STSJ Gal 1828 2020

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 14

JURISPRUDENCIA

Roj: STSJ GAL 1828/2020 - ECLI: ES:TSJGAL:2020:1828


Id Cendoj: 15030330012020100134
Órgano: Tribunal Superior de Justicia. Sala de lo Contencioso
Sede: Coruña (A)
Sección: 1
Fecha: 15/05/2020
Nº de Recurso: 72/2019
Nº de Resolución: 153/2020
Procedimiento: Procedimiento ordinario
Ponente: FERNANDO SEOANE PESQUEIRA
Tipo de Resolución: Sentencia

T.S.X.GALICIA CON/AD SEC.1


A CORUÑA
SENTENCIA: 00153/2020
Ponente: D. Fernando Seoane Pesqueira
Recurso número: Procedimiento Ordinario 72/2019
Recurrente: Confederación Nacional del Trabajo (CNT)
Administración demandada: Consellería de Facenda
EN NOMBRE DEL REY
La Sección 001 de la Sala de lo Contencioso- Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha
pronunciado la siguiente
SENTENCIA
Ilmos. Sres.
D. Fernando Seoane Pesqueira, Presidente.
Dª. Blanca María Fernández Conde
Dª. María Amalia Bolaño Piñeiro
A Coruña, a 15 de mayo de 2020.
El recurso contencioso-administrativo, que con el número 72/2019 pende de resolución en esta Sala, ha sido
interpuesto por la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), representada por la procuradora Dª. Victoria
Brualla Gómez de la Torre y dirigida por la letrada Dª. Rita Giráldez Méndez, contra el Decreto 160/2018, de 13
de diciembre, por el que se aprueba la oferta de empleo público (OEP) correspondiente a plazas de personal
funcionario y laboral de la Administración General de la Comunidad Autónoma de Galicia para el año 2018 ,
siendo parte demandada la Consellería de Facenda, representada y dirigida por el letrado de la Xunta de Galicia.
Es ponente el Ilmo. Sr. D. Fernando Seoane Pesqueira.

ANTECEDENTES DE HECHO
PRIMERO.- Admitido a trámite el presente recurso contencioso-administrativo, se practicaron las diligencias
oportunas y, recibido el expediente, se dio traslado del mismo a la parte recurrente para deducir la oportuna
demanda, lo que se hizo a medio de escrito en el que, en síntesis, tras exponer los hechos y fundamentos
de derecho que se estimaron pertinentes, se acabó suplicando se tuviese por formulada demanda frente al
decreto recurrido y se dictase sentencia por la que, " se declare nulo y deje sin efecto el Decreto 160/2018, de
13 de diciembre, por el que se aprueba la oferta de empleo público (OEP) correspondiente a plaza de personal

1
JURISPRUDENCIA

funcionario y laboral de la Administración General de la Comunidad Autónoma de Galicia para el año 2018, o,
subsidiariamente se anule, condenando a la Administración a estar y pasar por tal declaración."
SEGUNDO.- Conferido traslado a la parte demandada, se solicitó la desestimación del recurso, de conformidad
con los hechos y fundamentos de derecho consignados en la contestación de la demanda.
TERCERO.- Habiéndose recibido el asunto a prueba y practicada ésta según obra en autos y declarado
concluso el debate escrito, quedaron las actuaciones sobre la mesa para resolver.
CUARTO.- En la sustanciación del recurso se han observado las prescripciones legales, siendo la cuantía del
mismo indeterminada.

FUNDAMENTOS JURÍDICOS
PRIMERO : Objeto de impugnación.-
La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) impugna el Decreto 160/2018, de 13 de diciembre, por el que
se aprueba la oferta de empleo público (OEP) correspondiente a plaza de personal funcionario y laboral de la
Administración General de la Comunidad Autónoma de Galicia para el año 2018.
La pretensión ejercitada, que se especifica en el suplico de la demanda, se concreta en la petición de que
se declare nulo y se deje sin efecto el Decreto impugnado, o, subsidiariamente, se anule, condenando a la
Administración a estar y pasar por tal declaración.
Hemos de abordar seguidamente cada uno de los motivos de impugnación que se contienen en la demanda.
SEGUNDO : Examen del primer motivo de impugnación: falta de convocatoria de todas las plazas ocupadas
por personal interino.-
1. El primer motivo de impugnación se refiere a la falta de convocatoria de todas las vacantes existentes
ocupadas por personal interino.
Comienza exponiendo la recurrente que el artículo 19 de la Ley 3/2017, de 27 de junio, de presupuestos
generales del Estado para el año 2017, establecía, en su apartado 6, que las Administraciones podrían disponer
de una tasa adicional para estabilización de empleo temporal, que incluiría hasta el 90 por ciento de las plazas
que, estando dotadas presupuestariamente, se hallasen ocupadas de forma temporal e ininterrumpidamente al
menos en los tres años anteriores a 31 de diciembre de 2016, y además que podrían disponer en los ejercicios
2017 a 2019 de una tasa adicional para la estabilización de empleo temporal de aquellas plazas que, en los
términos previstos en la disposición transitoria cuarta del EBEP, estuviesen dotadas presupuestariamente, y,
desde una fecha anterior al 1 de enero de 2005, hayan venido estando ocupadas ininterrumpidamente de forma
temporal.
Asimismo destaca la demandante que el apartado 2 del artículo 19 de la Ley 6/2018, de 3 de julio, de
presupuestos generales del Estado para el año 2018, prevé que " Las Administraciones Públicas que en el
ejercicio anterior hayan cumplido los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública y la regla de gasto,
tendrán una tasa de reposición del 100 por cien. Adicionalmente, podrán disponer de una tasa del 8 por ciento
destinada a aquellos ámbitos o sectores que requieran un refuerzo de efectivos, siempre dentro del marco de la
estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera".
Alega la actora que la OEP impugnada sólo recoge 502 plazas de nuevo ingreso, y sin embargo las plazas
vacantes en la Administración Pública de Galicia, que tiene una tasa de reposición del 100 % más un 8 %
adicional, son muy superiores.
Seguidamente reproduce la recurrente las reglas para el cálculo de reposición que se contienen en el
artículo 19.4 de la Ley 3/2017 y 19.7 de la Ley 6/2018, aclara que la misma norma se encuentra en las
Leyes presupuestarias estatales para 2014, 2015 y 2016, e incide en la ausencia de ejecución del plan de
estabilización de personal laboral y del de consolidación de personal laboral desde 2008 hasta 2017, llegando
a la conclusión de que la Administración gallega, desde el año 2011, sólo convocó 861 plazas de nuevo ingreso,
lo cual supone menos de 100 plazas al año, y sin embargo entiende la demandante que, al menos, la necesidad
es cuatro veces mayor, atendiendo a la media de jubilaciones, excedencias, ceses y fallecimientos. Por ello
argumenta que existen, por lo menos, cuatro veces más plazas estructurales de las que realmente se cubren,
lo que provoca que año a año se vaya incrementando el volumen de personal interino, en contra de lo que la
propia norma establece como objetivo (limitar al 8 % la contratación temporal.
Partiendo de todos los anteriores datos, la actora considera que no se convocan todas las plazas vacantes,
puesto que la Administración gallega no tiene en cuenta, para el cálculo, las incluidas en las ofertas anteriores

