La Comunicacion Funcional
La Comunicacion Funcional
La Comunicacion Funcional
El ser humano es un ser social, necesita y busca establecer contactos con otros
seres humanos, tanto porque la sobrevivencia solo es mucho más difícil, como por el placer propio
de la convivencia social. El vehículo a través del cual se materializa esta búsqueda de contactos
entre los seres humanos es la comunicación. La comunicación es entonces lo que nos permite
romper el aislamiento en que nacemos.
1.1.1 La imposibilidad de no comunicarse: Este supuesto deriva de la idea que estando en una
situación interpersonal, es decir con otra persona o en referencia a otra persona, toda la conducta
que tengamos es comunicativa. Moverse o quedarse quieto, hablar o permanecer callado, sonreír o
mostrarse inmutable, presentarse o no a una cita, retirarse o quedarse en determinada situación, etc.
constituyen comportamiento y tienen un efecto en la otra persona, por lo tanto, son comunicación.
Es necesario recordar aquí que no sólo lo que se hace, sino lo que se dice, los gestos,
las posturas,, el tono de voz también son comportamiento, y lo que no se dice, no se gesticula o no
se hace igualmente son comportamiento y en todos los casos tienen un valor comunicativo porque
igualmente influye o afecta a los otros.
En una situación interpersonal todo comportamiento influye sobre los demás, les
comunica algún mensaje y estos no pueden dejar de responder a tales mensajes comportándose y
comunicando a su vez. De esta manera estamos comprobando que en una situación interpersonal
es imposible no comunicarse.
1.1.2 En toda comunicación siempre hay dos mensajes; uno con respecto al contenido, que
generalmente es verbal y el otro respecto a la relación que generalmente es no verbal: La
comunicación siempre opera en diferentes niveles que se refieren a aspectos diferentes de ella. Por
ejemplos tomemos el mensaje “las llaves están sobre la mesa”; el primer nivel que se puede
distinguir se relaciona con el contenido que en este caso se refiere a la información de donde se
encuentran las llaves.
El segundo nivel corresponde a cómo es dicho ese mensaje que nos estaría informando
como se está entendiendo o definiendo la relación. Por ejemplo supongamos que la persona que
dice “las llaves están sobre la mesa”, lo dice de pie, indicando la mesa, con el cuerpo tenso, con el
ceño fruncido, con una expresión de enojo y gritando, además de informar donde están las llaves
está informando algo a la otra persona sobre la relación entre ellas, que podría ser interpretado
como “nuestra relación es hostil” o “estoy enojado contigo”. Tomemos ahora el siguiente caso la
misma persona en otro momento dice “las llaves están sobre la mesa”, pero al decirlo está tendida
relajadamente, con una expresión de calma, con una sonrisa en los labios y habla suavemente.
Claramente, aún cuando el mensaje a nivel de contenido es el mismo en los dos casos, la definición
de la relación es totalmente diferente.
1.1.3 Los patrones de comunicación individual son aprendidos: Las maneras concretas que tenemos
de comunicarnos con otras personas se van aprendiendo a lo largo de la vida, a través de procesos
de imitación y modelaje. Generalmente los padres, por su valor emocional-afectivo, su ubicación
dentro de la estructura de poder en la familia y lo temprano que influyen en el desarrollo individual
son los modelos más importantes de comunicación.
1.1.4 Existen estilos funcionales y disfuncionales de comunicación: Los seres humanos poseemos
estilos variados de comunicación que nos llevan a diferentes formas y grados de eficiencia. El estilo
funcional – o que hemos llamado comunicación funcional- es aquel que facilita el logro de los
objetivos individuales e interpersonales con el menor desgaste posible, llevando al ser humano
finalmente a un crecimiento personal. En cambio la comunicación disfuncional no permite o dificulta
enfrentar con éxito las situaciones de la vida diaria.
EMISOR RECEPTOR
Procesamiento mensaje no verbal Procesamiento
Interior Interior
Retroalimentación
CONTEXTO
Una estructura de mensaje de tipo funcional entrega muchos beneficios, entre los
cuales se destacan:
Facilita el logro de objetivos pues se transmiten las reales necesidades y se
orientan adecuadamente al otro.
Disminuyen los malos entendidos
Mejoran las relaciones interpersonales, pues aumenta la confianza
La comunicación es más segura y eficiente.
Escuchar a otro es aparentemente fácil si creemos que solo depende de nuestra voluntad,
pero nuestra disposición a escuchar se ve afectada por nuestras percepciones, expectativas,
sentimientos, emociones, historia de aprendizajes y también se puede educar y mejorar.
Para convertirse en un receptor funcional, es decir que permitan que se logren los objetivos
de la comunicación y se produzca el intercambio esperado hay que desarrollar 3 conceptos
básicos: disposición a escuchar, escuchar los sentimientos detrás de los hechos y
retroalimentación.