sujeto a lixiviación, principalmente en suelos
arenosos y/o en las áreas de abundan- te precipitación.
Debido al estrecho rango entre deficiencia y toxicidad, es importante que los fertilizantes
portadores de B sean aplicados uniformemente. Las dosis de B dependen de varios factores
entre los que se incluyen: contenido de B en el suelo, contenido de B foliar, tipo de cultivo y
materia orgánica del suelo. En la Tabla 7.7 se presentan las fuentes más comunes de B,
concentración y solubilidad en agua. El B se puede aplicar al suelo o al voleo o en banda,
también se pueden hacer aspersiones foliares de una solución de B. Las cantidades en cultivos
con buenas respuestas pueden ser de hasta 3 Kg B/ha, en cultivos de baja y media respuesta
puede ser de 0,5 a 1. Kg/ha. La Tabla 7.8 indica el efecto del B en la formación de la mazorca
de maiz
271
Tabla 7.7. Fuentes de comunes de boro.
Tabla 7.8. Efecto del boro en la reducción de plantas sin mazorca y en el rendimiento
del maíz.
Dosis de boro,
Plantas sin Rendimiento, kg/ha mazorca, % t/ha
0 23 9.3
1 27 10.1
2 19 10.7
4 18 10.3
IPNI 2010
7.2 CLORO
272
Aproximadamente 60 kg de Cl/ha parecen ser adecuados para obtener rendimientos óptimos
en cereales de grano pequeño. Esta cantidad puede ser suministrada por el mismo suelo o por
medio de fertilizantes. La fuente más común es el cloruro de potasio (KCl) que contiene
aproximadamente 47% dentro de la planta, regulando la apertura y cerrado de las células
guardianes en el estoma, controlando de esta forma la pérdida de agua y el estrés de
humedad y manteniendo la turgencia.
La información de la Tabla 7.9 muestra una excelente respuesta del trigo al Cl en suelos
con bajo contenido DE Cl. El cloruro de amonio (52% de Cl) y el cloruro de magnesio
(74% de Cl) son también fuentes disponibles. Aplicaciones antes, durante o después de la
siembra han sido efectivas. La aplicación de cantidades altas debe hacerse antes o después
de la siembra. El Cl es altamente móvil en el suelo y debe ser manejado de acuerdo con
esta característica.
El Cl puede tener efectos negativos en cultivos como el tabaco, algunas variedades de soya,
papas y ciertos frutales, especialmente la uva. Los efectos varían con las variedades y con el
uso del cultivo.
273
Tabla 7.9. Respuesta del trigo al cloro.
IPNI 2010.
7.3 COBALTO
No se ha probado que el cobalto (Co) sea esencial para el crecimiento de las plantas. Sin
embargo las bacterias en los nódulos de las leguminosas necesitan Co para fijar N
atmosférico.
7.4 COBRE
Los suelos orgánicos son los más propensos a ser deficientes en Cu. Estos suelos general-
mente contienen niveles adecuados de Cu, pero lo retienen tan fuertemente que solo una
pequeña cantidad es disponible para el cultivo. Los suelos arenosos, bajos en materia orgánica,
también pueden llegar a ser deficientes en Cu, debido a pérdidas por lixiviación. Los suelos
pesados (arcillosos) son los que tienen menos probabilidad de desarrollar deficiencias de Cu.
Otros metales en el suelo Fe, Mn, aluminio (Al). afectan la disponibilidad de Cu para la
planta. Este efecto es independiente de los tipos de suelo.
274
Tabla 7.10. Respuesta de los cultivos al cobre.
La Tabla 7.10 demuestra como los cultivos varían en su respuesta al Cu. Los cereales como
el trigo y la cebada son los cultivos con mayor respuesta a las aplicaciones de Cu. La
fertilización con Cu puede beneficiar a cultivos como la cebolla y la zanahoria. Como casi
todos los micronutrientes, cantidades altas de Cu pueden ser tóxicas para las plantas.
Cantidades excesivas deprimen la actividad de Fe y promueven la presencia de síntomas de
deficiencia de Fe en las plantas. Estas toxicidades no son muy comunes.
7.5 HIERRO
Exceso de P en el suelo
Combinación de un alto pH, dosis altas de cal, suelo húmedo y frío, y altos niveles de
bicarbonato
Diferencias genéticas de las plantas
Niveles bajos de materia orgánica en el sue- lo
275
Los cultivos varían en su respuesta al Fe. Los frutales responden mejor, como se muestra en
la Tabla 7.11.
Las aplicaciones al suelo o las aspersiones foliares pueden corregir las deficiencias en los
cultivos. El aplicar materiales solubles (como el sulfato de hierro) al suelo no es muy
eficiente, debido a que el Fe pasa rápidamente a formas no disponibles. Estos materiales son
más eficientes cuando son aplicados en aspersión foliar. Las inyecciones de sales de Fe
directamente al tronco y las ramas de árboles frutales han controlado la clorosis de Fe. La
mayoría de las fuentes de Fe son más eficientes cuando se aplican en aspersión foliar.
Este método de aplicación utiliza cantidades menores de Fe que cuando se aplica
directamente al suelo.(Tabla 7.12)
El alterar el pH del suelo en una banda angosta en la zona radicular puede corregir las
deficiencias de Fe. El azufre elemental (S) al oxidarse baja el pH del suelo y convierten el
Fe no soluble a formas que las plantas pueden usar.
7.6 MANGANESO
El Mn funciona principalmente como parte de los sistemas enzimáticos de las plantas. Activa
generalmente, las deficiencias de Mn están asociadas con un alto pH del suelo, sin embargo,
las deficiencias pueden resultar de un desbalance con otros nutrientes como Ca, Mg y Fe.
La humedad del suelo también afecta la disponibilidad de Mn. Debido a que el Mn no se
276
transloca en la planta, los síntomas de deficiencia aparecen primero en las hojas jóvenes como
un amarilla miento entre las venas. En algunas ocasiones aparecen una serie de puntos de
color café obscuros. En los cereales de grano pequeño aparecen áreas grises cerca de la base
de las hojas jóvenes. Las deficiencias de Mn ocurren con más frecuencia en suelos con alto
contenido de materia orgánica y en suelos con pH neutro a alcalino. Por supuesto, las
deficiencias aparecen en suelos que por naturaleza tienen bajos contenidos de Mn.
Los síntomas de deficiencia son más severos en suelos de un alto contenido de materia
orgánica, durante los períodos en los cuales el suelo está saturado.
Si la deficiencia fue causada por el uso de cal, se debe mantener el pH por debajo de 6.5.
Esto puede lograrse reduciendo las cantidades de cal o usando materiales que acidifiquen el
suelo, incluyendo el S ele- mental. La aplicación en banda de estos materiales, cerca pero
sin llegar a hacer contacto con la semilla, reduce el pH y con- vierte el Mn a una forma
disponible para la planta. Sin embargo, es generalmente más económico añadir Mn que tratar
de bajar el pH.
277
Tabla 7.13. Fuentes comunes de manganeso.
Fuente Porcentaje de Mn
7.7 MOLIBDENO
La planta requiere Mo para sintetizar y activar la enzima nitrato - reductasa. Esta enzima
reduce el nitrato a amonio dentro de la planta. El Mo es vital para el proceso de fijación
simbiótica de N, llevado a cabo por la bacteria Rhizobium en los nódulos de las raíces de las
leguminosas. También es necesario para convertir el P inorgánico a su forma orgánica en la
planta.
de Mo en agua
Molibdato de amonio 54 Si
Molibdato de sodio 39-41 Si
Ácido molibdico 47.5 Ligeramente
Los síntomas de deficiencia de Mo se presen- tan como un amarillamiento general y una falta
de crecimiento de la planta. La deficiencia de Mo promueve el aparecimiento de síntomas de
278
deficiencia de N en leguminosas como la soya y la alfalfa, debido a que la carencia de Mo
no permite que las leguminosas fijen N del aire. El Mo se hace más disponible a medida
que sube el pH del suelo, opuestamente a lo que sucede con la mayoría de los otros
micronutrientes. Por lo tanto, las deficiencias ocurren más comúnmente en suelos ácidos.
Los suelos arenosos presentan deficiencias de Mo con más frecuencia que los suelos de
textura fina. La Tabla 7-15 muestra los efectos del Mo en el rendimiento de soya cultivada
en suelos con diferente pH. Debido a que el Mo se torna más disponible a mayor pH, el
encalado corrige la deficiencia si el suelo contiene suficiente cantidad de este nutriente.
279
7.8 ZINC
El Zn fue uno de los primeros micronutrientes reconocido como esencial para las plantas.
Además, es el micronutriente que con más frecuencia limita los rendimientos de los culti
vos. Por ejemplo, se han reportado deficiencias de Zn en casi todos los países productores
de arroz. A pesar de que es requerido en pe queñas cantidades, es imposible obtener ren-
dimientos altos sin este micronutriente
La deficiencia de Zn en maíz hace que el ápice se torne de color amarillento claro o blanco en
las etapas iniciales de crecimiento de la planta. Las hojas desarrollan fajas de color
amarillento (clorosis) localizadas a un lado o a ambos lados de la nervadura central.
Síntomas en otros cultivos incluyen el color bronceado en el arroz, hojas pequeñas en los
árboles frutales y severo retraso del crecimiento en maíz y fríjol.
Los suelos pueden contener desde pocos hasta cientos de kg de Zn por hectárea.
Generalmente, los suelos de textura fina contienen más Zn que los suelos arenosos. Sin
embargo, el con- tenido total de Zn en el suelo no indica cuanto de este nutriente está
disponible para el cultivo. Varios factores determinan esta disponibilidad:
pH del suelo - El Zn es menos disponible a medida que sube el pH del suelo. Aquellos
suelos encalados a pHs superiores a 6.0 pueden desarrollar deficiencias de Zn, especialmente
en suelos arenosos. Las deficien- cias no se presentan en todos los suelos con pH cercano a
la neutralidad o alcalino, simplemente la probabilidad de deficiencia es mayor. La
concentración de Zn en el suelo se reduce 30 veces por cada unidad de incremento en pH
entre 5.0 y 7.0.
Alta cantidad de P en el suelo - Deficien- cias de Zn pueden presentarse en suelos con una
alta disponibilidad de P. Varios cultivos han demostrado ser susceptibles al efecto de la
interacción Zn-P. Altos niveles de Zn o de P pueden reducir la absorción del otro. La
aplicación de uno de ellos (Zn o P) en un suelo marginal en ambos puede inducir una
deficiencia del otro. El pH del suelo complica más la interacción Zn-P.
280
El aplicar P en un suelo con niveles adecuados de Zn no produce deficiencia de Zn. Sin
embargo, los especialistas sugieren que para obtener rendimientos altos es necesario aplicar 1
Kg de Zn por cada 20 kg de fosfato.
.Materia orgánica - Abundante Zn se puede fijar en las fracciones orgánicas de suelos con alto
contenido de materia orgánica. También se puede inmovilizar temporal- mente en los cuerpos
de los microorganismos del suelo, especialmente cuando se aplican desechos de corral. Por
otro lado, la disponibilidad del Zn en suelos minerales está asociada con la materia orgánica.
Niveles bajos de materia orgánica en el suelo son a menudo indicativos de una baja
disponibilidad de Zn.
Irrigación - El Zn puede volverse deficien- te cuando se nivelan los suelos para riego, debido
a que esta operación remueve la materia orgánica, compacta el suelo y expone capas
inferiores de alto pH.
Lixiviación - El Zn es adsorbido por los coloides del suelo. Esto ayuda a que este
nutriente no se pierda por lixiviación y se mantenga en la zona radicular.
En sitios donde se espera poca disponibilidad de Zn por condiciones de alto pH, o cuando se
presenta una situación de emergencia en un cultivo establecido, se puede aplicar Zn en
281
aspersiones foliares. La aplicaciones foliares generalmente requieren cantidades que varían
entre 0.5 y 1.0 kg de Zn/ha. La Tabla 7.18 presenta datos del efecto de varios métodos de
aplicación de Zn en el rendimiento de maíz.
Las respuestas al Zn pueden ser espectaculares, como se muestra en la Tabla 7.19. En este
estudio, conducido en soya irrigada, se encontró que el mejor tratamiento fue la aplicación
de 4 kg de Zn/ha, produciendo una respuesta en rendimiento de 1.34 toneladas/ha.
Fuente Porcentaje de Zn
282
7.9 NÍQUEL
Es un componente común de las rocas ígneas. Las fuentes más importantes son la pentandlita,
encontrada con la pirrotita y calcopirita, así como con lateritas que contienen níquel como la
garnierita. El níquel constituye cerca de 0,016 por ciento de la corteza terrestre. Las plantas lo
absorben en forma de catión divalente que es muy escaso en la solución del suelo,
aunque puede ser más abundante en los suelos de serpentinas. En este caso resulta tóxico para
la mayor parte de las especies, aunque existen algunas que lo toleran bien y pueden utilizarse
como plantas indicadoras de yacimientos. En ellas, el níquel se inactiva formando complejos
con ácidos orgánicos.
Características generales: El níquel forma parte de la metalo-enzima ureasa (que contiene dos
átomos por molécula) , la cual descompone la urea en amoníaco y dióxido de carbono.
Resulta entonces esencial para las plantas que se abonan con urea o con sus derivados ( por
ejemplo, en la fertilización foliar), jugando entonces un papel importante en el metabolismo
nitrogenado. Algunos investigadores han reportado respuestas en plantas a la adición de Ni,
cuando se ha utilizado urea como fuente de nitrógeno. Se ha estimulado el crecimiento al
añadir Ni en arroz, soya y cultivo de tejidos de tabaco, y en Lemna paucicostata cuando se ha
utilizado la urea como fuente única de nitrógeno. En la soya el Ni aumenta la actividad de la
ureasa foliar, impidiendo la acumulación de niveles tóxicos de urea. El Ni participa en el
metabolismo normal del nitrógeno de las leguminosas.
Síntomas de deficiencia: Las leguminosas deficientes en Ni, acumulan urea que es el agente
causal de la necrosis de los folíolos. La urea es producida durante el metabolismo nitrogenado
normal de las plantas superiores y el Ni evita la acumulación de concentraciones tóxicas de
urea. Las hojas de las plantas que contienen niveles tóxicos de urea y muestran síntomas de
necrosis, tienen niveles de Ni que oscilan entre 0,01 y 0,15 mg por gramo de peso seco.
Plantas de tomate (Lycopersicon esculentum L.) deficientes en Ni desarrollan clorosis en
hojas jóvenes y por último necrosis del meristema. Las deficiencias de Ni tienen efectos en el
crecimiento, metabolismo, envejecimiento y absorción de hierro por las plantas. El Ni parece
tener un papel en la resistencia de las plantas a enfermedades.
283
Los suelos cubiertos por rocas portadoras de minerales o escorias que contienen metales
pesados, especialmente Zn, Pb, Ni, Co, Cr y Cu; así como Mn, Mg, Cd y Se, en cantidades
tóxicas para algunas plantas. Se ha encontrado que muchas plantas son sensibles a la
toxicidad por metales pesados, mientras que otras desarrollan ciertos mecanismos
bioquímicos que evaden su acción tóxica; como son la deposición de metales pesados sobre la
pared celular, enlace a grupos -SH en el límite del citoplasma, o mediante su aislamiento en
compartimientos, formando complejos con ácidos orgánicos, fenoles y otros compuestos
orgánicos en la vacuola. Debido a que la toxicidad implica inactivación de enzimas vitales,
los mecanismos de evasión mencionados, ofrecen una protección efectiva contra daños
bioquímicos. La habilidad que tienen ciertas plantas de desarrollar resistencia contra daños
ocasionados por metales pesados, es un carácter fijado genéticamente, pero modificable por
adaptación. Los quimo-ecotipos muestran isoenzimas particulares, que pueden resistir altas
concentraciones de metales pesados sin inactivarse. En ciertas plantas se ha hallado una
correlación directa entre el grado de exposición a un metal pesado, y su tolerancia. Algunas
de las plantas tolerantes a metales pesados (metalófitas), se pueden utilizar inclusive como
indicadoras de depósitos minerales cerca de la superficie y son también apropiadas para ser
plantadas en áreas industriales y sujetas a minería.
En este trabajo se hará particular referencia a los efectos tóxicos ocasionados por los metales
pesados aluminio, manganeso y hierro, con especial énfasis a sus efectos fisiológicos.
La toxicidad por aluminio es un factor importante que limita el crecimiento de las plantas en
suelos fuertemente ácidos por debajo de pH 5.0, pero puede ocurrir a un pH un poco más alto
de 5,5. Este problema es muy serio en subsuelos extremadamente ácidos que son difíciles de
encalar, intensificándose por fuertes aplicaciones de fertilizantes nitrogenados formadores de
ácidos. La toxicidad por aluminio reduce la profundidad de las raíces, aumenta la
susceptibilidad a la sequía y decrece la utilización de los nutrientes del subsuelo. El aluminio
afecta el alargamiento de las raíces reduciendo la actividad mitótica. Las raíces dañadas por
Al son cortas y quebradizas, los ápices radicales y raíces laterales se engruesan y adquieren
una coloración marrón. Las raíces afectadas por Al son ineficientes en la absorción de agua y
de nutrientes. En general, se ha encontrado que las plántulas jóvenes son más susceptibles al
Al que las plantas viejas.
285
TOXICIDAD POR HIERRO
La toxicidad por Fe aparentemente está relacionada con desórdenes fisiológicos del arroz bajo
condiciones de inundación. Estas incluyen bronceado de las hojas. Un exceso de hierro bajo la
forma ferrosa , originó el moteado de las hojas en una plantación de caña de azúcar en
Hawaii. Se ha asociado el bronceado del arroz con una alta concentración de productos
reducidos, particularmente , en la solución del suelo. Esos desórdenes fueron eliminados
drenando, disminuyendo la inmersión de las plantas o la adición de retardantes de la
reducción tales como La adición de al 0,4% al suelo corrigió un desorden
fisiológico del arroz y mejoró el crecimiento del arroz en tres suelos ácidos de pH 3,6 a 5,8.
A niveles de pH por debajo de 6.0 un suelo reducido pueden contener 5000 ppm de en
la solución del suelo, sí la fase sólida importante está formada por pero sí la fase
sólida principal está constituida por Fe S, la concentración de depende del pH y los
niveles de H2S.
Las especies vegetales y los genotipos dentro de las especies difieren en tolerancia a la
toxicidad por Fe. Por ejemplo se ha hallado que Lupinus alba mostró tres veces más
resistencia a excesos de Fe y Al que Phaseolus vulgaris. El cambur y el arroz son más
tolerantes a excesos de Al y Fe que la caña de azúcar.
En suelos ácidos con altos niveles de Al y Mn, la reducción del crecimiento de la planta se
puede atribuir erróneamente a la toxicidad por Mn, siendo la toxicidad por Al la más
importante. Se sabe que un exceso de Mn promueve la destrucción de la auxina (AIA) en
algodón, a través de un aumento en la actividad de la oxidasa del ácido indolacético. Un
exceso de Mn en el suelo afecta la fijación de nitrógeno por las leguminosas y retarda la
aparición de nódulos. La tolerancia al manganeso por ciertas plantas, se ha atribuido a una
reducida absorción, menor translocación del exceso de Mn a las partes superiores y una
mayor tolerancia a altos niveles de Mn dentro de los tejidos de las plantas.
287
El efecto fitotóxico de los compuestos mercuriales ha sido reportado en algunas plantas como
el trigo, el arroz y otros cereales; sin embargo la intensidad del impacto depende de la
concentración, la formulación, el modo de aplicación y el cultivar. En las semillas se ha
observado una germinación anormal. El mercurio interfiere con los sistemas -SH en las
células, causando la formación de puentes -S-Hg-S- , ya que los cationes de mercurio tienen
una alta afinidad por los grupos sulfhidrilos. Debido a que a que casi todas las proteínas
tienen grupos -SH o puentes disulfúros, los compuestos mercuriales pueden afectar las
funciones en que participan proteínas sin protección.
Los compuestos mercuriales se pueden enlazar al ARN del virus del mosaico del tabaco, así
como a poliribosomas sintéticos y al ARN soluble de levaduras.
El cultivo de diferentes plantas transgénicas con los genes merA y merB es promisorio. El gen
merA, que codifica por una enzima reductasa del ión mercurio, reduce el ión mercurio a su
forma elemental menos tóxica. El gen merB codifica por una proteína liasa organomercurial
que separa el mercurio de compuestos de metil mercurio más tóxicos. Las que tienen el gen
merB se ha demostrado que detoxifican los compuestos de metilmercurio tanto del suelo
como del agua. La contaminación por mercurio en aguas servidas se puede atacar mediante el
uso de plantas acumuladoras, como Eichhornia crassipes y Typha sp., o cultivando esas
plantas mediante una rutina de mutagénesis o por ingeniería genética.
Aunque cualquiera de los metales pesados puede ser tóxico a las plantas a ciertos niveles de
solubilidad, solamente pocos han sido observados como causantes de fitotoxicidad en suelos.
En los suelos, muchos metales pesados se encuentran como compuestos inorgánicos o están
unidos a la materia orgánica, arcillas de óxidos hidratados de Fe, Mn y Al. Debido a la
precipitación y absorción de muchos metales por los suelos, solamente las toxicidades por Zn,
Cu y Ni han sido frecuentemente observadas. Las toxicidades por Pb, Co, Be, As y Cd
ocurren solamente bajo condiciones especiales. La toxicidad por plomo y cadmio son de
interés no solamente por la fitotoxicidad, sino porque al ser absorbido por las plantas se
mueven en la cadena alimenticia. Los metales tóxicos se encuentran naturalmente en los
suelos debido a que los materiales parentales son abundantes en estos elementos.
El aire contaminado puede actuar como una fuente de metales que luego se depositan en los
suelos. La emisión de plomo por los automóviles está restringida generalmente a una distancia
30 metros, pero el Pb expulsado por los automóviles es depositado en sitios tan lejanos como
288
el círculo polar ártico. Se ha demostrado que las fundiciones metálicas, acerías, fábricas
operadas con carbón y los incineradores son fuentes de contaminación por cadmio, plomo,
zinc y cobre.