2
JURISPRUDENCIA

desde 2008, que no fueron objeto de convocatoria, y considera que con ello se vulnera la cláusula 5ª de la
Directiva 99/70/CE, la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que la interpreta, y el artículo
10.4 del Real Decreto Legislativo 5/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley
del Estatuto Básico del Empleado Público, a la vez que entiende que ello supone un fraude de ley, al amparo
del artículo 6.4 del Código Civil, y una vulneración de la prohibición de la arbitrariedad de los poderes públicos,
que se recoge en el artículo 9.3 de la Constitución española.
2. La primera infracción que denuncia la recurrente es la de la cláusula 5ª del Acuerdo Marco de la CES, UNICE
y el CEEP, contenido en la Directiva 99/70/CE, y de la jurisprudencia comunitaria que la interpreta, de entre la
que se cita la contenida en las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 14 de septiembre de
2016, 26 de noviembre de 2014 y 11 de diciembre de 2014.
En ella se declaran contraria a la Directiva las normas nacionales que no establezcan sanciones adecuadas,
proporcionadas y suficientemente disuasorias para combatir el abuso de la contratación temporal.
Añade la demandante que la Directiva no puede ser inaplicada por razones presupuestarias (STJUE de 21
de septiembre de 2016), y que para apreciar el abuso se debe atender a la duración inusualmente larga del
contrato o a la imprevisibilidad del momento del cese.
Seguidamente la actora incide en la primacía del Derecho Comunitario y en la vigencia del artículo 4 bis de la
Ley Orgánica del Poder Judicial, en base a lo cual resalta que el Juez nacional cuenta con una norma interna
que le permite excluir la norma nacional incompatible con el Derecho de la Unión Europea.
3. Si bien es cierto que ha de regir la primacía del Derecho Comunitario sobre el interno, la jurisprudencia
comunitaria que se invoca está diseñada al decidir asuntos relativos a casos concretos en los que existen
visos de abuso de la contratación temporal y en los que la normativa interna de algún modo fomenta o protege
la contratación temporal cuyo abuso trata de atajarse con aquella, pero resulta más difícilmente aplicable,
con el carácter de generalidad que se alega por la recurrente, para pretender la nulidad de una oferta de
empleo público que, según la demandante, no adopta las medidas que serían adecuadas para combatir aquella
contratación temporal, ya que para llegar a alcanzar la invalidez de aquel instrumento de planificación de
empleo sería necesario el análisis de cada plaza ocupada por personal interino que se incluye en la OEP, a fin de
examinar si puede entenderse que se incide en aquel abuso. Además, la demandante parece invocar aquella
jurisprudencia comunitaria más para mostrar su discrepancia con la política de personal que se trasluce
de aquella OEP autonómica, por considerar que no se están incluyendo en ella todas las plazas vacantes
ocupadas por personal interino, máxime por entender que en los últimos años no se han ejecutado planes de
estabilización de personal laboral y de consolidación de personal laboral. Es decir, achaca a la OEP de 2018
que no haya suplido aquellas carencias de años precedentes.
En definitiva, si bien las recientes sentencias dictadas por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, critican
el abuso que se hace en España de la temporalidad y precariedad en el empleo, abordan cuestiones diferentes
a la que aquí tratamos, como la posibilidad de indemnización al finalizar la interinidad, el encadenamiento de
contratos laborales y la diferencia, a efectos de indemnización, entre el personal fijo y el temporal. Es muy
respetable la opinión del recurrente en torno a que la oferta de empleo público es un instrumento idóneo
para eliminar situaciones no deseadas y persistentes en el tiempo, mediante la inclusión de las vacantes de
funcionarios interinos y personal laboral temporal, pero ya veremos que la normativa básica estatal aplicable
lo impide.
Por lo demás, puede comprenderse que, desde su perspectiva, la organización sindical considere insuficientes
las plazas ocupadas por interinos incluidas en la OEP de 2018, pero, fuera de las consideraciones de
conveniencia u oportunidad, el control del actuar administrativo hemos de hacerlo exclusivamente desde la
óptica de la legalidad, como así se deduce del artículo 106 de la Constitución.
Al margen de lo anterior, no existe base para considerar que con la actuación impugnada no se adoptan
decisiones destinadas a reducir la temporalidad, ya que en la OEP de 2018 se incluyen medidas dirigidas a
solucionar la temporalidad del personal de la Administración de la Comunidad Autónoma de Galicia, y con ello
dar cumplimiento a la Directiva 99/70/CE y jurisprudencia comunitaria que la interpreta, pues en el anexo II del
Decreto impugnado se recogen las plazas que se ofertan relativas a la estabilización del empleo temporal, y
en el anexo III del mismo se incluyen las plazas que se ofertan de personal laboral indefinido no fijo derivado
de sentencias judiciales. A ello se añade que la OEP de 2018 se enmarca, junto con las que se aprueben en los
años 2019 y 2010, en los acuerdos para alcanzar una reducción de la temporalidad de hasta un máximo del 8
%, dentro de una planificación de carácter plurianual, en los que se inscriben la resolución de 22 de marzo de
2018 de la Secretaría Xeral de Función Pública por la que se publica el II Acuerdo Gobierno-Sindicatos para la
mejora del empleo público y las condiciones de trabajo, el Acuerdo de 18 de octubre de 2017 para el desarrollo
de un plan de estabilidad en el empleo de los servicios públicos, y la Orden de 15 de enero de 2019 por la que

3
JURISPRUDENCIA

se publica el Acuerdo de concertación del empleo público de Galicia. Ese es el horizonte temporal a tres años
en que se inserta la OEP impugnada, por lo que su enjuiciamiento no puede realizarse de modo autónomo.
Aun es más, en la OEP de 2018 impugnada se da cumplimiento a lo establecido en el artículo 19.uno.9
de la Ley 6/2018, así como a los acuerdos sobre desarrollo de la estabilidad en el empleo de los servicios
públicos, incluyendo una tasa adicional para la estabilización del empleo temporal, incorporando plazas
de los servicios de Administración y generales que respondan a necesidades estructurales, estén dotadas
presupuestariamente y ocupadas de forma temporal e ininterrumpida en los tres años anteriores al 31 de
diciembre de 2017, debiendo ser aprobadas y publicadas en los ejercicios 2018 a 2020 las ofertas que articulen
dichos procesos de estabilización.
Asimismo, para salir al paso de las quejas de la recurrente en torno a las OEPs anteriores que no fueron objeto
de convocatoria total o parcial, hay que tener en cuenta que la disposición adicional del Decreto 160/2018
recoge la acumulación de plazas correspondientes a la OEP de los años anteriores al establecer:
" Podrán convocarse en un único proceso selectivo las plazas ofertadas de personal funcionario
correspondientes a los cuerpos y escalas de la Administración general y especial de la Administración general
de la Comunidad Autónoma de Galicia, y a las categorías de personal laboral relacionadas en los anexos de la
presente oferta, junto con las derivadas de la oferta de empleo público correspondiente a los años 2016 y 2017,
que aún están pendientes de convocar. En el caso de ser acumuladas se aplicará la normativa correspondiente
a la oferta de 2018.
Todas las plazas publicadas en ofertas anteriores que todavía están sin convocar de categorías de personal
laboral y que, según lo dispuesto en la Ley del empleo público, tienen una equivalencia en los cuerpos y escalas
de carácter funcionarial se convocarán en un proceso selectivo único acumuladas a la escala que le corresponda
de personal funcionario".
En este punto conviene reseñar que las restricciones presupuestarias que hicieron inejecutables las anteriores
OEPs tuvieron lugar en el contexto de la crisis económica de esos años, y era precisamente la Unión Europea
quien marcaba los objetivos para la reducción del déficit público, por lo que no puede acogerse la alegación
de vulneración del Derecho Comunitario para combatir la OEP gallega de 2018, con la que ya hemos visto que
se afronta y trata de reducirse la temporalidad en el empleo público.
El preámbulo de la Ley Orgánica 2/2012, de 27 de abril, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad
Financiera, explica perfectamente esa incidencia de la política comunitaria, en los siguientes términos:
" El proceso de consolidación fiscal y reducción de la deuda pública que permitió la entrada de España en la Unión
Económica y Monetaria europea, fue uno de los principales activos sobre los que se cimentó el largo período de
crecimiento de la economía española hasta 2008. Sin embargo, ese año se inició una crisis económica de alcance
mundial, especialmente severa en el ámbito europeo, cuyos efectos se vieron agravados en nuestra economía
debido a la elevada tasa de desempleo, la más alta entre los países de la OCDE. El fuerte deterioro de las finanzas
públicas registrado desde ese año, agotó rápidamente los márgenes de maniobra de la política fiscal, obligando
ahora a practicar un fuerte ajuste que permita recuperar la senda hacia el equilibrio presupuestario y cumplir los
compromisos de España con la Unión Europea.
La crisis económica puso rápidamente de manifiesto la insuficiencia de los mecanismos de disciplina de la
anterior Ley de Estabilidad Presupuestaria. En el marco de esa Ley se alcanzó el mayor déficit de nuestras
Administraciones Públicas, con un 11,2 por ciento del Producto Interior Bruto en 2009.
Paralelamente, las tensiones financieras desencadenadas en los mercados europeos, pusieron en evidencia la
fragilidad del entramado institucional de la Unión Europea y la necesidad de avanzar en el proceso de integración
económica, con la premisa de lograr una mayor coordinación y responsabilidad fiscal y presupuestaria de
los Estados miembros. En este contexto, en los últimos meses se han aprobado una serie de iniciativas
legislativas en el ámbito europeo orientadas a reforzar las reglas fiscales comunes y desarrollar una mayor
supervisión económica y fiscal. El Pacto Fiscal europeo, la mayor coordinación, vigilancia y supervisión en
materia presupuestaria, acompañados del desarrollo del mecanismo de estabilidad financiera para dar una
respuesta conjunta a las tensiones de los mercados financieros, constituyen el marco de gobernanza económica
que define una Unión Europea reforzada y capaz de hacer frente a los exigentes retos del nuevo escenario
económico internacional.
Esta situación exige aplicar una política económica contundente basada en dos ejes complementarios que se
refuerzan: La consolidación fiscal, es decir, la eliminación del déficit público estructural y la reducción de la deuda
pública, y las reformas estructurales. Pero más allá de esta respuesta inmediata, es necesario consolidar el
marco de política económica y fiscal que permite asegurar de forma permanente el crecimiento económico y la
creación de empleo. Este es un reto que debemos alcanzar de la mano de Europa, participando activamente en

