El Espíritu de Amalec
El Espíritu de Amalec
El Espíritu de Amalec
Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré
sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano.
E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a
la cumbre del collado.
Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; más cuando él bajaba
su mano, prevalecía Amalec.
Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él,
y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro;
así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.
En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que
produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las
naciones.
Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le
servirán, y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.
No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios
el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos. (Apoc. 22:1-5)
Así que la victoria está asegurada, y el plan de Dios se cumplirá en su totalidad, pero para evitar
mientras tanto, dolor y sufrimiento, no debemos olvidar que a Amalec se le vence cuando (en el
Señor) fortalecidos, descansamos siempre en el Señor.
¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra?
No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.
Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a
Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán;
caminarán, y no se fatigarán. (Isaias, 40:28-31)
• En hebreo. {Amâlêq, «belicoso» o «pueblo que lame”).
• Es un espíritu sutil, que se levanta contra los propósitos que Dios tiene para tu vida,
tu hogar y tu descendencia.
• Ataca el área económica de la familia, se roba todo el Fruto de tu trabajo.
• Un espíritu manipulador que trabaja por la retaguardia es el espíritu de traición.
• Un espíritu que te quita pasión por la presencia del Señor.
• Amalec es un espíritu ladrón, trae al interior de tu vida, hogar y descendencia
contiendas, peleas, gritería, maledicencia, división, adulterio, iras y como
consecuencia destrucción familiar.
• Amalec te impide el avance hacia la conquista de tus sueños, metas y propósitos.
• Amalec arranca: La fe, la firmeza y la fidelidad.