Revista Canaria 2002 PDF
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Número 13
2
www.oftalmo.com/sco
SOCIEDAD CANARIA DE OFTALMOLOGÍA
JUNTA DIRECTIVA
EX-PRESIDENTES
EDITORES:
Dr. José A. Abreu Reyes: Santa Cruz de Tenerife
Dr. José A. Rodríguez Pérez: Las Palmas de Gran Canaria
Colaboradores de edición:
Dr. Rodrigo Abreu González
Ex-editores:
Prof. Juan Murube del Castillo y Prof. Manuel Antonio González de la Rosa
Fotos de portada:
1. Melanoma coroideo que afecta la cabeza del nervio óptico. Imagen previa y a los cinco días de
tratamiento con TTT (Termoterapia Transpupilar).
Dr. J.J. Aguilar Estévez. Servicio de Oftalmología. Hospital Universitario de Canarias.
Dr. M. Abraldes López-Veiga. Instituto Gallego de Oftalmología. Hospital Clínico Universitario de Santiago de
Compostela
2. Oclusión del punctum lacrimale con parche mucoso (Técnica de Murube). Dr. J.A. Abreu Reyes.
Servicio de Oftalmología. Hospital Universitario de Canarias
Dirección de la Revista en Internet:
www.oftalmo.com/sco
1. Los trabajos deberán ajustarse a las normas contenidas en los siguientes apartados, debiéndo ser envia-
dos a la Secretaría de la Sociedad Canaria de Oftalmología antes del día 30 de Marzo, para que la edi-
ción del número de Archivos correspondiente al año, coincida con la celebración del Congreso anual de
la Sociedad Canaria de Oftalmología.
3. Identificación.- Debe constar el nombre y dos apellidos de cada autor, con el grado académico más alto
y la afiliación a una institución. Mención, si se desea, de que el trabajo ha sido presentado total o par-
cialmente en algún congreso regional, nacional o internacional. Se hará constar en qué sección de la
revista desea ser incluido (investigación, artículos originales, casos clínicos, seminarios, comunicacio-
nes cortas, revisión, nuevas técnicas, info-oftalmología).
4. Redacción del texto y presentación.- Los trabajos deben ser enviados por triplicado, mecanografiados
y con un resumen en español y en inglés, con un máximo de 150 palabras cada uno. Se debe incluir un
diskette que contenga el mismo, preferiblemente en formato Microsoft Word.
5. Tablas, gráficos y fotografías.- El número de éstos deberá limitarse a los fundamentales. Las fotografías
en color correrán a cargo del autor/es del trabajo. Los epígrafes de las ilustraciones deben mecanogra-
fiarse en hoja aparte. Las ilustraciones no deben pegarse sobre el manuscrito ni sobre cartulina. Deben
numerarse al dorso.
6. Bibliografía.- Se ordenará y numerará por su orden de aparición en el texto. La forma de la cita será la
del Index Medicus.
7. Caracteres de imprenta.- Sólo se admitirán en el texto los estilos de los caracteres de imprenta cursiva
y negrita.
8. Examen de manuscritos.- Los trabajos, una vez recibidos, pasarán a la Comisión de Publicaciones para
informe.
9. Pruebas.- Deberán devolverse, debidamente corregidas, en un plazo de diez días a partir de la fecha del
envío. Pasado este plazo sin recibirse, el trabajo perderá su turno de publicación.
10. El autor/es certificarán que el trabajo no ha sido publicado ni está en vías de consideración para publi-
cación en otra revista. Asimismo transferirán los derechos de propiedad (copyright) del presente traba-
jo a la Sociedad Canaria de Oftalmología, firmando cuantos autores haya.
Archivos de la
Sociedad Canaria de Oftalmología
2002 Publicación anual N.° 13
Índice
EDITORIAL:
La hora del relevo
Abreu Reyes JA ................................................................................................................................................................... 1
COMUNICACIÓN SOLICITADA:
Ojo seco: clasificación clínica y por citología de impresión.
Dry eye: clinical and impression cytology classification
Murube del Castillo J, Rivas L ............................................................................................................................................ 5
INVESTIGACIÓN:
Determinación del radio corneal posterior mediante un cálculo teórico y el sistema Orbscan II: estudio comparativo.
Evaluation of posterior corneal radius by means of theoretical calculation and Orbscan II: comparative study.
Ortiz Márquez D, García Antón P, Velarde Rodríguez JI, González Fernández F, Fernández del Cotero JN .................. 13
ARTÍCULOS ORIGINALES:
Cuantificación de la proliferación celular con PCNA en la neoplasia intraepitelial córneo-conjuntival.
Quantification of cellular proliferation by PCNA in corneo-conjunctival intraepithelial neoplasia.
Abraldes MJ, Abdulkader I, Rodríguez-Pereira C ............................................................................................................... 17
Síndrome de contracción capsular: propuesta de clasificación y manejo.
Capsule contraction syndrome: classification proposal and managing.
Abreu Reyes JA, Cordovés Dorta LM, Méndez Medina R, Rodríguez Martín J, Abreu González R, Aguilar Estévez JJ,
González de la Rosa MA ........................................................................................................................................................ 21
PRL™. Una alternativa al LASIK.
PRL™. An alternative to LASIK.
Amigó Rodríguez A, Herrera Piñero R, Muiños Gómez-Camacho JA .............................................................................. 27
Facoemulsificación bajo cruioanestesia: nuestra experiencia.
Phacoemulsification under cryoanalgesia: our experience.
Álvarez Marín J, Montesinos Ventura BM, Gutiérrez Carmona FJ .................................................................................... 33
Cirugía del cristalino transparente. Balance de resultados de 2001.
Clear lens surgery. 2001 results.
Carreras Díaz H, Rodríguez Hernández JV ......................................................................................................................... 41
Epidemiología del pterigión quirúrgico en la Isla de La Palma.
Incidence of surgical pterigya in La Palma Island.
Domínguez González JJ, León Hernández FA .................................................................................................................... 47
Medidas para mejorar la colaboración durante la facoemulsificación bajo anestesia tópica.
Different techniques to improve patient collaboration in phacoemulsification with topic anesthesia.
Grande Baos C ..................................................................................................................................................................... 55
Tratamiento con octreótide de la retinopatía diabética avanzada.
Treatment with octreotide in the proliferative advanced diabetic retinopathy.
Pareja Ríos A, López Alba A, Mantolán Sarmiento C, Cordovés Dorta L, Serrano García MA ....................................... 61
Técnica quirúrgica de debilitamiento del oblicuo inferior: retroceso con anteroposición.
Inferior oblique weakening techniques: recession and anterior transposition.
Pérez Barrero L, Losada MJ, Nubel W, González M, Sánchez M, García M .................................................................... 67
La contraincisión en la cirugía de cataratas.
The contraincision in cataract surgery.
Pérez Silguero MA, Pérez Silguero D, Pérez Hernández FR, Bernal Blasco I, Jiménez García A .................................... 73
Cirugía del hilo en la incomitancia lejos-cerca.
Fadenoperation in the far-near unconcomitance.
Sánchez Méndez M, Losada Castillo MJ, Pérez Barreto L, Nubel W, González Hernández M, Mesa Lugo F ................ 77
CASOS CLÍNICOS:
Terapia ortóptica en paciente con síndrome de Brown secundario a cirugía del oblicuo superior. A propósito de un caso.
Orthoptic theraphy in patient with Brown syndrome secondary to surgery of the superior oblique. A case report.
Fernández del Cotero JN, Portela Camino JA, Velarde Rodríguez JI, Alonso Juárez E, Vélez Lasso E ........................... 83
Traumatismo endotelial por contusión con petardos.
Endothelial trauma due to a firework contusion.
Gómez ME, Fernández S, Gonzalvo FJ, Sánchez A, Brito C ............................................................................................. 87
Un caso de retinopatía de Purtscher unilateral.
Unilateral Purtscher retinopathy. Case report.
Martín Molina J, López Muñoz D, Nacle Chapero A, Martín Carretero G, Guirado Almansa J ....................................... 91
Retinopatía en enfermo con anemia falciforme. A propósito de un caso.
Drepanocitic retinopathy. Case report.
Martín Carretero G, López Muñoz D, Romero Martínez F, Durbán Armenteras R, Martín Molina J................................ 95
Recuperación del campo visual en una paciente con glaucoma.
Visual field recovery in a patient suffering from glaucoma.
Martínez García A ................................................................................................................................................................ 101
Papilitis unilateral como primer signo de esclerosis múltiple.
Unilateral papillitis as a first manifestation of multiple sclerosis.
Mesa Lugo F, Fernández-Baca G, García Somalo M, Arteaga Hernández V, Rodríguez Martín FJ, Abreu Reyes JA .... 107
Corticoides intralesionales en cicatriz hipertrófica.
Intralesional corticoids in hypertrophic scar.
Pérez Silguero D, Pérez Silguero MA, Jiménez García A, Bernal Blasco I, Pérez Hernández FR, Weill D ..................... 113
DIVULGACIÓN:
Programa de automasaje rápido en el quirófano.
Fast massage-one program in the surgical room.
Grande Baos C ..................................................................................................................................................................... 117
DOSSIER:
Reutilización de dispositivos oftalmológicos de uso único.
Reuse of single-use ophthalmic devices.
Abreu González R, Abreu Reyes JA ................................................................................................................................... 121
oftalmólogos canarios por preparar sus publicaciones, en muchos casos hechas con el esfuer-
zo adicional de no estar habituados a esos menesteres, pero les hemos convencido de que nues-
tra revista puede ser un buen sitio para iniciarse en la difícil tarea de «publicar». Muchos de
los que así lo hicieron en la actualidad son asiduos en «revistas medline».
También agradecer a los compañeros «no isleños» por su alto grado de respuesta a la invi-
tación de participar, pues sus artículos han servido para prestigiarla aún más. La han hecho
suya y sus trabajos llegan de forma espontánea al comienzo de cada primavera.
Nuestro agradecimiento es finalmente extensivo a la Junta Directiva de la Sociedad Cana-
ria de Oftalmología, a los colaboradores de edición, a Audiovisual y Marketing S.L., y a las
firmas comerciales que generosamente contribuyen a la edición de nuestros Archivos.
BIBLIOGRAFÍA
1. Abreu Reyes P. Bienvenida de nuevo (Editorial). Arch. Soc. Canar. Oftal. , 1986-1998; 9: 1.
2. González E. Continuado impulso (Editorial). Arch. Soc. Canar. Oftal., 1999; 10: 1.
3. Méndez González J. La Sociedad Canaria de Oftalmología, el son cubano y la gaita gallega (Editorial).
Arch. Soc. Canar. Oftal., 2000; 11: 1.
4. Barraquer J. Adelantos en cirugía ocular (Editorial). Arch. Soc. Canar. Oftal., 2001; 12: 1.
2
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 5-11 COMUNICACIÓN SOLICITADA
SUMMARY
Clinical classification of dry eye (Grade 1 or subclinical: symptoms only in overexposure. Gra-
de 2 or mild: symptoms in normal environments. Grade 3 or moderate: symptoms and
reversible signs. Grade 4 or severe: symptoms and irreversible signs. Grade 5 or disabling:
symptoms, signs and visual incapacity) has a numerical correlation (number to number)
with impression cytology classification (Grade 1: goblet cells 300-400 cells/mm2 with PAS-
positive cytoplasm, non secretory conjunctival cells with a size of 200-350 µm2, and N:C
ratio of 1:3-1:4; corneal cells with an area of 300-400 µm2 and N:C ratio of 1:4. Grade 2:
goblet cells 200-300 cells/mm2 with PAS-positive cytoplasm, non secretory conjunctival
cells with a size of 350-500 µm2 and N:C ratio of 1:5; corneal cells with an area of 500-
1000 µm2 and N:C ratio of 1:8. Grade 3: goblet cells 50-200 cells/mm2 with PAS-positive
cytoplasm, non secretory conjunctival cells with a size of 500-900 µm2 and N:C ratio of
1:10; corneal cells with an area of 1000-1800 µm2 and N:C ratio of 1:15. Grade 4: goblet
cells 10-50 cells/mm2 with PAS-negative cytoplasm, non secretory conjunctival cells with a
size of 900-1600 µm2 and N:C ratio of 1:20; corneal cells with an area of 1800-2500 µm2
and N:C ratio of 1:20. Grade 5: goblet cells less than 10 cells/mm2 with PAS-positive cyto-
plasm, non secretory conjunctival cells with a size of more than 1600 µm2 and N:C ratio of
1:30; corneal cells with an area of more than 2500 µm2 and N:C ratio of 1:30; cytoplasm
is keratinized).
Correspondencia:
Juan Murube del Castillo
Fundación Rizal
San Modesto, 44, 1.º
28034 Madrid
España
MURUBE DEL CASTILLO J, et al.
El ojo seco, el síndrome oftalmológico ojos seco se superponen varias causas etiopa-
más frecuente, tiene que ser afrontado por togénicas, la suma de las cuales es capaz de
todo oftalmólogo cualquiera sea su subespe- desencadenar la sintomatología de sequedad
cialidad, incluyendo al cirujano refractivo — de superficie ocular —por ejemplo, la suma-
que desencadenará su sintomatología al sec- ción más frecuente es la edad presenil, la
cionar las terminaciones nerviosas cornea- menopausia, y la toma de ansiolíticos o
les—, al estrabólogo —que bajará la secre- antihipertensivos—. Sólo raramente se
ción lacrimal al inyectar toxina botulínica—, encuentra una causa etiopatogénica única.
al cataratólogo —cuyas ocasionales descom- Junto a la determinación etiopatogénica,
pensaciones endoteliales se agravan con la es necesario hacer una clasificación clínica
sequedad de superficie ocular—, al oculo- según la gravedad. Se hace esta clasificación
plástico —del que depende el mantenimien- en 5 estadios (tabla II): 1 o subclínico (sínto-
to o el perfeccionamiento de la cobertura pal- mas sólo en situaciones de sobreexposición),
pebral—, al retinólogo —que alterará las 2 o leve (síntomas en ambientes normales), 3
células madres limbales al hacer perilimbo- o medio (síntomas y signos reversibles), 4 o
tomías—, etc. grave (síntomas y signos irreversibles) y 5 o
Cualquier síndrome clínico de sequedad incapacitante (síntomas, signos reversibles e
ocular, puede deberse a una o a varias de las irreversibles), y disminución de agudeza
aproximadamente 100 causas etiopatogéni- visual (1).
cas de ojo seco, y que el llamado Decálogo La clasificación clínica se hace por los sín-
Etiopatogénico las clasifica en 10 grupos tomas (generalmente obtenidos de la anam-
(tabla I): 1) etarios, 2) hormonales, 3) autoin- nesis) y por los signos (generalmente obteni-
munes, 4) farmacológicos, 5) hiponutriciona- dos de exploraciones instrumentales y de
les, 6) disgenéticos, 7) traumáticos, 8) infla- laboratorio). Entre estas últimas, hay una
matorios, 9) neurodeprivativos y 10) tantáli- exploración de gran interés, que es la citolo-
cos (1). Generalmente, en la mayoría de los gía de impresión, que por falta de demanda
Tabla I. Decálogo Etiopatogénico (clasificación de Madrid) de los síndromes de ojo seco. Los 5 primeros grupos
suelen ser pan-exocrinos y afectar a numerosas partes del cuerpo (ojos, boca, nariz, garganta, bronquios,
vagina, oído externo, piel). Los 5 últimos grupos suelen ser mono-exocrinos, y frecuentemente afectan a un
solo ojo, o a un solo subsistema acuoso, mucoso o lípido
Grado clínico 1 (subclínico): Síntomas de sequedad ocular sólo manifiestos en situaciones de sobreexposición (abrir la ven-
tanilla del coche, ponerse bajo aire acondicionado, usar lentillas de contacto, trasnochar, etc.).
Grado clínico 2 (leve): Síntomas de sequedad ocular en situaciones ambientales normales (picor ocular, fotofobia, sensa-
ción de arenilla, mala visión que mejora al parpadear
Grado clínico 3 (medio): A los síntomas, se añaden signos reversibles (keratopathia punctata, tinción corneal, filamentos
epiteliales, legaña, hiperemia de los trígonos conjuntivales).
Grado clínico 4 (grave): Añade la aparición de signos irreversibles (hipostesia corneal, leucomas corneales, neovasos,
retracción de surcos plico-bulbar y plico-caruncular del lago lacrimal, retracción de pliegues del fórnix conjuntival infe-
rior).
Grado clínico 5 (incapacitante): Añade a las lesiones irreversibles del grado 4 una pérdida de visión permanente (leuco-
mas corneales centrales, ulceraciones incapacitantes) y una queratinización del epitelio corneal que imposibilita sus fun-
ciones biológicas protectoras.
Tabla III. Grado de metaplasia escamosa de las células epiteliales de conjuntiva y córnea, de menor a mayor
afectación
RESUMEN
Objetivo: Comparar los valores del radio corneal posterior obtenidos mediante un cálculo teó-
rico basado en las leyes de la Óptica Geométrica con los medidos experimentalmente con
el Sistema Orbscan II.
Material y Método: El estudio incluye 25 ojos de 14 pacientes. Teóricamente se modeliza la
córnea como una lente gruesa de índice 1.376 formada por dos dioptrios esféricos y situa-
da entre aire y humor acuoso. Se han obtenido individualmente las diferencias absoluta y
relativa (%) entre el radio experimental y el teórico.
Resultados: El valor medio del radio posterior medido experimentalmente con Orbscan II es
6,0 ± 0,4 mm, mientras que el calculado teóricamente es 6,0 ± 0,5 mm. Las diferencias
absoluta y relativa entre ambos valores son: D = 0,3 ± 0,3 mm y d = 4,6 ± 4,8%.
Presentado parcialmente como póster en el 31st Congress of the European Contact Lens Society of
Ophthalmologists, 19 Congreso de la Sociedad Española de Oftalmología, 6.º Congreso Hispano-Luso de
Contactología. 21-23 Junio 2001. Santander (España).
Correspondencia:
Dolores Ortiz Márquez
Grupo de Óptica. Dpto. Física Aplicada
Facultad de Ciencias
C/. Avda. de los Castros, s/n
39005 Santander
España
E-mail: ortizd@unican.es
ORTIZ MÁRQUEZ D, et al.
Conclusiones: El cálculo teórico utilizado para determinar el radio posterior de la córnea es fia-
ble y eficaz ya que proporciona valores muy próximos a los medidos experimentalmente.
SUMMARY
Purpose: To compare the values of posterior corneal radius obtained by a theoretical calcula-
tion based on the Geometrical Optic Laws with the ones measured by the Orbscan System
II.
Methods: This study includes 25 eyes of 14 patients. Theoretically the cornea is considered as
a thick lens with a refraction index of 1.376, formed by two spherical dioptrics and placed
between air and aqueous humour. The absolute and relative (%) differences between expe-
rimental and theoretical radius are individually obtained.
