Envejecimiento
Envejecimiento
Envejecimiento
este se define como un deterioro funcional, progresivo y generalizado que ocasiona una
pérdida de la respuesta de adaptación la agresión y un aumento del riesgo de
enfermedades asociadas a la edad”
muchos adultos mayores pasan por depresiones y crisis en esta etapa, factores que
debilitan su bienestar,
Teorías de la programación genética Estas teorias sostienen que el cuerpo humano
envejece de acuerdo con un plan de desarrollo normal incorporado en los genes.
Teoría evolutiva. El envejecimiento es un rasgo evolucionado que permite que los
miembros de una especie vivan solo el tiempo suficiente para reproducirse.
Teorías de tasa variable Estas teorías, llamadas también teorías del error, consideran
que el envejecimiento es resultado de procesos aleatorios que varían de una persona a
otra, y por lo regular el envejecimiento implica daño debido a errores aleatorios o a
ataques ambientales a los sistemas biológicos.
Teoría del desgaste. Las partes vitales de celulas y tejidos se desgastan.
Por consiguiente, podemos usar el término viejo joven para referirnos a la mayoría de
adultos mayores sanos y activos
TIPOS DE ENVEJECIMIENTO
Dada la diversidad de envejecimientos los geriatras coinciden en clasificar la vejez en tres
tipos:
Vejez normal: la que implica una serie de cambios graduales biológicos, psicológicos
asociados a la edad, intrínsecos e inevitables, que ocurren como consecuencia del paso
del tiempo. Por tanto, una persona vieja normal sería la que presenta la “media” de los
parámetros correspondientes a su funcionamiento biológico, psicológico y social.
Vejez patológica: aquella que cursa con alguna enfermedad y discapacidad asociada a
cambios que no son una parte necesaria del envejecimiento. Está confirmada la relación
de a mayor edad, mayor probabilidad de enfermar. La mayor parte de los programas para
la “tercera edad” van dirigidos a este tipo de vejez.
Vejez activa, satisfactoria, con éxito o competente: es aquella que cursa en las
mejores condiciones posibles con baja probabilidad de enfermar, con alto funcionamiento
físico funcional, cognitivo y afectivo y gran compromiso con la sociedad. Este tipo de vejez
es la más deseable.
El lograr envejecer bien depende hasta un 75% de nuestros hábitos y de las
oportunidades que nos brinde nuestro entorno social. Envejecer bien lo logramos con
cuatro fundamentos clave:
Entorno
La escasa movilidad de mucha gente mayor, a menudo no viene determinada
exclusivamente por limitaciones físicas, sino también por las dificultades de accesibilidad
determinadas por la falta de un transporte adecuado, barreras arquitectónicas y
dificultades de acceso de cualquier tipo. También se debe considerar la importancia del
impacto del frío y del calor excesivo.
El objetivo es facilitar el acceso a las personas mayores a entornos ambientales, tanto
exteriores como interiores, seguros y estimulantes.
Nutrición
La gente mayor tiene necesidades nutricionales específicas, requieren menos calorías
pero más nutrientes para promover y proteger su salud y contribuir a su independencia,
autoeficacia y calidad de vida.
El objetivo es promover hábitos de alimentación saludables entre la gente mayor,
haciendo hincapié en el bajo consumo de grasas saturadas y el alto consumo de
alimentos ricos en fibra, verduras y fruta.
Actividad física
La actividad física se asocia a una mejora y un alargamiento de la calidad de vida y tiene
un papel importante en el mantenimiento de la salud y la funcionalidad entre la gente
mayor. La práctica de ejercicio físico reduce el riesgo de desarrollar enfermedades
cardiovasculares, disminuye la presión arterial, el riesgo de accidente cerebrovascular y
de cáncer colorrectal y tiene un efecto positivo en la sensibilidad a la insulina.
El objetivo es aumentar la actividad física entre las personas mayores hasta 30 minutos o
más de actividad de intensidad moderada, la mayoría o preferentemente todos lo días de
la semana.
Malos tratos
Se estima que en los países desarrollados el maltrato afecta entre el 4 y el 6% de la gente
mayor. Cualquier tipo de maltrato implica sufrimiento, lesiones o dolor, pérdida o violación
de los derechos humanos, deterioro de la calidad de vida y en algunos casos la muerte.
En definitiva, envejecer activamente significa “Vivir con vitalidad” cada ciclo de nuestra
vida, manteniendo unos hábitos saludables (previniendo la enfermedad), optimizando
nuestro funcionamiento físico, cognitivo y emocional; participando activamente en nuestra
familia y nuestro entorno social.
¿Por qué esto es importante para la psicología de la salud?
Al envejecimiento se le debe entender como un proceso, pero no sólo como un proceso
lineal en el interior del ciclo vital. Este proceso es un acontecimiento individual y un
fenómeno colectivo. La población de personas mayores de 60-65 años en adelante,
tomada como fenómeno colectivo, se traduce en un envejecimiento poblacional.
Que la longevidad sea un fenómeno poblacional implica que sea tomado como una
temática social y de salud pública, A nivel individual, este proceso es dinámico y
discontinuo, que para ser entendido no sólo se debe observar y conocer desde un estado
de vejez, desde una situación estática de sólo estar viejo o vieja, sino también como una
construcción social y biográfica.
analizar el envejecimiento desde una lectura biográfica y de experiencia anterior, pues
nos permite comprender los cambios y circunscribirlos no a hechos aislados sino a un
todo de experiencia vital: “Tanto el estudio de las vidas individuales como el de los
cambios sociales debe verse como una interrelación constante del tiempo vital, el tiempo
definido socialmente y el tiempo histórico” (Neugarten, 1999: 30).