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ISSN (electrónico): 1699-5198 - ISSN (papel): 0212-1611 - CODEN NUHOEQ  S.V.R.

318

Nutrición
Hospitalaria

Grupo de Trabajo SENPE


Consenso sobre la evaluación y el tratamiento nutricional de los trastornos
de la conducta alimentaria: anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, trastorno
por atracón y otros. Resumen ejecutivo
Consensus document about the nutritional evaluation and management of eating disorders:
anorexia nervosa, bulimia nervosa, binge eating disorder, and others. Executive abstract
Carmen Gómez-Candela1, Samara Palma Milla1, Alberto Miján-de-la-Torre2, Pilar Rodríguez Ortega3, Pilar Matía Martín4,
Viviana Loria Kohen5, Rocío Campos del Portillo6, M.ª Nuria Virgili Casas7, Miguel Á. Martínez Olmos8, María Teresa Mories Álvarez9,
María José Castro Alija10 y Ángela Martín-Palmero11
1
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario La Paz. IdiPAZ. Universidad Autónoma de Madrid. Madrid. 2Unidad de Nutrición
Clínica. Servicio de Medicina Interna. Hospital Universitario de Burgos. Burgos. 3Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario de Huelva. Hospital Juan Ramón Jiménez.
Huelva. 4Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid. 5Unidad de Nutrición y Ensayos Clínicos. Instituto Madrileño de Estudios Avanzados en Alimentación
(IMDEA-Alimentación). Madrid. 6Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda. Majadahonda, Madrid. 7Unidad de Nutrición y Dietética.
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario de Bellvitge. L’Hospitalet de Llobregat, Barcelona. 8Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio Endocrinología y
Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela, A Coruña. 9Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Universitario de Salamanca.
Salamanca. 10Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición Clínica. Universidad de Valladolid. Valladolid. 11Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital San Pedro. Logroño

Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) se caracterizan ingesta en relación a los requerimientos nutricionales, lo que deter-
por una alteración persistente de la conducta relacionada con el mina un peso corporal significativamente bajo para la edad, sexo y
hecho de alimentarse que impacta negativamente sobre la salud estado de salud. El segundo criterio es el miedo intenso a ganar peso
y las capacidades psicosociales de aquellos que los padecen. Se o a convertirse en obeso, incluso estando por debajo del peso normal.
consideran enfermedades psiquiátricas con una gran variabilidad La última premisa es la alteración de la percepción del peso o la
en su presentación y gravedad, con gran repercusión nutricional, imagen corporal, exageración de la importancia en la autoevaluación
lo que condiciona diferentes planteamientos terapéuticos, hacién- o negación del peligro que comporta el bajo peso corporal.
dose indispensable un enfoque multidisciplinar. En la BN existen 3 características fundamentales según el
Expertos en nutrición hemos decidido crear un grupo de trabajo DSM-5: episodios recurrentes de atracones, comportamientos
adscrito a la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Ente- compensatorios inapropiados y recurrentes para evitar un aumen-
ral (SENPE), que ha asumido entre sus objetivos el elaborar un to de peso y la autoevaluación influenciada indebidamente por
documento de consenso que genere un protocolo basado en la el peso y la constitución corporal. Los episodios de atracones y
mejor evidencia científica posible y en la experiencia profesional, conductas compensatorias tienen lugar como promedio una vez
con la finalidad de mejorar la práctica asistencial en este campo. por semana (en lugar de dos como se definía en el DSM-IV), man-
tenidos durante un periodo de al menos 3 meses. La definición
de atracón se caracteriza por una ingesta excesiva de alimentos
DIAGNÓSTICO durante un corto periodo de tiempo, de al menos 2 horas, en
cantidad superior a la que la mayoría de las personas ingerirían
La anorexia nerviosa (AN), la bulimia nerviosa (BN) y el trastorno por en un tiempo similar y en las mismas circunstancias, existiendo
atracón (TA) constituyen entidades nosológicas diagnósticas diferen- una sensación de pérdida de control sobre la ingesta de alimen-
ciadas en la última edición del Manual de diagnóstico y estadístico de tos. El TA se caracteriza por episodios recurrentes de atracones
los desórdenes mentales (DSM-5). El DSM-5 define la AN en base a sin comportamientos compensatorios inapropiados asociados. Se
tres criterios, siendo el primero de estos la restricción excesiva de la revisan también otros cuadros clínicos emergentes (1-4).

