El Fin de La Historia Fukuyama
El Fin de La Historia Fukuyama
El Fin de La Historia Fukuyama
STEFANY TORRES
VALLEDUPAR – CESAR
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RESUMEN DEL FINAL DE LA HISTORIA FUCUYAMA
El autor explicaba el triunfo de las democracias liberales como efecto de la caída del comunismo
asi que el fin de la historia se interpreta como el fin de las guerras y las revoluciones sangrientas
la visión que Hegel tenia de la relación entre el mundo ideal y el mundo real era
extremadamente compleja , comenzando por el hecho que , para él la distinción entre ambos era
solo aparente .
No creía que el mundo real se ajustase o se le pudiese ajustar de manera sencilla alas
preconcepciones ideológicas de los profesores de filosofía o que el mundo material no tuviese
injerencia en el mundo ideal. Para el toda conducta humana está enraizada en un estado previo
de conciencia; idea similar, por cierto ala expresada por John Keynes cuando decía que las
opiniones de los hombres de los hombres de negocio generalmente derivaban de economistas
difuntos y escritorzuelos académicos de generaciones pasadas.
Esta conciencia puede no ser explicita y su existencia no reconocerse , como ocurre con las
doctrinas políticas modernas , si no adoptar , más bien la forma de la religión o de simples
hábitos morales o culturales . sin embargo , esta esfera de la conciencia a la alarga
necesariamente se hace manifiesta en el mundo material en verdad , ella crea el mundo
material a su propia imagen
no se trata aquí de las propuestas electorales triviales de los políticos americanos , sino de ideas
en el sentido de amplias visiones unificadoras del mundo , que podrían entenderse mejor bajo
la rúbrica de ideología en este sentido , la ideología no se limita a las doctrinas políticas seculares
y explicitas que asociamos habitualmente con el termino , sino que también puede incluir a la
religión , la cultura y el conjunto de valores morales subyacente en la sociedad
En este siglo, los estados han adoptado doctrinas claras y coherentes, con programas explícitos de
política exterior que legitiman el expansionismo, a semejanzas del marxismo-leninismo o el
nacional socialismo. La conducta expansionista y competitiva de los estados europeos en el siglo
diecinueve descansaba sobre una base no menos idealista; únicamente que la ideología de que la
impulsaba menos explícita que las doctrinas del siglo veinte
El fin de la historia será un momento muy triste. La lucha por el reconocimiento, la voluntad de
arriesgar la propia vida por una meta puramente abstracta, la lucha ideológica a escala mundial
que exigía audacia, coraje, imaginación e idealismo, será reemplazada por el cálculo económico la
interminable resolución de problemas técnicos, la preocupación por el medio ambiente y la
satisfacción de las sostificadas demandas de los consumidores.