Final de Botánica
Final de Botánica
Final de Botánica
Teoría celular
La teoría celular postula que la célula es la unidad fundamental de los seres vivos, desde los
más sencillos (microorganismos) hasta los organismos superiores más complejos (animales y
vegetales), tanto en lo que se refiere a su estructura como a su función.
● Presentan una membrana plasmática que las aísla del medio que las rodea y constituye
la principal «barrera selectiva» para el intercambio de sustancias con el exterior.
● El interior celular o citoplasma contiene una serie de elementos (inclusiones y, en el
caso de las eucariotas, orgánulos) imprescindibles para el correcto funcionamiento de la
célula.
● Todas las células poseen información genética en unas macromoléculas esenciales
(ADN y ARN), así como ribosomas implicados en la síntesis de proteínas.
Además, ya sean procariotas o eucariotas, todas las células realizan las tres funciones
vitales: nutrición, relación y reproducción; por ello se define la célula como la unidad vital, es
decir, el ser vivo más pequeño que realiza las funciones vitales.
● La nutrición se define como la capacidad de captar materia y/o energía del medio y
transformarla en materia y energía propia.
● La relación es la capacidad de captar y responder a estímulos del medio o de otras
células.
● La reproducción es la capacidad de duplicar su material genético y transmitirlo a las
células hijas, es decir, de formar otras células semejantes a ellas a las que transmiten la
herencia.
A pesar de estructuras y funciones comunes a todas las células, existen diferentes grados
de complejidad, pudiendo establecer dos niveles de organización: procariota y eucariota.
Teoría endosimbiótica
Esta teoría postula que algunos orgánulos propios de las células eucariotas, especialmente
plástidos y mitocondrias, habrían tenido su origen en organismos procariontes que, después
de ser englobados por otro microorganismo, habrían establecido una relación
endosimbiótica con éste. Se especula con que las mitocondrias provendrían de
proteobacterias alfa (por ejemplo, rickettsias) y los plástidos de cianobacterias.
La teoría endosimbiótica fue popularizada por Lynn Margulis en 1967, con el nombre de
endosimbiosis en serie, quien describió el origen simbiogenético de las células eucariotas.
Estas células procariotas serían las precursoras de los peroxisomas (por su capacidad, para
eliminar sustancias tóxicas), de las mitocondrias (que procederían de bacterias aerobias) y
de los cloroplastos (que serían antiguas bacterias fotosintéticas). Pero lo más importante es
que tanto mitocondrias como cloroplastos tienen su propio ADN, el cual codifica la
síntesis de algunos de sus componentes. Además, ambos orgánulos presentan ribosomas
propios con ARN ribosómicos más próximos a los de las bacterias que a los de las células
eucarióticas. Según esta teoría, parte de los genes del ADN mitocondrial y de los cloroplastos
pasarían a incorporarse a los genes del ADN de la célula huésped.
Historia de clasificaciones
Protistas
Mohos mucilaginosos
Son organismos heterótrofos, ameboides, que se reproducen por la formación de esporas.
Existen dos divisiones principales:
● Myxomycota: Mohos mucilaginosos plasmodiales. Son cenocíticos durante las etapas
no reproductivas.
● Acrasiomycota: Mohos mucilaginosos celulares. Las células ameboides agrupadas
retienen su identidad individual.
Protozoarios
Son heterótrofos unicelulares. Se agrupan en 3 divisiones:
● Masthigophora: Flagelados.
● Sarcodina: Amebas.
● Ciliophora: Ciliados.
Las células eucariotas están constituidas por un protoplasma, que es el material viviente de
la célula, y consiste en el conjunto del núcleo, citoplasma y pared celular.
Presenta tres tipos de estructuras: sistema endomembranoso, orgánulos transductores de
energía y estructuras carentes de membrana.