Este Resumen Ejecutivo forma parte del número extraordinario Consenso sobre la evaluación y el tratamiento nutricional de los trastornos de la conducta alimentaria:
anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, trastorno por atracón y otros que ha sido publicado en Nutr Hosp 2018;35(Nº Extraordinario):1-97.

Gómez-Candela C, Palma Milla S, Miján-de-la-Torre A, Rodríguez Ortega P, Matía Martín P, Loria Kohen V, Campos del Portillo R, Virgili Casas MN, Martínez Olmos MA, Mories
Álvarez MT, Castro Alija MJ, Martín-Palmero A. Consenso sobre la evaluación y el tratamiento nutricional de los trastornos de la conducta alimentaria: anorexia nerviosa, bulimia
nerviosa, trastorno por atracón y otros. Resumen ejecutivo. Nutr Hosp 2018;35:489-494
DOI: http://dx.doi.org/10.20960/nh.1819
©
Copyright 2018 SENPE y ©Arán Ediciones S.L. Este es un artículo Open Access bajo la licencia CC BY-NC-SA (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/).
490 C. Gómez-Candela et al.

EPIDEMIOLOGÍA Y ETIOPATOGENIA enfermedades. Con frecuencia, el paciente no tiene conciencia de


enfermedad y puede ocultar síntomas orientativos de su proceso.
El interés por estas enfermedades ha experimentado un repun- La anamnesis debe dirigirse a indagar en el comportamiento ante
te importante en los últimos años, quizás motivado por la percep- el acto de comer, la posibilidad de restricción alimentaria, su dura-
ción de que se trata de trastornos emergentes y en expansión. Los ción temporal, cantidad y calidad de alimentos ingeridos, así como
TCA son más frecuentes en mujeres y en la adolescencia, y sin en la existencia de cuadros de atracones, conductas purgativas y
el tratamiento adecuado, adquieren un curso clínico de carácter otros mecanismos compensatorios, siendo recomendable el con-
crónico e incapacitante. Actualmente, se estima una prevalencia trastar la información que aporta el paciente con la que ofrezcan
combinada del 13% para todos los TCA. El TA representa el TCA familiares y personas próximas al mismo.
más prevalente en adultos. La AN es la enfermedad psiquiátrica Los hallazgos en la exploración física dependerán del tipo de TCA,
más frecuente en las mujeres jóvenes y la tercera enfermedad pudiendo encontrarse signos de depleción de compartimentos corpo-
crónica tras la obesidad y el asma en las adolescentes. rales, carenciales, de adaptación hemodinámica al ayuno prolongado
Aunque la etiopatogenia de los TCA no se conoce bien a día o de hábitos purgativos. No debe faltar la medición del peso, la talla,
de hoy, se asume de carácter multifactorial, con participación el índice de masa corporal (IMC), su relación respecto al peso ideal y
de factores genéticos, psicológicos, biológicos, sociofamiliares su evolución en el tiempo. En niños y adolescentes es obligado ajustar
y culturales entre los más importantes. Algunos antecedentes los datos antropométricos según curvas con percentiles de acuerdo
comunes a los TCA son la preocupación excesiva por el peso, a su edad, sexo y altura.
la obsesión por un cuerpo delgado, el distrés sociofamiliar, el La valoración de análisis clínicos al inicio no debe ser diferente
antecedente de realización de una dieta y el de abuso sexual en a un protocolo habitual. Usualmente, salvo complicaciones, estará
la infancia (5-8). dentro de la normalidad. Se debe realizar un electrocardiogra-
ma de forma rutinaria. Es conveniente practicar una evaluación
nutricional y de la composición corporal, en función de los recur-
