Un Llamado A La Excelencia
Un Llamado A La Excelencia
Un Llamado A La Excelencia
Antes de todo esto, iba a decir un testamento, pero me di cuenta de que solo importa es la
Palabra, porque había escrito como dos páginas de pura tontería para luego entrar en el tema.
Logre entender que solo cuenta es lo que voy a [ENSEÑAR].
Durante toda mi vida he escuchado predicadores que han sido de gran bendición para mí, y le
agradezco a mi padre por haber confiado en mí para estar hoy aquí compartiendo con ustedes.
Por eso bendigo la vida de todos los expositores y los felicito a todos. Felicito al pastor y maestro
Limary Chacín, felicito a Rogel Soto, a Marcel Hernández, a la reina Ana Clara, a la reina Jessica
Suarez, a la reina Maidelin de Becerra, felicito a Ana de Los Ángeles, “excelente predicadora”, y a
mi compañero Luis Lamadrid, “A quien admiro su extraordinario potencial”.
Excelencia: “Procedente del vocablo en latín excellentia, es una palabra que permite resaltar la
considerable calidad que convierte a un individuo u objeto en merecedor de una estima y
aprecio elevado.
Entonces ser excelente es hacer las cosas, no buscar razones para demostrar que no se puede
hacer. Porque, el hombre que dice que “no puede hacerse” será sorprendido por alguien que lo
haga.
Esto es muy sencillo, ¿Sabes? Porque lo que tenemos que aprender lo aprendemos haciendo.
Vale más actuar exponiéndose a arrepentirse de ello que arrepentirse de no haber hecho nada.
La experiencia más completa del ser no es lo que tiene, sino lo que hace.
Nosotros los seres humanos nacemos con dones y habilidades, las cuales están dormidas dentro
de nosotros, a pesar de eso pocos son los que la desarrollan y dejamos que la mediocridad se
apegue en nosotros, la diferencia entre un triunfador y un mediocre radica en el desarrollo de la
mente. Son muy pocos los que realmente han decidido darlo todo para cumplir sus objetivos, sus
sueños, sus metas.
Debe saber que un triunfador siempre será parte de la propuesta y el plan; el perdedor siempre es
parte del problema, del misterio, de la dificultad, del apuro, la molestia y el aprieto.
Definamos la palabra [Confrontar]: “tiene que ver con (Encontrarse, acontecer). Es poner a una
persona o una cosa, material o inmaterial, frente a otra para compararlas u oponerlas entre sí.
Esta palabra se refiere a enfrentar, rivalizar y contender una persona o cosa contra otra.
Este verbo aparece 27 veces y en todos los periodos del hebreo Bíblico. El uso más frecuente del
término es en contextos bélicos. Las confrontaciones pueden ser pacíficas; por ejemplo: (Salmos
21.3) “3Porque le has salido al encuentro con bendiciones de bien. . .”.
Las confrontaciones también pueden ser hostiles según, (2 Samuel 22:6) “ 6Me rodearon las
ligaduras del Seol; me confrontaron los lazos de la muerte.”.
Pacemos a la siguiente que es [Mediocridad]: “Es una palabra que usamos a menudo sin saber lo
que verdaderamente significa. La Real Academia de la Lengua Española define el término
“Mediocre” como algo de calidad media, tirando a lo malo.
Mediocre indica algo o alguien que no presenta la calidad ni el valor que sea mínimamente
aceptable para su entorno.
Mediocre es usado para describir a una persona, es peyorativo ya que indica que ese alguien no
posee habilidades ni intelecto.
El maestro Limary Chacín dijo que: “La mediocridad en el Reino es oír y no hacer”. Amen. Ahora
yo digo: “Mediocridad en el reino es que tú seas lo que eres, dejando lo que Dios quiere que tú
seas”.
