Resumen Libro Ismael de La Cruz PDF
Resumen Libro Ismael de La Cruz PDF
Teoría de Down
Gráficos
El precio marcó un nivel de soporte donde dejó de caer y comenzó a subir. En dicho soporte se
traza su correspondiente línea horizontal para estar atentos la próxima vez que llegue el precio. Y
en efecto, cuando regresó tocó el soporte comenzó a rebotar al alza. En este ejemplo tenemos un
nivel de soporte que actuó como giro o cambio de tendencia, frenando los descensos producto de
la tendencia bajista y originando el inicio de una nueva tendencia alcista.
En el siguiente gráfico la otra opción, un nivel de soporte que se creó al detenerse las caídas y
subir el precio. Se Traza la línea horizontal y cuando el precio más adelante volvió a tocar el
soporte, rebotó al alza, pero no se produjo un cambio de tendencia, sino un rebote al alza, que no
fue desdeñable, ya que en intradía supuso una subida de 100 puntos que en este mercado en
cuestión, el índice Eurostoxx, es bastante interesante.
Se Habla de caída libre cuando un mercado se encuentra en mínimos históricos y su precio se
mueve a la baja perdiendo su último nivel de soporte, encontrándose la cotización en una zona
donde jamás ha estado previamente. Estas situaciones suelen originar fuertes caídas, ya que no
hay ninguna referencia por abajo donde pudiera rebotar. En estos casos, habría que esperar a la
formación de un patrón chartista de cambio de tendencia o incluso a un nivel de precio con efecto
número redondo
Tipos de soportes
Existen fundamentalmente dos tipos de soportes en función de una serie de requisitos, y
dependiendo del tipo que sea sabremos la fortaleza o grado de fiabilidad que nos puede
proporcionar en el análisis técnico.
- Soporte sólido: es aquel que viene precedido de una caída considerable del precio y acto
seguido rebota al alza también una considerable cantidad. Se tiene un impulso bajista de cierta
magnitud y posteriormente un impulso alcista de cierta magnitud. Pues el punto donde finaliza el
impulso bajista y se inicia el impulso alcista es el soporte sólido.
En el siguiente gráfico hay una buena muestra de ello. Hay una caída de cierta entidad y un
rebote al alza de cierta entidad, se traza una línea horizontal y un cuadrado en el punto donde
confluyen ambas cuestiones. Posteriormente, el precio vuelve al soporte, toca la línea horizontal y
tenemos un buen rebote.
Es la experiencia del analista la que determinará caso por caso si estamos ante un movimiento
o impulso bajista y alcista de cierta entidad o no.
La doctrina estima que un soporte es sólido y fiable si se cumplen uno de los tres siguientes
requisitos:
* Número de veces puesto a prueba: cuanto mayor sea el tiempo que actúa el precio en el
soporte, más fuerte es el soporte. Si se ha formado un soporte y desde su formación ha sido
puesto a prueba, por ejemplo, en cuatro ocasiones durante tres meses, todas ellas con éxito,
refuerza el soporte.
* Tiempo transcurrido: la distancia temporal desde el momento actual hasta el periodo en que
se formó el nivel. Cuanto más cercano en el tiempo esté la creación del soporte, mejor, porque se
supone que el soporte estará más reciente en la mente de los inversores.
* Volumen: cuanto mayor volumen se haya negociado en el nivel de soporte, más fuerte será.
Se discrepa en líneas generales con el segundo requisito. Se puede asegurar que un buen nivel
de soporte actúa correctamente se haya formado hace una semana o cinco años, porque los
analistas buscan y rastrean en sus programas de gráficos hacia atrás buscando soportes, no se
conforman con detectar los más cercanos, y con trazar una línea horizontal ese soporte jamás será
olvidado, tenga lo que tenga de antigüedad.
- Soporte débil: es aquel que viene precedido de una caída considerable del precio y acto
seguido rebota al alza pero no mucho, o bien al revés, viene precedido de una caída que no es de
entidad y acto seguido rebota una considerable cantidad, incluso también puede ser que ni el
impulso bajista previo ni el impulso alcista posterior sean de entidad. Pues el punto donde finaliza
el impulso bajista y se inicia el impulso alcista es el soporte débil.
En el siguiente gráfico hay un ejemplo. Un impulso bajista que no es de cierta entidad y un
rebote posterior al alza que tampoco es de cierta entidad. Donde confluye el final de la caída y el
inicio de la subida es el soporte débil, que funcionó bastante bien
Los soportes sólidos y los soportes débiles, no es una ciencia exacta, de manera que un soporte
sólido no tiene por qué ser infalible ni un soporte débil tiene por qué no funcionar. Las ideas a
tener en cuenta son:
* En cuanto a probabilidades, un soporte sólido tiene más opciones de funcionar que un
soporte débil.
* Por regla general, hay que actuar siempre en los soportes sólidos, hay que permanecer con
una actitud o predisposición positiva para entrar en el mercado.
* Respecto a los soportes débiles, la opinión es la siguiente:
i) Si el mercado y el día está tranquilo, se puede también entrar.
ii) Si se opta por entrar, el apalancamiento ha de ser bastante menor que cuando se entra en
un soporte sólido.
iii) Lo ideal es que en un soporte débil coincidan también otras técnicas, de manera que
tiende a reforzar dicho soporte débil y se incrementan las opciones de que vaya a actuar
favorablemente.
En el siguiente gráfico, un nivel de resistencia que se creó al detenerse las subidas y caer el
precio. Se Traza la línea horizontal y cuando el precio volvió a tocar la resistencia, rebotó a la
baja, pero no se produjo un cambio de tendencia, sino un rebote bajista, que fue atractivo, ya que
en intradía supuso una caída de 120 puntos que en este mercado en cuestión, el par de divisas
Gbp/Jpy es bastante interesante.
Tipos de resistencias
Existen dos tipos de resistencias en función de una serie de requisitos, y dependiendo del tipo
que sea sabremos la fortaleza o grado de fiabilidad que nos puede proporcionar en el análisis
técnico.
- Resistencia sólida: es aquella que viene precedida de una subida considerable del precio y
acto seguido rebota a la baja también una considerable cantidad. Se tiene un impulso alcista de
cierta magnitud y posteriormente un impulso bajista de cierta magnitud. Pues el punto donde
finaliza el impulso alcista y se inicia el impulso bajista es la resistencia sólida.
En el gráfico hay una buena muestra de ello. Tenemos una subida de cierta entidad y un rebote
a la baja de cierta entidad, se traza una línea horizontal y un cuadrado en el punto donde
confluyen ambas cuestiones. Posteriormente, el precio vuelve a la resistencia, toca la línea
horizontal y hay un rebote.
Es la experiencia del analista la que determinará caso por caso si estamos ante un movimiento
o impulso alcista y bajista de cierta entidad o no.
La doctrina estima que una resistencia es sólida y fiable si se cumplen uno de los tres
siguientes requisitos:
* Número de veces puesta a prueba: cuanto mayor sea el tiempo que actúa el precio en la
resistencia, más fuerte será. Si se ha formado una resistencia y desde su formación ha sido puesto
a prueba, en cuatro ocasiones durante tres meses, todas ellas con éxito, refuerza la resistencia.
* Tiempo transcurrido: la distancia temporal desde el momento actual hasta el periodo en que
se formó el nivel. Cuanto más cercano en el tiempo esté la creación de la resistencia, mejor,
porque se supone que estará más reciente en la mente de los inversores.
* Volumen: cuanto mayor volumen se haya negociado en el nivel de resistencia, más fuerte
será.
El segundo requisito no tomárselo al pie de la letra. Un buen nivel de resistencia actúa
correctamente con independencia de que se haya formado hace una semana o cinco años, los
analistas buscan y rastrean en sus programas de gráficos hacia atrás, buscando resistencias, no se
conforman con detectar las más cercanos, y con trazar una línea horizontal esa resistencia jamás
será olvidada, tenga lo que tenga de antigüedad.
- Resistencia débil: es aquella que viene precedida de una subida del precio y acto seguido
rebota a la baja pero no mucho. El punto donde finaliza el impulso alcista y se inicia el impulso
bajista es la resistencia débil.
En el gráfico hay un ejemplo claro al respecto. Un impulso alcista que es de cierta entidad pero
un rebote posterior a la baja que no es de cierta entidad. Por tanto, donde confluye el final de la
subida y el inicio de la caída es la resistencia débil, que funcionó
En una tendencia alcista, si se produce una corrección y el precio cae, el volumen decrece.
En el siguiente gráfico se viene de una tendencia alcista y se ha producido un recorte o
corrección, con lo que el volumen decrece.
Si el volumen disminuye en una tendencia alcista o bien el impulso alcista del precio se ha
producido con un volumen decreciente, hay que tener cuidado, ya que suele significar que
empieza a haber una cierta reticencia entre los inversores a seguir comprando, de manera que en
cualquier momento podría producirse un cambio de tendencia alcista a bajista.
En una tendencia bajista, el volumen se incrementa con la caída del precio y disminuye en los
rebote al alza que surjan en el corto plazo. Aquí viene un pequeño contratiempo, en las tendencias
bajistas es complicado analizar el volumen porque para que suba el mercado hace falta dinero,
pero en cambio para que caiga el mercado no hace falta nada.
Los mercados pueden caer con un volumen incluso pequeño.
Es una realidad que el volumen suele incrementarse bastante en la parte final de un
movimiento alcista relevante, es como la última entrada triunfal de las grandes compras, de
manera que habrá que estar atentos a este hecho para no quedarnos atrapados al finalizar la
tendencia alcista.
Las tendencias
Concepto y aspectos de las tendencias
Una tendencia es la dirección o trayectoria en la que van evolucionando los precios y las
cotizaciones de los mercados a lo largo de un determinado periodo de tiempo. Dicha dirección de
la tendencia puede ser ascendente, descendente o lateral y plana.
Una de las principales labores de un analista es la de identificar en qué tipo de tendencia se
encuentra en cada momento un mercado, de cara a obrar y actuar en consonancia.
Para trazar una línea de tendencia alcista, denominada directriz alcista, se han de unir los
sucesivos soportes proyectándolos hacia arriba y hacia la derecha del gráfico. Mientras los
precios estén por encima de dicha línea, el mercado permanecerá en tendencia alcista.
Para confirmar oficialmente una tendencia alcista o directriz alcista, en la línea de tendencia se
han de apoyar al menos dos suelos o mínimos ascendentes. Cuanto más apoyos existan más
reforzados y fiables serán.
En el gráfico hay un ejemplo de cómo se traza una línea de tendencia alcista uniendo los
sucesivos suelos o valles ascendentes. Es una tendencia oficial porque hasta tres suelos han
tocado la línea (superando el número mínimo exigido de dos).
Mientras el precio permanezca por encima de una línea de tendencia alcista, significa fortaleza
del mercado y que se puede estar comprado. Una vez el precio pierda dicha línea de tendencia
habrá que estar atentos por si forma un pull back, en cuyo caso convendría salir del mercado por
riesgo de cambio de tendencia de alcista a bajista.
- Tendencia bajista: cuando los sucesivos soportes y resistencias se encuentran cada vez más
bajos.
Ejemplo de tendencia bajista donde los sucesivos techos y suelos son descendentes.
Para trazar una línea de tendencia bajista, denominada directriz bajista, se han de unir los
sucesivos techos proyectándolos hacia abajo y hacia la derecha del gráfico. Mientras los precios
estén por debajo de dicha línea o directriz, el mercado permanecerá en tendencia bajista.
En el gráfico se observa una línea de tendencia bajista uniendo los sucesivos techos
descendentes. Además es una tendencia oficial porque hasta catorce techos han tocado la línea
(superando el número mínimo exigido de dos).
Mientras el precio permanezca por debajo de una línea de tendencia bajista, significa debilidad
del mercado y que no se puede estar comprado, tan solo vendido. Una vez que el precio rompa al
alza dicha línea de tendencia habrá que estar atentos por si forma un throwback, en cuyo caso
convendría entrar en el mercado comprando ante la posibilidad de un cambio de tendencia de
bajista a alcista.
- Tendencia lateral: cuando los sucesivos soportes y resistencias se mueven lateralmente, sin
dirección ascendente ni descendente. En esta fase existe un equilibrio entre las fuerzas de la
oferta y de la demanda
Dentro de una tendencia hay otras tendencias. Esto hace que dentro de una misma tendencia
podemos operar al alza y a la baja.
El gráfico nos muestra una tendencia principal alcista, que es la línea ascendente que tiene un
mínimo de dos corroboraciones o apoyos de suelos (valles) ascendentes. Y dentro de esta
tendencia principal alcista vemos dos tendencias secundarias bajistas, ambas también
corroboradas por más de dos techos (picos) descendentes.
En el siguiente presenta dos directrices alcistas, una de mayor duración que la otra, pero en
ambas el grado de inclinación es muy elevado, no pudiéndose aguantar demasiado tiempo.
La mayoría de las reglas de los soportes y de las resistencias son válidas para las líneas de
tendencia o directrices (toques, roturas con pullback o throwback, etc).
Líneas especiales
Líneas abanicadas o líneas de faro
Son unas líneas de tendencia secundarias que se trazan desde los puntos máximos y mínimos
del gráfico. En realidad son líneas de tendencia sucesivas, cada una a diferente nivel, donde los
precios pueden encontrar zonas o niveles de soporte y de resistencia según sean trazadas al alza o
a la baja.
Se suelen componer de tres líneas y cuando el precio supera la tercera de las líneas, la
dirección de la tendencia cambia.
Hay muchos casos en los que se pueden encontrar más de tres líneas de tendencia, el número
tres es el que más habitualmente aparece en estas situaciones.
El gráfico presenta un ejemplo de líneas abanicadas o de faro, en este caso tres. Presenta tres
directrices y en cada una de ellas el precio ha permitido poder aprovechar sendos rebotes al alza.
En este caso la última directriz no es alcista pero es muy útil porque mientras el precio continúe
por encima de ella no habrá cambio de tendencia principal o primaria.
Es más fácil encontrar líneas abanicadas o de faro al final de tendencias bajistas que al final de
tendencias alcistas, porque los giros o cambios de tendencia alcista a bajista suelen ser más
bruscos, que los cambios de tendencia bajista a alcista, donde suelen ser más progresivos.
A las directrices se les denomina soportes y resistencias móviles o dinámicas, porque el punto
de posible entrada no se encuentra siempre en el mismo lugar (como sí sucede con los soportes y
resistencias tradicionales o estáticas, los cuales son horizontales).
Hay que quedarse con la idea de que los soportes y resistencias tradicionales se trazan con una
línea horizontal, de manera que ese nivel de soporte o de resistencia no varía. Las directrices son
siempre líneas verticales, por lo que cada vez que se forme una nueva vela en el gráfico, la
directriz seguirá subiendo o bajando.
Hay que tener en cuenta es que en este caso se trata niveles Fibonacci secundarios, suelen ser
menos sólidos y menos fiables que los niveles Fibonacci principales.
Los niveles Fibonacci secundarios aportan una doble función:
- Sirven como posibles objetivos y zonas de cierre de posiciones, para ir fijando la salida del
mercado.
- Pueden ser utilizados como posibles niveles de entrada en el mercado, pero al ser de carácter
secundario y no principal, debido a que tienen en sí menos solidez y fortaleza por sí mismos, se
requiere la implementación y aplicación de una serie de filtros de confirmación, de manera que
cuantas más técnicas vengan a coincidir en un mismo punto, más reforzado sale y más fiabilidad
adquirirá para el analista técnico.
De entre los principales filtros de confirmación, se pueden enumerar una serie de medias
móviles.
También es de gran ayuda si en uno de esos niveles Fibonacci secundarios coincide que hay un
soporte, una resistencia, una directriz.
- El principal se traza entre un máximo y un mínimo relevante. Tienen la misma doble
función que los secundarios:
- Sirven como posibles objetivos y zonas de cierre de posiciones, para ir fijando la salida del
mercado.
- Pueden ser utilizados como posibles niveles de entrada en el mercado por sí mismos, sin
necesidad de utilizar filtros de confirmación, aunque si se utilizan serán más fiables.
Ejemplo de Fibonacci principal, desde un máximo relevante hacia el último mínimo,
obteniendo tres niveles.
A la hora de trazar niveles Fibonacci es determinar máximos y mínimos relevantes, identificar
si son relevantes o no.
Es la experiencia del analista la que influye bastante en esta consideración, una indicación
para que se puedan ir haciendo una idea al respecto:
Un máximo relevante es aquél techo o pico que forma el mercado y que a partir del
mismo el precio comienza a caer con fuerza, tras la formación del techo se produce un
cambio de tendencia de alcista a bajista.
Un mínimo relevante, es aquél suelo o valle que forma el mercado y que a partir del
mismo el precio comienza a subir con fuerza, tras la formación del suelo se produce un
cambio de tendencia de bajista a alcista.
Un máximo no relevante es aquél techo que forma el mercado a partir del cual el precio
comienza a caer pero no de manera significativa o intensa, no se ha llegado a producir un
giro en el escenario, no se puede hablar de un cambio de tendencia de alcista a bajista.
Un mínimo no relevante es aquél suelo que forma el mercado a partir del cual el precio
comienza a subir pero no de manera significativa o intensa, es decir, no se ha llegado a
producir un giro en el escenario, no se puede hablar aún de un cambio de tendencia de
bajista a alcista.
La regla es la siguiente:
i) Máximo relevante + mínimo relevante: Fibonacci principal.
ii) Máximo no relevante + mínimo no relevante: Fibonacci secundario pequeño.
iii) Máximo relevante + mínimo no relevante: Fibonacci principal (intermedio).
iiii) Máximo no relevante + mínimo relevante: Fibonacci principal (intermedio).
Los programas de gráfico permiten configurar los retrocesos de Fibonacci, de manera que se
pueden llegar hasta más de 10 niveles. Tan sólo es necesario utilizar los principales los retrocesos
del 61,8%, del 50% y del 38,2%, de manera que procede configurar el programa para que sólo
nos muestre estos niveles.
Se pueden trazar hasta nueve líneas diferentes de Gann. La mecánica es similar a la de las
líneas de velocidad. En una tendencia alcista, si el precio comienza a corregir y pierde una línea,
podría bajar en busca de la siguiente línea.
Las líneas de Gann siempre han mantenido dividida a la doctrina. Mi opinión es que como
puntos de entrada me parece muy presuntuoso, ya que son hasta nueve líneas y no se puede saber
realmente en cuál de ellas la caída del precio se producirá con su consecuente rebote al alza, y
esto cuando hay una cierta distancia entre cada una de las nueve líneas supone un gran problema.
Podrían utilizarse como referencia de cara a posibles objetivos o cierre parciales de una
operación.
En una tendencia bajista, se trazaría una línea paralela a la línea de tendencia bajista.
En el gráfico vemos un perfecto canal bajista en el que la directriz inferior une los diversos
suelos descendentes y la directriz superior une los diversos techos descendentes. En ambos casos,
la confirmación es superior a los dos toques mínimos exigidos por cada directriz, en este caso 3
veces por abajo y 3 por arriba.
Todo lo expuesto para los soportes, resistencias, directrices, es válido también para los canales
tendenciales (las roturas por abajo con pullback, las roturas por arriba con throwback, las
confirmaciones, etc).
Las confirmaciones de validez, aquí se exigen por partida doble, es ambivalente, es decir, si
para validar una directriz alcista exigíamos un mínimo de dos toques por parte de los suelos o
valles, y para validar una directriz bajista exigíamos un mínimo de dos toques por parte de los
techos o picos, en el caso de los canales tendenciales se ha de exigir un mínimo de dos toques por
arriba y un mínimo de dos toques por abajo, en lo referente a los techos y los suelos
Algunos autores hablan de subcanales, de canales tendenciales dentro de un canal tendencial
principal. Desde el punto de vista teórico es correcto y perfectamente válido, pero otra cosa es
que sea preferible su utilización, ya que podría llegar a “ensuciar” demasiado el gráfico, supone
tener muchas líneas que unidas al resto de técnicas harían que ver algo nítido fuese misión casi
imposible para el analista.
En el gráfico hay un ejemplo de subcanales
Puede suceder que no haya tendencia, con lo que el trazado del canal con su doble directriz
adopte la forma de un rectángulo, formación que consta de dos niveles horizontales y paralelos
entre sí, donde el precio se mueve dentro del rango delimitado por dichos niveles, con lo que se
puede decir que no hay tendencia mientras el precio siga dentro del rango.
El volumen es reducido mientras no logre salir el precio del rectángulo, hecho que entonces sí
incrementa el volumen gracias a la rotura del rango.
La idea es que mientras el precio se encuentre en rango rectangular, se compra en la parte baja
y se vende (corto) en la parte alta y así sucesivamente hasta que se produce una fuga o rotura. Las
oportunidades de compra y de venta suelen ser muy fiables mientras el precio se mantenga dentro
del rango.
Cuando ocurre esto, es momento de entrar en la dirección de dicha fuga, si rompe por arriba
hay que comprar, si rompe por abajo hay que vender.
Un ejemplo de rectángulo. No hay tendencia definida, que el precio cada vez que toca la parte
baja rebota al alza y cada vez que toca la parte alta rebota a la baja.
No es imprescindible que haya que comprar justo en la parte baja y vender justo en la parte
alta, porque no es una cosa matemática. El precio puede rebotar un poquito antes de los extremos,
con lo que no intenten siempre apurar al máximo el precio de entrada.
Cuando el precio rompe el rectángulo, hay que entrar en la dirección de la fuga. En unas
ocasiones habrá pullback o throwback, de manera que debe de ser aprovechado siempre.
El momento clave llega cuando el precio pierde el nivel clave, denominado de varias formas,
neckline, línea de cuello, línea clavicular. Este nivel se obtiene trazando una línea que una los
suelos de la figura formada. Cuando el precio pierde esta zona llegamos al momento culmen,
pues implicaría la culminación del patrón y el cambio de tendencia.
Lo que sucede es que es más que aconsejable darle un cierto margen a la pérdida de la línea
clavicular, entre otras razones porque así evitamos falsas señales. Lo ideal es ver si se forma un
pullback, en cuyo caso es la culminación del patrón hombro-cabeza-hombro y el cambio de
tendencia de alcista a bajista.
Está el patrón realizado, y el inicio del cambio de tendencia, ahora falta conocer un detalle,
cómo calcular la proyección de la caída.
Se puede calcular la proyección o dimensión de la caída del precio proyectando la distancia
desde la línea clavicular o línea de cuello hasta el máximo o techo de la cabeza.
En el gráfico se pueden ver, cómo se traza la línea de cuello o línea clavicular y cómo se
calcula la proyección de la caída del precio.
En el siguiente gráfico hay otro ejemplo de hombro-cabeza-hombro, sólo que en esta ocasión
al perder la zona clavicular no llegó finalmente a realizar un pullback, estuvo a punto en varias
ocasiones. Al perder la línea de cuello tuvimos un claro cambio de tendencia de alcista a bajista.
- El precio ha de encontrase inmerso en una tendencia alcista. Si no hay tendencia no podemos
hablar de cambio de la misma.
- Se forma el hombro izquierdo, este hombro surge con una subida del precio apoyada por un
repunte del volumen y seguida de una caída del precio con disminución del volumen.
- Seguidamente, el precio vuelve a subir pero con menos volumen que al formar el hombro
izquierdo, dicha subida lleva al precio a marcar un techo por encima del marcado con el hombro
izquierdo. Tras la subida el precio vuelve a caer hasta el suelo del hombro izquierdo.
- La tercera y última subida se produce con poco volumen y esto hace que no alcance el techo
de la cabeza. Tras la subida nueva caída del precio hasta la línea de cuello o línea clavicular.
