1560km Mi Bici y Yo Francesc Zamora
1560km Mi Bici y Yo Francesc Zamora
1560km Mi Bici y Yo Francesc Zamora
KM
(Mi bici y yo)
Dedicado a Manuel Zamora Porcel
Por Francesc Zamora Muñoz
Día 1
6 de mayo de 2011
“Feliz cumpleaños papa.”
cama boca arriba, más despierto que nunca, con la mirada posada en
Recuerdo que cuando empecé a planificar el viaje dibujé una ruta sobre
el mapa mucho más larga de la que realicé al final. Soñaba con hacer
Es ahora, varios años después, cuando puedo decir con total seguridad
que lo que hace que un viaje sea un gran viaje no son los kilómetros
que se puedan recorrer o los días que se esté fuera. Lo que realmente
trazadas a mano. No tenía muy claro por donde iba a pedalear las
próximas semanas ya que no tenía una ruta establecida. Tan solo una
de casa bajé al garaje con todas las mochilas, las monté sobre mi
que lo haría avanzar. Dos alforjas traseras laterales con otra mochila
campaña para una persona, suficiente para mi. Una esteril a, el casco
de muchas otras cosas más que eran desconocidas para mi. No sabía
parte de la familia.
garaje para salir a la cal e. La bici pesaba mucho más de lo que había
con el paso del tiempo, de los días y de las noches se iría aligerando.
Salí del garaje y l egué al parking exterior del edificio. Estaba cerca de
rostro. Pensé por un instante que quizás no era el mejor día para
Tomé aire y noté como mi piel se ponía de gal ina suavemente mientras
mi destino. Les di las gracias, miré una ultima vez hacia atrás, le dije
adiós a Andorra y seguí pedaleando para al fin cruzar esa linea que
libertad. Cada vez estaba más lejos de casa y a cada golpe de pedal
paisaje nublado que me rodeaba sin dejar caer muchas gotas de agua.
Llegué hasta Organyà poco después del medio día. Pedalee 60,9
cuantioso.
desempaquetar lo necesario.
Una vez todo listo, salí al pueblo para comer algo, un buen plato
estomago l eno volví al camping paseando. Charlé con unos chicos que
atención, te das cuenta de que por muy solo que te sientas, nunca lo
mi, sentí la tierra, sentí el silencio, sentí que estaba haciendo algo
Me sentí relajado, ahora que estaba unido más que nunca con el
conocerse a el os mismos.
Día 2
7 de mayo de 2011
“La ducha más larga de mi vida”
pero no iba a ser así ese día. Pedalee 25 kilómetros, ni uno más ni uno
menos...
esfuerzo muy grande al ser la mayor parte del recorrido cuesta abajo.
poder dormir sobre el a sin notar la dureza del suelo. Fue agradable y
Hacía algo más de frío que el día anterior y el poco horizonte que podía
buena tormenta.
Justo antes de salir decidí cambiar la ruta prevista que pasaba por la
aquel a zona. Mi nueva ruta cruzaba unas altas montañas cuyo nombre
tablet para poder enviar mis correos de vez en cuando y mirar unos
aun sabiendo que eso no iba a ocurrir. Pero necesitaba una pausa,
a cubierto. Llevaba una lona plástica para atar entre arboles y así crear
solo cuatro euros más de lo que costaba una parcela para la tienda de
campaña. Aquel a fue una gran noticia, iba a pasar la noche a cubierto,
con luz e incluso con Internet para poder echar un vistazo a “Google
Maps” antes de partir por la mañana.
Día 3
8 de mayo de 2011
“La aventura de la vida”
Desperté con los pocos rayos de luz que se atrevían a abrirse paso
entre unas nubes que parecían ahora tener prisa por marcharse. Eran
cuesta arriba, buscando la cima del puerto que dejé a medias el día
anterior. Poco a poco, con paso firme, fui alcanzando esa primera cima
mientras el sol, cada vez más fuerte, le ganaba la batal a a las nubes.