En cuanto a Dios la mediocridad no va con El. Dios es un Dios excelente. La mediocridad no te deja
a avanzar en el Reino. Hay algo con lo que Dios nunca ha estado de acuerdo; La mediocridad. ¿Por
qué? Porque la mediocridad es vagancia. Los mediocres renuncian y nunca tienen un extra.
La única otra actividad además de la oración, que me hace sentir aliviado, es hacer algo por otra
persona.
Hace poco aprendí esto y quiero que usted lo sepa también, “Haga todo lo que pueda con la
certeza de poder hacer más”.
Entonces, el joven que se levanta temprano, es el extra del que se levanta después de la once del
día.
Hay que aprender a vivir por encima de las circunstancias; nunca permitas que la crisis cambie tu
calidad de vida. En Filipenses 4.12 dice “12Se vivir humildemente, y se tener abundancia, en todo
y por todo estoy enseñado. . .”.
Reitero; nosotros actuamos según lo que pensamos. En otras palabras, nos convertimos en lo
que pensamos.
En la Biblia tenemos el ejemplo de dos reinados: Uno que trato de usar la fe para establecer sus
propios planes egoístas, y esto los llevo al fracaso de su reinado; este es el caso del rey Saúl. El
otro caso es el de David quien uso la fe para establecer el Reino de Dios.
Saúl comenzó a hacer lo que él quería en el gobierno, todo le salía mal. Esto es lo que sucede en el
gobierno humano, con el que no se conoce el sistema de la fe. Saúl trato de usar la fe con motivos
incorrectos para satisfacer sus propias necesidades, sus propios deseos.
En otras palabras, se mostró inepto para ser el fundador de un linaje real. De la misma manera
muchos hijos de Dios son ineptos para ser protagonistas ante el establecimiento del Reino de Dios.
Este tipo de persona no califica para establecer el Reino de Dios. Dios estaba probando a Saúl para
ver si estaba listo para actuar, pero no fue aprobado, Saúl no controlo sus impulsos, no tuvo
dominio propio, no fue dueño de sí mismo, no tuvo éxito en sus batallas internas; por ende
tampoco lo tuvo en sus batallas externas. Se adelantó a tomar sus propias decisiones.
Saúl no era el modelo de hombre que Dios necesitaba para establecer su Reino. Dios quería a
alguien que no fuese insensible a los impulsos divinos, ni desobediente a la visión celestial.
Por lo tanto queda claro que Saúl no tenía un corazón conforme al de Dios. Saúl
no entendía como operaba el sistema de la fe para establecer el Reino de Dios. Él quería
establecer su propio reino y fracaso.
El problema con muchos hijos de Dios es que todos quieren la unción; pero a
veces la unción no los quiere a ellos. La unción solo reconoce al ungido.
David era despreciado y sin importancia para muchos en este mundo. Para
muchos David no era nada; pero Dios dijo, en efecto: “Tú tienes lo que estoy
buscando, tú serás el futuro rey de Israel”.
Así era David, Dios lo vio en el campo, cuidando las ovejas de su padre con
fidelidad y lealtad, cumpliendo con sus órdenes, y Dios aprobó la conducta de aquel joven
para establecer Su Reino aquí en la tierra.
Entonces tenemos que decidir a cual reino vamos a servir: Al Reino eterno representado
por nuestro Señor y que El mismo dijo que buscáramos según (Mateo 6.33) que dice:
“Mas buscad primeramente el Reino de Dios y Su justicia. . .”. O al reino efímero de
hoy.
El Reino de Dios no será destruido, ni será el Reino dejado a otro pueblo, este Reino
permanecerá para siempre. Según (Daniel 2.44).
Es uno de esos términos que nos gusta emplear; pero que rara vez se definen.
Aunque el Reino de Dios está lleno de (Justicia, Paz y Gozo), no es algo físico o
tangible. No es algo que podamos ver o tocar. El Reino de Dios no es comida ni bebida,
sino justica, paz y gozo (Según Romanos 14.17).
