Contrato Mercantil

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 10

Tecnológico Nacional de México

Instituto Tecnológico de Tlaxiaco

Carrera:
Licenciatura en Administración

Materia:
Derecho Empresarial

Organizadores del Conocimiento

Tema: Elementos de los contratos mercantiles

Catedrático:
Juana Ruth Martínez Avendaño

Presentan los integrantes del equipo:


García Martínez Diana Isabel
López López Alberta Liliana
López Martínez Carlos Daniel
Ortiz Juárez Héctor Roberto

Semestre:
3

Grupo:
AA

Tlaxiaco, Oaxaca. A diciembre del 2019


Contratos mercantiles: de emisión, coinversión, franquicia, joint venture, de
maquila y de transferencia tecnológica

EL CONTRATO DE UNDERWRITING (EMISION) La realidad económica de


nuestro tiempo nos muestra que las empresas sólo pueden mantener un grado
constante de expansión y desarrollo tecnológico en la medida que cuenten con un
permanente flujo de recursos financieros.
La obtención de los recursos financieros que requiere la empresa para el ejercicio
de sus actividades podrá provenir del mercado de dinero o del mercado de capitales,
concretándose tal situación a través de la asistencia crediticia o de aportes de
capital. En el caso que las empresas decidieran por ésta última opción, es decir, por
obtener recursos del mercado de capitales, la figura contractual del Underwriting
emerge como el mecanismo más adecuado para la consecución de tal fin. En efecto,
la técnica del Underwriting ha demostrado ser un mecanismo idóneo para canalizar
la asistencia financiera requerida por las empresas, de ahí que se sostenga que su
recepción y realización encamina el proceso de evolución de los mercados de
capitales del mundo.
En nuestra realidad, urgentes de conocer, estudiar y aplicar nuevos y sanos
mecanismos para el desarrollo económico, la técnica representa una forma real de
canalizar eficientemente los recursos financieros provenientes del normal proceso
de ahorro-inversión que conlleva el mejoramiento del nivel de vida de los países. La
contribución económica de esta figura radica en el gran aporte a la mencionada
evolución del mercado de capitales nacionales, a un cambio potencial de mentalidad
en los inversionistas, a nuevas formas o posibilidades para que empresas obtengan
recursos necesarios para sus proyectos, a más instrumentos financieros en el
mercado que permiten a los agentes económicos mejorar su capacidad de decisión
a la hora de invertir sus ahorros.
IMPORTANCIA
El underwriting de un uso no frecuente en nuestro país, aunque en estos últimos
años comienza a ser notorio su empleo y esto ha ocurrido en las naciones en “vías
de desarrollo“, adquiere relevancia por cuanto se propone la canalización de
recursos hacia las actividades productivas; propósito éste que sólo podrá intentarse
ante la existencia necesaria de un Mercado de Capitales que tenga un nivel de
desarrollo que sea satisfactorio.

NATURALEZA JURÍDICA
El contrato de emisión y colocación de Títulos-Valores es un contrato sui géneris,
que carece de legislación específica propia. Estamos en presencia de un contrato
novedoso y complejo, pues no solo abarca la colaboración de títulos valores que se
contempla también de diferentes servicios de asesoramiento (particularmente en la
etapa inicial, pero también durante su funcionamiento, pues pueden presentarse en
la práctica hechos que no fueron inicialmente considerados o debidamente
evaluados).
También debemos poner énfasis en que se trata de una novedosa palanca de
funcionamiento que, bien estructurada, puede tener una amplia dentro del área
fundamentalmente empresarial, por su ya mencionada función de financiamiento
oportuno. También se ha dicho que es un contrato mercantil, respecto de lo cual
debemos señalar que, si bien no se encuentra tipificado en el Código de Comercio
ni en ninguna de nuestras leyes y tiene características propias, nadie cuestiona su
carácter mercantil. Por otro lado, no es un contrato de comisión, pese a que el
underwriter actúa como comisionista y el emisor como comitente.
ELEMENTOS PERSONALES DEL CONTRATO LA EMISORA.
La entidad que encarga la emisión es obviamente aquella que requiere fondos que
no puede o no quiere obtener a base de créditos bancarios o financieros, ni tampoco
encuentra eco en sus accionistas para un aumento de capital. Desde luego que por
tratarse de una compleja operación financiera y ordinariamente de grandes
números, se necesita la intervención del órgano correspondiente para que se
apruebe la emisión, siendo este tema relacionado con la existencia de poderes
suficientes para actos de enajenación.
EL UNDERWRITER
El underwriter, también denominado “la colocadora“, es la
empresa especializada en esta clase de operaciones que se hace cargo del servicio
de colocación de las acciones o bonos emitidos. Lo usual es que sea una persona
jurídica con una solvencia económica y pleno conocimiento del mercado. Como en
el caso anterior y por tratarse de un contrato oneroso, se requiere poderes
suficientes para celebrarlo.
TÍTULOS OBJETO DEL CONTRATO
La doctrina considera que el underwriting es una operación típica del mercado de
capitales y no del mercado del dinero, diferenciándose ambos tipos de mercado
financieros en la amplitud del plazo de los títulos que circulan en él. En el mercado
de capitales se negocia con instrumentos de mayor madurez y riesgo que los