Cuando l egué a la cima, de nuevo en mi rostro, la felicidad dibujó una
gran sonrisa. Aquel o fue mágico, fue único. Era tan solo mi tercer día
aquel lugar l amado hogar, sin embargo, todo lo que había frente a mi,
mundo era mi hogar, nuestro hogar. Hice una parada en la cima para
comer una fruta, para sacar unas fotografías desde el mirador para el
recompensa.
metiese dentro, no vi mi vida pasar ante mis ojos, tan solo pensé
la bicicleta y logré parar a los pocos metros. Todo estaba intacto salvo
por los aires y quedaron colgadas por las cuerdecitas que las sujetaban
quizás debía cambiar las pastil as de freno, con todo aquel peso sería
para l egar a Solsona, dónde hice una breve pausa para comer unos
kilómetros más.
Al poco rato vino la gran cuestión, ¿donde dormir? El lugar por donde
alrededores así que decidí seguir bajo un cielo a cada vez más cubierto
a l over, pero aún así, le dije amablemente a la señora del camping que
iba a mojar. Era el primer día que decidía acampar al aire libre en algún
lugar desconocido, sin parcelas, sin normas, sin vecinos, sin saber si
cabo de casi una hora encontré “el lugar” porque en cuanto lo vi supe
que ahí iba yo a dormir bajo la luz de la luna si las nubes decidían
árboles junto a la oril a del embalse, se elevaba unos dos metros sobre
parecía estar hecho a medida para mi. Bajo la l uvia monté la tienda de
estaba todo listo para que mi cuerpo pudiese descansar un poco, dejó
de l over.
Día 4
9 de mayo de 2011
“Físico y mental”
sino más bien porque emprendí el viaje sin preparación física alguna.
No había entrenado durante el invierno. Tan solo salí alguna que otra
sin duda no era como las etapas que estaba recorriendo ahora. Aunque
cosas que iban quedando atrás y de las muchas otras que estaban por
demasiado aquel duro suelo. Tan solo l evaba una pequeña esteril a de
bajadas hasta l egar al pueblo de Berga. Donde sin pensarlo dos veces,
sin prisa alguna, l egar a Córdoba. Fue tras su fal ecimiento cuando
decidí que aquel viaje soñado por ambos lo iba a hacer sobre dos
ruedas. Iba a l evar sus cenizas hasta su tierra natal para esparcirlas.
Ese era mi sueño, el que había ocupado todas mis noches durante los
últimos meses.
RMF.FZM.JMZM.MZP.
“Quizás sea este el viaje más grande de toda mi vida, quizás sea este
el camino a la liberación, el camino hacia la paz que tanto ansío. Eso lo sabré
cuando se abra la ultima puerta. La puerta del perdón, la puerta
“Nunca Olvidaré”
Día 5
10 de mayo de 2011
“Noche de hotel”
“Lo más gratificante de las subidas son esos momentos en los que
sido una etapa bastante dura y había tenido que cruzar algunos puertos
de montaña en los que me tuve que parar varias veces para coger aire.
que pedalear unos 8 km de pura subida por una estrecha carretera que
fuerzas para poder afrontar los dos días que según mis cálculos me
quedaban para l egar a Gerona. Una vez al í, vería a la familia y podría
transporte pero era evidente que en bicicleta era mucho más lento y
cama.
Día 6
11 de mayo de 2011
“La mesa”
los pájaros que a veces te acompañan con su vuelo, el canto del río
Es maravil oso ”
para darme cuenta de lo poco que valoramos por momentos todas las
son lujos que no todo el mundo tiene la suerte de poseer. Es tan sólo
Estaba cerca de Olot y tan sólo había recorrido unos 35 km. Había
escoger la parcela donde pasar la noche así que sin prisa alguna,
ideal hasta que di con el a. Tenía buenas vistas, le daba el sol, los
aseos no estaban muy lejos y lo más importante es que tenía una mesa
de madera a disposición. Si, una simple mesa, pero una gran mesa
sil as, una mesa y desenrol ó el toldo que le permitiría protegerse del
que él no l evaría un rasca espaldas como el mío, que no era más que
un palo de madera con una mano tal ada en la extremidad para poder
rascarse todos esos lugares del cuerpo donde no l egamos con las
manos.
autocaravana al camping. Ésta era aún mayor que todas los que había
complicada que puede l egar a ser la vida mientras se viaja. Yo tan sólo
un fogón para poder cocinar algo y poco más la verdad. Cada uno tiene
sentía a gusto, relajado y en paz. Era todo muy distinto a los primeros
dos o tres días de viaje, todo fluía con mayor naturaleza, ya no habían
sueños tal y como sucedió unos días atrás. En aquel sueño, era joven
como en una foto que tengo de el en casa, l evaba una chaqueta que
vida. También soñé en esos primeros días de viaje con que tenía una
para ver si la imagen del sueño era igual que la propia realidad.