Los seres de excelencia cada vez que se equivocan, se preguntan a sí mismos ¿En qué
me equivoque? Y con toda humildad tratan de aprender en esa lección. Hay personas que
fracasan toda su vida y jamás aprenden absolutamente nada. ¡El fracaso! El fracaso es
muy valioso cuando aprendemos de él.
Y vea usted algo que es importante, ¿De casualidad usted tiene algún problema? ¿Es algo muy raro
he? Le voy a dar a usted la fórmula para que pueda resolver todos sus problemas, es más a partir
del día de hoy, a partir del día de hoy se acabaron todos sus problemas, está garantizado, se lo
garantizo con la cantidad de dinero que usted desee, esta receta no tiene de verdad perdida,
¿quiere usted terminar con todos los problemas que tiene? Anótelo por favor, ¡muérase!, es algo
tan simple como eso, muérase y le aseguro que todos sus problemas se acabaran.
El principio que tiene la gente exitosa es tener sueños o metas claras. Si no sabes cuál es
tu sueño vivirás cumpliendo el sueño del otro. Si yo no sé cuál es el blanco, como se
dónde apuntar la flecha; si no sé a dónde quiero ir, como sé qué camino tomar. Establecer
metas específicas, cuantificables, exactas, es el primer paso para lograr el éxito y para
poder avanzar en el Reino de Dios.
De aquí emerge una pregunta ¿Qué son problemas? Los problemas son las oportunidades que
tenemos en la vida para demostrar nuestra grandeza, para sacar nuestro talento. El gran secreto
en la vida para triunfar y tener éxito desde este punto de vista; es aprender a resolver problemas.
“Cuando tu pasado es más grande que tu futuro estas en problemas, porque estas en
depresión”.
Cuando yo establezco los sueños y los tengo claramente establecidos, tengo que hacerlo sin
miedo. Muchas personas dicen: “Bueno, a mí me gustaría tener un auto, o tener mi casa, o
lograr tal viaje”; pero inmediatamente dicen: “No porque no tengo plata, no puedo, es difícil, se
me fue la edad, no estudie”.
La gente mediocre ve las derrotas, las dificultades, las demoras, dicen no puedo, no lo voy a
lograr, no lo voy a alcanzar. Se les hace difícil ver la excelencia de Dios, la excelencia no proviene
de los hombres, la excelencia proviene de Dios. Entienda eso.
En 2 Corintios 4:7: “Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder
sea de Dios y no de nosotros”. En 2 Pedro 1:3: “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y
a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos
llamó por su gloria y excelencia”.
Hay que romper con los viejos paradigmas que no nos dejan avanzar, a ir hacia adelante. El
paradigma es construcción mental, es una explicación intelectual de porque las cosas tienen que
ser como son.
Cuando uno establece metas y sueños, tienen que hacerlo sin pensar en las condiciones presentes,
sin pensar si tengo o no dinero, si puedo o no puedo.
La visión no da lugar al temor. No da razón para intimidarse. Hay que ser originales en tiempos de
copias.
Caleb y Josué vieron los mismos obstáculos que los otros diez espías, pero [sabe que] ellos tenían
una actitud diferente a la de ellos. Sus palabras fueron, “Mas podremos nosotros que ellos”.
Si nos atrevemos a romper los viejos ritos, costumbres y paradigmas obsoletos, sin duda alguna
escalaremos más alto.
Números 13.3o, lo puede encontrar. Ellos sabían que con la ayuda de Dios podian hacer y lograr
cualquier cosa. No hay imposibilidad. Un poco más adelante hablare de las imposibilidades.
Sus metas tienen que ser más grandes que su presente, su futuro tiene que ser mucho más grande
para que sea un futuro motivador. Amen.
Ser excelente es comprender que la vida no es algo que se nos da hecho, sino que tenemos que
producir las alternativas para alcanzar el éxito.
Triunfar no es lo más importante, ¡Es lo único! Es más haga de esto un habito, sea optimista, la
vida no se debe de improvisar, la vida se debe de programar.