4
JURISPRUDENCIA

el diseño de las políticas y estrategias que definen la nueva gobernanza económica, y aplicando con rigor las
exigencias que de ella dimanan.
La garantía de la estabilidad presupuestaria es una de las claves de la política económica que contribuirá a
reforzar la confianza en la economía española, facilitará la captación de financiación en mejores condiciones y,
con ello, permitirá recuperar la senda del crecimiento económico y la creación de empleo. Este convencimiento
llevó en septiembre de 2011 a reformar el artículo 135 de la Constitución Española , introduciendo al máximo nivel
normativo de nuestro ordenamiento jurídico una regla fiscal que limita el déficit público de carácter estructural en
nuestro país y limita la deuda pública al valor de referencia del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.
El nuevo artículo 135 establece el mandato de desarrollar el contenido de este artículo en una Ley Orgánica
antes del 30 de junio de 2012. Con la aprobación de la presente Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y
Sostenibilidad Financiera de las Administraciones Públicas se da pleno cumplimiento al mandato constitucional.
Pero, además, la reforma de la Constitución pretende también manifestar el claro compromiso de España con
las exigencias de coordinación y definición del marco de estabilidad común de la Unión Europea. Por ello, la
referencia a la normativa de estabilidad europea, tanto en la Constitución como en la Ley Orgánica, es constante,
siendo además España uno de los primeros países en incorporar el paquete de gobernanza económica europea
a su ordenamiento jurídico interno. Además, esta Ley da cumplimiento al Tratado de Estabilidad, Coordinación y
Gobernanza en la Unión Económica y Monetaria de 2 de marzo de 2012, garantizando una adaptación continua
y automática a la normativa europea".
De todo lo anteriormente argumentado se desprende la improcedencia de acoger las alegaciones de
vulneración de la Directiva 99/70/CE y jurisprudencia comunitaria interpretativa.
3. El sindicato demandante también alega la vulneración del artículo 10.4 del Real Decreto Legislativo 5/2015,
de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público,
y la contradicción entre las limitaciones a la reposición de efectivos y ese precepto.
El artículo 10.4 del RDL 5/2015 dispone:
" En el supuesto previsto en la letra a) del apartado 1 de este artículo, las plazas vacantes desempeñadas por
funcionarios interinos deberán incluirse en la oferta de empleo correspondiente al ejercicio en que se produce
su nombramiento y, si no fuera posible, en la siguiente, salvo que se decida su amortización".
En este punto conviene recordar la moderna jurisprudencia interpretativa de dicho precepto que relega la
aplicación del artículo 10.4 del EBEP cuando una norma presupuestaria impide que se lleve a cabo en sus
estrictos términos.
En efecto, la moderna jurisprudencia, plasmada en las sentencias de la Sala 3ª del Tribunal Supremo de 20 de
noviembre de 2013 (recurso de casación 44/2013) y 2 de diciembre de 2015 (RC 401/2014), ha declarado que
si el poder legislativo ha decidido establecer una determinada tasa de reposición de empleo público, para el
período de vigencia de una norma legal, a ello debemos estar, de modo que si la Ley de Presupuestos Generales
del Estado prohíbe que a lo largo de la anualidad a que se refiere se proceda a la incorporación en el sector
público de nuevo personal, excepto en los sectores que indica y hasta un determinado porcentaje de la tasa de
reposición, durante ese ejercicio no opera el mandato contenido en el artículo 10.4 del Real Decreto Legislativo
5/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley del Estatuto Básico del Empleado
Público, por lo que no puede entenderse infringido este último precepto.
En definitiva, tal como recuerda la sentencia de la Sala 3ª del Tribunal Supremo de 2/12/2015, la Ley de
Presupuestos del Estado para cada ejercicio viene considerándose por parte del Tribunal Constitucional como
un instrumento idóneo para limitar la oferta de empleo público como medida de política económica, y en ese
sentido cita la sentencia 178/2006, de 6 de junio, según la cual:
" En segundo lugar, y tal y como también hemos recordado con ocasión de los límites de las retribuciones
de los funcionarios (entre otras, SSTC 171/1996, de 30 de octubre, FJ 4 , y 24/2002, de 31 de enero , FJ 5),
debe reconocerse la idoneidad la Ley de presupuestos generales del Estado, en tanto vehículo de dirección y
orientación de la política económica del Gobierno, para limitar la oferta de empleo pública. De ahí que, de acuerdo
con nuestra jurisprudencia, no resulte forzado reconocer que un precepto como el aquí analizado pueda hallar
cobertura competencial en el título de ordenación general de la economía ( art. 149.1.13 CE )".
La propia sentencia del Tribunal Supremo de 2/12/2015 aclara que la sentencia de 29 de octubre de 2010 del
propio TS, que se menciona por el recurrente para apoyar su tesis, no es aplicable cuando la oferta de empleo
público se encuentra limitada por una norma de superior rango, cual es la Ley de Presupuestos Generales del
Estado, que es lo mismo que ahora ocurre, a diferencia del caso contemplado en aquella STS de 29/10/2010,
que se refería a una anualidad en la que no se había fijado aquella limitación.

