Proyecto Alternativo de Titulo Prelimina
Proyecto Alternativo de Titulo Prelimina
Proyecto Alternativo de Titulo Prelimina
Doctrina práctica
DOCTRINA PRÁCTICA
RESUMEN ABSTRACT
En el presente trabajo el autor propone In the present work the author proposes an
un proyecto alternativo de título prelimi- alternative project of preliminary title for
nar para el Código Penal peruano, el cual the Peruvian Criminal Code, which aims
tiene el objetivo de servir de orientación to serve as guidance and discussion for a
y discusión para una futura y auténtica future and authentic criminal reform. This
reforma penal. Este proyecto alternativo da alternative project reveals the functions that
a conocer las funciones que materialmente materially meets the punishment and raises a
cumple el castigo y plantea un cambio substantial change in the Criminal Code: the
sustancial en el Código Penal: el abandono abandonment of its legitimation by virtue of
de su legitimación en virtud de los fines the preventive purposes (general and special).
preventivos (general y especial).
Keywords: Alternative project / Punis-
Palabras claves: Proyecto alternativo / hment / Legitimization of punishment /
Castigo / Legitimación del castigo / Pre- Prevention general / Special prevention /
vención general / Prevención especial / Substantial change.
Cambio sustancial.
Title: Alternative project of preliminary
Recibido: 09-11-17 title for the Peruvian Penal Code: Towards
Aceptado: 11-12-17 the end of preventive mythologies
Publicado en línea: 02-01-18
* Abogado y magíster en Derecho por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Profesor de
Filosofía del Derecho, en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos
(2016-2017).
para poner en marcha un proceso que En esta ocasión —en pleno tránsito
conduzca a un nuevo Código Penal. Sin del siglo xxi—, el nuevo paradigma
un cambio sustancial, un nuevo Código que sustente un cambio sustancial es el
Penal es absurdo. abandono y la negación de las funciones
Un cambio sustancial que conduzca o finalidades preventivas que históri-
a un nuevo Código Penal tiene que ver camente se han atribuido al castigo o
con un cambio de perspectiva respecto a pena estatal para legitimar los sistemas
la legitimación del castigo o el concepto punitivos estatales; funciones o fines
de delito. Así, de una visión retributiva a que el castigo o pena estatal no cumple.
una visión preventiva de la legitimación No se trata de negar que los ideales
del castigo se da un cambio sustancial preventivos sean positivos, sin duda que
para modificar el tipo y duración de lo son, mas ellos no se alcanzan con el
las penas; lo mismo ocurre si la visión castigo, por el contrario, con el uso de
preventiva se enfoca en resocializar al él bajo un programa de ideales el Esta-
delincuente o integrar a la sociedad o do ha excluido a seres humanos de la
viceversa. De igual manera, pasar de una participación social y política. A ello se
visión del delito como la transgresión de debe agregar el papel fundamental de la
valores ético-religiosos a una visión en la dinámica económica, responsable de la
que el delito es aquello que produce un desigual distribución de bienes.
daño social hay un cambio sustancial, en
En atención a que el cambio sus-
este caso, sus consecuencias inmediatas
tancial tiene que ver sobre todo con la
serán, por una parte, descriminalizar
legitimación del castigo o pena estatal
conductas y, por otra, criminalizar
antes que, con un nuevo concepto de
aquellas que no las eran ¿Cuál es el
delito, se debe, entonces, cuestionar el
nuevo criterio que los redactores de un
tradicional discurso legitimador del cas-
nuevo Código Penal peruano tienen
tigo o pena estatal: Los fines, funciones o
respecto del concepto de delito o sobre
la legitimación del castigo? ¿Qué crite- propósitos que la pena debe cumplir no se
rio los lleva a disminuir o ampliar las han realizado; por el contrario, difieren de
penas, o, descriminalizar o criminalizar las funciones que materialmente cumplen.
conductas? E. Zaffaroni3 en nuestra región
Estos tipos de cambios sustanciales explica el ejercicio de poder político
sobre la visión del castigo y el delito son institucionalizado en la dialéctica entre
los que verdaderamente deben motivar Estado de derecho y Estado policía, sien-
un proyecto de nuevo Código Penal. do el poder punitivo una manifestación
Igualmente, la teoría jurídico-penal no
puede estar ausente de una teoría polí- 3 Cfr. Zaffaroni, Eugenio; Alejandro Alagia
tica y del contexto social real al que las y Alejandro Slokar, Derecho penal. Parte
general, 2.ª ed., Buenos Aires: Ediar, 2002, p.
