JABON

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El jabón (del latín tardío sapo, -ōnis, y este del germánico saipôn) es un producto

que sirve para la higiene personal y para lavar determinados objetos.1 Se puede
encontrar en pastilla, en polvo, en crema o líquido.

Dos imágenes equivalentes de la estructura química del estearato de sodio, y un


jabón tradicional.
El jabón generalmente es una sal sódica o potásica resultante de la reacción
química entre un álcali (hidróxido de sodio o de potasio) y un lípido;2 esta
reacción se denomina saponificación. El lípido puede ser de origen vegetal (como el
aceite de coco) o animal (como la manteca de cerdo). El jabón es soluble en agua.
Por sus propiedades detersivas se utiliza para el lavado de ropa, corporal, etc.3

Los ácidos grasos que se utilizan como materia prima del jabón son los siguientes:

Aceites vegetales: coco, soja, maíz, oliva, lino, algodón.


Aceites animales: de pescado, grasas animales.
- Luego, éstos se combinan con cremas, perfumes y colorantes para darles
vistosidad.

Tradicionalmente, es un material sólido. En realidad la forma sólida es el


compuesto «seco», sin el agua que se emplea en la reacción mediante la cual se
obtiene el jabón. La forma líquida es el jabón «disuelto» en agua. En este caso, su
consistencia puede presentar distintas viscosidades.

Origen del jabón


Como ocurre con otros muchos productos, no está claro cuándo ni cómo se inventó el
jabón, y diversos pueblos se atribuyen su invención.

Según una de las leyendas, se descubrió en Italia. Cuentan que en el Monte Sapo,
cerca de Roma, se hacían sacrificios ceremoniales de animales. En ese mismo monte
ardían fuegos para la realización de esas ceremonias de sacrificio. Cuando llovía,
el agua arrastraba la grasa animal y las cenizas de esos fuegos, que bajaban por
riachuelos hasta la base del monte. Los esclavos que lavaban la ropa de sus amos en
las aguas que bajaban desde ese monte descubrieron que esas aguas la limpiaban
mejor e, indagando en la razón de esto, descubrieron cómo hacer jabón.

Los restos de jabón más antiguos son de origen babilonio y datan del 2800 a. C.

Tipos de jabones

Jabón para afeitar

Tradicional jabón de Marsella


Existen innumerables tipos de jabón, con distintas combinaciones de consistencia,
olor, forma, color, textura, propiedades limpiadoras o terapéuticas. Algunos de los
más conocidos tipos de jabones son:

Jabón de Marsella
Jabón de Castilla
Azul y blanco portugués
Jabón de brea
Jabón de coche
Para afeitar
Jabón de Alepo. Fabricado en Alepo, Siria, utilizando extractos de laurel y aceite
de oliva
Jabón líquido
Jabón de aceite
Jabón de glicerina
Acción detergente
Los jabones ejercen su acción limpiadora sobre las grasas en presencia del agua
debido a la estructura de sus moléculas. Estas tienen una parte liposoluble y otra
hidrosoluble.4

El componente liposoluble hace que el jabón «moje» la grasa disolviéndola y el


componente hidrosoluble hace que el jabón se disuelva a su vez en el agua.

Las manchas de grasa no se pueden eliminar solo con agua, por ser insolubles en
ella. En cambio, el jabón, que es soluble en ambas, permite que la grasa se diluya
en el agua.

Cuando un jabón se disuelve en agua disminuye la tensión superficial de esta, con


lo que favorece su penetración en los intersticios de la sustancia a lavar.5 Por
otra parte, los grupos hidrofóbicos del jabón se disuelven unos en otros, mientras
que los grupos hidrofílicos se orientan hacia el agua, generando un coloide, es
decir, un agregado de muchas moléculas convenientemente orientadas. Como las
micelas coloidales están cargadas y se repelen mutuamente, presentan una gran
estabilidad.

Métodos de obtención

Caja de jabón "Amigo del Obrero" de México. De la colección del Museo del Objeto
En esencia, el proceso de obtención del jabón, sea industrial o artesano, consta de
tres fases: saponificación, sangrado y moldeado.

Saponificación: se hierve la grasa en grandes calderas, se añade lentamente soda


cáustica (NaOH) y se agita continuamente la mezcla hasta que comienza a ponerse
pastosa. La reacción que ha tenido lugar recibe el nombre de saponificación y los
productos son el jabón y la lejía residual, que contiene glicerina:
grasa + sosa cáustica → jabón + glicerina.
Sangrado: el jabón obtenido se deposita en la superficie en forma de gránulos. Para
que cuaje de una manera completa se le añade sal común (NaCl). Esta operación
recibe el nombre de sangrado o salado; con ella se consigue la separación total del
jabón (que flotará sobre la disolución de glicerina), de la sosa cáustica (que no
ha reaccionado) y de agua.
Moldeado: ya habiendo realizado el sangrado, el jabón se pasa a otro recipiente o
vasija donde se le pueden añadir perfumes, colorantes, productos medicinales, etc.
Entonces, todavía caliente, se vierte en moldes, se deja enfriar y se corta en
pedazos.
El jabón líquido está constituido principalmente por oleato de potasio, preparado
por la saponificación del ácido oleico con hidróxido de potasio. También es muy
usado (por ser más económico), el estearato de sodio o palmilato de sodio, análogo
al anterior, usando ácido estearílico, esteárico o palmítico e hidróxido sódico,
respectivamente.

En la actualidad hay dos métodos de obtención del jabón, ambos basados en la


saponificación.

Primer método

Fabricación de jabón en el siglo XIX


En el primer método se produce la saponificación directamente sobre la grasa, se
hace reaccionar el álcali con la grasa, y se obtiene el jabón y glicerina. Este
método tiene como desventaja que es más difícil la separación de la glicerina y el
jabón.

Segundo método
En este método, primero se produce la ruptura química de la grasa, y se obtiene la
glicerina y los ácidos grasos; éstos se separan antes. Luego se produce la sal del
ácido graso y los alcalinos.

Variantes
También se le suele agregar colorantes, cargas (para abaratar el costo), glicerina,
etc.

Farmacéutica
En farmacéutica, se puede utilizar amoníaco u otro alcalino, o un óxido metálico,
sobre aceites, grasas o resinas, y se mezcla a veces con otras sustancias que no
producen saponificación. En el campo de la medicina es muy frecuente utilizar jabón
antiséptico con iodopovidona, entre otros compuestos, y en sus diferentes
presentaciones comerciales.

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