5
JURISPRUDENCIA

En dicha STS de 2/12/2015, como en el caso presente, la controversia giraba sobre si la oferta de empleo
público era contraria a Derecho por no incluir las plazas ocupadas por interinos, e igualmente estaba
determinado como hacer el cálculo sobre el que aplicar el porcentaje de reposición sin mención de las plazas
ocupadas por el personal interino, y asimismo se establecía que la limitación alcanzaba a las plazas incursas
en los procesos de consolidación, por lo que el criterio que en ella se plasma es especialmente relevante ahora.
Literalmente argumenta la mencionada STS de 2/12/2015:
" A la vista de lo anterior debemos destacar que en la Sentencia de esta Sala y Sección de 1 de abril de 2009,
recurso de casación 4203/2004 , en su FJ 5º, se dijo sobre el alcance que debe otorgarse a una Oferta de
empleo público ": (a) consiste tan sólo en determinar las plazas vacantes que podrán ser objeto de cobertura
en el ejercicio anual a que está referida; (b) no conlleva ni produce la iniciación del correspondiente proceso
administrativo destinado a seleccionar y nombrar las concretas personas que habrán de ocupar dichas plazas,
pues esto corresponde a la ulterior convocatoria que ha de realizarse con esta finalidad.....".
Por tanto, independientemente de lo vertido en la STS de 29 de octubre de 2010 , debe estarse al marco
regulador del período controvertido. No ha de olvidarse que en la antedicha STS recaída en el recurso de casación
2448/2008 constataba en su FJ segundo que el art. 7.4 de la Ley de Ordenación de la Función Pública de la
Comunidad de Aragón sostiene que "las plazas ocupadas por interinos serán incluidas en la primera oferta de
empleo público que se apruebe, salvo los casos de sustitución de funcionarios".
En consecuencia si el poder legislativo decidió establecer una determinada tasa de reposición de empleo público
para el periodo de vigencia de la Ley 22/2013 a ello debemos estar.
En efecto, tal y como señala el Sr. Abogado del Estado, el precepto citado de la Ley 22/2013 dado su rango
legal, exceptúa, por tanto, para 2014 lo que determina el artículo 10.4 del EBEP , sobre inclusión en la oferta de
empleo público del ejercicio en que se produce su nombramiento, de las plazas vacantes desempeñadas por
funcionarias interinos. Efectivamente, si el citado artículo 21.1 de la Ley 22/2013 , prohíbe que a lo largo de 2014
se proceda en el sector público a la incorporación de nuevo personal, excepto en los sectores que indica y hasta
un porcentaje de la tasa de reposición del 10%, es obvio que durante dicho ejercicio de 2014 no opera el mandato
contenido en el EBEP. Por tanto, el Real Decreto que aprueba la DEP ara 2014 de acuerdo con lo que determinan
aquel precepto legal, no infringe en nada el artículo 10.4 del EBEP .
Tampoco se infringe lo establecido en el artículo 23.2 de la CE por el solo hecho de prohibir la incorporación
de nuevo personal al sector público durante 2014. El citado precepto reconoce del derecho de acceso a los
cargos y funciones públicas en condiciones de igualdad, pero se refiere al acceso cuando se produzcan las
convocatorias correspondientes, y siempre con arreglo a los requisitos que determinen las Leyes, uno de los
cuales es que autorice la incorporación de nuevo personal con arreglo a la OEP y se efectúen las correspondientes
convocatorias.
En consecuencia, si la Ley 22/2013 prohíbe la incorporación de nuevo personal durante este ejercicio falta el
requisito de previa oferta legal de empleo público en ese ejercicio, por lo que no cabe acceso al mismo, por faltar
el requisito legal de esa oferta de plazas de incorporación de nuevo personal, lo que respeta plenamente lo que
determina el artículo 23.2 de la CE .
En fin, cita también la recurrente la infracción de dicho precepto constitucional en relación con el artículo 103.3
de la CE ; no obstante, no argumenta en qué lo infringiría el Real decreto impugnado. Los principios de mérito y
capacidad en el acceso a la función pública han de respetarse en las convocatorias que se hayan de efectuar para
atender la oferta de empleo público , pero no, en la OEP que no existe. No se aprecia en qué puede infringir dicho
precepto constitucional por no incluir en la OEP de 2014 plazas de nuevo ingreso y, entre ellas, las desempeñadas
por funcionarios interinos, que no se ofertan por la prohibición comprendida en el artículo 21 de la Ley 22/2013 .
Del mismo modo debemos manifestar que la sentencia del TS, de 29 de octubre de 2010 (RJ/2010/8233), no es
aplicable al supuesto de autos, por referirse a un Decreto autonómico y a 'funcionarios y empleados públicos de
la Administración de la Comunidad de Aragón", al tiempo que se trata de un recurso, el de la instancia, seguido
por el procedimiento especial de Protección de los Derechos Fundamentales de la persona.
En el recurso anterior, el 2210/2007, se trataba por otra parte, de delimitar si los funcionarios afectados de la
Comunidad Autónoma de Aragón tenían derecho a que se ofertaran y por tanto se anunciaran las plazas vacantes
desempeñadas por funcionarios interinos, equiparando los dos grupos de funcionarios.
A mayor abundamiento, aquella Oferta de Empleo Público no se encontraba limitada, como acontece ahora, por
una norma de superior rango, cual es la Ley de Presupuestos Generales del Estado, que impide expresamente
"incorporar nuevo personal en el sector público", a excepción de un 10% e la tasa de reposición en determinados
sectores.

6
JURISPRUDENCIA

Por tanto, de dicha sentencia se deduce que la doctrina contenida en la sentencia de 29 de octubre de 2010 ,
rec..ordinario nº 2448/2008, no es aplicable al caso, ya que en el supuesto contemplado en ésta se resolvía sobre
un supuesto en que la OEP de la Comunidad de Aragón que no se ajustaba a la normativa de función pública de
la misma aplicable en aquel momento, lo que no es nuestro caso. Por el contrario, en la STS de 20-11-2013 se
determina que ".......ha de estarse al marco regulador del período controvertido" así como a ". . . que si el poder
legislativo en uso de sus facultades decidió que los Cuerpos funcionaria/es al servicio de la Administración de
Justicia no debían ser objeto de convocatoria de plazas, a ello debemos estar".
La recurrente reconoce que la Ley 22/2013 establece un determinado concepto de tasa de reposición que vienen
aplicando las sucesivas ofertas de empleo público, el artículo 21 de la Ley 22/2013 , que, en su opinión, infringiría
el artículo 23.2 de la CE .
La Ley de Presupuestos Generales del Estado para cada ejercicio viene considerándose por parte del Tribunal
Constitucional como un instrumento idóneo para imitar la oferta de empleo público como medida de política
económica. Al respecto debe citarse la STC número 178/2006, de 6 de junio que dice:
"En segundo lugar, tal y como también hemos recordado con ocasión de los límites de las retribuciones de los
funcionarios (entre otras, SSTC 171/12996, de 30 de octubre (RTC 1996,171), F.4, y 24/2002, de 31 de enero (RTC
2002, 24), F.5) debe reconocerse la idoneidad de la Ley de Presupuestos Generales del Estado, en tanto vehículo
de dirección y orientación de la política económica del Gobierno, para limitar la oferta de empleo público . De ahí
que de acuerdo con nuestra jurisprudencia, no resulte forzado reconocer que un precepto como el aquí analizado
pueda hallar cobertura competencial en el título de ordenación general de la economía ( art. 149.1.13 CE )".
En consecuencia, no puede admitirse el argumento de la recurrente de que el artículo 21 de la Ley 22/2012
infringe el artículo 23. 2 de la CE por el solo hecho de restringir temporalmente la OEP como medida de política
económica, ni, por tanto, su pretendida inconstitucionalidad, ni la del Real decreto impugnado que aprueba, con
arreglo a dicha norma legal, la OEP para 2014.
No existe inconstitucionalidad alguna, ni concurren los presupuestos de hecho precisos para que esta Sala
plantee, cuestión de inconstitucionalidad, en especial, a la vista de que ya nos hemos pronunciado sobre esta
mismas cuestiones en la sentencia más arriba reseñada de 20 de noviembre de 2013, Secc. Séptima, rec.
44/2013 .
Tampoco una pretendida desproporción entre las plazas puede fundamentar una ilegalidad del Real decreto
impugnado. Las plazas de promoción interna se corresponden con el correlativo derecho legal de los
funcionarios de carrera; no infringe la prohibición que establece el artículo 21 de la Ley 22/2013 y, en fin, es un
instrumento de planificación de personal y organización de los recursos humanos de las AAPP."
En el mismo sentido se ha pronunciado, más modernamente, la STS de 25 de septiembre de 2017 (recurso
de casación 363/2016).
Resulta evidente que, frente a ese claro criterio jurisprudencial, no puede prevalecer el de una sentencia del
Tribunal Superior de Justicia de Aragón, como la de 9 de diciembre de 2015, que no es firme, que se opone al
del Tribunal Supremo, y que se dictó en función de un marco normativo diferente.
4. Por tanto, hay que acudir a la normativa estatal para comprobar el ajuste de la normativa autonómica
impugnada a la citada estatal presupuestaria.
Lo relativo al cálculo de reposición de efectivos para el año 2018 se contiene en el artículo 19.Uno.7. de la Ley
6/2018, que tiene carácter básico, se dicta al amparo de los artículos 149.1.13ª y 156.1 de la Constitución,
y dispone:
" Para calcular la tasa de reposición de efectivos, el porcentaje de tasa máximo fijado se aplicará sobre la
diferencia resultante entre el número de empleados fijos que, durante el ejercicio presupuestario anterior, dejaron
de prestar servicios en cada uno de los respectivos sectores, ámbitos, cuerpos o categorías, y el número de
empleados fijos que se hubieran incorporado en los mismos, en el referido ejercicio, por cualquier causa, excepto
los procedentes de ofertas de empleo público, o reingresado desde situaciones que no conlleven la reserva
de puestos de trabajo. A estos efectos, se computarán los ceses en la prestación de servicios por jubilación,
retiro, fallecimiento, renuncia, declaración en situación de excedencia sin reserva de puesto de trabajo, pérdida
de la condición de funcionario de carrera o la extinción del contrato de trabajo o en cualquier otra situación
administrativa que no suponga la reserva de puesto de trabajo o la percepción de retribuciones con cargo a la
Administración en la que se cesa. Igualmente, se tendrán en cuenta las altas y bajas producidas por los concursos
de traslados a otras Administraciones Públicas.