Results: The mean value and standard deviation of the experimental posterior radius are 6.0 ±
0.4 mm, and the theoretical values are 6.0 ± 0.5 mm. The absolute and relative differences
between both radii are: D = 0.3 ± 0.3 mm and d = 4.6 ± 4.8 %.
Conclusions: The reliability and efficacy of the theoretical calculation used to determinate the
posterior corneal radius have been demonstrated. The obtained values are so closed to the
experimental measurements provided by the Orbscan II.
Fig. 1: Modelo
b) Cálculos teórico de la
córnea como una
lente gruesa.
A la hora de obtener teóricamente el radio
posterior de la córnea, se ha utilizado un
modelo que considera la córnea con una len-
te gruesa formada por dos dioptrios esféricos
(caras anterior y posterior) cuyo índice de
refracción es 1.376 (fig. 1).
Para determinar sus distancias focales y su
potencia total se han aplicado las leyes de la donde eco es el espesor corneal (en metros),
Óptica Geométrica teniendo en cuenta que PCO la potencia total de la córnea (dioptrías)
está situada entre dos medios de índices 1 y RCO1 el radio de la cara anterior corneal (en
(aire) y 1.336 (humor acuoso). metros). También se ha realizado el cálculo
Las distancias focales f y f´ de un dioptría de errores que conlleva obtener el radio pos-
esférico 8 vienen dadas por: terior a partir de otros valores medidos con
una cierta precisión.
n? R n' ? R A la hora de comparar los valores del
f = f' = radio posterior medidos con Orbscan con los
n − n' n' − n
(1) calculados teóricamente y estudiar la fiabili-
dad del dicho cálculo, se determinan para
cada caso individual los siguientes paráme-
donde R es el radio del dioptrio y n y n' son tros:
los índices de refracción de los medios a los
que separa. D = / Re – Rt / d= / Re – Rt / * 100 / Re (4)
Por otro lado, la focal imagen fT' de un sis-
tema formado por dos dioptrios esféricos (8) donde D representa la diferencia en valor
es absoluto entre el radio experimental (Re) y el
radio teórico (Rt), y d la diferencia relativa
: – f1' ? f2' expresada en porcentaje.
fT' =
e – f1' + f2
(2)
RESULTADOS
donde f1', f2 y f2' son las focales de los diop- El valor medio y la desviación estándar
trios individuales y e la distancia entre ellos. del radio de la cara posterior de la córnea
A partir de la topografía y la paquimetría medido con Orbscan II es 6,0 ± 0,4 mm, y el
realizadas a cada paciente con el Orbscan, se calculado teóricamente es 6,0 ± 0,5 mm.
determina el radio anterior, la potencia total En la figura 2, se presenta gráficamente la
y el espesor corneales, y por tanto, aplicando comparación de ambos valores para cada
las expresiones (1) y (2) podemos determinar caso individual. Cada uno de los puntos apa-
el radio de la cara posterior RCO2: rece con su barra de error correspondiente.
La línea de puntos representa la recta y = x.
1.336
PCO (eco – 3.66 ? RCO 1 ) Las medias obtenidas para las diferencias
RCO 2 = –0, 03? absoluta y relativa entre ambos valores cal-
1.376
PCO – 3.66 ?RCO 1 culadas caso por caso son: D = 0,3 ± 0,3 mm
(3) y d = 4,6 ± 4,8 %.
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 13-16 15
ORTIZ MÁRQUEZ D, et al.
DISCUSIÓN CONCLUSIONES
Al comparar con otros estudios de la Se ha demostrado que el cálculo teórico
bibliografía, encontramos que los valores utilizado para determinar el radio posterior
obtenidos para el radio posterior de la cór- de la córnea es fiable y eficaz ya que propor-
nea, tanto experimental como teóricamente, ciona valores muy próximos a la medida
son similares a los obtenidos por otros auto- experimentalmente con el sistema Orbscan
res utilizando otro tipo de dispositivos (1,4). II. Este resultado corrobora la validez de los
Hasta ahora el radio de la cara posterior de cálculo teóricos para la caracterización del
la córnea no había podido ser medido, por lo comportamiento del ojo como sistema ópti-
que en la mayoría de los supuestos se le asig- co.
naba un valor teórico fijo. Sin embargo, los
resultados obtenidos mediante el Orbscan
nos indican que hay variaciones interperso- BIBLIOGRAFÍA
nales en los valores del radio posterior.
En nuestro caso, la corroboración experi- 1. Patel S, Marshall J, Fitzke FW, Shape and
mental de la validez de los resultados obteni- radius of posterior corneal surface Refract Cor-
dos para el radio posterior mediante la ecua- neal Surg 1993; 9: 173-181.
2. Royston JM, Dunne MC, Barnes DA. Measure-
ción (3) viene dada por la figura 2. En ella se ment of the posterior corneal radius using slit
nos muestra un buen acuerdo entre los valo- lamp and Purkinge image techniques Ophthal-
res teóricos y los medidos ya que en la mayo- mic Physiol Opt 1990; 10: 385-388.
ría de los casos el valor teórico con su error 3. Camellin M. Proposed formula for the dioptric
incluye al valor experimental. Además la power evaluation of the posterior corneal surfa-
diferencia relativa d obtenida para cada uno ce Refract Corneal Surg 1990; 6: 261-264.
4. Garner LF, Owens H, Yap MK, Frith MJ, Kin-
de los casos individuales muestra un desa- near RF, Radius of curvature of the posterior
cuerdo menor del 5%. surface of the cornea. Optom Vis Sci 1997; 74:
La posibilidad de conocer la topografía de 496-498.
la cara posterior de la córnea presenta una 5. Liu Z and cols. Evaluation of corneal thickness
gran utilidad clínica y una serie de ventajas, and topography in normal eyes using the Orbs-
como por ejemplo, detectar un queratocono can corneal topography system. Br J Ophtalmol
1999; 83(7): 774-778.
posterior subclínico y seguir su evolución,
6. Sistema de Análisis Corneal ORBSCAN II:
evitar las ectasias corneales tras cirugía manual de usuario.
LASIK (9,10) o mejorar el cálculo de lentes 7. Fernández del Cotero JN, Moreno F, Ortiz D,
intraoculares para pacientes ya sometidos a Vélez E, González F, Saiz JM, Velarde JI, de
cirugía refractiva. Valentín-Gamazo L, García-Antón P. '«Geome-
tric ray tracing analysis of visual acuity after
Laser In Situ Keratomileusis»'. J Refract Surg.
2001; 17: 305-309.
8. Óptica. Justiniano Casas. 7.ª Ed. Librería Pons.
Zaragoza, España 1994.
9. Seitz B, Torres F, Langenbucher A, Behrens A,
Suarez E, Posterior corneal curvature changes
after myopic laser in situ keratomileusis. Opht-
Fig. 2: halmology, 2001; 108: 666-672.
Comparación 10. Baek TM, Lee KH, Kagaya F, Tomidokoro A,
gráfica entre el Amano S, Oshika T, Factors affecting the for-
radio posterior ward shift of posterior corneal surface after
experimental y el laser in situ keratomileusis Ophthalmology
teórico. 2001; 108: 317-320.
Cuantificación de la proliferación
celular con PCNA en la neoplasia
intraepitelial córneo-conjuntival
Quantification of cellular proliferation by PCNA in
corneo-conjunctival intraepithelial neoplasia
ABRALDES MJ1, ABDULKADER I1, RODRÍGUEZ-PEREIRA C1
RESUMEN
El anticuerpo monoclonal PCNA reconoce un antigeno nuclear, el cual se expresa en las célu-
las proliferantes. El objetivo de este estudio es evaluar la expresión inmunohistoquímica de
PCNA en la neoplasia intaraepitelial córneo-conjuntival y correlacionar el índice de proli-
feración cuantificado con PCNA con la agresividad del tumor. Nuestros resultados sugie-
ren que no existe una relación entre el índice de proliferación cuantificado con PCNA y los
otros parámetros estudiados.
SUMMARY
The monoclonal antibody PCNA recognizes a nuclear antigen, which is expressed by prolife-
rating cells. The purpose of this study was to evaluate the immunohistochemical expression
of PCNA in corneo-conjunctival intraepithelial neoplasia and to correlate the PCNA proli-
ferative index with the tumor aggressiveness. Our results suggest that there are not a rela-
tionship between PCNA index and the other studied factors.
Correspondencia:
Maximino J. Abraldes López-Veiga
Instituto Gallego de Oftalmología (INGO)
Hospital de Conxo
C/. Rúa Ramón Baltar, s/n
15706 Santiago de Compostela
ABRALDES MJ, et al.
RESULTADOS
Fig. 2:
En todos los casos se realizó el diagnósti- Microfotografía
co de neoplasia intraepitelial, en nueve de en la que pueden
ellos los márgenes de resección quirúrgica observarse los
núcleos de las
no estaban afectados y en uno de los casos se
células
observó que uno de dichos márgenes se neoplásicas
encontraba infiltrado por la tumoración. inmunorreactivos
El tamaño de las lesiones estaba compren- para PCNA
dido en un rango entre los 0,6 y los 2,0 cm de (peroxidasa).
diámetros mayores y entre 0,5 y 1,8 cm de
diámetros menores.
En 2 casos (20%) se observó que la lesión En nuestro estudio no hemos encontrado
afectaba a menos de un tercio del espesor una relación estadísticamente significativa
total del epitelio, en 4 casos (40%) el epitelio entre el índice de proliferación cuantificado
estaba infiltrado por células neoplásicas en con PCNA y los otros parámetros estudiados
las dos terceras partes de su espesor y en (tamaño de la lesión, grado de displasia, reci-
otros 4 casos (40%) el espesor del epitelio diva tumoral y edad de los pacientes). Esto
estaba afectado en su totalidad. pudiera ser debido al pequeño tamaño de la
En 8 de los casos estudiados (80%) se muestra estudiada. Sin embargo, llama la
observó un índice de proliferación de grado atención que en el caso en los que se produ-
2. En los 2 casos restantes (20%) el índice de jo una recidiva tumoral el índice de prolife-
proliferación era de grado 3. No se observó ración era de grado 2 y que en los 2 casos en
ningún caso con un índice de proliferación los que se observó un índice de proliferación
de grado 1. de grado 3 no se haya observado ningún sig-
A los 5 años tras el diagnóstico y la extir- no de recidiva tumoral.
pación quirúrgica sólo uno de los casos había Por tanto, a la vista de nuestros resultados,
recidivado, coincidiendo este caso con el que podemos concluir que las neoplasias intrae-
tenía un borde de resección infiltrado. piteliales córneo-conjuntivales son tumora-
ciones con un índice de proliferación mode-
rado y que o bien PCNA no es un buen mar-
DISCUSIÓN cador de proliferación en este tipo de tumo-
res o bien que el índice de proliferación
El PCNA es una proteína de 36 kD que fue cuantificado con PCNA es independiente del
aislada en el núcleo de células proliferantes comportamiento agresivo que pudiesen expe-
mediante electroforesis tridimensional (2). rimentar dichas lesiones entendiendo por
Se ha demostrado que el PCNA/ciclina es comportamiento agresivo un mayor tamaño
una proteína auxiliar de la polimerasa delta de la lesión, el grado de displasia, la recidiva
(3) que juega un papel crítico en la iniciación tumoral o la potencial transformación malig-
de la proliferación celular (4). Aunque el na y, en lo que se refiere a estos dos últimos
PCNA se correlacionó con la fase S del ciclo parámetros, parece influir más en el pronós-
celular (5) hoy se sabe que, si bien su pico se tico una resección quirúrgica que incluya
encuentra en dicha fase, en realidad se expre- parte de tejido sano, que el índice de prolife-
sa durante todo el ciclo (6). Es expresado, ración que pudiese presentar la tumoración.
por tanto, por todas las células proliferantes,
pero no, por las células quiescentes o en
reposo, es decir en fase G0. Estos hallazgos BIBLIOGRAFÍA
básicos se pudieron aplicar a la inmunohisto-
química cuando se obtuvo un anticuerpo 1. Warnig GO III, Roth AM, Ekins MB. Clinical
monoclonal murino frente a PCNA/ciclina and pathological description of 17 cases of cor-
(7). neal intraepithelial neoplasia. Am J Ophthalmol
RESUMEN
El síndrome de contracción capsular es una reducción exagerada del tamaño de la capsulorre-
xis y del diámetro del saco capsular después de la cirugía extracapsular de la catarata. El
mismo parece ser debido a la transformación fibrogénica de las células epiteliales subcap-
sulares lo que daría origen a un tejido conectivo fibrilar compuesto por miofibroblastos y
sustancias producidas por ellos que incluyen y atrapan la cápsula marginal del cristalino.
Proponemos una clasificación que tiene en cuenta la modificación del tamaño de la capsulo-
rrexis, considerando inicialmente dos subtipos: simétrico y asimétrico En cada uno de los
mismos consideramos tres estadios: leve, moderado y severo.
El manejo de los mismos que nos parece más idóneo es: en el síndrome de contracción capsu-
lar leve seguimiento frecuente, en el moderado interrupción de la continuidad de la capsu-
lorrexis con láser Nd-YAG y en el severo realización de una capsulectomía anterior quirúr-
gica.
SUMMARY
Capsule contraction syndrome is an exaggerated reduction in the anterior capsulectomy and
equatorial capsular bag diameter after extracapsular cataract surgery. The tissue responsi-
Correspondencia:
José A. Abreu Reyes
Avda. Tinguaro, 9
38370 La Matanza de Acentejo (Santa Cruz de Tenerife)
España
E-mail: jabreu@oftalnet.nu
ABREU REYES JA, et al.
ble for the capsule contraction syndrome is made of myofibroblastic cells and other subs-
tances produced by them, having their origin in the transformation of the epithelial cells.
We believe that the capsule contraction syndrome should be classified into two types: sym-
metry or asymmetry. Each one is divided in three levels: mild, moderate or severe.
The mild level only requires frequent follow-up, in the moderate one a small radial anterior Nd-
YAG capsulotomies should be performed, and the severe level requires surgical capsuloto-
mies.
CLASIFICACIÓN
Una vez se ha iniciado un SCC, conside-
ramos que debe manejarse una clasificación
del mismo basada en parámetros anatómicos,
Fig. 2: SCC ya que la alteración estructural no evolucio-
asimétrico. na al mismo tiempo que la funcional como
MANEJO
La actitud ante un SCC depende del esta-
dio en que se encuentre, ya que en el estadio
leve el paciente no refiere alteración funcio-
nal de la visión, en el moderado las observa
con luz mesópica-escotópica y en el severo
es constante. Si es leve es aconsejable un
seguimiento frecuente para evitar que pase
desapercibido a un estadio quirúrgico, si es
moderado debemos interrumpir la continui- Fig. 4: SCC
dad de la CCC con láser Nd-YAG y si es moderado.
severo se realizará una capsulectomía ante-
rior quirúrgica.
El tratamiento del SCC moderado lo hace-
mos con láser Nd-YAG. En el simétrico rea-
lizamos capsulotomías radiales relajantes,
con potencias bajas (0,2-1,2 mJ), en los cua-
tro puntos cardinales (fig. 7) procurando que
las roturas se aproximen al borde de la ópti-
ca, pues si son pequeñas tienen tendencia a
cerrarse. En el asimétrico sólo realizamos
una capsulotomía radial en el centro de la
cápsula anterior contraída.
El tratamiento con láser Nd-YAG es efec-
tivo y rápido, lográndose disminuir la tensión
de la contracción y aumentar el diámetro de
la CCC, aunque no está exento de riesgos,
dependiendo los mismos de la técnica qui- Fig. 5: SCC
rúrgica y de la energía utilizada. severo.
BIBLIOGRAFÍA
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Fig. 7: tages and methods of the continuous circular
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ción capsular: Estudio histopatológico e inmu- Refract Surg 2002; 28: 217-220.
RESUMEN
Objetivo: Estudiar los resultados iniciales de la Lente Fáquica Refractiva (PRL™) implantada
en pacientes miopes no susceptibles de ser corregidos mediante LASIK.
Material y Métodos: A pacientes con miopía, con o sin astigmatismo, en los que existían con-
traindicaciones para el LASIK y que cumplían con los criterios de inclusión, se les ofreció
como alternativa la PRL™. Se analiza la dificultad técnica y las complicaciones per y pos-
toperatorias así como los resultados visuales al mes evaluando el defecto refractivo previo,
la exactitud en el cálculo de la potencia de la PRL™, la mejor agudeza visual (MAV) pre-
operatoria, la AV obtenida sin corrección y la MAV postoperatoria.
Resultados: Se implantó una PRL™ en 12 ojos de 7 pacientes. La dificultad técnica fue baja
y no se presentaron otras complicaciones que edema corneal en 2 casos e iritis leve en otros
2 que cedieron en la primera semana. El defecto refractivo previo medio fue de –13,00 D
(–9,50 / –16,00), el defecto refractivo postoperatorio medio fue –0,06 ± 0,6D (–1,25 / 0,87),
la MAV preoperatoria se mantuvo en 1 caso, mejoró 1 línea en 5, 2 líneas en 4, 3 o más
líneas en otros 2 casos. En ningún caso hubo pérdida de MAV preoperatoria.
Conclusiones: Los resultados iniciales con la PRL™ nos revelan que es técnicamente sencilla
de implantar y muy bien tolerada. El cálculo de potencia es muy bueno y los resultados
visuales sobresalientes, mejorando en el 84% de los casos la mejor agudeza visual preope-
ratoria. Por tanto, a falta de nuestros resultados a largo plazo, creemos que constituye una
clara alternativa cuando el LASIK está contraindicado.
SUMMARY
Purpose: To study the early results with the phakic refractive lens (PRL™) implanted in myo-
pes not candidates for LASIK.
Material and Methods: To myopes with or without astigmatism where Lasik were contrain-
dicated and accomplishing the inclusion criteria, was offered a PRL™ as alternative. Tech-
Correspondencia:
A. Amigó Rodríguez
Instituto Oftalmológico Amigó-Muiños
C/. El Humo 1, 1.º A
38003 Santa Cruz de Tenerife
España
AMIGÓ RODRÍGUEZ A, et al.
nical difficulty, per and postoperative complications and visual results at one month are
analyzed by evaluating the previous refractive defect, the accuracy in PRL™ power calcu-
lation, the best preoperative visual acuity (BPVA), uncorrected postoperative visual acuity
and best postoperative visual acuity.
Results: PRL™ was implanted in 12 eyes of 7 patients. Surgical difficulty was low and no
other complications were observed than corneal edema in 2 eyes and mild iritis in 2 other
that disappeared in the first week. Pre-existent refractive mean defect was –13.00 D (–9.50
/ –16.00), postoperative mean refractive defect was –0.06 ± 0.6D (-1.25 / 0.87), BPVA
acuity did not change in 1 eve, improved 1 line in 5, 2 lines in 4, 3 or more lines in 2. The-
re were no lost of BPVA.
Conclusions: Early results with PRL™ show us that is technically easy and very well tolera-
ted. The accuracy in power calculation is very high and the visual results outstanding,
improving the best preoperative visual acuity in 84% of the cases. Therefore, in awaiting
our long term results, we believe it is a clear alternative when Lasik is contraindicated.