Día 7
12 de mayo de 2011
Después de 330 km sobre la bici, unas 27 horas pedaleando, cientos
reflexionar sobre qué ruta tomar para l egar antes y escogí la carretera
nacional ya que ésta era una línea recta sobre el mapa en lugar de una
se l evó una gran sorpresa. Tan grande que su grito de alegría hizo que
Lo primero que hice fue darme una buena ducha, pero que muy buena.
Me relajé, comí algo y fui a ver a mi tía, a mi tío y mi primo que viven
unas horas y con una sonrisa en la cara sabía que si había l egado
Estaba contento por estar con los míos aunque ya pensaba en el día en
Me siento vivo.”
Día 8
21 de mayo de 2011
“De vuelta a la carretera”
tiempo. Una de las cosas más emocionantes que hicimos durante esa
el intenso sol que calentaba sus aguas. Fue una experiencia increíble y
Pedalee unos 45 km ese día. Preferí no avanzar mucho más para ver
aquel dolor intenso en la rodil a izquierda nada más dar el primer golpe
marchado por completo pero no fue así. Era un pinchazo agudo bajo el
que todos los otros campings por donde había pasado. Era lógico ya
las manos vacías, compré un cojín hinchable por tres euros para poder
almohada. Había que improvisar así que usaba una de las maletas
cómodamente.
Una vez instalado y habiendo comido me eché una buena siesta hasta
todo en lo que estaba realizando, era un viaje muy íntimo y todo un reto
para mi cuya experiencia en viajes sobre dos ruedas era nula antes de
No sabía muy bien cómo ocurriría todo, tan sólo había avisado a mis
pero sí sabía lo que deseaba, que era l evar los restos de mi difunto
Día 9
22 de mayo de 2011
“El dolor, mi peor enemigo”
El dolor en la rodil a era muy agudo pero aún así logré avanzar unos 50
km. Los primeros 20 fueron un constante sube y baja por una zona algo
Fue bastante duro pero esas vistas impresionantes lo hicieron todo más
conexión con otras personas es muy interesante. " Eso es pedalear y no lo que
hacemos nosotros" fue lo que me dijo el chico con quien
charlaba.
Aquel o me animó, incluso noté como el dolor en la rodil a se
cargada hasta arriba por las cal es de los pueblos, además de todos los
oía a mi alrededor gente hablando y diciendo "¡ mira ese!" Supongo que no se
ven ciclistas viajeros todos los días.
l evaba una buena gorra de esas que te tapan el cuel o y mucha crema
que tan sólo quise marcharme de ese lugar. Como puede ser que en
Estaba en Blanes...
Por la noche, como todas las otras noches, abría mi mapa de toda
España para marcar la ruta recorrida con un rotulador y calcular
unos 1100 más, aunque a partir de ahora estaría sobre un terreno más
l ano lo que significaba que podría avanzar más de prisa y hacer más
Día 10
23 de mayo de 2011
“Locura sobre ruedas”
Día 11
24 de mayo de 2011
“Amistades”
Llevaba dos días bastante cansado aunque era lógico ya que estaba
momentos. Aunque todo en esta vida por muy malo que sea siempre
canción "Light my fire". Y yo, mientras sus cuerdas vocales creaban la famosa
melodía reflexionaba y escribía al mismo tiempo todo lo que por
“Pasan las curvas, pasan las dunas y las lunas. Ahí está la libertad tras cada
golpe de pedal, la gloria tras cada colina, siempre me aguarda…
cuenta que desea seguir, que le gusta reír cuando en la cima de una
estoy haciendo tiene ya sentido, tiene bel eza y no importa nada más.”