- El precio pierde la línea de cuello, bien directamente o bien realizando un pullback.
Importante resaltar que hasta que no se produzca éste último requisito no se puede hablar de
culminación de un patrón hombro-cabeza-hombro, ya que se corre el riesgo de ser una falsa
formación del patrón, una tentativa frustrada finalmente por cualquier motivo o razón.
- El volumen es la señal más palpable de que algo está fallando en la tendencia alcista.
Primero, cuando el volumen al subir el precio para formar la cabeza es menor que el volumen
cuando subió el precio anteriormente para formar el hombro izquierdo. Segundo, el volumen al
subir el precio para formar el hombro derecho es aún menor que el volumen cuando subió el
precio para formar el hombro izquierdo y la cabeza. Es decir, el hecho de que en las últimas
subidas el volumen vaya siendo cada vez menor es un síntoma de que la tendencia alcista ya no
tiene fuerza ni hay demanda suficiente.
- El cálculo y la proyección de la caída del precio es orientativo, aunque la doctrina lo suele
catalogar como primer objetivo, dando a entender que suele ser mayor la caída, pero como
cálculo de un primer objetivo de caída del precio no está mal.
Incidir en que no se trata de buscar el patrón perfecto, el patrón ideal (sencillamente porque no
existe), sino de intentar tener una diversidad de patrones y de herramientas válidas y diferentes
entre sí pero complementarias al mismo tiempo de cara a que el analista pueda desarrollar su
labor de manera seria y rigurosa.
Aunque no es lo habitual, hay ocasiones en la que este patrón de hombro-cabeza-hombro suele
actuar como patrón de consolidación y confirmación de la tendencia y no como cambio de la
misma. Llamémoslo la excepción que confirma la regla, no suele suceder, pero en alguna ocasión
sí.
Hombro-cabeza-hombro invertido
Es un patrón de cambio de tendencia, este patrón aparece en una tendencia bajista, dando lugar
a un cambio o giro en la tendencia del precio, en este caso de bajista a alcista.
Se tendría la formación de tres suelos o mínimos, siendo el segundo o central más bajo que el
primero y el tercero, que son los extremos y cuyos mínimos están a un nivel similar.
El primer suelo corresponde al hombro izquierdo, el segundo suelo, que es el más bajo,
corresponde a la cabeza, y el tercer suelo corresponde al hombro derecho.
La idea que se tiene es de una tendencia bajista con suelos y techos descendentes de manera
progresiva hasta que la debilidad aparente empieza a perder algo de fuelle y es ahí donde entra en
escena este patrón de cambio de tendencia.
La duración de la formación no es relevante, ya que no es lo mismo que se esté formando por
ejemplo en un gráfico de 15 minutos que en un gráfico diario, en el primer caso podría tardar
horas, en el segundo caso podría tardar meses.
La estructura de un hombro-cabeza-hombro invertido está formada por tres suelos, siendo el
suelo central el que se encuentra a un nivel inferior de los otros dos suelos, que están en los
extremos y que ambos están a una altura similar entre sí.
El primer suelo realiza un mínimo, formando el hombro izquierdo, el segundo suelo forma la
cabeza, siendo más baja aún, y el tercer suelo realiza un mínimo a la altura del primer suelo,
formando el siguiente hombro.
Por la estructura en sí misma de esta formación, se hace bastante complicada de advertir en sus
compases iniciales, de manera que no será hasta en la recta final cuando podamos comenzar a
observar la posibilidad de que nos encontramos ante este patrón, cuya abreviatura es H-C-H i.
Nunca intentar adelantarse a la realidad, dejar que fluya es el mejor consejo y actuar cuando se
confirme.
El volumen tiende a ser pequeño en la formación del primer hombro en su doble vertiente,
tanto cuando sube el precio como cuando baja el precio, aunque se incrementa algo más cuando
el precio se va acercando al suelo, que viene a ser cuando se forma el primer hombro.
Cuando el precio sigue bajando y forma un nuevo suelo, lo que vendría a ser la cabeza, el
volumen es menor que al formarse el hombro izquierdo.
Al rebotar al alza el precio hasta la zona de máximos del hombro izquierdo, supera la línea de
resistencia bajista, Es en esta fase cuando el volumen tiende a incrementarse.
El precio vuelve a caer aunque no llega hasta el suelo marcado por la cabeza, sino que alcanza
prácticamente el suelo del hombro izquierdo. Esta caída del precio se produce con un reducido
volumen.
Finalmente, el precio vuelve a rebotar al alza hasta el nivel de resistencia que se encuentra en
la base de la cabeza invertida, hasta la línea de cuello o línea clavicular. Cuando el precio rompe
esta zona llegamos al momento culmen, pues implicaría la culminación del patrón y el cambio de
tendencia.
Lo que sucede es que es más que aconsejable darle un cierto margen a la superación de la línea
clavicular, así se evita falsas señales. Lo ideal es ver si se forma un throwback, en cuyo caso
daríamos por oficial la culminación del patrón hombro-cabeza-hombro invertido y el cambio de
tendencia de bajista a alcista.
En este ejemplo la rotura de la línea de cuello y el consiguiente giro de la tendencia se produjo
sin el habitual throwback.
El patrón ya realizado y culminado, así como el inicio del cambio de tendencia, cómo calcular
la proyección de la subida.
Se puede calcular la proyección o dimensión de la subida por la distancia desde la línea de
cuello hasta el mínimo de la cabeza, proyectada hacia arriba desde la línea clavicular. Se proyecta
la distancia desde la línea de cuello hasta el mínimo o suelo de la cabeza.
La doctrina suele aceptar que los dos mínimos deben formarse con una separación mínima de
un mes, ya que un plazo temporal inferior haría que el patrón no fuese del todo fiable. No es real
100%, porque este es un patrón discrecional y es la experiencia lo que impera, es un patrón igual
de válido y de efectivo para intradía, para gráficos pequeños como para gráficos mayores.
En el gráfico hay otro ejemplo de doble suelo, conteniendo todos los elementos clave de esta
figura chartista, la creación de los dos suelos con un máximo intercalado entre ambos, la
superación de la zona clave, aunque aquí faltaría el filtro de seguridad, oncretamente el
throwback.
Se encuentra en una tendencia bajista. Se forma un mínimo en el precio apoyado por un
incremento del volumen. Tras esto, comienza a producirse una subida pero con poco volumen. A
continuación, vuelve a bajar el precio, con más volumen que en la subida pero menos que en la
anterior bajada y alcanza el mínimo anterior. De nuevo vuelve a subir el precio hasta el máximo
anterior, rompiéndolo, iniciándose un impulso alcista producto del giro o cambio de tendencia.
En un triple suelo, el proceso de volvería a repetir, teniendo tres toques en el nuevo mínimo en
vez de dos y la consiguiente rotura del máximo.
En ocasiones, a la rotura del máximo le seguirá un throwback que nos servirá de confirmación.
El primer objetivo o proyección se calcula según la distancia que haya entre los mínimos del
doble o triple suelo y los máximos de las subidas formados tras marcar el primer mínimo.
Respecto al patrón de triple suelo, todo lo comentado para el doble suelo es válido. Este patrón
se caracteriza por estar formado por tres (o incluso más) suelos o mínimos, intercalados entre
ellos con techos o máximos.
Hay que añadirle una particularidad, que a medida que se van creando y formando nuevos
mínimos o suelos, el volumen tiende a ir disminuyendo.
En el gráfico están todos los elementos del patrón de triple suelo, vemos cómo supera la zona
de resistencia con el filtro de throwback incluido y alcanza la proyección de subida estimada.
El analista tiene que tener en cuenta siempre que las formaciones de triple suelo (o más suelos),
pueden finalmente provocar un rango lateral del precio. Esto tiende a suceder cuando sobre todo
hablamos de más de tres suelos o mínimos. No debería de suponer un problema, ya que basta con
esperar a que el precio rompa por arriba la zona de resistencia o bien por abajo la zona de soporte,
a ser posible con sus filtros de confirmación, el throwback y el pullback respectivamente.
La doctrina suele aceptar que los dos máximos deben formarse con una separación mínima de
un mes, ya que un plazo temporal inferior haría que el patrón no fuese del todo fiable. No debe
ser así porque este es un patrón discrecional y es la experiencia del analista lo que impera, es un
patrón igual de válido y de efectivo para intradía, para gráficos pequeños como para gráficos
mayores.
El analista tiene que tener en cuenta siempre que las formaciones de triple techo (o más
techos), pueden finalmente provocar un rango lateral del precio. Esto tiende a suceder cuando
sobre todo hablamos de más de tres techos o máximos. Basta con esperar a que el precio rompa
por arriba la zona de resistencia o bien por abajo la zona de soporte, a ser posible con sus filtros
de confirmación, el throwback y el pullback respectivamente.
Cuanto más tiempo haya permanecido el precio en la zona de mínimos y mayor sea el
volumen, mayor incidencia y repercusión tendrán los efectos posteriores a la culminación del
patrón. El volumen en la formación de este patrón es descendente, e incluso casi nulo. Pero
cuando el precio comienza a subir y se aprecia los primeros compases de un suelo redondeado, el
volumen tiende a incrementarse.
A diferencia del techo redondeado, que no es fácil encontrarse este patrón porque los giros de
tendencia de alcista a bajista se producen con cierta velocidad, cuando hablamos del suelo
redondeado sí es más fácil encontrar este tipo de patrón, ya que el giro de tendencia de bajista a
alcista no es tan sencillo, requiere que entre dinero, que haya volumen.
Este patrón es más fácil de ver en fases del mercado en la que la tendencia bajista es duradera,
por lo que no suele obedecer a hechos coyunturales ni puntuales, sino más bien a ciclos
económicos y crisis económicas.
Al tratarse de mercados olvidados por los inversores (de ahí que apenas entre volumen y
dinero), cuando las condiciones económicas varían la entrada de dinero suele ser fuerte, el
volumen se incrementa notablemente, los inversores creen que el mercado cotiza a unos precios
muy bajos y atractivos. Todo ello hace que el efecto acción-reacción sea jugoso, produciéndose
en general subidas importantes.
No todo mercado que esté prácticamente por los suelos desde hace un tiempo, terminará por
formar un patrón de suelo redondeado. En la mayoría de las ocasiones permanecerán
prácticamente para siempre en esos niveles hasta que llega a desaparecer o deja de cotizar
(acciones).
La confirmación del patrón requiere que se aprecie el final del suelo, el comienzo de una
subida, que se rompa por arriba un nivel de resistencia con incremento del volumen y si viene
acompañado de un throwback mejor aún si cabe.
Techos redondeados
Es un patrón de cambio de tendencia, de alcista a bajista, esta figura chartista se produce en la
recta final de una tendencia alcista. Se caracteriza porque el giro o cambio de tendencia se
produce de manera lenta y progresiva.
La idea es que al final de una tendencia alcista, el precio forma un nivel de resistencia o
máximos que es incapaz de superar, manteniéndose el precio durante un tiempo considerable en
el entorno de dicha zona.
En el gráfico se puede apreciar el patrón de techo redondeado, cómo los precios dentro de una
tendencia alcista van formando un tope y en vez de comenzar a caer el precio permanece un
tiempo en dicha zona elevada, aplanando la subida poco a poco, hasta que finalmente se produce
el cambio de tendencia de alcista a bajista.
El analista dará por culminado el patrón y por tanto el giro de la tendencia cuando tras
comenzar a bajar el precio pierda un soporte, a ser posible con el filtro de confirmación de un
pullback.
En el gráfico se aprecia mejor, se ve la forma de techo redondeado pero el precio, tras la caída,
aún no ha perdido el nivel de soporte, de manera que mientras no suceda esto no daremos por
válido este patrón ni tampoco el cambio de tendencia.
Cuanto más tiempo haya permanecido el precio en la zona de máximos y mayor sea el
volumen, mayor incidencia y repercusión tendrán los efectos posteriores a la culminación del
patrón.
El volumen suele incrementarse a ambos extremos del techo redondeado, aunque por regla
general veremos un mayor incremento durante la formación del movimiento alcista previo.
No es éste un patrón que un analista vea cada día, ya que es una pauta chartista que suele
aparecer en contadas ocasiones, porque los cambios de tendencia alcista a bajista suelen
producirse de manera rápida
En una tendencia bajista, tendremos este patrón cuando el precio del mercado abre a la baja y
en la sesión llega a marcar un mínimo muy bajo y considerable. Para ello se hace necesaria la
experiencia del analista, aunque se puede tomar como referencia básica la comparación del
mínimo considerable con los últimos mínimos de cara a evaluar si se puede catalogar como tal.
Pese a marcar el precio un elevado mínimo, dicho precio cierra por encima de la apertura de la
sesión e incluso en la parte más alta del rango intradiario.
Un requisito que conviene exigir a este patrón de vuelta en un día o isla es que el volumen ha
de ser elevado.
En el gráfico pueden ver una clara tendencia bajista y la formación del patrón de vuelta en un
día o isla, el cual provoca rápidamente el cambio de tendencia de bajista a alcista.
Otro ejemplo de patrón de vuelta en un día o isla, también aparece en la recta final de la
tendencia bajista y provoca un raudo giro de la tendencia de bajista a alcista.
Aunque la doctrina mayoritaria se refiere a este patrón como figura chartista no intradiaria, en
los gráficos más pequeños y en el análisis técnico intradiario es válida, exigiéndole los mismos
requisitos.
En gráficos diarios es un patrón realmente muy interesante para el medio lazo, y al utilizarlo en
gráficos semanales para el largo plazo, hay que tener en cuenta que al hablar de la apertura y
cierre nos estaremos refiriendo al de la semana y no del día.
Cuanto mayor sea el movimiento del precio durante la sesión y mayor sea el volumen
negociado durante la sesión, mayor repercusión y efecto tendrá el patrón.
Esta figura chartista donde más suele aparecer es en mercados pequeños y especulativos,
hablamos de acciones básicamente en los denominados chicharros, sin descartar también otros
valores de mayor volumen y elevada volatilidad.
Existen algunas pequeñas variantes de este patrón de vuelta en un día. Una de ellas se
denomina vuelta en isla. Realmente aparecería cuando el patrón de vuelta en un día se encuentra
entre dos huecos o gaps (uno anterior y otro posterior).
Otra variante se denomina vuelta de dos días y consiste en que el primer día el precio comienza
a subir con un elevado volumen, dicha subida es fuerte, marcando un máximo relevante no exento
de significativos picos de volatilidad. La sesión de este primer día cierra cerca de los máximos,
pero habiendo una buena distancia entre el máximo y el mínimo del día.
La segunda sesión, el precio comienza más o menos en el entorno del nivel de cierre de la
sesión anterior. Puede marcar un máximo en la sesión, el cual podría incluso alcanzar al máximo
de la sesión anterior, todo ello con elevado volumen y rango de movimiento del precio. La sesión
cerrará por la zona de los mínimos del día, lo que significa cerca de los mínimos del día anterior.
Formaciones en V
Es un patrón de cambio de tendencia, de bajista a alcista. Aparece en la recta final de la
tendencia y supone una fuerte caída del precio seguida de una fuerte subida del mismo.
Es una pauta rápida, que se forma y ejecuta en pocas sesiones. Una diferencia con el patrón de
vuelta en un día es que aquí no asistimos a una variación del precio tan significativa en una única
sesión.
El volumen también aporta una valiosa información al analista técnico, ya que se suele
producir un incremento considerable en la zona de mínimos y en el rebote al alza posterior.
Se produce en tendencias bajistas y se caracteriza porque aparece cuando el giro de la
tendencia es fuerte Una vez formada la figura, hay que esperar, como filtro o medida de
confirmación, a que el precio supere la zona donde comenzó a dibujarse el patrón.
Una vez confirmado el filtro y activada la señal de giro de tendencia de bajista a alcista, la
proyección o intensidad de la subida debiera de ser proporcional o semejante al de la bajada
previa.
Es un patrón muy interesante porque el efecto acción-reacción es bastante jugoso, hablamos de
que por regla general la subida alcanza tranquilamente el 50-60% de la caída precedente, esto
como primer objetivo, además en menos tiempo. Es bastante habitual ver que la subida llega a
igualar todo el rango de caída previa.
Un inconveniente que acarrea esta pauta chartista es que, aunque es muy fácil de ver a
posteriori, durante la formación de la misma hay que tener mucho cuidado, entre otras cosas
porque formas (que no patrones) en v veremos muchas en el gráfico. Cobra especial relevancia
que el analista preste la atención a los requisitos o características expuestas para poder diferenciar
correctamente.
En el gráfico presenta un buen ejemplo del patrón en V. El precio estaba inmerso en una
tendencia bajista, se produce el patrón con los requisitos exigidos y adoptando la forma de v, se
produce el giro de tendencia de bajista a alcista y se confirma con la rotura al alza de la zona de
resistencia formada al inicio del patrón. El efecto acción-reacción no se hizo esperar y la subida
superó al movimiento previo de bajada.
Las cuñas se inclinan en contra de la tendencia que le viene precediendo, de manera que una
cuña que esté inclinada hacia arriba es una cuña ascendente que girará la tendencia a bajista, y
una cuña que esté inclinada hacia abajo es una cuña descendente que girará la tendencia a alcista.
Hay un detalle ha de contar, la regla anti vértice. Esto significa:
* Es preferible que el precio recorra como mínimo dos tercios de la figura antes de producirse
su culminación.
* Cuando se produzca la culminación del patrón, el precio pierda la directriz inferior, sea
antes de que el propio precio haya llegado al vértice donde se unen las dos directrices, ya que si el
precio llega al vértice la fiabilidad del patrón de las cuñas se reduce notoriamente.
Se estima que el periodo de formación de una cuña oscila entre cuatro semanas y varios meses,
no suele superar los cinco meses. Si el analista técnico esté trabajando con gráficos menores para
intradía, este dato ha de ser obviado.
La proyección del movimiento posterior a la culminación de la cuña, se toma la amplitud
máxima desde el inicio de la figura y proyectar dicha medición desde el punto o zona de rotura.
Hay que tener presente que una diferencia entre las cuñas ascendentes y las cuñas descendentes
es que en las primeras el precio cae con fuerza, mientras que en las segundas la subida es más
tranquila y progresiva, incluso una vez que el precio rompe al alza la directriz superior no es
extraño que se queda un poco lateral antes de comenzar su impulso alcista.
El analista técnico tiene que tener cuidado de no confundir las cuñas con los triángulos
rectángulos, porque los efectos y las consecuencias son opuestos.
La cuña ascendente presenta la apariencia de un canal alcista, aunque con la particularidad de
que la línea de tendencia inferior y la línea de tendencia superior, las dos directrices tendenciales,
no son paralelas entre sí, sino que van convergiendo a medida de que el precio sube.
La directriz superior que une los máximos converge hacia la directriz inferior, con lo que el
rango de movimiento del precio se va reduciendo, se va limitando de manera progresiva.
Una característica de las cuñas ascendentes es que la directriz inferior ha de presentar un
ángulo de inclinación mayor y más elevada que la directriz superior, para que no quepa dudas de
que es una figura ascendente.
En el gráfico se puede ver en esencia la estructura de una cuña ascendente que pierde la
directriz inferior originando el cambio de tendencia y teniendo en mente la proyección de la
caída, el primer objetivo del impulso bajista que comienza.
Respecto al volumen, indicar que la formación de una cuña ascendente se va realizando con un
descenso o reducción del volumen. Este aspecto es clarificador para el analista el cual estará
alerta a la culminación de la figura.
Dicha culminación se producirá cuando el precio pierda la directriz inferior, sobre todo si el
filtro de confirmación aparece, en este caso un pullback, siendo en este caso el tema del volumen
un aspecto secundario.
En el gráfico se puede apreciar todo con mucha claridad. El precio se encuentra en una clara
tendencia alcista, se produce el patrón de cuña ascendente con las dos directrices que convergen
entre sí, el rango o espacio de movimiento del precio cada vez se va estrechando y reduciéndose
más y más, hasta que el precio pierde la directriz inferior con pullback, dándose por finalizada la
tendencia alcista y comenzando una nueva tendencia bajista.
La cuña ascendente presenta la apariencia de un canal bajista, aunque con la particularidad de
que la línea de tendencia inferior y la línea de tendencia superior, las dos directrices tendenciales,
no son paralelas entre sí, sino que van convergiendo a medida de que el precio cae.
La directriz superior que une los máximos decrecientes converge hacia la directriz inferior, con
lo que el rango de movimiento del precio se va reduciendo, se va limitando de manera progresiva.
Una característica de las cuñas descendente es que la directriz superior ha de presentar un
ángulo de inclinación mayor y más elevado que la directriz inferior, para que no quepa dudas de
que es una figura descendente.
En el gráfico se puede ver la estructura de una cuña descendente que supera la directriz
superior originando el cambio de tendencia y teniendo en mente la proyección de la subida, el
primer objetivo del impulso alcista que comienza.
La estructura de una cuña descendente es bastante gráfica, de manera que resulta bastante
sencillo advertir la formación de este tipo de patrón.
Respecto al volumen, por regla general la formación de una cuña descendente se va realizando
con un descenso o reducción del volumen y cuando el precio rompe al alza la directriz superior lo
hace con un incremento del volumen. Este aspecto ya es muy clarificador se estará alerta a la
culminación de la figura.
Dicha culminación se producirá cuando el precio supere la directriz superior, sobre todo si el
filtro de confirmación aparece, en este caso un throwback.
En el gráfico hay un ejemplo de cuña descendente, que al romper el precio al alza la directriz
superior lo confirma con un throwback aunque un poco tardío, suficiente para cambiar la
tendencia de bajista a alcista.
En el gráfico se puede apreciar todo con mucha claridad. El precio se encuentra en una clara
tendencia bajista, se produce el patrón de cuña descendente con las dos directrices que convergen
entre sí, el rango o espacio de movimiento del precio cada vez se va estrechando y reduciéndose
más y más, hasta que el precio supera la directriz superior con throwback, dándose por finalizada
la tendencia bajista y comenzando una nueva tendencia alcista.
La subida del precio alcanzó la proyección o cálculo del primer objetivo esperado del impulso.
Diamante o rombo
El patrón pertenece a la familia de los patrones de cambio de tendencia.
Esta pauta guarda una relación estrecha con una de las variantes del hombro-cabeza-hombro,
concretamente con el hombro-cabeza-hombro múltiple.
Su estructura se basa en un triángulo abierto, seguido de un triángulo simétrico que va
decreciendo poco a poco, de manera progresiva.
En el gráfico se aprecia la estructura sencilla del patrón rombo o diamante.
Es habitual ver esta pauta en la recta final de una tendencia alcista, en el techo de un mercado.
La figura culmina cuando el precio pierde el suelo del triángulo simétrico, es preferible que
actúe el filtro de confirmación, el pullback.
El volumen durante el desarrollo de este patrón es desigual, incrementándose a lo largo de la
primera fase y reduciéndose durante la segunda fase.
La proyección del posterior impulso o movimiento del precio, el primer objetivo. Para ello, se
observa la amplitud del rombo o diamante y se proyecta desde el punto de ruptura del triángulo
simétrico.
En el gráfico presenta un ejemplo práctico de la pauta diamante o rombo. El precio está dentro
de una tendencia alcista, se aprecia la estructura compuesta por un triángulo abierto y un
triángulo simétrico que se va cerrando paulatinamente.
El precio pierde la base de la figura, confirma la rotura con el correspondiente pullback y acto
seguido se produce el giro o cambio de tendencia de alcista a bajista.
En el gráfico presenta un ejemplo Precio en tendencia alcista, se forma la figura con un triángulo
abierto y otro triángulo simétrico, el precio pierde la base del patrón, en este caso no se produce
pullback, y el precio cae alcanzando la proyección del primer objetivo de la caída.