7
JURISPRUDENCIA

No computarán dentro del límite máximo de plazas derivado de la tasa de reposición de efectivos las plazas
que se convoquen para su provisión mediante procesos de promoción interna y las correspondientes al personal
declarado indefinido no fijo mediante sentencia judicial".
El Preámbulo del Decreto impugnado 160/1918 explica el modo en que se ha calculado la tasa de reposición
en Galicia en la OEP de 2018 al decir que " Para determinar la tasa de reposición de las plazas de acceso libre
se tuvo en cuenta el número de jubilaciones, fallecimientos, renuncias, excedencias, bajas definitivas, altas y
bajas producidas por los concursos de traslados a otras administraciones y reingresos producidos durante el
año 2017".
Para especificar cada una de dichas situaciones consta en el folio 102 del expediente administrativo el cuadro
que las detalla, de lo que se deduce que no se tienen en cuenta las plazas de personal laboral indefinido no
fijo derivado de sentencias judiciales, que se contienen en el anexo III de la propia OEP de 2018, dedicado al
proceso de consolidación de personal indefinido no fijo.
El contraste entre uno y otro cálculo de la tasa de reposición pone de relieve la adecuación de la OEP de 2018
a la normativa presupuestaria estatal a la que debe ajustarse.
En consecuencia, tampoco puede considerarse vulnerado el artículo 10.4 del RDL 5/2015, y, con ello, también
debe desestimarse la alegación de concurrencia de fraude de ley.
Tal rechazo determina que no se aprecia la existencia de la causa de nulidad de pleno derecho que se alega por
el demandante al amparo del artículo 47.1.a y 47.2 de la Ley 39/2015, y tampoco la de anulabilidad invocada
con la cita del artículo 48 de la misma norma legal.
TERCERO : Examen del segundo motivo de impugnación: situación del personal afectado por la disposición
transitoria 10ª del V convenio colectivo.-
1. El segundo motivo de impugnación se centra en la ausencia de convocatoria del concurso de méritos del
personal afectado por la disposición transitoria 10ª del V Convenio Colectivo Único de la Xunta de Galicia.
Entiende la recurrente que ello debiera llevar a la nulidad de la OEP de 2018 en sus apartados de estabilización
y consolidación.
El sindicato demandante alega que dicho personal no está sometido a límite en tasa de reposición alguna, y
sin embargo no se convocan sus plazas por el concurso de méritos establecido.
Con esa base se invoca el incumplimiento del acuerdo para la ordenación y mejora del empleo público en el
ámbito de la Administración de la Xunta de Galicia de 2008 y de la primera parte del mencionado V convenio
colectivo.
Explica el recurrente que en el apartado tercero de dicho acuerdo se establecía un calendario para el plan de
consolidación, que se ha incumplido tanto en la OEP de 2008 como en la de 2009, porque estas no han sido
ejecutadas, añade que lo que resulta manifiestamente contrario al acuerdo es la inclusión sólo del personal
afectado por la segunda parte, de menor antigüedad, de modo que, tras once años desde la publicación del
Convenio, sigue sin convocarse el concurso de méritos para el personal afectado por la primera parte de dicha
disposición
2. La disposición transitoria 10ª del V convenio colectivo de la Xunta de Galicia establece:
" El personal que, con efectos anteriores al 7-10-1996, tuviese reconocida la condición de indefinido en su
relación laboral por sentencia judicial firme o por resolución de la Subsecretaría de Trabajo y Asuntos Sociales
del 24-7-1997 en virtud de las previsiones contenidas en el plan de empleo del Inem así como aquel que tenga
una antigüedad con anterioridad al 1-7-1998 en la presentación de servicios para la Xunta de Galicia en virtud de
sentencia judicial que reconozca su condición de personal laboral indefinido, o fuese contratado directamente
por la Xunta de Galicia bajo la modalidad de obra o servicio determinado, para la realización de programas o
servicios de carácter estructural, o aquel otro integrado por transferencia tendrá los mismos derechos que el
personal laboral fijo.
La Administración, en el plazo de doce meses creará, de ser el caso, dichos puestos de trabajo en las distintas
RPT de la Xunta de Galicia y posteriormente convocará un proceso selectivo mediante concurso al cual tendrá
la obligación de concurrir el personal a que se hace referencia en el punto anterior.
Dicho concurso respetará los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad y en el se valorará
preferentemente la antigüedad y los cursos de formación y perfeccionamiento en la categoría y procesos
selectivos superados. Los que lo superen adquirirán la condición de personal laboral fijo de la Xunta de Galicia.