EL EQUIPO TERAPÉUTICO sos disponibles. El gasto energético en reposo se puede calcular
mediante ecuaciones predictivas tipo Harris-Benedict, siendo más
Los TCA muestran una gran variabilidad en su presentación adecuado medirlo a través de calorimetría indirecta (14-18).
y en su gravedad, lo que va a condicionar diferentes consi-
deraciones terapéuticas y la individualización del tratamiento.
Por ello, se hace indispensable un enfoque multidisciplinar y COMPLICACIONES ASOCIADAS
altamente especializado. En el equipo participan: psiquiatras,
psicólogos, médicos de familia, médicos nutriólogos (o endo- Los TCA se asocian a numerosas complicaciones médicas, que
crinólogos), dietistas, enfermeros y terapeutas ocupacionales, se relacionan con la intensidad del trastorno, la duración del mis-
y cada profesional contribuye de forma incuestionable desde mo y el predominio del patrón alimentario restrictivo, compulsivo
su especialidad. y/o purgativo.
La coordinación de las unidades de TCA corre generalmente a En los pacientes que presentan desnutrición, se origina una
cargo del psiquiatra, que suele ser el responsable de establecer atrofia de numerosos órganos vitales y sistemas que viene con-
las líneas generales del tratamiento y coordina al resto del equipo. dicionada por el grado de pérdida de peso y la cronicidad de la
El médico de familia, además de participar en los programas de enfermedad. Pueden presentar fatigabilidad, disminución de la
prevención primaria y de intentar realizar un diagnóstico lo más capacidad funcional, dolor torácico, palpitaciones, hipotensión,
precoz posible, participará, siempre que haya sido entrenado, en ortostatismo y mayor riesgo de insuficiencia cardiaca. Dentro de
el programa de prevención de recaídas. los trastornos hormonales, el que tiene una mayor trascendencia
El paciente ha de estar bajo la supervisión y tratamiento del clínica si se prolonga en el tiempo es el hipogonadismo, con su
médico nutriólogo, encargado de valorar su estado nutricional y efecto deletéreo sobre la densidad mineral ósea. Desde el punto
las posibles complicaciones somáticas asociadas. El dietista es de vista metabólico, pueden aparecer hipoglucemias y niveles ele-
la persona más indicada para llevar a cabo la educación nutricio- vados de colesterol en más del 50% de los pacientes. Es común
nal (EN), aunque el personal de enfermería con un alto nivel de el enlentecimiento del vaciamiento gástrico, el estreñimiento y
entrenamiento y experiencia en esta materia también puede ser la alteración del perfil de enzimas hepáticas. A nivel renal, los
capaz de realizar esta función (9-13). pacientes desnutridos presentan una reducción del filtrado glo-
merular y alteraciones en la capacidad de concentración de la
orina. Desde el punto de vista pulmonar, la debilidad de la muscu-
VALORACIÓN CLÍNICA Y NUTRICIONAL latura respiratoria y diafragmática conlleva una disminución de la
capacidad funcional e incrementa el riesgo de neumotórax espon-
Se debe realizar una historia clínica orientada tanto al diagnós- táneo y neumomediastino. A nivel hematológico, pueden aparecer
tico específico de un TCA como al estado nutricional del paciente diferentes citopenias, siendo las más frecuentes la anemia y la
y la presencia de síntomas que revelen organicidad del proceso leucopenia. Los pacientes pueden manifestar deterioro cognitivo
o comorbilidad, efectuando el diagnóstico diferencial con otras y disfunciones neuropsicológicas que afectan fundamentalmente