El sistema endomembranoso se distribuye por todo el citoplasma y está compuesto por varios
subcompartimientos comunicados entre sí. En algunas ocasiones la comunicación es directa y
en otros es mediada por vesículas transportadoras. Estas nacen de un compartimiento y se
transfieren a otro en virtud de procesos que comprenden pérdida y ganancia de membranas.
Las vesículas transportadoras operan del siguiente modo:
● Brotan de la membrana de un compartimiento, llamado donante.
● Viajan por el citosol en busca de otro compartimiento, llamado receptor, con cuya
membrana se fusionan. Por consecuencia, una parte de la membrana y una parte del
contenido del compartimiento donante se transfieren, respectivamente, a la membrana
y al interior del compartimiento receptor.
En los plástidos se puede apreciar lo que se conoce como ciclosis: es el movimiento
giratorio del contenido citoplasmático de la célula vegetal, que mejora el intercambio de
sustancias a la vez que arrastra los cloroplastos en un interesante “paseo” intracelular. Puede
darse como resultado de cambios de temperatura.
Pigmentos
Son compuestos de estructura química variada que tienen la propiedad de absorber la luz en
distintas longitudes de onda. La naturaleza de un pigmento indica si forman parte de plástidos o
citoplasma.
● Clorofila: en sus moléculas se alternan enlaces dobles con simples
(proteínas-lipoproteínas).
Un célula vegetal joven secreta primeramente una pared delgada y flexible denominada pared
celular primaria. Entre las paredes primarias de células adyacentes se encuentra la lámina
media, una delgada capa rica en polisacáridos adherentes llamados pectinas. La lámina media
pega entre sí a las células adyacentes. Cuando la célula madura y detiene su crecimiento,
fortalece su pared. Algunas células realizan esto secretando sustancias endurecedoras dentro de
la pared primario u otras añaden una pared celular secundaria entre la membrana plasmática
y la pared primaria. La pared secundaria, frecuentemente depositada en varias capas laminadas,
tiene una matriz fuerte y duradera que proporciona protección y sostén de la célula.
A su vez, las paredes de las plantas están generalmente perforadas por canales entre células
adyacentes que se denominan plasmodesmos.
Plasmodesmos: Son canales (conexiones citoplasmáticas) que comunican una célula con otra,
permitiendo que el citosol pase a través de este, comunicando los ambientes químicos de células
adyacentes. El agua y pequeños solutos pueden atravesar libremente de célula a célula.
En el caso de la pared primaria hablamos de campo de puntuación primario y de
punteaduras en la pared secundaria.
Vacuola
● Otorga turgencia a la célula
● Está delimitada por una membrana llamada tonoplasto
● Depósito de agua
● Cámara de organelas dañadas desechos metabólicos (ráfides=sílice cristalizado)
(drusas= sílice o carbonato)
● Pigmentos hidrosolubles
Biomoléculas
● Proteínas: Los monómeros (en cadena) que componen a las proteínas son aminoácidos.
Un aminoácido es un ácido orgánico en el cual el carbono unido al grupo carboxilo está
unido también a un grupo amino. Las proteínas cumplen un papel estructural y catalítico
(enzimas) y forman parte de gran número de pigmentos, hormonas, etc.
Criterio taxonómico
Se clasifica a los seres vivos en grupos dispuestos jerárquicamente. Taxón o categoría
taxonómica hace referencia a cada grupo o niveles de una clasificación jerarquizada. Es
la unidad fundamental de la que parte toda clasificación.
Protófitos
● Unicelulares: Las plantas más simples constan de una sola célula a menudo
desnuda (Ej: Euglena) la cual, sin embargo, en los seres unicelulares mayores
puede alcanzar ya una sorprendente altura de organización. La forma más
sencilla que toman tales unicelulares desnudos, por lo menos en su estado de
reposo, es la esférica. Muchos bacterios y cianofíceas, revestidos de membrana
durante toda la vida, así como las algas más primitivas dotadas de membrana
permanente, constan también de células esféricas. Pueden ser organismos
móviles mediante flagelos (nivel unicelular flagelado) como Chlamydomonas o
pueden ser inmóviles (nivel unicelular cocal) como las diatomeas.