propuestas se pretenden aplicar. 43 y ss.
del segundo. En esa pugna, el Estado que (c) ocultan el modo real de ejercicio
de derecho se esfuerza por contener las del poder punitivo y con ello lo legitiman,
y que (d) solo en forma ocasional y aislada
pulsiones del Estado de policía (violento, el poder punitivo cumple con alguna de las
vertical y autoritario). Así, al legitimar funciones manifiestas asignadas.
la pena (poder punitivo) se legitima el
Estado de policía. Más allá de su expli- IMPORTANTE
cación, distingue entre el ser (funciones
latentes) y el deber ser (funciones mani- Una reforma penal en el contexto de
fiestas) de la pena; las teorías de la pena las sociedades contemporáneas no
puede limitarse a cuestiones de estilo
se mueven en el plano del deber ser, las
y al mantenimiento de los tradiciona-
funciones que los penalistas creen que les paradigmas —los fines preventi-
la pena debe cumplir, cosa distinta de vos— que legitiman la más dura de
las funciones reales (ser) que la pena las sanciones que tiene el Estado: el
cumple. En ese sentido, el citado autor, castigo o pena estatal. Esto último so-
señala que: bre todo cuando no existe suficiente
evidencia de que hayan alcanzado los
fines o cumplido las funciones que se
Si bien no cabe duda que son preferibles las
le atribuye.
teorías positivas de la pena que legitiman en
menor medida el poder punitivo (derecho
penal liberal tradicional), cabe observar Rivera4, en la península ibérica,
que (a) no dejan de ser legitimantes del luego de señalar que fue el discurso
Estado de policía; (b) que desde el punto jurídico-penal el que hegemonizó la
de vista de su coherencia interna suelen ser
más contradictorias que las que adoptan legitimación de la pena con las teorías
sin ambages la defensa del Estado policial, absolutas y las relativas, indicó:
presentando flancos muy débiles al ata-
que autoritario; y que (c) suelen generar Más, frente al fracaso comprobado de las
confusiones, porque no pueden ocultar la funciones atribuidas a la pena, no tardaron
contradicción que implica invocar el Esta- en aflorar discusiones, debates, “luchas de
do de derecho para legitimar (aunque sea escuelas” […], teorías intermedias […] que
parcialmente) un poder propio del Estado no venían sino a reflejar, precisamente, la
de policía. Ante estos inconvenientes, cabe profunda crisis de legitimación en que el
reconocer que resultaría mucho más diáfa- castigo ha estado sumido desde los albores,
no renunciar a cualquier teoría positiva de la al menos, de la modernidad. […]. Ahora
pena, dado que es inevitable que (a) todas bien, es preciso aquí señalar que, cuando
ellas legitimen en alguna medida el Estado se habla de funciones, semejantes discursos
de policía, como también (b) que asignen jurídico-penales solo pudieron describir
al poder punitivo funciones falsas desde el unos supuestos efectos que la pena debería
punto de vista de la ciencia social, pues no cumplir; […]. Obvio es señalar que nada
se verifican empíricamente, provienen de de ello tiene que ver con las funciones
generalizaciones arbitrarias de casos parti-
culares de eficacia, jamás pueden afirmarse 4 Rivera, I., Recorridos y posibles formas de la
en todos los casos y ni siquiera en un núme- penalidad, Barcelona: Antrhopos, 2005, p. 7
ro significativo de ellos. A esto cabe agregar y ss.
que materialmente cumplan los sistemas disposiciones legales que intenten describir
punitivos en la realidad, cuestión que por normativamente el significado de la pena.
pertenecer al universo sociológico, [casi]
nunca fue advertido por aquel discurso Por lo tanto, la reforma penal tiene
jurídico hegemónico. En tal sentido, se- que promover cambios en las bases del
mejante discurso, pese a querer construir
auténticas teorías de la pena, se quedó en derecho penal y en la forma de compren-
el estadio —en el mejor de los casos— de derlo. La capacidad de rendimiento de
la construcción de simples mitologías del los tradicionales discursos del derecho
castigo; mas no por ello […] estas dejaron penal que legitiman los sistemas puni-
de cumplir un claro papel ideológico.
tivos ya se agotó. Un cambio sustancial
En nuestro país, V. Prado5, además al menos hubiese sido poner en duda
de advertir de la transversalidad del giro que la pena cumple determinados fines
punitivo en los sistemas penales con- preventivos y, de ese modo, omitir en
temporáneos de América Latina y de la la redacción del fututo Código Penal
prevalencia en los especialistas de una el establecimiento de funciones nor-
voluntad de justificar la acción punitiva mativamente declaradas. Sin embargo,
en vez de debatir lo que la pena implica ni siquiera se ha dudado de los fines
como idea o realidad, ha apuntado la preventivos de la pena.