El agua se puede contaminar con metales disueltos en suspensión ya sea por procesos
naturales o por la actividad humana. El problema del cadmio (Cd), conocido como
enfermedad "Itai-Itai" se detectó en un área en donde se escaparon desechos minerales a un
río, que se usó luego para regar cultivos de arroz. En Florida se reportó toxicidad por Cu, en
sitios en donde se aplicó exceso de fertilizantes y fungicidas a base de Cu a frutales de
naranjas, bananas y uvas. Muchos compuestos químicos utilizados en agricultura como
fertilizantes, pesticidas, piedra caliza, así como desechos urbanos, contienen cantidades
mayores de metales pesados, que las que se encuentran en un suelo normal. Sin embargo,
ciertas plantas muestran diversos grados de tolerancia a la toxicidad por metales pesados, lo
que puede estar correlacionado con la disponibilidad de estos metales en los suelos donde
crecen las plantas.
289
CAPÍTULO VIII.
ANALISIS DE SUELO
El análisis de suelo continuará siendo una de las más importantes prácticas de manejo en la
producción de cultivos y en la protección ambiental. Con seguridad, ésta será una de las
PAM utilizadas universalmente por extensionistas, consultores y técnicos a cargo del manejo
agronómico de fincas y empresas agrícolas. El análisis de suelo debe ser una herramienta de
planificación y de soporte muy útil en el manejo de la finca. Con esto el ambiente también se
beneficia ya que mejora el manejo del recurso suelo y de los insumos necesarios en la
producción.
Las estadísticas que demuestran bajo uso de fertilizantes y mediocres rendimientos de los
cultivos indican que en muchas fincas la fertilidad del suelo podría estar declinando debido a
un manejo nutricional deficiente. Las consecuencias de minar los nutrientes del suelo (usar
más de lo que se aplica) no son evidentes por varios años.
La Tabla 8.1 muestra los cambios nutricionales del suelo en experimentos de fertilidad a largo
plazo, conducidos en Huiyang, provincia Guangdong, China. Se cosecharon dos cultivos de
arroz al año. Los datos obtenidos indican que solamente cuando se usan fertilizantes no
se reduce el contenido de fósforo (P) y de potasio (K) en el suelo. Cuando no se aplicaron
nutrientes (NPK) por 11 años (en suelos con contenidos de moderados a altos), el contenido
promedio de P disponible en el suelo bajó en 2.2 partes por millón (ppm) por año, y el
contenido de K se redujo en aproximadamente 0.8 ppm. Cuando se aplicó solamente
nitrógeno (N) se redujo la disponibilidad de P en 3 ppm y el K en 1 ppm por año. Si se
permite que estas tendencias continúen, se observarán pérdidas substanciales del rendimiento
potencial del cultivo. Si esto sucede, serán necesarios varios años de aplicaciones de altas
cantidades de P y K para restablecer rendimientos óptimos. El permitir que se reduzca el
contenido de nutrientes en el suelo tiene consecuencias muy negativas en la productividad, la
rentabilidad y en el ambiente.
290
Tabla 8.1. Cambios en el contenido de nutrientes en el suelo de un experimento a largo
plazo, conducido en Ecuador.
Indica los niveles nutricionales en el suelo y, por lo tanto, es el punto de partida para des-
arrollar un programa de fertilización. Se puede diseñar un programa exitoso combinando la
información del análisis de suelo con información sobre el historial del campo o del sistema
de cultivo, el potencial global de productividad del suelo, y la capacidad de manejo del
agricultor.
El análisis de suelo puede también utilizarse en forma regular para monitorizar los cambios
nutricionales del suelo, manteniendo así la fertilidad global del sistema en la búsqueda de
rendimientos altos sostenidos, con un alto potencial de rentabilidad.
Existe considerable flexibilidad para la elección del laboratorio al cual se pueden enviar las
muestras de suelo para análisis. En general, existen tres tipos de laboratorios que ofrecen esta
clase de servicios:
291
Privados - Los servicios de análisis de su- los de estos laboratorios usualmente son par- te de
servicios más amplios como análisis de alimentos, agua, fertilizantes, etc. ofrecidos en forma
comercial por diversas compañías.
Industria - Ciertas compañías productoras o distribuidoras de fertilizantes ofrecen servicios de
análisis de suelos y análisis foliar, como parte global de sus servicios al cliente de sus
programas de mercadeo.
Cualquiera de estos laboratorios debería tener los siguientes objetivos:
Alta calidad de los análisis.
Recomendaciones de fertilización y enmiendas que busquen obtener el máximo potencial de
rentabilidad para el productor.
Solucionar los problemas de fertilidad de suelo que puedan estar limitando los
rendimientos.
Entrega rápida de los resultados.
Es claro entonces, que se deben recolectar las muestras de suelo cuidadosamente para
asegurar que los resultados de los análisis sean representativos. A menudo los laboratorios
proveen panfletos con instrucciones de como tomar muestras de suelo. En general, estas
instrucciones incluyen los siguientes pasos:
292
Muestreo de Campo
Se debe tomar una muestra individual de cada lote que tiene topografía, tipo o color de
suelo diferente, o que haya estado sujeto a diferentes prácticas de manejo. Por lo tanto, un
campo grande debe ser dividido en lotes con suelos uniformes, o en lotes con el mismo
historial de cultivos, dependiendo de cada sitio en particular. A cada lote se debe asignar un
número permanente de identifica- ción y se deben registrar estos números de campo. Es
aconsejable tener un mapa de las áreas de muestreo.
Usar un balde plástico limpio, especialmente para análisis de micronutrientes (los baldes de
metal pueden contaminar la muestra).
Tomar la muestra a una profundidad de 15 a
20 cm para cultivos anuales y de 7 a 10 cm para pastos.
Se pueden recolectar también muestras del subsuelo para evaluar la capacidad total de
suplemento de nutrientes, y para determinar si existe pérdida excesiva de nutrientes como el
N (ver Capítulo 3).
Recoger al azar muestras de más de 20 sitios (submuestras) del área de muestreo. Estas
submuestras se mezclan en el balde forman- do una muestra compuesta. Dependiendo de la
herramienta de muestreo utilizada (barre- no, pala, machete, etc.), la muestra compuesta puede
pesar uno o varios kg.
Mezclar bien las submuestras para obtener una muestra compuesta representativa del área
de muestreo. Este paso es extremadamente importante. Los terrones de tierra deben
romperse con los dedos mientras se mezcla todo el suelo. La mezcla inapropiada de las
submuestras puede resultar en errores graves de muestreo.
Se pueden utilizar varios tipos de recipientes para enviar las muestras al laboratorio. Algunos
laboratorios entregan estos recipientes como parte del servicio. Se pueden utilizar también dos
fundas plásticas nuevas, limpias y extra fuertes. La funda interna contiene la muestra,
mientras que entre la funda interna y la externa se coloca la hoja de información con la
identificación de la muestra.
Con las manos se procede a recoger del balde el suelo mezclado y a colocarlo en la funda o
recipiente. Se repite la operación hasta tener alrededor de 500 g de suelo en la funda,
asegurándose de que en cada ocasión se mezcle nuevamente el suelo en el balde.
Llenar completamente la hoja de informa- ción con los datos pertinentes.
Muestrear los lotes cada 2 o 3 años con más frecuencia si es necesario.
Mantenga un historial de los resultados de los análisis de suelo.
Recoger muestras separadas de las áreas buenas y de las áreas con problemas, usando las
técnicas que fueron descritas anterior- mente.
293
Tomar muestras de la superficie y del sub- suelo. Sitio específico.
El muestreo detallado del suelo y las diferentes dosis de fertilización para cada sitio
específico marcado por las cuadrículas en el campo, resultaron en un incremento en los costos
de fertilización de 103 a 117 dólares por ha (Tabla 8.2). Sin embargo, con esta forma de
aplica- ción se concentraron los fertilizantes en áreas donde dieron resultados más rentables.
Incluir la descripción de los problemas junto con los da- tos de identificación de las
muestras.
Por muchos años, las determinaciones más comunes fueron P y K disponibles y los
requerimientos de cal. Los requerimientos de cal se determinaban midiendo el pH y la acidez
activa, junto con el calcio (Ca) y magnesio (Mg) disponibles. Muchos laboratorios también
de- terminaban el contenido de materia orgánica y la CIC.
Hoy en día se pueden hacer con precisión muchas otras determinaciones en el laboratorio,
incluyendo azufre (S) y micronutrientes como investigación.
Los análisis de N en el suelo tienen limitado valor para hacer recomendaciones de este
nutriente. Esto se debe a la naturaleza del N que constantemente se transforma y se mueve
en el suelo. En el laboratorio se puede determinar el N total y el contenido de materia
orgánica, pero estas determinaciones solo dan una idea aproximada de las reservas de N.
295
Sin embargo, el determinar anualmente el con- tenido de nitrato (NO3 ) ha demostrado ser una
herramienta efectiva para determinar las necesidades de N, particularmente en áreas de baja
precipitación. El muestreo a una profundidad aproximada de 0 a 60 cm es efectivo para de-
terminar el NO3 residual disponible para satisfacer las demandas de cereales de grano
pequeño, sorgo y maíz. Se recomienda muestrear a mayor profundidad para remolacha
azucarera. Investigación reciente ha encontrado utilidad a las determinaciones de NO3
superficiales (0 a 30 cm) como ayuda para refinar las recomendaciones de N en áreas más
húmedas. El momento de la toma de la muestra para determinar NO3 varía con el
cultivo, clima y tipo de suelo.
La utilidad de los análisis de suelos demuestra todo su potencial para el diseño de recomenda-
ciones de fertilización y manejo de nutrientes que busquen alcanzar rendimientos y
rentabilidad altos cuando se los usa conjuntamente con toda otra información disponible. La
persona a cargo del diseño de las recomendaciones debe tener buen entrenamiento y
experiencia en interpretar los resultados de los análisis. Esta persona necesita tener a su
alcance toda la información disponible de lote, de la finca y el manejo del agricultor.
La mayoría de agricultores que analizan sus suelos son personas que están buscando
incrementar sus rendimientos y rentabilidad, pero también son personas que están interesadas
296
en elevar y mantener niveles de fertilidad del suelo, protegiendo al mismo tiempo el
ambiente. El técnico a cargo de las recomendaciones tiene estos aspectos en mente. Un
programa de recomendaciones que tenga en cuenta estos aspectos debe incluir las siguientes
consideraciones:
Se debe recomendar para lograr rendimientos óptimos del cultivo manteniendo el con-
tenido de todos los nutrientes a niveles que no sean limitantes para el crecimiento y
desarrollo de la planta desde la germinación hasta la madurez.
Si el contenido de uno o más nutrientes es medio o bajo, se deben aplicar dosis de fertilizantes
que incrementen el contenido de nutrientes en el suelo y los lleven a niveles “al- tos”. De allí
en adelante se deben chequear periódicamente los niveles nutricionales en el suelo para estar
seguros que estos se mantienen a través del tiempo.
Mantener una fertilidad balanceada para que el cultivo use en forma óptima los recursos suelo
y agua.
Sin embargo, existe una buena probabilidad de que se presente respuesta a la aplicación de
fertilizantes aun en suelos con contenidos altos de nutrientes. Esto es especialmente cierto
cuando se buscan rendimientos más altos, o cuando en climas templados se siembra temprano
en primavera en suelos fríos y húmedos. En todos los climas, las prácticas de labranza, la
compactación y el pH del suelo muy alto o muy bajo incrementan la probabilidad de res-
puesta a la aplicación de P y K, especialmente a aplicaciones de arranque, aun en suelos con
contenidos altos de estos nutrientes.
Bajo 95-100
Medio 65-95
Alto 30-65
Muy alto 10-30
(IPNI 2010).
297
ayuda del análisis de suelos. Al mismo tiempo, el análisis de suelos brinda una buena
oportunidad para realizar otros cambios necesarios en las prácticas de manejo de los cultivos.
Muchos agricultores, como gente de negocios, desean más que una simple recomendación de
fertilización que incluya solamente las cantidades de los nutrientes a aplicarse. Desean una
recomendación completa de fertilizantes que incluya el tipo, el momento y método de aplica-
ción, además de información adicional sobre los requerimientos de cal u otras
enmiendas. También desean un paquete completo de recomendaciones que les permita
alcanzar la meta de obtener altos rendimientos. Esto significa la inclusión de todos los
factores que se relacionen con altos rendimientos variedad y densidad de siembra apropiadas,
prácticas cultura- les, época de siembra y cosecha, uso apropiado de herbicidas y pesticidas,
etc. Las metas de rendimiento son una parte importante e integral de las recomendaciones.
ANALISIS FOLIAR
El análisis de suelo y el análisis foliar son técnicas que van de la mano. El uno no substituye
al otro. Las dos son herramientas de mucha utilidad en el diagnóstico del estado nutricional de
los cultivos. Muchos agricultores usan ambas herramientas para asegurar un diagnóstico
eficiente. Por varios años, se utilizó el análisis foliar para el cultivo de árboles como
duraznos, manzanas, picones y otras nueces y frutas. Debido a la naturaleza perenne y al
extenso sistema radicular de los cultivos arbustivos, el análisis foliar es especialmente
recomendable para determinar su estado nutricional.
El análisis foliar ha adquirido mayor importancia a medida que se ha desarrollado más cono-
cimiento acerca de la nutrición de las plantas y de los requerimientos de nutrientes durante
todo el ciclo del cultivo, y a medida que es posible la aplicación de nutrientes mediante los
sistemas de riego. Cuando se buscan rendimientos altos, el análisis foliar es una
excelente ayuda para controlar el estado nutricional de la planta durante todo el ciclo de
298
crecimiento. Por esta razón, esta herramienta de diagnóstico es cada vez más útil en cultivos
anuales y en pastos y forrajes.
A igual que en el análisis de suelo, una importante fase del análisis foliar es la recolección de
muestras. La composición de la planta varía con la edad, la parte de la planta que se ha
tomado como muestra, la condición de la planta, la variedad, el clima y otros factores. Por
lo tanto, en este caso es también importante seguir las instrucciones que permiten un
apropiado muestreo foliar.
La mayoría de los laboratorios proveen panfletos con instrucciones para muestreo foliar de
varios cultivos. En áreas con problemas se sugiere que se envíe una muestra de la zona buena
y otra de la mala para comparación. Debido a que la experiencia y el entrenamiento son
vitales para la correcta recolección de muestras foliares, con frecuencia el muestreo lo
conduce el técnico agrónomo de la finca, un consultor o un extensionista.
Actualmente, el análisis foliar está sujeto a ex- tensa investigación por los especialistas en
nutrición vegetal. Existe todavía mucho por des- cubrirse acerca del uso del análisis foliar
299
como herramienta de diagnóstico. La constante investigación determina continuamente
nuevos parámetros y establece nuevos estándares. Los datos de los análisis foliares deben ser
interpretados por técnicos entrenados en este campo y que conozcan todos los factores
involucrados en el uso adecuado de esta herramienta. En estas condiciones el análisis foliar es
una adición valiosa a las herramientas de diagnóstico ya existentes.
DRIS
El análisis rápido de tejidos, que se conduce en el propio campo, es una determinación del
con- tenido de un nutriente en la sabia de la planta. Es una determinación semi-cuantitativa
del contenido soluble y no asimilado del nutriente.
La presencia de una alta cantidad de un nutriente en la sabia indica que la planta está
recibiendo suficiente cantidad del nutriente para un buen crecimiento. Si la cantidad es
baja, existe la posibilidad de que el nutriente esté deficiente en el suelo, o no esté siendo
absorbido por la planta debido a factores limitantes como falta de humedad o compactación
del suelo.
Los análisis rápidos de tejidos pueden hacerse fácilmente y en el campo. Los tejidos
verdes de la planta pueden ser analizados para determinar el contenido de varios
nutrientes. . NO3, P, K y en algunas ocasiones Mg, Mn, y Fe. Sin embargo, se requiere de
mucha práctica y experiencia para interpretar los resultados, especialmente aquellos de Mg y
micronutrientes.
300
Este método de análisis de tejidos se usa para identificar que nutriente (N, P, o K) podría
estar limitando el rendimiento del cultivo. Si el contenido de un nutriente es muy bajo, otros
nutrientes pueden acumularse en la sabia, debido al restringido crecimiento de la planta. Esto
puede conducir a una interpretación errónea del estado nutricional de la planta. Luego de
corregirse la deficiencia el cultivo crece vigorosamente, pero aun en este punto se puede
encontrar que otro u otros nutrientes no están presentes en cantidades adecuadas para
producir un alto rendimiento. Lo que se identifica o determina con este método de
diagnóstico es que nutriente es el más limitante en una etapa particular del crecimiento.
Estos análisis, conducidos directamente en el campo, pueden ser de mucha ayuda en manos
de un experto. Las deficiencias de N pueden ser detectadas sin salir del campo y se pueden
tomar las medidas correctivas inmediatamente. Este ahorro de tiempo en ocasiones es muy
valioso. Al igual que con el análisis foliar convencional, es muy importante el comparar
plantas saludables con plantas que presentan problemas, cuando esto sea posible.
Existen en el mercado equipos para análisis rápido de tejidos que traen instrucciones y
reactivos para realizar determinaciones. Con algunos de estos equipos también se puede
determinar pH, P y K en el suelo. La utilización de estos equipos requiere de un calificado
entrenamiento previo que desarrolle las habilidades del operador para el diagnóstico.
Los análisis rápidos de tejido no han sido usa- dos tan ampliamente como deberían. Es más
fácil para la mayoría de personas enviar una muestra de suelo o de tejido a un laboratorio
que desarrollar la habilidad para conducir e interpretar apropiadamente estos análisis.
Además, los reactivos deben mantenerse frescos y en condiciones apropiadas de trabajo. Los
equipos de análisis rápido son una herramienta de diagnóstico complementario que no
substituyen a los análisis de suelo y foliares convencionales. Cuando se usan
apropiadamente, funcionan muy bien como otra buena herramienta de diagnóstico,
conjuntamente con los análisis de suelo y con los análisis foliares convencionales.
301
siguientes claves sencillas son una buena forma de comenzar con el desarrollo de las
habilidades para determinar carencias nutricionales en los cultivos.
302
Concepto de Producción 8-1
ESTAS CELULAS FORMAN una planta vigorosa, con un sistema radicular fuerte, que
explora el suelo por OTROS nutrientes satisfaciendo las necesidades nutricionales
promovidas por la adición de N en un cultivo de alto rendimiento.
Recuerde: los síntomas de deficiencia no siempre están claramente definidos. Los efectos de
otros nutrientes, enfermedades e infestación de insectos pueden enmascarar los síntomas y
evitar un adecuado diagnóstico de campo.
303
Recuerde: los síntomas visibles de deficiencia siempre indican una severa falta de un
nutriente, nunca una carencia leve o moderada.
Recuerde: muchos cultivos empiezan a perder rendimiento y calidad sin que aparezcan
síntomas de deficiencia. Esta condición que limita el rendimiento se denomina hambre
escondida.
Para realizar un diagnóstico COMPLETO del estado nutricional se debe ver más allá de los
problemas de fertilidad. Se debe entender además las condiciones ambientales prevalentes y
sus efectos sobre el cultivo. Este conocimiento puede ayudar a identificar un problema que
induce o magnifica una aparente falta de nutrientes. Deben ser evaluados todos los factores
que influyen en el crecimiento del cultivo, en la respuesta a la fertilización y en el
rendimiento.
Zona Radicular- El suelo debe tener buena textura y suficiente permeabilidad para que las
raíces se expandan y exploren el suelo extensivamente. En algunos suelos, un cultivo puede
desarrollar un sistema radicular de una profundidad mayor a 180 - 200 cm para conseguir
agua y nutrientes. Un suelo de poca profundidad o compactado no ofrece esta amplia zona
para exploración radicular. Los suelos muy húmedos o mal drenados resultan también en
sistemas radiculares poco profundos.
Temperatura- La temperatura baja del suelo hace que la descomposición de la materia
orgánica sea lenta. Esto reduce la liberación de N, S y otros nutrientes al suelo. Los
nutrientes son menos solubles en suelos fríos, lo que incrementa el potencial de deficiencias.
El P y el K se difunden más lentamente en suelos fríos. La actividad radicular se reduce.
pH del Suelo- Las condiciones ácidas del suelo reducen la disponibilidad de Ca, Mg, S, K, P
y Mo e incrementan la disponibilidad de Fe, Mn, B, Cu y Zn. El pH del suelo no afecta la
disponibilidad del Cl. El N es más disponible en un rango de pH de 6.0 a 7.0.
Insectos- No se debe confundir los daños de insectos con síntomas de deficiencia de
nutrientes. Examine las raíces, las hojas y los tallos para encontrar daños causados por
insectos que induzcan o tengan la apariencia de una deficiencia nutricional.
304
Enfermedades- Una cuidadosa inspección permite distinguir los efectos de una enfermedad de
los síntomas de deficiencia nutricional. Las enfermedades se pueden a me- nudo detectar con
una lupa de mano.
Condiciones de Humedad- Las condiciones de suelo seco promueven la presencia de
deficiencias de B, Cu y K. Esta es la razón por la cual los cultivos responden muy bien a la
aplicación de estos nutrientes en períodos secos. La falta de agua en el suelo hace más lento el
movimiento de los nutrientes hacia las raíces.
Problemas de Salinidad- La concentración de sales solubles y la acumulación de sodio (Na)
son un problema en ciertas áreas. Esta condición puede aparecer solamente en par- te del
campo. Generalmente se presentan en lugares donde existe una alta tabla de aguas, donde
se ha contaminado el suelo con soluciones salinas, o donde se usa agua de mala calidad para
la irrigación.
Identificación de Malezas- Los herbicidas y el control mecánico de malezas son hoy más
importantes que en cualquier otra época. Las malezas compiten con el cultivo por agua,
aire, luz y nutrientes. Algunos ti- pos de malezas pueden liberar substancias que impiden el
crecimiento del cultivo. Se debe aprender a identificar y controlar las malezas en el campo.
Prácticas de Labranza- Algunos suelos desarrollan capas duras (compactadas) y re- quieren de
una labranza profunda. Esto condición requiere de más P y K para elevar y mantener la
fertilidad. Es también una buena idea el conocer el nivel de fertilidad del subsuelo.
Espacio entre Plantas- El espacio entre hileras, el espacio entre plantas dentro de la hilera y el
número de plantas por hectárea tienen un efecto importante en el rendimiento.
Análisis del Agua- El agua de riego puede contener NO3, sulfato, B, K, bicarbonato, Cl y
otras sales. Se debe analizar el agua para modificar las prácticas de producción de acuerdo a
la calidad de cada fuente de agua.