Ser excelente es saber decir “Me equivoque” y proponerse no cometer el mismo error.
Algo que descubrí de la gente exitosa, es que ellos escriben sus sueños. Los tienen escritos, otros
lo tienen. . . un momento.
No hace mucho escuche en un audiolibro que dice que un hombre fue a dar unas de sus
conferencias en la Ciudad de Chicago los EE.UU y le hicieron un tour en un shopping que alguien
había comprado, este shopping había costado 7 millones de dólares 7 cuadras de largo; luego del
recorrido lo llevaron a la oficina del dueño y cuando se sentó se fijó en algo que estaba colgado en
la oficina, un cuadro muy grande de un banco dibujado, entonces aquel hombre le pregunto al
dueño: a usted tiene también un banco. Y el dueño del shopping le respondió y le dijo: “No esa es
mi próxima meta”.
Como decía unos los tienen escritos y otros los tienen dibujados.
¿Sabe cuál es la virtud del ser humano? Que podemos evolucionar; pero el ser humano puede
evolucionar o puede involucionar, el ser humano puede ser perfectible o puede ser defectible.
Entonces, una piedra no se puede hacer más piedra, un perro no se puede hacer más perro, pero
un humano si se puede hacer más humano.
El ser humano cada día puede ser más sabio; recuerde el precepto Bíblico; “Corrige al sabio y lo
harás más sabio”, “Corrige al necio y te lo echaras de enemigo”.
El ser excelente es levantarse cada vez que se fracasa con un espíritu de aprendizaje y superación.
Todos los seres humanos tenemos dos grandes opciones en la vida, (triunfar o fracasar).
Pero sabe usted cual es la gran diferencia entre unos y otros. Los seres humanos que han tenido
éxito y aquellos que nunca han fracasado. ¿Sabe usted de esas personas que nunca han
fracasado? ¿A qué se debe? Bueno, son las que nunca han intentado absolutamente nada.
¿Cuál es el riesgo de un triunfador? El fracaso, por supuesto, esa es la colegiatura que debe pagar
un triunfador.
Oiga, el fracaso, el fracaso no significa derrota, significa sencillamente que tenemos que
desafiarnos a nosotros mismos para volver a insistir.
Un desafío: “Es el llamado que recibimos de parte de Dios para alcanzar y lograr hacer lo
imposible. De modo que el Ministerio también se puede caracterizar como un reto”.
El fracaso no lo debe desanimar, al contrario le debe dar más sabiduría y por supuesto aprenda
usted del éxito. ¿Qué significa? Cuando tenga usted éxito pregúntese también ¿Por qué triunfe?
¿Para qué? Para que mañana lo vuelva a repetir, para que mañana lo pueda mejorar, para que
usted siempre este y camine por el sendero de los triunfadores. La excelencia es pues; intentarlo
tantas veces hasta lograrlo. Amen.
¿Ya sabe lo que significa mediocridad? Quedarse a la mitad, a la mitad del camino, aquellos que
no son capaces de concluir una tarea, aquellos que no han sido capaces de comprometerse con
ellos mismos.
El primer gran compromiso que tiene un ser de excelencia, es con su propio ser, con su propia
vocación y luego tendrá que agregarle toda la pasión para que lo que haga, lo disfrute
plenamente.
Oiga, el recurso más valioso que tenemos nosotros los seres humanos, después de la Palabra; lo
único que nos pertenece, se llama “tiempo”.
Dios perdona, el tiempo no. Quiero hacerle una pregunta, el tiempo, ¿Por qué lo tenemos que
desperdiciar? Mire, tomar el tiempo es como tomar agua entre nuestras manos, se nos va
escurriendo, se nos va yendo la vida, o la vamos gastando o la vamos invirtiendo, de eso se trata la
vida, debemos ganarle tiempo al tiempo, que es sencillamente la parte esencial y fundamental.