difícil situación del discurso jurídico- IMPORTANTE
penal entorno al castigo:
Un cambio sustancial que conduzca a
Efectivamente, la complejidad teórica, pero un nuevo Código Penal tiene que ver
sobre todo política, que expresa la pena, y con un cambio de perspectiva res-
con ella el derecho penal, no han permitido pecto a la legitimación del castigo o
hasta el presente sintetizar en una fórmula
el concepto de delito. Así, de una vi-
conceptual convincente las dimensiones
sión retributiva a una visión preven-
formales, ideales y, sobre todo, reales de la
pena. De allí que pese al notable desarrollo tiva de la legitimación del castigo se
alcanzado por la dogmática y por la polí- da un cambio sustancial para modifi-
tica criminal en torno a la identificación car el tipo y duración de las penas; lo
del delito y sus consecuencias jurídicas, la mismo ocurre si la visión preventiva
teoría contemporánea nos muestra todavía se enfoca en resocializar al delincuen-
un voluble y equívoco proceso evolutivo te o integrar a la sociedad o vicever-
en post de lograr una definición homogé- sa. De igual manera, pasar de una
nea o cuando menos consensual sobre la visión del delito como la transgre-
pena. Es por ello que los códigos penales sión de valores ético-religiosos a una
modernos, a diferencia de lo ocurrido con visión en la que el delito es aquello
los textos legales del pasado, el legislador que produce un daño social hay un
prudentemente ha renunciado a incluir cambio sustancial, en este caso, sus
consecuencias inmediatas serán, por
una parte, descriminalizar conductas
5 Prado, V., Consecuencias jurídicas del deli- y, por otra, criminalizar aquellas que
to: giro punitivo y nuevo marco legal, Lima: no las eran.
IDEMSA, 2016, p. 89.
moderna que otras carecen, como las (i) El ejercicio del castigo es manifesta-
tribus cazadoras-recolectoras. Las posi- ción de poder punitivo del Estado.
bilidades de justificar el castigo no son El castigo es entonces parte de algo
las mismas en EE. UU. e Inglaterra, mucho más grande y complejo: el
en los países escandinavos, en Europa poder punitivo.
central, en los países del Medio Oriente, (ii) El poder punitivo es una facultad
en las comunidades africanas, en las y función del Estado. Es un instru-
comunidades aborígenes australianas, mento; no es un fin.
en las comunidades aborígenes andinas (iii) El poder punitivo es estructuralmen-
o amazónicas, etc. Entonces, la posibili- te violento, discriminador, vertical y
dad o no de justificación del castigo en arbitrario.
y para América Latina no debe perder
Entonces, a efectos de mostrar la
de vista su propia y real dinámica donde
relación entre castigo y poder punitivo
él cobre sentido, así como al contexto
y la función que el castigo cumple, en
social de la comunidad, a la situación
tanto que es la misma función que la del
de las cárceles y a las consecuencias del poder punitivo, recurriré al modelo del
castigo. iceberg (propuesta didáctica personal).
4.1.1. El poder punitivo
El castigo materialmente es pri-
vación de algún tipo de satisfacción,
bienestar, prerrogativa, permiso, utilidad
o placer. Esta privación produce dolor.
Este hecho se evidencia cuando un padre
priva de un juego a su hijo debido a que
este no cumplió con sus deberes.
Cuando el castigo es administrado
por el Estado es coacción estatal que
priva bienes o derechos. Este tipo de
castigo es lo que denominamos pena (Elaborado por el autor)
estatal en la tradición jurídico-penal (o
El castigo es la punta del iceberg y el
a veces simplemente sanción penal). iceberg es el poder punitivo. La dinámica
A continuación, cuando se utilice la de este poder es altamente compleja. La
expresión “castigo” se estará refiriendo parte visible es el castigo y observamos
a la “pena estatal”. su materialidad en la cárcel. La parte
Con el objetivo de dar sustento a la no visible —normalmente excluida del
reforma del título preliminar del Código discurso jurídico-penal— está integrada
Penal, se fundamentarán estas tres ideas: por la criminalización primaria y la cri-
abstractas con un castigo, luego con punitivo a solo el castigo, se produce una
la selección de conducta concretas y, ilusión. Esta ilusión nos informa que el
finalmente, con la imposición del cas- poder punitivo es legitimable.