El volumen suele ser discontinuo, aunque por regla general es elevado. Para calcular la
proyección del movimiento del precio una vez culminado el patrón, se toma la máxima amplitud
de la parte final de la figura y se proyecta hacia abajo desde la zona donde el precio rompe la
directriz inferior. De esta manera tendremos el primer objetivo del nuevo impulso del precio.
Esta formación chartista se produce la mayoría de las ocasiones en tendencia alcistas.
En el gráfico presenta otro ejemplo del patrón, en este caso el precio no ha perdido la directriz
inferior, de manera que la pauta no se ha culminado ni tampoco se ha originado el cambio de
tendencia.
Las banderas
Es un patrón de continuación de la tendencia, bien alcista o bajista. Generalmente suele
aparecer tras un movimiento o impulso fuerte del precio, momento en el que se toma un pequeño
descanso antes de reanudar y proseguir su dirección.
Es una figura que se verá a menudo,
No presentan mayores problemas a la hora de ser identificados, ni las banderas ni los
gallardetes y suelen presentar un buen grado de fiabilidad técnica.
Las banderas no aparecen en la recta final de una tendencia, sino en medio de la misma, ya que
lo que hace es confirmar su vigencia.
Es habitual observar que en el mástil de la bandera surjan gaps o huecos de escape y
confirmación, motivo de más para que la pauta resulte finalmente fiable.
Tampoco es extraño encontrarnos la formación de varias banderas consecutivas, el problema
podría venir si tenemos ya tres consecutivas, ya que el riesgo de que no actúe como se espera se
incrementa.
La doctrina estima que la duración ideal debería de ser menor de las tres o cuatro semanas y
que generalmente se necesitan al menos unas ocho o diez sesiones, incluso hasta doce o trece,
para que se forme. Son números, no requisitos imprescindibles, y será la experiencia la que
determine el caso. Para un análisis de gráficos menores para
intradía, este patrón también es válido.
Una bandera dentro de una tendencia alcista lo que hace es reafirmar dicha tendencia, la cual a
la postre continuará con el precio subiendo.
El proceso comienza con una tendencia alcista, de pronto se produce un fuerte movimiento al
alza acompañado de un elevado volumen. Acto seguido se forma un rectángulo que tendrá una
pequeña inclinación hacia abajo, rectángulo cuyo rango donde fluctúa el precio tiende a ser
reducido de tamaño.
En la formación del rectángulo el volumen tiende a decrecer poco a poco, llegando un
momento incluso que es inapreciable.
En el gráfico 90 tenemos un ejemplo de una estructura sencilla de una bandera dentro de una
tendencia alcista.
La culminación del patrón se produce cuando el precio rompe por arriba el rectángulo que
forma parte de la bandera, una rotura que ha de ir acompaña de un fuerte volumen. Este hecho
proporciona el criterio suficiente para saber que la fortaleza de la tendencia alcista sigue vigente y
que el precio debería de continuar subiendo.
En el gráfico otra buena prueba de la estructura de una bandera, incluido el cálculo o
proyección de la subida del precio.
Para calcular la proyección de la subida del precio o primer objetivo del impulso al alza, se
coge la altura del mástil (que es el movimiento fuerte y repentino que se produce antes de
empezar a formarse el rectángulo y que puede estar formado por una barra o vela o varias) y se
proyecta hacia arriba desde la zona en que el precio rompe el rectángulo.
En el gráfico presenta un ejemplo práctico de Bandera, el precio se encuentra en tendencia
alcista, se forma el mástil con un movimiento brusco al alza y acto seguido el rectángulo
inclinado hacia abajo y de rango estrecho.
Cuando el precio rompe por arriba el rectángulo se culmina el patrón de bandera y se confirma
la continuidad de la tendencia alcista, alcanzando el precio el primer objetivo o proyección de la
subida.
Para calcular la proyección de la subida del precio o primer objetivo del impulso al alza, se
coge la altura del mástil (que es el movimiento fuerte y repentino que se produce antes de
empezar a formarse el triángulo simétrico y que puede estar formado por una barra o vela o
varias) y se proyecta hacia arriba desde la zona en que el precio rompe el triángulo.
Tener presente que en una tendencia alcista, si se produce el patrón de gallardete y finalmente
el precio rompe el triángulo del banderín pero por abajo en vez de por arriba, implica que el
mercado no está lo suficientemente fuerte pese a formar la pauta, prueba de ello es la rotura hacia
abajo y no hacia arriba, de manera que convendría poner en cuarentena ese patrón
El gráfico presenta el ejemplo, que al romper por arriba el triángulo simétrico lo confirmó con
pullback.
Un gallardete dentro de una tendencia bajista lo que hace es reafirmar dicha tendencia, la cual a
la postre continuará con el precio cayendo.
El proceso comienza con una tendencia bajista, de pronto se produce un fuerte movimiento a la
baja acompañado de un elevado volumen. Acto seguido se forma un triángulo simétrico cuyo
rango donde fluctúa el precio tiende a ser reducido de tamaño.
En la formación del triángulo el volumen tiende a decrecer poco a poco, llegando un momento
incluso que es inapreciable.
El gráfico presenta una estructura sencilla de un gallardete dentro de una tendencia bajista.
La culminación del patrón se produce cuando el precio rompe por abajo el triángulo que forma
parte de la bandera, una rotura que suele ir acompañada de un incremento del volumen. Este
hecho proporciona el criterio suficiente para saber que la debilidad del mercado sigue vigente y
que el precio debería de continuar cayendo.
Para calcular la proyección de la caída del precio o primer objetivo del impulso a la baja, se
coge la altura del mástil (que es el movimiento fuerte y repentino que se produce antes de
empezar a formarse el triángulo y que puede estar formado por una barra o vela o varias) y se
proyecta hacia abajo desde la zona en que el precio rompe el triángulo.
Un detalle que el analista técnico tiene que tener presente es que en una tendencia bajista, si se
produce el patrón de gallardete y finalmente el precio rompe el triángulo del banderín pero por
arriba en vez de por abajo, implica que el mercado está aún fuerte pese a formar la pauta, prueba
de ello es la rotura hacia arriba y no hacia abajo, de manera que convendría poner en cuarentena
ese patrón en concreto.
Los triángulos
Son patrones de continuidad de la tendencia, aunque nos podrá alertar de que puedan motivar
un cambio de la tendencia.
Existen tres tipos de triángulos: simétricos, ascendentes y descendentes.
Triángulos simétricos
Son patrones en los que el precio se va moviendo dentro del rango de unas líneas convergentes
que conforman un triángulo simétrico y horizontal.
El precio se encuentra inmerso en un rango formado por dos directrices, una inferior y otra
superior, la inferior es alcista y la superior es bajista.
El precio evoluciona dentro de un rango convergente en el que los máximos son decrecientes y
los mínimos son crecientes.
La estructura sencilla de un triángulo simétrico en una tendencia alcista
En los triángulos simétricos, no hay que ser estricto o escrupuloso con el adjetivo simétrico,
bastará que una directriz sea alcista y la otra sea bajista.
Al igual que con los canales tendenciales y las directrices o líneas de tendencia, se le ha de
exigir, para su validez y fiabilidad, que el precio toque como mínimo dos veces tanto la directriz
superior como la directriz inferior.
Como criterio de fiabilidad se ha exigir que el precio se mueva dentro del triángulo simétrico
hasta los dos tercios (desde el inicio del triángulo hasta su vértice). De manera que cuando el
precio se haya movido esa distancia, es cuando suele comenzar a romper el triángulo en la
dirección de la tendencia, actuando de esta forma como pauta de continuidad de la tendencia
principal.
Si la tendencia es alcista y el precio rompe el triángulo al alza tendremos confirmación de
continuidad de la tendencia alcista.
El gráfico presenta un triángulo simétrico que se forma en tendencia alcista y el precio rompe
dicho triángulo por arriba, por su directriz superior, confirmando la continuidad de las subidas.
Si el precio tiende a romper el triángulo por la parte del vértice del mismo, la fiabilidad del
patrón se reduce bastante, de manera que el analista técnico deberá de tener precaución por si
estamos ante una señal falsa del mercado.
Este patrón tiende a tardar en formarse entre uno y tres meses, es un mero dato numérico que
tampoco hay que llevar al extremo. En gráficos menores e intradiarios también son patrones
válidos y habría que obviar el dato.
Resaltar aunque se trate de un patrón de continuación de la tendencia, se tendrá que estar atento
por dónde rompe el precio, porque si estamos en una tendencia alcista y el precio rompe por
abajo perdiendo la directriz inferior, podríamos estar ante el inicio de caídas. Lo mismo sucede en
una tendencia bajista y el precio romper por arriba superando la directriz superior, podríamos
estar ante el inicio de subidas.
Aunque es una pauta de continuidad, tanto cuando sucede esto como cuando el precio se
aproxime bastante al vértice del triángulo sin haber roto aún la figura, se deberá de tener cuidado
por si la pauta no ha actuado como debiera.
El volumen durante la formación del triángulo suele reducirse a medida que el precio se va
moviendo en un rango más estrecho de la figura acercándose al vértice. Si la rotura del precio es
por arriba, superando la directriz superior, el volumen crece. En cambio si la rotura del precio es
por abajo, perdiendo la directriz inferior, el tema del volumen es secundario.
Para calcular la proyección o el primer objetivo del movimiento cuando rompe el triángulo,
hay que coger la distancia equivalente al ancho de la base (que es el inicio del triángulo),
proyectando al alza o a la baja según se trate de una rotura por arriba o por abajo.
Es habitual ver dentro de una secuencial alcista o bajista varios triángulos más o menos
consecutivos, que lo que hacen es ir confirmando la tendencia. Cuando llegue el tercero, es
conveniente, extremar las medidas porque podría comenzar a debilitarse la fuerza de la tendencia,
podría estar agotándose.
El gráfico presenta un triángulo simétrico en tendencia bajista. El precio rompe por abajo la
directriz inferior, lo confirma mediante el oportuno pullback y la tendencia sigue siendo bajista.
Posteriormente vuelve el precio a tocar la directriz inferior y es cuando el precio cae y alcanza la
proyección o primer objetivo de la caída.
El segundo toque del precio a la directriz inferior no se considera un pullback (cosa que sí lo es
el primer toque ), sino que se trataría ya de actuar la directriz inferior como resistencia ( cuando
un soporte o una directriz se pierde, pasa a ser resistencia estática o resistencia dinámica ).
El gráfico presenta un triángulo simétrico en una tendencia alcista. El precio rompe por arriba
la directriz superior, lo confirma el throwback y la tendencia sigue siendo alcista. El precio sube y
alcanza la proyección o primer objetivo estimado
Triángulos ascendentes
Los triángulos ascendentes, también denominados triángulos rectángulos, son formaciones
gráficas parecidas a los triángulos simétricos, aunque una de las diferencias radica en que la
directriz superior es horizontal y no inclinada hacia abajo. En cambio coinciden en que la
directriz inferior es ascendente.
En los gráficos se pueden ver la sencilla estructura de un triángulo ascendente.
Estas formaciones suelen ser de continuación de la tendencia previa, de manera que en una
tendencia alcista confirmará la continuidad de las subidas, mientras que en una tendencia bajista
confirmará la continuidad de las caídas.
El precio se va moviendo dentro del rango de las dos directrices que conforman el triángulo
ascendente.
El precio se encuentra inmerso en un rango formado por dos directrices, una inferior y otra
superior, la inferior es alcista y la superior es horizontal. El precio evoluciona dentro de un rango
en el que los máximos son laterales y los mínimos son crecientes.
En el gráfico el triángulo ascendente actuó bien, rompiendo el precio por arriba la directriz
superior, confirmando la tendencia alcista previa.
En los triángulos ascendentes, no hay que ser demasiado estricto o escrupuloso, bastará que
una directriz sea alcista y la otra sea horizontal.
Al igual que con los canales tendenciales y las directrices o líneas de tendencia, se le ha de
exigir a esta formación gráfica, para su validez y fiabilidad, que el precio toque como mínimo dos
veces tanto la directriz superior como la directriz inferior.
Como criterio de fiabilidad se ha exigir que el precio se mueva dentro del triángulo ascendente
hasta los dos tercios (desde el inicio del triángulo hasta su vértice). De manera que cuando el
precio se haya movido esa distancia, es cuando suele comenzar a romper el triángulo en la
dirección de la tendencia, actuando de esta forma como pauta de continuidad de la tendencia
principal.
Si el precio tiende a romper el triángulo por la parte del vértice del mismo, la fiabilidad del
patrón se reduce bastante, de manera que el analista técnico deberá de tener precaución por si
estamos ante una señal falsa del mercado.
En el gráfico se ve un ejemplo de triángulo ascendente rompiendo por arriba la directriz
horizontal para seguir el precio con la fortaleza alcista.
Este patrón tiende a tardar en formarse entre uno y tres meses, aunque es un mero dato
numérico que tampoco hay que llevar al extremo. En gráficos menores e intradiarios también son
patrones válidos y habría que obviar el dato.
Resaltar aunque se trate de un patrón de continuación de la tendencia, el analista tendrá que
estar atento. Aunque es una pauta de continuidad, se deberá de tener cuidado por si la pauta no ha
actúa como debiera.
El volumen durante la formación del triángulo suele reducirse a medida que el precio se va
moviendo en un rango más estrecho de la figura acercándose al vértice. Si la rotura del precio es
por arriba, superando la directriz superior, el volumen crece. En cambio si la rotura del precio es
por abajo, perdiendo la directriz inferior, el tema del volumen es secundario.
Para calcular la proyección o el primer objetivo del movimiento del precio cuando rompe el
triángulo, hay que coger la distancia equivalente al ancho de la base (que es el inicio del
triángulo), proyectando al alza o a la baja según se trate de una rotura por arriba o por abajo.
En el gráfico se aprecia cómo se calcula el objetivo o proyección, que en este caso es de la
misma forma que con los triángulos simétricos. En este ejemplo rompe por arriba la directriz
horizontal, confirma la rotura con un throwback y alcanza la proyección estimada.
Otro ejemplo gráfico donde se aprecia bien el triángulo ascendente, la rotura por arriba de la
directriz horizontal, y el precio alcanza la proyección u objetivo estimado.
Es habitual ver dentro de una secuencial alcista o bajista varios triángulos más o menos
consecutivos, que lo que hacen es ir confirmando la tendencia. Cuando llegue el tercero, es
conveniente, básicamente por prudencia, extremar las medidas porque podría comenzar en breve
a debilitarse la fuerza de la tendencia, podría estar agotándose.
Triángulos descendentes
Los triángulos descendentes, también denominados triángulos rectángulos, son formaciones
gráficas parecidas a los triángulos simétricos, ya que la directriz superior es descendente, en
cambio se diferencian en que la directriz inferior es horizontal.
En los gráficos se puede ver la sencilla estructura de un triángulo descendente.
Estas formaciones suelen ser de continuación de la tendencia previa, de manera que en una
tendencia alcista confirmará la continuidad de las subidas, mientras que en una tendencia bajista
confirmará la continuidad de las caídas.
El precio se va moviendo dentro del rango de las dos directrices que conforman el triángulo
descendente. El precio se encuentra inmerso en un rango formado por dos directrices, una inferior
y otra superior, la inferior es horizontal y la superior es descendente.
El precio evoluciona dentro de un rango en el que los máximos son decrecientes y los mínimos
son laterales.
En el gráfico el triángulo descendente actuó bien, rompiendo el precio por abajo la directriz
inferior, confirmando la tendencia bajista previa.
Cuando hablamos de los triángulos descendentes, no hay que ser estricto o escrupuloso, bastará
que una directriz sea alcista y la otra sea horizontal.
Al igual que con los canales tendenciales y las directrices o líneas de tendencia, se le ha de
exigir a esta formación gráfica, para su validez y fiabilidad, que el precio toque como mínimo dos
veces tanto la directriz superior como la directriz inferior.
Como criterio de fiabilidad se ha exigir que el precio se mueva dentro del triángulo
descendente hasta los dos tercios (desde el inicio del triángulo hasta su vértice). De manera que
cuando el precio se haya movido esa distancia, es cuando suele comenzar a romper el triángulo en
la dirección de la tendencia, actuando de esta forma como pauta de continuidad de la tendencia
principal.
Si el precio tiende a romper el triángulo por la parte del vértice del mismo, la fiabilidad del
patrón se reduce bastante, de manera que el analista deberá tener precaución por si estamos ante
una señal falsa del mercado.
En el gráfico podemos ver un ejemplo práctico de triángulo descendente rompiendo por abajo
la directriz horizontal para seguir el precio con la debilidad bajista.
Este patrón tiende a tardar en formarse entre uno y tres meses, aunque es un mero dato
numérico que tampoco hay que llevar al extremo. En gráficos menores e intradiarios también son
patrones válidos y habría que obviar el dato.
Resaltar aunque se trate de un patrón de continuación de la tendencia, el analista tendrá que
estar atento. Se deberá de tener cuidado por si la pauta no ha actuado como debiera.
El volumen durante la formación del triángulo suele reducirse a medida que el precio se va
moviendo en un rango más estrecho de la figura acercándose al vértice. Si la rotura del precio es
por abajo, perdiendo la directriz inferior, el volumen crece. En cambio si la rotura del precio es
por arriba, superando la directriz superior, el tema del volumen es secundario.
Para calcular la proyección o el primer objetivo del movimiento del precio cuando rompe el
triángulo, hay que coger la distancia equivalente al ancho de la base (que es el inicio del
triángulo), proyectando al alza o a la baja según se trate de una rotura por arriba o por abajo.
En el gráfico presenta un ejemplo de triángulo descendente.
En este ejemplo rompe por abajo la directriz horizontal, confirma la rotura con un
pullback y alcanza la proyección estimada.
Es habitual ver dentro de una secuencial alcista o bajista varios triángulos más o menos
consecutivos, que lo que hacen es ir confirmando la tendencia. Cuando llegue el tercero, es
conveniente, básicamente por prudencia, extremar las medidas porque podría comenzar en breve
a debilitarse la fuerza de la tendencia, podría estar agotándose.
Los rectángulos
Los rectángulos, también denominados zona de congestión y zona de consolidación, son
formaciones gráficas en las que el precio se mueve dentro del rango de manera lateral, entre otras
razones porque el rectángulo no presenta tendencia alguna.
La estructura del rectángulo consta de dos líneas horizontales, la superior y la inferior, actuando
la primera como resistencia y la segunda como soporte. A diferencia de otros patrones, la
estructura no está conformada por dos directrices inclinadas, sino por dos niveles horizontales al
estilo de los soportes y resistencias
El gráfico presenta dos ejemplos de estructura de un rectángulo. A la izquierda venimos de una
tendencia alcista y el rectángulo es continuista con las subidas. A la derecha venimos de una
tendencia bajista y el rectángulo es continuista con las caídas. En ambos casos tenemos el
correspondiente filtro de confirmación, un pullback y un throwback.
Para calcular la proyección u objetivo del movimiento del precio posterior a la rotura de uno de
los dos extremos del rectángulo, se coge la altura del rectángulo (una línea entre el soporte y la
resistencia) y se proyecta hacia arriba o hacia abajo (depende de hacia dónde rompa el precio)
desde la zona de ruptura. No significa que el precio una vez que alcance la proyección ya se
detiene y se acaba la tendencia, sino que hay que interpretarlo como un primer objetivo. Será el
analista el que con el resto de herramientas dictamine si la tendencia continuará o puede girarse.
El gráfico presenta un ejemplo. El precio venía en tendencia bajista, se toma un respiro y forma
un patrón rectángulo donde el precio siempre rebota en sus extremos (soporte y resistencia).
Finalmente, rompe el rectángulo por su parte baja, por el soporte, dando señal de que la debilidad
del mercado sigue vigente y que la tendencia previa que era bajista seguirá su curso. La caída
alcanza el primer objetivo o proyección estimada.
En el gráfico presenta el mismo ejemplo gráfico pero al revés. El precio viene en tendencia
alcista, se toma un respiro y forma un patrón rectángulo donde el precio siempre rebota en sus
extremos (soporte y resistencia). Rompe el rectángulo por su parte alta, por la resistencia, dando
señal de que la fortaleza del mercado sigue vigente y que la tendencia previa que era alcista
seguirá su curso. La subida alcanza el primer objetivo o proyección estimada.
En un rectángulo, el volumen es reducido mientras no logre salir el precio, hecho que entonces
sí incrementa el volumen gracias a la rotura del rango.
Hay una regla que puede servir como “pista” de lo que hará el precio. Si las subidas se
producen con elevado volumen y las bajadas con poco volumen, seguramente el precio termine
rompiendo por arriba el rectángulo. En cambio, si las subidas llevan aparejadas poco volumen y
las bajadas experimentan incremento del volumen, seguramente el precio termine rompiendo por
abajo el rectángulo. No es una regla matemática, pero suele anticipar el desenlace final.
La idea es que mientras el precio se encuentre en rango rectangular, se compra en la parte baja
(largo) y se vende (corto) en la parte alta y así sucesivamente hasta que se produce una fuga o
rotura. Así pues, las oportunidades de compra y de venta suelen ser muy fiables mientras el
precio se mantenga dentro del rango.
Cuando el precio sale del rango, es momento de entrar en la dirección de dicha fuga, si rompe
por arriba hay que comprar, si rompe por abajo hay que vender.
En el gráfico presenta un ejemplo de rectángulo donde aún el precio no ha salido del rango. Se
observa que no hay tendencia definida, que el precio cada vez que toca la parte baja rebota al alza
y cada vez que toca la parte alta rebota a la baja.
No es imprescindible que haya que comprar justo en la parte baja y vender justo en la parte
alta, porque no es una cosa matemática. El precio puede rebotar un poquito antes de los extremos,
con lo que no intenten siempre apurar al máximo el precio de entrada.
Lo que es cierto es que para un análisis técnico intradiario o de corto plazo, los rectángulos
suponen un regalo, ya que las posibles zonas de rebote al alza y a la baja están muy bien
definidas, con lo que se pueden obtener varios puntos de entrada atractivos hasta que por fin
rompa el precio por uno de los extremos de la figura.
El gráfico presenta fácilmente las señales de compra (largos) y de ventas (cortos).
Cuando el precio rompe el rectángulo, hay que entrar en la dirección de la fuga. En unas
ocasiones habrá pullback o throwback, de manera que debe de ser aprovechado siempre como
filtro de confirmación. Si la rotura es muy fuerte y con un elevado volumen, seguramente no dé la
oportunidad de un filtro de confirmación.
La doctrina mayoritaria está de acuerdo en que la duración temporal del patrón rectángulo
oscila entre los tres y los cinco meses, aunque es un mero dato numérico que tampoco hay que
llevar al extremo. En gráficos menores e intradiarios también son patrones válidos y habría que
obviar el dato.
Los huecos y gaps
Los huecos son zonas en el gráfico en las que no se ha producido ninguna negociación, hecho
que origina que entre una vela o barra y la siguiente presente un espacio en blanco en el gráfico.
Es una circunstancia aislada, la regla es que siempre haya negociación.
Las causas principales son la publicación de noticias relevantes, la filtración de rumores, las
operaciones corporativas, y para determinados mercados habría que añadir la escasa liquidez.
Al analista le interesa prestar atención especial a los gaps por las consecuencias que suele
originar en el mercado en cuestión. Si se está en una tendencia alcista, se tendrá un hueco o gap
cuando el precio mínimo de un determinado periodo es mayor (superior) al precio máximo del
periodo anterior. Cuando el precio de una sesión está por encima del máximo del precio de la
sesión anterior.
Un hueco en una tendencia alcista suelen confirmar la fortaleza del mercado y la continuidad
de la tendencia alcista, sobre todo si el volumen es elevado.
