Ensayo Sanjuanero Hulense
Ensayo Sanjuanero Hulense
Ensayo Sanjuanero Hulense
Se desconoce dónde,de la pira cuándo, y cómo se inició la celebración sanjuanera que nos llama a los
tolimenses y Huilenses en el mes de junio. Todos conocemos la historia moderna de la festividad a partir
de 1959 cuando el patriarca conservador Andrino Tribuí Piedra hita, decidió crear el Festival Folclórico,
casi como una extensión de la Alianza por la Paz, iniciativa que propuso como elemento catalizador para
alcanzar la convivencia y reconciliación de las convulsionadas regiones del país.
Pero para llegar a ese punto de la historia moderna del San Juan muchos acontecimientos históricos,
económicos, políticos y sociales debieron sucederse; no exactamente en Ibagué, sino en el denominado
Tolima Grande que incluía al Huila, en las encomiendas, haciendas y caseríos tornados en poblaciones,
localizadas estas a orillas del río Grande de la Magdalena, decían los españoles desembarcados en estas
latitudes por allá en 1600, o simplemente en las vegas del “río grande”, llamado así por los indígenas y
luego por los campesinos y vaqueros calentanos. Lo cierto es que el San Juan como celebración llega a
estas tierras con el influjo español, se entremezcla con las tradiciones aborígenes, amalgamado por
la evangelización de las misiones católicas, con el propósito de convertir a los pueblos nativos
considerados paganos. La relación estrecha surgida entre conquistadores y conquistados, luego entre
encomenderos y encomendados, y posteriormente entre señores y jornaleros, hizo que el San Juan,
iniciara su camino hacia la modernidad y la festividad que hoy observamos.
La picardía hecha baile, observar el baile del Sanjuanero, es asistir a la exaltación de la mujer. Ella es el
centro de atracción. Su pensar y su sentir se caracterizan en cada una de las acciones, gestos y
movimientos. Ella es la dueña y señora de sus propios sentimientos, y los puede compartir con quien
desee y de acuerdo a sus propias convicciones. El sanjuanero es una pieza musical creada por Anselmo
Duran Plazas e interpretada en su primera versión por la Banda departamental de músicos del Huila,
dirigida por él mismo el 12 de julio de 1936. Su estructura coreográfica fue creada por la folclore
A partir de 1968 y hasta el presente, tanto la música, la coreografía, como el vestuario del sanjuanero,
han vivido algunas modificaciones y evoluciones que lo han hecho más ágil, majestuoso, y vivo. El
Sanjuanero tolimense, más que una danza es un lenguaje representativo de la idiosincrasia del
departamento. Su nombre original es el Contrabandista, melodía oficializada en 1988 como la danza
insignia del departamento. Fue compuesto por el maestro Cantalicio Rojas.La coreografía del Sanjuanero
Tolimense es el resultado de la investigación de Inés Rojas Luna (QEPD), quien recogió diferentes
representaciones folclóricas de todo el Tolima. Rojas Luna logró mezclar los rajaleñas que se bailan en el
sur del departamento con los bambucos característicos del norte, en municipios como Líbano, Fresno y
Villahermosa. Esta danza representa las estrategias de conquista y el idilio que vivían los campesinos
tolimenses en las épocas de antaño. Empieza con el coqueteo, pasa por el enamoramiento y termina con
el símbolo del matrimonio. Es una coreografía mestiza, en la que se combinan pasos indígenas
(movimientos suaves sobre la tierra) con la influencia española (pasos fuertes, donde se levantan los
cuerpos).En otros tiempos, los hombres utilizaban este baile para estar cerca de la mujer a la que
amaban y para formalizar el noviazgo en medio de la fiesta.
La coreografía oficial del baile está formada con 74 figuras: (la invitación, los ochos, la arrodillada,
levantada del pie, arrastrada del ala, el secreto, doble enrollada, y entrada en la salida)
Invitación: Se dirige hacia ella con paso caminando y extiende la mano derecha para invitarla a bailar.
Luego la toma de la cintura. Juntos avanzan hacia adelante, haciéndola girar sobre si.
Los ochos: Una vez en el centro del escenario, la pareja hace un cruce, describiendo la figura de un ocho.
Al encontrarse en el centro avanzan nuevamente caminando. Ella le quita el sombrero y le coquetea
dando un giro sobre su eje, y le devuelve el sombrero posándolo en la cabeza de su parejo. Luego le
desata el raboegallo que cada uno toma de una punta para salir al extremo y realizar un cruce por
debajo del pañuelo.
Arrodillada: El hombre se arrodilla. Ella con suavidad danza a su alrededor en paso de contradanza, sin
soltar el extremo del pañuelo y ondeando la falda, hasta encontrarse frente a frente culminando en un
acercamiento de sus rostros, que simulan darse un beso. Luego él se pone de pie. Ambos con el
raboegallo cogido por las puntas, danzan en paso de rutina (bambuqueando) en tres compases, para
ejecutar una cruzada por debajo del pañuelo y proceder ella a enrollarse en este por la cintura, dando
dos o tres giros que la conducen nuevamente hacia él.
Levantada del pie: En paso de rutina (bambuqueando), la pareja avanza tres compases, luego levantan
simultáneamente los pies, alternativamente, primero el derecho luego el izquierdo conservando la punta
del pie hacia abajo, ejecutan cuatro levantadas para continuar, en dos compases con paso de rutina a la
quitada del sombrero por parte de la mujer quien huye posteriormente hasta el extremo del escenario la
pareja queda frente a frente.
Arrastrada del ala: los dos avanzan hasta el centro del escenario ella se detiene y cubriéndose el rostro
con el sombrero se contonea con gracia, luego arroja el sombrero al suelo, El cual debe quedar boca
bajo. Ambos retroceden entonces en pasos largos y alternativos. Al conteo de tres, ella con la punta del
pie arrastra el ala del sombrero hacia ella y el trata de quitárselo. La mujer retrocede y con paso
caminando, los dos ejecutan un ocho en cuyo centro ella levanta el sombrero del suelo. Este paso el
sombrero es el centro de atención. Es un paso de gracia y delicadeza.