8
JURISPRUDENCIA

Para aquel personal que tenga una antigüedad posterior al 30-6-1998 y anterior al 1-1-2005 en la prestación
de servicios para la Xunta de Galicia en virtud de sentencia judicial que reconozca su condición de personal
laboral indefinido, o fuese contratado directamente por la Xunta de Galicia bajo la modalidad de obra o
servicio determinado, para la realización de programas o servicios de carácter estructural, o aquel integrado
por transferencia será objeto de un proceso de consolidación de empleo según lo establecido en la disposición
transitoria cuarta de la Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto básico del empleado público y la disposición
adicional decimoquinta de este convenio".
El recurrente solamente menciona el acuerdo de 2008, y se olvida de los acuerdos de 2017 y 2018 a que
anteriormente nos hemos referido, que son la resolución de 22 de marzo de 2018 de la Secretaría Xeral de
Función Pública por la que se publica el II Acuerdo Gobierno-Sindicatos para la mejora del empleo público y
las condiciones de trabajo, el Acuerdo de 18 de octubre de 2017 para el desarrollo de un plan de estabilidad
en el empleo de los servicios públicos, y la Orden de 15 de enero de 2019 por la que se publica el Acuerdo
de concertación del empleo público de Galicia. Y dichos acuerdos marcan el horizonte plurianual, a tres años,
en que se inserta la OEP impugnada, por lo que su enjuiciamiento no puede realizarse de modo autónomo,
como antes decíamos.
Es cierto que la OEP de 2017 (que no es objeto de este recurso) tuvo en cuenta la fecha de la sentencia de
indefinición que figuraba en el acuerdo de 2008, anterior a 17/9/2007, con base en la anterior jurisprudencia
laboral que respaldaban dicha interpretación, pero también lo es que la OEP de 2018 ya no la tiene en cuenta,
como se puede comprobar en la redacción literal del artículo 2.3 del Decreto impugnado, en el que se establece:
" En el anexo III figuran las plazas que se ofertan de personal laboral indefinido no fijo derivado de sentencias
judiciales, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 27 de la Ley 8/2017, de 26 de diciembre , de
presupuestos generales de la Comunidad Autónoma de Galicia para el año 2018, y en el artículo 19.Uno.7 de la
Ley 6/2018, de 3 de julio , de presupuestos generales del Estado para el año 2018".
Como ejemplos de ello figuran: 1º Folio 104 del expediente administrativo: plaza de escala técnica auxiliar
de informática, Sabina , sentencia de 17 de agosto de 2015 del Juzgado de lo Social nº 3 de Pontevedra,
confirmada en suplicación por la Sala de lo Social de este Tribunal Superior de Justicia de Galicia, 2º Folio
104 EA: plaza de escala técnica auxiliar de informática, Santiaga , sentencia de 12 de diciembre de 2017 del
Juzgado de lo Social nº 3 de Santiago de Compostela, confirmada asimismo en suplicación por la Sala de lo
Social de este Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
3. En este mismo apartado de impugnación alega el demandante que no se toman en consideración en la OEP
de 2018 los puestos con derecho a reserva al proceso de consolidación, según la doctrina unificada de la Sala
de lo Social del Tribunal Supremo.
Se expone que en el anexo V se contemplan 226 plazas de consolidación de personal indefinido no fijo,
diferente de las de estabilización, las cuales vienen de la OEP de 2017, y se aclara que estas plazas sólo
contemplan al personal indefinido anterior a 1 de enero de 2005 y posterior a 30 de junio de 1998 cuya sentencia
de indefinición fuese anterior a 17/9/2007 (acuerdo de 2008)).
Se argumenta que, sin embargo, la Sala de lo Social del Tribunal Supremo (sentencias de 18 de mayo de 2015,
29 de noviembre y 13 de diciembre de 2016, y 25 de enero de 2018) ha declarado que esta parte del acuerdo
es contraria a lo establecido en el Convenio, fijando doctrina unificada en relación al proceso de consolidación
de la disposición transitoria 10ª del Convenio colectivo, con arreglo a la cual sólo hay dos condiciones para
generar el derecho a estar incluido en el ámbito de aplicación de la disposición transitoria 10ª, cuales son: 1ª
tener una sentencia que reconozca la condición de indefinido no fijo, con independencia de la fecha en que se
dicte la sentencia, y 2ª tener la antigüedad exigida por la normativa.
El demandante es consciente, y así lo dice expresamente, que la interpretación realizada por esta Sala es
distinta, ya que en multitud de sentencias hemos exigido que la sentencia sea anterior a 17/9/2007, por lo que
no existe base para declarar la nulidad que se postula.
Al margen de ello, ya hemos razonado anteriormente que las OEPs que articulen los procesos de estabilización
de empleo temporal deben aprobarse en los ejercicios de 2018 a 2020, tal como establece el artículo 19.uno.9
de la Ley 6/2018 (" Las ofertas de empleo que articulen estos procesos de estabilización, deberán aprobarse
y publicarse en los respectivos Diarios Oficiales en los ejercicios 2018 a 2020 y serán coordinados por los
Departamentos ministeriales competentes").
En concreto, el acuerdo de 18 de octubre de 2017 entre la Xunta y los sindicatos CCOO, CSIF y UGT tiene por
objeto el desarrollo de una iniciativa plurianual dirigida a incrementar la estabilidad del empleo público con un
objetivo de reducción de la tasa de temporalidad hasta situarla en torno al 7 %.

9
JURISPRUDENCIA

Por otra parte, ha de tenerse presente que la sentencia de 4 de junio de 2019 de la Sala de lo Social de este
Tribunal Superior de Justicia de Galicia (recurso nº 6/2019) desestimó la demanda de impugnación del V
Convenio colectivo, interpuesta por el mismo sindicato que aquí es recurrente, en la que se interesaba la nulidad
del último párrafo de la disposición transitoria 10 ª, rechazando la desigualdad discriminatoria que se alegaba,
en base a que " el origen de dicha norma convencional se encuentra establecido en las citadas normas con rango
legal, dichas normas a pesar del tiempo transcurrido se han mantenido a través de las distintas modificaciones
normativas tanto a nivel estatal como a nivel autonómico, con lo que el sustento sigue siendo el mismo".
En definitiva, tampoco puede prosperar este segundo motivo de impugnación.
CUARTO: Examen de los motivos tercero y cuarto de impugnación: personal laboral en plaza de funcionario
y ausencia de previsión presupuestaria.-
1. Debido a que están íntimamente vinculados, hemos de tratar conjuntamente los motivos tercero y cuarto
que fundan la impugnación.
El tercer motivo de impugnación se refiere al personal laboral que ocupa plaza de funcionario, alegando
el demandante que desde la perspectiva administrativa no cabe dicha adscripción, pero la potestad de
autoorganización de la Administración permite la transformación de plazas laborales en funcionariales a través
del correspondiente proceso de funcionarización regulado en la disposición transitoria 2ª del RDL 5/2015.
Afirma el recurrente que la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, en sentencia de 28 de marzo de 2019 para
unificación de doctrina, ha declarado que la cobertura de la plaza funcionarial a través del proceso selectivo
establecido no es causa de cese del personal indefinido no fijo, lo cual conlleva bien la indemnización como
despido improcedente bien la readmisión si concurren causas de nulidad.
Expone la demandante que en la OEP impugnada la mayoría, en concreto 1448, de las plazas de estabilización
y consolidación (salvo 270 de personal laboral en el anexo II) se ofertan como funcionariales en los anexos II
y III, lo cual significa que el personal laboral que las ocupe, aproximadamente 1.778 plazas, ha de ser cesado,
y entiende que ello entraña un claro incumplimiento del artículo 19.uno.9 de la Ley 6/2018, que dispone:
" Además de lo establecido en el artículo 19.uno.6 de la Ley 3/2017, de 27 de junio, de Presupuestos Generales del
Estado para el año 2017, se autoriza una tasa adicional para la estabilización de empleo temporal que incluirá las
plazas de naturaleza estructural que, estando dotadas presupuestariamente, hayan estado ocupadas de forma
temporal e ininterrumpidamente al menos en los tres años anteriores a 31 de diciembre de 2017 en los siguientes
sectores y colectivos: personal de los servicios de administración y servicios generales, de investigación, de
salud pública e inspección médica así como otros servicios públicos. En las Universidades Públicas, sólo estará
incluido el personal de administración y servicios.
Las ofertas de empleo que articulen estos procesos de estabilización, deberán aprobarse y publicarse en
los respectivos Diarios Oficiales en los ejercicios 2018 a 2020 y serán coordinados por los Departamentos
ministeriales competentes.
La tasa de cobertura temporal de las plazas incursas en los procesos de estabilización, deberá situarse al final
del período, en cada ámbito, por debajo del 8 por ciento.
La articulación de estos procesos selectivos que, en todo caso, garantizará el cumplimiento de los principios
de libre concurrencia, igualdad, mérito, capacidad y publicidad, podrá ser objeto de negociación en cada uno
de los ámbitos territoriales de la Administración General del Estado, Comunidades Autónomas y Entidades
Locales, pudiendo articularse medidas que posibiliten una coordinación entre las diferentes Administraciones
en el desarrollo de los mismos.
De la resolución de estos procesos no podrá derivarse, en ningún caso, incremento de gasto ni de efectivos,
debiendo ofertarse en estos procesos, necesariamente, plazas de naturaleza estructural que se encuentren
desempeñadas por personal con vinculación temporal".
De ello deduce el recurrente que la oferta de más de mil plazas ocupadas por personal laboral indefinido como
de personal funcionario implicará un aumento desmesurado del gasto en indemnizaciones, no contemplado
presupuestariamente, y/o el aumento de efectivos cuando se imponga la readmisión, vulnerándose el principio
de contención de gasto público y eficacia de la Administración, lo que conlleva el incumplimiento de la norma
que impide el incremento del gasto y de efectivos, de lo que deduce otra causa de nulidad de la OEP por la vía
de los artículos 47.1.a y 47.2 de la Ley 39/2015.
Por ello alega el demandante, en el motivo cuarto que funda su impugnación, la ausencia de previsión
presupuestaria ante eventuales indemnizaciones, mencionando el párrafo del artículo 19 de la Ley 6/2018 que
exige que en todo caso la OEP se atenga a las disponibilidades presupuestarias (también cita el artículo 12.1