En el gráfico se aprecia un gap dentro de una tendencia alcista
En tendencia bajista, habría un gap o hueco cuando el precio máximo de una sesión es inferior
al precio mínimo de la sesión anterior. Cuando el precio de una sesión está por debajo del mínimo
del precio de la sesión anterior.
En hueco en una tendencia bajista suelen confirmar la debilidad del mercado y la continuidad
de la tendencia bajista, en éste caso el volumen es un aspecto secundario.
El gráfico presenta un ejemplo de gap dentro de una tendencia bajista
Existe un tópico respecto a los huecos, dice que todo hueco o gap se acaba cerrando. La
doctrina mayoritaria nunca ha estado a favor de esta afirmación, un hueco no tiene por qué
cerrarse o taparse, hay huecos que llevan abiertos muchos años.
Los huecos y gap son válidos en todo tipo de gráficos, mayores, medianos y pequeños, con
independencia del horizonte temporal, incluidos los gráficos intradiarios.
Existen varias clases o tipos de huecos:
- Huecos comunes: se ven en los gráficos, aunque apenas tienen importancia, es indiferente de
cara a la tendencia que tenía previamente el precio.
Dos de sus principales características es que suelen cerrarse pronto y que aparecen en
mercados laterales sin tendencia fuerte ni definida.
El gráfico presenta dos gaps comunes. Observar cómo tras producirse el primero de ellos (al
alza), el precio se queda lateral, y cómo al producirse el segundo (a la baja) el precio vuelve a
quedarse lateral.
- Huecos de ruptura (también denominado de escape o fuga): surge cuando ha culminado
una tendencia o bien un patrón chartista (como por un doble suelo, doble techo, triángulos,
hombro-cabeza-hombro, etc). Es indiferente que la tendencia completada o la formación gráfica
sean alcistas o bajistas.
Este tipo de gap confirma el patrón chartista o el cambio de tendencia.
* Confirmación de cambio de tendencia: si el precio está en una tendencia bajista marcada por
una directriz bajista, si el precio rompe al alza dicha directriz bajista confirmándolo con un hueco
al alza, estará indicando que la tendencia se va a girar de bajista a alcista.
* Confirmación de patrón chartista: si se culmina un patrón triángulo, bandera, gallardete,
rectángulo y el precio rompe al alza, si dicha rotura va acompañada de un gap alcista, estará
confirmando que la rotura es fiable y reforzará el efecto de estos patrones de confirmación de
tendencia.
Lo mismo sucedería con los patrones de cambio de tendencia, como el hombro-cabeza-
hombro, dobles suelos y techos…, la aparición de un gap en la rotura del precio reforzaría el
efecto esperado de estos patrones, que no es otro sino el giro o cambio de tendencia.
El gráfico presenta el precio inmerso en una tendencia bajista corroborada por máximos y
mínimos decrecientes y por una clara línea de directriz bajista que va uniendo sucesivamente los
máximos o techos bajistas. Tres hechos han propiciado que el analista observe que se iba a
producir un giro o cambio de tendencia de bajista a alcista.
En primer lugar que el precio rompe al alza la directriz bajista. En segundo lugar que el precio
también rompe al alza el patrón de triángulo simétrico (fallo chartista). En tercer lugar que la
rotura al alza tanto de la directriz bajista como del triángulo simétrico se produce con un gap o
hueco alcista de ruptura que va acompañado de un incremento del volumen.
Los huecos de ruptura suelen aparecer con un volumen considerable, hecho que da más
credibilidad. Cuanto mayor sea el volumen más tiempo se tardará en cerrar el gap (si es que se
tapa ), sin olvidar que aunque se cierren no suele suceder en el corto plazo, ya que tienden a
generar un impulso de movimiento del precio sólido y regular.
El gráfico presenta al precio dentro de una tendencia bajista y culmina con un patrón de
hombro-cabeza-hombro inverso que alertaría de la posibilidad de un giro o cambio de tendencia
de bajista a alcista.
Cuando el precio rompe al alza la línea de cuello o clavicular se produce la confirmación de
cambio de tendencia y está apoyado con el hecho de que la rotura al alza de la línea clavicular se
realiza con un hueco o gap de ruptura alcista.
Decir que los huecos de ruptura, cuando posteriormente regrese el precio, suelen actuar como
niveles de soporte o de resistencia horizontales. Hay que tener en cuenta que eso sucede cuando
el gap es cerrado.
Un hueco al alza que provoca que el precio continúe subiendo, si tras x tiempo el precio cae y
cierra el gap, podría rebotar al alza. Y viceversa, un hueco a la baja que provoca que el precio
continúe cayendo, si tras x tiempo el precio sube y cierra el gap, podría rebotar a la baja.
Indicar que es cierto, aunque no llegan a tener la solidez y la fiabilidad de un soporte o
resistencia tradicional y horizontal.
- Huecos de continuación (también denominado de medición): este tipo de huecos aparecen
durante una tendencia alcista o bajista, incluso pueden aparecer varios huecos en la misma
tendencia.
La utilidad de los huecos de continuación es que confirman la dirección y la vigencia de la
tendencia previa.
En el gráfico el precio había comenzado una tendencia alcista, se produce un gap alcista que
confirma la fortaleza del mercado y la continuidad de la subida del precio.
Es un gap de continuación y no de ruptura porque dicho gap ni ha roto una tendencia (soportes,
resistencias, canales, directrices) ni ha confirmado un patrón chartista (ni de cambio de tendencia
ni de continuidad de la misma).
Es un gap o hueco que por sí mismo no tendría mucha validez pero que al estar dentro de una
tendencia, lo que haría sería confirmar la vigencia y la continuidad de la misma.
Estos huecos suelen aparecer en menor número de ocasiones que los huecos de ruptura.
Cuando aparecen suele ser en la parte central del movimiento o tendencia, tanto si es alcista como
si es bajista.
El analista puede realizar una proyección o cálculo del objetivo que el precio alcanzará con el
gap de continuación. Para obtener el primer objetivo del recorrido, se mide la evolución del
precio desde la zona donde se produjo la rotura hasta la parte final del hueco y desde ahí se traza
la proyección vertical.
Los huecos de continuación suelen aparecer con un volumen considerable, hecho que le da más
credibilidad. Cuanto mayor sea el volumen más tiempo se tardará en cerrar el gap (si es que se
tapa finalmente), no olvidar que aunque se cierren no suele suceder en el corto plazo, tienden a
generar un impulso de movimiento del precio sólido y regular.
Decir que los huecos de ruptura, cuando regrese el precio, suelen actuar como niveles de
soporte o de resistencia horizontales. Hay que tener en cuenta que eso sucede cuando el gap es
cerrado.
Un hueco al alza que provoca que el precio continúe subiendo, si tras x tiempo el precio cae y
cierra el gap, podría rebotar al alza. Un hueco a la baja que provoca que el precio continúe
cayendo, si tras x tiempo el precio sube y cierra el gap, podría rebotar a la baja.
En este punto indicar que es cierto, aunque no llegan a tener la solidez y la fiabilidad de un
soporte o resistencia tradicional y horizontal.
- Huecos de agotamiento (o de extinción): este tipo de huecos aparece en la recta final de una
tendencia alcista o bajista y provoca un cambio o giro de tendencia.
Incluso suele aparecer con más frecuencia en la recta final de tendencia alcistas, provocando su
cambio de alcista a bajista.
El giro de tendencia se produce porque el precio está a punto de llegar a una zona clave
(soporte, resistencia, directriz, extremo de un canal, etc) o bien porque ha llegado a dicha zona
clave.
El gráfico presenta una tendencia alcista, aparece un hueco bajista de agotamiento que da por
finalizada la subida y comienza una tendencia bajista.
En otras ocasiones aparece el gap porque el juego de la oferta y la demanda así lo han querido
y la tendencia estaba llegando a su final.
De los tipos de huecos que hemos visto, el de agotamiento es el que suele cerrarse.
El gráfico presenta una tendencia bajista, aparece un hueco alcista de agotamiento que da por
finalizada la bajada y comienza una tendencia alcista.
La doctrina mantiene diferentes puntos de vista en cuanto a qué periodos para la media
móvil se les puede considerar corto, medio y largo plazo
No conviene obsesionarse con ello. Un analista que quisiera analizar un mercado para el
medio plazo. Podría utilizar una media de 50 ó de 70 periodos. Si utiliza un gráfico diario,
incluso con una media de corto plazo como la de 20 le podría servir, dado que al ser un
gráfico diario ya estamos en línea con lo de medio plazo.
Para calcular una media móvil lo idóneo es utilizar los precios de cierre, aunque algunos
autores prefieren utilizar los máximos y mínimos del día.
Existen diversos tipos de medias móviles.
Media simple
Es una media aritmética en la que la ponderación es la misma en todas las sesiones.
Este tipo de media móvil se elabora se calcula mediante la suma de los precios de cierre
de un mercado durante un determinado número de períodos y dividiendo a continuación la
suma por el número de dichos períodos.
Trata igual al precio dentro del plazo temporal o periodo considerado.
Una media simple de 20 días es una media aritmética que se obtiene sumando los
precios de los últimos 20 días y dividiendo entre 20.
En el gráfico se puede ver una media móvil simple alcista, concretamente es la de 200
días. Al estar el precio por encima de la media, refleja que la tendencia es alcista.
En este otro gráfico se puede ver una media móvil simple bajista, concretamente es la de
200 días. Al estar el precio por debajo de la media, refleja que la tendencia es bajista.
Las medias móviles simples son más lentas que las ponderadas y las exponenciales.
Tiene a favor que evita más señales falsas pero por otra parte detecta una tendencia
después que el resto de medias móviles.
Media ponderada
Este tipo de media móvil se caracteriza porque pondera más los datos recientes que los
datos más alejados. Así pues, le concede más valor a los cambios más recientes en el
precio, a los últimos movimientos de la cotización.
Como principal consecuencia de ello, la media móvil ponderada, en comparación con la
media simple, seguirá más de cerca al precio.
Se obtiene multiplicando el periodo más antiguo por uno, el penúltimo por dos y así
hasta el más reciente (por ejemplo, en una media ponderada de 50 días se multiplica el
último periodo por 50. La suma del resultado de estas multiplicaciones se divide entre la
suma de las ponderaciones.
En el gráfico se puede ver una media móvil ponderada alcista, concretamente es la de
200 días. Al estar el precio por encima de la media, refleja que la tendencia es alcista.
Es una media demasiado rápida y se asume un mayor riesgo.
Una regla a tener presente: las medias móviles ponderadas son más rápidas que las
simples y las exponenciales. Tiene a favor que detecta una tendencia antes que el resto de
medias, pero a cambio se asume un mayor riesgo puesto que cualquier intento de
movimiento (en contra) no sólo nos echará o sacará del mercado, sino que también
tendremos muchas señales falsas si no hay una tendencia muy fuerte y clara.
Media exponencial
En este tipo de media móvil se le concede mayor relevancia al día anterior. Presenta la
ventaja de que añade un elemento corrector que otorga mayor relevancia y peso a los
cambios en el precio más próximos al cambio actual.
Estas medias exponenciales tienen más en cuenta los datos más recientes frente a los
más alejados en el tiempo,
Porque toman en consideración la serie histórica de la cotización, es una media móvil
sumamente interesante.
Para calcularla se aplica un porcentaje al precio de cierre de hoy (pongamos de ejemplo
un 10%) y se añade al resultado de multiplicar la media exponencial del día anterior por la
diferencia entre el 100% y ese porcentaje (90%).
En el gráfico se puede ver una media móvil exponencial bajista, concretamente es la de
200 días. Al estar el precio por debajo de la media, refleja que la tendencia es bajista.
Es la mejor media móvil, ya que ni es la más lenta (como la simple) ni la más rápida
(como la ponderada), siendo algo intermedio y ya saben que la virtud está en el medio.
En el gráfico tienen tres medias móviles de 100 periodos cada una de ellas. La de color
verde es la media simple, la de color azul es la media ponderada y la de color rojo es la
media exponencial.
La media ponderada (azul) la que siempre va siguiendo al precio más cerca, la media
simple (verde) es la media más alejada del precio, y la media exponencial (roja) es la
intermedia, ni la más cercana ni la más alejada, ni la más lenta pero tampoco la más
rápida.
Media Hull
La media móvil de Hull (nombre que se le debe su creador Alan Hull), presenta una
peculiaridad bastante interesante, concretamente que es una media rápida y suave, con lo
que permite que sea más estable a la variación de los precios que el resto de medias
móviles, y de esta manera adaptarse rápidamente a los cambios de tendencia.
Se podría decir que la media de Hull intenta compensar el efecto de retraso que tienen
las medias móviles tradicionales.
Generalmente esta media irá pegada al precio, adaptándose de manera más rápida a un
giro o cambio de tendencia.
Dada sus características, es más apta para los analistas técnicos que trabajen sobre todo
en el corto plazo.
Por tanto, la principal característica de ésta media es que trata de eliminar el retraso
intrínseco propio de las medias móviles.
Imaginemos que tenemos una serie de 10 números, del 0 al 9; si tomamos un promedio
simple de 10 periodos sobre la serie, el resultado es 4,5, el cual se encuentra bastante
alejado del último valor que es 9, pero si aplicamos un promedio simple de periodo 5,
sobre los últimos 5 valores, entonces el valor resultante es 7.
La clave es que si restamos 7-4,5= 2.5; si lo sumamos al valor de 7 nos queda
7+2.5=9.5; el cual está ligeramente por encima de 9 que es el último valor de la serie, pero
mucho más cercano que el valor del promedio igual a 7 encontrado anteriormente.
Esto indica que la media móvil de Hull se adapta rápidamente a las variaciones en los
precios permitiendo a la vez la estabilidad del mismo eliminando los efectos de los
cambios bruscos.
En el siguiente gráfico, se ve la comparativa entre la media móvil de Hull, la media
móvil simple y la media móvil exponencial, siendo claramente la media de Hull la que
siempre va pegada al precio y vigilándolo muy de cerca.
Medio plazo: los más utilizados van desde los 240 minutos al diario. El rey indiscutible
es el gráfico diario.
En los gráficos de medio plazo las medias móviles idóneas para seguir al precio de
cerca son las de 10 y 20 periodos. Para seguir al precio a una distancia la de 50 periodos.
Para seguir al precio con mayor distancia y perspectiva las medias de 100 y 200 periodos.
En este otro gráfico tenemos un ejemplo de medio plazo, gráfico diario y media móvil
de 100 periodos.
Largo plazo: los más utilizados son el semanal y el mensual, siendo el rey el semanal.
En los gráficos de largo plazo las medias móviles idóneas para seguir al precio de cerca
son las de 10 y 20 periodos. Para seguir al precio a una distancia la de 50 periodos. Para
seguir al precio con mayor distancia y perspectiva las medias de 100 y 200 periodos.
En el gráfico tenemos un ejemplo de largo plazo, gráfico semanal y media móvil de 200
periodos.
Cuando la media móvil corta cruza a la baja la media móvil larga es señal de venta (cruz
de la muerte).
En el gráfico la media móvil corta cruza a la baja la media móvil larga y el precio está
por debajo primero de una media indicando fortaleza relativa bajista y luego por debajo de
ambas medias reflejando fortaleza plena bajista.
Una vez la media corta cruza al alza la media larga, mientras permanezca el precio por
encima de ambas la tendencia será muy alcista y habrá que permanecer comprado. Si
permanece sólo por encima de una de las dos medias también seguirá vigente la tendencia
alcista pero con menos fuerza.
¿Cuándo se puede cerrar la compra? Hay dos supuestos:
– Cuando ambas medias se cruzan hacia abajo quedando por encima del precio.
– Cuando el precio pierde un soporte, directriz alcista, canal alcista, etc. Aunque
corremos el riesgo de que sea un mero recorte por seguir aún por encima de la media
móvil.
Cuando el precio retroceda incluso las medias móviles podrían actuar de soporte
dinámico.
En este gráfico se puede ver que tras cruzarse al alza la media móvil corta y la media
móvil larga originan señal de compra, posteriormente retrocede en varias ocasiones
tocando la media móvil larga que actúa como soporte dinámico y el precio rebota al alza
continuando con su tendencia alcista.
Una vez la media corta ha cruzado a la baja la media móvil larga, mientras permanezca
el precio por debajo de ambas la tendencia será muy bajista y habrá que permanecer
vendido. Si permanece sólo por debajo de una de las dos medias también seguirá vigente
la tendencia bajista pero con menos fuerza.
¿Cuándo se puede cerrar la venta? Hay dos supuestos:
– Cuando ambas medias se cruzan hacia arriba quedando por debajo del precio.
– Cuando el precio rompe por arriba una resistencia, directriz bajista, canal bajista, etc.
Aunque corremos el riesgo de que sea un mero rebote por seguir aún por debajo de las
medias.
Cuando el precio rebota incluso las medias móviles podrían actuar de resistencia
dinámica.
En el siguiente gráfico se puede ver que tras cruzarse a la baja la media móvil corta y la
media móvil larga originan señal de venta, posteriormente rebota en varias ocasiones
tocando la media móvil que actúa como resistencia dinámica y el precio rebota a la baja
continuando con su tendencia bajista.
TRABAJANDO CON TRES MEDIAS MÓVILES
La ventaja que ofrece trabajar con el cruce de tres medias móviles es que tiene una
perspectiva de la realidad del mercado bastante fiable, a corto, medio y largo plazo, sobre
todo si sabe escoger correctamente los periodos de las medias móviles en cuestión.
El primer paso es elegir qué medias se van a utilizar para trabajar.
* Para el corto plazo: las ideales son aquellas menores de 30 periodos, sobre todo las
medias de 10, 20 y 30 periodos.
* Para el medio plazo: las ideales son aquellas mayores de 30 periodos, y menores de
100 periodos, sobre todo las medias de 50 y 70 periodos.
* Largo plazo: las ideales son aquellas mayores de 100 periodos, y menores de 200
periodos, sobre todo las medias de 100 y 200 periodos.
El segundo paso es escoger por el tipo de media móvil (simple, exponencial,
ponderada, triangular, etc).
Las tres medias móviles deberían de ser de la misma clase. No pasa nada por coger
medias de diferente tipo, pero si se quiere una cierta uniformidad es lo preferible.
En cuanto al periodo de las medias, es interesante la diversificación, mezclar medias de
diferentes periodos, una media de corto periodo con una media de periodo medio y otra de
periodo largo, por ejemplo el cruce de las medias de 10, 50 y 100 periodos.
Para la señal de compra, además de cruzarse las tres medias móviles al alza, han de estar
por debajo del precio, y para la señal de venta, además de cruzarse las tres medias móviles
a la baja, han de estar por encima del precio.
La fortaleza alcista plena se mantendría mientras el precio permanece por encima de las
tres medias móviles, la fortaleza bajista plena se mantendría mientras el precio permanece
por debajo de las tres medias móviles.
La fortaleza alcista parcial sería cuando el precio permanece por encima de una o dos
medias móviles, la fortaleza bajista parcial se daría cuando el precio permanece por debajo
de una o dos medias móviles.
El siguiente gráfico presenta un ejemplo de señal alcista con el cruce de tres medias
móviles al alza permaneciendo el precio siempre por encima de ellas, como mínimo de
una.
Respecto a las señales alcistas. Es cierto que cuando las tres medias móviles se cruzan al
alza y el precio está por encima, es una señal de compra. Pero también hay que considerar
que cuando la media de periodo corto cruza al alza la media de periodo intermedio
tenemos inicio de tendencia de corto-medio plazo. Si posteriormente la media de periodo
intermedio cruza al alza la media de periodo largo, tendremos confirmación de tendencia
de medio-largo plazo (y tendremos el cruce de todas las medias móviles con el precio por
debajo de las tres).
En este gráfico presenta un ejemplo de señal bajista con el cruce de tres medias móviles
a la baja, permaneciendo el precio siempre por debajo de ellas, como mínimo de una.
Una vez las medias se cruzan al alza, mientras permanezca el precio por encima de las
tres, la tendencia será muy alcista y habrá que permanecer comprado. Si permanece sólo
por encima de dos de ellas también seguirá vigente la tendencia alcista con un poquito
menos de fuerza. Si tan sólo aguanta el precio por encima de una media sigue siendo
alcista la tendencia pero empieza a flaquear.
¿Cuándo se puede cerrar la compra? Hay dos supuestos:
– Cuando las tres medias se cruzan hacia abajo quedando por encima del precio.
– Cuando el precio pierde un soporte, directriz alcista, canal alcista, etc. Aunque se
corre el riesgo de que sea un mero recorte por seguir aún por encima de alguna media
móvil.
Cuando el precio retroceda incluso las medias móviles podrían actuar de soporte
dinámico.
Lo mismo en la situación contraria, una vez las medias se cruzan a la baja, mientras
permanezca el precio por debajo de las tres, la tendencia será muy bajista y habrá que
permanecer vendido. Si permanece sólo por debajo de dos de ellas también seguirá vigente
la tendencia bajista con un poquito menos de fuerza. Si tan sólo aguanta el precio por
debajo de una media sigue siendo bajista la tendencia pero empieza a flaquear.
¿Cuándo se puede cerrar la venta? Hay dos supuestos:
– Cuando las tres medias se cruzan hacia arriba quedando por debajo del precio.
– Cuando el precio rompe por arriba una resistencia, directriz bajista, canal bajista, etc.
Aunque corremos el riesgo de que sea un mero rebote por seguir aún por debajo de alguna
media móvil.
Cuando el precio retroceda incluso las medias móviles podrían actuar de resistencia
dinámica.
Respecto a las señales bajistas, es cierto que cuando las tres medias móviles se cruzan a
la baja y el precio está por debajo, es una señal de venta. También hay que considerar que
cuando la media de periodo corto cruza a la baja la media de periodo intermedio tenemos
inicio de tendencia de corto-medio plazo. Si posteriormente la media de periodo
intermedio cruza a la baja la media de periodo largo, tendremos confirmación de tendencia
de medio-largo plazo ( y tendremos el cruce de todas las medias móviles con el precio por
encima de las tres).
El triple cruce de la muerte
Consiste en utilizar el cruce al alza o a la baja de tres medias móviles exponenciales
cuyos periodos son 4, 18 y 40.Se puede utilizar en cualquier tipo de gráficos, desde 5
minutos a diario.
La técnica consiste en esperar a que se junten las 3 medias móviles exponenciales de 4,
18 y 40 períodos en un mismo punto o bien que estén muy pegadas, tanto al alza como a la
baja.
Si resulta que las tres medias se cruzan a la vez en el mismo punto (o casi en el mismo
punto) y acto seguido el precio pierde un soporte o rompe una resistencia (se entiende el
nivel más próximo) dependiendo de la dirección del movimiento, tendremos este patrón
del triple cruce de la muerte.
En principio, lo ideal, una vez que da la señal de compra o de venta, es mantenerla hasta
que el precio cruce la media exponencial de 40 periodos, momento en el que se cerrará la
posición.
Aunque esta técnica es válida para los cruces al alza y a la baja de las tres medias
móviles exponenciales, es mucho más efectiva cuando el cruce es a la baja, es decir,
cuando da una señal de venta.
El siguiente gráfico presenta un ejemplo de triple cruce de la muerte al alza. Las tres
medias exponenciales de 4, 18 y 40 periodos se cruzan al alza en un mismo punto
(recuadro). Es la primera señal de compra. Esperamos como filtro a que el precio rompa la
resistencia más próxima (el círculo) ya que se trata de un cruce al alza. Una vez rota la
resistencia tenemos incluso un segundo filtro de confirmación, un throwback.
La señal de compra es fuerte al darse el triple cruce la muerte con dos filtros (rotura de
resistencia y throwback) y mientras el precio siga por encima de la media exponencial de
40 periodos hay que seguir comprado, (la media de 40 es la que está más debajo de las
tres).