La clave para hacer un buen diagnóstico y para diseñar buenas recomendaciones es recoger
sistemáticamente toda la información disponible y anotarla en los registros. El mantener a
mano una lista de las cosas que se deben chequear en el campo ayuda a registrar importantes
aspectos necesarios para el diagnóstico que de otra forma podrían escaparse.
Los análisis de suelo y foliares ayudan a resol- ver los problemas de crecimiento de la planta.
Sin embargo, no se deben excluir otras herramientas de diagnóstico y de información como
las que se presentan a continuación.
Material impreso - Ayudas visuales, libros, folletos y otras fuentes de información que
identifican los síntomas de deficiencias, los efectos de los ataques de enfermedades e
insectos, describen variedades adaptadas, etc. Esta información está disponible en casi todos
los países en agencias gubernamentales y en oficinas de organizaciones priva- das.
Extensionistas - Los técnicos que trabajan en programas de extensión gubernamentales o
privados, los técnicos de las compañías que comercializan fertilizantes y productos
químicos y los consultores privados están en el campo para ayudar con el diagnóstico de
los problemas de producción. Pongámoslos a trabajar.
Talleres de entrenamiento - Los servicios de extensión y las asociaciones provinciales y
estatales de productores auspician talleres de entrenamiento y visitas de campo que
discuten sobre el análisis de suelo y foliar, identificación de deficiencias, información sobre
306
nuevas variedades y control de enfermedades, insectos y de malezas, manejo de nutrientes
y labranza y otras prácticas de manejo de cultivos.
Días de campo - Los días de campo en par- celas de investigación o en parcelas demostrativas
son auspiciados por los especialistas de las universidades, institutos de investigación,
asociaciones de productores y técnicos trabajando para la industria. Estos eventos proveen de
una gran oportunidad para observar las prácticas de producción en acción.
Cursos cortos de fertilidad de suelo - Es- tos cursos ayudan en la revisión de los conceptos
básicos y permiten a los estudiantes aprender nuevas ideas y técnicas de producción.
Pala
Navaja
Cinta métrica
Lupa de mano
Cámara
Muy pocos agricultores observan sistemática- mente sus campos. La falta de motivación
puede ser una de las razones para este comportamiento. Sin embargo, es muy importante el
estar calificado para diagnosticar la situación en el campo. El entrenamiento y la práctica
así como la ayuda de expertos permiten llegar a ser una persona calificada en el
307
diagnóstico. Se debe animar a los agricultores a usar toda la ayuda necesaria para
diagnosticar el estado nutricional de sus campos.
Cada campo tiene algo que limita su rendimiento. El corregir ese factor limitante permite
que los rendimientos se incrementen. Luego se debe identificar y corregir el siguiente factor
limitante para obtener otro incremento en el rendimiento. El proceso de diagnóstico es un
reto continuo.
Este capítulo identifica al análisis de suelo como una de las principales herramientas en
agricultura de altos rendimientos. Sin embargo, el análisis de suelo es solamente tan bueno
como la muestra enviada al laboratorio. El análisis de suelos alcanza todo su potencial cuando
se utiliza conjuntamente con toda otra información disponible que ayude a diseñar
recomendaciones para obtener rendimientos más altos y rentables. La persona que realiza la
recomendación necesita toda la información disponible acerca del lote y del agricultor.
El análisis foliar es una herramienta que complementa el análisis de suelo. Sin embargo, el
uno no reemplaza al otro. Al igual que en el análisis de suelo, en el análisis foliar es esencial
un buen muestreo. Los datos del análisis foliar deben ser interpretados por técnicos
entrenados.
El análisis rápido de tejidos conducido en el campo usa la sabia de la planta para determinar
que elemento o elementos están limitando el rendimiento en una etapa particular de
crecimiento. El análisis rápido de tejidos puede ser hecho eficientemente en el campo por una
persona entrenada.
Los síntomas de deficiencia de 14 nutrientes fueron descritos en este capítulo. Estos síntomas
no siempre se identifican claramente. Cuando éstos aparecen, significa que existe una
severa carencia del nutriente. Muchos cultivos comienzan a perder rendimiento mucho antes
que se desarrollen los síntomas de deficiencia. Esto se conoce como hambre escondida, una
condición que reduce la calidad y el rendimiento del cultivo, antes que aparezcan los síntomas
visuales.
Se debe observar más allá de los problemas de fertilidad para lograr un completo
entrenamiento en el arte de diagnosticar. Se debe considerar todo el ambiente, desde la
zona radicular hasta las prácticas de labranza. No se puede ignorar la importancia de las
prácticas culturales cuando se trata de diagnosticar las condiciones del cultivo, debe
considerarse cada paso, desde la siembra hasta la cosecha. Finalmente, se puede ajustar o
refinar el manejo en la búsqueda de mayor eficiencia y rentabilidad. El ser capaz de hacer un
308
buen diagnóstico es una manera de mantener los cultivos apuntando hacia una
producción más rentable y más amiga del ambiente. El análisis de suelo, el análisis foliar y
las técnicas de diagnóstico deben ser usadas conjuntamente para mejorar los rendimientos y
la rentabilidad.
309
CAPÍTULO IX.
FERTILIZANTES Y RENTABILIDAD.
INTRODUCCION
Los datos de la situación en China (Figura 9.1) demuestran la estrecha relación existente entre el
crecimiento de la población, la producción de granos y el consumo de fertilizantes.
310
desarrollando áreas para preservación de flora y fauna o lugares de recreación.
Aplicación directa del amoniaco anhídrido y de otros fertilizantes líquidos en Norte Amé
rica;
Introducción de materiales de lenta liberación tales como urea formaldehído y urea
recubierta con azufre;
Descubrimiento y desarrollo de las reservas de potasa en Canadá y en otros lugares;
Desarrollo de los depósitos de fosfatos en Carolina del Norte y en el Este de los E.U.;
Introducción de métodos específicos de localización y época de aplicación de los fertilizantes;
Cambio a sistemas de labranza de conservación y manejo de residuos en ciertas partes del
mundo;
Consolidación de la industria de fertilizantes en Norte América y Europa;
Expansión y privatización de la industria de fertilizantes en muchos países en desarrollo;
Esfuerzo continuo en educación dirigida a técnicos, agricultores y personas a cargo de
políticas agrícolas en países desarrollados y en países en desarrollo acerca de los beneficios
de una fertilización balanceada;
Desarrollo de prácticas de manejo de fertilizantes que optimicen la producción de cultivos,
preservando al mismo tiempo la integridad ambiental;
Fuerte apoyo financiero de los países desarrollados hacia los países de menor desarrollo para
establecer programas técnicos de manejo de suelos, incluyendo la evaluación de
requerimientos nutricionales de los cultivos, el me-
Similares o mayores incrementos en producción son también posibles en muchos de los países
en desarrollo. Sin embargo, muchos factores socia- les como la tenencia de la tierra,
impuestos, incremento en la población, carencia de infraestructura, bajo nivel de educación y
malos sistemas de mercadeo impiden que la tierra ambientalmente frágil sea retirada de la
311
producción de cultivos. Una mejor eficiencia en uso de los fertilizantes y mejores sistemas
de educación que enfoquen métodos de uso adecuado de la tierra necesitan ser incorporados
en futuras investigaciones agronómicas y en los programas de educación en los países en
desarrollo.
El resto de la comunidad agrícola del mundo hace agricultura para obtener ganancias. Sin
tomar en cuenta su grado de preocupación por el ambiente, la única forma de que estos
agricultores se mantengan en esta actividad para mantener el crecimiento social y económico
propio y el de sus familias es logrando una decente rentabilidad. La rentabilidad es
entonces la razón lógica por la cual los agricultores fertilizan sus cultivos. El manejo de este
aspecto de la producción es crítico para la rentabilidad global de la finca. Es importante el
considerar que es lo que SUCEDE y lo que NO SUCEDE cuando se reduce la aplicación de
fertilizantes.
312
El reducir la aplicación de fertilizantes por debajo de los niveles óptimos HACE QUE:
El fertilizante es responsable de más de una ter- cera parte de la producción total del cultivo.
En muchos lotes de alto rendimiento, el incremento de la producción debido al fertilizante
puede ser igual o mayor al 60 %. En China, se ha demostrado que la adición de potasio (K) a
los niveles de N y fósforo (P) utilizados tradicionalmente una fertilización balanceada
incrementa los rendimientos dramáticamente (Tabla 9.2).
Esto demuestra como una PAM . . . fertilización balanceada . . . mejora la utilización del N y
P aplicado por parte del cultivo, reduciendo de esta forma el potencial de pérdidas por
escorrentía superficial y por lixiviación de NO3 a la tabla de aguas.
Costo de producción- El agricultor puede hacer poco para controlar los crecientes costos de
producción, excepto el usar las PAM para asegurar un uso más eficiente de los insumos.
Precio de venta- El agricultor puede optimizar el precio de venta mediante un mercadeo
inteligente de los cultivos, pero tiene poco control sobre los precios del mercado, excepto bajo
ciertas condiciones locales de oferta y demanda.
313
Tabla 9.1. El incremento de la densidad de siembra interacciona con dosis altas de N
para elevar el rendimiento de maíz y la eficiencia de uso de N.
Se deben establecer metas de rendimiento para cada lote. Estas metas deben ser ambiciosas
pero realistas. Se debe comenzar con un análisis de los rendimientos obtenidos en el pasado.
Se debe observar los patrones de clima y se deben evaluar las prácticas de manejo y los
insumos utilizados. Es importante conversar con vecinos que estén logrando rendimientos
mayores y obtener asistencia de los extensionistas del área. Luego de evaluar toda esta in-
formación se debe decidir que prácticas de manejo se deben mejorar y cambiar.
Se debe establecer un programa de incremento de los rendimientos que dure 3 a 5 años, con
una meta de incremento del 5 al 10% anual. Este incremento porcentual dependerá de varios
factores como los rendimientos previos y el cultivo(s) sembrado. El tamaño del lote es
importante. Se sugiere un plan más conservador en un lote grande, mientras que un plan
más agresivo puede ser implementado en un lote más pequeño. Es mejor empezar
identificando la práctica más débil, luego mejorarla completamente y en lo posible en forma
simultánea mejorar otras prácticas de manejo para lograr el alto rendimiento que se espera.
La Tabla 9.2 presenta datos de Indonesia que demuestran como el uso de K, en un programa
balanceado de fertilización, incrementó la producción de arroz, redujo la incidencia de
enfermedades y aumentó la rentabilidad, incrementando al mismo tiempo la eficiencia de uso
314
del P y N. Estos datos ilustran la importancia de un manejo balanceado para incrementar la
producción mientras se eleva la eficiencia de otros insumos utilizados simultáneamente.
El alcanzar las metas de rendimiento propuestas es como subir una escalera. Es un proceso
continuo de manejo. Por supuesto, cuando se alcance la meta propuesta debe establecerse
una nueva meta más alta.
En los E.U., los agricultores se esfuerzan para obtener rendimientos altos y una alta eficiencia
en el uso de insumos. Esto resulta en un bajo costo unitario de producción. En otras
palabras, cuesta menos producir un kg de cultivo con rendimientos altos, que con
rendimientos bajos. Esto se ilustra en la Figura 9.3 donde se observa la relación entre la
producción de maíz y el costo unitario de producción. A medida que los rendimientos se
incrementan de 6.29 a 11.32 t/ha, el costo de producción de cada kg de maíz se reduce,
pasando de 0.13 centavos de dólar a 0.09, haciendo una diferencia de 40.00 dólares por
tonelada.
La Tabla 9.3 demuestra como una combinación de rendimientos altos y costos unitarios bajos
puede ser proyectada a una finca de 120 hectáreas, usando la información de la Figura 9-3 y
dos precios de maíz. Los números entre paréntesis representan pérdidas.
Si bien este ejemplo viene de los E.U., las mismas condiciones prevalecen alrededor del
mundo. La producción bien manejada, con cultivos de alto rendimiento, reduce el riesgo
asociado con bajos precios e incrementa la oportunidad para lograr buena rentabilidad. Una
buena estrategia de mercadeo puede hacer que estas oportunidades sean aún mayores.
315
Tabla 9.2. Efecto de la fertilización con potasio en el rendimiento, reducción de la
incidencia de enfermedades, en la rentabilidad neta y en el uso eficiente de N y P en el
cultivo del arroz.
Los principios ilustrados en la Figura 9-3 se aplican también en otros cultivos. La Tabla 9.3
muestra como una mayor producción y un menor costo unitario se traducen en una mejor
rentabilidad para agricultores de Pakistán que cultivan trigo.
Si bien los ejemplos mostrados anteriormente pueden no encajar en cada finca o situación
Figura 9.3. Rendimientos altos de maíz ayudan a reducir el costo unitario de producción
(Datos de Illinois, E.U.).
La dosis óptima de fertilizante necesaria en un cultivo cambia muy poco por influencia del
precio obtenido por el cultivo o por el costo del fertilizante, siempre y cuando el
316
cultivo continué respondiendo a los nutrientes que se están aplicando. Ejemplos de E.U. y
China que ilustran este principio se presentan en la Tabla 9-7 y en la Tabla 9-8.
Tabla 9.3. Un menor costo unitario significa una mayor rentabilidad en la producción
de trigo (cálculo con dos diferentes precios).
De igual manera, en el ejemplo de China presentado en la Tabla 9.4, a medida que los precios
de la caña de azúcar bajan de 53.57 a 17.86 dólares por tonelada, la dosis óptima de
K2O es todavía rentable, aun al más alto precio de la potasa, y la relación precio : costo
(RPC) es todavía alta. El caso es igual en el cultivo del maní. Cálculos similares con la
mayoría de los cultivos demostrarán que una fertilización balanceada generalmente paga muy
buenos dividendos.
Cuando los costos de N son los más altos y los precios del maíz son los más bajos, la dosis
optima de N es 186 kg/ha. A los precios más altos de maíz y a precios más bajos de N, la
dosis óptima es 215 kg/ha, un incremento de tan solo 29 kg o 15.6%. Al mismo tiempo, la
relación costo de N: precio del maíz cambia por un factor de 3.
Los precios de los cultivos afectan las dosis óptimas de fertilizantes menos de lo que la
mayoría de las personas creen. A qué se de- be esto? Simplemente al hecho de que el
fertilizante representa un porcentaje relativa- mente bajo del costo total de producción,
mientras que el beneficio de la aplicación y uso eficientemente de los fertilizantes es alto. Aun
si los precios de los fertilizantes se incrementaran significativamente una preocupación
constante entre los agricultores . . . existe poca o ninguna justificación económica para
realizar ajustes drásticos en el uso de nutrientes.
De lo antes expuesto se puede concluir que las dosis de fertilizante deben ser las óptimas para
desarrollar y/o mantener una alta fertilidad en el suelo, aun a precios bajos de los cultivos
y/o precios altos de los fertilizantes. Por supuesto, existen límites, pero la mayoría de
agrónomos reconoce que las dosis de fertilizantes más rentables son aquellas que se
encuentran cerca de la parte más alta de la curva de respuesta del rendimiento.
317
Por esta razón, se debe buscar que el contenido de todos los nutrientes en el suelo se eleve a
contenidos altos y luego mantenerlos en esta forma. Esto permite soportar altos rendimientos,
lograr bajos costos de producción por unidad de área, elevar la rentabilidad y mejorar el
ambiente.
Las compras de fertilizante nitrogenado representan una inversión a corto plazo debido a
que se esperan respuestas durante el año de aplicación. El caso de nutrientes como P, K,
calcio (Ca), magnesio (Mg) es diferente debido a que normalmente solo se observa una parte
de la respuesta total durante el año de su aplicación. En la mayoría de los suelos, gran parte
del P y del K se tornan disponibles con el transcurso del tiempo y son usados por
futuros cultivos.
Costos como la limpieza inicial del campo para la instalación en cultivos de plantación y
los costos de la instalación de drenaje o sistemas de irrigación se recuperan en el transcurso
de varios años. Lo mismo sucede con los costos de P y de K los que deben ser amortizados
durante varios años. Sus beneficios son de largo plazo y deberían ser tratados de tal manera.
Este ejemplo demuestra que durante un período de pago de 10 años y con precios del maíz
de 0.10 dólares/kg, es necesario incrementar el rendimiento en 113 kg/ha/año para cubrir el
costo del P2 O5. En el caso de que no existiese respuesta en cinco de los 10 años, un
incremento promedio de 226 kg/ha durante los otros cinco años todavía pagarían el costo del
P2 O5 . No tiene sentido económico el permitir que el P, K y otros nutrientes limiten el
rendimiento
318
Tabla 9.4. Beneficio de fertilizar la caña de azúcar y el maní con la dosis recomendada
de K2O aun cuando los precios del fertilizante sean altos y los precios del producto sean
bajos (datos de China).
El elevar la fertilidad del suelo ofrece varias ventajas al agricultor, sin importar que la tierra
sea propia o rentada.
Una vez que se ha elevado la fertilidad del suelo a contenidos altos, solamente se necesitan
dosis moderadas de fertilizante como aplicaciones de mantenimiento. El potencial de
rendimiento se mantiene por 5, 10 y en ocasiones hasta por 50 años o más.
319
El elevar la fertilidad del suelo permite conseguir rendimientos más altos cada año de
amortización, aun cuando se presenten problemas como sequía, exceso de humedad, bajas
temperaturas, calor excesivo, enfermedades, insectos u otros tipos de estrés.
En algunos casos, el valor de la tierra sube si existe una alta productividad. Los compradores
inteligentes pagarán más por una propiedad bien manejada ya que conocen que el costo
en fertilizantes será menor y que el potencial de rendimiento se mantiene alto.
Se debe tener en cuenta que un alto rendimiento remueve grandes cantidades de nutrientes
primarios y secundarios y en muchos casos pueden acabar rápidamente con las reservas de
micronutrientes en el suelo. Aparte de lo removido por los cultivos, los nutrientes pueden
perderse debido a fijación en el suelo, erosión lixiviación y volatilización. Un buen manejo
ayuda a minimizar estas pérdidas.
Para asegurase que todos los nutrientes esenciales estén disponibles en cantidades adecuadas
y para determinar cuánto se necesita de un nutriente deficiente, se deben analizar los suelos
regularmente. Esto ayuda a monitorizar y manejar los nutrientes para obtener
rendimientos altos y rentables.
El elevar y mantener la fertilidad del suelo es una parte importante de la rentabilidad a largo
plazo. A medida que los agricultores mejoran sus sistemas de manejo incluyendo las
prácticas de fertilización los rendimientos y las ganancias se incrementan a través de los
años. La Figura 9.4 demuestra como el fertilizar para elevar los niveles de K en el suelo,
durante un período continuo de cuatro años de cultivo de maíz, incrementa los
valores del análisis de suelo y aumenta el rendimiento de soya que se cultivó luego del
cuarto ciclo de maíz. Los beneficios residuales del alto contenido de K en los
rendimientos de soya son solamente parte de la historia. El incremento promedio del
rendimiento del maíz durante los cuatro años precedentes fue de 1.6 t/ha por año.
El agricultor debe siempre tener en cuenta que el basar sus decisiones de manejo de
fertilizantes en metas a corto plazo puede ser erróneo y hasta de consecuencias desastrosas.
La Figura 9.4 con datos de China ilustra muy bien este punto.
Un incremento adicional de 122 dólares por año. El costo adicional fue solamente de 32
dólares. Si en 1981 el agricultor hubiese escogido no utilizar N y P, las pérdidas durante los
siguientes 10 años hubiesen sido de 2090 dólares. Al no utilizar una PAM (fertilización
320
balanceada) se habría perdido un adicional de 1220 dólares. La fertilización balanceada es
indudablemente rentable a largo plazo.
La Figura 9.5 indica además que las decisiones del manejo de nutrientes deben ser a largo
plazo. En los rendimientos de arroz en 1981 no existió una marcada diferencia entre los
tratamientos NP y NPK (Figura 9.5). Basándose en estos datos, algunos agricultores podrían
decidir no utilizar fertilizante. Sin embargo, los rendimientos de la parcela testigo
comienzan a declinar en 1982, mientras que los rendimientos de las parcelas NP y NPK se
mantienen bastante cerca en los primeros dos años. Sin embargo es interesante lo que
sucede en 1983 en adelante. La superioridad de los rendimientos del tratamiento que recibe
NPK es indudable.
Durante los 10 años, el rendimiento promedio del control fue solamente de 3.1 t/ha, mientras
que el tratamiento NP produjo 5.0 t/ha. A precios actuales esto daría una rentabilidad de 209
dólares/ha/año, gastando solamente 117 dólares en N y P. El tratamiento de fertilización
balanceada (NPK) fue aún mejor ya que produjo un promedio de rendimiento de 5.9 t/ha para
Los datos de la Tabla 9-6 demuestran como el N, P y K interaccionan para incrementar los
rendimientos de trigo y para mejorar la eficiencia de uso del N. El análisis de los datos
revela que P era el nutriente más limitante, pero se necesitó N, P y K para lograr el
rendimiento más alto.
Los cultivos presentan repuestas más altas cuando la fertilización y otras prácticas de manejo
interactúan positivamente. En las interacciones se incluyen factores como distancia- miento
entre hileras, fechas de siembra, población de plantas, variedades, control de plagas,
enfermedades y malezas, rotaciones, pH del suelo, etc.
321
Los mejores retornos económicos de la aplicación de fertilizantes se logran cuando se utilizan
sistemas de producción basados en PAM. Muchas de la interacciones que influencian la
eficiencia de uso de los fertilizantes envuelven prácticas de manejo que cuestan muy poco o
nada (Tabla 9.7). Por ejemplo, el hacer las cosas a tiempo es extremadamente importante, ya
sea que se trate de sembrar a tiempo, de tener los insumos listos cuando son necesarios,
de controlar las enfermedades e insectos o de inspeccionar los lotes.
El REM varía de año a año y de lote a lote. Los factores que influencian el rendimiento, como
plagas, enfermedades, mal drenaje, etc. deben ser manejados por sitio específico y cada uno
de ellos afecta el manejo de los insumos, incluyendo los fertilizantes.
Cuándo deja de ser económico el elevar las dosis de fertilización? Ciertamente no en el punto
donde se obtiene máximo retorno porcada dólar invertido es decir el punto de máxima
rentabilidad. Se comenta mucho acerca de los retornos decrecientes, pero con relación a esto,
es importante tener en cuenta que la clave para decidir sobre incrementos adicionales de
fertilizantes no es el determinar si el incremento en rendimiento produce un retorno tan
grande como el que produjo el incremento anterior sino que el retorno continúe siendo mayor
que el costo..
