2da Reseña Narración

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Reseña Bibliográfica

La historia oral como método de investigación histórica


Escrito por: David Mariezkurrena Iturmendi
Públicado en Dialnet.

Este artículo publicado en el espacio digital Dialnet, el cual es sin fines de lucro
y dedicado a la publicación de artículos científicos organizándolos en esta revista
digital por Gerónimo de Uztariz, núm. 23/24 znb., pp. 227-233 orr. La historia oral
como método de investigación histórica, fue escrita por David Mariezkurrena
Iturmendi , Etnógrafo navarro, nacido en Pamplona en 1974. Licenciado en Historia y
diplomado en Estudios Vascos en la Universidad de Navarra, sus investigaciones se
han centrado en el campo de la Etnografía. De igual forma es colaborador de los
grupos Etniker Euskalerria desde 1993, comenzó a aplicar la encuesta etnográfica de
don José Miguel de Barandiarán en la localidad navarra de Ezkurra. No obstante, sus
investigaciones se centraron en otra localidad navarra, Mirafuentes, de la cual ha
elaborado un completo estudio. También es miembro de la Sección de Antropología-
Etnografía de Eusko Ikaskuntza.

El documento la historia oral como método de investigación histórica habla en


su introducción de La historia oral como la especialidad dentro de la ciencia histórica
que utiliza como fuente principal para la reconstrucción del pasado los testimonios
orales. A pesar de no tratarse de una técnica de investigación nueva, ya que lleva
décadas siendo utilizada en distintos ámbitos, la historia oral supone una aportación
bastante innovadora en el conjunto de la historiografía oficial, tanto en su vertiente de
la investigación histórica como en lo relativo a la docencia de la propia historia,
apoyándose en palabras de Paul Tompson, especialista en esta materia y autor de
diversas monografías sobre la metodología y las técnicas de la historia oral: «La
historia oral es la más nueva y la más antigua forma de hacer historia».

El articulo esta desarrollado en cuatro apartados. En el primer apartado


Antecedentes, el autor asevera que “Lo renovador de este campo no reside en la
oralidad propiamente dicha, ya que la historia de los pueblos se ha transmitido a lo
largo de los siglos a través de la tradición oral, sino en la labor sistemática de
recuperación y de utilización de la fuente oral. El testimonio oral ha sido utilizado
desde épocas muy antiguas, antes incluso que el escrito, para conocer el pasado. ”

En el segundo apartado La historia de los sin voz , dice que “el interés
creciente, entre diversos colectivos de la docencia y de la investigación histórica, en
entrevistar a hombres y mujeres que protagonizaron un momento o un hecho
relevante de la historia más reciente, relacionándolo con los testimonios de «la gente
común», con el objeto de reconstruir la vida cotidiana urbana y rural. Dándole
protagonismo a la historia de la vida cotidiana, provocando la revaloración de los
testimonios y documentos verbales, prestándose mayor atención a los recuerdos,
experiencias y puntos de vista de los testigos y actores del acontecer
contemporáneo, personas que en ningún momento se han considerado a sí mismas
como protagonistas del devenir histórico.

En el tercer aparatado Detractores de la historia oral , el autor habla de los


testimonios obtenidos a partir de una entrevista, como los errores u omisiones sobre
datos o fechas históricas. Sin embargo, ante esta crítica se puede argumentar que las
fuentes orales se utilizan como complemento de la historiografía basada en fuentes
escritas, a la que aporta una evidencia, un testimonio que sirve para confirmar,
contrastar o bien refutar hipótesis enunciadas a partir de las fuentes escritas. El
objetivo de ello es avanzar en el conocimiento de la realidad pasada, y permitir
analizar el pasado desde diversos enfoques y puntos de vista. Otra crítica más
frecuentes que recibe la historia oral es su escasa fiabilidad. A las fuentes orales se le
atribuyen poca credibilidad debido a las limitaciones propias de la memoria humana.

En el cuarto apartado La entrevista como herramienta de trabajo, aquí habla


del éxito de una investigación basada en fuentes orales depende de la calidad de las
entrevistas que se lleven a cabo, ya que las mismas constituyen la documentación a
interpretar por parte del historiador. Una entrevista no es una conversación
espontánea, es una situación artificial, donde el entrevistador busca información para
su investigación y el entrevistado de alguna manera busca hacer pública su historia y
sus puntos de vista. El objetivo de una entrevista de historia oral no es obtener
«datos», sino entender una vivencia, ya que todo lo que aporta es significativo. Lo
importante es saber interpretar la experiencia de una persona, ya que su testimonio
nos aporta el privilegio de conocer y comprender las vivencias íntimas de esa
persona. De igual manera, la transcripción de la entrevista se debe realizar lo antes
posible, de modo que sea lo más fiel y completa posible, ya que la cercanía en el
tiempo nos permitirá recuperar palabras mal grabadas e incluir nuestras valoraciones
de la entrevista.

En el quinto y último apartado, La historia oral en las aulas, el autor habla que
la mayor parte del aprendizaje de la historia se desarrolla en las aulas escolares
apoyándose en fuentes escritas, como son los libros de texto y otros documentos
auxiliares, pero también incluyendo otros medios educativos como vídeos
documentales, películas, visitas a museos o charlas. Sin embargo, numerosas
experiencias basadas en la historia oral demuestran que la incorporación de los
testimonios orales en la docencia se ha convertido en una de las fuentes más
gratificantes de conocimiento histórico para los alumnos, involucrarlos en una
entrevista, cuyo fin es conocer un aspecto histórico, les permite entender que todos
somos testigos de la historia, así como que existen diferentes significados de un
hecho según las distintas personas que los valoran, logrando así una mayor
identificación con el pasado, haciéndolo propio.

En conclusión, la historia oral, implica la narración de hechos y sucesos


pasados que son expresados a viva voz, con palabras y que, a su vez, permiten que
salgan a la luz testimonios de personas desconocidas, “gentes sin historia”.
Fomentado la recuperación de la memoria histórica a través de las vivencias, las
experiencias, las prácticas a lo largo de la vida, sensaciones vividas... y que son
recogidas de manera escrita. Por ello, tiene un gran potencial educativo, ya que
permite la recopilación y recuperación de la memoria de aquellas personas que
vivieron en otra época distinta a la nuestra, en un momento histórico concreto,
contextualizado y que, por lo tanto, puede ayudarnos a comprender el presente que
estamos viviendo, el conocer por qué las cosas han sucedido de la manera que lo han
hecho.

Reseñadora:
Ralysés Cedeño.
C.I: 11.419.151
Licenciada en Educación Media. Mención: Lengua
Correo Electrónico: ralyses@gmail.com

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