Key words: PRL™, phakic refractive lens, LASIK, myopia, Canary Islands.
MATERIAL Y MÉTODOS
La PRL™ es una lente ultrafina de silico-
na altamente purificada (con un índice
refractivo de 1,46) con curvatura que remeda
Fig. 1: PRL™ la de la superficie anterior del cristalino (fig.
después de la 2). Para la miopía el diámetro de la óptica es
cirugía vista con de 5 mm y la longitud mayor entre hápticos
la pupila en
midriasis
es de 11,3 mm, existiendo un modelo de 10,8
(cortesía Dr. mm para diámetros corneales pequeños, y se
Dementiev). oferta con potencias desde –3,00 D hasta
por irrigación, sin intentar extraer el que pue- miopía ha sido observado en todos los tipos
da quedar bajo la LFR y se inyecta Acetilco- de lentes fáquicas, pero continúa siendo
lina para contraer la pupila y confirmar el cuestionable el que la pequeña diferencia de
centrado de la LFR. La cirugía se concluye posición [de 2,5 mm (cámara anterior) a 4
comprobando la estanqueidad de la incisión mm (cámara posterior)] entre una lente de
y las paracentesis. contacto y la lente fáquica sea la causa única
Los controles postoperatorios que se reali- de este fenómeno.
zan son: primer día, tercer día, primera sema- Otro aspecto importante es la exactitud de
na, primer mes, sexto mes y anual. la corrección expresada en la diferencia del
equivalente esférico pretendido y el obtenido
en el postoperatorio; este resultado da el error
RESULTADOS predictivo de la PRL™ En nuestros casos
puede verse en la tablal I, en la columna error.
Desde el 20 de noviembre de 2001 hasta el En lo referente a complicaciones, hubo
14 de febrero de 2002 fueron intervenidos 12 algunas menores, particularmente en el pos-
ojos de 7 pacientes de los que 4 fueron muje- toperatorio inmediato. En 2 ojos hubo edema
res. La edad media fue de 37 años (31-49). El corneal transitorio que desapareció totalmen-
defecto refractivo medio fue de –13,00 diop- te antes de la primera semana y fue causado
trías de miopía, con un rango de –9,50 a por la disminución de cámara anterior duran-
–16,50 dioptrías. En 1 paciente fue necesario te la implantación debido a incisiones algo
combinar la PRL™ con LASIK para la mayores de 3,5 mm. En 2 ojos se evidenció
corrección del astigmatismo, en este caso los la presencia de una iritis significativa a las 24
resultados que presentamos son previos al horas manifestada por efecto Tyndall ++ en
Lasik (casos 3 y 4). la CA que cedió con tratamiento tópico en el
Los aspectos más importantes de los resul- curso de 48 horas. En 4 ojos existía aún
tados son los resultados visuales (AV sin algún signo de reacción inflamatoria en
corrección, variación de la mejor AV preope- cámara anterior (Tyndall +) a la segunda
ratoria, exactitud en el cálculo del poder de la semana del postoperatorio, habiendo desapa-
lente, que se resumen en la tabla I, y la inci- recido al mes. En ningún ojo hubo reacción
dencia y severidad de las complicaciones. hipertensiva. No se presentó ninguna otra
Resulta de especial interés la ganancia de complicación evidente. Por lo tanto los efec-
líneas de visión que se produce en 11 de los tos adversos fueron escasos y dentro de los
12 ojos intervenidos (84%), que se describe parámetros de seguridad.
en la columna Ganancia MAV de la tabla I. 6 de los ojos presentaron estrechamiento
Este aspecto beneficioso en pacientes con significativo de la cámara anterior por empu-
R. Preop: Refracción preoperatoria; MAV Preop: Mejor AV preoperatoria; Target: Objetivo refractivo postoperatorio; R. postop: Refracción
postoperatoria; Avsc Postop: AV sin corrección postoperatoria; MAV Postop: Mejor AV postoperatoria; Error: Diferencia entre el objetivo
refractivo y el equivalente esférico obtenido postoperatoriamente.
Facoemulsificación bajo
crioanestesia: nuestra experiencia
Phacoemulsification under cryoanalgesia:
our experience
ÁLVAREZ MARÍN J1, MONTESINOS VENTURA BM2, GUTIÉRREZ CARMONA FJ1
RESUMEN
El presente trabajo describe una nueva técnica de analgesia para la cirugía de la catarata, desa-
rrollada sin la aplicación de la anestesia farmacológica ni siquiera anestesia tópica.
Consiste en la instilación de suero frío a 4ºC durante la cirugía reglada de la facoemulsifica-
ción independientemente del tipo de técnica y parámetros empleados. Sin embargo, es
necesario desarrollar la facoemulsificación a través de una incisión corneal clara para evi-
tar tocar la conjuntiva o la esclera.
Este método novedoso,«la crioanalgesia» para la cirugía de la catarata ha obtenido hasta aho-
ra excelentes resultados en términos de confortabilidad de los pacientes y satisfacción del
cirujano.
SUMMARY
The present report describes a new analgesia technique for cataract extraction whereby surgery
is performed without the application of pharmacological anaesthesia (not even topical).
The technique involves previous cooling of the solutions to be instiled in surgery to around 4
degrees. Phacoemulsification may be conducted according to any surgical procedure: chip
and flip, divide and conquer, chop, etc. Nevertheless, it is important to perform phacoe-
mulsification through a clear corneal incision, to avoid touching the conjunctiva or sclera,
and the use of forceps to hold the eyeball. This novel method of cryoanalgesia for cataract
surgery has so far yielded excellent results in terms of patient and surgeon satisfaction.
Correspondencia:
Blanca María Montesinos Ventura
Sta. Teresa de Jornet Ibars N.º 9 2.º D
38004 Santa Cruz de Tenerife
España
E-mail: blancamv@comtf.es
ÁLVAREZ MARÍN J, et al.
Fig. 1.
TÉCNICA QUIRÚRGICA
(figs. 2-9)
Para llevar a cabo la cirugía (8), es nece-
sario que previamente todas las soluciones a
instilar, excepto las gotas de povidona yoda-
da, se enfríen a una temperatura de 4ºC. Fig. 4.
La Paracentesis
La capsulorrexis y la hidrodisección
nuclear
La facoemulsificación nuclear
Aspiración cortical
N= 82.
N= 82.
El 95,23% de los pacientes operados con Brothers Medical Publishers (2end ed), New
sueros fríos se volverían a operar con crioa- Delhi; 2000; 23: 226-229.
nalgesia versus 97,5% en anestesia tópica. 4 To Tovar EA, Róete RA, Weissig MD, Lloyd
RE, Patel GR:One day admission for lung
También destacar que el estrés del ciruja- lobectomy-an incidental result of a clinical
no es similar operando con anestesia tópica o pathway.Ann Thorac Surg 1998; 65(3): 803-
con crioanalgesia (no diferencias estadística- 806.
mente significativas). 5. Tovar EA, Róete RA, Weissig MD, Lillie Mj,
Dabbs Moyer Ks, Lloyd RE, Patel GR. Mus-
clesparing minithoracotomy with intercostals
nerve cryoanalgesia-an improved method for
BIBLIOGRAFÍA major lung resections. Am Surg 1998; 64(11):
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Jaypee Brothers Medical Publishers (1st ed), 536.
New Delhi 1998; 144-154. 8. Gutiérrez Carmona FJ. Facoemulsificación con
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ract Surgery. In: Phacoemulsification,Laser tesia en Oftalmología. Comunicación solicitada
Cataract Surgery and Foldable ILOs. Jaypee SEO 2000; 72-76.
RESUMEN
Presentamos mediante un estudio retrospectivo nuestra experiencia en cirugía del cristalino
transparente para corregir grandes ametropías, en un conjunto de pacientes intervenidos
durante el año 2001, valorando el resultado refractivo y visual así como analizando una
serie de variables pre, intra y postoperatorias.
SUMMARY
We present by means of a retrospective study our experience in clear lens surgery to correct
high myopia or hyperopia, in a set of patients operated at 2001, valuing the final refractive
and visual state, and analysing a series of variables before, during and after surgery.
Instituto de Cirugía Refractiva J. Vicente Rodríguez Hernández. Las Palmas de Gran Canaria.
1 Licenciado en Medicina y Cirugía.
2 Doctor en Medicina y Cirugía.
Correspondencia:
Humberto Carreras Díaz
C/. Concepción Arenal, 20. Edif. Cantabria
35006 Las Palmas de Gran Canaria
España
CARRERAS DÍAZ H, et al.
pueden ser por ejemplo una baja rigidez anamnesis, una correcta exploración oftal-
escleral, la mayor profundidad en la cámara mológica previa y una exhaustiva explica-
anterior, una mayor elasticidad en la cápsula ción al paciente de quien se requiere además
anterior y una mayor tendencia a presión una adecuada motivación.
vítrea positiva que presentan los ojos con alta
miopía, así como la posibilidad de lesiones
retinianas y la mayor dificultad en el cálculo MATERIAL Y MÉTODO
biométrico. Con todo ello la extracción de
cristalino transparente es una posibilidad Hemos realizado un estudio retrospectivo
más a ofertar en el campo de la cirugía del total de pacientes operados de cirugía del
refractiva a una serie de pacientes, cuya cristalino transparente durante el año 2001
selección ha de estar basada en una buena resultando un total de 31 ojos correspondien-
tes a 19 pacientes, de los cuales 9 son hombres
(47,4%) y 10 son mujeres (52,6%) (fig. 1).
Hemos considerado como variables la pro-
porción de ojos derecho e izquierdo; la edad;
la refracción prequirúrgica; la agudeza visual
prequirúrgica; la longitud axial; el tipo de
lente intraocular implantada; la potencia de
la LIO; la refracción postquirúrgica y la agu-
deza visual postquirúrgica (tabla I).
Hemos analizado también la incidencia de
complicaciones intraoperatorias, consideran-
Fig. 1. do como tales la rotura de cápsula posterior
Tabla I.
Nom. Ojo Sexo Edad Refracción pre AV L. Axial Modelo LIO Potencia Refracción post AV
GCG D FEM 30 175º - 2 - 9 0,7 26,14 AMO ARRAY 9,5 155º - 2,25 0,65
JVH D MASC 33 20º - 1,25 - 12 0,4 dif 29,02 AMO ARRAY 7 180º - 0,50 - 1,50 0,6
JVH I MASC 33 140º - 1,25 - 18 0,3 32,61 SIN LIO 110º - 1 0,6
CVV D FEM 49 180º - 0,50 + 8,25 0,6 20,02 Corneal ACR6D 40 Sin corrección 0,6
CVV I FEM 49 170º - 1,50 + 8,50 0,6 20,14 Corneal ACR6D 38 Sin corrección 0,6
ECT I FEM 26 - 16,25 0'4 27,25 AMO ARRAY 6,5 - 1,25 0,6 dif
JOS D MASC 55 125º - 1,50 - 12 0,5 28,46 ACRYSOF 4 Sin corrección 0,5
CNS D FEM 37 50º - 1,25 - 23,75 0,6 31,87 ACRYSOF -4 115º - 0,50 + 1,50 0,9 dif
CNS I FEM 37 135º - 1 - 23,25 0,6 32,51 ACRYSOF -5 100º - 1 + 1,50 0,7 dif
RZV D MASC 50 80 º - 1 + 8 0,25 21,96 Corneal ACR6D 31 85º - 1,50 0,4 dif
RZV I MASC 50 0 +6 0,63 22,01 Corneal ACR6D 31 0 +1 0,7 dif
ASA D MASC 29 35º - 1,75 - 14,25 0,15 30,82 ACRYSOF 0 5º - 0,50 0,8
ASA I MASC 29 140º - 0,50 - 15,50 0,6 29,84 ACRYSOF 3 - 2,50 0,7
LNC D FEM 32 175º - 2 - 14 0,4 29,03 ACRYSOF 3 Sin corrección 0,4
LNC I FEM 32 180º - 3 - 9,50 0,7 27,22 ACRYSOF 8 175 º - 1,50 0,7
ASV D MASC 22 175º - 1,50 - 13 0,6 28,87 AMO ARRAY 6,5 Sin corrección 1
VGP D MASC 27 155º - 1,25 - 13 0,4 28,88 AMO ARRAY 6 155º - 1,25 0,75
GSB D FEM 57 100º - 2 + 7,50 0,6 21,86 AMO ARRAY 27 100 º - 2 + 0,50 0,55
GSB I FEM 57 35º - 2,50 + 6,50 0,7 dif 21,31 AMO ARRAY 28 50º - 1,50 0,6
ALS D MASC 62 0 + 1,50 0,9 21,73 AMO ARRAY 24,5 Sin corrección 0,85
ALS I MASC 62 0 + 1,25 0',85 21,55 AMO ARRAY 23 Sin corrección 0,85
ESD D MASC 61 180 º - 2 - 1,75 0,5 dif 25,11 AMO ARRAY 16,5 145º - 1,25 + 0,50 0,4
ESD I MASC 61 125º - 0,50 - 7,50 0,4 28,32 AMO ARRAY 6,5 122º - 1,50 + 0,50 0,65
AHC D MASC 52 0 +6 0,7 19,88 Corneal ACR6D 39 100º - 0,50 - 4,50 1 dif
AHC I MASC 52 90º + 0,50 + 5,75 0,8 dif 20,20 Corneal ACR6D 36 75º - 0,50 - 3 1 dif
EGA D FEM 45 -14 0,3 dif 26,65 ACRYSOF 11 Sin corrección 1
EGA I FEM 45 -9 0,7 dif 25,86 ACRYSOF 13 110º - 1 1 dif
TRH I FEM 44 10 º - 1,50 - 16 0,2 29,77 ACRYSOF 3 170 º - 1 0,4
APC I FEM 47 135º - 2 - 8,50 0,4 26,91 ACRYSOF 9 Sin corrección 1
GSR D FEM 43 -12 0,1 30,55 Corneal ACR6D 3 175º - 1 - 0,25 0,7
GSR I FEM 43 -10 0,3 28,14 ACRYSOF 7 135º - 1,50 1 dif
Nom. Ojo Edema CA Infección Hto. EMQ OP. CP DR Error Refractivo Explante Otros
cabría esperar por las características anatómi- cuente en esta cirugía toda vez que el cálculo
cas del ojo miope magno. Se correspondían biométrico de estos ojos es complejo dadas
con 2 pacientes: uno el mismo que presentó las peculiaridades anatómicas de los mismos.
el prolapso de iris y que fue anteriormente Es importante adecuar las fórmulas utilizadas
comentado, y otro fue una paciente con mala a la longitud axial de cada ojo, repetir la bio-
colaboración por un marcado cuadro de metría hasta obtener datos coincidentes y que
ansiedad durante las intervenciones. dicho cálculo sea realizado siempre por una
En cuanto a las complicaciones postopera- misma persona experimentada.
torias sólo un ojo presentó edema corneal en Hemos reseñado también los pacientes que
el postoperatorio inmediato (3,2%), así como en el ojo contralateral se les realizó cirugía
reacción en cámara anterior (3,2%) y que fue refractiva mediante LASIK cuando el estudio
el mismo que tuvo una cirugía más laboriosa preoperatorio así lo permitía, siendo ambas
por el cuadro de hipertensión ocular aguda técnicas combinables y con buen grado de
intraoperatoria. Ambas complicaciones se satisfacción final por parte del paciente.
vieron resultas a los pocos días mediante los
tratamientos habituales para las mismas.
La incidencia de infecciones postoperato- CONCLUSIÓN
rias fue nula.
La hipertensión ocular fue la complica- La cirugía del cristalino transparente o
ción más frecuentemente detectada, pues se semitransparente es una buena técnica de
apreció en 8 ojos (25,8%). No obstante esta cirugía refractiva en aquellos casos en que la
hipertensión ocular fue asociada al uso de gran ametropía existente no permite realizar
corticoides tópicos en el postoperatorio, más un LASIK, representando una alternativa al
frecuente en pacientes jóvenes y finalmente mismo así como al implante de lentes intrao-
reversible al suspender los mismos, sustitu- culares fáquicas.
yéndolos por alguno de los diferentes AINES Los importantes avances en la facoemulsi-
tópicos disponibles en el mercado. ficación permiten brindar una técnica muy
No se apreció ningún caso de edema segura, con una escasa incidencia de compli-
macular quístico. caciones. No obstante, y como en toda ciru-
La opacificación de la cápsula posterior gía intraocular, se requiere un cirujano expe-
apareció en 2 ojos (6,4%) que fueron los mis- rimentado y una técnica depurada, que se
mos con cirugía más laboriosa y en los que acompañe de un buen estudio previo y de un
no se pudo insistir en el pulido capsular. En estrecho seguimiento, además de una ade-
ambos se realizó capsulotomía con láser yag cuada motivación por parte del paciente, para
según método habitual sin ninguna compli- minimizar los riesgos inherentes a todo acto
cación añadida. quirúrgico.
La incidencia de desprendimiento de reti-
na fue nula.
El error refractivo se produjo en 8 ojos
(25,8%), considerándose el mismo cuando el BIBLIOGRAFÍA
valor de la esfera en la refracción final era
1. Menezo JL, Güell JL Corrección quirúrgica de
superior a ±0,5 dioptrías. El rango de error
la alta miopía. Espaxs 2001.
osciló entre las –4,50 y las +1,50 dioptrías. 2. Gris O, Güell JL, Manero F, Müller A. Clear
No fue preciso el explante de ninguna LIO lens extraction to correct high myopía. J Cata-
subsanándose los 2 casos en que el error fue ract Refract Surg 1996; 22: 1411-1415.
más marcado mediante LASIK postoperato- 3. Lyle WA, Jin GJC. Clear lens extraction to
rio. En el resto, el grado de miopía residual no correct hyperopia. J Cataract Refract Surg
1997; 23: 1051-1056.
supuso un excesivo inconveniente para los
4. Menezo JL, Cisneros A, Harto M. Extracapsu-
pacientes pues les sirvió para compensar la lar cataract extraction and implantation of a
pérdida de acomodación. En cualquier caso, lower power lens for high myopía. J Cataract
la sorpresa refractiva es relativamente fre- Refract Surg 1988; 14: 409-412.
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 41-45 45
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 47-54 ARTÍCULO ORIGINAL
RESUMEN
Objetivo: Calcular la incidencia del pterigión quirúrgico en la Isla de La Palma y estudiar si
existen diferencias estadísticamente significativas entre los municipios de la Isla.
Material y métodos: Se realizó un estudio de cohortes retrospectivo, revisando los libros de
quirófano y las historias clínicas de aquellos pacientes operados de pterigión entre el 1 de
enero de 1991 y el 31 de diciembre de 2000 (10 años). Todos los pacientes han sido opera-
dos en el Hospital General de La Palma.