34.40 dólares por hectárea, o 2.16 dólares por cada dólar invertido. El agricultor debe pesar
el riesgo al que se expone pérdida de rendimiento o bajos precios. Al final, el mejor
chance para obtener los rendimientos más altos y rentables en forma sostenida proviene
del uso de PAM y REM.
323
Un agricultor con una meta de rendimiento de maíz de 4.4 t/ha podría tolerar solamente una
pérdida de producción de 0.44 t/ha o una reducción en precio de 14.40 dólares/t aun con los
precios más altos (120 dólares/t). Por otro lado, un agricultor con una meta de rendimiento de
11.3 t/ha todavía podría obtener ganancias con reducciones de 4.3 t/ha en rencalización
del fertilizante son más importantes a medida que se reduce la labranza.
Tabla 9.7. Algunas de las prácticas de manejo de poco o ningún valor extra en la
operación.
Cálculos basados en los siguientes precios: maíz = 100 $/t; N = 0.53 $/kg IPNI 2010.
En muchos casos, la calidad extra producida por la fertilización incrementa el valor del pro
ducto lo suficiente para pagar por el fertilizante. La mejor nutrición influencia la calidad de
diferentes formas. Este hecho se observa claramente con el trigo que aparece en la Figura
9.4
324
OTROS ASPECTOS DE LA FERTILIZACION
El encalar suelos ácidos para mejorar la eficiencia de los fertilizantes es una importante
práctica de manejo. El encalado reduce los niveles de elementos tóxicos, mejora las
características físicas y promueve la actividad microbiana en el suelo. La Tabla 9-14
demuestra cuán dramática puede ser la respuesta al encalado. Que tan eficiente sería la
fertilización en estos suelos si no se los encala? (Para más información sobre encalado consultar
el Capítulo 2).
Labranza
En América del Norte, Europa y muchos otros países, el cambio de las prácticas
convencionales de labranza a sistemas de labranza reducida y cero labranza ha forzado
cambios en los métodos de aplicación de los fertilizantes. El manejo de residuos y otros
factores de manejo alteran la distribución y los hábitos de crecimiento de las raíces, debido a
cambios en la temperatura, retención de humedad, distribución de nutrientes y acumulación
de materia orgánica en el suelo. En los capítulos 3, 4, 5 y 10 se discuten varios aspectos de
la influencia del manejo de la labranza y los residuos en el uso de fertilizantes y en la
protección ambiental. El uso de fertilizantes de arranque y la lo- 9-7El N incrementa la
proteína en los cultivos de grano y en los forrajes. La Tabla 9-10 demuestra como el N
incrementa el rendimiento y el contenido de proteína del maíz.
5.1 0 1.2
2.2 2.5
4.2 0 1.1
13.4 2.9
325
Tabla 9-10. El nitrógeno incrementa el rendimiento y el contenido de proteína del maíz.
Dosis de N
Rendimiento Proteína en el .
kg/ha t/ha grano, %
0 7.4 8.0
100 10.0 8.5
Todos los nutrientes deben estar en forma iónica para que puedan ser absorbidos por las
raíces de las plantas. Por esta razón, la fuente original de nutrientes es indiferente para la
planta. Las plantas requieren de la presencia de nutrientes en un suplemento adecuado,
continuo y balanceado para asegurar su normal crecimiento. En consecuencia, los fertilizantes
orgánicos e inorgánicos.
Arroz Rhizoctonia 26 - 54
Mancha parda 30 - 45
Enfermedades bacterianas 13 - 30
Piricularia 80 - 88
IPNI 2010
FERTILIZANTES ORGANICOS
El uso de fertilizantes orgánicos o “naturales” ha sido una tradición por varios siglos en
China y en otros países en desarrollo. Hoy en día, este mismo método de fertilizar cultivos ha
despertado atención en América del Norte, Europa y otras partes del mundo. Si bien la
agricultura de producción ha utilizado fuentes orgánicas por muchos años y lo continuará
haciendo existen limitaciones prácticas y económicas en su uso. China en el pasado
considerado como el país que podría sobrevivir usando solamente fertilizantes orgánicos es
hoy el primer consumidor de fertilizantes manufacturados. China es un buen ejemplo de las
limitaciones del uso de los fertilizantes orgánicos.
Desde el punto de vista de producción agrícola, no existe diferencia entre las diferentes
fuentes de nutrientes debido a que las plantas utilizadas conjuntamente, siempre que
sea posible, para producir REM.
La preocupación de que los fertilizantes manu- facturados no son “naturales” no tiene ninguna
base científica. De hecho, el proceso y utilización de los depósitos de P y K es el mejor
ejemplo de reciclaje regresar los nutrientes al suelo de donde fueron originalmente removidos
por meteorización natural. En el caso del N, aproximadamente el 80% de la atmósfera está
constituida por N gaseoso el mismo que respiramos cada día que es utilizado para
manufacturar fertilizantes nitrogenados y el mismo que utiliza el sistema
Rizobium/leguminosa para producir si propio N. Los fertilizantes manufacturados son tan
“naturales” en su origen como las fuentes orgánicas.
327
EL FERTILIZANTE DENTRO DEL ESQUEMA ECONOMICO DE LA FINCA
Algunas veces, los problemas de flujo de caja exigen retornos a corto plazo antes que
beneficios a largo plazo. En estos casos, todas las compras potenciales de insumos,
incluyendo los fertilizantes, deben ser evaluadas en relación a la meta de máximo retorno por
cada dólar invertido. La Tabla 9-18 ilustra el principio de retorno a corto plazo del último
incremento de la compra de fertilizante fosfatado. Para los cálculos, el precio de la soya fue
de 0.24 dólares/kg mientras que el P2O5 fue de 0.59 dólares/kg.
Tabla 9.13. A medida que las dosis de fósforo se incrementan en soya, la rentabilidad se
incrementa al máximo, pero el retorno a corto plazo por dólar invertido en el último in-
cremento se reduce.
Tambien se puede calcular la Tasa Beneficio incremental /Costo incremental con la siguiente
ecuación: Bi/Ci
328
CAPÍTULO X.
Los nutrientes promueven cultivos más vigorosos y productivos que pueden desarrollar
sistemas radiculares más grandes, abundantes residuos sobre la superficie, cobertura rápida
del suelo, eficiencia del uso de agua y mayor resistencia a condiciones de estrés producidas
por sequía, insectos, bajas temperaturas, etc.
NITROGENO
Las pérdidas de N pueden ocurrir con la erosión del suelo. El N en los residuos de los
cultivos, en los desechos de corral y en otras fracciones orgánicas (incluyendo la masa
microbiana) está sujeto a erosión superficial y a movimiento con el agua y el sedimento.
329
La principal preocupación del N en el ambiente se relaciona con el potencial movimiento del
nitrato (NO3) no usado o en exceso a través del perfil del suelo hacia la tabla de aguas
(lixiviación). Debido a su carga negativa, el NO3 no es atraído a las diferentes fracciones
del suelo y más bien está libre para percolarse con el agua que se mueve a través del perfil del
suelo. La Figura 10.1 ilustra el movimiento relativo del NO3 en diferentes tipos de suelo.
Existe poca evidencia científica para recomendar una fuente de N sobre otra por razones
ambientales. Las fuentes orgánicas de N a menudo dejan niveles más altos de NO3 en el
suelo, debido a que, basándose en la tecnología actual, son más difíciles de manejar que los
fertilizantes nitrogenados comerciales.
Las prácticas culturales pueden controlar en gran parte las pérdidas de N en suelos
agrícolas. Esto es deseable desde el punto de vista económico y ambiental. El reducir las
pérdidas de N significa que más de este nutriente está disponible para la producción de
cultivos y menos para movimiento en el agua superficial o hacia el manto freático.
FÓSFORO
330
hidróxidos de hierro (Fe), aluminio (Al) y manganeso (Mn). Es también adsorbido por las
superficies de las arcillas y en suelos calcáreos es precipitado por el calcio (Ca) para producir
fosfatos de calcio de varios tipos.
La adición de P a los cuerpos de agua está casi totalmente asociada con los procesos de
erosión del suelo. El movimiento del P se asocia con la erosión debido a que:
El magnesio (Mg) y el azufre (S) no son de preocupación ambiental. Ambos nutrientes son
esenciales para las plantas y a menudo son suplementados con la fertilización, basándose en
el análisis de suelos y en el análisis foliar. Como cualquier otro nutriente esencial, cuando no
están disponibles en adecuadas cantidades pueden reducir la eficiencia de uso de N y P.
Existe a menudo confusión acerca del cloro (Cl), uno de los micronutrientes esenciales. Se
confunde el cloruro con el clorato, este último, un gas venenoso que nunca se encuentra libre
en la naturaleza. El Cl ocurre en la naturaleza como cloruro en compuestos como el cloruro
de sodio (NaCl), cloruro de potasio (KCl) y sales de otros metales. Los cloruros no han sido
asociados con ningún problema ambiental o de salud El cloruro de potasio. . muriato de
potasio es un importante fertilizante potásico que contiene alrededor de 47% de Cl. El cloruro
de sodio sal de mesa común. . . tiene más de 60% de Cl.
Se deben considerar dos objetivos distintos en el manejo de los cultivos para asegurar que
adecuadas cantidades de nutrientes sean utilizadas en agricultura para mantener niveles de
producción rentables, minimizando al mismo tiempo cualquier efecto negativo en el ambiente.
Objetivo uno: S e deben manejar los cultivos buscando óptima eficiencia de los nutrientes, a
través del uso de todas las Prácticas Adecuadas de Manejo (PAM) posibles y con la
utilización de sistemas de Manejo Integrado de Plagas (MIC). En este caso, todos los
insumos de la producción estan balanceados a niveles óptimos.
Objetivo dos: Se deben manejar los cultivos buscando óptima eficiencia de los nutrientes, a
través del uso de las PAM que utilicen técnicas de conservación de suelos y aguas,
específicas para cada sitio. Esto permite optimizar la retención del suelo en su sitio y
minimiza las pérdidas hacia la tabla de aguas.
Las PAM ayudan a los agricultores a lograr aquellos niveles de rendimiento que tienen los
menores costos unitarios de producción y las menores pérdidas de NO3 por lixiviación.
Casi todo el NO3 lixiviado en invierno o en el período de tiempo entre cultivos proviene de la
mineralización de la materia orgánica. La contribución directa de los fertilizantes
nitrogenados a la lixiviación de NO3 es pequeña, cuando se aplica el fertilizante
nitrogenado en dosis que no exceden al óptimo económico.
La producción de cultivos basada en PAM, que incluye una adecuada fertilización para
óptimos rendimientos, incrementa la acumulación de residuos y en consecuencia el potencial
de lixiviación de NO3 provenientes de la mineralización del N en estos residuos. Sin
embargo, más residuos significan mayores contenidos de materia orgánica en el suelo, lo cual
es un factor positivo desde los puntos de vista de fertilidad y ambiental. Las prácticas de
manejo que minimicen el potencial de mineralización de la materia orgánica, como el uso de
cultivos de cobertura, son parte del paquete de PAM. La investigación continúa
demostrando que la materia orgánica mejora el potencial de rendimiento de los cultivos.
La Figura 10.3 presenta una visión conceptual de las fuentes, prácticas agrícolas y destino de
los nutrientes en un sistema de cultivos. Las PAM juegan un rol vital al ayudar a
mejorar la eficiencia del uso de los nutrientes por el cultivo, al incrementar el reciclamiento
de nutrientes en los residuos y al elevar los niveles de materia orgánica. Al mismo tiempo,
las PAM reducen las pérdidas de nutrientes por erosión, lixiviación, volatilización, de
nitrificación o escorrentía.
333
Figura 10.3. Relación entre las fuentes de nutrientes, las prácticas agrícolas y el destino
de los nutrientes en un sistema de cultivos. (IPNI, 2010).
NPK 100
PK 39
NK 41
NP 80
IPNI 2010.
334
10.4. Se observa claramente que poco o nada de NO3 queda en el suelo al final del ciclo de
cultivo.
1) Definir las metas de rendimiento: Se de- be determinar, en forma optimista pero realista,
las metas de rendimiento para cada uno de los cultivos y cada uno de los lotes. Los
requerimientos de nutrientes se incrementan con el rendimiento. La Tabla 10.2 presenta datos
de absorción de nutrientes por el arroz a tres niveles diferentes de rendimiento. Es una buena
PAM el ase- jurarse de que los nutrientes estén disponibles en cantidades adecuadas, pero no
excesivas, para el crecimiento del cultivo desde la siembra hasta la maduración.
Estas son las mejores herramientas disponibles para determinar la cantidad y disponibilidad
de los nutrientes en el suelo, así como la cantidad de nutrientes que deben aplicarse para
lograr la meta de rendimiento. Se debe monitorizar frecuentemente las necesidades de
335
nutrientes a través de los análisis de P, K, S, Mg, micronutrientes y pH. El análisis foliar
ayuda a confirmar el diagnóstico de necesidades de nutrientes y puede identificar necesidades
durante el ciclo de crecimiento.
En la Tabla 10.3 se presentan datos que demuestran como la eficiencia del uso de N se
incrementa 10 veces con la fertilización con K, en un suelo deficiente en este nutriente,
localizado al Este de Java, Indonesia. Aun cuando los rendimientos fueron bajos, los datos
ilustran la importancia de la fertilización balanceada en el incremento de la producción y en
la protección del ambiente. Siempre que la deficiencia de P, K y otros nutrientes sea un
factor limitante, la fertilización balanceada puede mejorar los rendimientos y proteger el
ambiente. Esto es verdad para todos los cultivos. . arroz, soya, hortalizas, algodón, café,
banano, etc.
336
3) Seguir un plan de conservación. Las PAM de conservación de suelos y aguas son
específicas para cada sitio. Entre las más importantes se encuentran la labranza cero, terrazas,
cultivos en contorno, caminos de agua, rotación de cultivos, cultivos de cobertura y zanjas de
desviación.
Un buen plan de conservación de suelos y aguas para cada finca podría ser el aspecto más
importante en la reducción de la erosión y en el control de las pérdidas de suelo, agua y
nutrientes especialmente el P retenido en el sedimento y en las partículas orgánicas.
Algunas formas de labranza de conservación se pueden practicar en casi todos los tipos de
agricultura. La Tabla 10.4 presenta los efectos positivos de la labranza de conservación en la
reducción de la escorrentía superficial y en la reducción de las pérdidas de sedimento y P.
La reducción en escorrentía superficial pro- mueve una mayor infiltración permitiendo que
exista más agua disponible para el cultivo en crecimiento. Las pérdidas totales de P se
reducen apreciablemente debido a que se presen- tan menores pérdidas de sedimentos.
4) Adopción de PAM en todos los insumos controlables para lograr rendimientos más
altos. Suelos bien fertilizados, junto con otras buenas prácticas de manejo, permiten obtener
rendimientos más altos. Estos altos rendimientos, con su incremento asociado en residuos,
tienen un tremendo efecto positivo en la reducción de escorrentía superficial y de la erosión
hídrica y eólica. Siempre que sea práctico, se debe dejar los residuos en la superficie del suelo
para protegerlos de la erosión.
Una más rápida cobertura del suelo con la parte vegetativa del cultivo como resultado de una
mejor nutrición. Esto reduce la energía erosiva de las gotas de lluvia, mejora la eficiencia del
uso del agua y reduce la presión de malezas. La disponibilidad de P en las fases iniciales del
cultivo es particularmente importante en el desarrollo y crecimiento de la planta.
337
El vigoroso crecimiento de las plantas, tanto en la superficie como de bajo de ella, ayuda a
mantener el suelo en su sitio, mejora la infiltración y el uso eficiente del agua e incrementa los
rendimientos. La Tabla 10.5 presenta un ejemplo del buen manejo de la fertilidad en los
rendimientos de maíz y el uso eficiente del agua.
IPNI 2010
338
Tabla 10.5. Efecto de la fertilización balanceada en el rendimiento del maíz y en el uso
del agua.
Bajo 4.8 75
Medio 9.3 148
Alto 15.0 237
La Figura 10.6 demuestra que la fertilización balanceada, junto con la oportuna aplicación,
incrementa la producción de banano en alrededor de 1500 cajas exportables por hectárea por
339
año. Se debe reconocer que cierta pérdida de nutrientes ocurre a pesar del número de
aplicaciones fraccionadas. Sin embargo, la aplicación de fertilizantes no necesariamente
incrementa las pérdidas. De hecho, cuando se utiliza fertilización balanceada se incrementa la
eficiencia y a menudo se reducen las pérdidas de nutrientes, mejorando de esa forma la
economía del agricultor y protegiendo el ambiente.
7) Localización del fertilizante. Rendimientos más altos se obtienen no solamente con dosis y
métodos de aplicación sino que también con una buena localización de los fertilizantes en el
suelo. La localización apropiada mejora la disponibilidad de los nutrientes. Algunas de las
formas de localización incluyen la aplicación al voleo, bandas superficiales y profundas y la
inyección profunda.
Retardo de las reacciones del P y K en el suelo debido a la reducción del contacto entre el
suelo y el fertilizante.
Localización profunda de los nutrientes en el suelo donde la humedad es menos limitante
para la absorción.
Menos retención del P en los componentes del suelo debido a la presencia de mayores
concentraciones de amonio en la zona de re- tención (cuando se aplican N y P juntos).
Absorción forzada de amonio causando una condición más ácida en la superficie de las raíces
que favorece la absorción de P.
340
CAPÍTULO XI.
El diagnóstico y corrección de los problemas nutrimentales de los cultivos es sólo una parte de
un plan destinado a abastecer correctamente a éstos de todas sus necesidades vitales o factores de
crecimiento (agua, energía, sanidad, condiciones físicas del sustrato, etc.). Los factores de
crecimiento se ubican asociados a los tres componentes fundamentales del sistema de
producción: suelo, agua, planta y atmósfera.
La producción de biomasa y del producto de interés comercial, está determinada por la capacidad
del agro-ecosistema de proveer las demandas de los factores de la producción que impone el
cultivo. Por lo general las intensidades o cantidades de dichas demandas que deben estar
presentes para alcanzar los rendimientos máximos posibles son conocidas, pero lo general, que no
conocemos es la proporción de ellas que pueden ser ofertadas naturalmente por el suelo y el agro-
ecosistema. El diagnóstico, sin entrar en el detalle de su tipo, nos proporciona elementos para
acercarse a estimar la oferta natural de los factores de la producción, que ofrece el agro-
ecosistema. Así habrá diagnóstico que serán útiles para identificar los factores de orden edáfico,
fisiológicos, hídrico, nutrimental, etc. que pudiesen estar restringiendo la producción. Hay que
dejar claro que sólo una parte menor de las demandas de factores nutrimentales de crecimiento,
está relacionada con los rendimientos; sin embargo, se ha dado históricamente especial atención
en esta parte del diagnóstico, por la posibilidad de poder ofrecerla como un insumo externo, es
decir, realizar correcciones, además porque la industria química ha ofrecido soluciones rápidas
341
para ello. En contraste, factores de crecimiento asociados con los aspectos físicos del suelo,
como es la disponibilidad de agua, y todo lo que eso conlleva, como es la porosidad y el tipo de
poros, la retención de agua, la capacidad de almacenamiento de agua, son raramente
considerados. Habría que agregar que con frecuencia tampoco se consideran los aspectos
edáficos (profundidad efectiva, presencia de capas endurecidas, o capas de carbonato de calcio,
etc.) en el diagnóstico o los aspectos sanitarios, como la presencia de organismos bióticos
(patógenos o benéficos) que pudiesen afectar la sanidad de los cultivos, así como también el
manejo del cultivo con buenas prácticas agrícolas (BPA). Estas últimas asociadas con el factor
humano, que por ser una externalidad, habitualmente no la consideramos como parte del sistema
de producción, pero que tiene una fuerte influencia en su desempeño. La gestión se asocia con el
manejo de los factores controlables de la producción. Sin embargo, la mayoría de los factores de
crecimiento que influyen en la producción de un agro-ecosistema, se ubican dentro de lo que
llamamos los factores no controlables de la producción (lluvia, heladas, exposición, profundidad
del suelo, etc.).
Conocer las técnicas de diagnóstico apropiadas para diagnosticar la intensidad de los factores no
controlables y de los controlables, entre ellos el estado nutrimental del sistema de producción.
Éste último comprende entender cómo el suelo proporciona nutrientes a las plantas y la cantidad
de éstos que se encuentran en los tejidos vegetales de las mismas, esto es, la capacidad de
abastecimiento nutrimental del suelo y la capacidad de la planta para hacer uso de ese recurso.
De aquí se derivará si hay que aplicar algún elemento o realizar alguna práctica para eliminar
factores limitativos o para traer a un nivel adecuado un factor de crecimiento que se encuentre
por debajo de lo deseado. De este planteamiento se deduce que es preciso conocer de antemano
los umbrales de estos factores que provocan disminuciones en la producción de los cultivos. Sin
ellos es imposible tomar medidas correctivas.
Entender la dinámica, esto es los cambios que experimentan los factores de crecimiento. Hay
algunos que podemos corregir rápidamente como podría ser la presencia de un pie de arado, que
limita el crecimiento de la raíces y consecuentemente la exploración de un cierto volumen de
suelo u otras que requerirán de siglos para modificarse, como podría ser la textura del suelo. Si
nos referimos específicamente al caso de la nutrición, debemos conocer la química que existe
detrás de la disponibilidad de un elemento en el suelo (fijación, desnitrificación, volatilización,
lixiviación, etc.) y su forma de acción dentro de la planta (translocación, uso, etc.) para poder
diseñar prácticas de ajuste necesarias. Es decir, los aspectos cuantitativos del plan nutrimental o,
en otras palabras, ¿cuánto fertilizante hay que aplicar?
343
El dominio de los temas anteriores constituye el camino más lógico para acercarse a una solución
óptima del problema de la nutrición de los cultivos. Cualquiera que sea el plan adoptado, este
debe ser compatible con la mantención de la calidad del medio ambiente y con el mantenimiento
del recurso para las generaciones futuras. El concepto de agricultura sostenible implícito en la
aseveración anterior debe constituirse en un norte de los especialistas en nutrición de cultivos.
El sistema suelo-planta-atmósfera
El suelo por su parte, interactúa con la planta y su potencial genético, al restringir el desarrollo
radical (suelos poco profundos, escaso espacio poroso, duripanes, pie de arado, etc.) o ambientes
químicos indeseables (exceso de carbonato de calcio, exceso de acidez, exceso o déficit de
algunos nutrimentos esenciales). Un aspecto de extrema importancia en la relación suelo-planta,
es la capacidad de abastecimiento de agua para los cultivos, que presentan los suelos.