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CONSENSO SOBRE LA EVALUACIÓN Y EL TRATAMIENTO NUTRICIONAL DE LOS TRASTORNOS DE LA CONDUCTA 491
ALIMENTARIA: ANOREXIA NERVIOSA, BULIMIA NERVIOSA, TRASTORNO POR ATRACÓN Y OTROS. RESUMEN EJECUTIVO

a la atención, la memoria y las funciones ejecutivas y, en menor debe promover la recuperación de un peso y situación nutricional
medida, al procesamiento visual y a las aptitudes verbales. El adecuados, teniendo especial precaución con la aparición del sín-
déficit de micronutrientes puede condicionar neuropatías. drome de realimentación en pacientes severamente desnutridos.
La obesidad, presente en hasta un 30% de los pacientes con Puede ser necesario el empleo de nutrición artificial (NA), sobre todo
TA, condiciona un mayor riesgo de patologías metabólicas como suplementos nutricionales orales. En pacientes con exceso de peso,
la diabetes mellitus tipo 2, la hipertensión, la dislipemia, la enfer- como puede ocurrir en el TA y BN, se debe fomentar una modificación
medad cardiovascular y otras patologías secundarias (hernia de saludable del estilo de vida. El empleo de fármacos “antiobesidad”
hiato, colelitiasis, esteatosis, insuficiencia respiratoria, apnea del puede ser de utilidad en el TA, aunque su uso es controvertido y deben
sueño, insuficiencia cardiaca, insuficiencia venosa, hipertensión contraindicarse en pacientes con BN por el potencial mal uso o abuso.
endocraneal y patología osteoarticular), y una mayor incidencia La cirugía bariátrica (CB) puede emplearse en pacientes selec-
de algunos tipos de tumores. cionados con TA, siendo la BN una contraindicación. Los criterios
Las conductas compensatorias purgativas pueden condicionar de inclusión son los mismos que para la población obesa candi-
complicaciones locales (caries, gingivitis, enfermedad periodontal, data a CB sin TCA. La pérdida de peso a corto-medio plazo en los
patología temporomandibular, sialoadenosis, reflujo laringo-farín- pacientes sometidos a CB con TA preoperatorio no se diferencia
geo, broncoaspiración, reflujo gastroesofágico, esofagitis, síndro- a la experimentada por pacientes sin TA. Es fundamental llevar a
me de Mallory-Weiss, síndrome de Boerhaave, colon catártico, cabo un adecuado programa de educación nutricional, así como
prolapso rectal, hemorroides y signo de Russell) y sistémicas un soporte psicológico en los pacientes obesos mórbidos con TA,
(trastornos hidroelectrolíticos y del equilibrio ácido-base, mani- tanto antes como después de la cirugía.
festaciones neurológicas, cardiacas o renales) (19-25). El tratamiento farmacológico no es imprescindible, pero puede
ser de utilidad. La mayor evidencia se encuentra en la indicación
de fluoxetina en BN, considerado el mejor fármaco en términos de
HERRAMIENTAS TERAPÉUTICAS GENERALES aceptabilidad, tolerancia y reducción de síntomas (14,26-28).

Los objetivos del tratamiento en los pacientes con TCA deben


ser individualizados, realistas y adaptados al contexto y situación EDUCACIÓN NUTRICIONAL
clínica del paciente:
– Restaurar o normalizar el peso y el estado nutricional. La educación nutricional (EN) debe formar parte del tratamiento
– Reducir o eliminar los atracones y los comportamientos de los TCA y estar orientada a la acción y centrada en la práctica.
purgativos que existan, así como minimizar la restricción Su objetivo principal es facilitar la adopción voluntaria de compor-
alimentaria. tamientos alimentarios que fomenten la salud y el bienestar. Debe
– Proporcionar educación sobre patrones alimentarios salu- plantearse no solo de acuerdo al diagnóstico del trastorno, sino
dables. también debe tener en cuenta el patrón alimentario del paciente
– Promover la realización de un ejercicio físico saludable. y sus conocimientos nutricionales.
– Tratar las complicaciones médicas intercurrentes. En lo que respecta a la AN, la EN persigue mejorar la actitud y com-
– Conseguir un mejor ajuste social y confianza personal. portamiento en relación a la comida; alcanzar una mejora en el patrón
– Tratar las alteraciones conductuales y la comorbilidad psi- alimentario, aclarar mitos y favorecer con todos estos cambios la recu-
quiátrica. peración del estado nutricional. En la BN el primer paso será conseguir
– Prevenir las recaídas. una razonable organización de las comidas, centrándose en marcar
El tratamiento de los pacientes con TCA puede realizarse en tiempos y horarios, evitando en todo caso periodos largos de ayuno.
distintos niveles asistenciales y debe ser siempre multidisciplinar, En una etapa posterior, se trabajará sobre la calidad de los alimentos,
siendo los pilares fundamentales la psicoterapia, el soporte médi- siempre con cambios pequeños y graduales, priorizando la incorpo-
co y el abordaje nutricional. ración de los alimentos más saludables para, en una etapa final, tra-
La terapia psicológica que se recomienda en TA y BN es la bajar sobre el aspecto cuantitativo con el fin de alcanzar el equilibrio
terapia cognitivo-conductual. Los aspectos médicos incluyen el nutricional buscado. En el TA se enfatizará en la adecuada selección
tratamiento de las comorbilidades que acompañan al TCA, de las de alimentos, priorizando aquellos con menor densidad energética y
complicaciones derivadas de la malnutrición (tanto desnutrición que promueven una mayor saciedad, y sobre el control y el tamaño
como obesidad) y de las conductas compensatorias. de las raciones. En el paciente obeso se fomentarán los cambios
El plan nutricional debe contemplar no solo el consejo dietético de conducta a largo plazo, tendentes a favorecer el mantenimiento de
individualizado que garantice un adecuado estado nutricional, sino un peso razonable a partir de la incorporación de elecciones más
que debe buscar educar al paciente, proporcionándole la información saludables de alimentos, en relación con la adquisición de nuevos
necesaria que le permita la modificación a largo plazo de los hábi- hábitos alimentarios y un patrón más saludable de actividad física.
tos alimentarios y el cese de las conductas purgantes y atracones. En muchos casos, la EN debe hacerse extensiva a las familias,
Existen particularidades en este plan nutricional según el TCA y la ya que mejora la eficacia de las intervenciones educativas al faci-
situación clínica en que se encuentre el paciente. Así, en pacientes litar la aplicación práctica y la adhesión de todos los miembros a
con bajo peso, como ocurre en la AN y en ocasiones en la BN, se los nuevos modelos conductuales propuestos (29-33).