Resultados: El número de casos de pterigión operados fue un total de 581, correspondiendo el
58,69% (341 casos) a mujeres y el 41,31% (240 casos) a varones. Se obtuvo una asociación
estadísticamente significativa entre el número de casos de pterigión operados y el sexo
femenino, chi-cuadrado = 16 (intervalo de confianza del 99% para una p<0,01).
La incidencia quirúrgica acumulada fue de 7,4/1000 habitantes en los 10 años (0,74/1000
hab./año) la duración media de la enfermedad desde su inicio hasta la cirugía fue estimada
en 10±0,6 años (IC del 95%), lo que nos muestra una prevalencia quirúrgica del 7,4 ‰.
Se comparó el lado oeste de la isla con el lado este obteniéndose una χ2 = 27,25 (IC del 99%,
p<0,01). La incidencia quirúrgica en el lado oeste fue 0,89/1000 hab./año, en el lado este
fue de 0,58/1000 hab./año.
El Riesgo Relativo (RR) obtenido del área oeste respecto al área este fue de 1,53.
Conclusiones: Existe una asociación estadísticamente significativa entre el número de casos
operados de pterigión y el lugar de residencia.
El número de casos operados en el lado oeste es significativamente mayor respecto al lado este
de la Isla.
La cantidad de operaciones fue significativamente mayor en la población femenina.
Correspondencia:
Francisco A. León Hernández
Hospital Virgen de las Nieves
S/C de La Palma (Islas Canarias)
España
DOMÍNGUEZ GONZÁLEZ JJ, et al.
SUMMARY
Purpose: The aim of our research is to know the incidence of surgical pterigya in La Palma
Island. We study if exist estadistical diferents between of the municipal distrits of the
Island.
Material and methods: A retrospective cohorts study was performed, by using the medical
history of patients operated of pterigya during ten years (01-01-91 to 31-12-00) both inclu-
ding. All the patients were operated at La Palma General Hospital.
Results: The number of perigya operated were 581, 58.69% (341) female and 41.31% (240)
male.
We found a significant statistical association between number of operated pterigya and fema-
le, chi-square = 16 confidence interval (CI 99% P<0.01).
The surgical incidence (SI) was 0.74/1000 inhabitans/year. The mean time evolution from begi-
ning of pterigya to surgical day were calculated in 10±0.6 years (CI 95% p<0.001). The sur-
gical prevalence were 7.4/1000.
We compare the West side of island with the East side founding significant differences, χ2 =
27.25 (CI 99%, P<0.01). The SI West side 0.89/1000 inhab./year, the SI East side 0.58/1000
inhab./year.
The relative risk of west side respect to east side were 1.53.
Conclusions: There is a significant statistical association between number of operated pterig-
ya respect to residential place.
The number of operated cases in the West side is significant greater than East side.
There are more operated cases of pterigya in female than in male.
da, invasión local, alto grado de angiogéne- podían influir en la formación del pterigión,
sis, características clínicas como gran ten- no parecen estar claramente implicados en
dencia a la recidiva (9) y los tipos de trata- esta patología (28).
miento usados tales como excisión extensa,
radioterapia y quimioterapia local son típicas
de enfermedades neoplásicas (10-13). CLÍNICA
Además se ha encontrado en el pterigión
una inestabilidad microsatélite y una pérdida El crecimiento del pterigión y su invasión
de heterozigosidad, ambos hallazgos comu- corneal se acompaña de frecuentes episodios
nes en tejidos tumorales (14). de «ojo rojo», sensación de cuerpo extraño,
Dushku y cols. y Tan y cols. describen una astigmatismo irregular por invasión corneal,
alta expresión de P53 en el epitelio limbar alcanzando en ocasiones, el área el eje visual
del pterigión lo que indicaría la probable corneal, lo que puede provocar una impor-
existencia de una mutación a nivel del P53 en tante disminución de la agudeza visual.
estas células. Esto estaría en consonancia En los casos más agresivos puede aparecer
con los efectos mutagénicos que la RUV simbléfaron, dificultando la motilidad ocular
posee sobre el gen del P53 (15,16). Estas y provocando incluso diplopía (3).
lesiones inducirían a su vez mutaciones en
otros genes que se irían produciendo progre-
sivamente, lo que permitiría el desarrollo TRATAMIENTO Y RECIDIVA
multisecuencial del pterigión y los tumores
limbares (17,18). El alto grado de recidiva se Los tratamientos descritos han sido nume-
explicaría por la excisión incompleta de estas rosos, siendo uno de los mayores problemas
células madres limbales mutadas (19,20). de todos ellos el alto porcentaje de recidivas
y las complicaciones derivadas de las dife-
rentes técnicas quirúrgicas (1).
EPIDEMIOLOGÍA El tratamiento médico se limita a los epi-
sodios de «ojo rojo» y crisis de inflamación
El pterigión está presente a nivel mundial, que sufren los pacientes, usando para ello,
pero es más común en climas cálidos y secos, antiinflamatorios esteroideos y no esteroideos
predominando en países comprendidos entre tópicos y lágrimas artificiales (3).
los 40º de latitud norte y sur. Más frecuente La protección de los rayos UVA y UVB
en el ámbito rural que en el urbano, no suele con gafas de sol con transmisión por debajo
haber predominio entre sexos cuando las de los 400 nm pueden evitar, sobre todo en
condiciones de vida son similares (21). los climas soleados, las lesiones agudas por
La prevalencia en la población china de la luz solar y ser útiles en la prevención de la
Singapur es del 7%, en la región de las mon- degeneración actínica (26,29).
tañas azules en Sidney (Australia) es del
7,3%, en Victoria (Melburne, Australia) es
del 6,7% y mucho más frecuente, alcanza un MATERIAL Y MÉTODOS
56%, en la población esquimal de Groenlan-
dia (22-25). San Miguel de la Palma es la isla más
Factores externos como la exposición al noroccidental del archipiélago canario.
polvo, la sequedad ambiental, la radiación Situada entre los 27º 38’ 10" de latitud norte
ultravioleta (RUV) y factores endógenos y los 18º 9’ 33" de longitud oeste. Presenta
como la edad, una mayor proximidad de la un clima subtropical. Su población autóctona
inserción tendinosa al limbo esclerocorneal y se aproxima a los 79.000 habitantes, reparti-
una susceptibilidad genética, se han propues- dos en 14 municipios. Orográficamente (fig.
to como elementos asociados a la patogéne- 1), por medio de una Cordillera Central,
sis del pterigión (2,5,7,26,27). Los defectos podemos dividir la isla en dos áreas bien
de la lágrima, que en su momento se pensó delimitadas, área oeste y área este.
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 47-54 49
DOMÍNGUEZ GONZÁLEZ JJ, et al.
RESULTADOS
El número de casos de pterigión operados
durante los 10 años estudiados en la isla de La
Palma fueron un total de 581, correspondien-
Fig. 1: Isla de San do el 58,69% (341 casos) a mujeres y el
Miguel de la
Palma. Geografía
41,31% (240 casos) a varones. Se obtuvo una
y poblaciones más asociación estadísticamente significativa entre
importantes. el número de casos de pterigión operados y el
sexo femenino, chi-cuadrado = 16 (intervalo
de confianza del 99% para una p<0,01).
La incidencia quirúrgica acumulada fue de
En la tabla I mostramos el número de 7,4/1000 habitantes en los 10 años,
habitantes por municipio. (0,74/1000 año) la duración media de la
El Hospital General de La Palma es el cen- enfermedad desde su inicio hasta la cirugía
tro de referencia donde se realiza la cirugía fue estimada en 10±0,6 años (IC del 95%).
oftalmológica en la isla, no existiendo otros Prevalencia quirúrgica 7,4/1000.
centros, públicos o privados que la practi- Los municipios de la isla con mayor
quen, por lo que todos los pacientes de nues- número de casos de pterigión operados fue-
tro estudio han sido intervenidos en dicho ron Tazacorte (área oeste, 81 casos), Los Lla-
Centro Sanitario. nos de Aridane (área oeste, 147 casos) y San-
Se realizó un estudio de cohortes retros- ta Cruz de La Palma (área este, 95 casos). Se
pectivo, revisando los libros de quirófano y compararon los municipios con mayor
las historias clínicas de aquellos pacientes número de casos para comprobar si existía
operados de pterigión entre el 1 de enero de asociación entre el número de operaciones de
1991 y el 31 de diciembre de 2000 (10 años). pterigión y el lugar de residencia, en función
Los datos obtenidos fueron: edad en el del número de habitantes (tabla II). Para ello
momento de la intervención, tiempo de evo- se utilizó la prueba de chi-cuadrado para
lución, sexo, municipio de residencia duran- variables cualitativas 2 x 2 (población sana,
te los últimos 10 años. Al no poderse obtener población operada de pterigión). Se comparó
de forma fiable la profesión de todos los Tazacorte con Santa Cruz de La Palma obte-
pacientes se optó por no incluir este dato en niéndose una χ2 = 24,18 (IC 99%, p<0,01);
el presente estudio. Tazacorte con Los Llanos de Aridane χ2 =
Se obtuvieron tablas de datos relacionan- 10,2 (IC 95%, p<0,05); Tazacorte con el total
do sexo-municipio, edad-sexo, municipio- de la isla χ2 = 26,2 (IC 99%, p<0,01). Los
edad, área oeste-área este. Se analizaron los Llanos y Santa Cruz de La Palma comparán-
datos mediante cálculos estadísticos (chi- dose con el total de la isla no reflejaron dife-
ÁREA OESTE Municipio Número de habitantes ÁREA ESTE Municipio Número de habitantes
Tazacorte 24,18 (IC 99% p<0,01) 10,2 (IC 99% p<0,01) 26,20 (IC 99% p<0,01)
Puntagorda 14,00 (IC 99% p<0,01) No significativo 10,43 (IC 99% p<0,01)
Fuencaliente 13,27 (IC 99% p<0,01) No significativo 10,50 (IC 99% p<0,01)
Tabla V. Relación sexo-municipio y los casos de pterigión intervenidos. Cálculo de Índice Hombre:Mujer (ratio
H:M)
Municip. 0-10 11-20 21-30 31-40 41- 50 51-60 61-70 71-80 > 81 Total %
ción esquimal llega hasta el 41% y 56% res- (el mar o llanos despejados con poca vegeta-
pectivamente (22-25). ción, desiertos y parajes nevados) (30).
En nuestro estudio hemos calculado la Algunos de estos factores se pueden apli-
tasa de incidencia así como la prevalencia del car a la orografía y meteorología de la isla.
pterigión quirúrgico en nuestra isla, obte- En la zona oeste hay más días despejados y
niendo una tasa de incidencia del 0,74/1.000 la superficie es más llana, Tazacorte está en
habitantes/año, en función de la duración la costa y el horizonte es visible sobre el mar
media de la enfermedad hasta la cirugía que casi todo el año, la actividad pesquera en este
se calculó en 10±0,6 años (IC 95%), obtuvi- municipio es la más importante de la isla por
mos la prevalencia quirúrgica que se sitúa en lo que podría explicar el mayor número de
el 7,4±0,6‰ . casos operados en varones en este lugar.
Hemos observado la existencia de asocia- Por el contrario el área este presente más
ciones estadísticamente significativas entre nubosidad diurna, muchos de los municipios
las distintas zonas de la isla y el número de están situados en la falda de montañas altas y
intervenciones de pterigión y una mayor can- la superficie de reflexión es menor. La activi-
tidad de operaciones en la población femeni- dad agrícola al aire libre es mayor en el área
na. oeste.
Por edades, observamos un mayor número Estos factores explicarían por qué munici-
de intervenciones a partir de los 41 años has- pios con más habitantes en el área este pre-
ta los 70 años, lo cual concuerda con estudios sentan menos casos operados que otros pue-
previos (23), si bien en los grupos de edad blos en la zona oeste con menos habitantes.
comprendidos entre los 51-60 años y los 61- En otros estudios el porcentaje de casos de
70 años el número de operaciones es signifi- pterigión en la población masculina es mayor
cativamente mayor en la población femeni- que en la femenina (23,24), pero en nuestro
na, no observándose tales diferencias en el trabajo la mayor parte de las operaciones lle-
resto de los grupos de edad. vadas a cabo fueron en mujeres. La posible
También comprobamos que hay un mayor explicación para estos datos sería que en
número de casos de pterigión operados en nuestro medio el pterigión es más prevalente
pacientes procedentes del área oeste con una en la población femenina o bien que las
diferencia estadísticamente significativa res- mujeres deciden operarse por motivos estéti-
pecto al área este. cos con más frecuencia que los hombres y
Vimos que la mayor cantidad de casos que éstos esperan más a criterios clínicos.
operados provenía de la zona oeste, que es la
zona que tiene una mayor cantidad de días
soleados al año en comparación con la zona CONCLUSIONES
este. El municipio de la isla que más casos
presentaba en proporción a su población fue • Existe una asociación estadísticamente
Tazacorte, que es el lugar con más días de sol significativa entre el número de casos opera-
anual de toda la isla. dos de pterigión y el lugar de residencia.
Factores geométricos determinan la expo- • El número de pacientes operados en los
sición del ojo a los rayos UV, se sabe que las municipios de Tazacorte, Puntagorda y Fuen-
nubes redistribuyen los rayos hacia el hori- caliente son significativamente más altos de
zonte y el grado de apertura de los párpados lo que cabría esperarse en función de su
limita la exposición solar a los rayos con población al compararse con el total de habi-
ángulos cercanos al horizonte, las montañas, tantes de la isla.
valles profundos, bosques y edificios altos • El número de casos operados en el lado
protegen los ojos de la exposición directa a la Oeste es significativamente mayor respecto
luz solar. Por todo esto, la mayor exposición al lado este.
a los rayos UV ocurre durante los días des- • La cantidad de operaciones fue signifi-
pejados, cuando el horizonte es visible, y cativamente mayor en la población femeni-
cuando la superficie de reflexión es mayor na.
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 47-54 53
DOMÍNGUEZ GONZÁLEZ JJ, et al.
• Los municipios de la isla que presentan 15. Dushku N, Reid TW. P53 expression in altered
mayor índice de luminosidad, son los que limbal basal cels of pingueculae, pterygia, and
tienen una mayor incidencia quirúrgica de limbal tumors. Curr Eye Res 1997; 16: l179-1192.
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RESUMEN
Introducción-objetivos: El resultado final de la facoemulsificación bajo anestesia tópica
depende no sólo de la habilidad quirúrgica de cirujano sino también de la colaboración del
paciente. Nuestra obligación como oftalmólogo es intentar predecir el comportamiento que
va a tener el paciente, fomentar la colaboración e intentar mejorarla, aunque siempre nos
van a quedar algunos casos imprevisibles y otros irresolubles.
En este trabajo vamos a presentar nuestra experiencia en el tema y las medidas de detección,
fomento y mejora de la colaboración que proponemos.
Descripción: Basándonos en nuestra experiencia y en la escasa bibliografía que hemos encon-
trado describimos 11 medidas para evaluar el grado de colaboración prevista en la cirugía
a partir de la historia clínica y de las primeras manifestaciones del paciente al llegar al
recinto quirúrgico. A continuación presentamos 12 medidas para fomentar la colaboración,
11 para mejorarla y 10 para combatir la insubordinación.
Discusión-comentarios: A veces pensamos que hay cirujanos que disponen de una especie de
sexto sentido que le avisa cuándo un paciente va a ser poco colaborador. Por otra parte tam-
bién sabemos que existen algunos cirujanos que poseen un don especial y consiguen que
«todos» los pacientes se conviertan en colaboradores. En realidad lo que hacen es poner en
practica automática y silenciosamente un plan similar al que hemos propuesto.
Correspondencia:
Carlos Grande Baos
C/. Rey Francisco, 29
28008 Madrid
España
GRANDE BAOS C
Además de esta sistematización y protocolización del plan para mejorar la colaboración, ana-
lizamos el dilema médico-legal que se plantea cuando surge una complicación debida a la
falta de colaboración.
SUMMARY
Introduction-objective: The final result of phacoemulsification under topical anaesthesia
depends of the surgical skill and the patient cooperative behavior. The ophthalmologist
must know the forecasting of cooperative behavior, must foment the patient collaboration
and must improve it, although there are always some unforeseeing and unsolvable cases.
We present our experience and some different techniques to predict, foment and improve the
patient collaboration.
Description: Based on our experience and on the short bibliography we propose 11 steps to
predict the patient’s cooperation from the medical report and the first behavior in the sur-
gical room. Moreover, we present 12 steps to foment the collaboration, 11 to improve it and
10 to combat patient insubordination.
Discussion-comments: Sometimes we believe that several surgeons have a sixth sense to
detect a bad patient’s cooperation. Furthermore we believe that several surgeons have a spe-
cial natural gift to transform all patients on good cooperators. Really they employ automa-
tically a similar plan.
Moreover of this plan we analyze the medico-legal dilemma surged when a surgical complica-
tion is caused for a bad patient collaboration.
a un sitio escuchando siempre su nombre (en • Avisar que ya queda muy poco para
la consulta podemos usar el «don» pero en la finalizar, pero sin mentir.
mesa de quirófano pensamos que es mejor • Podemos probar con una sedación intra-
omitirlo) y la coletilla «por favor». Considera- venosa suave, evitando siempre que se desco-
mos que no es aconsejable el empleo de pala- necte, en ocasiones es útil un mero placebo.
bras como «abuelo», «hijo», «amigo», «cari-
ño» o «señor» para dirigirnos al paciente.
• Levantar los paños de la boca: las perso- ¿Cómo combatir la insubordinación?
nalidades claustrofóbicas se agobian si los
paños están próximos a los labios. A pesar de todo nos encontramos con
• Instilación de colirio anestésico en el algunos pacientes con gran ansiedad que
ojo adelfo: en algunas ocasiones sirve para muestran una insubordinación total, pero
disminuir el blefaroespasmo. tampoco debemos alterarnos y si nos ocurre
• Es muy relajante ordenarle o permitirle no puede enterarse el paciente. El método a
unos movimientos de los ojos y un alivio de seguir ahora es el del ensayo y el error, es
las tensiones musculares entre los distintos decir, probar con una serie de medidas algo
tiempos quirúrgicos. más arriesgadas y continuar según el efecto
que hayan tenido.
• Profundizar la anestesia al máximo
¿Cómo mejorarla? incluyendo si fuese preciso una aquinesia del
nervio facial.
Cuando vemos que la colaboración del • Profundizar la sedación, aunque exista
paciente no es buena no debemos perder la el riesgo de que se duerma.
calma porque disponemos de un arsenal de • No hablar de resultados: nunca comen-
medidas que nos permite mejorarla: tar que ya se ha estropeado.
• Preguntar si sufre dolor ocular: en caso • Animar: convencerle en que lo puede
afirmativo tenemos que profundizar la anes- conseguir y que todavía está a tiempo, nunca
tesia rápidamente. desanimarle ni humillarle.
