V Domingo de Pascua
V Domingo de Pascua
II clase, blanco
Gloria, Credo y prefacio de Pascua
En este último domingo después de Pascua, los cánticos de la misa continúan
siendo como todo el Tiempo Pascua, cánticos de triunfo y de alegría. La
Iglesia no se cansa de celebrar la resurrección de Cristo y las gracias
redentoras que han transformado nuestra vida. Pero el hombre se olvida de lo
mejor que hay en sí mismo con una facilidad desconcertante. Por eso nos
exhorta la epístola a practicar con seriedad nuestros deberes de cristianos y
pide la colecta, con la gracia de pensar rectamente, la de conformar nuestra
conducta al ideal que se nos ha enseñado. Esta doble invitación a un constante
esfuerzo personal, al mismo tiempo que a la oración, llevan a un justo
equilibrio de la ascesis cristiana. Por su parte, también loa evangelios nos
inculcan durante este tiempo de oración frecuente, a la que ponen en relación
con el envío del Espíritu Santa y la plegaria del mismo Cristo por los suyos.
Los tres días de rogativas de esta semana insisten todavía más.
COLECTA
Deus, a quo bona cuncta procédunt , Oh Dios, fuente de todo bien, escucha
largíre supplícibus tuis: ut cogitémus, sin cesar nuestras súplicas:
te inspiránte, quæ recta sunt; et, te concédenos, inspirados por Ti, pensar
gubernánte, éadem faciámus. Per lo que es recto y cumplirlo con tu
Dominum Jesum Christum, Filium ayuda. Por nuestro Señor Jesucristo,
Tuum, qui Tecum vivit et regnat in tu Hijo, que contigo vive y reina en la
unitate Spiritus Sancti, Deus, per unidad del Espíritu Santo y es Dios
omnia saecula saeculorum. Amen. por los siglos de los siglos. Amén.
EPÍSTOLA Santiago 1, 22-27
Léctio Epístolæ beáti Jacóbi Apóstoli. Lectura de la carta del Apóstol
Fratres: Estóte factóres verbi, et non Santiago.
auditóres tantum: falléntes Queridos hermanos: Llevad a la
vosmetipsos. Quia si quis audítor est práctica la Palabra. Y no os limitéis a
verbi, et non factor: hic conparábitur escucharla. Engañándoos a vosotros
viro consideránti vultum nativitátis mismos. Pues el que escucha la Palabra
suæ in spéculo: considerávit enim se, y no la pone en práctica, se parece a
et ábiit, et statim oblítus est qualis aquel que se miraba la cara en el espejo;
fuérit. Qui autem perspéxerit in y apenas se miraba, daba media vuelta,
legem perféctam libertátis et y se olvidaba de cómo era. Pero el que
permánserit in ea, non audítor se concentra en el estudio de la Ley
obliviósus factus, sed factor óperis: perfecta (la -que hace libres) y es
hic beátus in facto suo erit. Si quis constante, no como oyente olvidadizo:
autem putat se religiósum esse, non sino para ponerla por obra, éste
refrǽnans linguam suam, sed encontrará la felicidad en practicarla.
sedúcens cor suum, hujus vana est Hay quien se cree hombre religioso y
relígio. Relígio munda et inmaculáta no frena su lengua: pero se engaña a sí
apud Deum et Patrem, hæc est: mismo; su religión no es auténtica. La
Visitáre pupíllos et víduas in religión pura e intachable a los ojos de
tribulatióne eórum, et immaculátum Dios Padre es ésta: visitar huérfanos y
se custodíre ab hoc sǽculo. viudas en sus tribulaciones y no
mancharse las manos con este mundo.
SECRETA
Súcipe, Dómine, fidélium preces cum Con estas ofrendas, Señor, re-cibe las
oblatiónibus hostiárum: ut per hæc súplicas de tus hijos: para que esta
piæ devotiónis offícia, ad cæléstem liturgia, celebrada con amor, nos lleve
glóriam transeámus. Per Dominum a la gloria del cielo. Por nuestro
Jesum Christum, Filium Tuum, qui Señor Jesucristo, tu Hijo, que contigo
Tecum vivit et regnat in unitate vive y reina en la unidad del Espíritu
Spiritus Sancti, Deus, Santo y es Dios
PREFACIO PASCUAL
Vere dignum et justum est, aequum Verdaderamente es digno y justo,
et salutare: Te quidem, Domine, debido y saludable, que en todo tiempo,
omni tempore, sed in in hoc Señor, te alabemos; pero principalmente
potissimum gloriosius praedicare, con mayor magnificencia en éste
cum Pascha nostrum immolatus es tiempo, en que Jesucristo inmolado es,
Christus. Ipse enim verus es Agnus, nuestra Pascua. Porque Él es el
qui abstulit peccata mundi. Qui verdadero Cordero que quita los pecados
mortem nostram moriendo del mundo. El cual muriendo, destruyó
destruxit, et vitam resurgendo nuestra muer te, y resucitando, reparó
reparavit. Et ideo cum Angelis et nuestra vida. Por esto, con los Ángeles y
Archangelis, cum Thronis et Arcángeles, con los Tronos y
Dominationibus, cumque omni Dominaciones, y con toda la milicia del
militia caelestis exercitus, hymnum ejército celestial, can tamos un himno a
gloriae tuae canimus, sine fine tu gloria, diciendo sin cesar:
dicentes:
POSCOMUNIÓN
Tríbue nobis, Dómine cæléstis A quienes has saciado en tu mesa
mensæ virtúte satiátis: et desideráre santa, concédenos, Señor, desear lo que
quæ recta sunt, et desideráta es recto y conseguir lo que así hemos
percípere. Per Dominum Jesum deseado. Por nuestro Señor Jesucristo,
Christum, Filium Tuum, qui Tecum tu Hijo, que contigo vive y reina en la
vivit et regnat in unitate Spiritus unidad del Espíritu Santo y es Dios por
Sancti, Deus, per omnia saecula los siglos de los siglos. Amén.
saeculorum. Amen.