Jardineria Mediterranea PDF
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EUBACTERIA 1
B OT ÁNICA
Atlántico y, por tanto, más lluvioso, con temperatu- Las plantas de climas mediterráneos utiliza-
ras suaves en invierno y una amplitud térmica anual das en la jardinerı́a mediterránea.
muy pequeña. Es el clima de Andalucı́a Occidental.
4. Un clima mediterráneo seco, muy caluroso, con Son, pues, muchas de estas plantas procedentes
precipitaciones muy escasas e irregulares y una am- de estas regiones con semejanzas climáticas, algu-
plitud térmica anual muy pequeña. Es el clima de nas de ellas desconocidas o poco conocidas, las que,
Murcia y Almerı́a. unidas a las tradicionalmente cultivadas, nos serán
de utilidad en el diseño de los jardines de tipo me-
En adelante, y cuando nos refiramos a la zona me- diterráneo. A todas ellas hay que unir otra serie de
diterránea española estaremos hablando de aquellas plantas que, aún no procediendo de las zonas men-
zonas con un clima del tipo 2, 3 y 4. cionadas, son resistentes a condiciones adversas, so-
portando la escasez de agua y los calores rigurosos
La vegetación natural propia del clima me- del verano, caracterı́sticas éstas tan propias de la
diterráneo. región mediterránea. Muchas de estas especies son
utilizadas asiduamente en las técnicas de xerojardi-
nerı́a, casi de obligado cumplimiento, en mi opinión,
Estos rasgos climatológicos conforman una vege-
en los jardines mediterráneos, donde el agua es ca-
tación, mayormente arbustiva, frecuentemente con
si siempre un factor limitante. Otras especies, de
caracterı́sticas similares a la de otras zonas con clima
procedencia subtropical, soportan perfectamente las
mediterráneo, debido en muchos casos a una evolu-
suaves temperaturas de las costas mediterráneas,
ción convergente. Algunas de estas caracterı́sticas
aunque requieren un aporte mayor de agua, sobre
comunes son: dominancia de especies siempreverdes,
todo en verano, pudiendo ser utilizadas perfectamen-
hojas reducidas, con frecuencia lineares o aciculares,
te en aquellos lugares donde el aporte de ésta no
muy a menudo coriáceas (de ahı́ su denominación
esté comprometido. Al final del artı́culo insertamos
de vegetación esclerófila) o con gruesas cutı́culas. Es
unos listados con una amplia selección de especies.
común igualmente la presencia de aceites esenciales
aromáticos muy inflamables. En general son especies
Flora autóctona vs. flora alóctona.
que se han adaptado bien a la presencia periódica del
fuego por efecto de los rayos, llegando incluso a ne-
cesitar este fuego para poder propagarse en algunos Una polémica siempre presente, defendida con
casos. obcecación por algunos, es la de la utilización de la
flora autóctona frente a la flora alóctona. Estamos de
acuerdo en ello, puesto que la flora autóctona siempre
Este tipo de vegetación denominado “maquis” en está mejor adaptada a las condiciones del lugar, pero
nuestro mediterráneo, tiene en la zona del sur de Ca- la jardinerı́a, que entre otras cosas busca la orna-
lifornia su homólogo en el “chaparral”, y aunque con mentación, no siempre dispone en la flora autóctona
especies distintas y otros tipos de suelos más ácidos, de las plantas adecuadas para ciertos fines o ciertos
tiene igualmente su equivalente en el “matorral” de efectos estéticos, teniendo que obtenerlas de otras flo-
Chile, el “fynbos” de Sudáfrica o el “mallee scrub” de ras lejanas.
Australia.
Los peligros de la flora alóctona.
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