• Investigar si presenta dolores osteoarti- • Implicar al paciente en la cirugía: decir-
culares: en ese caso hay que tratarlos sin le que de él depende el resultado final.
dilación. • Aludir a riesgos y complicaciones: sin
• Indagar con delicadeza sobre las ganas hacer énfasis en su culpabilidad.
de orinar: se la facilitará una solución. • Fijar la cabeza.
• Normalizar las constantes vitales. • Probar a dar órdenes firmes.
• Invitar a la colaboración mencionándole • Ensayar una amenaza sobre las posibles
muy sutilmente los riesgos. complicaciones y su responsabilidad (una
• No regañar ni gritar, suele ser contrapro- sola vez).
ducente. • Probar a «gritarle»: su finalidad es tan-
• No humillar: las comparaciones con tear si asustándole se está más quieto.
otros pacientes además de odiosas son nega- Si con todo esto no hemos conseguido la
tivas. colaboración del paciente nos queda un últi-
• Poner en práctica algunas medidas de mo recurso: la anestesia general, previo avi-
relajación: las más eficaces y fáciles de cum- so y consentimiento del paciente y de sus
plir son las relacionadas con la respiración, familiares.
verbigracia fijarse cómo sube el abdomen
(«la tripa») llenándola de aire mientras cuen-
ta tres o cuatro y ver cómo baja contando uno Casos especiales
más, de tal forma que mejora la respiración y
desplaza la atención a los números. Existen determinadas ocasiones perfecta-
• No perder el tiempo en maniobras inne- mente tipificadas en las que una serie de tru-
cesarias. cos nos han dado muy buenos resultados.
DISCUSIÓN BIBLIOGRAFÍA
1. Frase SG, Siriwadena D, Jamieson H, et al.
A veces pensamos que hay cirujanos que Indicators of patients suitability for topical
disponen de una especie de sexto sentido que anestesia. J Cataract Refract Surg 1997; 23:
le avisa cuándo un paciente va a ser poco 781-783.
colaborador. En realidad lo que hace es poner 2. Boezaart A, Berry L, Nell M. Topical anesthe-
en practica automática y silenciosamente un sia versus retrobulbar block for cataract sur-
plan de detección similar al que hemos pro- gery: the patient’s perspective. J Clin Anesth
2000; 12: 58-60.
puesto (4). En la actualidad, estamos estu- 3. Jacobi PC, Dietlein TS, Jacobi FK. A comparati-
diando cuáles de todas las medidas para pre- ve study of topical versus retrobulbar anesthesia
ver el grado de colaboración que aquí hemos in complicated cataract surgery. Arch Ophthal-
expuesto tienen mayor valor predictivo con mol 2000; 118: 1037-1043.
el fin de elaborar un test corto para clasificar 4. Schein OD, Katz J, Bass EB et al. The value of
el «grado de colaboración prevista» en bue- routine preoperative testing before cataract sur-
gery. N Engl J Med 2000; 342: 168-175.
na, intermedia, mala e imprevisible, y poste- 5. Norregard JC, Schein OD, Bellan L, et al. Inter-
riormente evaluar su fiabilidad. national variation in anesthesia care during cata-
Por otra parte también sabemos que exis- ract surgery: results for the International Cata-
ten algunos cirujanos que poseen un don ract Surgery Outcomes Study. Arch Ophthalmol
especial y consiguen que «todos» los pacien- 1997; 115: 1304-1308.
tes se conviertan en colaboradores. Realmen- 6. Reeves SW, Friedman DS, Fleisher LA et al. A
decision analysis of anesthesia management for
te lo que hacen es transmitir su propia tran-
cataract surgery. Am J Opthalmol 2001; 528-
quilidad y poner en práctica un plan de 536.
fomento y mejora de la colaboración pareci- 7. Martínez F. Los tópicos de la tópica. Arch. Soc.
do al aquí expuesto. Canar. Oftal., 2001; 12: 57-59.
RESUMEN
Objetivo: Determinar la efectividad del tratamiento con Octreótide en la retinopatía diabética
proliferativa avanzada (RDPA).
Método: Tras consentimiento informado a la pacientes, se ensaya tratamiento con Octreótide
en 2 mujeres 28 y 29 años con Diabetes Mellitus tipo 1, ambas de 20 años de evolución,
con mal control metabólico crónico (HbA1c de 9-15% y 9-10%) y graves repercusiones sis-
témicas (RDPA panfotocoagulada, nefropatía diabética establecida e incipiente respectiva-
mente, dermopatía diabética, polineuropatía sensitiva).
Presentaron hemovítreo severo precisando vitrectomía y 3 reintervenciones en un caso por san-
grados sucesivos.
El Octreótide actuaría en la RDPA inhibiendo la secreción de GH y los factores de crecimien-
to angiogénicos locales. Se utilizó a dosis entre 75 y 150 mcg/24h.
Resultados: En un caso existió una respuesta muy favorable con evolución posterior manteni-
da más de 18 meses con disminución de nuevos resangrados y recuperación marcada de la
agudeza visual. Un ojo permaneció sin hemorragia con proliferación epirretiniana fibrosa
bloqueada. El otro con hemovítreo pero sin signos ecográficos de desprendimiento traccio-
nal ni proliferación vítrea. En el otro caso se observó en 6 meses un marcado control de la
proliferación y de la exudación. La ecografía abdominal fue normal en ambas. Se produjo
una disminución progresiva de la dosis de insulina con episodios de hipoglucemias severas
en un caso. que presentó, además, mejoría marcada de la nefropatía establecida.
Conclusiones: El Octreótide podría representar una alternativa terapéutica en pacientes con
RDPA.
Correspondencia:
Alicia Pareja Ríos
Ofra, s/n La Cuesta
38320 La Laguna (Santa Cruz de Tenerife)
España
PAREJA RÍOS A, et al.
SUMMARY
Aim: Determine the effectiveity of the treatment with Octreotide in the proliferative advanced
diabetic retinopathy (PADR).
Method: After informed consent to the patients, assay treatment with Octreotide in 2 women
28 and 29 years with Diabetes Mellitus type 1, both of 20 years of evolution, with bad meta-
bolic chronic control (HbA1c of 9-15% and 9-10%) and serious systemic repercussions
(PADR with photocoagulation, established nephropathy diabetic and incipient respectively,
diabetic dermopathy, sensitive peripheral neuropathy ). They presented hemovitreous seve-
re precising vitrectomy and 3 surgicals procedures in a case by bleding successive. Octre-
otide would act in PADR inhibitting the secretion of GH and the factors of growth angio-
genyc local factors. Was utilized to dose between 75 and 150 mcg/24h.
Results: In a case exists a very favorable response with back evolution kept over 18 monthes
with decrease of new rebledings and marked recuperation of the visual sharpness. An eye
remains without hemorrhage with proliferation epirretiniana fibrous blocked. The other
with hemovitreous but without ecografics signes of traction retinal detachement nor proli-
feration. In the other case was observed in 6 monthes a marked control of the proliferation
and of to exude. The ecografía abdominal was normal in both. Produced a progressive
decrease of the dose of insulin with episodes of hypoglycemia severe in a case. That pre-
sented, furthermore, improved marked of the nefropathy established.
Conclusions: Octreotide could represent a therapeutic alternative in patients with PADR.
somatomedin C by long-acting somatostatin 8. Boehm BO, Lang GK, Jehle PM, Feldman B,
analog SMS 201-995 in type I diabetes melli- Lang GE. Octreotide reduces vitreous hemorr-
tus. Horm Res 1987; 27(1): 7-12 hage and loss of visual acuity risk in patients
4. Shumak SL, Grossman LD, Chew E, Kozousek with high-risk proliferative diabetic retino-
V, George SR, Singer W, Harris AG, Zinman pathy. Horm Metab Res 2001 May; 33(5): 300-
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ferative diabetic retinopathy: a preliminary fea- 9. MB, Mames RN Fitzgerald C, Hazariwala KM
sibility study. Clin Invest Med 1990 Oct; 13(5): et al. Efficacy of octreotide in the therapy of
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severe proliferative diabetic retinopathy by 182-183.
long-term treatment with SMS 201-995. Diabe- 10. Grant MB, Mames RN, Fitzgerald C, Hazari-
te Metab 1992 Nov; 18(6): 438-444. wala KM, Cooper-DeHoff R, Caballero S,
6. Clemens A, Klevesath MS, Hofmann M, Raulf Estes KS.The efficacy of octreotide in the the-
F, Henkels M, Amiral J, Seibel MJ, Zimmer- rapy of severe nonproliferative and early proli-
mann J, Ziegler R, Wahl P, Nawroth PP. Octre- ferative diabetic retinopathy: a randomized con-
otide (somatostatin analog) treatment reduces trolled study. Diabetes Care 2000 Apr; 23(4):
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diabetes mellitus. Metabolism 1999 Oct; 11. Kirkegaard C, Norgaard K, Snorgaard O, Bek
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Kohner EM. Continuous subcutaneous octreoti- somatostatin analogue, octreotide, on early reti-
de infusion markedly suppresses IGF-I levels nopathy, metabolic control and thyroid function
whilst only partially suppressing GH secretion in Type I (insulin-dependent) diabetes mellitus.
in diabetics with retinopathy. Acta Endocrinol Acta Endocrinol (Copenh) 1990 Jun; 122(6):
(Copenh) 1989 Feb; 120(2): 187-194. 766-772.
RESUMEN
Objetivo: Estudiar la eficacia del retroceso con anteroposición para recomendarla como técni-
ca de elección en la hiperfunción del oblicuo inferior.
Método: Se estudian 56 ojos pertenecientes a 32 pacientes afectos de hiperfunción primaria del
músculo oblicuo inferior. Las edades de los sujetos estaban comprendidas entre 5 y 49 años,
estando el 80% de los casos entre los 6 y 8 años. Del total de pacientes, 27 presentaban agu-
deza visual de la unidad en ambos ojos, 4 tenían agudezas visuales comprendidas entre 0,6
y 0,8, y sólo en 1 caso se observó una ambliopía profunda, con agudeza menor de 0,05. El
defecto de refracción encontrado en la mayoría de los casos (70%) ha sido la hipermetro-
pía. De los 32 pacientes 27 presentaban una hiperfunción bilateral y en los 5 restantes ésta
era monocular. El 78% de los sujetos presentaban un síndrome V asociado. La cirugía de
debilitamiento del oblicuo inferior se realizó en aquellos pacientes con hiperfunción mode-
rada o severa y únicamente se intervinieron aquellos ojos con hiperfunción leve, cuando el
ojo contralateral tenía una hiperfunción moderada o severa.
Resultado: De los 56 ojos intervenidos un 89% evolucionó favorablemente, presentando moti-
lidad ocular normal tras la intervención, quedando un 11% con hiperfunción leve. En los
casos asociados a síndrome alfabético V se observa que un 92% de ellos mejoraban nota-
blemente.
Conclusión: El retroceso con anteroposición del músculo es una técnica quirúrgica debilita-
dora del oblicuo inferior, cuyos resultados son estables en el tiempo, no presentando casi
Correspondencia:
Losada MJ
C/. Heliodoro Rguez. López, 5, 8.º B
38005 Santa Cruz de Tenerife
España
PÉREZ BARRETO L, et al.
complicaciones. Por todo lo anterior, se podría proponer como técnica quirúrgica de pri-
mera elección en la hiperfunción del oblicuo inferior.
SUMMARY
Objective: To study the efficacy of the inferior oblique recess with forward-positioning, in
order to recommend it as the technique of choice in cases of inferior oblique hyperfunction.
Method: 56 eyes from 32 patients with primary inferior oblique hyperfunction were examined.
Patient age ranged from 5 to 49 years. 80% of the patients were between 6 and 8 years old.
27 patients had 1.0 visual acuity in both eyes, 4 had visual acuity between 0.6 and 0.8 and
just one case had deep amblyopia, with visual acuity less than 0.05. The refractive error in
most cases was hyperopia. Out of the 32 cases, 27 had bilateral inferior oblique hyperfunc-
tion, the other 5 cases were monocular. 78% of the patients had an associated «V» syndro-
me. Inferior oblique weakening surgery was carried out in those cases with severe or mode-
rate hyperfunction. Surgery was performed in those cases with slight hyperfunction only
when the contralateral eye had moderate or severe hyperfunction.
Results: 89% of the 56 operated eyes had a favourable evolution, with normal motility after
surgery, 11% were left with a slight hyerfunction. There was stability of the surgical results,
without important variations on the inferior oblique hyperfunction and V syndrome over
time.
Conclusions: The recess and forward-positioning of the muscle is an effective surgical techni-
que that weakens the inferior oblique and which results are stable over time and presents
little complications. Therefore, it may be established as a first choice surgical technique for
the inferior oblique hyperfunction.
retroceso con anteroposición del oblicuo hiperfunción leve, cuando el ojo contralate-
inferior como técnica quirúrgica de elección. ral tenía una hiperfunción moderada o seve-
ra.
La técnica quirúrgica utilizada sistemáti-
MATERIAL Y MÉTODO camente en todas las intervenciones fue un
retroceso con anteroposición, que consiste
Se han estudiado un total de 56 ojos perte- en que una vez desinsertado el músculo
necientes a 32 pacientes afectos de hiperfun- oblicuo inferior, se marca un punto situado
ción primaria del músculo oblicuo inferior. a 5 mm hacia atrás del borde inferior de la
Las edades de los sujetos estaban com- inserción del recto externo y desde dicho
prendidas entre 5 y 49 años, estando el 80% punto hacia abajo, paralelo al limbo, calcu-
de los casos entre los 6 y 8 años. lamos un segundo punto en el que se va a
Del total de pacientes, 27 presentaban reinsentar el músculo. Según el grado de
agudeza visual de la unidad en ambos ojos, 4 hiperfunción, la medida para obtener ese
tenían agudezas visuales comprendidas entre segundo punto será: si es leve (4 mm), si es
0,6 y 0,8, y sólo en 1 caso se observó una moderada (6 mm) y si es severa (8 mm),
ambliopía profunda, con agudeza menor de quedando este último muy cerca de la inser-
0,05. ción del recto inferior. El anclaje muscular a
El defecto de refracción encontrado en la la esclera se hizo siempre con un solo pun-
mayoría de los casos (70%) ha sido la hiper- to (fig. 2).
metropía En el postoperatorio se hizo un seguimien-
En la muestra estudiada el 16% de los to del paciente durante al menos un año. Los
pacientes presentaban hiperfunción aislada resultados obtenidos se basan en las medidas
de los oblicuos inferiores y el 84% restante realizadas al mes, a los 6 meses, y al año de
se asociaba con un estrabismo horizontal la intervención.
(9% con exotropías, 75% con endotropías).
Además el 78% de todos los pacientes, pre-
sentaban previo a la intervención un Síndro- RESULTADOS
me Alfabético V.
De los 32 pacientes 27 presentaban una Del total de oblicuos inferiores debilitados
hiperfunción bilateral y en los 5 restantes (56 ojos), el 89% evolucionaron a una moti-
ésta era monocular. lidad normal quedando un 11% con hiper-
La cirugía de debilitamiento del oblicuo función leve (fig. 3).
inferior se realizó en aquellos pacientes con Si agrupamos los resultados según el tipo
hiperfunción moderada o severa y única- de estrabismo previo a la cirugía se observa
mente se intervinieron aquellos ojos con (tabla I):
Fig. 2: Retroceso
con
anteroposición: se
desinserta el
oblicuo inferior,
marcamos un
punto situado 5
mm hacia atrás de
la inserción de
recto externo y
desde ese punto
hacia abajo,
paralelo al limbo
calculamos el 2.º.
Tabla I. Se muestra la relación de resultados si agrupamos los pacientes según el tipo de estrabismo previo a la
cirugía
La contraincisión en la cirugía de
cataratas
The contraincision in cataract surgery
PÉREZ SILGUERO MA1, PÉREZ SILGUERO D1, PÉREZ HERNÁNDEZ FR1,
BERNAL BLASCO I2, JIMÉNEZ GARCÍA A2
RESUMEN
Objetivo: Valorar el papel de la contraincisión en el manejo del astigmatismo corneal.
Material y método: Se evaluaron 12 ojos, con un astigmatismo corneal superior a 1,5 dioptrías
e inferior a 3,5 dioptrías.
Siempre se realizó la contraincisión en córnea clara opuesta a la incisión principal de la faco-
emulsificación, aplanando el eje más curvo.
Resultados: Todos los pacientes mejoraron de su astigmatismo corneal, tras un seguimiento
entre 5 y 9 meses tras la cirugía. La reducción del astigmatismo corneal osciló entre 0,50
D. y 1,50 D., excepto en un caso que se quitó 2,25 D.
En todos los casos se pudo realizar la contraincisión de forma segura, sencilla y eficaz.
Conclusión: La contraincisión en la cirugía de la facoemulsificación es una técnica sencilla,
con buenos resultados, económica, relativamente predictible y con escasa regresión. Es útil
para astigmatismos moderados.
SUMMARY
Objective: To study the effectiveness of contraincision in corneal astigmatism.
Material and method: 12 eyes with corneal astigmatism between 1.5 and 3.5 dioptries.
The contraincision was performed in clear cornea, in area opposite to principal incision, flatte-
ning the more curved axis.
Results: The astigmatism changed in all cases, with a reduction between 0.50 and 1.50 D.
(2.25 in one eye). The contraincision was always easy, safe and effectiveness.
Centro Insular de Oftalmología. Hospital Materno Infantil. Hospital General de Buenos Aires.
1 Doctor en Medicina y Cirugía.
2 Licenciado en Medicina y Cirugía.
Correspondencia:
Miguel Ángel Pérez Silguero
C/. Colmenares, 10, 3 A
35003 Las Palmas de Gran Canaria
E-mail: psilgueroma@terra.es
PÉREZ SILGUERO MA, et al.
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
La cirugía más ampliamente realizada en Fueron los siguientes:
oftalmología es la cirugía de la catarata. En
dicha intervención se busca como objetivo, Prequirúrgico Postquirúrgico
no sólo eliminar la opacidad del cristalino,
sino conseguir la emetropía. 1 +2,75 -2,00 a 160º -0,50 -0,50 a 156º
Con biómetros altamente especializados, y 2 -4,00 -3,50 a 12º -2,00 a 0º
usando fórmulas de última generación se 3 -2,25 -1,50 a 90º Neutro
obtiene una refracción esférica postcirugía 4 +1,50 -2,00 a 37º -0,25 -1,50 a 30º
próxima a 0 dioptrías. La dificultad estriba en 5 +0,50 -2,75 a 18º -0,50 a 12º
conseguir la independencia de las gafas cuan- 6 +3,0 -3,00 a 17º -0,50 -1,50 a 9º
do el paciente presenta un astigmatismo cor- 7 -8,0 -2,00 a 30º +0,50 -0,50 a 17º
neal importante. Para solventar dicho proble- 8 -6,0 -3,50 a 40º -1,50 a 33º
ma se realizan procedimientos muy variados, 9 -2,25 -2,50 a 77º -0,50 -1,50 a 75º
tales como: incisiones arcuatas (1,2), Lasik 10 +2,00 -3,00 a 12º -1,50 a 0º
postcirugía (3), lentes intraoculares tóricas 11 +4,00 -1,50 a 5º -0,50 a 0º
(4-6) y Contraincisión quirúrgica (7-9). 12 +5,00 -1,75 a 18º +0,50 -0,50 a 30º
El objetivo de nuestro trabajo es valorar el
papel que puede desempeñar la contrainci-
sión en la modificación del astigmatismo Todos los pacientes mejoraron de su astig-
corneal tras cirugía de la catarata o tras cris- matismo corneal, tras un seguimiento entre 5
talino transparente. y 9 meses tras la cirugía.