cortos plazos (no mayor de un año), considerados como sustitutos cercanos del
dinero.
EMISIÓN Y COLOCACIÓN DE LOS TÍTULOS.
Esta última etapa del proceso se inicia con la emisión de los títulos y culmina con la
colocación de los mismos. La colocación puede realizarse en forma pública o
privada, aunque lo usual es lo primero, por medio de una campaña de promoción
de los títulos, utilizándose como medio de difusión un documento que en el mercado
norteamericano se llama “Offering Circular” o prospecto, que se describe las
actividades de la empresa emisora, el giro de su negocio, les características de los
títulos, los estados financieros de la empresa, las perspectivas de desarrollo futuro
y otros datos de interés para los inversionista. Este documento generalmente es
preparado por el underwriter.

La preparación de este documento acarrea responsabilidad para el underwriter por


el contenido de la información, lo cual constituye una importante garantía para el
inversionista.
BENEFICIOS DEL CONTRATO.
El underwriting ofrece el beneficio de otorgar a la sociedad emisora la facultad de
obtener el capital sin esperar la colocación paulatina de los valores. Por otro lado
respecto de la banca de servicios financieros por cuanto se halla en óptimas
condiciones para prestar el servicio derivado del contrato de underwriting a las
grandes empresas que revisten la forma de sociedades por acciones ya que por la
relación que tiene con sus clientes conoce a sus compradores y proveedores y sabe
también que otras empresas o personas tienen interés en participar en el capital de
aquella.
CONTRATOS DE FRANQUICIAS.
El perfil del franquiciado
Si bien el sistema de franquicia ofrece importantes ventajas respecto a abrir un
negocio por cuenta propia, también exige una serie de requisitos y obligaciones que
no todo emprendedor es capaz de asumir. Y no hablamos sólo de requisitos
económicos. El franquiciatario ideal debe poseer una serie de cualidades y aptitudes
concretas que, en gran medida, marcarán el fracaso o el éxito de su actividad. A
todas estas cualidades, algunas de las cuales son comunes a las de establecer un
negocio de forma individual, deben sumarse además las que plantee cada franquicia
concreta y en cada caso particular.