344
con el suelo que pueden reducir la expresión del potencial productivo son la exposición, la
pendiente, las características químicas (salinidad, etc.) y físicas (infiltración, etc.).
La mayoría de los factores de suelo son incontrolables por el hombre, al menos en términos
económicos. Sólo dos factores generalmente se manejan: la capacidad de abastecimiento de
nutrimentos, mediante el expediente de la fertilización, y el abastecimiento de agua, ya sea
mediante habilitación de sistemas de riego, cosecha de agua o prácticas de conservación de la
humedad.
Por todo lo anterior, es necesario comprender muy bien cada uno de estos factores y la forma
como ellos interactúan, si se quiere abordar con éxito el aspecto de la nutrición.
La nutrición de cultivos es una disciplina que aspira a proporcionar todas las condiciones
necesarias para que los factores de crecimiento del ámbito nutrimental, llamados elementos
esenciales, se encuentren en los cultivos los niveles suficientes para no lleguen a transformarse en
factores limitantes del crecimiento. Cuando la concentración en la planta de alguno de ellos es
inferior a ese nivel de suficiencia o su relación con otro elemento no es adecuada, se observan
trastornos nutricionales que se traducen en disminución de los rendimientos, es decir, funciona la
ley del mínimo. Algo similar ocurre cuando las concentraciones nutrimentales son muy elevadas,
se producen toxicidades en las plantas con la consecuente caída del crecimiento de la producción.
Esto significa que la nutrición de cultivos tiene una serie de componentes que son comunes a
todos los cultivos y otros que son particulares de estas especies.
Nutrición óptima
345
El objetivo de un especialista en nutrición de cultivos es asegurarse que ninguno de los elementos
esenciales sea un factor limitativo para que las plantas alcancen los rendimientos máximo
posibles en un ambiente dado.
Ello exige conocer cuál es la demanda nutrimental en dicho ambiente, la cual se relaciona con
rendimiento máximo alcanzable y éste a su vez depende del efecto restrictivo que tiene el suelo y
el clima sobre el rendimiento máximo alcanzable en un agro-ecosistema. De lo anterior se deduce
que el primer paso en el diseño de un plan de manejo nutrimental de un cultivo sea definir cuáles
son los rendimientos máximos alcanzables en zonas dadas. La zonificación agroecológica es la
herramienta agronómica que dará la respuesta a esta interrogante.
Es obvio, desde un punto de vista agronómico, que la demanda nutrimental de una plantación de
cítricos que sólo produce 15 Mg ha-1 de frutas será menor que la de un huerto que rinda 35 Mg
ha-1.
El segundo aspecto que debe ser dilucidado es: qué proporción de dicha demanda puede ser
cubierta por el suelo, es decir, el suministro nutrimental. De todos es conocido que la demanda de
muchos de los elementos esenciales puede ser satisfecha por la fertilidad intrínseca de los suelos
(en general, es el caso de la mayoría de los micronutrientes, el calcio y el magnesio, en suelos que
no presentan características especiales y cultivos que no tienen demandas especiales) sin
embargo, el abastecimiento de otros de estos elementos esenciales no es suficiente. Tal es el caso
del nitrógeno, fósforo y potasio. El calcio sólo es deficiente en ambientes ácidos. En el caso
específico de los frutales, además de los aspectos de cantidad relacionados con la nutrición, se
debe considerar el efecto de estos en la calidad.
Gran parte del esfuerzo en el área de nutrición de cultivos, en el pasado, ha sido dedicado a
evaluar la capacidad de abastecimiento nutrimental que poseen los suelos y los requerimientos
nutrimentales de los cultivos. Esta tarea cae dentro del área llamada Diagnóstico de la Fertilidad
del Suelo y Estado Nutrimental de los Cultivos.
346
relaciones entre producción (calidad) y fertilizante aplicado son parte del dominio de la Fertilidad
Cuantitativa.
Las aplicaciones de fertilizantes no son cien por ciento efectivas. De aquí que haya la necesidad
de conocer la eficiencia de los distintos fertilizantes. Estos dependen de la naturaleza de los
fertilizantes, del tipo de cultivo, del suelo y de la tecnología de aplicación. Son aspectos que se
abordan en ámbito de la Tecnología de Uso de Fertilizantes.
En resumen podemos decir que una planta de manejo nutrimental de un cultivo depende de la
demanda nutrimental de éste, del suministro que pueda hacer el suelo y de la eficiencia del
fertilizante. Todo lo cual se puede expresar en un modelo simplificado, que dice.
Si la demanda nutrimental dividida para la eficiencia del fertilizante es mayor que el suministro
por el suelo será necesario fertilizar. La dosis de fertilizante a aplicar será proporcional a la
magnitud del déficit encontrado.
Las principales técnicas de diagnóstico del estado nutrimental del suelo y de las plantas se
agrupan en las que se evalúa directamente, en el suelo, el nivel de disponibilidad de los
nutrimentos mediante métodos químicos o biológicos y, en aquellas en que la disponibilidad y el
estado nutrimental se cuantifica observando visualmente el comportamiento de las plantas o
analizando químicamente sus tejidos. Cada una de estas técnicas tiene ventajas y desventajas que
analizarán a continuación. En la Tabla 11.1 se presentan las principales técnicas de diagnóstico
de suelo y planta; la aplicación de estas técnicas debería ser por sitio específico.
347
Tabla 11.1: Principales técnicas de diagnóstico del estado nutricional de un sistema de
cultivo
Sin embargo, por razones prácticas, el diagnóstico, en la mayoría de los casos, se hace en
unidades mucho mayores que un sitio específico de producción, sin tomar en cuenta la gran
variabilidad espacial y temporal que puede ocurrir y las recomendaciones que de allí emanan se
aplican a unidades territoriales relativamente extensas, lo cual no es una situación ideal. Para
justificar el diagnóstico por sitio-específico basta comprender que los requerimientos
nutrimentales del maíz (kilos por hectárea de nutriente) en una siembra que produce, por razones
de buen manejo, 8 ton de grano por hectárea, son muy superiores a los de un maíz de otro
productor que sólo puede producir a 3 toneladas por hectárea, por las limitaciones que le impone
el agro-ecosistemas (limitaciones naturales o provocadas por diferencias en el manejo previo). En
un programa para aumentar la productividad, además de hacer un mejor manejo de los
fertilizantes a nivel general, necesariamente hay que prestar atención, dentro de las posibilidades,
348
al manejo de los fertilizantes a nivel parcelario. Las diferencias entre parcelas pueden ser
provocadas por alguno de los factores que se presentan en la Tabla 11.2.
Origen Factor
Genético Potencial de producción de biomasa
Demanda nutrimental (tolerancia, exigencia)
Climático Radiación
Temperatura
Concentración CO2
Periodo 1ibre de heladas
Precipitación
Contaminación
Biótico Plagas
virus
hongos
bacterias
insectos
malezas
Organismos benéficos
fijadores de N
micorrizas
transformadores de la muestra orgánica
349
producto de la experimentación de campo (un enfoque empírico), que muchas veces no considera
la variabilidad espacial que experimentan los suelos
Enfoque Metodología
Empírico Extrapolación
Experimento de campo restringida (pocos experimentos en una zona)
Definición unidades homogéneas y experimentación en ellas
(agrosistemas, agrohábitat, unidades edafoclimática, etc.)
Análisis de suelo debidamente calibrado
Funciones generalizadas de producción
El análisis químico de los suelos consiste en extraer, mediante una solución química, una fracción
del total del elemento necesario para el crecimiento de las plantas y luego evaluarla mediante
procedimientos químico adecuado. Nótese que hay aquí dos etapas muy claras, una que es la
colocación en solución del elemento de interés y la segunda la medición.
Hablamos de una fracción porque los contenidos totales no se relacionan con el abastecimiento u
oferta nutrimental que puede hacer el suelo a un cultivo. Esta relación se puede establecer para
una fracción; sólo en ese caso el análisis tendrá un significado agronómico preciso y representará
la proporción del total requerido por la planta para su crecimiento y desarrollo que puede aportar
el suelo. Pero debe aclararse que lo que uno mide mediante un análisis d este tipo es un indicador
de la disponibilidad y no la cantidad (kilos por hectárea) que el suelo puede aportar. Es posible
transformar a estas últimas unidades la cifra que arroja el laboratorio (generalmente una
expresión de concentración), pero ello requiere un conocimiento profundo de cuantos kilos de un
nutriente puede absorber un cultivo por cada unidad de concentración (ppm, mg kg -1, etc.)
indicada por el análisis de suelo. No cualquier extractante descrito en la literatura para evaluar
un nutrimento cumple con la condición de indicar la disponibilidad para las plantas, es decir la
350
existencia de una relación entre lo determinado en el laboratorio y lo que las plantas pueden
adquirir. La bondad de uno u otro procedimiento analítico depende de la forma en que el
nutrimento se encuentre en el suelo, de la forma en que se haga el análisis y del tipo de cultivo
con que se trabaje. La selección de una solución química de extracción se denomina correlación,
porque se emplea esta técnica estadística para relacionar la cantidad de un nutrimento extractado
en el laboratorio, con la cantidad del mismo absorbida por plantas o con algún otro parámetro de
crecimiento. En la Tabla 11.4 se presenta un ejemplo de selección de métodos, para medir fósforo
disponible en el suelo que se condujo en la Sierra Ecuatoriana (AGSO 2000).
Tabla 11.4. Correlación entre el fósforo extractado por diversos métodos y el rendimiento
relativo para la Sierra Ecuatoriana.
La interpretación agronómica del resultado de un análisis químico, que se practica con un método
considerado como representativo de la cantidad de nutrimento que la planta puede extraer (es
decir debidamente correlacionado), precisa de otro conocimiento. Este es la relación del resultado
de dicho análisis con el rendimiento que puede alcanzar un cultivo en condiciones de campo o la
respuesta que se puede esperar. Al procedimiento empleado para establecer esta relación se le
denomina calibración y requiere la ejecución de numerosos experimentos de campo. En ausencia
de esta información para condiciones locales, la interpretación se hace tomando prestados
resultados de calibraciones hechas en otras partes del mundo. Sin embargo, este procedimiento
interpretativo lleva consigo cierto grado de error, ya que las condiciones de suelo, cultivo o
variedad, rendimiento máximo alcanzable, clima, etc. no son las mismas. Por lo anterior para
generar buenas interpretaciones y recomendaciones con base en el análisis de suelo existe la
necesidad de seleccionar procedimientos adecuados y calibrarlos adecuadamente. Esta es la base
del éxito de un programa de análisis de suelo con un enfoque tradicional.
351
La gran ventaja del análisis químico de suelos constituye el hecho que el diagnóstico
generalmente se hace con antelación al establecimiento del cultivo y que es por sitio específico.
Sin embargo, la interpretación de su resultado precisa, como ya se indicó, de calibraciones
realizadas in situ. Las calibraciones son costosas, requieren generalmente de varios años de
trabajo, e idealmente deben hacerse para cada cultivo con distintas capacidades de absorción
(cereales, tubérculos, praderas, etc.) fenómeno que se encuentra estrechamente realacionado con
el desarrollo del sistema radical de los cultivos. En Ecuador, las calibraciones son escasas, pero
se ha hecho trabajo de selección de métodos al menos para fósforo (AGSO 2000). Una desventaja
del análisis químico de suelos es la necesidad de contar con una red eficiente de laboratorios
químicos, de contar con vías de comunicación eficientes para hacer llegar las muestras al
laboratorio, y finalmente debemos mencionar que el costo es un factor limitante para su empleo,
especialmente por los pequeños productores. Por lo general este costo es mucho mayor en las
naciones en desarrollo que en las naciones desarrolladas, por razones de impuesto de
importación, servicio inadecuado para mantener a los equipos debidamente calibrados, etc.
El análisis químico de tejidos vegetales (o análisis de planta) es una herramienta para evaluar
directamente el estado nutricional de las plantas e indirectamente la disponibilidad de
nutrimentos por el suelo. Con esta técnica es posible medir la concentración total de un elemento
o una fracción de ella. Cualquiera de estas mediciones sirve para diagnosticar y evaluar el estado
nutrimental de los cultivos y el suelo. El análisis de plantas, se emplea principalmente con dos
propósitos; diagnosticar las deficiencias nutrimentales y como base para formular
352
recomendaciones de fertilización. Con propósitos de diagnóstico, las relaciones anteriores se
establecen para órganos y edades particulares para cada especie.
Los principales criterios son el nivel crítico de deficiencia y toxicidad y los rangos de
concentración, pero no son los únicos. Sistemas como en DRIS, las relaciones terciaras, la
variación de los rangos de concentración en el tiempo y ciertos índices han sido descritos para
interpretar correctamente los resultados de los análisis de tejido vegetal.
Figura 11.1. Diagrama que ilustra el significado de los términos usados para clasificar el
estatus nutrimental de las plantas.
A diferencia de las clases anteriores el nivel crítico de deficiencia siempre debería mantenerse
ligeramente arriba del nivel crítico.
353
El nivel (valor o concentración) crítico de toxicidad es el que se asocia con una reducción, por
exceso nutrimental, de un 5 a un 20% del rendimiento máximo. En años recientes fue necesario
definir este indicador, debido al aumento de producción en condiciones controladas o, en medio
hidropónicas, que elevó las concentraciones de algunos elementos, más allá de lo deseable. Las
implicaciones sobre la inocuidad de los alimentos así producido ha sido poco estudiada.
Los rangos de concentración se han dividido en deficiente, bajo o marginal, adecuado suficiente
alto y tóxico o excesivo. A continuación se define cada uno de ellos.
Bajo o Marginal. Este es el rango de concentraciones, en la parte especificada que se asocia con
una reducción del crecimiento o producción, pero en el cual la planta no muestra síntomas
visibles de deficiencia. Cuando se observan niveles de este tipo es preciso efectuar algunos
cambios en las prácticas de fertilización. Sin embargo, para ciertos cultivos pudiera ser
conveniente operar en este nivel, por ejemplo en el caso de las flores.
Alto: Esta clase representa el rango de concentración, de la parte especificada comprendido entre
los rangos adecuados y tóxicos o excesivos. En algunos cultivos esta clase puede definirse
objetivamente por su asociación con una tendencia hacia la producción de calidad y vigor
indeseable. El uso de fertilizantes en las plantas que muestren concentraciones nutrimentales en
este rango debe reducirse a suspenderse hasta que éstas caigan en el rango adecuado o suficiente.
Una variante del análisis químico vegetal clásico que se realiza en el laboratorio, generalmente
con muestras secas, es el análisis rápido que se practica en el campo sobre muestras frescas, que
por lo común emplea la savia de las plantas. Esta técnica, cuando bien empleada y calibrada,
permite tomar decisiones rápidas, en el momento del diagnóstico, que contribuyen a aminorar las
pérdidas de rendimiento causadas por concentraciones sub-normales de un elemento
Diagnóstico Visual
Los síntomas visuales asociados a problemas nutricionales son: falta de crecimiento después de la
germinación, enanismo severo, síntomas específicos, anormalidades internas (particularmente de
los tejidos conductores), atraso en la madurez, disminución de rendimiento, calidad deficiente
alteración del patrón de crecimiento de las raíces.
1: Los síntomas presentan un patrón característico que depende de la función y metabolismo del
nutriente en la planta.
3: Los síntomas aparecen en órganos determinados, que tienen una edad fisiológica dada, lo cual
se asocia con la posición dentro de la planta y la movilidad de los nutrimentos.
355
La técnica de diagnóstico visual sólo puede usarse cuando el cultivo está establecido y las plantas
desarrollándose, por lo que tiene escaso valor preventivo. Los síntomas aparecen después que la
planta ha sufrido los efectos de la deficiencia por algún tiempo sin manifestarlo exteriormente. A
la altura del desarrollo en que los síntomas se manifiestan ya se ha producido un daño
irrecuperable en el rendimiento potencial. La técnica de diagnóstico visual es además, poco
específica y en el evento de ocurrir varias deficiencias simultáneas, no permite la separación de
los síntomas.
Entre las ventajas más obvias están la rapidez, y la posibilidad de usarse cada vez que se requiera.
A pesar de las limitantes señaladas, el diagnóstico visual constituye una de las técnicas más
efectivas para hacer diagnósticos preliminares en el campo.
Su empleo requiere de cierta metodología que se inicia antes de hacer una visita al campo y
durante la inspección ocular. Generalmente el diagnóstico visual tiene una perspectiva más
amplia que el mero diagnóstico de un problema nutrimental. En la exposición oral se hará una
cuenta detallada de la metodología y las perspectivas de la técnica.
La definición del programa de fertilización y mejoramiento del suelo depende de los análisis
físicos y químicos y del historial del mismo. Un suelo no puede conocerse solamente mediante
los sentidos, pues sus propiedades químicas solo pueden ser determinadas mediante el análisis
químico con los métodos adecuados. El análisis tiene dos objetivos esenciales: a) Determinar si
existen limitantes que impidan que el cultivo exprese todo su potencial de rendimiento y b)
Conocer los niveles de disponibilidad de los nutrimentos, para decidir si se agregan estos
elementos en la forma de fertilizantes, a qué dosis y con qué fuentes, así como predecir la
necesidad de suministrar algunos elementos por la vía foliar durante el desarrollo del cultivo.
Primeramente se revisan los resultados del análisis para saber si el suelo presenta limitantes de
orden químico o físico, que indiquen la necesidad de aplicar un lavado para el caso de los suelos
salinos o bien la necesidad de aplicar mejoradores físicos y/o químicos.
En algunos casos la condición limitante del suelo no es posible de ser eliminada, por lo que se
desarrollan las estrategias para convivir con el problema y obtener del suelo el máximo beneficio
dentro de sus limitaciones de orden natural.
356
Una vez identificados los factores limitantes del suelo, si es que existen, el paso siguiente es
definir si se justifica la aplicación de mejoradores químicos como es el encalado para los suelos
ácidos y el yeso agrícola para los suelos sódicos. Eventualmente puede requerirse establecer una
estrategia para subir el nivel de materia orgánica mediante la incorporación de residuos de cultivo
o mediante la aplicación de materia orgánica de diverso origen. En algunos casos no es posible
eliminar algunas condiciones limitantes, como la presencia de carbonatos, pero el conocimiento
de esto, permite al menos discernir acerca de la mejor estrategia de manejo para estos suelos.
Los principales problemas del suelo que pueden ser diagnosticados mediante análisis de
laboratorio son: Acidez, Sodicidad y Salinidad. Existen otros problemas como la compactación
física que requiere de un manejo de labranza y en ocasiones de la aplicación de materia orgánica.
Por otro lado la presencia de altas concentraciones de carbonatos, mas que un problema es una
condición natural de los suelos de zonas áridas, con la que hay que aprender a convivir mediante
el manejo de la fertilización yel uso racional de algunos mejoradores químicos. Una vez definido
lo anterior, se procede a conocer los niveles de macro y micro nutrientes disponibles en el suelo
para decidir los programas de fertilización y las fuentes más recomendadas.
Esta es una de las determinaciones más importantes, pues se relaciona con la disponibilidad
nutrimental y con la presencia de aluminio libre que resulta toxico para el desarrollo del cultivo.
Primeramente es necesario revisar si la determinación es hecha en agua, CaCl2, o KCl y en qué
relación suelo: solución se hizo (regularmente se determina en una relación 1:2). Cuando la
determinación se realiza en CaCl2, la lectura de pH es de 0.4 a 0.8 más bajo que la que se realiza
357
en agua y cuando es en KCl es alrededor de 1 unidad más baja que la determinada en agua. El
rango de posibilidades se presenta a continuación, así como sus posibles implicaciones. En los
datos de abajo nos referimos al pH determinado en agua.
a) pH >9.0 Un pH tan elevado del suelo solo podría explicarse por la presencia de muy elevados
niveles de sodio intercambiable, lo que hace al suelo inexplotable para la agricultura. Cuando un
suelo sódico presenta pH tan elevado se debe a la presencia decarbonato de sodio, una sal muy
tóxica que afecta gravemente el crecimiento del cultivo. De aquí, ir directamente a revisar el nivel
de sodio intercambiable, pues el resto de las determinaciones pierden importancia ante la
presencia de un problema tan grave de sodio. En tal caso es necesario analizar el agua de riego
para conocer la fuente de este problema. Es muy posible que el agua con que este suelo se riega
contenga elevadas cantidades de sodio, es decir una RAS muy elevado.
b) pH 8.2-9.0 Es muy posible que el suelo presente niveles excesivos de sodio, particularmente si
el pH es mayor de 8.4 y cuyo origen es el agua con que se riega el suelo. Al ver este resultado es
conveniente ir a revisar el nivel de sodio intercambiable para confirmar esta posibilidad.
c) pH=7.0-8.1 Posible presencia de carbonatos, revisar niveles de P, Fe, Zn, Mn y Cu, pues en pH
alcalino se reduce su disponibilidad.
e) pH=5.5-6.0 En la parte baja de este rango bajo estamos en el umbral de que se presenten
problemas de Al +++ Intercambiable. (Excepto en el caso de Andosoles, donde el Al+++ puede
ser un problema aun a pH mayor).
g) pH < 4.5 Suelo extremadamente ácido con alta saturación de aluminio y necesariamente
requiere encalado para poder producir satisfactoriamente, aun en el caso de cultivos tolerantes a
358
la acidez. Revisar posible deficiencia de K, Ca, Mg, P y Mo o un posible exceso de Mn, aunque
este problema solo se presenta en algunos suelos del trópico.
En forma general sólo se recomienda rehabilitar un suelo ácido cuando presenta un pH menor de
5.5 determinado en agua. Sin embargo el conocimiento del nivel de aluminio intercambiable nos
puede dar más elementos para decidir si se aplica cal o no al suelo.
Para definir la dosis de cal se pueden seguir dos estrategias. En la primera se requiere conocer la
concentración de aluminio intercambiable en unidades de me/100 g. Este valor se multiplica por
un factor de 1.0, 1.5 o 2, según sea la tolerancia del cultivo que se va a sembrar y el resultado son
las toneladas de cal (Carbonato de Calcio) que hay que aplicar. El factor de 1 es para cultivos
propios de regiones tropicales, tales como piña, yuca o pastos tropicales. El factor de 1.5 es para
cultivos de respuesta intermedia a la acidez y el factor de 2.0 es para cultivos muy sensibles a la
acidez. Este procedimiento ha funcionado muy bien en suelos tropicales. Otra alternativa es usar
el procedimiento empírico basado en nivel de materia orgánica y textura del suelo que da
requerimientos de cal que van de media tonelada hasta 7 u 8 ton de cal por ha. Ente más alto es el
nivel de materia orgánica y el contenido de arcilla, mayores serán las necesidades de cal para un
suelo ácido. Este procedimiento determina solo en forma aproximada las necesidades de cal. La
dosis de cal depende del tipo de producto a usar, es decir de su valor relativo de neutralización y
de la finura o mallaje que presenta el producto. También se puede usar la estrategia de medir el
pH Buffer, que permite calcular requerimientos de cal.