La reducción del astigmatismo corneal
osciló entre 0,50 D. y 1,50 D., excepto en un
MATERIAL Y MÉTODO caso que se quitó 2,25 D.
En todos los casos se pudo realizar la con-
Se incluyeron 12 ojos de 8 pacientes dife- traincisión de forma segura,sencilla y eficaz.
rentes, que presentaban un astigmatismo cor-
neal superior a 1,5 dioptrías, sin astigmatis-
mo cristaliniano. DISCUSIÓN
Siempre se usó el mismo método en todos
los ojos para valorar la eficacia de dicho pro- La cirugía de cataratas es, hoy en día, ciru-
cedimiento. Dicho método consistía en reali- gía refractiva. Se busca la ausencia de correc-
zar la incisión de la facoemulsificación en el ción óptica postcirugía. Dicho objetivo es
meridiano mas curvo, con el cuchillete de 2,8 complicado cuando existe astigmatismo ele-
mm, que luego se ampliaba hasta 3,2 mm vado.
para introducir la LIO. La contraincisión se Existen múltiples posibilidades para con-
realizaba opuesta a la incisión del faco, para seguir la emetropía.
terminar de alisar el meridiano más curvo, y — La realización del Lasik tras tres
siempre con la lente intraocular introducida y meses de la cirugía de la catarata proporcio-
la cámara anterior llena de viscoelástico. na un método muy eficaz para solucionar, no
El eje se comprobaba con el queratómetro sólo el astigmatismo residual, sino el compo-
automático, la refracción subjetiva del nente esférico remanente. Sin embargo, es
paciente y topografía corneal. una técnica muy cara para el paciente (3).
74 ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 73-75
La contraincisión en la cirugía de cataratas
RESUMEN
Objetivo: Estudiar la cirugía del hilo como indicación terapéutica en la incomitancia lejos/cerca.
Método: Una muestra de 74 pacientes (33 mujeres y 41 hombres) de edad media 7 años, han
sido diagnosticados de incomitancia lejos/cerca e intervenidos con la técnica del hilo modi-
ficada por De Decker. A 31 pacientes se les ha practicado cirugía monolateral y a 43 pacien-
tes cirugía bilateral.
Resultado: Se consideró muy buen resultado si el paciente quedaba en ortotropía lejos/cerca,
buen resultado si el ángulo residual era < de 6 grados y mal resultado si el ángulo residual
era > de 6 grados. Teniendo en cuenta el total de los pacientes de la muestra estudiada un
90% de ellos mejoraron el ángulo de lejos y un 81% el ángulo de cerca; quedando con
malos resultados un 10% para lejos y un 19% para cerca. La única complicación que pudi-
mos observar fue un caso de granuloma reactivo al material de sutura. Un 12% de los
pacientes recuperaron la visión estereoscópica.
Conclusión: La cirugía del hilo es una buena técnica a considerar como de primera elección
en la incomitancia lejos/cerca, por sus buenos resultados y sus bajas complicaciones.
SUMMARY
Objective: To study the thread surgery as therapeutic indication in far/near unconcomitance.
Method: A sample of 74 patients (33 women and 41 men) of average age 7 years have been
diagnosed of far/near unconcomitance and operated on with the thread technique modified
by De Decker. 31 patients were operated on a monolateral surgery and 43 on bilateral sur-
gery.
Correspondencia:
Losada MJ
C/. Heliodoro Rguez. López, 5, 8.º B
38005 Santa Cruz de Tenerife
España
SÁNCHEZ MÉNDEZ M, et al.
Result: The result was considered as very good if the patient was in far/near orthotropiae, good
if the residual angle was < 6 degrees and bad if the residual angle was > degrees. 90% of
the total sample recovered the far angle and 81% the near angle; remaining with bad results
10% for far and a 19% for near vision. The only complication we could observe was a case
of reactive granuloma to the physical suture. A 12% of the patients recovered the stereos-
copic vision.
Conclusion: The thread surgery is a good technique to be considered as a firsts choice in the
far/near unconcomitance because of its good results and its scarce complications.
RESUMEN
Objetivo: Mostrar la eficacia de la terapia ortóptica en un paciente con diplopía inconcomi-
tante debida a síndrome de Brown post-quirúrgico.
Material y métodos: Se empleó la terapia ortóptica para conseguir visión binocular sin pris-
mas en paciente con inconcomitancia vertical por síndrome de Brown.
Resultados: El paciente es capaz de fusionar sin corrección prismática en todas las posiciones
de mirada salvo en supraversión. El paciente se muestra satisfecho con el resultado de la
terapia consiguiendo mantener la visión binocular constante elevando ligeramente la cabe-
za.
Conclusiones: La terapia ortóptica puede ser una herramienta eficaz como solución parcial en
aquellos pacientes con síndrome de Brown en los que una reintervención no está indicada.
Palabras clave: Oblicuo superior, síndrome de Brown, diplopía, terapia prismática, terapia
ortóptica.
Correspondencia:
Instituto Cántabro de Oftalmología
Menéndez Pelayo, 48
39006 Santander
España
FERNÁNDEZ DEL COTERO JN, et al.
SUMMARY
Objective: To show the efficacy of orthoptic therapy in a patient with incommitant diplopia
after an acquired Brown syndrome secondary to superior oblique surgery.
Material and methods: The goal of the orthoptic therapy is to achieve binocular vision (wit-
hout prisms) in a patient with incommitant diplopia due to a secondary Brown Syndrome.
Results: The patient has binocular vision without the help of prisms in all positions except for
supraversion. He is satisfied with the result, being able to avoid diplopia by lifting his chin
in supraversion.
Conclusions: The orthoptic therapy can be a good help as a partial solution to those cases with
acquired Brown Syndrome in which surgery is not suitable.
Key words: Superior oblique, Brown syndrome, diplopia, prism therapy, orthoptic therapy.
Fig. 1: Se
aprecia
claramente el S.
Brown de ojo
izquierdo.
RESUMEN
Los traumatismos oculares no perforantes muestran un buen pronóstico, pero pueden dar lugar
a lesiones visualmente muy invalidantes, aunque no exista solución de continuidad en el
globo ocular. Presentamos los casos de dos varones jóvenes, que fueron afectados por la
onda de choque de un petardo sobre el ojo, manifestándose como dolor e intensa disminu-
ción de la agudeza visual. En la exploración se observó la existencia de edema corneal con
desprendimiento de la membrana de Descemet e hifema grado I, pero sin existir recesión
angular. El tratamiento fue conservador, evolucionando favorablemente hasta la normaliza-
ción en aproximadamente un mes de tiempo.
SUMMARY
Although the non-perforating ocular trauma have usually got a favourable prognosis, they may
lead to a variable combination of invalidating lessions. We report the two young men cases
who suffered a firework struck on one of their eyes, clinically manifested as pain and loss
of visual acuity. Corneal edema with Descemet's membrane curling and hyphema grade I
were showed, but no anterior chamber angle recession was found. Conservative treatment
was instaured and complete eye-recovery obtained in about one month time.
Correspondencia:
M.E. Gómez Arenas
C/. del Río, 98
58020 San Juan de Mozarrifar (Zaragoza)
España
GÓMEZ ME, et al.
DISCUSIÓN
Fig. 1: Edema
corneal central en
El traumatismo del endotelio puede producir
«huellas de
serpiente» edema corneal. Pero también es posible el desa-
(caso n.º 1) rrollo de lesiones asociadas, como recesión
angular (1), iritis traumática, hifema y subluxa-
ción o luxación del cristalino (3). En este tipo de
traumatismos contusos sobre el globo ocular, el
polo posterior sólo se involucra en el 10% de los
casos, la mayoría hemovítreo (como nuestro
primer paciente) con o sin edema retiniano.
Mientras que el traumatismo superficial es
frecuente, el traumatismo endotelial es
Fig. 2: Edema mucho menos común. El daño endotelial pue-
corneal e hifema de ser localizado o difuso y se produce si el
grado I endotelio y/o el iris es empujado contra el
(caso n.º 1). cristalino. El estiramiento corneal o los efec-
88 ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 87-90
Traumatismo endotelial por contusión con petardos
Generalmente no es necesario ningún tipo tusion and angle recession caused by an airbag.
de tratamiento cuando las células endotelia- Br J Ophthalmol 1996; 80(5): 487.
les se alargan y cubren los defectos. Si exis- 2. Traumatismos oculares graves en España: fac-
tores epidemiológicos, estudio de las lesiones y
te inflamación secundaria, hay que instaurar medidas de prevención. Grupo para el Estudio
tratamiento antiinflamatorio. En el hidrops Multicéntrico de los Traumatismos Oculares en
agudo, suero hipertónico; y cuando el edema España, 1994.
es persistente, queratoplastia por fallo endo- 3. McDermott ML. Corneal endothelium. In:
telial. A veces también puede ser útil el uso Yanoff M, Duker JS. Ophthalmology. London;
de lentes de contacto terapéuticas. 1999; 5.3.8.
4. Roberson MC, Wicheta WE. Endothelial loss in
corneal concussion injury. Ann Ophthalmol,
1985; 17(8): 457-460.
5. Brooks AMV, Gillies WE. Differentiation of
BIBLIOGRAFÍA posterior polymorphous dystrophy from other
posterior corneal opacities by specular micros-
1. Michaeli-Cohen S, Neufeld M, Lazar M, Geyer copy. Ophthalmology, 1989; 96(11): 1639-
O, Haddad R, Kashtan H. Bilateral corneal con- 1645.
RESUMEN
Presentamos los hallazgos clínicos y oftalmoscópicos de un paciente de 36 años diagnosticado
de retinopatía de Purtscher unilateral tras un traumatismo torácico.
Se discuten los factores etiopatogénicos.
SUMMARY
We present the clinical and ophthalmoscopic finding of a men 36 years old with unilateral
Purtscher retinopathy following chest trauma.
The etiopathogenic factors are discussed.
Correspondencia:
Daniel López Muñoz
Avda. La Estación, 16, 6.º B
04005 Almería
España
MARTÍN MOLINA J, et al.
de los síntomas a los dos días tras el trauma visuales, por lo que fue visto en nuestra con-
y la bilateralidad en su afección ocular. sulta. El examen oftalmológico reveló una
También se han publicado hallazgos oftal- A.V. en O.D.= 0,6, siendo normal en O.I.
moscópicos similares en distintas enferme- Segmento anterior normal en ambos ojos,
dades: pancreatitis aguda, lupus eritematoso T.O. 12 mm Hg en A.O. No presentaba alte-
sistémico, dermatomiositis, insuficiencia raciones pupilares. En el examen oftalmos-
renal crónica, Sida, embolismo por líquido cópico (fig. 1) observamos en el ojo derecho
amniótico y tras el parto. múltiples zonas redondeadas blanquecinas,
Describimos los hallazgos clínicos, oftal- algunas confluyentes, que rodean al disco
mológicos y angiográficos en un paciente óptico, de aspecto normal, así como alguna
con un traumatismo torácico. hemorragia retiniana, la retina ecuatorial y
periférica no mostraron alteraciones, el O.I.
no presenta hallazgos patológicos. La AFG
CASO CLÍNICO reveló zonas de no perfusión capilar y pérdi-
da de contraste de las arteriolas y capilares
Examinamos a un paciente varón de 36 peripapilares en el O.D., siendo normal en el
años que tras sufrir un traumatismo toraco- O.I. Al mes del accidente la AV es de 0.9, y
abdominal derecho (al volcar un tractor), con oftalmoscópicamente aparece un ligero ede-
compresión pulmonar, presentó pérdida de ma en fase de resolución (fig. 2). A partir de
visión en su ojo derecho. No presentó hemo- los hallazgos clínicos el paciente fue diag-
tórax ni neumotoráx, aunque sí una fractura nosticado de retinopatía de Purtscher unilate-
costal derecha. No tenía antecedentes médi- ral, presentación poco frecuente.
cos ni oftalmológicos de interés. A los 3 días
del traumatismo se quejó de alteraciónes
DISCUSIÓN
La retinopatía de Purtscher consiste en
Fig. 1:
infartos multiples de la capa de fibras nervio-
Retinografía del
ojo derecho donde sas y hemorragias superficiales alrededor del
se aprecian nervio óptico, lesiones habitualmente limita-
múltiples zonas das al polo posterior. La etiología es diversa:
redondeadas traumatismos múltiples, craneal, fractura
blanquecinas que malar, heridas faciales, trauma torácico, con
rodean al disco cinturón de seguridad, por airbag, anestesia
óptico, así como
alguna
retrobulbar y enfermedades que provocan un
hemorragia cuadro similar (purtscher-like retinopathy)
retiniana. como pancreatitis, hemodiálisis, enfermeda-
des autoinmunes, sida, fallo renal crónico,
aneurisma cardíaco, posparto.
Se tiene un conocimiento incompleto de la
patogénesis de la respuesta ocular. Purtscher,
en 1912, sugiere una extravasación linfática
por un incremento brusco de la PIC, poste-
riormente se han postulado diversos meca-
Fig. 2: nismos fisiopatológicos: reflujo venoso por
Retinografía del compresión intratorácica, embolismo arterio-
mismo ojo al mes
lar por aire o graso, microembolismo sanguí-
del accidente
donde sólo se neo (2,3) y fuerzas mecánicas que actuaría
observa un ligero sobre la interfase vítreo-retina. Kelley (4)
edema en fase de describe los hallazgos angiográficos en un
resolución. paciente con retinopatía de Purtscher tras
92 ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 91-93
Un caso de retinopatía de Purtscher unilateral
compresión torácica una hora después de mediante el paso de aire al torrente sanguí-
producirse, hallando pérdida de contraste neo como consecuencia del traumatismo pul-
microvascular y no un cierre significativo de monar o bien por embolización grasa conse-
los capilares. Él concluye que el daño del cuencia de la fractura costal.
endotelio vascular resulte del incremento de Consideramos que es una patología que
presión intraluminal. Burton (5), sin embar- debe ser más estudiada, pues se desconoce
go, presentando varios casos de retinopatía con exactitud su fisiopatología, que podría
unilateral argumenta en contra de un aumen- ser uno o varios de los mecanismos expues-
to de la presión hidrostática en las venas, tos. Dada la gran cantidad de procesos pato-
pues según él provocaría una afectacón simé- lógicos que la pueden causar (traumatismos
trica de los dos ojos. Más recientemente, y distintas enfermedades) esta retinopatía
Gaurav (6), en lesiones oculares relaciondas debe ser conocida no sólo por oftalmólogos,
con el airbag insiste en el reflujo venoso sino por todos los médicos, como causa de
como causa de la retinopatía en relación con pérdida visual.
los traumatismos torácicos.
Las teorías que proponen embolismo arte-
riolar (por aire y por grasa) son las que están BIBIOGRAFÍA
más avaladas por estudios experimentales en
animales, en los cuales, mediante emboliza- 1. Purtscher O. Noch unbekannte Befunde nach
ción, se reproducen cuadros similares a la Schädeltrauma. Ber Versamml d. Ophth
retinopatía de Purtscher. La activación de la Gesellsch 1910; 36: 294-307.
2. Blodi BA. Johnson MW. Gass JD. Fine SL. Jof-
fracción del complemento C5 se ha relacio- fe LM. Purtscher's-like retinopathy after child-
nado con el inicio de la agregación intravas- birth. Ophthalmology. 1990; 97: 1654-1659.
cular en pequeños vasos en enfermedades 3. Behrens-Baumann W. Scheurer G. Schroer H.
que provocan retinopatías tipo Purtscher Pathogenesis of Purtscher's retinopathy. An
(7,8). La alteración de la microcirculación experimental study. Graefes Arch Clin Exp
coroidea también puede contribuir en la Ophthalmol. 1992; 230: 286-291.
4. Kelley JS. Purtscher retinopathy related to chest
génesis de este cuadro, como se ha demos- compression by safety belts. Fluorescein angio-
trado mediante angiografías con verde indo- graphic finding. Am J Ophthalmol 1972; 74:
cianina (9). 278-283.
En nuestro paciente, el traumatismo con 5. Burton TC. Unilateral Purtscher retinopathy.
aumento de la presión torácica derecha Ophthalmology 1980; 87: 1096-1105.
podría haber provocado un reflujo en el sis- 6. Gaurav k, Shah, Penne R, Grand G. Purtscher’s
Retinopathy secundary to Airbag injury. Retina
tema venoso que ocasionaría un daño proba-
2001; 21: 68-69.
blemente endotelial, responsable de oclusión 7. Snady JL, Morse PH. Retinopathy associated
microvascular e isquemia de manera secun- with acute pancreatitis. Am J Ophthalmol 1985;
daria. Al ser el traumatismo torácico en el 100: 246-251.
lado derecho, podría ser una coincidencia, o 8. Stoumbos VD, Klein ML, Goodman S. Purts-
bien que de algún modo el aumento de pre- cher's-like retinopathy in chronic renal failure.
Ophthalmology 1992; 99: 1833-1839.
sión derecha se hubiera transmitido solamen-
9. Gómez-Ulla F, Fente B, Torreiro MG, Salorio
te al retorno venoso derecho, ocasionando la MS, González F. Choroidal vascular abnorma-
unilateralidad del cuadro. Los hallazgos clí- lity in Purtscher's retinopathy shown by indoc-
nicos de nuestro paciente también se podrían yanine green angiography. Am J Ophthalmol
explicar mediante embolización aérea, 1996; 122: 261-263.
RESUMEN
Presentamos los hallazgos clínicos y oftalmoscópicos de un varón de raza negra de 23 años con
retinopatía drepanocítica.
Se discuten los factores etiopatogénicos y el aumento de la enfermedad en nuestro medio debi-
do a factores demográficos.
SUMMARY
We present the clinical and ophthalmoscopic findings of a colored man 23 years old with dre-
panocitic retinopathy.
The etiopathogenic factors are discussed and the disease increasement due to demographics
factors.
Correspondencia:
Daniel López Muñoz
Avda. La Estación, 16, 6.º B
04005 Almería
España
MARTÍN CARRETERO G, et al.
CASO CLÍNICO
Examinamos a un paciente varón, de 23
años, de procedencia subsahariana y de raza
negra, que nos es remitido por el servicio de A
hematología con diagnóstico de anemia fal-
ciforme.
El paciente acudió al hospital tras sufrir
una crisis con fiebre, dolores óseos y mial-
gias. El proceso se desencadenó tras estar
varias horas trabajando en un invernadero.