En el gráfico tenemos un ejemplo de triple cruce de la muerte a la baja. Las tres medias
exponenciales de 4, 18 y 40 periodos se cruzan hacia abajo en un mismo punto (recuadro).
Es la primera señal de compra. Esperamos como filtro a que el precio pierda el soporte
más próximo (el círculo) ya que se trata de un cruce a la baja. Una vez perdido el soporte
tenemos incluso un segundo filtro de confirmación, un pullback.
La señal de venta es fuerte al darse el triple cruce la muerte con dos filtros (rotura del
soporte y pullback) y mientras el precio siga por debajo de la media exponencial de 40
periodos hay que seguir vendido, (la media de 40 es la que está más arriba de las tres).
LAS MEJORES MEDIAS
- Medias móviles exponenciales de períodos 4, 18 y 40: la combinación de estas tres
medias es el triple cruce de la muerte. Aisladamente hablando, salvo la media de 40, las
otras dos no son nada del otro mundo, de manera que su efectiva es conjunta y tan sólo
para buscar los cruces.
– Media móvil exponencial de periodo 10: es una media que sigue al precio muy
bien en los gráficos marcando la pauta y la inercia de la tendencia.
Generalmente brinda dos ventajas:
* Por un lado, nos mantiene dentro de la tendencia vigente de corto plazo.
* Por otro lado, cuando el precio rebota en ella al girarse, suele permitir aprovechar los
rebotes al tocar la media, rebote de corto plazo . No confundir con que cuando el precio
toca ésta media rebota, ha de cumplir unos requisitos sencillos y funciona realmente muy
bien.
El siguiente gráfico presenta el ejemplo con la media exponencial de periodo 10
cogiendo una tendencia bajista de corto plazo en gráficos de 15 minutos. Observar cómo el
precio, cuando hay una tendencia definida, siempre que toca la media rebota hacia abajo y
continúa con las caídas.
– Media móvil exponencial de periodo 20: aisladamente no parece que sea una
media móvil tan interesante como la de periodo 10, pero como complemento de ésta es
magnífica para el corto plazo
Presenta una ventaja:
* Actúa como límite a las extensiones del precio respecto a la media de 10. Es decir, el
precio supera o pierde la media de 10 y va a la de 20 donde rebota, actuando ésta como
límite de la extensión o prolongación del precio y como nivel donde empezar a considerar
colocar un stop loss.
Existen bastantes posibilidades de que si el precio no rebota en la media exponencial de
periodo 20 la tendencia de corto plazo finalice.
En el gráfico se puede apreciar bien cómo hay una tendencia alcista, el precio se
mantiene por encima de la media exponencial de periodo 20. Es la media de periodo 10 la
que brinda casi siempre los rebotes al alza cuando es tocada por el precio y cuando no es
así éste se dirige a la media de 20 donde rebota al alza casi siempre prosiguiendo las
subidas.
– Media móvil exponencial de periodo 40: vendría a ser en el medio plazo lo que la
media exponencial de periodo 10 en el corto plazo, sólo que aquí ya no es tan efectivo
buscar los rebotes cuando el precio toca dicha media, sino que es más efectivo utilizarla
como herramienta seguidora de tendencia.
Mientras el precio esté por encima de esta media la tendencia de medio plazo es alcista,
mientras esté por debajo la tendencia será bajista.
En el gráfico se puede ver una clara tendencia alcista utilizando la media exponencial de
periodo 40 para seguir la evolución en el medio plazo (ya que se trata de un gráfico de
medio-largo plazo).
El precio permanece prácticamente siempre por encima de dicha media, salvo algún
pequeño escarceo puntual que veremos a continuación que lo corrige la combinación de la
media exponencial de periodo 50 (al estilo de las sinergias de las medias exponenciales de
10 y 20).
– Media móvil exponencial de periodo 50: actuaría de manera similar a la media
exponencial de periodo 20, más que considerándola aisladamente sería como límite a las
extensiones del precio respecto a la media de 40. El precio supera o pierde la media de 40
y va a la de 50 donde, actuando ésta como límite de la extensión o prolongación del precio
y como nivel donde empezar a considerar colocar un stop loss.
Existen bastantes posibilidades de que si el precio no rebota en la media exponencial de
periodo 50 la tendencia de corto plazo finalice.
En el gráfico se puede apreciar cómo tenemos una tendencia alcista, el precio se
mantiene por encima de la media exponencial de periodo 40. Es la media de periodo 40 la
que brinda casi siempre los rebotes al alza cuando es tocada por el precio y cuando no es
así éste se dirige a la media de 50 donde rebota al alza casi siempre prosiguiendo las
subidas.
– Media móvil exponencial de periodo 100: vendría a ser en el largo plazo lo que la
media exponencial de periodo 10 en el corto plazo o la media exponencial de periodo 40
en el medio plazo.
Por tanto, mientras el precio esté por encima de esta media la tendencia de largo plazo es
alcista, mientras esté por debajo la tendencia será bajista.
En el gráfico se puede ver una clara tendencia bajista utilizando la media exponencial de
periodo 100 para seguir la evolución en el largo plazo (ya que se trata de un gráfico de
largo plazo).
A parte de que el precio cruza la media hacia abajo dando señal de caídas (el recuadro),
se tiene la confirmación o filtro de seguridad de un pullback (el círculo). Al estar todo el
tiempo el precio por debajo de la media exponencial de 100 periodos, la tendencia de largo
plazo es fuertemente bajista.
– Media simple de periodo 200: vendría a ser en el largo plazo lo que la media
exponencial de periodo 20 en el corto plazo o la media exponencial de periodo 50 en el
medio plazo.
Mientras el precio esté por encima de esta media la tendencia de largo plazo es alcista,
mientras esté por debajo la tendencia será bajista.
En el gráfico se aprecia bien cómo hay una tendencia bajista, el precio se mantiene por
debajo de la media exponencial de periodo 100 y cuando se dirige a la media de 200
rebota a la baja (segundo círculo), prosiguiendo las caídas.
El siguiente gráfico, vamos a ver actuando todas las medias móviles a la vez
En este gráfico tenemos que el precio se coloca por debajo de todas las medias móviles
de corto, medio y largo plazo, además en un mismo punto (el recuadro), originando señal
de caídas.
El analista observa que se produce un pullback (primer círculo), de manera que se tiene
ya el filtro de confirmación para esperar caídas.
El precio comienza a caer. Las medias de corto plazo (las exponenciales de 10 y 20
periodos) van a ir marcando la fuerza de la caída, mientras el precio esté por debajo de
ambas la tendencia será muy bajista.
La tendencia es fuertemente bajista y las medias de corto plazo actúan muy bien como
zonas de rebote a la baja para continuar los recortes (del segundo círculo al séptimo,
ambos inclusive).
El precio, tras casi tres meses (porque es un gráfico diario), alcanza las medias
exponenciales de medio plazo (las de 40 y 50 periodos). Toca la media de 40 periodos en
dos ocasiones (octavo y noveno círculo), casi roza la de 50 periodos, y de nuevo vuelve a
caer con fuerza, manteniéndose la fuerte tendencia bajista.
La tendencia es tan clara, que el precio no tiene ni fuerza para tocar las medias de largo
plazo (las de periodos 100 y 200). Y el día que llegue, seguramente la primera vez que
toque la media de 100 ó la de 200 rebote a la baja.
La tendencia bajista lo es en todos los plazos (corto, medio y largo) y tiene pinta de
seguir así un buen tiempo.
Otro ejemplo con todas las medias móviles al alza e introduciendo un nuevo elemento,
la lateralidad, para ver cómo conjuga e interpreta
El gráfico presenta primero que el precio cruza al alza todas las medias móviles
(recuadro). Lo primero a considerar es que todas las medias están tan juntas y pegadas
entre sí porque viene de una tendencia lateral que duró hasta tres meses (el gráfico en este
ejemplo es semanal).
Una vez surge la señal de compra, el precio sube y luego regresa, las medias aún siguen
sin separarse (recordar que cuanto más fuerte es una tendencia más separadas estarán
todas las medias móviles entre sí).
El precio toca las medias (primer círculo) y rebota al alza como era de esperar, luego
cae de nuevo y es la última media, la de 200 (segundo círculo) la que le permite rebotar al
alza, confirmando que la tendencia primaria es aún lateral (por eso las medias siguen
pegadas) pero que hay que seguir dentro, no se ha producido un cruce de las medias hacia
abajo atravesando el precio.
Sigue lateral, así lo muestran los círculos tercero, cuarto y quinto, donde el precio se
apoya rebotando siempre al alza.
Se sigue lateral, pero algo empieza a cambiar, tras tocar el precio el sexto círculo que es
la media de 200 periodos, no sólo vuelve a rebotar al alza el precio, sino que dicha media
de 200 y la de 100 (las de largo plazo) comienzan a curvarse hacia arriba y un poquito
después todas las demás.
Esta señal es muy importante para el analista, ya que por un lado vuelve a rebotar el
precio en la media de 200 periodos y por otro lado todas las medias se vuelcan al alza.
La culminación o confirmación definitiva de que salimos de la lateralidad , que ahora
vendrá la recompensa de haber estado esperando dentro del mercado con nuestra compra
es que el precio empieza a subir y ahora sólo toca las medias móviles de corto plazo
(periodos 10 y 20), concretamente el séptimo círculo, rebotando justo desde ahí con mucha
fuerza y verticalidad, siendo la media de 10 periodos la que en todo momento marca la
fortaleza alcista en el corto plazo, además de que todas las medias se van separando
bastante entre sí.
El octavo círculo es la media de periodo 10 y vuelve a rebotar muy bien el precio al
alza, al igual que en el noveno círculo y así hasta la fecha.
INDICADORES
RSI
Este oscilar se representa linealmente y se encarga de medir la fuerza con la que el
precio sube o baja, moviéndose su representación gráfica en un rango de 0 a 100, el cual
está delimitado por dos líneas horizontales en las zonas de 30 y 70.
Sobrecompra sería cuando el valor se encuentra en el rango comprendido entre 70 y
100, originando alerta por si el precio se gira a la baja. Sobreventa aparecería cuando el
valor se encuentra en el rango comprendido entre 0 y 30, dando alerta por si el precio se
gira al alza.
Si el valor se encuentra entre la zona de 30 y 70 se podría decir que no hay signos ni de
sobrecompra ni de sobreventa, con lo que el mercado se encuentra tranquilo.
Personalmente considero que es desde el nivel de 80 y de 20 respectivamente cuando se
puede hablar con mayor propiedad de sobrecompra y de sobreventa.
Cuando el RSI llegue a 70 o lo empieza a superar habrá que estar atentos porque la
sobrecompra comienza a aparecer levemente y cuando llegue a 80 o lo supere ya será
oficial, de manera que atentos por si el precio pudiese girarse a la baja.
Cuando el RSI llegue a 30 o lo empieza a perder habrá que estar atentos porque la
sobreventa comienza a aparecer levemente y cuando llegue a 20 o lo pierda ya será oficial,
de manera que atentos por si el precio pudiese girarse al alza.
Tres reglas a tener en cuenta al hilo de todo esto:
* Cuanto más extremo es el valor del RSI más fiable será que el precio o cotización del
mercado se gire y cambie de dirección.
* Cuando el RSI alcanza niveles de sobrecompra o de sobreventa no significa que
enseguida deba el precio del mercado girarse, sino que a partir de ese momento es una
posibilidad real.
* Cuando el RSI se encuentra en sobrecompra o en sobreventa, el giro del precio del
mercado suele ser en el corto plazo, no hablamos de un cambio de tendencia, sino que lo
habitual es que se trate de un rebote dentro de una tendencia, pero el rebote no varía el
escenario principal. Por supuesto que en ocasiones coincidirá y sí cambiará el devenir de
la tendencia primaria, pero no es lo habitual.
El periodo más utilizado es el de 14 sesiones.
En el gráfico se puede apreciar que RSI generó una señal de venta cuando tocó la zona
de valor 70 (sobrecompra), nivel a partir del cual (señalado con un cuadrado) el precio del
mercado podría rebotar a la baja como así hizo (indicado con un círculo).
Posteriormente, RSI generó una señal de compra cuando tocó la zona de valor 30
(sobreventa), nivel a partir del cual (señalado con un cuadrado) el precio del mercado
podría rebotar al alza como así hizo (indicado con un círculo).
Tenemos una primera fase en la que la tendencia es alcista con sucesivos máximos y
mínimos ascendentes y corroborados por una directriz alcista.
En esta primera fase el RSI alertó muy bien y desde el principio de la tendencia alcista,
ya que tocó la zona de 30 (sobreventa).
En una segunda fase, que sería todo el rectángulo que pueden ver en el gráfico, los
precios siguen subiendo e incluso se marcan nuevos máximos y mínimos, la tendencia
sigue siendo claramente alcista.
En esta segunda fase, el RSI toca la zona de 70 (sobrecompra) y empieza a caer. Si
atendemos sólo al RSI habría que esperar caídas, pero si atendemos sólo al gráfico sería lo
contrario. ¿Qué hacer?
En efecto, se cumplen los requisitos de una divergencia negativa entre el precio del
mercado y el RSI. El precio formó dos máximos crecientes consecutivos y el RSI formó
dos mínimos decrecientes. Es en ese momento cuando la divergencia negativa es oficial y
podríamos esperar un rebote a la baja (cosa que hizo perfectamente).
MACD,
El indicador de Convergencia y Divergencia de Medias Móviles (MACD) lo que hace
es reflejar la diferencia entre dos medias móviles exponenciales, cuyo periodo para cada
una de ellas ha de ser seleccionado
Aparte de las dos medias móviles exponenciales, tiene también la denominada línea de
señal (signal) que es otra media móvil exponencial cuyo periodo es de 9 sesiones.
Las dos medias móviles exponenciales y la signal se van moviendo sobre una línea
horizontal cuyo valor es cero.
Este indicador nos permite medir la intensidad del mercado, ver si la tendencia del
movimiento va a continuar o se va a girar en sentido contrario. Se basa en la utilización de
medias móviles combinadas con un histograma del oscilador.
En función de cómo lo utilicemos, podemos obtener señales de compra y de venta
atendiendo a tres criterios:
* Zonas de sobrecompra y de sobreventa.
* Divergencias entre el precio del mercado y el indicador.
* Cruces de las medias móviles exponenciales.
El MACD permite ver de manera más sencilla e intuitiva cuándo dos medias móviles
exponenciales se han cruzado entre sí al alza o a la baja.
Cuatro tipos de señales de compra y de venta que puede generar el MACD según
diversos criterios:
Señales de cruce con la línea central (modalidad lenta). Cuando la línea continua
cruza al alza la zona horizontal 0 generaría señal de compra. Cuando la línea continua
cruza a la baja la zona horizontal 0 sería señal de venta.
Otro ejemplo de que en el MACD se han cruzado a la baja la línea continua y la línea
discontinua (recuadro) y coincide plenamente con el inicio de las caídas en el precio del
mercado (círculo).
Posteriormente, en el MACD se han cruzado al alza la línea continua y la línea
discontinua (recuadro) y coincide también con el inicio de las subidas en el precio del
mercado (círculo).
Con esta modalidad la línea horizontal no se utiliza. De tal manera que se atenderá única
y exclusivamente al cruce al alza o a la baja de las líneas continua y discontinua, sin
importar si estos cruces se producen por encima o por debajo de la línea horizontal.
Una de las preguntas habituales que se hará todo analista técnico es qué versión o
modalidad del MACD es la más idónea, la rápida o bien la lenta. Es una cuestión, primero
les expongo los hechos y a continuación les doy mi opinión al respecto.
– La modalidad rápida:
* Tiene como ventaja que coge el movimiento antes, desde su inicio. De esta forma,
todo comienzo de un impulso al alza o a la baja lo avisa.
* Esto significa también que si la señal es falsa nos avisará rápidamente de esta
circunstancia.
* Como desventajas tenemos que ofrecerá un mayor número de entradas erróneas si
no hay tendencia o movimiento.
* Otro inconveniente es que dentro de una tendencia, en cuanto haya un pequeño
respiro o parada, nos dará señal de salida antes de tiempo y no aprovecharemos todo el
resto del movimiento.
– La modalidad lenta:
* Como ventaja se podría decir que da menos señales y por tanto menos errores
cuando hay lateralidad y ausencia de tendencia.
* Otra ventaja es que dentro de una tendencia, en cuanto haya un pequeño respiro o
parada, no nos dará señal de salida antes de tiempo y se podrá aprovechar el resto del
movimiento.
* Como desventajas tendríamos que no avisa desde el inicio del movimiento o
impulso del precio.
* Otro inconveniente es que cuando el impulso se gire, el indicador tardará más
tiempo en avisar.
Como verán, hay argumentos de sobra para elegir. Como todo en la vida, cada opción
tiene sus puntos a favor y sus puntos en contra. Pero no hay que casarse con ninguna
modalidad, sino adaptarse en cada momento a las circunstancias del mercado.
Les doy mi opinión y les expongo una serie de reglas muy sencillas:
i) Un día sin movimiento y estando lateral el mercado es preferible no utilizar el
MACD (ni ningún indicador tendencial para evitar señales falsas). Para saber cuándo
salimos de la lateralidad y poder utilizar el indicador habrá que utilizar otras herramientas
técnicas, como por ejemplo que el precio rompa un soporte o resistencia, una directriz, un
canal, un rectángulo.
ii) Se utiliza la modalidad rápida del MACD si en la sesión hay movimientos
interesantes. Cuando digo interesantes me refiero a que el rango de movimiento del precio
sea alegre, que suba o que baje con cierta velocidad. Este es un tema que con el tiempo y
la experiencia el analista técnico lo sabe perfectamente.
iii) Se utiliza la modalidad lenta del MACD cuando el movimiento es contenido y
constante, con un ritmo regular, sin sobresaltos. Lo mismo que les acabo de decir, es un
tema que con el tiempo y la experiencia el analista técnico lo sabe perfectamente.
Señales de sobrecompra y de sobreventa
El MACD no es un indicador confeccionado para detectar niveles de sobrecompra o de
sobreventa (como sí sucede con el RSI y el Estocástico), ya que la representación gráfica
del MACD no presenta líneas por arriba ni por abajo, tan solo la línea central.
En cambio, hay analistas que lo adaptan, de manera que localizan los extremos en la
gráfica, es decir, los techos y suelos. De ésta manera, cuando el MACD llega a un máximo
significativo, se debería de estar alerta por si la sobrecompra hace caer al precio, y
viceversa, cuando el MACD llega a un mínimo significativo atentos por si la sobreventa
hace subir al precio.
Por tanto, cuando el indicador MACD se encuentra en un extremo inferior se puede
considerar que hay sobreventa, hecho que debe de poner sobre aviso al analista técnico por
si la cotización del mercado se va a girar de bajista a alcista, por lo menos en el corto
plazo.
Viceversa, cuando el indicador MACD se encuentra en un extremo superior se puede
considerar que hay sobrecompra, hecho que debe de poner sobre aviso al analista técnico
por si la cotización del mercado se va a girar de alcista a bajista, por lo menos en el corto
plazo.
Señales con divergencias
Se producen cuando el indicador MACD está indicando una cosa y la cotización del
mercado otra diferente.
Si el MACD refleja una señal alcista y el mercado está cayendo, seguramente el precio
podría girarse al alza, aunque no tiene que ser al instante, sino que es una alerta para el
analista técnico.
Por el contrario, si el MACD refleja una señal bajista y el mercado está subiendo,
seguramente el precio podría girarse a la baja, aunque no tiene que ser al instante, sino que
es una alerta para el analista técnico.
En cambio, en este gráfico tenemos el mismo ejemplo pero con la representación del
MACD en forma lineal. En primer lugar, la línea continua cruza a la baja la línea
horizontal (recuadro) y este hecho implica que las medias móviles exponenciales en el
gráfico se han cruzado a la baja (círculo), generando señal de caídas.
Posteriormente, tras finalizar el impulso bajista, la línea continua cruza al alza la línea
horizontal (recuadro) lo que significa que las medias móviles exponenciales en el gráfico
se han cruzado al alza (círculo), generando señal de subidas.
Mi opinión en lo referente a la representación gráfica del MACD es que si se utiliza la
modalidad lenta es más sencillo de ver con la representación de barras, en cambio si se
opta por la modalidad rápida es más intuitiva la representación lineal.
De todas formas, es un tema secundario, ya que queda a expensa de la preferencia visual
de cada analista técnico.
INDICADOR ADX
Es un indicador de Movimiento direccional (DMI) porque mide o calibra la esencia
misma de la tendencia que tiene el mercado.
El indicador se compone de tres líneas, DMI+ DMI- ADX. Se corresponden con el
movimiento direccional positivo, el movimiento direccional negativo y el movimiento
direccional resultante de los dos anteriores.
Se puede decir que el análisis técnico se realiza con el DMI+ y el DMI- y el ADX
serviría como corroboración, aunque algunos autores optan también por utilizar el ADX de
manera independiente.
La configuración tradicional de 14 días es generalmente la más aceptada por la mayoría
de la doctrina.
Se recomienda que utilizar colores o diferencien cada una de las líneas, de cara a no
cometer errores. En este gráfico se puede ver
La regla general es que si el DMI+ está por encima del DMI-, la tendencia del mercado
es alcista. Por su parte, si el DMI+ está por debajo del DMI-, la tendencia del mercado es
bajista.
La señal de compra surgiría cuando el DMI+ cruce por encima y en dirección
ascendente al DMI-.
La señal de compra se producirá cuando el Parabólico SAR se mueva por debajo del precio del
mercado. Si dicho precio comienza a caer, el indicador también comenzará a bajar pero por
encima del precio y no confirmará señal de compra hasta que vuelva a situarse por debajo de la
cotización del mercado.
Señal de compra cuando el SAR se mueva por debajo del precio del mercado, se puede seguir
comprado mientras esta situación se mantenga vigente.
En el gráfico se tiene señales de compra con el Parabólico SAR.
Comienza apareciendo la línea de puntos por debajo del precio, dando una primera señal de
compra (recuadro). Posteriormente avisa de un pequeño recorte con un leve Parabólico por
encima del precio y acto seguido aparece otra vez por debajo del precio para continuar con la
subida.
En el gráfico presenta ejemplos de señal de venta con el Parabólico SAR. Comienza
apareciendo la línea de puntos por debajo del precio, dando una primera señal de venta
(recuadro). Posteriormente avisa de un pequeño rebote con un leve Parabólico por debajo del
precio y acto seguido aparece otra vez por encima del precio para continuar con la caída.
También se utiliza como señal de compra cuando el precio toca la banda inferior buscando el
rebote al alza. Esto es debido a que parte de la doctrina considera que cuando el precio toca la
banda inferior de Bollinger el mercado está sobrevendido y puede rebotar al alza.
En el gráfico se aprecia cómo el precio toca la banda inferior de Bollinger (círculo) y rebota al
alza, hecho que unas velas después queda confirmado con la rotura al alza de la media móvil
simple.
La señal de venta se produce cuando el precio cruza a la baja la media móvil simple y se
mantiene por debajo de ella.
En el gráfico el precio cruza a la baja la media móvil simple, confirmando dicha ruptura con el
consiguiente filtro de confirmación como es el pullback. A partir de ese momento se activa la
señal de venta y el precio comienza a caer.
También se utiliza como señal de venta cuando el precio toca la banda superior buscando el
rebote a la baja. Esto es debido a que parte de la doctrina considera que cuando el precio toca la
banda superior de Bollinger el mercado está sobrecomprado y puede rebotar hacia abajo.
En el gráfico se aprecia cómo el precio toca la banda superior de Bollinger (recuadro) y rebota
a la baja, hecho que unas velas después queda confirmado con la rotura de la media móvil simple.