10
JURISPRUDENCIA

de la Ley 2/2018, de presupuestos generales de Galicia para 2019), no estando incluidas las indemnizaciones
por despido ni por cese en la masa salarial prevista (art. 22.1 Ley gallega 2/2018), de lo que deduce otro motivo
de nulidad de pleno derecho o, subsidiariamente, de anulabilidad
2. La argumentación del demandante choca frontalmente con lo dispuesto en el artículo 28.2 de la Ley
2/2015, de 29 de abril, del empleo público de Galicia, que prevé expresamente la posibilidad de que se creen,
en las relaciones de puestos de trabajo, puestos derivados de sentencias judiciales firmes que reconozcan
situaciones laborales de carácter indefinido, cuando la persona afectada no pueda ser adscrita a un puesto
vacante, incluyéndose en las RPTs como puestos de personal funcionario o, excepcionalmente, de personal
laboral cuando la naturaleza de sus funciones así lo requiera. Literalmente establece dicho artículo 28 en sus
tres primeros apartados:
" 1. Las relaciones de puestos de trabajo serán objeto de las modificaciones necesarias para ajustarlas a la
creación de puestos derivados de sentencias judiciales firmes que reconozcan situaciones laborales de carácter
indefinido, cuando la persona afectada no pudiera ser adscrita a un puesto de trabajo vacante. La propuesta de
modificación de la relación de puestos de trabajo deberá efectuarse en el plazo máximo de tres meses, a contar
a partir de la fecha de la firmeza de la sentencia judicial.
2. Los puestos de trabajo creados en aplicación de lo previsto en este artículo se incluirán en las correspondientes
relaciones de puestos de trabajo como puestos de personal funcionario o, excepcionalmente, de personal laboral
cuando la naturaleza de sus funciones así lo requiera, y se incorporarán a la oferta de empleo público, salvo que
se disponga su amortización.
3. Una vez modificada la relación de puestos de trabajo, la persona afectada será adscrita al puesto de nueva
creación".
Por tanto, está legalmente previsto que se incorporen a la OEP las plazas correspondientes a los puestos
creados en la RPT como de personal funcionario derivados de las sentencias firmes que reconozcan las
situaciones laborales de carácter indefinido, por lo que no puede oponerse a dicha normativa (que al ser de
rango de ley sólo puede ser inaplicada si es declarada inconstitucional, lo que no es el caso) la jurisprudencia
de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo que se menciona.
En el mismo sentido, la sentencia de 6 de julio de 2018 (recurso de suplicación 1299/2018) de la Sala de lo
Social del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, invocando precedentes en las sentencias de 24 de marzo y
18 de diciembre de 2014, y 24 de febrero y 11 de marzo de 2015 de la misma Sala, ha declarado expresamente
que es perfectamente posible adscribir a personal laboral indefinido no fijo a plaza de funcionario. Así razona
dicha STSXG de 6/7/2018 en su fundamento de derecho segundo:
" Esta Sala ya se ha pronunciado sobre cuestión similar a la presente en sentencias de 24 de marzo de 2014 , 18
de diciembre de 2014 , 24 de febrero de 2015 y 11 de marzo de 2015 , entre otras, señalando que la adscripción
de la actora a una plaza de funcionario no altera su condición de personal laboral indefinido no fijo, pues la actora
no tiene derecho a que se cree la plaza que ocupa como personal laboral indefinido no fijo, ni puede interferir en
el modo en que esa plaza se configura, esto es, si debe ser creada como plaza laboral o funcionarial, pues la RPT
forma parte de las facultades organizativas de la Administración. Es a la Administración a la que le corresponde
configurar la RPT y su impugnación es competencia del orden contencioso-administrativo para el caso de que, en
su confección, se hayan infringido preceptos legales, entre ellos, el artículo 27.2 de la Ley de la Función Pública
de Galicia .
Conviene recordar que las RPT, tanto de personal funcionario como laboral, son instrumentos técnicos de
ordenación de puestos de trabajo, al margen de las condiciones subjetivas de los empleados públicos que los
ocupan, conquistadas por decisión del empresario o por sentencia judicial. Tales Relaciones responden al criterio
organizativo discrecional de la Administración, sin que un derecho consolidado del/a trabajador/a que lo ocupa
(si ese derecho existiera), pueda congelar la potestad de organización para el futuro, especialmente cuando los
puestos son unidades funcionales abstractas que pueden ser servidas por uno/a u otro/a trabajador/a, según
las normas de movilidad contempladas en el Estatuto de los Trabajadores o el Convenio Colectivo aplicable".
A lo anterior cabe añadir que es excepcional la configuración de las plazas de personal laboral, pues la
regla general es que los puestos en la Administración Pública estén desempeñados por personal funcionario,
estableciéndose en el artículo 26.3 de la Ley gallega 2/2015 qué puestos pueden ser desempeñados por
personal laboral cuando dispone:
" Pueden ser desempeñados por personal laboral:
a) Los puestos de naturaleza no permanente y aquellos cuyas actividades se dirijan a satisfacer necesidades
de carácter periódico y discontinuo.

11
JURISPRUDENCIA

b) Los puestos cuyas actividades sean propias de oficios.