Tras el oportuno estudio se tipó la enferme- Fig. 2: AFG del
dad como drepanocitosis y el incidente como mismo ojo donde
se aprecian
de crisis drepanocitaria. La anamnesis reveló intensos signos
la existencia de crisis similares desde la edad isquémicos en los
de siete años. 360° a partir de la
B
Nos fue remitido para despistaje de pato- media periferia.
logía ocular.
Asintomático oftalmológicamente, la
exploración en principio fue anodina con una
agudeza visual normal con su corrección, sin
anomalías reseñables en polo anterior, y nor-
motensión ocular. El examen del fondo en
midriasis reveló un polo posterior normal,
pero los hallazgos periféricos mostraban sig-
nos evidentes de proliferación neovascular,
por lo que se procedió a una exploración
angiofluoresceínica con el siguiente resulta-
do:
El polo posterior mantenía una perfusión
normal (fig. 1), pero a partir de un determi- Fig. 3: AFG
nado nivel y comenzando desde media peri- donde se observan
feria se apreciaba una zona con intensos sig- shunts arterio-
nos isquémicos afectando a los 360º del fon- venosos.
DISCUSIÓN
4
No existe un verdadero diagnóstico dife-
rencial ante una rarefacción capilar periféri-
ca asociada a una neovascularización prerre-
tiniana en pacientes de raza negra. El aspec-
to angiográfico puede confundirse con una
Enfermedad de Eales o una arteritis retiniana
con dilatación arterial múltiple. La drepano-
citosis es igualmente una de las etiologías
clásicas de las estrías angioides.
En cuanto a las alteraciones del polo ante-
rior por su banalidad no precisan tratamien-
5
to.
El tratamiento de la patología retiniana es
el propio de la isquemia retiniana. Una vez
detectada mediante angiografía fluoresceíni-
ca se debe proceder, siempre que la transpa-
rencia de los medios lo permita, a la fotoco-
agulación con láser Argón para silenciar las
áreas afectadas. La neovascularización pre-
rretiniana debe ser tratada mediante fotocoa-
gulación del territorio isquémico adyacente.
La modalidad del tratamiento es comparable
a la de una fotocoagulación panretiniana, con
impactos entre 200 y 500 micras de spot, de
6 0,1 segundos de duración y con una intensi-
dad moderada. Este tratamiento resulta pre-
ferible a la oclusión directa del vaso nutricio
de la membrana neovascular.
Las hemorragias intravítreas obligan rara-
mente a practicar una vitrectomía, ya que en
la mayoría de los casos puede esperarse a su
resolución espontánea para poder fotocoagu-
lar.
Cuando la hemorragia vítrea es irreducti-
Figs. 4-8: AFGs ble puede recurrirse a la crioterapia transes-
que muestran la
abundancia de
cleral de la retina periférica, aunque esta téc-
penachos nica tiene detractores que avisan del aumen-
neovasculares en to de la fibrosis vítrea inducida por la conge-
forma de sombrilla 7 lación y el aumento del riesgo de desprendi-
o abanicos.
RESUMEN
Presentamos el caso de una paciente de 52 años afecta de glaucoma primario de ángulo abier-
to en ojo derecho. El estudio de los parámetros hemodinámicos en los vasos retrobulbares
con Ultrasonografía Doppler Color mostró alteraciones en relación a los defectos del cam-
po visual.
SUMMARY
A case of a 52 years-old woman with primary open-angle glaucoma i right eye. Color Doppler
Ultrasonography imaging showed alterations in the retrobulbar vessels hemodinamics acor-
ding to visual field defects.
ción oftalmológica (tabla I), se pone de Agudeza visual (EDTRS) 0,02 0,00
manifiesto la existencia de una asimetría en PIO 19 mmHg 14 mmHg
Biomicroscopia Normal Normal
la cabeza del nervio óptico (fig. 1). Gonioscopia Shaffer 4 Shaffer 4
Se realizan exploraciones del campo Relación E/P 0,6 0,4
visual en ambos ojos con el programa 24-2
Correspondencia:
Antonio Martínez García
Fundación Instituto Galego de Oftalmología
C/. Ramón Baltar, s/n
15706 Santiago DC (La Coruña)
España
E-mail: tontxu_1999@yahoo.com
MARTÍNEZ GARCÍA A
OD OI
Arteria oftálmica
VSM 41,8 42,5
VDF 11,3 14,9
Fig. 1: Aspecto de IR 72,9 65,0
la papila del ojo Arterias ciliares
derecho (arriba) y VSM 16,3 16,7
del ojo izquierdo VDF 3,7 5,9
IR 77,3 64,6
(abajo).
Fig. 2:
Campimetrías
correspondientes a
la primera
exploración: ojo
derecho arriba;
ojo izquierdo
abajo.
Fig. 3: Estudio
campimétrico
evolutivo desde la
instauración del
tratamiento
médico
antiglaucomatoso
hasta la última
exploración
realizada en
febrero de 2001.
Tomando como referencia estudios pre- Tabla III. Coeficientes de correlación del defecto
medio (MD) y de la desviación estándar
vios publicados (1-3), instauramos trata- patrón corregida (CPSD) con relación a los
miento con una solución oftálmica de Dorzo- índices de resistividad en la arteria
lamida 2% (MSD, Whitehouse Station, NJ). oftálmica y en las arterias ciliares cortas
posteriores
En estudios sucesivos del campo visual
(fig. 3), se pone de manifiesto una marcada IRAO IRACCP
mejoría del mismo. Los estudios de la hemo- MD 0,977 0,957
dinámica de los vasos retrobulbares con CPSD 0,887 0,851
Doppler muestran una marcada mejoría con
respecto a los valores básales (gráfico 2). En
la curva de PIO realizada postratamiento se En el sistema nervioso central, después de
muestra también una mejora de la PIO, con un proceso isquémico agudo, que produce un
respecto a la situación basal (gráfico 3). área de necrosis, se produce una degenera-
Hemos estudiado los coeficientes de ción secundaria y progresiva de las neuronas,
correlación entre los parámetros analizados por un mecanismo de apoptosis (5).
del campo visual: MD y CPSD y los Índices Un estímulo inicial, bien una elevación de
de Resistividad de Pourcelot (4) en la arteria la PIO o bien una disminución del flujo san-
Oftálmica y las Arterias Ciliares Cortas Pos- guíneo ocular, o incluso una mezcla de
teriores, dando como resultado una fuerte ambas aunque provocan de forma directa la
correlación entre ambas (tabla III). muerte de las células ganglionares, este
hecho no se produce de forma súbita (6).
Así pues, en el nervio óptico de un pacien-
DISCUSIÓN te con glaucoma conviven células sanas,
células enfermas, células en proceso de dege-
Aunque está aceptado de forma general neración y células muertas (6).
que el glaucoma es una enfermedad crónica La regresión de un defecto del campo visual,
Gráfico 2: y progresiva; en un paciente con glaucoma comunicada en algunos pacientes con glauco-
Evolución primario de ángulo abierto no todas las célu- ma, puede deberse a la recuperación de la fun-
temporal de los las ganglionares mueren al mismo tiempo. cionalidad de estas células enfermas (7,8).
índices de Diversos estudios han puesto de manifies-
resistividad en la
to alteraciones en la perfusión sanguínea
arteria oftálmica y
en las arterias ocular en los pacientes con glaucoma, si
ciliares cortas bien, no está claro si estas alteraciones son
posteriores. causa o consecuencia del proceso glaucoma-
Valores basal, a toso (9).
los 3 meses, 9 A la vista de nuestro caso parece clara la
meses y 15 meses
relación existente entre las alteraciones de la
tras la
instauración del perfusión sanguínea ocular y los defectos
tratamiento. asociados en el campo visual; si bien, serán
necesarios estudios longitudinales a largo
plazo que pongan de manifiesto la posible
correlación entre los defectos de la perfusión
sanguínea ocular y los defectos del campo
visual.
Gráfico 3: Curva
circadiana de
presión BIBLIOGRAFÍA
intraocular diurna
con tratamiento 1. Martínez A, González F, Capeans C et al. Dor-
médico zolamide effect on ocular blood flow. Invest
antiglaucomatoso. Ophthalmol Vis Sci 1999; 40(6): 1270-1275.
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sis. Curr Opin Neurobiol 1996; 6: 667-72. mol 1997; 123: 320-327.
RESUMEN
La neuritis óptica aparece aislada o bien formando parte de un gran número de entidades noso-
lógicas, entre ellas la esclerosis múltiple, en la cual es una forma común de presentación
inicial. La neuritis óptica más común en los adultos con esclerosis múltiple es la retrobul-
bar y no la anterior o papilitis. En casos de neuritis óptica idiopática el hallazgo posterior
de una resonancia magnética nuclear patológica es bastante frecuente, lo cual en conjunto,
confiere un alto riesgo de desarrollo futuro de esta enfermedad.
Presentamos el caso de un paciente varón que debutó con un episodio de papilitis unilateral
observándose posteriormente lesiones desmielinizantes en la resonancia magnética nuclear.
SUMMARY
The optic neuritis appears isolated or in association with a great number of diseases, including
MS, of which it is a common first manifestation. The most common optic neuritis in adults
with multiple sclerosis is the retrobulbar neuritis and not the anterior or papillitis. In idio-
pathic optic neuritis cases magnetic resonance imaging pathological results are frequent,
which gives a high risk of developing MS in the future.
We present the case of a male patient with an acute optic neuritis unilateral episode later dis-
covering demyelination plaques in the magnetic resonance imaging.
Correspondencia:
Fátima Mesa Lugo
Servicio de Oftalmología. Hospital Universitario de Canarias
C/. Ofra, s/n
38320 La Laguna (S/C de Tenerife)
España
MESA LUGO F, et al.
Fig. 3:
Perimetría
automatizada
(programa TOP).
Fig. 6: RMN
donde se observan
lesiones
DISCUSIÓN
desmielinizantes
no perivasculares Las papilitis son afecciones inflamatorias
ni confluyentes en del disco óptico que principalmente aconte-
ambos hemisferios cen en pacientes jóvenes. Su etiología es
cerebrales. muy amplia pues abarca las neuritis ópticas
idiopáticas, infecciones víricas de la infan-
PMN o microorganismos. Cultivo negativo a cia, infecciones víricas y postvíricas del
las 72 horas. Aglutinación negativa frente a H. adulto (mononucleosis infecciosa), enferme-
Influenza b, S. Pneumoniae, N. Meningitidis dades desmielinizantes (esclerosis múltiple),
A-B-C. Criptococcus negativo. Adenosina herpes zoster, inflamaciones contiguas de
deaminasa en líquido biológico negativa. No meninges, órbita o senos, e inflamaciones
se observan bandas oligoclonales. intraoculares (tuberculosis y sífilis) (2).
Estudio electrofisiológico: PEV realizado El significado de la neuritis óptica (NO)
con estímulo DAMERO, puso de manifiesto como síntoma de presentación de la esclero-
una respuesta visual cortical P100 patológica sis múltiple (EM) ha sido objeto de muchos
a nivel del ojo izquierdo siendo normal en estudios. La misma puede ser el primer e
incluso el único signo anunciador de dicha
enfermedad (3).
El examen de fondo de ojo suele ser nor-
mal en el inicio y sólo el 10% presenta ede-
ma de papila, hecho que se produce si la pla-
ca de desmielinización se encuentra en el tra-
yecto del nervio óptico situado entre el globo
ocular y la entrada de la arteria central de la
retina, como ocurre en nuestro paciente (4).
Fig. 7: Es imposible determinar si la neuritis óptica
Recuperación aislada predice el desarrollo posterior de EM
anatómica de la ya que no todos los pacientes que cursan con
papila óptica OI. NO la desarrollarán (3). Según las series, entre
110 ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 107-111
Papilitis unilateral como primer signo de esclerosis múltiple
un 34 y un 80% de los pacientes que presentan hallazgos compatibles con una EM. Los PEV
neuritis óptica desarrollan EM, normalmente realizados con estímulo FLASH pusieron de
dentro de los 2 años siguientes al inicio, y con manifiesto una respuesta visual cortical con
más frecuencia si la NO es bilateral (4). latencia P1 normal en ambos ojos y morfolo-
Las pruebas complementarias en la EM gía del potencial de acción alterada a nivel
como el estudio de bandas oligoclonales en del ojo izquierdo, lo que es sugestivo de EM.
LCR, PEV, auditivos y somatosensoriales, Sin embargo en el estudio del LCR no se
están alterados en un 80% (1). observaron bandas oligoclonales las cuales
La prueba diagnóstica de imagen más suelen ser positivas hasta en un 80% como
importante en la EM es la RMN. Los pacien- refieren Millá et al.
tes con NO pueden presentar un nervio ópti-
co afectado en los estudios con gadolinio y
supresión de grasa o pueden no mostrar ano- CONCLUSIÓN
malías. Además, la RMN del cerebro puede
presentar múltiples placas periventriculares La papilitis unilateral, aunque no sea la
en substancia blanca y cuerpo calloso (5). forma más típica de presentación en la escle-
Rizzo et al. (6) encuentran lesiones suges- rosis múltiple, nos debe hacer pensar en la
tivas de EM en la RMN en el 50% de los misma e iniciar los estudios de despistaje
casos tras un primer episodio de NO. Miller oportunos.
et al describieron 2 o más placas de desmie- El diagnóstico definitivo de esclerosis
linización en la RMN en el 64% de los 53 múltiple no se puede realizar hasta que no se
pacientes estudiados con NO durante los pri- presente un nuevo déficit neurológico, aun-
meros 12 meses tras el episodio visual. que la presencia de lesiones en la RMN tras
Jacobs et al. las observaron en el 40% de los una neuritis óptica confiere un mayor riesgo
pacientes con NO 3 semanas después de la de desarrollarla.
misma. Frederiksen et al. en el 62% de 50
pacientes entre los 3 y 49 días. En estos estu-
dios existen diferentes prevalencias de imá- BIBLIOGRAFÍA
genes anormales en la RMN explicadas pro-
1. Millá Griñó E., Arruga Ginebreda J. Diagnósti-
bablemente por las diferencias en los crite- co diferencial de la papila elevada. Oftalmolo-
rios de selección, en la técnica de la resonan- gía práctica 1995; 2: 24-41.
cia, número de pacientes, retraso entre la NO 2. Bilbao Calabuig R, Fernández Escames C,
y la práctica de la prueba, etc (7). Los Gutiérrez Ortiz C. Neuritis óptica retrobulbar.
pacientes inscritos en el Ensayo de Trata- Oftalmología práctica 1995; 2: 48-53.
miento de la Neuritis Óptica con una RMN 3. Lewis P. Rowland. Enfermedades desmielini-
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de cerebro anormal coherente con desmieli- ción. Salvat. Barcelona 1987.
nización tienen una mayor posibilidad esta- 4. Hernández MA, Fernández O. Nuevas perspec-
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un plazo de 2 años en comparación con los anual de la S.E.N., Barcelona 1993.
pacientes con neuritis óptica y estudios por 5. Brian D. Ellis M, Jeffrey P. Hogg M. Imágenes
RMN normales (5). neurológicas para el oftalmólogo general. Ner-
vio óptico, quiasma y vías postquiasmáticas.
La localización de la placa de desmielini-
Focal points. Highlights of ophthalmology.
zación en el nervio óptico, en este caso, es American Academy of ophthalmology. 5-6.
poco frecuente y origina una papilitis que 6. Rizzo JF, Lessel S. Risk of developing multiple
inicialmente desvía la sospecha diagnóstica. esclerosis after uncomplicated optic neuritis; a
Nuestro paciente presenta un edema de long term prospective study. Neurology 1988;
papila unilateral compatible con una papilitis 38: 185-190.
ya que mediante la historia clínica y las prue- 7. Río J, Nos C, Rovira A, Tintoré M, Codina A,
Montalbán X. Desarrollo de una esclerosis múl-
bas complementarias se han descartado las tiple tras un episodio aislado de neuritis óptica.
causas traumáticas, vasculares, tumorales Estudio mediante resonancia magnética. Med.
compresivas, tóxicas, etc,.. La RMN mostró Clin. (Barc) 1997; 109: 370-372.
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 107-111 111
ARCH. SOC. CANAR. OFTAL., 2002; 13: 113-116 CASO CLÍNICO
Corticoides intralesionales en
cicatriz hipertrófica
Intralesional corticoids in hypertrophic scar
PÉREZ SILGUERO D1, PÉREZ SILGUERO MA1, JIMÉNEZ GARCÍA A2,
BERNAL BLASCO I2, PÉREZ HERNÁNDEZ FR1, WEILL D1
RESUMEN
Presentamos el caso de una cicatriz hipertrófica unilateral localizada en el párpado superior,
una ubicación inusual para esta patología, secundaria a blefaroplastia. El tratamiento qui-
rúrgico de la misma no resolvió el problema. Posteriormente se decidió tratamiento con-
servador con inyecciones de corticoides intralesionales, consiguiéndose la práctica resolu-
ción del cuadro. Defendemos el uso de este último tratamiento como la primera elección
para queloides y cicatrices hipertróficas.
SUMMARY
We present the unusual case of an unilateral hypertrophic scar placed in the superior eyelid
after a blepharoplasty. The surgery treatment didn´t resolve it. Then, we applied intralesio-
nal corticoids successfully. We think this must be the first line treatment in keloids and
hypertrophic scars.
Centro Insular de Oftalmología. Hospital Materno Infantil. Hospital General de Buenos Aires.
1 Doctor en Medicina y Cirugía.
2 Licenciado en Medicina y Cirugía.
Correspondencia:
David Pérez Silguero
Centro Insular de Oftalmología
Las Palmas de Gran Canaria
España
PÉREZ SILGUERO D, et al.
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nativo no contraindicado por el uso previo de Dec; 8(8): 591-595.
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4. Berman B, Flores F. The treatment of hiper-
RESUMEN
Introducción: A lo largo de una sesión quirúrgica siempre se genera estrés, con el consiguiente
agotamiento físico y psíquico del cirujano. En el plano somático se generan tensiones mus-
culares que derivan en contracturas transitorias o perennes y en una disminución de la habi-
lidad manual.
Existen múltiples técnicas de relajación muscular o integral de tipo general y otras enfocadas
a determinadas profesiones, pero no hemos encontrado ninguna técnica específica dirigida
a los cirujanos que operan con microscopio. Por tanto, nuestro objetivo es diseñarla.
Descripción de la técnica: Hemos diseñado una técnica de automasaje rápido con control res-
piratorio dirigido preferentemente a los miembros superiores que se aplica durante los 5 ó
6 minutos que dura el lavado quirúrgico. Se reparten en tres fases, la primera «en seco» que
dura 30 segundos, la segunda «bajo el chorro» que se prolonga 4-5 minutos y la tercera
«durante el secado» que se reduce a 30 segundos. Presentamos un addendum opcional de
30 segundos aprovechando el atado de la bata quirúrgica.