Día 12
26 de mayo de 2011
“Buen camino”
Las cuestas era más l evaderas y las piernas eran ya algo más
hasta l egar a mi meta. El calor era cada vez más intenso, en uno de
los pueblecitos por los que pasé el termómetro marcaba 35° y nada
más ver esa cifra me hizo sentir más calor todavía. Pero no importaba
respectivos mail ots sobre sus bicis ultra ligeras mientras yo con la
bicicleta más baja de gama y económica que pude encontrar en todo
con quien me crucé me saludó con la mano mientras me decía "¡ buen
camino!"
en mitad de la noche para echarte del terreno. Así que me costó algo
elevados del resto del paisaje, con lo que tenía unas vistas
tienda de campaña. La idea que tuve unos días antes de doblar la lona
Día 13
27 de mayo de 2011
“Dolor”
pensar con claridad pero tras unos minutos de silencio vi claro que
David para decirle que tenía pensado pasar a visitarle. La ruta que
Día 14
28 de mayo de 2011
“Las nubes, luchan conmigo.”
junto a Mónica, otra gran amiga de la infancia que desde hacía poco
gran cosa sobre política, pero desde mi punto de vista, en cuanto hay
personas que malviven, que sufren, que duermen en las cal es y que
tan solo un viaje en bicicleta, no eran unas vacaciones, era algo mucho
de loco cuando les conté mi intención de realizar este viaje. Sentí una
dijese que era lo correcto, que tenía sentido, que era bel o o noble lo
acabaría haciendo.
la rodil a izquierda así que pude gozar mucho más de los sube y baja
de las carreteras. En una de esas subidas seguidas de una bajada,
de los que fui testigo. Apenas miraba el reloj y tan sólo encendía el
teléfono móvil un rato cada tarde por si recibía alguna l amada urgente
desde dentro hacia fuera con cada experiencia que vivía, con el
comida y todas esas cosas que son parte del viaje, ahora todo fluía con
otra.
Día 15
29 de mayo de 2011
“Las recompensas”
Me sentí triste al ver como las carreteras que nos l evan a todas partes
viajeros. Pero más triste es ver cómo ignoramos todo cuanto nos rodea
eramos una plaga dispuesta a acabar con este mundo. Me crucé con
cuerpos. Aquel o era doloroso. Parecía que tan sólo yo era testigo de
esa crueldad ya que todos los demás viajaban en sus latas metálicas y
cosas buenas como de las malas. Pero ese día, parecía como si todas
camino al mismo tiempo. Era uno de esos días en los que uno prefiere
linea recta que parecía no tener fin, vi que todo aquel o, tanto lo malo
como lo bueno, era parte del camino de la vida. Pude ver por un
luchar físicamente, sino que había otra lucha que debía ganar dentro
que debía seguir un kilómetro más, y cuando este había pasado, hice
La verdad es que a pesar de que fue un día muy duro, lo que aprendí
Día 16
30 de mayo de 2011
“El viento, un gran enemigo”
para seguir adelante. Empecé el día con optimismo y hasta parecía que
la bici pesaba menos que los otros días y los neumáticos se deslizaban
mi medio de transporte.
visto empezó a soplar un viento de frente que era más bien molesto.
Durante todos los días anteriores no hubo tanto viento y era la primera
74 km ese día.
Cada día era un nuevo reto tanto mental como físico, una batal a y una
recorrido eran apenas 40 km en un día sin l evar más que una botel a
de agua. Ahora iba cargado hasta arriba pero con las cosas más
y una gran mesa de plástico para mi parcela. Pude ver la puesta del sol
Día 17
31 de mayo de 2011
“Recorriendo el mundo interno”
“Dentro de cada uno hay una fuente enorme de energía, no cabe duda.
Era refrescante y a pesar del ruido que creaba todo aquel o era
bajo una gran tormenta, parecía como si no existiese nada más, como
fuese porque acepté que las cosas suceden porque deben suceder y
con el futuro. ¿En que escuela te enseñan a seguir adelante tras perder
a un ser querido, a saber pedir perdón y dar las gracias, a ser humilde,
a tus sueños?
1 de junio de 2011
“Hoy es el primer día del mes de junio, un nuevo mes por delante.
Han pasado muchas curvas, muchas sonrisas de esas que salen solas
Me gusta todo esto, vivir como un nómada, sobre mi bici, con lo básico,
Ahora, me gusta lo que veo, ahora, estoy sentado en una sil a de una
Día 18
3 de junio de 2011
“Seguimos”
Sagunto, como todos los otros lugares por donde pasaba en ese viaje
quedó atrás. Sin embargo, muchas cosas estaban aún por l egar. Me
Con el tiempo nublado pero con las ideas claras fui avanzando
podría haber avanzado bastante más. Pensé que sería mejor ser
un rato por los alrededores cuando la l uvia era mucho menos intensa y
cuarzo bril aban con los pocos rayos de sol que pasaban
mi tío que aquel o era cuarzo en estado puro pero sin mucho valor
La única señal de civilización que lograba ver eran los pocos aviones
“Tormenta de sentimientos,
ahora, se acuesta el sol. Ahora, aprovecho la luz del mundo para ver
en mis palabras.