Sodicidad
359
de cambio. El rango de posibilidades se presenta a continuación, así como sus posibles
implicaciones.
PSI
a) 0-5 % Libre de sodio, sin problemas de manejo y no requiere de aplicaciones masivas de calcio
o de formadores de calcio en el suelo.
b) 5-10% Ligeramente sódico en suelos de textura media a fina, es posible que sea necesario
darle mantenimiento con aplicaciones de yeso agrícola. Se requiere determinar necesidades de
yeso.
e) 20-30% Suelo muy sódico, es necesario rehabilitarlo con aplicaciones de yeso agrícola para
poder hacer una explotación rentable del terreno.
f) >30% Suelo extremadamente sódico, que no puede ser explotado sin ser rehabilitado con
aplicaciones masivas de una fuente de calcio o un formador de calcio, cuando es un suelo
calcáreo. Es necesario determinar la dosis a aplicar y luego se requiere hacer lavado de la sal de
sulfato de sodio que se formará al reaccionar el yeso con el sodio.
360
Se trata del parámetro que indica la presencia de sales en el suelo y se expresa en dS/m(antes
mmhos/cm). El problema de salinidad tiene dos efectos sobre el cultivo: Los efectos generales y
los efectos específicos. Los efectos generales se refieren al descenso en el potencial de agua en el
suelo, es decir a que la planta tiene que hacer un mayor esfuerzo para poder extraer agua del
suelo. Los efectos específicos se refieren a la toxicidad que se puede presentar por la presencia de
un ion específico como cloro, boro, y en algunos casos sodio. En general cuando se habla de
salinidad, se refiere a los efectos generales y ésta se mide en el extracto de saturación CEe (por
ello se le pone la letra e como subíndice, que significa extracto). Sin embargo algunos
laboratorios lo miden, por facilidad y economía, en una relación suelo: agua, 1:2 (CE1:2). o 1:5
(CE1:5).
CEe
a) < 2 dS/m Suelo libre de sales, condición ideal para producir cualquier cultivo.
b) 2-4 dS/m Suelo ligeramente salino, es posible que se afecte el rendimiento decultivos
sensibles.
d) 6-8 dS/m Suelo salino, el rendimiento de la mayoría de los cultivos se afecta, en elcaso de los
cultivos tolerantes el efecto es menor.
e) 8-12 dS/m Suelo muy salino, difícil de explotar en tales condiciones, requiere lavado. No
obstante algunos cultivos muy tolerantes podrían explotarse si el nivel desales está en la parte
baja de este rango. Para estos cultivos el uso de sistemas de riego por goteo podrían facilitar el
uso de suelos con un nivel de salinidad en la parte baja de este rango, pero de entrada se debe
aceptar que aun en el caso de cultivos tolerantes habrá una reducción en el rendimiento en
comparación con un suelo libre de sales.
f) > 12 dS/m Suelo extremadamente salino, normalmente no crece cultivo en ese suelo.
361
Es necesario rehabilitarlo mediante lavado con agua de razonable calidad (baja en sales).
Contenido de carbonatos
La presencia de carbonatos en el suelo ocurre en los suelos de regiones áridas y semiáridas, pues
por la baja precipitación pluvial se acumulan en el perfil del suelo. Por ello la presencia de esta
sal insoluble es una condición natural de los suelos de esas regiones. Los carbonatos incrementan
el pH del suelo y reducen la disponibilidad de algunos elementos, particularmente de los
micronutrientes: Fe y Zn, pero puede también afectar la de Mn y Cu. También reduce la
disponibilidad de fósforo debido a la formación de fosfatos insolubles de calcio. La
determinación de carbonatos se realiza con un calcímetro al hacer reaccionar un ácido con este
compuesto se forma CO2 y la presión que genera se cuantifica mediante un manómetro.
Carbonatos
b) 2-5% Suelo ligeramente calcáreo, requiere manejo de fuentes de nutrientes de reacción ácida,
como los sulfatos, siempre que sea posible. Revisar posibles problemas con Fe y Zn.
c) 10-20% Suelo calcáreo, revisar posibles problemas de fijación de P y prever una baja
disponibilidad de Fe, Zn, Mn o Cu. Revisar el nivel de estos micronutrientes, mediante el método
DTPA.
d) 20-40% Suelo altamente calcáreo, revisar posibles problemas de fijación de P y prever una
baja disponibilidad de Fe, Zn, Mn o Cu. Revisar el nivel de estos micronutrientes, mediante el
método DTPA. En estos suelos se recomienda usar solo fuentes de reacción ácida para aminorar
el efecto de la alta concentración de carbonatos.
362
h) > 40% Suelo extremadamente calcáreo, problemas con fijación de P y muy seguras
deficiencias de Fe, Zn, Cu o Mn, revisar el nivel de estos micronutrientes. En estos suelos se
recomienda usar solo fuentes de reacción ácida para aminorar el efecto de la alta concentración
de carbonatos.
En todos los suelos calcáreos se recomienda usar fuentes fertilizantes de reacción ácida, en forma
localizada y no tratar de neutralizar el suelo con aplicaciones de ácido sulfúrico, si no existen
problemas de sodio, pues se requerirían cantidades prohibitivas de ácido para neutralizar estos
suelos.
Materia Orgánica
La materia orgánica es una determinación importante pues cuando se encuentra aniveles bajos en
el suelo se esperan algunos problemas con las propiedades físicas, como es la estructura, la
dureza del mismo y un flujo de agua limitado. Puede afectarse la aireación del suelo y la facilidad
para que sea explorado por el sistema radical.
Cuando están secos son muy duros. Presentan una alta proporción de poros finos. Para poder
labrarse adecuadamente deben tomarse en un punto óptimo de humedad y en general no son de
fácil labranza. Tienden a formar agregados grandes y firmes. Los grupos texturales son: arcilla,
arcilla limosa, arcilla arenosa y limo. Presentan alta capacidad de retención de agua y
nutrimentos, particularmente si contienen arcillas de tipo 2:1 (montmorillonita o illita). Estos
suelos normalmente son los de más alta fertilidad natural. Sin embargo, deben manejarse con
precaución, pues se compactan fácilmente cuando se labran o cultivan en condiciones húmedas.
Cuando estos suelos tienen buenos contenidos de materia orgánica son extraordinariamente
productivos y muy fértiles si se manejan y labran apropiadamente.
Niveles de Nutrimentos
Siempre revisar el método de diagnóstico usado para poder interpretar los resultados
correctamente. Cada método tiene sus niveles de interpretación. No todos los métodos son
buenos, por lo que conviene consultar cuáles son los adecuados para cada tipo desuelo.
Nitrógeno
Donde:
364
DN= Cantidad o dosis de nitrógeno total que es necesario aplicar, kg/ha
MR= Meta de rendimiento, t/ha
Ne= Cantidad de nitrógeno total extraído por unidad del rendimiento kg/t.
Nm= Nitrógeno mineralizado de la materia orgánica, kg/ha.
Ni = Nitrógeno inorgánico en el perfil del suelo, kg/ha.
Nr= Efecto de cultivo anterior (Nitrógeno mineralizado(+) ó inmovilizado (-) de los residuos de
cultivo anterior), kg/ha.
No= Nitrógeno mineralizado de enmiendas orgánicas, kg/ha.
Ef= Factor de eficiencia de uso del nitrógeno, (0.40 a 0.90).
Fósforo
Para decidir la dosis de aplicación de fósforo al suelo se toma en cuenta primeramente el nivel de
P en el suelo en función del método de análisis utilizado por el laboratorio; se recomienda Bray
para suelos ácidos y Olsen para alcalinos. En el caso de suelos con problemas de fijación por
elevada concentración de aluminio o por una concentración muy elevada de carbonatos de calcio
es recomendable multiplicar la dosis de P por un factor de 1.2 a 1.5 dependiendo del grado de
problema del suelo en cuanto a la capacidad de fijación del P por el suelo.
Potasio
Para suelos tropicales degradados: Acrisoles, Oxisoles, Cambisoles, Luvisoles yArenosoles con
CICE menor a 5 Cmol(+)/kg usar un cuadro de interpretación propiopara esos suelos. La
definición de la dosis de K depende del cultivo, meta de rendimiento y del nivel de K en el suelo.
Calcio
La definición de la dosis de Ca a aplicar el suelo como nutriente para el cultivo depende más bien
del cultivo y de la relación con otros cationes del suelo como es la presencia de sodio, la cantidad
de K y Mg y la saturación de Ca en la CIC. En el caso de este nutriente se suele aplicar
independientemente de que su nivel en el suelo sea alto para fines de darle calidad al fruto o
producto de cosecha. Cuando se usa nitrato de calcio al suelo la dosis de Ca que se suele aplicar a
365
cultivos de hortalizas va en el orden de 20 a 50 kg de Ca/ha. También se suele aplicar al fruto
directamente en forma de aspersión, cuando el fruto así lo demanda como es en el caso de
sandias, manzanas, duraznos y al follaje en cultivos tales como: lechuga, crucíferas y otros
cultivos.
Magnesio
Hierro
Interpretación. Se recomienda suministrar el Fe al cultivo por la vía foliar cuando así lo requiere.
Zinc
La definición de la dosis a aplicar al suelo de este elemento dependerá del pH del suelo y del
nivel de Zn en el mismo, tal como se indica detalladamente en el manual de interpretación.
Manganeso
La definición de la dosis a aplicar al suelo de este elemento dependerá del pH del suelo y del
nivel de Mn en el mismo, tal como se indica en el cuadro correspondiente del Manual
mencionado.
Cobre
La definición de la dosis a aplicar al suelo de este elemento dependerá del nivel de Cu en el suelo
y de la forma de aplicación. En aplicaciones al suelo la dosis de Cu suele ir desde 1 hasta 15 kg
de Cu/ha dependiendo de si se aplica en banda o al boleo. También se pueden hacer aplicaciones
foliares en cuyo caso las dosis son mucho menores.
366
Boro
El boro se aplica cuando el nivel de este elemento es muy bajo tal como se indica en el manual.
Se debe tener especial precaución con este elemento, pues la dosis el nivel de deficiencia está
muy cercano al nivel de toxicidad.
c) Si se reporta un pH mayor de 8.2 debe haber presencia del anión carbonato (CO3),de lo
contrario. Si el pH es menor de 8.2, la concentración de CO3 debe ser igual acero.
d) 1.2-2.2 dS/m Agua salina, calidad cuestionable, dependiendo del tipo de sales.
e) 2.2-3.0 dS/m Agua muy salina, su uso depende del tipo de sales que tiene.
f) 3.0-4.0 dS/m Agua altamente salina, podría usarse en cultivos muy tolerantes dependiendo del
cultivo, tipo de sales y del sistema de riego.
g) > 4.0 dS/m Extremadamente salina. Su uso es muy improbable en la agricultura, aunque en
situaciones extremas se podría utilizar si no es clorurada o bicarbonatada sódica, y en función del
367
cultivo. La salinidad se debe manejar mediante una fracción de lavado en cada riego, para
mantener el equilibrio salino en el suelo y evitar su salinización. En todo caso la interpretación
depende el cultivo a establecer. Cada uno tiene su umbral y en cada uno la salinidad tiene un
efecto diferente e incluso a nivel de variedad o patrón en el caso de injertos.
c) 3.1- 6.0 Agua moderadamente sódica, se requieren realizar aplicaciones eventualesde yeso al
suelo.
e) > 9.1 Agua con problemas severos de sodio. Imprescindibles aplicacionesfrecuentes de yeso al
suelo.
Recomendable uso de ácidos para neutralizar HCO3 en sistemas de riego por goteo.
368
e) > 12 Muy alta en bicarbonatos. Tener cuidado con taponamiento de emisores encaso de tener
concentraciones importantes de calcio en el agua. Recomendable uso de ácidos para neutralizar
HCO3 en riego por goteo.
b) 3-5 Moderadamente baja, sin problema para el cultivo en sistemas de riego por gravedad o
goteo. Precauciones con riego por aspersión en algunos frutales.
d) 11-15 Muy Alta en Cloro, precauciones con la mayoría de los cultivos, situación manejable
con un buen manejo de la fracción de lavado e incrementando la concentración de nitratos en la
solución del suelo.
B, ppm
c) 0.5-0.7 Agua moderadamente alta en B. Los cultivos muy sensibles se pueden afectar.
e) 1.1-2.0 Agua muy alta en B. Solo se pueden cultivar cultivos moderadamente tolerantes.
f) 2.1-4.0 Agua extremadamente alta en B. Solo algunos pocos cultivos se pueden cultivar con
esta agua. En general su uso para agricultura está muy restringido.
Ejercicio
369
Recomendación de fertilización en el cultivo de alfalfa, con un rendimiento de 13.4 – 15.7 tn/ha.
Análisis de suelo
N: 40 pm
P: 20 ppm
K: 60 ppm
Ca: 120 ppm
Mg: 30ppm
S: 10ppm
Zn: 2ppm
Eficiencia de fertilizante:
N: 80 %
P: 20 %
K: 60%
Ca, Mg. S : 50 %
Micronutrientes: 20%
Fuente: INPOFOS
370
Nitrógeno
Fósforo
Potasio
Calcio
Magnesio
Azufre
Boro
Cobre
Manganeso
Hierro
Cuando el resultado sale negativo no se debe aplicar el nutriente por lo menos un ciclo de cultivo.
Ejercicio
Análisis de suelo
N: 40 pm
P: 20 ppm
K: 60 ppm
Ca: 120 ppm
Mg: 30ppm
S: 10ppm
Zn: 2ppm
Eficiencia de fertilizante:
N: 80 %
P: 20 %
372
K: 60%
Ca, Mg. S : 50 %
Micronutrientes: 20%
373
CAPÍTULO XII.
La fertigación se inició en el oeste de los Estados Unidos en riego por surcos. En 1930, en
California el fertirriego fue utilizado en huertos frutales. En países como Estados Unidos, Israel,
Italia, Francia, Inglaterra, etc., su uso se tornó generalizado, principalmente con el desarrollo del
riego por goteo (Frizzone et al., 1985).
La fertilización combinada con el agua de irrigación se adapta a todos los sistemas de riego, sean
fijos, semi-fijos o móviles. Sin embargo, cada sistema presenta características particulares de
distribución, lo que afecta el manejo del fertilizante.
El riego por goteo se ha convertido en el medio más popular de aplicación de agua y fertilizantes.
Teniendo en cuenta que el gotero es una fuente puntual de ingreso, el agua penetra en el suelo y
se mueve para abajo y para los lados formando un cono o bulbo. El tamaño y la forma del bulbo
son afectados principalmente por el caudal del gotero, tipo de suelo, y tiempo de aplicación
(Benani y Offen, 1984). La distribución del agua en el perfil del suelo comprende tres regiones
(Zanini, 1991):
374
Zona de transición, formada inmediatamente bajo la superficie del suelo, con el contenido de
agua cerca de la saturación.
Zona mojada, donde la mayoría de las raíces se desenvuelven. El agua llega en este punto por
gravedad y capilaridad. En esas dos regiones, la cantidad de agua decrece con la distancia del
punto de suministro y las condiciones de aireación aumentan.
Frente de mojamiento, donde la humedad es muy próxima a la humedad inicial del suelo. En los
suelos arcillosos hay predominio de fuerzas capilares y el bulbo se torna más achatado y plano,
que en los suelos arenosos.
Las ventajas de riego por goteo con relación a los otros sistemas incluyen factores como uso más
eficiente del agua, aplicación de la solución del fertilizante en la zona activa de las raíces de
donde el agua está siendo removida, menor pérdida del fertilizante por lixiviación y la aplicación
localizada no favorece el desarrollo de enfermedades foliares.
Entre las limitaciones de este sistema se encuentran la variabilidad de la descarga de agua en cada
emisor, la necesidad de filtrar las soluciones para eliminar partículas sólidas, obstrucción de los
emisores por microorganismos, algas o precipitados formados por la acción de algunos
fertilizantes con el agua de riego, las soluciones ácidas ó alcalinas tienen mayor efecto negativo
en el suelo debido a que se concentran en un pequeño volumen y el sistema radicular se vuelve
más restringido (Karmelli y Keller, 1975).
Los sistemas de riego por aspersión se caracterizan por la distribución del agua en toda la
superficie, lo que es deseable en la aplicación de productos químicos en suspensión o en solución,
como es el caso de los fertilizantes, agroquímicos, etc.
Una ventaja de la aspersión, en relación con riego por goteo, es la velocidad de conducción del
agua en las tuberías de distribución, lo que disminuye la sedimentación de las partículas sólidas
reduciendo los riesgos de obstrucción de las tuberías y de los emisores. Entre las limitaciones del
sistema están el mayor consumo de agua, mayores problemas con enfermedades en las plantas,
menor aprovechamiento del agua aplicada, principalmente en la fase inicial de los cultivos
cuando las raíces no están plenamente desarrolladas.
375
VENTAJAS Y LIMITACIONES DEL FERTIRIEGO
Ventajas
Eficiencia de uso del fertilizante.- En función del mayor fraccionamiento de la fertilización, hay
un mejor aprovechamiento del fertilizante aplicado. Esto lleva a una reducción de las cantidades
aplicadas en relación a la fertilización convencional.
Limitaciones
Restricción de fertilizantes.- Las fuentes de fertilizantes utilizadas tienen que presentar alta
solubilidad.
376
Reacción de los fertilizantes en la línea de riego.- En función de la calidad de agua que se utiliza
en la irrigación, (principalmente cuando son ricas en calcio) y del fertilizante, pueden formarse
precipitados en la red lo que ocasiona obstrucción en los emisores.
Corrosión del sistema de riego.- El efecto salino de los fertilizantes puede ocasionar daño en el
sistema, debido a su efecto corrosivo.
Calidad de Agua
El éxito de la aplicación de los fertilizantes en el agua de riego depende de la calidad del agua.
Algunas de las características que influyen en el agua como medio apropiado para contener
nutrientes se presentan en la Tabla 1.
Las características del agua tienen mayor o menor importancia en función del tipo de riego
utilizado y del modo de aplicación. La aplicación vía aspersión limita la concentración de sales
como sodio, cloro, boro y flúor que al caer sobre las plantas pueden causar daños en las hojas. Sin
embargo, altas concentraciones, pueden ser toleradas si las hojas fueren lavadas con agua después
de la aplicación. Las condiciones de salinidad en el agua de riego o el exceso de fertilizante
pueden tener efecto significativo en la producción. La Tabla 2 indica la tolerancia de varias
hortalizas a la salinidad.
377
La influencia de la salinidad en el agua de riego sobre la tolerancia de las hojas y raíces han sido
estudiadas en algunos cultivos. Mass (citado por Stanley y Maynard, 1991) concluye que
utilizando riego por aspersión en una cucurbitacea, tomate y pimiento, el límite de tolerancia para
el agua de irrigación salina fue más alto para el sistema radicular que para las hojas. La relación
fue inversa con fresa, en la cual, las raíces fueron más susceptibles a las condiciones de salinidad.
De modo general, el agua contiene elementos de textura gruesa que pueden ser filtrados y
también cantidades apreciables de iones de elementos químicos y biológicos que no son filtrados
(Tabla 3). Por ejemplo, el calcio y el ácido carbónico en determinadas condiciones, como en el
caso del aumento de la temperatura, reaccionan formando precipitados de carbonato de calcio.
Esta precipitación puede acelerarse también con el aumento del pH del agua, como el provocado
con la adición de fertilizante amoniacal en el agua de riego.
El fósforo soluble en combinación con el calcio o magnesio, que se deposita en forma de sales
insolubles dentro del sistema de riego, puede obstruir los goteros o los microaspersores. Por esta
razón, no se recomienda introducir fertilizantes fosfatados en el agua de riego, si no es el ácido
fosfórico.
A pesar de que los fertilizantes fosfatados inorgánicos aplicados por el sistema de riego por
goteo producen la obstrucción del sistema, con ciertas precauciones, el ácido fosfórico puede ser
aplicado con bastante éxito (Grobelaar y Louriens, 1974, citado por Frizzone et al., 1985). Para
agua con pH elevado, el ácido fosfórico debe ser aplicado a una tasa tal, que posibilite la
reducción del pH a valores inferiores a 6.5 a fin de evitar precipitaciones químicas.
El óxido ferroso es también un agente que causa obstrucción, pues se presenta en suspensión en
forma de partículas gruesas y finas. Las partículas gruesas son retenidas por los filtros, pero las
partículas finas en gran concentración se depositan obstruyendo el sistema (algunas veces en
combinación con las partículas de limo o de materia orgánica).
378
Tabla 12.1. Potenciales problemas en fertigación causados por la calidad del agua.
Niveles de
Análisis
severidad
Ninguno Alto Severo
Valores bajo 0.5 son satisfactorios si el agua contiene calcio suficiente. El agua baja en calcio puede
aumentar problemas de permeabilidad en ciertos suelos.
Menos severa si K está presente en igual cantidad
Grandes cantidades de Ca o Mg aumenta la precipitación de P. No usar P en la irrigación si el agua
tiene más de 120 ppm de calcio y pH en el agua <4.0
Rango de absorción de sodio, calculado a través de la siguiente fórmula: SAR =Na/((Ca + Mg)/2)½,
donde Na, Ca y Mg son dados en meq/1
Valores significativos para las plantas sensibles al flúor
Concentración mayor de 0.4 ppm puede formar residuo con el C1.
Suma de nitrato y amonio. Valores mayores de 5 ppm estimulan surgimiento de algas.
Problemas con la obstrucción de los emisores pueden ocurrir también debido a la acción de los
microorganismos. Algas que crecen en los tubos pueden ser controladas con sulfato de cobre.
Otros productos químicos pueden ser usados como alguicidas.
La acidificación del agua de riego puede prevenir problemas de obstrucción (Tabla 4) y es usada
para limpiar líneas y emisores.