Discusión-Comentarios: Nuestras premisa prioritaria era que los ejercicios pasaran desaper-
cibidos para evitar comentarios jocosos y ridiculizantes (y por tanto garantizar su realiza-
ción). Las otras premisas también se han cumplido, es fácil de ejecutar y de recordar, no
altera en nada la eficacia del lavado quirúrgico, no necesita de terceras personas y no
requiere un tiempo añadido.
SUMMARY
Introduction: Normally, a surgical session produces stress, with physical and psychological
surgeon’s exhaustion. In the somatic plan, surgeons have muscular tensions followed of the
transitory or perpetual muscular contractures and a diminution of manual skill.
Correspondencia:
Carlos Grande Baos
C/. Rey Francisco, 29
28008 Madrid
GRANDE BAOS C
There are several muscular or integral relaxation techniques for general people and certain
works, but we don’t found a technique for surgeons operating with microscope. For that,
our objective is to design it.
Description of the technique: We are designed a massage’one rapid technique with control of
the breath preferentially for the superior member. Its duration is 5 or six minutes. There are
three phases, the first «high and dry» lasts 30 seconds, the second «under the stream» lasts
4-5 minutes and the third «drying up» lasts 30 seconds. We present optional addendum
during 30 seconds while the nurse ties our surgical coat.
Discussion-Commentaries: Our main premise is to obtain an unnoticed technique to avoid
jocose and ridicule commentaries. The others premises are also accomplish, is easy to exe-
cute it and to remember it, the surgical washing is unaltered, no precise other people and no
require added time.
Reutilización de dispositivos
oftalmológicos de uso único
Reuse of single-use ophthalmic devices
ABREU GONZÁLEZ R1, ABREU REYES JA2
Correspondencia:
Rodrigo Abreu González
Avda. Tinguaro, 9
38370 La Matanza de Acentejo
España
E-mail: rabreu@oftalnet.nu
ABREU GONZÁLEZ R, et al.
1977 Abreu Reyes, José A. Avda. Tingua- 1992 Borges Trujillo, Rosa. C/. Martínez de
ro, 9. 38870 La Matanza - Sta. Cruz Escobar 8, 4.º A. 35007-LAS PAL-
de Tenerife MAS
jabreu@oftalnet.nu 1993 Brito Muguerza, M.ª. Carmelina. C/.
web: http://www.oftalnet.un Suárez Guerra 61, 4.º Izqui. 38002-
1976 Abreu Reyes, Pedro D. C/. Jesús y S.C. DE TENERIFE
María 54, 2.º-A 38004 S/C DE TENE- 1998 Cabrera López, Francisco. Angel Gui-
RIFE merá n.º 3 - 2.º. 35003-Las Palmas
abreu@correos.comtf.es 1976 Cabrera Pérez, Antonio. C/. Canalejas
1975 Aguilar Estévez, José J. C/. Obispo 62. 35003-LAS PALMAS
Rey Redondo 27-2.º. 38201 LA 1992 Cano Gijón, Purificación. C/. Gral.
LAGUNA, Tenerife Bravo 42, 1.º. 35000-LAS PALMAS
1985 Al Abdul Razzak, Huneidi. Anselmo 1979 Cardona Guerra, Pedro. C/. Juan Dios
J. BenÍtez 6 - D, 3.º D. 38004 S/C DE Martín, 21. 35400-ARUCAS, Gran
TENERIFE Canaria
1988 Al Hiraki Al Hiraki, Hassan. Avda. 25 1991 Carrillo Espejo, José Joaquín. C/.
de Julio, 34 -2.º. 38004 - S/C DE General Bravo 42, 4.º. 35002-LAS
TENERIFE PALMAS
1995 Alemán Flores, Rafael. C/. Fernando 1976 Carrillo Nieves, Antonio. C/. General
Galván 6, 2.º. 35001-LAS PALMAS Bravo 1. 35002-LAS PALMAS
G.C. 1975 Casteleiro Licetti, Antonio. Obispo
1990 Alvarez Hernández, Teresa. C/. José Benítez de Lugo 38, 1.º. 38300-LA
López, 39 - 1.º. 38700-S/C DE LA OROTAVA, Tenerife
PALMA, Tenerife 1996 Castellanos Solanes, Jorge. Hospital
1992 Alvarez Marín, Jorge. Urb. Coralito, de la SS de Arrecife, Lanzarote - Lan-
viv. 21. Finca España. 38205-LA zarote
LAGUNA jorgeykatia@abonados.cplus.es
jam@correos.comtf.es 1976 Cifuentes Aguilar, Lina Manuela.
1992 Amigó Rodríguez, Alfredo. C/. La Apdo. de Correos 10271. 38080-S.C.
Marina 7, 3.º-41-EDF. Hamilton. DE TENERIFE
38002-S/C DE TENERIFE 1967 Contreras Estévez, Concepción. C/.
1997 Ayala Barroso, Eva. C/. El Durazno Villa de Marín N.º 6, 5.º C. 28029-
75. 38350-TACORONTE. Tenerife MADRID
1993 Badia Llahi, Hugo Enrique. C/. Suá- 1993 Cordovés Dorta, Luis. C/. General
rez Guerra 61, 4.º Izqui. 38002-S.C. Antequera, 12. 38004-S.C. DE
DE TENERIFE TENERIFE
Barry Gómez, Carlos-Las Palmas cordoves@retemail.es
1978 Barry Rodríguez, Julio. Viera y Clavi- 1975 De la Cruz Rodríguez, José M.ª. C/.
jo 19, 4.º. 35002-LAS PALMAS Las Flores 7, San Honorato. 38203-
1991 Beltrán Ferrer, José Vicente. Rafael LA LAGUNA, Tenerife
Cabrera 22, bajo. 35002-LAS PAL- 1979 Del Arco Aguilar, José Manuel. Resi-
MAS dencial Anaga, Edf. Silvia - Ptal. 3.º 6.
1995 Betancor Padilla, Diego. C/. Obispo 38001-S.C. DE TENERIFE
Rey Redondo 27, 2.º. 38201-LA 1972 Del Rosario Cedrés, David. Av.
LAGUNA, Tenerife Asuncionistas 2, 1.º 38006-S/C. DE
1978 Bonilla Aguiar, Felix. Macher. TENERIFE
35571-LANZAROTE, Las Palmas de 1991 Delgado Miranda, José Luis. C/.
G.C. Callao de Lima , 27- 2.º. 38003-S.C.
macher@lix.servicom.es DE TENERIFE
127
Relación de socios
1975 Díaz Santiago, Juan J. C/. Luis Dores- 1988 Hernández Brito, Ana María. Crta.
te Silva 62, 1.º 35004-LAS PALMAS Mesa Mota, N.º 17. 38208-LA
1995 Enríquez de la Fe, Ramón Fco. Av. LAGUNA, Tenerife
Rafael Cabrera 26, 7.º A, D. 35002- 1978 Hernández González, Manuel. C/.
LAS PALMAS Puerta de Reventón N.º 10. LAS PAL-
1974 Escovar Tolosa, Antonio. C/. Valois, MAS
34. 38400-PUERTO DE LA CRUZ, 1997 Hernández González, Sotero. C/.
Tenerife Pérez Soto, N.º 3. 38009-SANTA
1992 Fariña Hernández, Francisco J. C/. El CRUZ DE TENERIFE
Cano s/n. Edif. Capri 2, piso 101. 1996 Herrera Piñero, Ricardo. Urb. Acorán,
38109-RADAZUL. El Rosario. Tene- Parque Miramar I; N.º 1. 38109-S/C.
rife DE TENERIFE
fjavierf@idecnet.com 1998 Iceta González, Ignacio. C/. Santa
1995 Febles Reyes, José Vidal. Av. 3 de Rosalía 49, 1º C 38002-S/C. DE
Mayo 20, 3.º. 38410-LOS REALE- TENERIFE
JOS, Tenerife 1992 Kalab Collado, Antonio. C/. Luis
1992 Ferrando Gómez, Rafael. C/. Plaza de Doreste Silva 36-2-2. 35000-LAS
la Feria 40, 9.º. 35003-LAS PALMAS PALMAS
1982 Font Castro, Aurora. C/. M. E. Castro 1995 Kalitovics Nobrégas, Nicolás. San
Fariña 75, Mesa del Mar. 38350- Lázaro 25. 38206-LA LAGUNA,
TACORONTE, Tenerife Tenerife
1979 Font Pérez, Tomás. C/. Jesús 50. 1990 León Hernández, Francisco A. C/.
46007-VALENCIA Alvarez de Abreu 24- 2.º. 38700-S.C.
1990 Fraile Peñate, María José. Carretera DE LA PALMA, S.C. Tenerife
Mesa Mota 13. 38200-LA LAGUNA, 1974 Llarena Borges, José Ramón. C/.
Tenerife Gral. Antequera 4, 4.º. 38004-S.C. DE
1986 García González, Matías. C/. Capitán TENERIFE
Lucena 3. 35007-LAS PALMAS 1972 Llarena Codesido, Guzmán. C/. Sabino
1978 García Sánchez, Julián. Plaza Cristo Berthelot 1, 5.º. 38003-S.C. DE TENE-
Rey 4, 10.º. 28040-MADRID RIFE
1976 García Suárez,. Alfonso. C/. Francis- 1992 López Cotín, Concepción. C/. Barcelo-
co Torquemada 1. 35011-LAS PAL- na 3, Atico D. 35006-LAS PALMAS
MAS 1974 López Domínguez, Bernabé. C/. Cano
1992 Gil Hernández, M.ª Antonia. C/. 42, 1.º Izq. 35002-LAS PALMAS
Angel Romero, 1. 38009-S.C. DE 1976 López Gracia, Matías. C/ Gral. San-
TENERIFE jurjo 44, 12-B. 35010-LAS PALMAS
1974 González de la Rosa, Manuel A. C/. matias2@santandersupernet.com
Valdés Parc. 65, Radazul. 38109-EL 1990 López Villar, Joaquín. C/. Rafael
ROSARIO, Tenerife Cabrera 22, Pta. bajo. 35002-LAS
mgdelarosa@jet.es PALMAS
1974 González Jiménez, Antonio. Av. José 1992 Losada Castillo, M.ª José. C/. Bernar-
Antonio, 5. 38300-LA OROTAVA, dino Seman 3, Edf. Jonatan, P-2, 301.
Tenerife 38005-S.C. DE TENERIFE
1997 González Padrón, Manuel. C/. Gene- 1974 Losada García-Ontiveros, Gonzalo.
ral Mola 80, 5.º piso. 38004-S. Cruz Av. Rafael Cabrera 4, - 3.º. 35002-
de Tenerife LAS PALMAS, Gran Canaria
1992 Guillén Molina, Santiago. Serv. de 1992 Luque Arellano, Manuel. C/. Adarve
Oftalmología. Hosp. Insular. 35000- 24, 1.º-Izq. 14001-CORDOBA
LAS PALMAS 1992 Manrique de Lara Morales, Alfonso.
1974 Gutiérrez González, Francisco. C/. Plaza de la Feria 10- 2.º-dcha. 35003-
Alemania, 39. 35006-LAS PALMAS LAS PALMAS
128
Relación de socios
1984 Mantolán Sarmiento, Cristina. Urb. 1972 Ojeda Guerra, Antonio. C/. Costa y
Guajara, Delta, 54. 38205-LA LAGU- Grijalba, 5-1º. 38004-S/C. DE TENE-
NA, Tenerife RIFE
1984 Marrero Saavedra, M.ª. Dolores. C/. 1996 Ojeda Socorro, Ramón. C/. Rafael
Obispo Encina 1, 2.º iqd. 35004-LAS Hardisson 3, 1.º- Izq. 38005-S/C. DE
PALMAS, Gran Canaria TENERIFE
1989 Martín Barrera, Fernando. Caletillas 1992 Pareja Ríos, Alicia. C/. Adelantado, N.º
20, Edf. Calemar, Apto. 22. 38520- 36, Edf. Nivaria, Portal H, 3.º-1.º.
LAS CALETILLAS, Candelaria, 38200-LA LAGUNA, S.C. de Tenerife
Tenerife 1992 Pelaez Alvarez, María Isabel. C/. Rafa-
1976 Martín González, José Agustín. C/. el Cabrera 22, 1.º. 35002-LAS PAL-
Greco 17. 38007-S.C.DE TENERIFE MAS G. C.
1974 Martín Hernández, Rodrigo. C/. Nava 1980 Pellicer Lorca, Tomás. C/. Barceló 15,
y Grimón 70. 38201-LA LAGUNA, 2.º Izda. 28004-MADRID
Tenerife 1979 Pérez Barreto, Leonor. Urb. Guajara Del-
1989 Martín Torres, M.ª. José. C/. Alvareda ta 77. 38205-LA LAGUNA, Tenerife
35, 6.º B. 35008-LAS PALMAS. 1975 Pérez Espejo, José. C/. Pérez de Rosas
1995 Martínez de Munno, Jorge Eduardo. 13, entresuelo. 38004-S/C DE TENE-
C/. Elcano, Edif. Beti, Esc. B; piso RIFE
10.º D. 38109-RADAZUL, El Rosa- 1990 Pérez Figueroa, Nohora. Edif. Morera
rio, Tenerife 8, cuarto. 38700-S/C. DE LA PAL-
1976 Martínez-Barona Garabito, Fernando. MA, Tenerife
Av. Prof. Peraza de Ayala 9, 7.º. 1992 Pérez González, Francisco. C/. Gago
38001-S.C. DE TENERIFE Goutinho 48, 1.º. 35000-TELDE, Las
1992 Medina Herrera, María. C/. Néstor de la Palmas de G.C.
Torre 7-1.º Izq. 35001-LAS PALMAS 1976 Pérez Hernández, Francisco. C/. León
1975 Méndez González, Julio. C/. Perdomo y Castillo 51, 2.º. 35003-LAS PAL-
45. 35002-LAS PALMAS MAS G.C.
info@juliomendez.com 1987 Pérez Martín, William. Urb. Gil Rol-
1983 Mesa Moreno, Carmen Gloria. Serv. dan 24 - Guamasa. 38330-LA LAGU-
Oftalmología, H.U.C. La Cuesta. NA, Tenerife
38200-LA LAGUNA, Tenerife 1986 Pérez Morán, Manuel. C/. Suárez
1993 Mohrez Muvdi, Raji. Serv. Oftalmo- Guerra 50, 2.º 1 Edif. El Cedro.
logía, Hospital de la S.S. 35600-PTO. 38002-S/C. DE TENERIFE
DEL ROSARO, Fuerteventura 1997 Pérez Silguero, David. C/. León y Casti-
1999 Montesinos Ventura, Blanca M.ª. C/. llo 49, piso 4.º. P-1. 35003-LAS PAL-
Santa Teresa de Jornet Ibars 9, 2.º D. MAS, G. C.
38004-S/C. DE TENERIFE 1992 Pérez Silguero, Miguel Angel. Serv.
blancamv@comtf.es Oftalmología C.H. La Candelaria.
1992 Muiños Gómez-Camacho, José 38000-Ctra. Del Rosario, s/n, S.C.
Alberto. C/. Gral. Godet 30, puerta 6- TENERIFE
2.º B. 38006-S.C. DE TENERIFE 1979 Piñana Darias, Carlos. C/. Canalejas
1997 Mújica Moreno, Vicente. C/. Felix 33. 35003-LAS PALMAS G.C.
Gila, N.º 1, 4.º B. SEGOVIA 1979 Piñero Carrión, Antonio. C/. Ciudad
1972 Murube del Castillo, Juan. H. Ramón de Ronda 4, 2.º-D. 41004-SEVILLA
y Cajal. Serv. Oftalmología-Apt. 37. 1989 Quijada Fumero, Elíseo. C/. Alfonso
28034 MADRID XIII 38, P. 2 viv. 4- La Higuerita.
1992 Negrín Díaz, Manuel R. C/. Balboa, 38200-LA LAGUNA, Tenerife
Urb. Paraíso 5 Bloque. 30; RADA- 1992 Ramos Ramos, Juan José. C/. León y
ZUL ALTO. 38109-El Rosario, Tene- Castillo 112-3.º-26. 35004-LAS PAL-
rife MAS
129
Relación de socios
1997 Reyes Rodríguez, Miguel Angel. 1987 Sánchez Pérez, Jorge Luis. C/. Santia-
Serv. Oftalmología; H. Materno, Las go Cuadrado 23, 2.º B. 38006-S.C.
Palmas-LAS PALMAS DE TENERIFE
1972 Rodríguez Galván, Corviniano. C/. 1982 Santana Navarro, Francisco. C/. Olof
Costa y Grijalba 4. 38004-S.C. DE Palme 44, 11-A. 35010-LAS PAL-
TENERIFE MAS
1985 Rodríguez Hernández, José Vicente. cadrisana@lpa.servicom.es
C/. Olof Palme 44, -2.º C. 35010-LAS 1992 Santana Navarro, María Dolores. C/.
PALMAS San Marcial 17. 35250-INGENIO ,
1998 Rodríguez Martín, Javier. HUC. Ctra. Las Palmas de G.C.
La Cuesta-Taco s/n. 38320-LA 1987 Santana Valerón, Fermín. C/. La Isa,
LAGUNA, Tenerife N.º 12. 38205-LA LAGUNA, Tenerife
Javierrm@comtf.es 1991 Santos Barrera, Roberto. Urba. Guaja-
1976 Rodríguez Pérez, José Alfonso. Avda. ra Beta 97. 38205-LA LAGUNA
Mesa y López 5, 1.º p. 35006-LAS Tenerife
PALMAS 1975 Serrano García, Miguel Angel. Calle-
1992 Rodríguez Pérez, Mercedes. C/. Con- jón de Bouza 1 - 21, Ofc. 6. 38002-
cejal García Feo 5, -3.ºB. 35011-LAS S/C. DE TENERIFE
PALMAS 1992 Toledo Monzón, Juan Luis. C/ Alonso
1992 Royo Martínez, Esperanza. C/. Helio- Alvarado 10, 2.º B. 35000-LAS PAL-
doro Rguez López 30, 3.º N. 38005- MAS
S/C.DE TENERIFE 1989 Valls Quintana, Pedro. C/. Carvajal 3
1972 Ruiz Funes, José. Rambla Gral. Fran- P. 4.º 6 C. 35004-LAS PALMAS
co 104, 2.º-D. 38004-S/C. DE TENE- 1987 Vargas González, Juan Carlos. C/. Sin
RIFE Salida, 7-Bajo; B. 38004-S/C. DE
1995 Saloña Bordas, José Luis. Valls de la TENERIFE
Torre 7, 1.º, Clínica Arrecife. 35500- 1992 Ventura Rodríguez, Antonio. C/. San-
ARRECIFE, Lanzarote tiago Bravo de Laguna 15, 3.º I.
1988 Sánchez Méndez, Manuel. C/. Gene- 35000-LAS PALMAS, Gran Canaria
ral Godet 33 , 4.º A. 38006-S/C. DE 1978 Zaragoza García, Pablo. C/. Arturo
TENERIFE Soria, 310, 3.º C. 28003-MADRID.
130
NOTAS
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