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INDICACIONES DE LA NUTRICIÓN ARTIFICIAL so definido en el aporte de kcal diarias en las diferentes guías,
pero sí en el objetivo de aumento ponderal de 0,5 kg/semana
La nutrición artificial (NA) engloba aquellas modalidades de en desnutrición grave. Se deben considerar los problemas deri-
nutrición (oral, enteral y parenteral) cuyo objetivo es cubrir las vados de la obesidad en el TA (sin evitar en este último caso la
necesida­des del organismo cuando no es posible o se hace de restricción calórica y planteando, en casos determinados, incluso
forma insuficiente a través de alimentos de consumo ordinario. la cirugía bariátrica).
La NA disminuye la morbilidad y mortalidad en pacientes malnu- Con un nivel de evidencia aún bajo, la telemedicina ha mostra-
tridos. Se debe indicar de forma escalonada, iniciando con las do algunos resultados prometedores en TCA. Algunas situaciones
herramientas más sencillas como los suplementos nutricionales especiales como la coexistencia de diabetes mellitus tipo 1, el
orales (SNO) y, posteriormente, las más complejas, nutrición ente- embarazo o la lactancia, requieren planteamientos específicos e
ral (NE) y, excepcionalmente, la nutrición parenteral (NP). individualizados (40-50).
Existen escasos estudios sobre la utilización de SNO en TCA. Sin
embargo, en la práctica clínica son una herramienta fundamen-
tal para la recuperación de muchos pacientes con AN, sobre todo SOPORTE NUTRICIONAL
cuando se emplean en periodos cortos de tiempo y siempre bajo EN EL PACIENTE HOSPITALIZADO
supervisión médica.
En pacientes con TCA y bajo peso que se encuentran hospi- No existen criterios basados en la evidencia que establezcan
talizados, los SNO permiten una ganancia de peso más rápida y, qué pacientes con TCA necesitarán hospitalización, por lo que
en algunos casos, acortan el tiempo necesario de tratamiento y tanto los signos y síntomas médicos como los psiquiátricos o la
la estancia hospitalaria. También son necesarios en mujeres con propia evolución de la enfermedad deben ser tenidos en cuenta
TCA embarazadas con desnutrición o en riesgo. En el ámbito como criterios de ingreso. En general, se indicará el ingreso hospi-
ambulatorio, los SNO pueden están indicados tras la retirada de talario ante las complicaciones médicas agudas o la presencia de
la NE para continuar el proceso de recuperación nutricional y situaciones psiquiátricas agudas o el intento de autolisis. También
evitar o atenuar una nueva pérdida de peso al alta hospitalaria. puede ser criterio de ingreso la pérdida del control de la situación
También son útiles en pacientes ambulatorios desnutridos como en el entorno familiar y social del paciente o el fracaso del trata-
alternativa al ingreso hospitalario, siempre que no exista riesgo miento de forma ambulatoria.
vital. El empleo de SNO debe estar apoyado sobre un tratamiento El ingreso hospitalario en los TCA puede ser voluntario o invo-
psicoterapéutico y nutricional completo y la duración debe ser luntario, pero siempre con un enfoque multidisciplinar. Habitual-
aclarada y pactada con el paciente previamente. La NE por sonda mente durante el ingreso hospitalario, el tipo de alimentación será
nasogástrica se emplea casi de forma exclusiva en pacientes oral y excepcionalmente se utilizará la NA.
ingresados, donde la gravedad o la falta de colaboración hacen Los criterios de alta hospitalaria serán: mantener una situa-
preciso su empleo. Excepcionalmente, si la vía enteral no está ción médica estable, la resolución de las complicaciones agudas
disponible o si está contraindicada por una enfermedad intercu- tanto médicas como psicopatológicas y un control significativo
rrente, puede ser necesaria la NP (34-39). de las alteraciones conductuales, asegurando el cumplimiento y
seguimiento de los objetivos posteriormente al alta hospitalaria.
A diferencia de la AN, en la BN los ingresos hospitalarios tien-
TRATAMIENTO Y SEGUIMIENTO den a ser cortos, con el objetivo de contención y de ruptura con
DEL PACIENTE EN CONSULTA EXTERNA el círculo vicioso en que se encuentra el paciente (51-55).