Fidelidad
En primer lugar, y en términos generales, la persona que se plantea la posibilidad
de integrarse en una red de franquicia debe ser consciente de que se trata de un
sistema que, a fin de garantizar la absoluta fidelidad del negocio reproducido en el
franquiciatario, coarta en gran medida la capacidad de éste de tomar decisiones
sobre su propio negocio. Por ello, cualquier innovación, modificación o peculiaridad
que uno piense aplicar está desechada en este sistema de asociacionismo. De otra
forma se quebraría, más pronto que tarde, la identidad de la red.
Ante esta realidad, la primera pregunta que un emprendedor debe hacerse es si su
personalidad es adecuada para admitir tal limitación de la propia autonomía. Sobre
la selección del franquiciatario más adecuado, puede servir de ejemplo el caso del
mercado norteamericano, con gran experiencia en materia de franquicia, y donde
algunas marcas buscan su franquiciatario ideal en la figura del "militar retirado". Esto
que puede resultar un poco extraño es perfectamente comprensible, si se observa
como efectivamente en él existen algunas de las figuras que mejor adornan el ideal
de franquiciatario: se valora no sólo su capacidad de inversión en el propio negocio,
sino, sobre todo, su espíritu disciplinario, su capacidad de trabajo y el hecho de que
se trata de una persona acostumbrada a trabajar por objetivos. Pese a todo, debe
tenerse en cuenta, que esto no implica en ningún modo que el franquiciatario ideal
sea una persona carente de iniciativa y personalidad, ya que éstas son también
características muy apreciadas en todo emprendedor, sea cual sea el modelo de
negocio que quiera establecer.
Carácter emprendedor
En este sistema debe diferenciarse entre el franquiciatario que busca abrir un
negocio como fórmula de autoempleo, de aquel que busca esta actividad como una
forma de inversión. En el primer caso, el franquiciatario debe tener un carácter
emprendedor y suficiente capacidad como para desarrollar una actividad
empresarial en la que trabajará directamente y en la que deberá afrontar y superar
todas las dificultades propias de la misma. Por ello, el franquiciatario ideal es aquella
persona constante, que sepa afrontar y resolver los problemas inherentes a toda
actividad económica y con capacidad para dirigir a sus empleados y tomar
decisiones.
En el caso del inversor, lo ideal es que posea suficiente capacidad de gestión como
para conseguir coordinar y dirigir a sus trabajadores, sin necesidad de llevar
directamente el día a día de su negocio.
Capacidad económica
Como en cualquier negocio, el franquiciatario deberá disponer además de la
suficiente capacidad económica para desarrollar el negocio concreto. La inversión,
que varía sustancialmente de unas franquicias a otras, no deberá contemplar sólo
el capital necesario como para poner en marcha el negocio, sino también el
suficiente para llevarlo hasta el punto de equilibrio, en el que empiece a dar
beneficios, ya que lo contrario puede llevar al fracaso y el consecuente cierre de la
actividad.
Perseverancia
Dirigir cualquier negocio como trabajador-propietario requiere tiempo, energía e
iniciativa, sobre todo en los primeros meses de iniciar cualquier actividad. Es posible
que para obtener los primeros beneficios se necesite, en ocasiones, mucho más
tiempo de lo esperado, por lo que la perseverancia y la motivación son aspectos
que el franquiciatario nunca debe perder.
Capacidad de gestión
También es necesario tener la capacidad de gestión adecuada a la actividad
seleccionada. Esta será muy diferente y, normalmente, estará en relación con el
nivel de facturación y la complejidad de la franquicia, pero, en todo caso, será de
gran ayuda el conocimiento y dominio de las herramientas de gestión necesarias
para el desarrollo del negocio.
Dotes de comunicación
Cualquier negocio, en mayor o menor medida, exigirá contacto con clientes,
proveedores y empleados, por lo que las dotes de comunicación del futuro
franquiciatario, el gusto por las relaciones personales y la capacidad de "caer bien"
y de establecer una relación de mutua confianza es, en la mayoría de los casos, un
gran aliado para el éxito.
Ética
El franquiciatario ideal siempre debe tener presente que él es uno más de una
amplia red de asociados. Por ello, cualquier acción o comportamiento negativo en
la gestión de su negocio puede afectar directamente al resto de franquiciatarios y a
la propia cadena.