tigo a estas últimas. Este mecanismo Si los problemas de legitimación
funcional se materializa en un conjunto del castigo aparecen ya en torno a los
de instituciones estatales —que pueden fines de prevención de delitos que bus-
denominarse sistema penal—: el Poder ca alcanzar (utilidad social: prevención
Legislativo (función legislativa para especial y general). La imposibilidad de
dar solución a un conflicto mediante legitimación se acentúa cuando se mues-
el castigo), la Policía Nacional del Perú tra la operatividad de la criminalización
(función de selección de crímenes o de secundaria: altamente discriminadora.
reclutamiento), el Ministerio Público
(función persecutoria), el Poder Judicial 4.1.2. El castigo y poder punitivo
(función juzgadora y sancionadora) y el El castigo en sí mismo no es ilegí-
Instituto Nacional Penitenciario (fun- timo. El castigo puede cumplir diversas
ción de prisionización). funciones muy bien aceptadas —y, por
ello, legítimas— dependiendo el gru-
IMPORTANTE po humano en el que este tiene lugar.
Determinados grupos humanos —no
La reforma penal tiene que promover
cambios en las bases del derecho pe- integrados a una organización estatal—,
nal y en la forma de comprenderlo. pueden recurrir a él como medio para in-
La capacidad de rendimiento de los timidar a sus miembros, para integrar al
tradicionales discursos del derecho grupo, para expiar la culpa, para evitar la
penal que legitiman los sistemas pu- desintegración frente a otros grupos, para
nitivos ya se agotó. Un cambio sus-
tancial al menos hubiese sido poner reparar algún ideal o para indemnizar a
en duda que la pena cumple deter- la víctima. Cuando es el Estado quien
minados fines preventivos y, de ese recurre al castigo para implementarlo,
modo, omitir en la redacción del fu- —en cualquiera de sus justificaciones
tuto Código Penal el establecimiento posibles— su uso se vuelve ilegítimo. Las
de funciones normativamente decla-
razones de esta ilegitimidad en América
radas. Sin embargo, ni siquiera se ha
dudado de los fines preventivos de la Latina son las siguientes:
pena. (i) El castigo como parte de la dinámica
del poder punitivo en las sociedades
El resultado de esta fenomenología contemporáneas (al menos en gran
punitiva es que no es posible escindir el parte de ellas, y dentro de las cuales
castigo del poder punitivo; en consecuen- está América Latina).
cia, no es posible legitimar solo una parte del (ii) El hecho de que una organización
poder punitivo. Cuando se reduce el poder político-jurídica haga uso de él. Los
Dictamen del Nuevo Código Penal, el cual fue puesto a conocimiento público el
22 de enero del 201512.
El Consejo Nacional de Política Criminal (CONAPOC) en su décima sesión,
realizada el 18 de mayo del 2016, emitió un pronunciamiento13, mediante el
cual decidió conformar un equipo técnico a efectos de que revise el Proyecto
del Código Penal en un plazo no superior a 60 días. El propósito era obtener
una propuesta consensuada, la cual sería remitida al Congreso de la República.
El grupo de trabajo conformado por representantes del Consejo Nacio-
nal de Política Criminal (CONAPOC) del Ministerio de Justicia y Derechos
Humanos revisó y validó el Proyecto de Nuevo Código Penal en diciembre del
201614. Posteriormente, el 24 mayo del 2017, la Secretaría Técnica del Consejo
Nacional de Política Criminal del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos
lo puso a disposición de la comunidad en general15.
De ello se desprende que el equipo técnico en aproximadamente 6 meses,
revisó 12 y 645 artículos del Dictamen de Proyecto de Código Penal del Con-
greso de la República correspondientes al título preliminar y tres libros (“Parte
general”, “Parte especial-delitos” y “Parte especial-faltas”), respectivamente.
El resultado del trabajo del equipo técnico fue un Proyecto de Código
Penal compuesto de 14 y 639 artículos correspondientes al título preliminar y
tres libros (“Parte general”, “Parte especial-delitos” y “Parte especial- faltas”),
respectivamente. El Proyecto de Código Penal cuenta con observaciones ano-
tadas en color rojo.
En vista del camino evolutivo del futuro Código Penal desde el Dictamen
de Ley de Nuevo Código Penal al Proyecto de Código Penal —en el marco
de este trabajo—, es pertinente presentar la comparación de los títulos pre-
liminares. A efectos de hacer más visible la comparación se ha procedido a
cambiar de lugar el articulado, manteniendo el orden en función del Proyecto
de Código Penal.