El nivel asistencial ambulatorio es el marco del tratamiento más


habitual y más prolongado en los TCA, siempre con un enfoque TRATAMIENTO NUTRICIONAL EN EL
multidisciplinar. Requiere estabilidad clínica, ausencia de riesgo HOSPITAL DE DÍA
autolítico y adecuada capacidad del paciente para la vida familiar,
académica o laboral. En todos los pacientes debe realizarse una El hospital de día para TCA (HDTCA) surge como una alternativa
valoración nutricional estructurada. La evaluación clínica tiene potencialmente útil en el manejo de pacientes con TCA, a medio
que efectuarse siempre al inicio, en todos los trastornos y, poste- camino entre el tratamiento ambulatorio tradicional (consultas,
riormente, con una frecuencia variable en función de la gravedad terapia individual y grupal) y la hospitalización completa. En él,
del cuadro. En ella han de contemplarse aspectos referentes a los pacientes reciben tratamiento médico, terapia nutricional
purgas (vómitos y consumo de laxantes o de diuréticos), salud (comidas acompañadas/vigiladas), educación nutricional, aten-
bucodental, constantes vitales, crecimiento y desarrollo en niños ción psiquiátrica y psicológica en modalidad individual y/o gru-
y adolescentes, ciclo ovárico en mujeres jóvenes o síntomas de pal, terapia ocupacional y apoyo social, siempre con un enfoque
hipogonadismo en varones, una exploración física y una valora- multidisciplinar e intensivo.
ción analítica. Algunos modelos de HDTCA se orientan a tratamientos de corta
El tratamiento médico debe sumarse al psicoterápico, restau- duración (semanas) para el control de los síntomas del trastorno
rando los déficits nutricionales y electrolíticos. No hay un consen- y la estabilización ponderal; y otras veces se intenta el trata-

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CONSENSO SOBRE LA EVALUACIÓN Y EL TRATAMIENTO NUTRICIONAL DE LOS TRASTORNOS DE LA CONDUCTA 493
ALIMENTARIA: ANOREXIA NERVIOSA, BULIMIA NERVIOSA, TRASTORNO POR ATRACÓN Y OTROS. RESUMEN EJECUTIVO

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protocolo definido y consensuado con un programa estructurado y 10. Mejía A, Gil I, Luna R, Herranz L, Weiaz P, Bacacicoa A, et al. Nuestra experiencia
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seguir y mantener el objetivo ponderal establecido, corregir los Protocolo de Atención a pacientes con Trastornos del Comportamiento Alimentario
comportamientos alimentarios inadecuados, los pensamientos dirigido a Médicos de Atención Primaria. Ministerio de Sanidad y Consumo. Secre-
taría General Técnica. Centro de Publicaciones. Rumograf S.A. M-11772-2000.
irracionales, y asegurar un soporte sociofamiliar adecuado para 13. Iglesias C, Gómez-Candela C, Cos AI, Castillo R. Papel del médico nutriólogo
el pertinente seguimiento ambulatorio. Si en algún momento se en la unidad de trastornos de la conducta alimentaria. En: Miján de la Torre
constata que no se está siguiendo correctamente lo establecido A, editor. Nutrición y metabolismo en trastornos de la conducta alimentaria.
Barcelona: Editorial Glosa; 2004. pp. 493-506.
para el programa del HDTCA o que surgen complicaciones, el 14. Eating Disorders: Core Interventions in the Treatment of and Management of
paciente debería ser transferido a otra modalidad terapéutica más Anorexia Nervosa, Bulimia Nervosa and Related Eating Disorders. National
apropiada a su caso (56,57). Institute for Clinical Excellence. Clinical Guideline 9. Ed he British Psycholo-
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en costes de la eficacia de los distintos tratamientos en los TCA cializado en Paciente Pediátrico, con Trastornos de la Conducta Alimentaria,
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es escasa. La mayoría de las recomendaciones en las distintas Ministerio de Sanidad y Consumo. Madrid: Ed. IM&C S.A; 2006.
guías están basadas en consenso de expertos. 17. Machado BC, Gonçalves, Martins C, Brandão I, Roma-Torres A, Hoek HW, et
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