Día 19
4 de junio de 2011
“De vuelta a las curvas”
más lejos) decía en voz alta "¿ Quien se está dando la vuelta al mundo en bicii”
Levanté la mano tímidamente, me sonrió y dijo en voz alta
de las carreteras e incluso cerca del agua. Pensé que quizás no todo el
mundo sabía lo que era un contenedor de basura y aún menos el
tener vistas al agua desde la sombra de uno de los altos árboles que
Mancha y Andalucía. Por la noche, como todas las otras noches abrí mi
hacía avanzar mi sueño. Anoté los kilómetros recorridos ese día y al fin,
pude escribir una cifra de cuatro dígitos Había pasado la barrera de los
“Hay un instinto natural en todos nosotros que nos l eva hacia el agua
Día 20
5 de junio de 2011
“Suenan las campanas”
de mis gestos y yo, las miraba asombrado por su bel eza mientras
instantes especiales en los que uno sonríe sin saber por que sonríe.
Eso es la felicidad.
sorprendentemente era casi tan grande como todo mi piso. Habían dos
la ventana.
hermano…
paz. No lo dudo.
Día 21
6 de junio de 2011
“Altibajos”
Todo lo que sube baja, tanto las pendientes como los estados de
vaguear entre las sábanas pero por algún motivo a las ocho de la
mañana mis ojos estaban bien abiertos. Salí de la cama y miré por la
hacerlo así que como todos los otros días volví a empaquetarlo todo, a
fueron muy duros, tuve que subir por un puerto que me parecía no
tener fin. Aunque realmente no era nada del otro mundo, era la falta de
atraerlos todavía más hacia mi. Por si fuera poco a los pocos minutos
Pasadas las dos horas sobre la bici y tan sólo habiendo recorrido 20 km
ya estaba agobiado, cansado. Pero entonces sucedió algo mágico.
las ganas y el amor que siempre está ahí, miré el mapa y realicé lo
lejos que estaba de casa. ¡Había recorrido más de 1000 km sobre una
bicicleta cargada! Y debían quedarme tan sólo unos pocos días para
cara, con la piel de gal ina, sintiéndome parte del mundo, unido al todo.
pueblos por los que pasaba eran formados por apenas unas pocas
casas hasta que l egué al pueblo de Madrigueras donde encontré un
pasar la noche. Estaba decorada al estilo virgen María, con los típicos
la cama.
tierras más bien áridas. Cuando cesó la l uvia, a eso de las ocho de la
Necesitaba comer algo consistente ya que l evaba unos días con una
Día 22
22 de junio de 2011
“La rueda en Roda”
Lluvia, mucha l uvia durante casi una hora en la que me refugié bajo
Entonces seguí adelante y sobre las dos del medio día paré a las
y ese instante se convirtió en algo más de una hora hasta que el sonido
caían cada vez mas rayos a lo lejos, algunos sobre los pocos arboles
Mientras pensaba en esas cuestiones, otro rayo cayó aunque esta vez
suelo. Aquel fue el mensaje que esperaba, así que di media vuelta y
sirvió de mucho ya que aquel albergue era tan solo para los que
“s olo peregrinos” , así que no insistí más, le di las gracias y colgué. Yo que
estaba haciendo el camino de mi vida...
para saber si había disponibilidad hasta que dieron con uno que según
me dijo uno de los policías estaba muy bien. Así que al í me dirigí
aparcada en el patio trasero del hostal que hacía de parking para los
lejos de Roda había caído granizo del tamaño de pelotas de golf esa
por que gracias a el o l egué a ese hostal para cruzarme con buenas
todavía vestía con un forro polar durante algunas horas del día. Pensé
tiempo, ni las personas con las que te vas a cruzar, cuanto vas a lograr
avanzar, donde vas a l egar... Eso es mágico.