Envolventes
Está formado por unas líneas o bandas que se encuentran por encima y por debajo de una
media móvil en función de un porcentaje que se elige basándose en la volatilidad.
Alrededor de la media móvil aparecen las bandas que van moviéndose de forma paralela a
dicha media móvil, manteniendo una distancia con ésta.
La doctrina coincide en que se puede utilizar una media móvil cuyo periodo es de 30 días y
bandas del 12%.
Una regla aceptada es que si la volatilidad se incrementa también conviene incrementar el
porcentaje de distancia de las bandas, y al revés, si la volatilidad se reduce.
La señal de compra se producirá cuando el precio alcanza o supera la banda inferior. Este
hecho ha de poner en alerta al analista técnico por si se produjese un giro en la dirección del
precio, de bajista a alcista, aunque sea en el corto plazo. En realidad tiene su fundamento en que
el precio se encuentra en niveles de sobreventa cuando llega a la banda inferior.
El gráfico presenta un ejemplo donde se puede ver fácilmente las tres señales de compra que se
producen cuando el precio alcanza o pierde la banda inferior.
La señal de venta se producirá cuando el precio alcanza o supera la banda superior. Este hecho
ha de poner en alerta al analista por si se produjese un giro en la dirección del precio, de alcista a
bajista, aunque sea en el corto plazo. Tiene su fundamento en que el precio se encuentra en
niveles de sobrecompra cuando llega a la banda superior.
El gráfico presente un ejemplo donde se puede ver fácilmente las tres señales de venta que se
producen cuando el precio alcanza o supera la banda superior.
También habría otro tipo de señal de compra, cuando el precio cruza al alza la media móvil y
se mantiene por encima de ella. Y en el caso de la señal de venta, cuando el precio cruza a la baja
la media móvil y se mantiene por debajo de ella.
Este último tipo de señales tendrían el problema de que si no hay una tendencia clara y firme,
podemos obtener señales falsas.
OBV
El indicador OBV hace confluir y relacionar la evolución del precio o cotización del mercado
con el volumen que se ha negociado.
Si hablamos de un mercado de acciones, el volumen se refiere al número de títulos que se
negocian en el periodo temporal del gráfico utilizado (en un día si el gráfico es diario, en 1 hora si
el gráfico es horario, etc).
Si nos referimos a los mercados de derivados, como los futuros y las opciones, el volumen se
refiere al número de contratos negociados en el periodo temporal del gráfico utilizado (en un día
si el gráfico es diario, en 1 hora si el gráfico es horario, etc).
Las reglas principales son:
- Si la demanda supera a la oferta, el precio del mercado en cuestión sube. De ahí que la
doctrina hable de volumen de la demanda cuando sube el precio
- Si la oferta supera a la demanda, el precio del mercado en cuestión baja. De ahí que la
doctrina hable de volumen de la oferta cuando el precio cae.
- Si el precio del mercado sube y el volumen es ascendente, lo normal es que la tendencia
alcista siga vigente y el precio continúa con la subida.
- Si el precio del mercado sube pero el volumen es descendente, hay bastantes probabilidades
de que la tendencia se esté agotando y el precio cada vez subirá con menos alegría y fortaleza,
hasta que irremediablemente caerá.
- Si el precio del mercado cae y el volumen es ascendente, seguramente la tendencia bajista
continúe activa y vigente, con lo que debiéramos de esperar más caída.
- Si el precio del mercado cae y el volumen es descendente, está advirtiendo de que la
debilidad del mercado podría estar llegando a su final y pronto podríamos asistir a la subida del
precio.
- Si el volumen no es ni ascendente ni descendente, no presenta ninguna relevancia para el
devenir del mercado.
La idea de este indicador es alertar al analista técnico de momentos o fases en el mercado en
los que se produce una acumulación o bien una distribución, hechos que suelen producir un giro o
cambio de tendencia del precio en cuestión.
Si el precio ha cerrado al alza, el indicador refleja el volumen total acumulado y se le añade el
volumen del día. Por su parte, si el precio ha cerrado a la baja, el indicador refleja el volumen
total acumulado y se le resta el volumen del día.
Si el precio del mercado sube respecto al día anterior, el volumen negociado ese día es
ascendente, es alcista. Si el precio del mercado cae respecto al día anterior, el volumen negociado
ese día es descendente, es bajista.
El gráfico presenta un ejemplo del indicador OBV
Es irrelevante el dato número que presenta este indicador, lo importante es ver la dirección y la
tendencia que presenta el indicador el OBV respecto a la del precio o cotización del mercado.
Una utilidad que presenta el indicador es que suele avisar al analista cuando el precio del
mercado está formando un suelo o un techo, y estos avisos suelen ser en forma de divergencias.
Una señal de compra tradicional será si el precio del mercado comienza a subir y va
acompañada dicha subida con un incremento de OBV. Como filtro de seguridad sería ideal
utilizar alguna otra herramienta técnica que complemente el giro al alza del precio, como romper
por arriba una resistencia, una directriz, un canal tendencial, un rectángulo, que se crucen las
medias al alza, etc.
En el gráfico se puede apreciar cómo pesenta una resistencia (recuadro), el precio comienza a
subir con incremento de OBV, esperamos a que el precio rompa por arriba la resistencia, cosa que
hace con más subida de OBV (círculo), confirmando el inicio de una tendencia alcista.
Una señal de venta sería si el precio del mercado comienza a caer y va acompañada dicha caída
con una caída de OBV. Como filtro de seguridad sería utilizar alguna otra herramienta técnica
que complemente el giro al alza del precio, como romper por abajo un soporte, una directriz, un
canal tendencial, un rectángulo, que se crucen las medias al alza, etc.
En el gráfico se aprecia como en un soporte (círculo), el precio cae al igual que OBV, se espera
que el precio rompa por abajo el soporte, cosa que hace con más caída de OBV (recuadro),
confirmando el inicio de una tendencia bajista.
Una señal de compra por divergencia alcista surgiría cuando el precio del mercado cae y
presenta descensos, pero el OBV está ascendiendo y subiendo. En este caso, se deberá de estar
atento porque hay posibilidades de que el precio se gire al alza.
En el gráfico se ve como el precio del mercado está cayendo y de pronto OBV comienza a
subir (directriz ascendente) mientras que la cotización sigue bajando (directriz descendente).
Posteriormente, el mercado se gira al alza y la divergencia alcista (positiva) dio sus frutos.
El stop se hubiese puesto varios pipos por debajo de la zona más alejada, en este caso, al ser
soportes, de la zona más baja. Este mercado es el Eur/Usd, de manera que el stop mínimo ha de
ser, para trading intradía, de 12-15 pipos. No saltó por poquito y empezó a subir con mucha
fuerza.
En el gráfico pueden ver el otro ejemplo de doble pivote, dos niveles, en este caso dos
resistencias, que están relativamente cerca una de la otra, pero que al no ser ya una distancia
pequeñita como en el anterior ejemplo, le doy el tratamiento de entrar vendido (corto) en la
primera zona, en la más cercana, con un stop pequeño, ya que no se puede asumir un stop de
varios pipos por encima de la segunda resistencia (la más alejada).
Si saltase el stop no pasa nada, primero porque es pequeñito y el riesgo era muy bajo, segundo
porque la espero en la segunda resistencia para volver a entrar vendido (corto).
CONSEJO: si la distancia entre las dos zonas es amplia, se operan como dos niveles
independientes, entrando en ambos.
Si la distancia es relativamente cerca, se trabaja como doble pivote por las ventajas expuestas,
además de que de esta manera no se asume más riesgo económico y a cambio se incrementan las
posibilidades de que el precio nos coja la orden de entrada en la operación.
Elasticidad (Lax)
Esta estrategia se basa en que cuando hay tendencia en alguna dirección o bien un impulso en
alguna dirección, las medias móviles cortas (las exponenciales de 10 y 20) tienden a separase
entre sí, dejando un hueco libre.
Los sucesivos toques del precio a la media exponencial de 10 van a suponer un rebote en
contra, pudiéndose aprovechar.
Es una estrategia tendencial, ya que consiste en que habiendo una tendencia o un impulso, el
precio va buscando un pequeño descanso en la media de 10 antes de reanudar y proseguir su
tendencia.
Los requisitos para que se dé la elasticidad son los siguientes:
- Que las medias de 10 y de 20 exponenciales estén separadas entre sí, ya que cuanto más
juntas estén más lateral estará el mercado. Así pues, cuanto más separadas estén entre sí mucho
mejor.
- Que la dirección de las medias coincidan con la entrada que se quiere hacer. Si buscamos un
largo (compra) en elasticidad, las dos medias han de estar alcistas y con inclinación vertical al
alza. Lo contrario si se quiere entrar cortos.
- Que se venga de un impulso alcista o bajista, cuanto más fuerte mejor.
- Que haya secuencial. Significa que no se venga de un lateral cuando al final se toca la media
de 10, ya que en tal caso no es el precio el que llega a la media sino que es la media la que llega
al precio. Que el precio toque la media exponencial de 10 porque hay un impulso y no porque se
esté en lateral, es la media la que se va acercando al precio hasta que lo toca.
- Que vengamos de un nuevo máximo o mínimo del día.
Consideraciones al respecto:
* Los inversores conservadores sólo deberían entrar en el primer toque de cada elasticidad,
los agresivos en todos los toques (siempre que previamente se venga de marcar un nuevo mínimo
o máximo intradiario).
* Los objetivos han de ser pequeños, ya que por regla general no son proyecciones elevadas.
Primer objetivo mínimo como el stop.
* En muchas ocasiones, toca la primera media corta, la pierde y va a la siguiente media corta
(la exponencial de 20) donde rebota.
* El stop ha de colocarse varios pipos tras la media exponencial de 20.
* Conviene entrar con orden limitada al menos 1 pipo antes, aunque agresivos tendrían
preparada orden a mercado para asegurarse que se la coge.
* Para intradía utilizar el gráfico de 15 minutos. Para plazos mayores el gráfico diario.
* Cuando el precio cambie su tendencia nos saltará el stop. Con esta estrategia se sigue la
tendencia aprovechando los retrocesos y apoyos en la media móvil exponencial 10 para
reincorporae a la dirección correcta, cuando haya un cambio de tendencia esa entrada será
negativa.
Conviene diferenciar entre elasticidad tipo A y elasticidad tipo B. Serán elasticidades de tipo A
aquellas cuyos requisitos comentados anteriormente sean más fuertes y exagerados. Por ejemplo,
cuanto más separadas las dos medias mejor, cuanto mayor verticalidad de las medias mejor.
El gráfico se puede ver un ejemplo de LAX. Hay tendencia, en este caso alcista.
Las dos medias exponenciales están al alza, siguiendo la tendencia. Ambas medias presentan
un buen grado de verticalidad. Cada toque a la media de 10 viene precedido de marcar un nuevo
máximo intradiario. La media 20 sirve de colchón y apoyo cuando la media de 10 es levemente
perdida.
CONSEJO: al ser una estrategia tendencial, hay que estar atentos para saber si se está ante un
posible cambio de tendencia o no.
No se trata de entrar siempre que el precio toque la media exponencial 10, ya que habría
muchas entradas a lo largo del día y a nada que no hubiese tendencia serían erróneas.
Es fundamental exigir el cumplimiento de los requisitos, de cara a minimizar el riesgo o la
posibilidad de que no funcione alguna entrada como esperábamos.
By Pass
Consiste en buscar un giro de mercado, un punto donde se agota un impulso y el precio
comienza a girarse en contra, creando un suelo o un techo de mercado.
Se han de cumplir una serie de requisitos:
* El precio ha de estar en máximos o mínimos del día (no es obligatorio pero sí aconsejable).
* El precio ha de estar en una zona de opción de rebote, es decir, en un soporte o resistencia.
* Tiene que haber 2 velas seguidas de diferente color. Es decir, si se está en máximos del día
hay que tener una vela alcista y una bajista, en mínimos de día hay que tener una vela bajista una
alcista. Es la vela que toca el soporte o la resistencia desde la que hay que empezar a buscar las
dos velas consecutivas de color opuesto.
* La tercera vela ha de abrir dentro del rango de las 2 velas anteriores, no puede abrir ni en
máximos ni en mínimos del día.
El stop loss se coloca mínimo 2 ticks por encima del máximo del día o por debajo del mínimo
del día, según sea el By Pass alcista o bajista. Esta estrategia requiere del uso de stop trailing
(stop ganadores), ya que los objetivos han de ser mayores que el stop loss, de manera que cuando
se vayan ganando unos buenos pipos se coloca el stop ganador.
Los By Pass, al formarse en zonas de soporte o resistencia, implica que cuando se formen se
debe estar previamente dentro de una operación, ya que se supone que entramos cortos o largos al
llegar el precio a una de las zonas trazadas (soporte o resistencia). El precio llega a un soporte o a
una resistencia (lo ideal es que sea medio fuerte o fuerte) y entro comprado (largo) si es un
soporte o vendido (corto) si es una resistencia. Una vez que se entra, si se cumplen los requisitos
y se activa el patrón By Pass se estará confirmando que la posición puede ser interesante.
En estos casos se utiliza la formación del By Pass como confirmación de la entrada, apoyaría el
largo o el corto que hizo en la zona o puede servir para incrementar la posición.
Si se entra en la zona con 1 contrato y después se forma un By Pass, se puede entrar en este
momento con 1 contrato más, ya que la formación del By Pass puede estar avisando de un cambio
de tendencia del mercado.
Los By Pass tienen más o menos fuerza en función del tipo de zona en la que se producen, si se
da en un soporte o resistencia medio-fuerte o fuerte, el By Pass tendrá, a priori, la misma fuerza.
En cambio, si la zona es débil y pequeña, el By Pass será de riesgo.
El gráfico presenta un ejemplo de By Pass. El precio llega a una zona de resistencia que se
puede observar que era fuerte. Al tocar dicha zona se entra vendido (corto). Una vez dentro se
cumplen los requisitos y se activa el By Pass, que al estar apoyado en una resistencia es un By
Pass bajista que confirma la entrada previa en la resistencia.
Se cumplen los requisitos para By Pass: se forma una zona (en este caso en una resistencia).
Hay dos velas seguidas de diferente color (una blanca que es la que toca la resistencia y la
siguiente que es negra). La apertura de la siguiente vela es dentro del rango de las dos anteriores,
no abre por encima del máximo de dichas velas.
CONSEJO: es un complemento de la estrategia Zonal. La idea a tener en cuenta es que si la
estrategia Zonal nos da una señal de entrada, se entra. Una vez dentro, si la estrategia By Pass da
señal, es la confirmación de que la entrada previa es correcta.
Zonal
Se basa en la operativa con soportes y con resistencias, con niveles y zonas donde se espera un
rebote en contra de la dirección del precio.
Resaltar que no se busca un giro de mercado o un cambio de tendencia, sino un rebote en
contra de la tendencia o impulso vigente.
Se Utiliza dos tipos de zonas que las denominadas A, a. Las zonas de tipo A son más sólidas y
fiables. Las zonas de tipo a son débiles, por lo que el riesgo se incrementa. La idea es entrar largo
(compra) en un soporte tipo A, o entrar corto (vendido) en una resistencia tipo A.
Si el soporte o bien la resistencia son del tipo a, al ser de más riesgo, entrar con menor
apalancamiento (menos números de contratos), de manera que se asume un mayor riesgo se
compensa con un menor apalancamiento.
Si una zona del tipo a tiene prácticamente al lado algo que la refuerce, como un nivel Fibonacci
o bien una de las medias móviles que se utilizan (la simple de 200 y las exponenciales de 10,20 y
50) la probabilidad de que pueda actuar y funcionar bien, casi como una zona del tipo A, se
incrementan.
¿Cómo trazar un soporte y una resistencia? donde acaba un impulso y se inicia un impulso en
sentido contrario. Ejemplo de cada zona.
El gráfico presenta un ejemplo de un nivel de soporte de tipo A. Hay un impulso bajista y al
terminar comienza un impulso alcista. Donde termina el bajista y comienza el alcista, se traza un
nivel de soporte.
Esta zona de soporte es de tipo A porque tanto el impulso bajista previo como el impulso
alcista posterior son grandes, tienen un buen rango de pipos.
El gráfico presenta una zona de resistencia de tipo A. Se observa como tras un impulso alcista
éste se acaba y gira, comenzando un impulso bajista. En la zona donde acaba el impulso alcista y
se inicia el impulso bajista se traza la zona de resistencia. El precio llegó y se entra corto
(vendido). Una vez dentro, se activa un By Pass bajista que corrobora la entrada.
Es una zona de resistencia de tipo A porque tanto el impulso alcista como el posterior impulso
bajista tienen un buen rango de pipos.
Ahora, dos ejemplos de soporte y resistencia de tipo a, de más riesgo al ser niveles más débiles.
El gráfico presenta un ejemplo de nivel de resistencia de tipo a, que funcionó muy bien, no deja
de tener riesgo al ser una zona más débil.
Se observa que tanto el impulso alcista que comienza y que acaba, así como el posterior impulso
bajista son de poco movimiento, de poco rango de pipos.
El gráfico presenta un nivel de soporte de tipo a debido a que el impulso bajista como el
posterior impulso alcista tienen rangos de escasos pipos, es una zona de tipo a de riesgo, pese a
que haya funcionado bien.
Una zona se anula y deja de existir cuando una vela abre por encima o por debajo. Si se tiene
un soporte y una vela abre por debajo del soporte, se borra dicha zona. Si se tiene una resistencia
y una vela abre por encima de la resistencia, se borra dicha zona.
El concepto de primera oportunidad. No es una estrategia en sí misma, sino de un concepto que
básicamente se aplica a los soportes y a las resistencias, así como a Lax (elasticidad).
El concepto es sencillo y efectivo. Para las zonas (soportes y resistencias), la primera vez en el
día que el precio llega a un soporte o a una resistencia se entra. Si hoy vuelve a llegar otra vez,
por ejemplo 2 horas después, ya no se entra. Si dicha zona sigue vigente (por ninguna vela ha
abierto por encima, si era resistencia, o por abajo, si era soporte, para el día siguiente, sí se entra
porque sería primera vez en ese día.
Una zona se da por tocada (aunque no nos coja la orden de entrada y no haya terminado el
precio de tocar o de llegar al nivel) cuando se queda a muy pocos pipos de tocar la zona y realiza
ya el rebote.
Si se habla de operativa intradía, la entrada mediante orden limitada se coloca 1-2 ticks antes
de la zona, de esta manera se evita que la horquilla (spread) impida muchas veces coger la orden
de entrada pese a llegar el precio a la zona.
En lo relativo al stop loss de protección, en intradía se pueden utilizar los stops estándar. Desde
el año 1.999 vengo estudiando mediante un estudio estadístico cuáles son los stops ideales para
cada mercado, en el sentido de que si se ponen más pequeño saltarán y si salta el stop estándar la
mayoría de las veces el precio seguirá yéndose y no se pierde más capital.
Los stops loss estándar para intradía seran los siguientes:
- S&P500: el stop mínimo ha de ser de 8-9 pipos (de 1350 a 1351,25 son 5 pipos, ya que va
de 0,25 en 0,25).
- Eurostoxx: el stop mínimo ha de ser de 7-8 pipos (de 2300 a 2305 son 5 pipos).
- Dax: el stop mínimo ha de ser de 10-12 pipos (de 7300 a 7305 son 5 pipos).
- Bund: el stop mínimo ha de ser de 8-10 pipos (de 144 a 144,05 son 5 pipos).
- Divisas: el stop mínimo ha de ser de 12-15 pipos (de 1,3010 a 1,3015 son 5 pipos)
Para fijar objetivos de salida, se basa en lo siguiente:
* Como mínimo se intenta que el objetivo sea igual que el stop, de esta manera la proporción
es 1:1, una operación negativa se recupera con una operación positiva.
* Los niveles de Fibonacci me sirven muy bien como objetivos de salida, así como cualquier
soporte o resistencia que haya.
* Las cuatro medias móviles (simple de 200 y exponenciales de 10, 20 y 50) también son
válidas como referencias de salida.
CONSEJO: sirve sobre todo como punto de entrada, aunque como salida también es
interesante. La idea es primero calcular los soportes y las resistencias. Acto seguido ver si es
sólido o es débil.
Si es sólido se entra, si es débil sólo entro si tiene apoyo de Fibonacci o de medias móviles.
Sólo entrar en primera oportunidad, salvo que haya Boomerang
Los stops con los tipos estándar es suficiente, en momentos de volatilidad más fuerte de lo
habitual, conviene ampliar algo más los stops, al igual que los objetivos, para mantener la
paridad1:1).
Boomerang
Es un complemento de la Estrategia Zonal. Uno de los principios básicos de la Estrategia Zonal
era la primera oportunidad, que solo se entraba en una zona la primera vez que llegara en el día.
La Estrategia Boomerang permite aprovechar las zonas para poder entrar y operar aunque ya
no sea primera oportunidad, siempre y cuando cumpla un requisito: que venga de tocar
previamente un soporte o una resistencia (incluso podría valer también que venga de hacer un
nuevo mínimo o máximo del día).
Habiéndose hecho la primera oportunidad en el día comprando en un soporte. Horas después el
precio, tras subir, llega a una resistencia y x tiempo después vuelve a bajar y toca de nuevo el
soporte, siendo ahora segunda oportunidad. Como viene de tocar una resistencia se tiene un
Boomerang, de manera que se puede volver a comprar pese a no ser ya primera oportunidad.
Lo mismo sucede en el caso de un corto en una resistencia, ha de venir de un soporte antes de
realizar segunda oportunidad.
CONSEJO: es interesante estar atentos para ver si se cumple Boomerang, ya que nos permitirá
poder aprovechar niveles de zonas nuevamente, pese a no ser primera oportunidad.
Rotura de niveles
Cuando el precio está superando una resistencia o bien está perdiendo un soporte, se abre una
oportunidad operativa de entrar a favor de la tendencia. El problema surge cuando entrar, porque
se tiene miedo de entrar en máximos o en mínimos, según se hable de romper una resistencia o un
soporte.
Se, aplican dos criterios:
- Si la rotura es rápida, con una vela grande, se entra (con una orden a mercado, no una orden
limitada). Se hace para no perder el movimiento, porque ha pasado algo o las manos fuertes
tienen interés en ventilar dicha zona. El stop se pone con varios pipos por debajo de la resistencia
superada o por encima del soporte perdido.
- Si la rotura está siendo a un ritmo normal, se espera a ver si da la oportunidad de que haga
un pullback. Si el precio supera una resistencia que está en 6500, empieza a subir y ya va por
6512, a un ritmo normal, espero a ver si baja a 6500 para entrar largo (comprado). En el caso de
estar perdiendo un soporte, por ejemplo en 5400, y ya baja a un ritmo lento a 5385, espero a ver si
sube a 5400 para entrar corto (vendido).
Un throwback es cuando se supera una resistencia y antes de irse hacia arriba el precio de
manera definitiva, vuelve hacia abajo para tocar esa resistencia (que ahora pasaría a ser soporte) y
rebota en dicha zona para acto seguido irse definitivamente al alza.
Lo mismo cuando se pierde un soporte, el pullback sería que antes de irse hacia abajo, el precio
sube y toca el soporte perdido que ahora pasa a ser resistencia, rebotando en dicha zona y
yéndose hacia abajo.
CONSEJO: aquí la clave es si la rotura de la zona es con velocidad y fuerza o bien es a un
ritmo normal, ya que en base a este hecho entraré rápidamente con orden a mercado en dirección
del movimiento, o bien esperaré a ver si se produce un pullback.