¿Sabe usted lo que significa el trabajo? El trabajo por supuesto, es mi opción para tener riqueza, es
mi opción para educar a mis hijos, es la opción de irme de vacaciones, de comprarme ropa, de
tener un auto.
Oye y ¿Entonces que es el trabajo? Una desgracia, o es la gran oportunidad para demostrar mi
talento, mi gran oportunidad para demostrar mi capacidad.
Talento: “Es la capacidad (desde el punto de vista cualitativo) que tiene una persona para
desenvolverse fácilmente en alguna área determinada y que nace con la persona y se desarrolla
en ella”.
El trabajo definitivamente es el gran recurso que tenemos los seres humanos. Dios nos dio el
cuerpo, Dios nos dio la mente, pero nunca nos dijo te voy a dar los alimentos, la ropa y todo lo que
desees.
Aunque si puede dárnoslo, ¿Pero a través de qué? De nuestro trabajo aquí en su Casa, y no solo
aquí, sino en todo el mundo.
Aprendamos a entender que el trabajo, es un privilegio para poder servir y ser útiles a los demás.
El ser excelente es crear algo, un puesto, un sistema, una empresa, un hogar y una vida.
¿Quiere usted avanzar, quiere usted triunfar? Sea creativo, invente soluciones, búsquese nuevos
problemas, desarrolle todo su talento y dese cuenta que usted mismo es el pináculo magistral de
la propia creatividad.
Mire, los seres excelentes, los que aspiramos realmente a la realización total, tenemos que
eliminar una palabra, una palabra que solamente los estúpidos la usan, y esa palabra es
precisamente ¡Imposible! Una palabra que tenemos que borrar de nuestro lenguaje, una palabra
que jamás deberá formar parte de nuestra cultura triunfadora.
Nosotros vivimos en un mundo negativo; lleno de gente mediocre, que está llena de viejos y
destructores paradigmas, ritos y costumbres.
Cuando Jesús dice: “Buscad primeramente el Reino de Dios”. La misma palabra “Buscad” implica
una actividad intensa. El texto griego de Mateo expresa un mandamiento continuo: “Mas
buscad continuamente. . .”. El pensamiento es de determinación, palabra que defino como la
decisión de ser persistente a pesar de todo.
Determinación: Es suficiente decir que determinación es permanecer firme cuando las cosas se
ponen difíciles.
Para el triunfador nada es imposible, hay que insistir hay que buscar caminos, ¡Por supuesto! Esos
son los que logran hacer avanzar a la humanidad. ,
Todos los seres humanos tenemos un llamado, no solamente en un aspecto material o sicológico;
nosotros tenemos un llamado en el orden espiritual y es precisamente hacer un mundo mejor del
que poseemos. Es, el poder aportar a la humanidad nuestro aroma y nuestra esencia. Predicando y
sembrando la semilla de la Palabra de Dios.
Lo reto a que transcienda, que no solo busque su bien ser o su bien estar, que busque que otros
seres humanos reciban su aroma y que ese aroma perdure.
Y usted se gane el derecho de ser un ser histórico de su tiempo, transcendiendo porque ha hecho
lo suyo y algo más en beneficio de otro ser humano.
Entonces cualquier cosa que valga la pena hacer; vale la pena hacerla bien.
Nunca digas que no podrás llegar, no condenes tu final si tan siquiera comenzar. El peor fracaso no
es fracasar es rendirse sin intentar. En la perseverancia no hay ningún delito y de los cobardes
nunca nada se ha escrito. Cree y que nadie te limite. Es mejor intentarlo y lograrlo, que quedarse
sin probar y quedarse con la duda eterna.
El líder nunca acepta la dificultad, los temores, la imposibilidad, en pocas palabras nunca acepta la
mediocridad. El líder sabe que la excelencia se aprende. El líder también comprende que la
excelencia es cualidad y no cantidad. El líder no se contenta con una medalla de plata; a nosotros
nos gusta palpar el oro.