Día 23
8 de junio de 2011
“Quizás el día más frustrante”
Fue la jornada más dura de todo el viaje. El viento de los otros días no
avanzar a unos 15km/h e incluso algo más deprisa pero con tanto
alquitrán y sin saber por que, me relajé, respiré y luego empecé a reír
mientras le volvía a hablar al viento y a la nada que me rodeaba « ¿Eso
seguir al í, igual que el sol, las nubes, los colores de los campos y el
por dónde Don Quijote pasó una vez. Al í estaba yo, roto físicamente,
muchos años.
Día 24
9 de junio de 2011
“Carreteras sin fin”
eran lugares desérticos. Era la monotonía de las lineas rectas entre dos
pueblos por las que circulaba las que me hacían creer que estaba
La noche anterior fue dura, era tal el cansancio que sufría que me costó
unas mantas que me vinieron muy bien ya que hizo frio tal y como el os
predijeron. No tanto como otras noches en las que había dormido con
la ropa dentro del saco de dormir aunque era un frío distinto esta vez.
por algo que comí aunque bebiendo mucha agua se fue recuperando
poco a poco.
las tuviese que ver de nuevo con fuertes vientos en los próximos días,
puede medir con kilómetros y que está dentro de cada uno de nosotros.
del sol que ahora era abrasador, bebiendo agua caliente de mi botel a y
con las manos doloridas, vi a lo lejos lo que parecía ser una persona en
la carretera. Se fue acercando hasta que pude verlo con detal e a unos
linea recta. Nos miramos fijamente, sonreímos los dos mientras nos
fotografía.
Día 25
10 de junio de 2011
“Récord”
todo el viaje. Había sido un buen día, cuerpo y mente habían trabajado
que otra fruta mientras me escondía un poco del sol bajo los arboles de
Guadalén. Dijo que valía la pena así que exprimí las fuerzas para l egar
hasta una de sus oril as. Y la verdad es que de no ser por la suciedad
que tenia para dormir pero no quería dejar ciertas cosas fuera. En una
dos moratones del tamaño de pelotas de golf. (Tuve también otra araña
una organización.
mismo cuando pensé por un instante “¿ Por que no sopla algo de viento
para refrescar?”
Quería que la aventura siguiese por mucho más tiempo, quería sentir
que estaba haciendo algo noble durante más tiempo. Aquel o me hacía
cabía duda de que lo que me esperaba al final iba a ser mucho más
sus miedos estaba mucho más lejos que 1300 kilómetros. Me dí cuenta
dos días de pedaleo de mi destino, sino por que ahora sabía que todo
de naturaleza.”
Día 26
11 de junio de 2011
“Cuenta atrás”
que marcaba el termómetro de uno de los pueblos por los que pasé. Un
que le dejó sin sensibilidad de cintura para abajo y pasaba las tardes
tener dinero suficiente para una vez acabado el viaje volver a mi casa,
habitación así que con los 7 euros que encontré en varios bolsil os me
bien vestida, bien peinados y con mil y una colonias distintas era
Llamé a mis tíos, desde que salí de Andorra no les había vuelto a
nueve años la ultima vez, y ahora 24. Tenía pensado pasar unos días
Día 27
12 de junio de 2011
“Córdoba”
l egado.
Hemos vuelto,
Juntos”
13 de junio de 2011
Desperté en Córdoba, mas temprano de lo que me esperaba a pesar
con rotulador la ultima etapa. Los kilómetros totales, los días de viaje...
Ese día fuimos a pasear por la ciudad con mi tío Pepe. Me enseñó
pequeños se iban abañar al rio. Todo aquel o era desconocido para mi,
era una ciudad nueva mirara hacia donde mirara, aunque algunas
lugar era blanco, alto y amplio. Uno podía ver el mundo entero si así lo
con una camisa y un pantalón de color beis claro que no había usado
en todo el viaje porque eran para ese día. Eran mi humilde traje de
durante toda una vida, dónde todo empezó, donde nada acabó. Dónde
hasta mañana.
palabras.
Soy Humano,
Gracias,
también formáis parte del viaje. Gracias a los que me habéis acogido
años sin vernos. Gracias Rafi, gracias Pepe y gracias Rafa por todo el
tiempo que me has dedicado, por las charlas, por las risas, por todo.
Sois una auténtica familia por que ante todo, sois auténticas personas.
Gracias a la vida.