Tiki Taka
Esta estrategia se aconseja para inversores con más experiencia y curtidos en el trading. Las
reglas son:
- Estar en mínimos del día o en máximos del día.
- Si está en mínimos, hay una vela negra y a continuación una vela blanca. Si se está en
máximos del día hay una vela blanca y luego una vela negra.
- En el ejemplo del mínimo del día, si la siguiente vela abre por encima del mínimo de la vela
blanca anterior, se entra. En el caso de máximos del día, si la siguiente vela abre por debajo del
máximo de la vela negra anterior, se entra.
- En el caso del mínimo del día, el stop se situará por debajo del mínimo de las dos velas
anteriores (vela negra y vela blanca). En el caso del máximo del día, el stop se coloca por encima
del máximo de las dos velas anteriores (vela blanca y vela negra).
- El objetivo primero ha de ser igual que el stop.
En el gráfico el precio está en mínimos del día, se forma vela negra y luego vela blanca, la
apertura de la siguiente vela es por encima del mínimo de las dos velas anteriores (negra y
blanca). El stop se coloca por debajo del mínimo de las dos velas previas. El objetivo ha de ser
igual al stop.
En el siguiente gráfico ejemplo doble, por un lado una señal alcista como la explicada
anteriormente, y por otro lado, el caso contrario, una señal bajista.
CONSEJO: esta estrategia es arriesgada, solo apta para inversores con experiencia. Como
ventajas tiene que ofrecer varias señales cada día y sobre todo que la gestión monetaria y de
riesgo es muy controlada, se asumen stops pequeños (no cometer el error de apalancarse porque
entonces puede ser un suicidio).
En gráficos de 15 minutos es preferente, pero observar el de 5 minutos por si les interesa más.
Como último apunte, decir que hay un caso en el que también se utiliza aunque no se esté en
máximos o en mínimos del día. Cuando viene el precio de hacer un impulso alcista o bajista de
cierto rango de movimiento, grandecito, con lo que si cumple los otros requisitos, podría entrar.
En el gráfico se junta doble techo, nivel de resistencia, By Pass. Tras la tendencia alcista se
forma un doble techo y una zona de resistencia que al ser tocada genera señal de venta (corto).
Además, es corroborada por un By Pass bajista.
En el gráfico se junta Lax (elasticidad) con nivel de soporte. Se ve como se inicia una
tendencia bajista, cumpliéndose todos los requisitos para que surja la oportunidad por Lax. Hasta
7 señales de continuidad bajista se aprecian en el impulso bajista.
Finalmente, el precio llega a un nivel de soporte donde es momento de dejar de pensar en venta
(corto) y pasar a comprar (largo).
Recuerden que las zonas tienen preferencia sobre Lax, de manera que si se entra en una zona
(soporte o resistencia) y hay un Lax cerquita, no se entra en ese Lax.
Patrón de 3 días
Es un patrón chartista que suele resultar muy interesante de cara a intentar corroborar un giro
de tendencia de manera rápida, cuando se está iniciando y no cuando ya lleva un buen recorrido
realizado. Es una técnica utilizada en Estados Unidos.
Este patrón aparecería cuando hay 3 días consecutivos sin mucho volumen ni rango de
movimiento y el cuarto día se produce un movimiento fuerte.
- Giro de alcista a bajista: en una tendencia alcista, el mínimo de la cuarta vela (del cuarto día)
ha de estar por debajo de los mínimos de las velas de los tres días anteriores.
El máximo ha de estar por debajo de los máximos de los tres días anteriores.
El cierre ha de estar por debajo de la apertura y del cierre de los tres días anteriores.
- Giro de bajista a alcista: estamos en una tendencia bajista, el máximo de la cuarta vela (del
cuarto día) ha de estar por encima de los máximos de las velas de los tres días anteriores.
El mínimo ha de estar por encima de los mínimos de los tres días anteriores.
El cierre ha de estar por encima de la apertura y del cierre de los tres días anteriores.
El gráfico presenta un ejemplo de este patrón provocando un giro de bajista a alcista.
CONSEJO: es un patrón para buscar posibles giros de los mercados. Las confirmaciones
ayudan a mejorar, de manera que si la formación de este patrón viene acompañada de un soporte-
resistencia, de un nivel Fibonacci, de medias móviles, de By Pass, etc, su seguridad o fiabilidad
cobrará aún mayor fortaleza.
Pivots Points
Es una herramienta utilizada por los traders americanos para detectar zonas del precio donde se
espera un rebote. Los pivots points marcan niveles o zonas semejantes a los soportes y a las
resistencias tradicionales.
Cálculo:
M: máximo del día anterior
L: mínimo del día anterior
C: cierre del día anterior
P: pívot central
- En primer lugar se calcula P (el pívot central) siendo la suma de M+L+C y todo dividido
entre 3. La fórmula es: (M+L+C) / 3 = P
Una vez se tiene el valor de P (pívot central) se calculan los 2 soportes y las 3 resistencias con
las siguientes fórmulas matemáticas:
- Primera Resistencia: P+ (P-L)
- Segunda Resistencia: P+2(P-L)
- Tercera resistencia: M+2(P-L)
- Primer Soporte: P-(M-P)
- Segundo Soporte: P-2(M-P)
- Tercer Soporte: L-2(M-P)
Funcionan mejor para operar intradía
Las abreviaturas universales son R para resistencia y S para soporte, de manera que con los
Pívots Points tenemos R1, R2, R3 y S1, S2, S3.
Estos niveles hay que usarlos al primer toque, una vez lo toque y rebote, se anula y se olvida la
zona. Si el rebote se produce un poco antes de la zona también se anula. En ambos casos se
espera ya al siguiente nivel.
Los 6 niveles, los más seguros y fiables son R1, R3 y S1, S3.
Para calcular las zonas se requiere de datos del día anterior, si la sesión anterior se movió muy
poco significa que tendremos zonas para el día siguiente muy juntas y cercanas, lo cual aumenta
bastante el riesgo.
CONSEJO: los pívots points pueden cumplir perfectamente la función de los niveles
Fibonacci, tanto en lo referente a ser posibles puntos de entrada como de salida y como refuerzo
de otros puntos de entrada. Si se ha de elegir entre Fibonacci y Pívots Points, prefiero sin duda
alguna Fibonacci, suelen tener una fiabilidad y nivel de acierto mayor.
Set-Ups
Los set-ups son patrones de precios que ofrecen oportunidades de operar al alza y a la baja en
cualquier plazo temporal.
Los Set-Ups están formados por grupos de velas de entre 3 y 5.
- 5BHL: está formado por 5 velas consecutivas. El patrón al alza es un máximo más alto que
los dos máximos de las velas anteriores y más alto que las dos velas siguientes. Se entra un tick
por encima o por debajo del nivel del set-up.
- 35BDU: está formado por entre 3 y 5 velas, se basa en que tras una tendencia fuerte se
produce un movimiento contrario de entre 3 y 5 velas como máximo.
Hay que tener en cuenta los requisitos siguientes a partir de la segunda barra:
* El cierre de la vela actual está por debajo del cierre de la vela anterior.
* El cierre de la vela actual está por debajo de la apertura.
* La apertura de la vela actual se encuentra cerca de los máximos del día.
* El cierre de la vela actual se encuentra cerca de los mínimos del día.
Se entra comprando o vendiendo un tick por encima del máximo de la vela 3, 4 ó 5, siempre y
cuando cumplan las anteriores condiciones, como es obvio.
- NR4IB: está formado por 4 velas y la última vela ha de cumplir unos requisitos.
* Ha de tener el rango más estrecho de las 3 velas que le preceden.
* El máximo y el mínimo de la última vela ha de quedar dentro de la vela anterior.
Se Compra o vende un tick por encima o por debajo del máximo o del mínimo de la vela 4.
CONSEJO: Cada Set Up tiene sus requisitos y son bastante sencillos y objetivos. Lo ideal es
que primero lo observen desde fuera y sólo si se adapta a su filosofía y estilo de inversión pues
entonces utilizarlos e incorporarlos a su arsenal de herramientas de trading.
Triple X
- El patrón Triple X Down es una pauta de continuidad bajista que aparece tras una tendencia
bajista. Está formado por una vela negra de cuerpo grande seguida de varias velas de cuerpos
pequeños, generalmente blancos aunque alguno podría ser negro, que se desarrollan dentro del
cuerpo de la primera vela negra.
Tras esas velas de cuerpo pequeño surge de nuevo una vela negra de cuerpo grande que abre
por debajo del cierre de la anterior y cierra por debajo de todas las velas anteriores, incluida la
primera.
La fiabilidad de la última vela cerrando por debajo de todas es ellas es alta, pero la
confirmación es cuando la siguiente vela cierra por debajo.
- El patrón Triple X UP se produce tras una tendencia alcista donde surge una vela blanca
grande. Las velas que le siguen son pequeñas y deben de estar comprendidas en el cuerpo de la
primera gran vela blanca. El nombre de la formación se refiere a tres velas pero pueden ser dos o
más de tres. Tras estas velas surge de nuevo una gran vela blanca que indica posibilidad de subir.
La confirmación se produce cuando se superan los máximos de la formación de velas.
CONSEJO: estos patrones de continuidad tendencial pueden ser utilizados como refuerzo o
confirmación de sus señales de trading.
F1
Es una estrategia que para que sea útil y efectiva se requieren tres condiciones: aplicarla a un
mercado líquido, a un mercado que suela tener movimiento y volatilidad, que haya tendencia.
Si algunas de estas tres cuestiones no se producen, estaremos abocados a que la operación no
resulte satisfactoria.
Se parte de un gráfico pequeño, generalmente el de 2 minutos (pueden probar a optimizar en
otros gráficos, como 1 minutos, 5 minutos) y se colocan las medias exponenciales de 10 y 20
junto con el indicador Macd con los parámetros exponenciales siguientes: periodo1: 10, periodo
2: 20, periodo Sig: 9, Price Source al cierre.
La entrada sería cuando las medias exponenciales de 10 y de 20 se cruzan al alza (compra) o a
la baja (venta).
Una manera más fácil de ver cuándo se produce exactamente este hecho es mirar el Macd y
cuando la línea continua corta a la línea horizontal 0 es el momento.
El Macd no es más que un indicador que refleja cuándo dos medias móviles se han cruzado
entre sí.
Para la salida hay dos opciones, según seamos más conservadores o agresivos. Una salida es
cuando en el Macd las líneas continuas y discontinuas se cruzan entre sí en sentido contrario al de
nuestra operación. La otra opción es cuando en el Macd la línea continua corta a la línea
horizontal 0 en sentido contrario a nuestra entrada.
La diferencia entre los dos tipos de salida radica en que en el primer caso se sale antes que en
el segundo caso. Unas veces la primera opción tiene la ventaja de que antes de que se gire el
mercado estaremos fuera con buenos beneficios. La ventaja de la segunda opción es que si la
tendencia o movimiento es interesante, ganaremos mucho más que con la primera opción que nos
echará en cuanto se pare un poco el impulso.
El gráfico presenta un ejemplo claro de F1. Comienza un impulso bajista y las medias
exponenciales de 10 y de 20 se cruzan a la baja, como bien muestra el Macd la cortar la línea
continua a la línea horizontal 0. Podemos ver los dos tipos de salida en este mismo ejemplo.
La primera salida cuando en el Macd se han cortado al alza las líneas continuas y discontinuas.
La segunda salida cuando en el Macd la línea continua corta al alza a la línea horizontal 0.
Día interior
Un día interior es aquél día o sesión en que el máximo es menor que el máximo del día anterior
y el mínimo es mayor que el mínimo anterior. En un día interior, tanto el máximo como el
mínimo están dentro del rango del día anterior.
Generalmente implica un momento de consolidación y de menor volatilidad, hecho que suele
producir un cambio en la dirección del precio, pero no lo tomen como un dogma de fe.
La idea es que las causas que mantenían vigente el movimiento han terminado y en principio se
podría girar el precio. Tan solo otras causas diferentes podrían hacer que no se girase y siguiese
su curso previo.
CONSEJO: Es preferible compaginar esta estrategia con otras. Si el movimiento es alcista y
surge este patrón que indica que podría girarse el precio a la baja, mejor que lo confirme el hecho
de que haya cerca una resistencia o un nivel Fibonacci por ejemplo.
Pin Bar
El patrón pin bar (pinocho) es una herramienta útil a buscar un giro del mercado, un cambio de
tendencia o de dirección del movimiento.
Este patrón está formado por tres velas, siendo la del medio de un tamaño mayor y que suele
dejar enganchados a muchos inversores.
Es la confluencia de varios factores o razones lo que hace que una estrategia de trading resulte
sólida, equilibrada y ganadora. Si además del patrón pin bar tenemos otro elemento adicional que
lo corrobora (soporte, resistencia, retrocesos Fibonacci, By Pass, doble pivote, medias móviles),
la fiabilidad será mayor.
Presenta la ventaja de que es indiferente el marco temporal del gráfico que se utilice, es decir,
se puede utilizar en gráficos de 5 minutos, de 15, de 30, de 60, diarios, etc.
Algunas características a que tener son:
– La mecha (sombra) de la vela central, la vela pinocho, cuanto más larga sea, mejor.
– El cuerpo de la vela, cuanto más pequeño sea, mejor.
– La apertura y el cierre de la vela pinocho, si están dentro del rango de la primera vela y de
la tercera vela (recuerden que este patrón son tres velas, siendo la vela central la vela pinocho con
una gran mecha o sombra), perfecto. También es válido que sólo esté dentro del rango de una de
las dos velas.
Si se está en un impulso bajista, la entrada de compra sería unos pipos por encima del máximo
de la vela pinocho, colocando el stop unos pipos por debajo del mínimo de la vela pinocho.
El gráfico se observa cómo se viene de un impulso bajista, se produce una vela con mecha
grande y cuerpo pequeño, cuya mecha es mayor que los mínimos de la vela anterior, y su rango
está dentro de la vela anterior.
Dientes de sierra
Los dientes de sierra o niveles de zigzag y de cómo se pueden aprovechar para operar en
cualquier mercado financiero con independencia del plazo temporal de la operación. Cuando
existe una tendencia definida, por ejemplo alcista, las subidas no suelen ser generalmente
verticales y sin descanso, sino que tras un impulso al alza se produce un pequeño descanso en
forma de retrocesos y acto seguido continúan las subidas.
La explicación de esto obedece a que cuando hay una subida, hay varios grupos de inversores
que están dentro comprados, grupos diferenciados básicamente por su timming temporal, por el
tamaño de su objetivo y stop, por lo que unos saldrán antes que otros.
Es precisamente este hecho el que origina que dentro de una subida, de pronto haya una pausa
y retrocesos, ya que un grupo de inversores ha decidido cerrar sus operaciones. Lo positivo es que
esta acción provoca una reacción, esa pausa y retroceso anima a su vez a otros grupos de
inversores a comprar aprovechando que el precio es más barato y que las condiciones alcistas no
han variado. La entrada de estos nuevos grupos de inversores provoca de nuevo subidas.
La clave es aprovechar estos dientes de sierra para entrar, para incorporarnos a favor de la
tendencia existente. Pero la pregunta importante es ¿cómo sabemos si todavía siguen vigentes las
causas que mantienen la tendencia? El temor o la duda de los inversores es que no vaya a ser que
entren creyendo que se incorporan a la tendencia a mejor precio y resulta que han entrado cuando
dicha tendencia ya ha finalizado y está cayendo.
La respuesta radica en los máximos y mínimos crecientes. En el gráfico hay señalados 4 puntos
(recuadros verdes) que son los 4 dientes de sierra, 4 niveles que se han formado dentro de una
tendencia alcista, retrocesos que acto seguido han permitido reanudar las subidas.
– En primer lugar hay que mirar la matriz, el primer punto de retroceso dentro de una
tendencia alcista. Todo lo que sea no perder este nivel implica fuerza alcista y ausencia de
debilidad.
– Pueden ver cómo no se perdió la matriz (se igualó, siendo un buen punto de compra la zona
A.
– Posteriormente pueden ver cómo los máximos son ascendentes (los círculos amarillos) y los
mínimos o dientes de sierra son ascendentes (recuadros verdes).
– Los dientes de sierra (matriz, puntos A, B, C, D) son ascendentes, confirma fuerza alcista,
nunca se perdió ninguno de ellos, de manera que nada de debilidad.
– Dichos puntos A, B, C, D son potenciales niveles de compra (recordando que el punto A es la
compra al coincidir con la matriz), al igual que cada vez que el precio rompe por arriba los
círculos amarillos.
– Pero no todos los dientes de sierra presentan, a priori, la misma fortaleza o fiabilidad. Hay un
requisito para saber si es una zona de diente de sierra interesante o en cambio implica más riesgo
del habitual: cuanto mayor es el rango de movimiento o el recorrido previo y posterior al diente
de sierra, más fiable será.
El punto A es fuerte y fiable porque todo el rango de movimiento previo (toda la caída desde el
punto 1 al punto A es un buen rango de extensión de movimiento) y todo el rango de movimiento
posterior (toda la subida desde el punto A al punto 2 es otro buen rango de movimiento) son de
un buen tamaño.
El punto C es el más débil y en teoría el de más riesgo, porque su rango de movimiento previo
(la caída desde el punto 3 al punto C) es pequeño, bastante más pequeño que en el ejemplo
anterior.
Pantallas temporales
No tiene nada que ver con la triple pantalla de Alexander Elder. No es una técnica propiamente
dicha, sino una forma de trabajar los gráficos de los diferentes mercados. Dos cuestiones hay que
tener en cuenta:
* Su utilidad reside en el intradía,
* Para no complicar el asunto, centrar el artículo en utilizar dos pantallas o gráficos.
Para intradía hay dos tipos de inversores:
– Intradía de corto plazo: en este apartado se encuentran aquellas operaciones que duran poco
tiempo, desde unos minutos hasta una hora más o menos. Los gráficos ideales suelen los de 5 y
15 minutos principalmente.
– Intradía (a secas): aquí estaríamos hablando de operaciones que duran más tiempo, un
mínimo de varias horas. Los gráficos más útiles son los de 15 y 30 ó 60 minutos.
La idea es que en los dos gráficos escogidos, se procede a trazar los niveles de soporte y de
resistencia, tanto los que son fuertes como los que son débiles, también se trazan las medias
móviles que se utilicen, las zonas niveladoras y por último se dibujan los retrocesos Fibonacci
(aunque serán los mismos en ambos gráficos, porque los máximos y mínimos relevantes son
idénticos aunque se varíe la temporalidad).
Teniendo preparados los dos gráficos. Ejemplos:
A) Imaginen que en un gráfico tienen un soporte fuerte en 4250 y en el otro gráfico lo tienen
en 4250 también. Al coincidir en ambos, dicha zona, el soporte, queda reforzado, siendo un doble
motivo para entrar comprando.
B) Ahora tenemos en un gráfico un soporte en 4250 y en el otro gráfico está en 4262. Entrar
en el segundo tiene el riesgo de que rebote en el primero y perdamos la oportunidad, si entramos
en el primero tenemos el riesgo de que vaya al segundo y a nada que se pase un poco salte el stop
loss. Aquí se aplica la técnica del doble pivote.
C) Si el soporte de un gráfico está bastante distanciado del soporte del otro gráfico, ya no
sería doble pivote, se tratarían como dos soportes independientes, de manera que se entrarían en
cada uno de ellos.
D) Si tenemos un soporte o una resistencia que es pequeño en los dos gráficos, pero en un
gráfico coincide en la misma zona una de las medias móviles o Fibonacci, se refuerza y se puede
entrar.
En definitiva, como pueden ver, lo que se consigue es aprovechar niveles en varias
temporalidades (que están conectadas entre sí sin romper el horizonte temporal del inversor) y
también fortalecer un nivel que a priori no sería fuerte para entrar.
Fórmula Camarilla
La fórmula Camarilla, creada en el año 1989 por el Trader de Bonos Nick Stott, permite
obtener unos niveles similares a los pivots points.
Se basa en que el mercado tiende a volver casi siempre a un punto de equilibrio y mediante la
fórmula Camarilla podemos obtener 8 niveles de precios en los que es probable que se produzcan
puntos de giro.
Los niveles L1, L2, L3, L4 actúan como soportes, mientras que los niveles H1, H2, H3, H4
actúan como resistencias. De todos ellos, los niveles L3, L4, H3 y H4 son los más importantes.
Cuando el precio alcanza el nivel H3, se considera que es una resistencia muy fuerte por lo que
debemos entrar cortos en ese punto, situando un stop loss en H4. Si el precio cae hasta L3
debemos entrar largos en ese punto con stop loss en L4. Cuando se produce la rotura de los
niveles H4 y L4 debemos entrar largo si rompe H4, corto si rompe L4.
Existen varias alternativas a esta estrategia que dependerán del comportamiento de cada
mercado.
Fibonacci funciona mucho mejor, pero es interesante que se conozcan las herramientas técnicas
que existen a disposición del analista.
Consejos
- Todo sistema de inversión o estrategia ha de estar basado en un hecho objetivo, en una
premisa sólida y equilibrada. Eviten fundamentos abstractos, subjetivos y complejos de entender.
- Simplifiquen, no busquen el Santo Grial porque no existe, de manera que intenten utilizar
estrategias sencillas de entender y de aplicar, que cuando genere una señal no tenga que ser
interpretada, que sea muy claro y limpio todo.
- Siga el orden. No se salte pasos. Si no tiene aún claro cómo entrar en el mercado, no pase a
estudiar cómo salir o cómo gestionar el riesgo. Vaya quemando etapas y fases.
- No sean vagos. Si alguien les da una estrategia o ustedes la leen, por mucho que les digan que
funciona, pruébenla todo lo que sea necesario.
- Los mercados no son estáticos, sino que evolucionan. El trader ha de ser como un camaleón,
adaptarse a los cambios es la diferencia entre sobrevivir o morir. Estén atentos a los cambios de
los mercados y reajusten o adapten sus estrategias operativas a todo ello.
- Diversifiquen, no pongan todos los huevos en la misma cesta. Diversificando minimizan el
riesgo de la inversión. La diversificación puede ser entendida de dos formas:
* Invertir con las mismas estrategias en varios mercados diferentes (si son diferentes y
opuestos mejor aún).
* Invertir en un solo mercado pero con varias estrategias diferentes (tendenciales y contra
tendenciales).
- Ajusten el gráfico temporal de los gráficos según el timming de sus operativas y sus
horizontes temporales. Si van a realizar scalping no usen gráficos de 60 minutos, si van a realizar
trading intradía no usen gráficos de ticks, etc.
- Por una operación mala no salten de timming. Es decir, si han entrado por el motivo que sea
utilizando el gráfico de 15 minutos y se ha girado en contra, no pasen a mirar un gráfico superior
confiando que ahí verán algo que les diga que no pasa nada, que se girará a favor. Se entra y se
sale (para bien o para mal) con el mismo gráfico temporal.
- Entrar a todas las señales que de un sistema de trading o una estrategia está muy bien, pero
con el tiempo, con la experiencia, desarrollarán una especie de instinto especial que les servirá en
ocasiones de filtro para decidir no entrar en algunas.
- Hay un dicho que reza que cualquier sistema de trading es rentable si se lleva a cabo una
correcta gestión del riesgo. Una mala gestión del riesgo arruina el mejor sistema de trading.
- Habrán escuchado que lo importante en la operativa no es saber entrar, sino saber salir. Yo no
estoy de acuerdo con esta afirmación. Si se sabe entrar se podrá salir antes de tiempo pero se
ganará, menos, pero se ganará. En cambio, si no se sabe entrar pero sí salir, lograrán minimizar
las pérdidas, pero no ganarán.
- Utilicen las demos de los brokers sólo para aprender perfectamente el funcionamiento de la
plataforma (lanzar órdenes, modificarlas, anularlas, colocar un stop, etc). Nunca como barómetro
para saber si ya están listos para operar en real.