379
Tabla 12.2. Tolerancia relativa de las hortalizas a la salinidad (Stanley y Maynard, 1991)
Los ácidos sulfúricos o clorhídricos son comúnmente usados para reducir la precipitación
química. El ácido fosfórico puede también ser utilizado como tratamiento del agua y fuente de
fertilizante (Rolston et al., 1979).
La Sociedad Americana de Ingeniería recomienda que los filtros para sistemas de goteo tengan de
100 a 200 mesh de malla, pudiendo en algunos casos llegar a mallas de 600 mesh.
380
Tabla 12.3. Principales factores que contribuyen para la obstrucción del sistema de goteo.
Tabla 12.4. Efecto del tratamiento del agua en la obstrucción del sistema de goteo (Buck et
al., 1982).
Tratamientos
% de emisores
Filtro Químico
obstruidos 1
1
Total o con salida menor que el 50% de la inicial.
381
Textura del Suelo
Una de las características del suelo que más influye en la eficiencia de absorción del nutriente
aplicado a través de la fertirrigación es la textura del suelo. La fertirrigación es más ventajosa
para suelos de textura gruesa que para los de textura fina, en especial para el nitrógeno. En suelos
arenosos, con alta probabilidad de lixiviación, la aplicación de pequeñas dosis de nitrógeno
dividido durante el crecimiento de la planta aumenta la disponibilidad del nutriente en la capa de
suelo donde se encuentra el sistema radicular.
Por otro lado, en suelos de textura fina, donde la lixiviación de nutrientes es restringida y una
aplicación es suficiente, la fertirrigación no ofrece ventajas sobre otros métodos de fertilización
(Cladwell, 1977). Los nutrientes de mayor éxito aplicados a través de irrigación son N, S, B y K
en suelos arenosos. El K no debe ser aplicado en la presiembra en suelos arcillosos (Rhoads y
Bennet, 1990).
Para aplicar los fertilizantes vía fertirriego, es necesario conocer la lámina de agua
evapotranspirada durante un ciclo o período de cultivo y los requerimientos de nutrientes durante
este ciclo.
Datos:
∗ ∗ ∗ 100
=
Donde:
15000 1/h
_____________________________________________________
DF=
10 golpes/min 0.25 1/golpe 60 min/h
15000
_____________
= = 100
150
∗ ∗ ∗ 100
=
F= 30 ppm
n= 1 m3
383
a= 46 % de K2O = 46 /1.2 = 38.3 de K
DF = 100
30 . 100 . 1 . 100
C = ________________________ = 7826 g KNO3/ m3
38.3 de solución madre
C.a
F = __________________________
DF n 100
C= 7826 g
F= ?
n= 1 m3
a= 13% de N
DF = 100
7826 13
__________________________
F= = 10 g N/ m3 de agua de irrigación
100 1 100
Cálculo de N adicional
∗ ∗ ∗ 100
=
C= ?
F= 190 ppm
n= 1 m3
a= 34
DF = 100
384
190 100 1 100
C = ____________________________ = 55882 g NH4 NO3/ m3 de solución madre
34
Cálculo del fósforo (P)
85 31
P en el ácido fosfórico = ________________ = 26.9%
98
∗ ∗ ∗
=
C= ?
F= 5 ppm
n= 1 m3
a= 85 % de H3PO4 = 26.9 % de P
FD = 100
5 100 1 100
_________________________
C= = 1860 g H3PO4/m3 de
26.9 solución madre
Resumen
Para preparar una solución de 200 ppm N, 5 ppm P y 30 ppm K se necesita de las siguientes
cantidades de los fertilizantes disponibles: 55.9 kg NH4NO3 , 7.8 kg KNO3 , 1.1 litros /ácido
fosfórico (85%) por m3 de solución madre.
Esta solución madre será suficiente para 100 m3 de agua de riego (FD).
Si la lámina de riego (L) es 3 mm /día y la cantidad de agua para el fertirriego por día (V) es de
100 m3/día, el área que se puede regar se calcula con la siguiente fórmula:
V 100 m3
_______ _______________
A= = = 33.333 m2
L 0.003 m
385
DETERMINACION DEL BALANCE HIDRICO
El balance hídrico es una metodología utilizada para la programación de riegos que ha sido
ampliamente evaluada en algunas regiones agrícolas del mundo. El Lisímetro “MC” (Figura
12.1) permite programar los riegos debido a que integra los diferentes parámetros del balance
hídrico, como son la evaporación, precipitación, drenaje y almacenamiento de agua.
Las evaluaciones del Lisímetro “MC” se basan en el principio de considerar al suelo como un
reservorio de agua para las plantas, utilizando el concepto de balance hídrico como un proceso
que opera continuamente a nivel natural en el campo de cultivo. Es muy práctico ya que
funciona como un pluviómetro y un tanque de evaporación, midiendo la evapotranspiración
relativa, la misma que corresponde a la cantidad de agua perdida por evaporación directa desde la
superficie del suelo y por transpiración a través de la superficie de las hojas de las plantas.
(Calvache, 1993).
El Lisímetro “MC” simula los cambios de almacenamiento de agua en el suelo y tiene definida
una capacidad máxima de almacenamiento de agua a capacidad de campo (Acc), por medio de un
orificio, por donde drena el exceso de agua que en condiciones naturales no sería retenida en el
suelo. El nivel de agua en el recipiente baja poco a poco de acuerdo a la evaporación y aumenta
de acuerdo a la lluvia, y el riego se programa cuando el nivel de agua se acerca a la marca de
almacenamiento crítico (A crítico).
Acc - A crítico
_______________________
f =
Acc - APMP
Donde:
386
A crítico = Almacenamiento de agua crítico
Por Ejemplo, si un suelo tiene, hasta una profundidad de 50 cm, una capacidad de
almacenamiento de las siguientes características:
Acc = 150 mm
APMP = 60 mm
A crítico = 114 mm
El factor f es :
150 – 114 36
______________ ________
f= = = 0.4 o 40%
150 – 60 90
Es decir, que se puede dejar agotar hasta el 40% del agua disponible antes de realizar el próximo
riego.
Para calcular la lámina de riego (Lr) del cultivo, se determina la evaporación relativa del cultivo
(EV.REL) y se multiplica por el coeficiente Kc. La evaporación relativa se calcula restando del
valor de A a capacidad de campo (Acc) el valor de A en la regleta (A) a un período de tiempo
determinado (T).
QT = AL
387
Donde:
Q= caudal (l/seg.)
T = a tiempo de riego (horas o minutos)
A = área (m2)
L = lámina de riego (milímetros o litros por m2).
Tabla 12.5. Coeficientes culturales (Kc) de varios cultivos (Dorenbos y Pruit, 1975).
Banana
Tropical 0.4 – 05 1.0-1.1 0.75-0.85 0.7-0.8
Subtropical 0.5 - 0.65 1.0-1.2 1.0 – 1.15 0.85 – 0.95
Frijol
Verde 0.3 – 0.4 0.95 – 1.05 0.85 – 0.95 0.85 – 0.9
Seco 0.3 – 0.4 1.05 – 1.2 0.25 – 0.3 0.7 – 0.8
Col 0.4 – 0.5 0.95 –1.1 0.8 – 0.95 0.7 – 0.8
Algodón 0.4 – 0.5 1.05 – 1.25 0.65 – 0.7 0.8 – 0.9
Vid 0.35 – 0.55 0.7 – 0.9 0.55 – 0.7 0.55 – 0.75
Maíz
Dulce 0.3 – 0.5 1.05 – 1.2 0.95 – 1.1 0.8 - 0.95
Grano 0.3 – 0.5* 1.05 – 1.2* 0.55 – 0.6* 0.75 – 0.9*
Cebollas
Secas 0.4 – 0.6 0.95 – 1.1 0.75 – 0.85 0.8 – 0.9
Verdes 0.4 – 0.6 0.95 – 1.05 0.95 – 1.05 0.65 – 0.8
Arveja, verde 0.4 – 0.5 1.05 – 1.2 0.95 – 1.1 0.8 – 0.95
Pimiento verde 0.3 – 0.4 0.95 – 1.1 0.8 – 0.9 0.7 – 0.8
Patata 0.4 – 0.5 1.05 – 1.2 0.7 – 0.75 0.75 – 0.9
Soja 0.3 – 0.4 1.0 – 1.15 0.4 – 0.5 0.75 – 0.9
Remolacha 0.4 – 0.5 1.05 – 1.2 0.6 – 0.7 0.8 – 0.9
azucarera
Rosas 0.4 – 0.5 0.95 – 1.1 0.8 – 0.9 0.8 – 0.9
Caña de azúcar 0.4 – 0.5 1.0 – 1.3 0.5 – 0.6 0.85 – 1.05
Girasol 0.3 – 0.4 1.05 – 1.2 0.35 – 0.45 0.75 – 0.85
Tabaco 0.3 – 0.4 1.0 – 1.2 0.75 – 0.85 0.85 – 0.95
Tomate 0.4 – 0.5 1.05 – 1.25 0.6 – 0.65 0.75 – 0.9
Sandía 0.4 – 0.5 0.95 – 1.05 0.65 – 0.75 0.75 – 0.85
Alfalfa 0.3 – 0.4 1.05 – 1.2 0.85 – 1.05
Cítricos desyerbe 0.65 – 0.75
total 0.85 – 0.9
sin control de maleza
Olivo 0.4 – 0.6
Primera cifra: con humedad elevada (HR min 70%) y poco viento ( U 5 m/sec).
Segunda cifra: con humedad reducida (HR min 20 %) y fuerte viento ( 5 m/sec).
388
Por ejemplo, si se requiere regar por goteo una superficie de 300 m2, con una lámina de riego de
40 mm, con un caudal de 2 l/seg, el tiempo de riego será:
300m2 40 l/m2
___________________________
T= = 6000 seg = 100 min
2 l/seg.
Una vez dado el riego de acuerdo a la lámina requerida, hasta la capacidad de campo, se vuelve a
llenar el Lisímetro “MC” hasta la altura del orificio del drenaje, que equivale al almacenamiento
de agua a capacidad de campo (Acc), y se repite el procedimiento.
ET = (Ai – Af)
Donde:
M C
ET = Evapotraspiración real
Ai = Almacenamiento inicial
Af = Almacenamiento final
389
50
30
20
10
1 5 9 13 17 21 25 29 33 37 41
Días
Tabla 12.6. Ejemplo de cálculo de balance hídrico en el cultivo de rosas bajo invernadero.
A A Ev. Lr
Fecha (mm) (mm) Relativa Kc. (mm) (mm/día)
(mm)
1/06/93 340
3/06/93 325 15 15 0.8 12 6
6/06/93 313 12 12 0.8 9.6 3.2
10/06/93 293 20 20 0.8 16.0 4.0
15/06/93 273 20 20 0.8 16 4.0
Lámina de riego N P K
mm/día (kg/ha)
3 2190 438 1314
6 4390 876 2628
9 6570 1314 3942
12 8760 1752 5256
Las cantidades de nutrientes aplicadas con las láminas de 6, 9 y 12 mm/día son exageradamente
altas y estarían provocando la acumulación de sales no absorbidas por las plantas, lo que aumenta
la conductividad eléctrica y provoca la salinización del suelo.
391
CAPÍTULO XIII.
Cualquier cultivo durante su ciclo consume una gran cantidad de agua, pero cerca del 98% de este
volumen de agua solamente pasa por la planta y se pierde en la atmósfera por el proceso de
transpiración. Este flujo de agua es sin embargo necesario para el desarrollo vegetativo de los
cultivos por lo que se debe tratar de mantener el agua en el suelo en niveles óptimos para cada
cultivo.
El lugar de almacenamiento del agua en la agricultura es el suelo, el mismo que provee a las plantas
a medida de sus necesidades. Como la recarga natural de este reservorio no es continua (lluvia), el
volumen disponible para las plantas es variable. Cuando las lluvias son intensas, la capacidad de
almacenamiento de agua por el suelo puede ser superada y por lo tanto grandes cantidades de agua
se pueden perder por escorrentía superficial o por percolación profunda.
Cuando la lluvia es muy escasa y poco frecuente, o en condiciones de invernadero, el suelo funciona
como un reservorio de agua indispensable para el desarrollo vegetal. El agotamiento de esta reserva
por un determinado cultivo exige una recarga artificial, la cual se produce mediante el riego.
Debido a estos factores, el manejo correcto del agua es un tópico de fundamental importancia. En
regiones áridas o semiáridas, o en condiciones de invernadero, el manejo correcto del agua implica
prácticas de riego que permitan una economía del agua y reduzcan el potencial de problemas por
salinidad. En regiones de mucha precipitación, el problema fundamental es la lixiviación de
nutrientes del suelo y el drenaje. En regiones donde la lluvia es suficiente, generalmente existen
problemas en su distribución adecuada, lo que trae consigo problemas de falta de agua en
determinados períodos del año. En estas áreas es muy importante lograr la mayor eficiencia posible
en el uso del agua por los cultivos.
El manejo racional de agua implica el uso adecuado de este recurso con relación a la conservación
de los otros factores del sistema suelo-planta-atmósfera. Esto significa mantener niveles adecuados
de productividad de los cultivos, pero evitando la erosión del suelo y la contaminación de las aguas
subterráneas. Para esto son necesarios una serie de conocimientos prácticos, los mismos que se
pretenden discutir en este artículo.
EL AGUA EN EL SUELO
El suelo es un sistema heterogéneo, disperso, poroso y polifásico. Las tres fases de naturaleza
ordinaria son: la fase sólida que constituye la matriz del suelo; fase líquida que consiste del agua del
suelo, la cual contiene sustancias disueltas y se llama más correctamente solución del suelo; y la fase
gaseosa es la atmósfera del suelo.
Las proporciones relativas de las tres fases en el suelo varían continuamente y dependen de variables
como clima, vegetación, y manejo. Este documento trata de las relaciones fundamentales entre la
fase líquida (agua) y el suelo.
El suministro de agua al suelo, ya sea por riego, lluvia o flujos internos es indispensable para la
germinación, crecimiento, desarrollo y producción de las plantas. El movimiento, contenido y
392
disponibilidad del agua está determinado principalmente por las propiedades físicas del suelo,
particularmente la textura, estructura, porosidad, profundidad y contenido de materia orgánica.
Buena parte del manejo del riego esta fundamentado en conocer como el proceso de evaporación
afecta en forma cuantitativa la disponibilidad del agua, lo que define el volumen de agua a usarse y
la frecuencia de restitución al suelo.
Hay que recordar que la dinámica del agua se establece sobre un sistema más complejo: el sistema
suelo-planta-atmósfera, y por lo tanto el agua en el suelo es solo una parte de esa dinámica.
Relaciones de
Relaciones de
masa
volumen
Ma=0
Va
Aire
Vf
Mw
Vw
Agua
Mt
Vt
Sólido
Vs
Ms
Las relaciones principales de volumen y masa entre las tres fases del suelo se definen con algunos
parámetros básicos, los cuales son útiles en la caracterización de la condición física del suelo. La
Figura 1 es una representación esquemática de un suelo hipotético mostrando el volumen y masa de
las tres fases.
La masa de las fases es indicada en el lado derecho del diagrama: la masa del aire Ma; la masa del
agua Mw; la masa de sólidos Ms; y la masa total Mt. Los volúmenes de los mismos componentes
son indicados en el lado izquierdo del diagrama: volumen del aire Va; volumen del agua Vw;
volumen de sólidos Vs; volumen de poros Vf = Va + Vw y volumen total Vt.
Teniendo en cuenta estas condiciones se puede proceder al cálculo de diferentes parámetros que
caracterizan las relaciones entre las fases del suelo y que son necesarios para el manejo del riego,
como se detalla a continuación.
393
Densidad de sólidos o densidad de partículas (Dp)
Es la relación entre la masa del suelo seco (Ms) y el volumen ocupado por los sólidos del
suelo (Vs).
Dp = Ms/Vs (1)
En la mayoría de los suelos, la densidad media de partículas oscila entre 2.6 y 2.7 g/cc, siendo
bastante confiable el valor de 2.65 g/cc.
Da = Ms/Vt (2)
La densidad aparente expresa la relación entre la masa del suelo seca (105 °C por 24 horas) y el
volumen total, incluyendo el espacio poroso. Obviamente la Da es más pequeña que la Dp. En
suelos arenosos la Da puede ser tan alta como 1.6 g/cc, en francos de alrededor de 1.2 g/cc y en
suelos arcillosos cerca de 1 g/cc. En suelos de origen volcánico y en suelos orgánicos los valores
pueden ser de 0.8 y 0.3 g/cc, respectivamente.
Porosidad (f)
f = Vf/Vt (3)
La relación de masa de agua (Mw) y masa de partículas de suelo seco (Ms) se le conoce como
contenido de agua gravimétrico. El término suelo seco es generalmente definido como un suelo
sometido a una temperatura de 105 °C durante 24 horas. La humedad gravimétrica es expresada
algunas veces como una fracción decimal, pero más frecuentemente como un porcentaje.
Hg = Mw/Ms (5)
En un suelo mineral que esta saturado, la Hg puede oscilar entre 25 y 60%, dependiendo de la
densidad aparente. El contenido de agua a saturación generalmente es mas alto en suelos arcillosos
394
que en arenosos. En el caso de suelos orgánicos el contenido de agua a saturación en base a la masa
puede exceder 100%.
Hv = Vw/Vt (6)
La relación entre el volumen de agua (Vw) y el volumen total del suelo (Vt) se le conoce como
contenido volumétrico de agua o fracción volumétrica de agua en el suelo. En suelos arenosos, el
valor de Hv a saturación es del orden de 40-50%; y en suelos arcillosos de 60%. En este último caso,
el volumen relativo de agua a saturación puede exceder la porosidad de suelo seco, debido a que los
suelos arcillosos se hinchan, sobrehumedeciéndose.
El uso de Hv para expresar el contenido de agua es más conveniente que Hg, debido a que se puede
usar directamente en el cálculo de flujos y cantidades de agua agregadas al suelo por riego o por
lluvia, y en el cálculo de las cantidades extraídas del suelo por evapotranspiración o drenaje.
También la Hv representa la profundidad de agua por unidad de profundidad de suelo (cm/cm).
Hv = Hg(Da/Dw) (7)
Este parámetro expresa el volumen de agua presente en el suelo con relación al volumen de poros.
El índice s oscila desde 0 en suelos secos a 1 (100%) en suelos completamente saturados. Sin
embargo, la saturación completa es difícil de obtener en condiciones de campo debido a que siempre
puede quedar aire atrapado entre el agua y las partículas sólidas.
fa = Va/Vt (8)
Esta es una medida relativa del contenido de aire del suelo, y como tal es un criterio importante de
aireación del suelo. Este índice esta relacionado inversamente al grado de humedad volumétrica del
suelo, esto es, fa = Vf-Hv.
Así por ejemplo, un suelo franco representativo, en un campo cultivado contiene aproximadamente
50% de partículas sólidas (arena, limo, arcilla y materia orgánica), 25% de aire, y 25% de agua, pero
395
solamente la mitad de esa agua esta disponible para las
Agua retenida por fenómenos de tensión plantas, debido a los mecanismos de almacenamiento
superficial (capilaridad) del agua en el suelo.
Debido a que las fuerzas que retienen el agua en el suelo son fuerzas de atracción superficial, entre
mayor sea la superficie de las partículas coloidales del suelo (arcilla, materia orgánica), mayor es la
cantidad de agua adsorbida (Figura 13.2).
Existe diferente nomenclatura para denominar la fuerza con que es retenida el agua (o la fuerza
requerida para extraer el agua) del suelo. Las principales denominaciones son: succión, tensión,
potencial de humedad y el más usado, potencial hídrico. Este es un número negativo, debido a que
se requiere de un trabajo para remover el agua de las partículas del suelo.
El potencial hídrico ó potencial total del suelo (¥T) se puede expresar en bares, pascales, atmósferas
o una escala logarítmica de la columna de agua en cm(pF).
El potencial hídrico, o mejor dicho el potencial total de retención de agua (¥T) se puede expresar
también como la suma de sus componentes conocidos de la siguiente forma:
¥T = ¥m + ¥g + ¥p + ¥o (9)
de donde:
396
¥p = potencial de presión, o fuerza debido al peso del agua. Su magnitud es pequeña.
Li
mo
acuerdo a su tamaño. La arena constituyen
(%
)
partículas con diámetro de 0.05-2 mm, el limo
)
%
de 0.05-0.002 mm y la arcilla menos de 0.002
(
la
c il
mm. Arcilla
Ar
Arcillo
La mayoría de los suelos contienen una Arcillo
limoso
La textura es una importante propiedad del suelo, ya que afecta la cantidad de área superficial
expuesta por el suelo y la cantidad y tamaño de poros. Al disminuir el tamaño de partículas, aumenta
el total de área superficial disponible para la adsorción de agua y nutrientes, así como la cantidad y
tamaño de poros que determinan la cantidad y velocidad del aire y del agua en el suelo. De esta
forma, el movimiento, poder de retención y suministro del agua y la fertilidad, erosión y aireación
del suelo están estrechamente relacionadas con la textura.
397
Una propiedad importante de la estructura del suelo es la capacidad que tienen los gránulos de
retener su forma cuando se humedecen y de permitir el paso de agua a través del suelo. A esta
propiedad se lo denomina estabilidad estructural. Los gránulos de suelo deben tener suficiente
estabilidad para que permitan el libre paso del agua y la entrada de aire conforme sale el agua. Un
suelo estructuralmente bueno se desmorona con facilidad y es fácil de arar cuando está seco y no se
vuelve pegajoso cuando se humedece (Figura 4).
El espacio poroso está formado por poros de diferente tamaño que comúnmente se clasifican en
macroporos, mesoporos y microporos. En los macroporos el agua no se retiene, debido a la mayor
fuerza de la gravedad con relación a la fuerza de retención. Esto da lugar al agua de percolación. La
mayor cantidad de agua disponible para las plantas se encuentra en los mesoporos (0.1 a 5 atm.) El
agua en los microporos es retenida con tal fuerza que no es disponible para las plantas (10-15 atm).
Consecuentemente, la proporción ideal de poros en el suelo es aquella que permite una rápida
evacuación del agua, aireación adecuada y suficiente
TIPO DE ESTRUCTURA DIAGRAMA
capacidad de retención de agua.
El agua disponible es la porción de agua almacenada en el suelo que puede ser absorbida por las
raíces de las plantas para su crecimiento, desarrollo y producción. Se define como la parte de la
humedad total retenida entre la capacidad de campo y el punto de marchitez.