12 Véase, al respecto, el Dictamen de Ley del Nuevo Código Penal. Recuperado de <http://bit.
ly/2Dapl2z>.
13 Véase, al respecto, el comunicado del Consejo Nacional de Política Criminal. Recuperado de <http://
bit.ly/2DjSV5Z>.
14 Véase la noticia del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos: “CONAPOC valida informe sobre
Proyecto de Nuevo Código Penal en ultima sesión”. Recuperado de <http://bit.ly/2mRmrsB>.
15 Véase la nota informativa del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos respecto al “Proyecto de
Nuevo Código Penal”. Recuperado de <http://bit.ly/2rAXrdg>.
procederá a cambiar de lugar el articulado del título preliminar del Código Penal
de 1991, manteniendo el orden en función del Proyecto de Código Penal.
Código Penal de 1991 Proyecto de Código Penal
Artículo I. Finalidad preventiva Artículo I. Finalidad del Código Penal
Este código tiene por objeto la prevención de delitos y Este código determina las conductas que merecen san-
faltas como medio protector de la persona humana y de ción penal con la finalidad de prevenir los delitos y faltas,
la sociedad. como fundamento del respeto de la persona humana y
de la sociedad.
Artículo IX. Fines de la pena y medidas de seguridad Artículo II. Función y finalidad de la pena y de la medida de
La pena tiene función preventiva, protectora y resocia- seguridad
lizadora. Las medidas de seguridad persiguen fines de La pena tiene la función de sancionar los delitos o faltas
curación, tutela y rehabilitación. regulados en el presente código y tiene finalidad preventiva,
protectora y resocializadora.
La medida de seguridad tiene la función de sancionar
ilícitos penales y tiene finalidad preventiva, terapéutica y
rehabilitadora.
16 El principio de que el régimen penitenciario tiene por objeto la reeducación, rehabilitación y rein-
corporación del penado a la sociedad.
17 Defender la soberanía nacional, garantizar la plena vigencia de los derechos humanos, proteger a la
población de las amenazas contra su seguridad, y promover el bienestar general que se fundamenta
en la justicia y en el desarrollo integral y equilibrado de la Nación.
En esta ocasión, se procedió a unificar dos artículos del título preliminar del
Código Penal de 1991 en uno solo dentro del Proyecto de Código Penal. No hay
mayor observación. Es una disposición necesaria. Las precisiones a este principio,
si las hubiese, son oportunas.
Código Penal de 1991 Proyecto de Código Penal
Artículo VIII. Proporcionalidad de las sanciones Artículo VIII. Proporcionalidad de las penas y de las medidas
La pena no puede sobrepasar la responsabilidad por el de seguridad
hecho. Esta norma no rige en caso de reincidencia ni de La pena no puede sobrepasar la responsabilidad por la
habitualidad del agente al delito. La medida de seguridad conducta delictiva.
solo puede ser ordenada por intereses públicos predomi- La medida de seguridad impuesta debe corresponderse
nantes. [La cursiva es nuestra]. con los requerimientos terapéuticos que exigen las
características del agente para lograr su rehabilitación
conductual.
A diferencia del título preliminar del Código Penal de 1991, el título preliminar
del Proyecto de Código Penal ha añadido otros principios que frecuentemente se
ponen de relieve cuando se estudia las bases del derecho penal liberal:
Hurtado, J., “Reflexiones sobre la reforma Rivera, I., Recorridos y posibles formas de la pena-
del Código Penal”, en Anuario de Derecho lidad, Barcelona: Antrhopos, 2005.
Penal, n.º 2009, Lima: 2011. Recuperado Robinson, P., Principios distributivos del derecho
de <http://bit.ly/2BcklZC>. penal, traducción M. Cancio y I. Ortiz,
Prado, V., Consecuencias jurídicas del delito: Madrid: Marcial Pons, 2012.
giro punitivo y nuevo marco legal, Lima: Zaffaroni, Eugenio; Alejandro Alagia y Alejan-
IDEMSA, 2016. dro Slokar, Derecho penal. Parte general, 2.ª
Universidad de Chile, “Proyecto de Código ed., Buenos Aires: Ediar, 2002.
Penal tipo para Latinoamérica”, en Anales Zaffaroni, E., “La cuestión criminal”, en Suple-
de la Facultad de Derecho, cuarta época, vol. mento Especial de Página 12, n.º 17, Buenos
vii, n.º 7, Santiago: 1967. Recuperado de Aires: 15 de septiembre del 2011.
<http://bit.ly/2Dnenej>.