- Sólo se aprende a operar con dinero real. Es mucho mejor, aprender operando en real con
muy poquito dinero que con dinero ficticio.
- Aprenda todo lo que pueda por su cuenta como por ejemplo análisis técnico, análisis
fundamental, cosas generales. Para aprender todo eso no es necesario hacer cursos, son cosas
objetivas que pueden leer aprender con libros específicos.
El motivo de acudir a cursos ha de ser otro. Principalmente para ver cómo los profesionales
gestionan el riesgo, como controlan la psicología, para que les expliquen y enseñen trucos y
estrategias propias que utilizan para operar.
- Como en cualquier trabajo, pónganse un horario y respétenlo estrictamente. Sólo se trabaja y
se opera dentro de ese horario. No sean esclavos ni ludópatas.
- Las estadísticas dicen que el 80% de los inversores pierden el dinero que tenían destinado
para operar en el primer año de actividad y que el 95% fracasan. Sólo el 5% logran ganancias
consistentes y viven del trading.
¿Esto qué significa? Principalmente dos cuestiones:
* Que la psicología es el 80% del éxito, el 20% restante es el conocimiento y la experiencia.
Si no sirven mentalmente para esto mejor que abandonen.
* Que la metodología técnica y la filosofía que siguen para invertir no es la correcta. Si todas
las ovejas de un rebaño son pastos de los lobos, las siguientes que vayan por el mismo sendero
serán también asaltadas y devoradas, solamente aquellas que eligen un sendero o camino
diferente logran vivir.
- Lleven un cuaderno de trading. Esto ha de ser su biblia. Anoten cada día las operaciones que
realizan (dónde entran, dónde salen, dónde colocan el stop, porqué entran, por qué salen, día,
hora, mercado, sensación, comentario). Cada fin de semana cojan el cuaderno y lean todo lo que
escribieron durante la semana.
No se imaginan ustedes lo que llegarán a aprender de ustedes mismos, sus errores, miedos.
Tendrán, de una forma natural y objetiva, una visión perfecta de lo que hay que mejorar y cómo.
- Los stops loss o stops de pérdidas siempre se colocan, nunca han de ser mentales. Nada más
lanzar la orden de entrada ha de lanzar el stop. De esta manera estarán cubierto ante ventualidades
externas (se va la luz, se va internet, falla el ordenador) e internas (se les olvida que están dentro
del mercado, sucede algo y el precio se nos gira bruscamente en contra).
Los stops mentales, en primer lugar no evitan todos estos riesgos descritos. En segundo lugar,
cuesta mucho ejecutarlos, aunque en la cabeza tengamos muy claro dónde debemos de cerrar la
operación si llega el precio, la mayoría de las veces estaremos tentados de aguantar un poco más,
asumiendo un mayor riesgo y con ello mayores pérdidas.
- Tengan en cuenta el slippage. El slippage es la diferencia entre el precio de entrada que se
quiere y el precio real que finalmente les da su broker. Imaginen que tienen pensado comprar en
5,20, stop en 5,10, objetivo en 5,30 (paridad riesgo/beneficio 1:1). En cuanto llega el precio a
5,20 entran, pero puede ser que hayan obtenido la entrada en 5,21 ó en 5,22 (sobre todo si la
orden de entrada es a mercado), con lo que la rentabilidad riesgo/beneficio ya no es 1:1 puesto
que según esa entrada y el stop y el objetivo, ustedes irían a por un objetivo de 8-9 puntos pero
arriesgando 11-12 puntos.
- Un stop jamás se mueve, salvo en un caso y lo veremos enseguida. En efecto, si han
calculado correctamente la gestión de riesgo de una operación y la rentabilidad/riesgo (que nunca
baje de 1:1), el stop, una vez lanzado, no se modifica.
Tan solo hay una excepción a esta regla. Que vayan ganando x dinero en la operación y
conviertan el stop de pérdidas en stop de ganancias (stop profit, stop win, stop ganador). Por
ejemplo, compran en 5,20 con stop en 5,10. El precio comienza a subir y ya va por 5,32. Pues
modifican el stop subiéndolo de 5,10 a 5,22, de manera que si el precio bajase y llega a 5,22 no es
una operación perdedora, sino ganadora. A medida que el precio vaya subiendo, deberán de ir
subiendo el stop ganador y esa operación únicamente se cerrará cuando salte el stop.
- Piramidar es una técnica muy interesante, pero sólo si se utiliza correctamente, ya que en caso
contrario es sencillamente nefasta, la ruina. Piramidar ha de realizarse cuando el precio va a
nuestro favor y se va ganando en la operación.
De esta manera, si compramos en 5,20 con 4 contratos y ahora el precio ha subido a 5,30,
podemos añadir otro contrato más.
Jamás se debe de Piramidar cuando se va en negativo, lo que se conoce como promediar a la
baja. Muchos inversores lo hacen porque así van mejorando el precio promedio de entrada, pero
es que cada punto o céntimo que se vaya el precio en contra la pérdida es mucho mayor. Por
ejemplo, se compra en 5,20 con 4 contratos y el precio ha bajado a 5,10, con lo que metemos 2
contratos más de compra.
- Si intenta coger un cuchillo que está cayendo, lo más normal y lógico es que se corte y se
haga daño. Si un mercado está cayendo con fuerza es momento de estar vendido (corto), para
comprar es mejor esperar a que llegue a algún soporte sólido. No se compra sólo porque algo cae
con fuerza pensando que es barato ahora. Lo que es barato hoy puede ser caro mañana.
- Si se pierde el tren se espera tranquilamente sentado en la parada de la estación a que llegue
el siguiente y nos montamos. Si un mercado comienza a volar al alza y no hemos estado atentos y
por tanto no pudimos entrar, nunca hay que correr detrás de ese mercado, porque seguramente
llegaremos tarde y compraremos al final de la subida.
- ¿Avaricia, miedo? Son las peores cualidades de un inversor. Ambas son los extremos de una
balanza, extremos opuestos que le llevarán a perder su capital.
- El capital es la herramienta en este trabajo. Sin capital se acabó el juego, game over. Proteja
ante todas las cosas su capital y seguirá teniendo oportunidad de aprender a operar con éxito.
- Disfruten del trading y de invertir. Como todo en la vida, si no disfrutan con lo que hace, si
sólo lo hace por obligación y por necesidad económica, mal futuro les auguro. Salgan a la cancha
y disfruten, diviértanse, los resultados vendrán por sí solos.
- Asuman y reconozcan sus errores, no echen balones fuera. El ser humano tiende a
responsabilizarse únicamente de lo positivo, nunca de lo negativo. Cuando ganamos una
operación somos muy buenos, somos la leche de buenos. Cuando perdemos una operación no es
culpa nuestra, es que el mercado está manipulado, es que algo ha pasado en el mundo, es que ha
sido la mala suerte. Asuman que esta es una profesión de riesgo, donde las probabilidades, los
números y las matemáticas tienen un peso muy fuerte, donde no se puede ganar el 100% de las
veces, donde la clave reside en que cuando perdamos asumamos la pérdida como lo que es, una
pérdida, no pasa nada, ya llegará la ganancia.
- Operen a favor de la tendencia y solamente en contra de ella cuando el precio llegue a un
nivel potencialmente interesante para buscar un rebote, como puede ser un soporte sólido, un
nivel Fibonacci, etc.
- Antes de entrar en una operación no se pregunten cuánto pueden ganar, pregúntense cuánto
pueden perder y si se lo pueden permitir. Si la respuesta es afirmativa entren, si la respuesta es
negativa no entren.
- Si el mercado está lateral, apenas se mueve y sus sistemas de trading no genera ninguna señal
de entrada, no entren. Entretengan a la mente, que no se aburra, ya que si se aburre acabarán
entrando por entrar y ya saben qué sucede en esos casos.
- No se vuelvan ludópata, esto es un trabajo, una profesión, no un juego. El profesional lo que
hace es que calcula las probabilidades matemáticas (apalancamiento, gestión de riesgo, estrategia
de entrada, riesgo/beneficio) y sólo entra cuando los números y las matemáticas están a su favor.
Si sobre operan, el único que ganará dinero y estará muy feliz será su broker.
- Operen con un bróker serio y profesional.
Guerra de divisas
La guerra de divisas estaba sobre la mesa desde comienzos del 2013. Era un hecho, una
realidad cada día más palpable.
Cada vez eran más los países que abogaban por debilitar su divisa para fortalecer sus
exportaciones y reactivar sus economías. Algunos lo manifestaban abiertamente, sin tapujos.
Otros se lo pensaban. Y finalmente algunos estaban en stand by a la espera de ver cómo
reaccionar en función del movimiento de fichas del resto.
Es un tema delicado, porque entrar en un ciclo de devaluaciones entre divisas de varios países
lastraría a la economía mundial. Si un país deprecia su divisa para favorecer sus exportaciones
está perjudicando a las economías de otros países, que se enfadarán y harán lo mismo, entrando
en un bucle de consecuencias peligrosas.
El Banco de Japón lo manifestó públicamente, el Banco de Suiza lleva desde septiembre de
2011 haciéndolo (frente al euro), el Banco de Inglaterra se lo estaba pensando con la libra, el
gobernador del Banco de Corea confirmó que aplicaría medidas para estabilizar los mercados de
divisas si el yen seguía cayendo fuertemente y perjudicaba a las exportaciones coreanas.
Corrió el rumor de que el Banco de Corea intervino en el mercado para controlar la apreciación
y la fortaleza del won, Noruega se sumó a las intenciones con la corona, China hasta hace poco
no permitía fluctuar a su divisa y ahora adoptaba su Banco Central una actitud amenazante
diciendo que en función de las políticas de expansión cuantitativa que hicieran el resto de países,
ellos estarían perfectamente preparados para entrar de lleno en la guerra de divisas.
Japón es quien puede jugar un papel relevante en el tema de la guerra de divisas.
A finales del 2014 ha duplicado el dinero que hay en circulación en Japón (de 138 a 270
billones de yenes). Con esta medida logra el efecto deseado de que su divisa se deprecie y sea la
más débil.
No deja de resultar curiosa la actitud del G20 en este sentido. En la reunión de febrero del 2013
en Rusia se pidió a los países que no realizaran devaluaciones fuertes y aplicaran medidas
proteccionistas. Como era de esperar “echaron una regañina” a Japón para que no siguiese con la
idea de devaluar agresivamente el yen y provocar una guerra de divisas. En cambio, en la reunión
de abril en Washington, no pasa nada, todo está bien, y este respaldo impulsó al Nikkei a
máximos de 5 años.
Short Squeeze
Imaginen que el mercado está hoy paradito, con un rango de movimiento muy estrecho en el
precio durante un buen tiempo (unas horas mínimo) y de pronto, sin que haya pasado nada en el
mundo, sin haberse publicado ningún dato macro, ni haber aperturas de mercados, ni ninguna
noticia relevante en el mundo, se produce un movimiento explosivo en una dirección, al alza.
Pues bien, esta situación se conoce como Short Squeeze.
Es un aumento en el precio de un activo. Por regla general, cuándo el precio alcanza un cierto
punto, los vendedores (es decir, quienes están cortos) comienzan a cubrir sus posiciones para
limitar sus pérdidas, ya que necesitan revertir la dirección secuencial de su posición puesto que la
demanda de compra aumenta con fuerza. Entonces se produce una "aglomeración" formada por
dichos titulares de cortos que cubren sus entradas para controlar las pérdidas y otros inversores
que empiezan a comprar.
Se produce una fuerte subida en el precio del activo debido a la sinergia de 3 elementos
(compradores, vendedores que cubren sus cortos, vendedores que cierran sus cortos).
Para los Traders, son ideales para operar, pero sobre todo en mercados que ya de por sí sean
rápidos y con rangos de movimiento y de ruptura generalmente limpios.
Cuando un índice empieza a perder un soporte o a superar una resistencia, generalmente no lo
hace en el primer intento, suele tener previamente varias tentativas fallidas en las cuales cazan a
la mayoría de traders e inversores que entran.
Las divisas presentan una doble ventaja:
- Muchísimas veces el primer intento de rotura es el bueno, sin engaños, de manera limpia.
- Incluso cuando es un intento fallido, realiza el movimiento antes de volver a girarse. Es
falso pero gracias a ese previo movimiento ha dado 20 pipos en segundos, con lo que para una
operación rápida es perfectamente válido.
Dentro de las divisas, teniendo en cuenta la relación spread / riesgo, me decanto por Eur/Usd y
Gbp/Usd principalmente.
Ratios
Hay dos ratios que son muy interesantes de seguir, con independencia del mercado en el que se
trabaje y se opere.
* El VIX es uno de los índices de volatilidad más importantes entre los inversores. Se basa en
la volatilidad de las opciones de corto plazo del SP500.
Una subida del VIX implica descensos en las Bolsas, y viceversa.
Una elevada volatilidad está relacionada con un elevado riesgo, y lo contrario con una baja
volatilidad. La media desde el año 1990 al año 2008 fue de 19.04, es decir, antes de la actual
crisis económica (en octubre del 2008 se elevó hasta 89,53).
Un Vix por encima de 20 indica temor de los inversores, un Vix por debajo de 20 implica que
aún no ha llegado el "miedo" a los mercados.
* El sentimiento de los inversores se mide con el ratio Put/Call. Si este ratio Put/Call fuese
superior a la unidad, nos indica que los inversores tienen expectativas bajistas ya que el número
de opciones de venta put adquiridas superaría al de opciones de compra call compradas.
Número redondo
Muchos inversores se preguntan por qué suelen funcionar generalmente las zonas redondas de
precios, es decir, cuando el precio de una acción, futuro, divisa, llega a dichos niveles suele
rebotar en los primeros intentos y le cuesta romperlo.
Ejemplo: 2000, 3000, 1,30, 1,50.
Hay 2 motivos:
En primer lugar, el efecto psicológico. Muchos inversores no saben dónde cerrar su operación
y la naturaleza humana tiende a elegir niveles redondos.
En segundo lugar, el efecto turbo warrants. La cada vez mayor utilización de estos productos
de inversión, con su zona de barrera que en muchas ocasiones se encuentra en un número
redondo.
En la práctica, habría que matizar. En muchas ocasiones el precio llega a un número redondo y
se pasa de frenada, más de lo habitual, saltando los stops, y acto seguido es cuando comienza a
rebotar.
Pautas estacionales
- Ciclo electoral de USA: tiene su fundamento lógico en que cuando hay año electoral, el
gobierno se esfuerza en que todo esté muy bonito y se preocupa por el bienestar económico de
sus ciudadanos. Para ello, suelen bajar algunos impuestos, elevar el gasto público, se incentiva e
incrementa el consumo, mejoran los resultados de las empresas y por tanto sube la Bolsa.
Desde 1964 a 1996 no falló ni una vez esta pauta estacional en USA. En el 2000 se incumplió
debido a que pinchó la burbuja tecnológica cerrando el S&P 500 con bajadas del 10 %, aunque en
el Nasdaq fueron aún mayores. Concretando, de los 4 años del ciclo electoral, el tercer año es
alcista.
- Pauta ciclo presidencial: Tras las elecciones, el mes de noviembre suele subir un 3,75% de
media si el partido que gana es el que estaba ya en el Gobierno. Además, la bolsa norteamericana
suele estar alcista el 65-69% del tiempo.
Si gana el partido político que estaba en el Gobierno y son los demócratas, al año siguiente la
bolsa sube una media del 16%.
- Meses del año: muchos inversores piensan que agosto es un mes tranquilo debido a las
vacaciones veraniegas y el menor volumen que hay en las Bolsas. Esto es un craso error. De
hecho, en los últimos 20 años ha sido uno de los meses más activos del año.
De esos 20 años, ha habido 10 años en los que la Bolsa ha subido o bajado más de un 3,5 %.
De hecho, suelen ser septiembre y noviembre los más activos en el año. Los más tranquilos
suelen ser abril, octubre y diciembre.
- Primero de mes: a primero de mes el inversor particular acaba de cobrar y decide
destinar una parte de sus ingresos a la Bolsa mediante acciones, fondos de inversión, planes
de pensiones de renta variable, y las gestoras han de meter el dinero inmediatamente para
no quedarse con exceso de liquidez.
Las gestoras a primero de mes revisan sus estrategias y realizan los cambios necesarios en sus
carteras, moviendo el mercado más que a final de mes.
Las pagas extra de navidad son utilizadas por muchas personas para aportar a los fondos de
inversión y a los planes de pensiones, de manera que las gestoras, al recibir un flujo de capital,
destinan parte del mismo a comprar más acciones, por lo que los mercados tienden a subir.
- Enero marca la tendencia del año: básicamente consiste en ver si en los 10-15 primeros
días de enero las Bolsas han subido o bajado para ver qué harán en el año.
Tomando como ejemplo el Ibex 35, desde el año 1989 enero es junto con noviembre el mes
más interesante.
- Años acabados en 5: los años que acaban en 5 son alcistas. A lo largo del siglo XX, el año
1.965 subió un 9 % y el resto de años mínimo un 25 %. El mejor fue en 1.915 que subió un 81 %.
- Días de la semana: los viernes suelen ser alcistas y los lunes suelen ser bajistas.
- Festivos en USA: los días que no hay Bolsa en Estados Unidos suelen ser días alcistas en las
Bolsas de Europa
- Pauta estacional para divisas: una divisa se aprecia intradía en el horario comercial del país
extranjero que ofrece la contrapartida y en cambio tiende a depreciarse en el horario comercial de
su país.
- Pauta en el Euro/Dólar: suele haber bajadas de 8 a 12:00 y subidas de 16.00 a 22:00.
- Pauta en el Euro/Yen: bajadas de 8:00 a 15:00 y subidas de 1:00 a 6:00.
- Pauta en el Dólar/Franco: subidas de 5:00 a 13:00 y bajadas de 17:00 a 23:00.
- Acción de gracias: consiste en comprar el día antes y vender antes de cerrar el viernes.
- Diciembre-enero: consiste en que desde el comienzo de diciembre hasta el final de enero,
los mercados suelen subir en más del 60% de las ocasiones (pese a que en muchas ocasiones
los primeros días de diciembre puede estar lateral e incluso bajista).
- Final de año: establece que desde el tercer viernes de diciembre (que terminan los
contratos de futuros y de opciones) hasta el 31 de diciembre, por regla general suelen subir
los mercados.
- Pauta en el gas: el gas se utiliza para el aire acondicionado y para la calefacción, con lo que
en los periodos del año de calor (verano), la demanda se incrementa sustancialmente,
incrementándose el precio de cotización del gas natural.
Las pautas estacionales muestran claramente que de marzo al mes de agosto y de octubre al
mes de enero, suelen ser los periodos del año más alcistas en el precio del gas natural.
- Pauta en el cobre: de junio a septiembre es el periodo donde tradicionalmente el cobre suele
debilitarse.
- Pauta Benner: los ciclos de Benner tratan de calcular los máximos anuales (siguiendo una
pauta cíclica de 8-9-10 años) y los mínimos anuales (siguiendo una pauta cíclica de 16-18-20
años).
- Pauta Hirsch: consiste en comprar el día uno de octubre y vender el último día de abril
(estrategia de los 6 meses). Casi todas las ganancias bursátiles se concentran den esos 6
meses.
Según los ciclos de Benner, en el año 2003 (+- 6 meses) se produjo un mínimo relevante en las
Bolsas, el siguiente máximo sería en el año 2018 y nuevo mínimo en el año 2021 y así
sucesivamente.
Estos ciclos se basan en unas pautas de 8-9-10 años para los máximos de cada ciclo económico
y 16-18-20 años para los mínimos de cada ciclo económico.
De esta manera, tratan de predecir los máximos y mínimos de los mercados.
Ondas de Elliott
El patrón de 5 Ondas
Las ondas, que pueden ser alcistas o bajistas, reflejan el tramo corrector que se produce
después de un impulso al alza o de un impulso a la baja.
En la Teoría de Elliott, se combinan las ondas formando ciclos alcistas o bajistas que constan
de pautas de cinco ondas en una dirección que se enumera del 1 al 5 y tres ondas en la dirección
contraria que se denominan a-b-c.
El mercado sigue un ritmo repetitivo de cinco ondas en la dirección de la tendencia principal,
seguido por tres ondas de corrección.
El gráfico presenta una tendencia alcista y las ondas se mueven al alza. En una tendencia
bajista las ondas bajistas serían 1-2-3-4-5 y las ondas ascendientes serían a-b-c.
En una tendencia alcista, el patrón se compone de ocho ondas, de las cuales 1-3-5 son ondas de
impulso y 2-4 son ondas correctivas. Las ondas a-b-c con las correctivas de las cinco ondas
previas.
El gráfico presenta el mismo ejemplo pero en una tendencia bajista. En una tendencia bajista,
el patrón se compone de ocho ondas, de las cuales 1-3-5 son ondas bajista y 2-4 son ondas
alcistas. Las ondas a-b-c con las correctivas de las cinco ondas previas
El gráfico tiene la comparativa en una tendencia alcista y en una tendencia bajista.
Triángulos
Para esta figura se necesitan una serie de requisitos. Tendremos cinco ondas. La onda 4 no
puede ir más lejos del origen de la onda 3. La onda 3no puede ser la onda más corta. La estructura
es 3-3-3-3-3. Cada onda se ha de componer de tres ondas.
En los triángulos simétricos la onda b excede al inicio de la onda a, denominándose triángulo
expandido.
El gráfico presenta un triángulo contractivo.
Indicadores
- Elliott oscilator: Es un indicador de tendencia aunque específico para la onda 3, por ser la
más importante de las cinco ondas, por ser la de mayor momento y mayor impulso dentro de la
tendencia general.
El indicador se basa en que los movimientos al alza o a la baja de la onda 3 son precedidos por
valores altos o bajos del mismo.
El objetivo del oscilador es evitar el carácter subjetivo que tiene la Teoría de las Ondas de
Elliott.
Es una alternativa al indicador MACD combinando una media móvil simple de 5 períodos con
una media móvil simple de 34 períodos.
- Indicador ZigZag: Se trata de un indicador de tendencia y suele ser utilizado en los análisis de
movimientos de precios de Elliot. Combinándolo con fibonacci resulta más interesante
Su objetivo es la identificación de movimientos significativos en la tendencia de los precios
para determinar puntos de inflexión relevantes.
Suele emplearse para suavizar la tendencia de los precios según la aplicación de las ondas de
Elliot para analizar los movimientos del mercado, rechazando aquél cambio de precio que resulte
inferior a un porcentaje o a un intervalo de puntos prefijado. A partir de este intervalo de filtro
mínimo de variación, se fijan los cambios en el indicador de acuerdo con un porcentaje deseado.
Cuñas
Viene a significar un patrón de impulso, con una o dos correcciones.
Su estructura consta de cinco ondas en la dirección de la tendencia principal, advirtiéndose que
la onda 4 entra en la zona de la onda 1 solapándola.
Hay dos tipos de cuñas:
- Cuñas finales: se podría decir que viene a ser una especial onda 5 cuando el movimiento
precedente ha sido rápido.
Este tipo de cuñas no suele aparecer por regla general en una onda c de un movimiento a-b-c.
Es más habitual que aparezcan en la recta final de figuras mayores advirtiendo de la posible
finalización del movimiento mayor.
La representación gráfica se traduce en la convergencia entre dos líneas inclinadas que
engloban las subondas 1, 3,5 subdivididas en formaciones correctivas.
El gráfico tiene un ejemplo de cuña, en este caso en plena subida.
- Cuñas iniciales: este tipo de cuñas se caracterizan por su lentitud y por la pérdida de amplitud
de la onda 5 respecto de la onda 3.