Además, el propio sistema de franquicia exige que tanto franquiciante como


franquiciatario trabajen con el objetivo de un beneficio mutuo y no sólo de una de
las partes, en detrimento de la otra.
El valor de la marca
En franquicia, el valor de la marca es fundamental y uno de los aspectos más
valorados por los futuros franquiciatarios. Por ello, la denominación de la marca es
uno de los principales elementos con los que cuenta el sistema de franquicias y en
el que se apoya la mayor parte de su éxito. Sin duda, la marca transfiere al cliente
una confianza y una seguridad en el producto adquirido que se traduce en su
principal valor añadido.
Penetrar en el mercado a través de una marca reconocida beneficia al
franquiciatario en dos aspectos principales: por un lado, le evita la fuerte inversión
económica, técnica y humana que supone introducir una marca nueva en el
mercado; y por otro, le permite invertir con mayores garantías de éxito ya que lo
hace sobre una marca ya establecida y que funciona con éxito.
La imagen de marca supone que el cliente encuentra desarrollados en idéntico valor
los atributos de calidad que busca tanto en su establecimiento como en otro, sin
poder llegar a diferenciarlos entre sí y, por tanto, de su valor dependerá la mayor
parte del éxito de toda la red de franquicias.
Pero el valor de la marca también tiene un precio. Éste dependerá de la importancia
que esa denominación tenga en el marcado y de las garantías que eso implique
para el franquiciatario.
Hay algunas marcas que ya sólo con el poder de su marca aseguran unas ventas
importantes, pero hay que recordar que la imagen de marca no siempre lo es todo
y que para operar en franquicia sobre todo se necesita un buen concepto.
Por otro lado, existe un gran desconocimiento respecto de lo que es realmente la
marca, o mejor dicho, respecto de cómo se construye. Construir una marca es algo
realmente costoso, en inversión y en tiempo y supone una visión a largo plazo,
nunca a corto.
CONTRATOS DE MAQUILAS
Habrá contrato de maquila o de depósito de maquila cuando el productor
agropecuario se obligue a suministrar al procesador o industrial materia prima con
el derecho de participar, en las proporciones que convengan, sobre el o los
productos finales resultantes, los que deberán ser de idénticas calidades a los que
el industrial o procesador retengan para sí.

El productor agropecuario mantiene en todo el proceso de transformación la


propiedad sobre la materia prima y luego sobre la porción de producto final que le
corresponde.
El procesador o industrial asume la condición de depositario de los productos finales
de propiedad del productor agropecuario debiéndolos identificar adecuadamente;
estos productos estarán a disposición plena de sus titulares.
EN CUESTION DE LEYES:
MAQUILA
DECRETO PARA EL FOMENTO Y OPERACIÓN DE LA INDUSTRIA
MAQUILADORA DE EXPORTACION
CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES
ARTÍCULO 1o.-El presente Decreto tiene por objeto promover el establecimiento y
regular la operación de empresas que se dediquen total o parcialmente a realizar
actividades de maquila de exportación.
ARTÍCULO 2o.-Las empresas maquiladoras de exportación deberán atender a las
siguientes prioridades nacionales:
I.- Crear fuentes de empleo;
II.- Fortalecer la balanza comercial del país a través de una mayor aportación neta
de divisas;
III.- Contribuir a una mayor integración interindustrial y coadyuvar a elevar la
competitividad internacional de la industria nacional, y
IV.- Elevar la capacitación de los trabajadores e impulsar el desarrollo y la
transferencia de tecnología en el país.
ARTÍCULO 3o.-Para los efectos del presente Decreto se entiende por:
I.- Ley, a la Ley Aduanera;
II.- Reglamento, al Reglamento de la Ley Aduanera;
III. Secretaría, a la Secretaría de Economía;
IV.- (Derogada)
V.- Operación de Maquila, al proceso industrial o de servicio destinado a la
transformación, elaboración o reparación de mercancías de procedencia extranjera
importadas temporalmente para su exportación;
VI.- Maquiladora industrial, a la persona moral que en los términos del presente
ordenamiento le sea aprobado un programa de operación de maquila, para la
elaboración o transformación de mercancías destinadas a la exportación;
VII.- Maquiladora controladora de empresas, a la persona moral que en los términos
del presente ordenamiento le sea aprobado un programa de operación de maquila
para que integre las operaciones de maquila de dos o más sociedades controladas
en los términos que establezca la Secretaría de Hacienda y Crédito Público
mediante reglas de carácter general y que hayan obtenido autorización de la citada
dependencia como empresas certificadas;
VIII.- Maquiladora de servicios, a la persona moral que en los términos del presente
ordenamiento le sea aprobado un programa de operación de maquila, para realizar
servicios a mercancías destinadas a la exportación;
IX.- Maquiladora que desarrolle programas de albergue, a la persona moral, que en
los términos del presente ordenamiento le sea aprobado un programa de operación
de maquila, y a la cual las empresas extranjeras le facilitan la tecnología y el material
productivo, sin que estas últimas operen directamente dicho programa;
X.- Operación de submaquila, a los procesos industriales complementarios
relacionados directamente con la operación de maquila objeto del programa,
realizados por persona distinta al titular del mismo;
XI.- Programa, a la declaración de actividades de operación de maquila de acuerdo
al formato que al efecto publique la Secretaría;
XII.- (Derogada)
XIII. Programas de Promoción Sectorial, a los Programas a que se refiere el
Decreto por el que se Establecen Diversos Programas de Promoción Sectorial.
CAPITULO ll
DE LOS PROGRAMAS DE MAQUILA DE EXPORTACION
ARTÍCULO 4o.- La Secretaría podrá aprobar un programa de operación de maquila
a las personas morales residentes en territorio nacional en términos del artículo 9o.,
fracción II, del Código Fiscal de la Federación, que cumplan con los
requisitos previstos en este Decreto, para realizar actividades de operación de
maquila, bajo las modalidades siguientes:
I. Maquiladora industrial;
II. Maquiladora controladora de empresas;
III. Maquiladora de servicios, y
IV. Maquiladora que desarrolle programas de albergue.
La Secretaría podrá aprobar a la maquiladora industrial, a la controladora de
empresas y a la que desarrolle programas de albergue, de manera simultánea, un
programa de operación de maquila y el Programa de Promoción Sectorial que
corresponda, de acuerdo con el tipo de productos que fabrica.
La Secretaría podrá aprobar el programa de maquiladora de servicios únicamente
para el desarrollo de las actividades que la misma determine mediante Acuerdo
publicado en el Diario Oficial de la Federación, previa opinión de la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público.
Las empresas que cuenten con un programa de operación de maquila y que
cumplan con los requisitos para ser autorizadas por la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público como empresas certificadas, podrán obtener los beneficios
otorgados en la Ley y en las demás disposiciones aplicables.
ARTÍCULO 12.- Las personas morales a las que se apruebe un programa de
operación de maquila estarán obligadas a observar lo siguiente:
I. Cumplir con los términos establecidos en el programa de operación de maquila
que les fue aprobado;
II. Importar de manera temporal al amparo del programa de operación de maquila
exclusivamente las mercancías aprobadas en el mismo;
III. Destinar los bienes importados, al amparo de su programa de operación de
maquila, a los fines específicos para los que fueron aprobados;
IV. Retornar las mercancías en los plazos que corresponda conforme a lo
establecido en la Ley;
V. Mantener las mercancías que se hubieren importado temporalmente en el o los
domicilios registrados en el programa de operación de maquila, y
VI. Dar aviso mediante escrito libre a la Secretaría, adjuntando la documentación
comprobatoria, de lo siguiente:

a) De los cambios en los datos que haya manifestado en la solicitud para la


aprobación del programa, tales como la denominación o razón social, Registro
Federal de Contribuyentes y domicilio fiscal;
b) Del cambio del o de los domicilios registrados en el programa de operación de
maquila, por los menos con tres días hábiles de anticipación a aquel en que se
efectúe. Este cambio también deberá informarse a la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público, en el término establecido, y
c) De la suspensión de actividades, en un término que no excederá de diez días
naturales contados a partir de la fecha en que suspenda sus operaciones.
VII. a IX. Derogadas.
ARTÍCULO 14.-Todo programa deberá cumplir con los requerimientos en materia
de ecología y de protección del medio ambiente, conforme a las disposiciones
vigentes.
ARTÍCULO 15.- El titular del programa de operación de maquila aprobado deberá
informar anualmente a la Secretaría y a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público,
de las operaciones de comercio exterior realizadas al amparo del mismo, a más
tardar el último día hábil del mes de mayo conforme al formato que mediante Reglas
de Carácter General en Materia de Comercio Exterior dé a conocer la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público.
Cuando la persona moral no presente el informe a que se refiere el párrafo anterior,
dentro del plazo establecido, se suspenderán los efectos de la aprobación de su
programa de operación de maquila, en tanto no subsane esta omisión. En caso de
que para el último día hábil del mes de junio del año que corresponda, la empresa
no haya presentado dicho informe el programa de operación de maquila, será
cancelado definitivamente sin necesidad de declaratoria expresa.

PRIMERO. - El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación


en el Diario Oficial de la Federación.

También podría gustarte