c) Los puestos correspondientes a áreas de actividad que requieran conocimientos técnicos especializados
cuando no existan cuerpos o escalas de personal funcionario en los cuales las personas integrantes tengan la
preparación específica necesaria para su desempeño.
d) Los puestos de carácter instrumental correspondientes a las áreas de mantenimiento y conservación de
edificios, equipamientos e instalaciones, y artes gráficas, así como los puestos de las áreas de expresión
artística".
En ese sentido no es libre la Administración para configurar los puestos en la RPT como de personal funcionario
o laboral, y tampoco las plazas en la OEP.
Desde el momento en que en este litigio lo que se impugna es la OEP, con los anteriores argumentos se
patentiza que no existe motivo para anular dicho instrumento de planificación de personal.
3. Tampoco puede prosperar la pretensión de invalidez de la OEP fundada en la ausencia de previsión
presupuestaria ante eventuales indemnizaciones, por varios motivos: 1º porque con ello ya se está partiendo
de que no aprobarán el correspondiente proceso de consolidación quienes ocupan ese tipo de puestos, 2º
porque, en su caso, la cobertura de la plaza se producirá muchos años después de la aprobación de la OEP de
2018 que, no lo olvidemos, es el acto impugnado, de modo que no tiene por qué preverse en esta la hipotética
consignación presupuestaria, siendo así que puede producirse en otro ejercicio presupuestario, 3º para que se
condene a la Administración al pago de la indemnización por despido o cese ha de seguirse previamente un
litigio, con la correspondiente controversia y enjuiciamiento en función de las características concretas de cada
caso, por lo que no puede afirmarse con seguridad que todos terminarán con aquella condena, 4º tampoco
puede afirmarse que la hipotética indemnización derive de la ilegalidad de la OEP, y 5º se da cumplimiento
a las exigencias del artículo 19 de la Ley 6/2018, debido a que la OEP de 2018 respeta las disponibilidades
presupuestarias, como se deriva del informe de la Dirección Xeral de Planificación y Presupuestos.
Respecto a este último, se contiene el informe favorable a la OEP del Director Xeral de Planificación y
Presupuestos (folios 72 a 78, y 84 a 86 del EA ), en base a que no se supera el número máximo de la
tasa de reposición de efectivos, calculado en base al artículo 19 de la Ley 6/2018, y las plazas incluidas en
la OEP cuentan con asignación presupuestaria, que es lo fundamental, al margen de futuras e hipotéticas
situaciones que puedan producirse como consecuencia de indemnizaciones que, en su caso, haya de abonar
la Administración.
Por lo demás, tampoco se concreta cual es el derecho o libertad susceptible de amparo constitucional que
entiende vulnerado el demandante a los efectos de que pueda concurrir la causa de nulidad del artículo 47.1.a
de la Ley 39/2015.
QUINTO: Examen del quinto motivo de impugnación: el principio de igualdad en relación con los procesos
de funcionarización.-
1. Alega el demandante que la exclusión del personal indefinido no fijo de los procesos de funcionarización
vulnera el principio de igualdad en el acceso a la función pública porque no existe razón objetiva y
proporcionada para tal exclusión, ya que en ningún caso implicaría la transformación de su relación en fija sin
pasar los procesos selectivos, sino tras superarlos, sin que el carácter restringido de la convocatoria sea óbice
para la inclusión de aquel personal.
2. Al proceso de funcionarización se dedica el artículo 4 del Decreto 160/2018, bajo el epígrafe de "Promoción
interna para el personal laboral fijo: proceso de funcionarización", con el siguiente contenido:
" El personal laboral fijo de la Administración general de la Comunidad Autónoma de Galicia cuya plaza va a
ser objeto de un proceso de funcionarización podrá participar en un proceso selectivo de promoción interna
para las plazas que figuran en el anexo V del presente decreto, por el sistema de concurso-oposición, de forma
independiente de los de libre concurrencia, siempre que, en el momento de la entrada en vigor de la Ley 7/2007,
de 12 de abril, del Estatuto básico del empleado público, estuviese realizando funciones o desempeñase puestos
de trabajo de personal funcionario, o pasase a realizar dichas funciones o a desempeñar dichos puestos en
virtud de pruebas de selección o promoción interna convocadas antes de la fecha señalada, siempre que posea
la titulación necesaria y reúna los restantes requisitos exigidos, en los términos señalados en la disposición
transitoria primera de la Ley 2/2015, de 29 de abril , del empleo público de Galicia, y en la disposición transitoria
segunda del Real decreto legislativo 5/2015, de 30 de octubre .
Al personal laboral fijo que, a consecuencia de este proceso, adquiera la condición de funcionario de carrera
se le adjudicará destino definitivo, de carácter funcionarial, en el mismo puesto que venía desempeñando con
carácter definitivo".

12
JURISPRUDENCIA

Por tanto, en dicho precepto se contempla una oferta de plazas de promoción interna para personal que ya
superó un proceso selectivo, y por ello ya es laboral fijo, en el que, además, concurran los requisitos que se
explicitan en la OEP y en la normativa que desarrolla, que es la disposición transitoria 1ª de la Ley 2/2015 y en la
transitoria 2ª del RDL 5/2015. Dichos requisitos son que en el momento de la entrada en vigor de la Ley 7/2007,
de 12 de abril, estuviera realizando funciones o desempeñara puestos de trabajo de personal funcionario,
o pasara a realizar dichas funciones o a desempeñar dichos puestos en virtud de pruebas de selección o
promoción interna convocadas antes de la fecha señalada, siempre que reúna la titulación necesaria y los
requisitos exigidos. De hecho, en el apartado tercero de dicha disposición transitoria 1ª de la Ley gallega
2/2015 se prevé que a estos efectos se valorarán como mérito los servicios efectivos prestados como personal
laboral fijo y las pruebas selectivas superadas para acceder a esta condición.
Es evidente que existe una justificación objetiva y razonable para la exclusión de dicho proceso de
funcionarización del personal laboral indefinido no fijo, pues lo contrario supondría que se permitiese el acceso
a la función pública a quien no ha superado un proceso selectivo, significando la infracción de los principios
de mérito y capacidad, recogidos en los artículos 23.2 y 103.3 de la Constitución española. Por tanto, nunca
cabría una interpretación más favorable a la efectividad del derecho fundamental, ya que la que se propugna es
manifiestamente contraria al derecho previsto en el artículo 23.2 de la Constitución española. En consecuencia,
no existe base para plantear cuestión de inconstitucionalidad, y, por el contrario, si se siguiera la tesis que
sostiene el actor se vulneraría la Carta Magna.
Por tanto, tampoco puede acogerse este motivo de impugnación.
SEXTO: Examen del sexto motivo de impugnación: acuerdo del Consello de la Xunta de Galicia.-
Alega el recurrente que no consta en el expediente acuerdo alguno del Consello de la Xunta de Galicia que
apruebe la OEP impugnada.
No cabe duda de que existe ese acuerdo, puesto que en el propio Decreto impugnado se hace constar,
inmediatamente antes del articulado que, de conformidad con lo establecido en el artículo 13.2.g de la Ley
gallega 2/2015 (se establece en él que corresponde al Consello de la Xunta " Aprobar la oferta de empleo público
de la Administración general de la Comunidad Autónoma de Galicia"), se aprueba el Decreto previa deliberación
del Consello de la Xunta de Galicia.
Al no resultar procedente el acogimiento de este último motivo de impugnación, ha de desestimarse el recurso
contencioso-administrativo.
SÉPTIMO : Costas procesales.-
Con arreglo a lo dispuesto en el artículo 139.1 de la Ley Reguladora de la Jurisdicción Contencioso-
Administrativa, han de imponerse las costas al recurrente, al haber visto rechazadas todas sus pretensiones,
y no apreciarse en el caso serias dudas de hecho o de derecho; de conformidad con lo previsto en el
artículo 139.4 LJ, se fija en 1.500 euros la cantidad máxima en concepto de defensa y representación de la
Administración demandada, en función del trabajo y esfuerzo desplegado para dar respuesta a los motivos
de impugnación esgrimidos.
VISTOS los artículos citados y demás preceptos de general y pertinente aplicación.

FALLAMOS
que desestimamos el recurso contencioso administrativo interpuesto por la Confederación Nacional del
Trabajo contra el Decreto 160/2018, de 13 de diciembre, por el que se aprueba la oferta de empleo público
(OEP) correspondiente a plaza de personal funcionario y laboral de la Administración General de la Comunidad
Autónoma de Galicia para el año 2018, imponiendo al demandante las costas, fijando en 1.500 euros la
cantidad máxima en concepto de defensa y representación de la Administración demandada.
Notifíquese la presente sentencia a las partes, haciéndoles saber que contra ella puede interponerse recurso
de casación ante la Sala Tercera del Tribunal Supremo o ante la Sala correspondiente de este Tribunal Superior
de Justicia, siempre que se acredite interés casacional. Dicho recurso habrá de prepararse ante la Sala de
instancia en el plazo de TREINTA días, contados desde el siguiente al de la notificación de la resolución que
se recurre, en escrito en el que se de cumplimiento a los requisitos del artículo 89 de la Ley reguladora de la
jurisdicción contencioso-administrativa. Para admitir a trámite el recurso, al prepararse deberá constituirse en
la cuenta de depósitos y consignaciones de este Tribunal (1570-0000-85-00-0072-19), el depósito al que se
refiere la Disposición Adicional Decimoquinta de la Ley Orgánica 1/2009, de 3 de noviembre (BOE núm. 266
de 4/11/09); y, en su momento, devuélvase el expediente administrativo a su procedencia, con certificación
de esta resolución.

13
JURISPRUDENCIA

Así lo pronunciamos, mandamos y firmamos.

14

También podría gustarte