Tratamiento Farmacológicos Del Dengue
Tratamiento Farmacológicos Del Dengue
Tratamiento Farmacológicos Del Dengue
Diagnosticar el dengue puede ser difícil debido a que los signos y síntomas pueden confundirse fácilmente
con aquellos de otras enfermedades, como malaria, leptospirosis y fiebre tifoidea.
El médico probablemente te preguntará acerca de tus antecedentes clínicos y de viajes. Asegúrate de describir
los viajes internacionales en detalle, incluso los países que visitaste y las fechas, así como también cualquier
contacto con mosquitos que puedas haber tenido.
Determinados análisis de laboratorio detectan evidencia de los virus del dengue, pero los resultados de los
análisis generalmente llegan demasiado tarde para ayudar a orientar las decisiones de tratamiento.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para el dengue. El médico puede recomendarte que bebas mucho líquido
para evitar la deshidratación por vómitos y fiebre alta.
Durante la recuperación del dengue, presta atención a los signos y síntomas de deshidratación. Llama al
médico de inmediato si presentas alguno de los siguientes:
Letargo o confusión
El paracetamol (Tylenol y otros) puede aliviar el dolor y bajar la fiebre. Evita los analgésicos que puedan
aumentar las complicaciones de sangrado, como la aspirina, el ibuprofeno (Advil, Motrin IB y otros) y el
naproxeno sódico (Aleve y otros).
Medicamentos que no se deben utilizar para tratar
el dengue
En la tabla a continuación mencionamos algunos ejemplos de medicamentos que
están contraindicados en caso de dengue, porque aumentan el riesgo de que la
enfermedad se agrave, estos son:
Principios Activos Nombres comerciales
Warfarina Coumadin
Esta planta produce un aumento moderado del recuento de plaquetas, así como un incremento significativo
de los glóbulos blancos (lo cual mejora la leucopenia). Sirve para aliviar los síntomas de la picadura del
mosquito al colocar hojas (asadas) sobre la piel.
Esta planta tiene propiedades antiinflamatorias. El extracto de la hoja es tóxico contra el vector Aedes
aegypti, y a ciertas concentraciones puede utilizarse como larvicida (esto todavía se encuentra en
estudio). Puede encontrarse en polvo, tabletas o cápsulas.
La capa de transpiración que produce al bajar la fiebre es salina, lo cual sirve como repelente de mosquitos. Se
recomienda beber media taza de esta infusión cada 2 horas para hidratar el organismo.
6. Hierba de cebada
Dado que contiene clorofila, esta hierba estimula la producción de las células sanguíneas y, por ende, de las
plaquetas. También es rica en vitaminas (C, complejo B), minerales (magnesio, zinc, potasio y sodio) y
antioxidantes.
Solo se necesita hervir la hierba en un litro de agua y beber la infusión durante todo el día. Pero puede
ocasionar náuseas o vómitos, por lo que se recomienda recurrir a su presentación comercial en polvo.
7. Fenogreco o alholva
Ayuda a combatir el malestar general, por lo que puede aprovecharse también en caso de gripe. Esta planta
tiene propiedades sedantes que promueven un sueño reparador y el reposo del paciente. Se recomienda
comer algunas hojas de alholva, previamente lavadas, antes de cada comida.
8. Hoja de albahaca
Tiene propiedades antibacterianas, antioxidantes y antibióticas. Esta planta es de gran utilidad para tratar
todo tipo de infecciones.
El aceite de albahaca tiene propiedades insecticidas naturales y puede utilizarse como repelente.
Tiene minerales (magnesio, hierro y calcio) y vitaminas (A, C, D, E y complejo B). Contiene berberina, un
alcaloide que tiene propiedades antibacterianas, antifúngicas y antiprotozoarias.