El agotamiento de la humedad del suelo no es lineal, sino exponencial. A medida que disminuye la
humedad, aumenta el esfuerzo o succión que necesita realizar la planta para extraer agua, por ese
399
motivo algunos autores dividen la reserva hídrica del suelo en fácilmente aprovechable y
difícilmente disponible (cierre progresivo de estomas debido al déficit hídrico).
La humedad del suelo es dinámica y varía en el tiempo y en el espacio en respuesta a las fuerzas del
agua (capilar, gravitacional, adsorción), debidas a percolación, evaporación, irrigación, lluvia,
temperatura y el uso por las plantas.
Para fines agrícolas es necesario conocer, no solamente el estado actual de humedad del suelo, sino
también los límites superior e inferior dentro de las cuales la planta puede absorber agua, para así
poder planificar y diseñar en forma apropiada la cantidad de agua que debe aplicarse para suplir la
deficiencia. Estos límites corresponden, aproximadamente a lo que se denomina capacidad de campo
y punto de marchitez (Figura 7).
Capacidad de campo
La capacidad de campo puede definirse como la cantidad máxima de agua que un suelo puede
retener o almacenar, bajo condiciones de humedecimiento total seguido de drenaje libre
(gravitacional).
En el campo, los suelos alcanzan esta condición solo momentáneamente. Esto se debe a que
mientras el exceso de agua está aún drenando lentamente en las capas más profundas del suelo, parte
del agua disponible de las capas superficiales esta siendo evaporada desde el suelo o transpirada por
las plantas. Determinar cuando el perfil tiene una "capacidad de campo promedio" es difícil de
precisar, especialmente en suelos arcillosos.
El tiempo que transcurre entre la aplicación de agua y el momento en que se alcanza la capacidad de
campo depende del tipo de suelo, principalmente, su textura y varia de uno a cuatro días. Para suelos
arcillosos se puede empezar el muestreo 48 horas después, en francos 24 horas después y en
arenosos 12 horas, después de alcanzado la saturación. Los intervalos de muestreo pueden ser de 12
horas para suelos arcillosos, 6 horas para francos y 3 horas para arenosos.
El contenido de humedad se determina por el método gravimétrico con tensiómetros o con la sonda
de neutrones. Posteriormente se hace un gráfico ubicando el contenido de humedad en las ordenadas
y el tiempo en las abcisas. Con este gráfico es posible determinar el porcentaje de humedad
correspondiente a la capacidad de campo de cada estrato definido, la cual se obtiene en el momento
en que la curva se estabiliza (Figura 8).
400
Cc = (Psh-Pss)/Pss 100 (10)
Donde
Cc = capacidad de campo
Punto de marchitez
El punto de marchitez, a veces llamado punto de marchitez permanente, se define como el límite
inferior de humedad aprovechable para las plantas. Por debajo de este umbral, las fuerzas de succión
de las células de las raíces son insuficientes para extraer el agua retenida por el suelo.
En un día seco y soleado, una planta como el maíz, puede transpirar excesivamente y marchitarse
temporalmente, aun cuando la humedad del suelo sea de 1 a 2 bares (agua realmente disponible).
Sin embargo, la planta se recuperará fácilmente durante la noche cuando las pérdidas por
transpiración son mucho menores. En contraste con esta marchitez temporal, el punto de marchitez
indica la baja disponibilidad de humedad; en
tales condiciones las plantas marchitas no se
recuperan, a menos que se agregue agua al
suelo.
Un método más costoso, pero más exacto de determinar el punto de marchitez es el denominado
biológico. Aquí las plantas se siembran en macetas con suelo no disturbado y se dejan crecer hasta
una altura adecuada (fin de la etapa juvenil). Posteriormente se suspende el suministro de agua y se
deja secar el suelo hasta que las plantas marchitas no se recuperen cuando se someten a una
atmósfera saturada de vapor de agua. Entonces se toman muestras de ese suelo y se determina el
contenido de humedad gravimétrica.
401
El método anterior presenta limitaciones con
cultivos perennes por lo que un método
a
alternativo para determinar el punto de marchitez
es efectuar observaciones directas en el campo,
en parcelas destinadas a ese fin. Este método
Contenido de humedad
“Cc” = ?
tiene la ventaja, a pesar de ser más cualitativo, de
a
Suelo arcilloso
considerar toda la interrelación suelo-planta-
atmósfera. En todo caso para fines de manejo de
riego, el agricultor nunca debe esperar a que sus
“Cc” Suelo arenoso
cultivos estén en punto de marchitez para hacer la
a = punto de saturación
aplicación de riego.
Tiempo
V = AD a (11)
AD = (Cc-Pm/100) Pf (12)
De igual manera, el almacenamiento de agua del suelo disponible para las plantas, a una profundidad
determinada y en un momento dado, se calcula por la siguiente expresión:
AD = (Cc-Ha/100) Pf (13)
402
Cc = humedad volumétrica a capacidad de campo (%)
Efecto de la textura y la materia orgánica sobre la capacidad de retención de agua del suelo
La textura del suelo y el contenido de materia orgánica son importantes en determinar la cantidad de
agua que los suelos pueden almacenar. Un aumento en el contenido de arcillas y materia orgánica
incrementa la capacidad total de retención de agua. La gran área superficial de estos componentes,
ocasiona que una buena cantidad de agua sea retenida fuertemente a las superficies de adhesión.
Capacidad
de campo Agua disponible
Punto de
marchitez
Agua no disponible
A manera de ejemplo, si se toma en la figura anterior un suelo franco arenoso, se puede observar que
la capacidad de campo corresponde a 21% (humedad volumétrica) y el punto de marchitez a 11%.
Esto significa que 10% constituirá el porcentaje de agua útil, esto es 10 mm de agua por 10 cm de
suelo, ó 60 mm de agua para una profundidad de 60 cm.
La capacidad de retención de agua de los suelos se puede calcular sobre la base de la textura, materia
orgánica y profundidad, utilizando el procedimiento elaborado por Dumenil y Fenton, citados por
Henao. Este método consiste en utilizar el triángulo de texturas del suelo, sobre la cual se han
403
dibujado las líneas de isohumedad (Figura 13.10). Las líneas de isohumedad contienen la cantidad
de agua retenida por el suelo, expresada en mm por cm de suelo.
100
90 10
80 20
%
LI
70 30
MO
60 40
LLA 50 50
CI
AR
40 60
%
30 70
0.7
20 80
10 90
100
100 90 80 70 60 50 40 30 20 10
% ARENA
Los datos se obtienen buscando en la Figura Agotamiento del agua disponible (%)
13.10 la línea de retención de humedad que 0 25 50 75 100
cruza la clase textural. Este punto indica -0.1
arenoso fino
-0.5
suelo.
404
Medición del contenido y potencial del agua en el suelo
La cantidad variable de agua en una unidad de masa o volumen del suelo y el estado de energía del
agua en el suelo son factores importantes que afectan el crecimiento y producción de las plantas.
La fracción por masa o volumen de agua en el suelo puede ser caracterizada en términos de
humedad del suelo. La condición físico - química o estado del agua en el suelo es caracterizada en
términos de energía libre por unidad de masa, llamado potencial. De los varios componentes de este
potencial es el mátrico el que caracteriza la tenacidad con la cual es sostenida el agua por la matriz
del suelo.
Otros factores que dificultan las mediciones de agua en el suelo son el crecimiento disparejo de las
plantas, la distribución no uniforme de las raíces, variaciones de textura, estructura y estratificación
del suelo, alteraciones y cambios de densidad aparente, volumen poroso, tamaño de poros,
características de infiltración y configuración de la superficie del suelo.
El contenido fraccional de agua en el suelo puede ser expresado en términos de relaciones de masa o
volumen, como se indico anteriormente en este documento.
En muchos casos, es útil expresar el contenido de agua del perfil (cap) del suelo en términos de
profundidad, o sea, la lámina de agua contenida en una profundidad especifica del suelo (P) o
almacenamiento de agua en el perfil (A) de acuerdo a las siguientes expresiones:
cap = Hv P (14)
A=Hv P (15)
vta = A a (16)
405
Métodos de medición del contenido de agua en el suelo
Este método, desarrollado de los años 50, ha ganado aceptación en el mundo por ser una técnica
eficiente y confiable para medir la humedad del suelo en el campo. Frente al método gravimétrico,
este método es menos laborioso, más rápido, no destructivo, de mayor resolución espacial, las
mediciones se pueden repetir periódicamente en los mismos sitios y profundidades y es
prácticamente independiente de la temperatura y la presión.
Las principales desventajas son el alto costo del instrumento, bajo grado de resolución espacial,
dificultad de mediciones en la parte superficial del suelo, la operación y mantenimiento requiere de
personal preparado, debido principalmente a los peligros asociados con la exposición a neutrones y
radiación gamma.
Una sonda, la cual contiene una fuente de neutrones rápidos y un detector de neutrones
lentos. La sonda desciende dentro de un tubo de acceso insertado verticalmente dentro del
suelo. Este tubo de acceso es generalmente de aluminio, ya que es casi transparente al flujo
de neutrones, además sirve para estandarizar las condiciones de medida.
Aunque las curvas de calibración "universales" suministradas por las casas fabricantes de sondas de
neutrones pueden ser directamente aplicables, en ocasiones lo ideal es calibrar en cada tipo de suelo
y grupo de circunstancias en la cual será usada. La curva de calibración generalmente es una recta,
por lo tanto de la forma y = a + bx, donde x es el valor de conteo de neutrones lentos, y es la
humedad volumétrica del suelo, b es la pendiente de la recta y a es la intersección de la línea que
relaciona y como una función de x.
Las respuestas de la planta al riego están mejor correlacionadas con el potencial hídrico en el
suelo (o la succión) que con el contenido de agua. Se ha demostrado que el potencial de agua en
la planta depende del potencial de agua en el suelo y de los grados de evaporación. En
consecuencia, bajo condiciones de evaporación constante, la transpiración potencial puede
mantenerse durante un período de secado, si el potencial de agua en la planta disminuye en el
mismo grado que en el suelo. Sin embargo, cuando se alcanza el estado en el que el potencial de
la planta cae hasta un punto donde la pérdida de turgencia cause el cierre de estomas, la
407
transpiración se reduce marcadamente. Entonces, los potenciales de agua en el suelo y en la
planta tienden a converger.
En consecuencia, la mejor medida de disponibilidad de agua para las plantas es el potencial hídrico
del suelo. El principal componente de este es el mátrico, aunque en suelos salinos el potencial
osmótico tiene también importancia.
Los tensiómetros son ampliamente usados para medir la tensión del agua en el campo y laboratorio.
Un tensiómetro consiste de una cápsula porosa de cerámica, conectada a través de un tubo lleno de
agua a un vacuómetro o a un manómetro de mercurio. Los tensiómetros de mercurio son más
sensibles y precisos que los de vacío (Figura 13.14).
El agua se mueve hacia dentro y hacia afuera de la cápsula porosa debido a que esta en contacto (por
medio de los poros) con el agua del suelo y por lo tanto en equilibrio hidráulico. Cuando el suelo se
seca, succiona agua de la copa porosa (gradiente hidráulico). En consecuencia, dentro del sistema se
crea una tensión que aumenta gradualmente conforme el suelo se va secando. Cuando el suelo es
humedecido por el riego o la lluvia, se invierte el sentido de la succión y el agua fluye de nuevo al
interior de la copa, al mismo tiempo disminuye la lectura del tensiómetro.
408
La mayor crítica a los tensiómetros es que éstos
funcionan en un ámbito de tensión de humedad
Valor de entrada
de aire
del suelo menor a 0.85 bares. Esto no es tan serio
como parece, debido a que cerca del 75% o más
del agua disponible en suelos de textura gruesa y
cerca de 25 a 50% en suelos de textura fina está en
Lectura de manómetro (Bares)
Los equipos que miden la resistencia eléctrica permiten determinar el estado del agua en el suelo.
Estas unidades están constituidas por dos electrodos contenidos en un material absorbente (poroso).
Una vez instalados en el suelo los electrodos se obtiene un equilibrio entre su contenido de agua y el
contenido de agua en el suelo. La resistencia a la transmisión de corriente eléctrica a través de sus
electrodos varía con su potencial hídrico y este parámetro se registrar en un medidor.
409
Todos los bloques porosos (electrodos) ubicados en el suelo tienden a equilibrarse con la succión
(mátrica) de humedad del suelo, más que con la humedad del suelo per se. Por lo tanto, es preferible
su calibración contra succión (tensión) antes que la calibración contra humedad del suelo,
particularmente cuando el suelo usado para la calibración es una muestra disturbada de estructura
diferente del suelo in situ.
Histéresis
El efecto de histéresis se atribuye a varias causas: desuniformidad geométrica de los poros, efecto
del ángulo de contacto del agua sobre las paredes sólidas de los poros, aire atrapado, etc. Debido a la
complejidad del fenómeno de histéresis, éste es frecuentemente ignorado y la curva característica de
relación potencial-humedad comúnmente reportada es la de desorción (secado).
Para que el agua de riego sea bien aprovechada por las plantas se debe satisfacer las siguientes
inquietudes: cuanta agua utilizar, cuando se debe hacer el riego y como de debe aplicar el agua.
Las dos primeras etapas se satisfacen con los cálculos preliminares de aplicación de agua, uso
consuntivo, frecuencia o intervalo de riego, láminas de agua, etc. La etapa final de riego se refiere
al método y las técnicas a emplearse para una buena conservación de los recursos utilizados.
El agua disponible (AD) del suelo puede calcularse fácilmente si se conocen los contenidos de
humedad correspondientes a la capacidad de campo (Cc) y punto de marchitez (Pm), las
propiedades físicas del suelo y la profundidad que considerada para el riego que generalmente
corresponde a la profundidad efectiva del sistema radicular.
411
La disponibilidad total de agua es una característica del suelo y corresponde a la cantidad de agua
que el suelo puede almacenar por un determinado tiempo. Se puede expresar en lámina de agua
por profundidad del suelo, generalmente mm de agua por m de profundidad del suelo o en
volumen de agua por unidad de área (m3 /ha).
Cc-Pm
AD = ----------- Da p (17)
100
Donde
En cultivos bajo riego, nunca se debe permitir que el contenido de humedad del suelo alcance el
punto de marchitez. En otras palabras, se debe reponer el agua cuando se agote una fracción de la
capacidad total del agua del suelo.
El factor de disponibilidad (f) varía entre 0,2 y 0,8. Los valores menores son usados para cultivos
más sensibles al déficit de agua y los mayores para los cultivos más resistentes. De manera
general, se puede dividir los cultivos irrigados en cuatro grandes grupos, como se indica en la
Tabla 13.2.
Tabla 13.2. Factor de disponibilidad del agua del suelo (f) (FAO, 1976).
Cultivos Valor f
Ornamentales 0.2-0.4
Hortalizas y legumbres 0.2-0.6
Frutas y forrajes 0.3-0.7
Cereales 0.4-0.8
El valor de f a ser usado, dentro de cada grupo de cultivos, dependerá de la mayor o menor
sensibilidad del cultivo al déficit de agua en el suelo y a la demanda atmosférica de la región.
Para un mismo cultivo, cuanto mayor sea la demanda atmosférica menor será el valor de f. Es
muy común el uso de f = 0.3 para ornamentales. El cálculo de CRA del suelo se logra con la
siguiente ecuación:
CRA = AD f (18)
412
El agua disponible total, generalmente aumenta a medida que la textura del suelo se hace más
fina. En la Tabla 3 se presentan los límites comúnmente utilizados en las clases texturales
básicas.
Tabla 13.3. Límites de agua disponible total de acuerdo a la textura del suelo.
Textura AD (mm/m)
Arenosa 40-80
Franca 80-160
Arcillosa 120-140
La lámina de riego se define como la cantidad de agua que se debe aplicar al suelo, dependiendo
de la profundidad radicular o de la profundidad a la cual se desea llegar con el riego. Existen dos
tipos de cálculos de la lámina de riego denominados lámina neta y lámina bruta, que consideran
la eficiencia de aplicación de agua.
La lámina neta de riego es la cantidad de agua que se aplica al suelo y que en condiciones ideales
es utilizada completamente por el cultivo. Existen dos procedimientos para calcular la lámina
neta de riego: 1) el procedimiento edafológico y 2) el procedimiento analítico que se basa en la
evapotranspiración real. Para efectos de cálculo y por simplicidad se recomienda utilizar el
primer procedimiento.
1) Procedimiento edafológico
(Cc - PMP) P
L = --------------------- (19)
100
Donde:
La ecuación 19, que sirve para determinar lámina neta de riego, se usa solamente para calcular el
primer riego a aplicarse en el suelo cultivado. Del segundo riego en adelante, hasta obtener la
producción, se usa el criterio de riego de reposición a una humedad actual, en lugar del PMP.
(CC - HA) P
L = ---------------------- (20)
100
Donde:
Donde
f = El criterio de riego
414
A continuación se presenta un ejemplo del cálculo de la lámina neta de agua.
Datos:
1.Cultivo : Rosas
2.Criterio de riego (f) : 20%
3.Profundidad total de raíces y del suelo : 1.20 m
4.Profundidad del segundo riego : 0.15 m
5.Datos del perfil de suelo (Hv)
Profundidad Cc PMP
(cm) (%) (%)
0 – 20 30 18
20 – 50 28 19
50 – 100 27 19
Desarrollo:
Primer riego:
(Cc - PMP) P
L = ------------------------
100
415
Segundo riego
(Cc – HA) P
L = ------------------------
100
Este exceso de agua generalmente se pierde por percolación profunda (en algunos casos se agrega
voluntariamente más agua para que se produzca lavado de las sales) y por escurrimiento
superficial. Se lo considera para efectos de cálculo en la eficiencia de aplicación.
LN
LB = --------- (22)
Ea
Donde:
La eficiencia de aplicación esta dada por el método de riego empleado, el grado de tecnificación
del mismo, el cuidado en el manejo del agua dentro de la sistematización del terreno y del suelo.
Para efecto de cálculo se recomienda usar las eficiencias de riego presentadas en la Tabla 13.4.
416
Tabla 13,4. Eficiencias de aplicación en base al método de riego, considerando textura y
nivelación constantes:
Eficiencia de
Método de riego aplicación (%)
Surcos 60-70
Aspersión 80-90
Goteo 90-95
Pozas 80-90
Melgas 70-80
Primer riego
LB = 75 mm/0,90 = 83 mm
Segundo riego
LB = 3.6 mm / 0,9 = 4 mm
Qt=AL (24)
Donde:
Q = Caudal (l/seg)
L = Lámina de agua ( mm)
A = Area de riego ( en m2)
t = Tiempo de riego (segundo, minuto, hora)
t = 32,4 minutos
En el punto anterior se calculó la lámina de riego que aplicada al suelo está a disposición del
sistema radicular. Las plantas consumen diariamente una cantidad de agua y otra se pierde por
evaporación de los suelos adyacentes a las plantas. La suma de estas porciones de agua representa
la evapotranspiración.
Evapotranspiración potencial P ET
A saturado
La evapotranspiración potencial (ETp) es
aquella que se produce de una vegetación de
poca altura en activo crecimiento, Drenaje A CC
preferentemente pastos, que cubre Agua
fácilmente disponible
integramente el suelo y sin restricción de A crítico
humedad disponible en el suelo. Este
parámetro se usa como un índice para
determinar la evapotranspiración real de los
diferentes cultivos. La ETp puede medirse
por procedimientos directos, utilizando
lisímetros y mediante la ecuación del
balance hídrico, e indirectamente utilizando Figura13. 19. Diagrama del lisímetro MC.
el tanque de evaporación MC (Figura
13.19). En este artículo se discute el procedimiento de estimación de la ETp utilizando el
evaporímetro (lisímetro) MC, porque se considera que este procedimiento más recomendado para
nuestro país. En este caso se asume que la ETp es igual a la evaporación relativa ( ETR) medida
en el evaporímetro MC. (Calvache, 1993).
Evapotranspiración real
La evapotranspiración real (ETr) es la que se produce en forma real día a día, de acuerdo al
crecimiento de la planta, las características edáficas y la disponibilidad de agua. En condiciones
418
de un suelo normal, con un buen suministro de agua, el factor decisivo en la ETr es el
crecimiento del cultivo. La ETr se determina usando la siguiente ecuación:
Ejemplo de cálculo de la evaporación real para el cultivo de fréjol entre los meses de julio a
noviembre en la zona de Tumbaco.
Datos
ETr = ETp Kc
ETr = 90 0,4 = 36 mm.
La lámina neta de riego se obtiene restando la lluvia de la Etr
FRECUENCIA DE RIEGO
Para determinar la frecuencia de riego existen dos procedimientos : Uno empírico que se basa en
una relación matemática y otro analítico que se basa en la realidad del campo y es eminentemente
práctico.
Método empírico
FR = L/ ETr (26)
Donde:
FR = Frecuencia de riego
L = Lámina de riego aplicada al suelo (lámina neta)
ETr = Evapotranspiración real ó uso consuntivo promedio diario para ese período
Ejemplo de cálculo para determinar la frecuencia requerida de riego para el cultivo de babaco con
un consumo diario, en la etapa de floración, de 4 mm por día.
Datos
FR = 40 / 4 = 10 días
Intervalo de riego cada 10 días
Método práctico
Este método se basa en la realidad de campo. El método anterior no puede considerar el aumento
de espesor de lámina de agua ocasionada por efectos de precipitación natural por ejemplo. El
método práctico en cambio considera todos los aumentos ocasionados por diferentes
circunstancias, ya que consiste en determinar diariamente el contenido de humedad en ese suelo
en diferentes sitios en el campo, ya sea con tensiómetros, bloques de resistencia o por el método
gravimétrico.
Para esto, se instalan los instrumentos señalados y se registra diariamente las lecturas de
humedad o de tensión . Cuando se llega a cierto valor predeterminado de la humedad o tensión
crítica, nuevamente se aplica riego (Figura 20. Ese valor predeterminado es el índice que indica
el cuando y cuanto regar para un buen aprovechamiento de agua por la planta. Este valor que no
altera ningún proceso fisiológico y que no afecta la producción hay que determinarlo con
anticipación y se denomina el factor f explicado anteriormente. El intervalo de tiempo entre dos
riegos consecutivos indica la frecuencia de riego (FR)
Predicción
0.6 Criterio
de riego
. .
0.5
. .
0.4
. . .
0.3
0.2
Lectura
de terreno . .
0.1
. . .
5 10 15 20 25 30 5 10 15 20 25 30 5 10
420
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