● Cenobios: Número fijo y generalmente bajo de células provenientes de una
misma célula progenitora (unigeneracionales). Cada división de un ser
unicelular conduce a la estrangulación completa del protoplasto y a la formación
de nuevos individuos hijos que viven libremente; la división celular representa,
pues, a la vez en este nivel de desarrollo un proceso de multiplicación del
número de individuos. Si los individuos hijos quedan reunidos entre sí por una
masa gelatinosa producida en común o por la membrana originaria, también
común a ambas, se originan consorcios celulares laxos o cenobios. Pueden tener
conexiones citoplasmáticas postnata.
● Plasmodios: Son masas de plasma desnudas y plurinucleadas y se encuentran en
los mixomicetes. Son capaces de realizar movimientos de rotación
extremadamente lentos y por tal procedimiento pueden recorrer distancias
apreciables (varios decímetros).
Talófitos
Un talo auténtico es siempre pluricelular o por lo menos polienérgido. La organización
externa va de los simples consorcios celulares esféricos o filamentosos hasta formas
externamente muy diferenciadas que no alcanzan jamás la diferenciación anatómica en
tejidos propia de cormófitos.
Los verdaderos talos pueden constituirse de dos maneras:
● Por yuxtaposición de células al principio libres (consorcios de agregación).
● Por separación incompleta de las células hijas resultantes de división
(pluricelulares auténticos).
* Consorcios de agregación: Es un nivel constituido por células con uniones postnatas.
Se encuentran en algunas algas verdes (Pediastrum). La unión entre las células
particulares, que al principio estaban separadas, se produce en una fase avanzada de su
vida (unión post-nata); las células de los seres pluricelulares auténticos permanecen
unidas desde el principio (unión congénita). Las células del consorcio, conectadas por
las punteaduras que perforan las membranas, a través de las que discurren
plasmodesmos, constituyen realmente una unidad plasmática.
Los filamentos pueden agruparse en una estructura que se asemeja a un tejido, nivel
pseudotejido. Debe interpretarse por este como una agrupación densa de filamentos.
● Nivel laminar: Estas algas tienen aspecto de lámina u hoja dado que sus células se
dividen en dos dimensiones. La lámina puede ser mono o biestratificada. El crecimiento
es difuso, cualquier célula de la lámina es potencialmente activa para dividirse
mitóticamente. Un típico ejemplo de lámina biestratificada es Ulva (lechuga de mar),
alga verde marina cuyas células basales de la lámina emiten prolongaciones para la
fijación al sustrato (grampón).
● Nivel pseudo-órganos con tejidos verdaderos/ Talos masivos (direcciones en 3
sentidos): Presente en algas de gran porte como las Feofitas, debe su nombre a que el
cuerpo vegetativo está conformado por tejidos. Se denomina tejido al conjunto de
células con una función determinada y un origen común. Dichos tejidos se deben a la
actividad de un único cono vegetativo. En el caso más sencillo, dicho cono consta de una
sola célula apical, cuyos descendientes quedan todos unidos entre sí. Presentan
estructuras que se asemejan a raíces (rizoides), a tallos (cauloides) y hojas (filoides).
Hongos
Son talófitos eucariontes terrestres. Junto con las bacterias, son los principales degradadores de
materia orgánica de los ecosistemas; su actividad es importante ya que liberan CO2 a la
atmósfera y devuelven compuestos inorgánicos al suelo: actúan como recicladores.
No poseen plastidios y son en general, incoloros.
Son heterótrofos, necesitan de la provisión de carbono orgánico para realizar sus procesos
metabólicos.
En grupos inferiores el talo es desnudo y ameboide; en todos los demás las células suelen estar
rodeadas por una membrana que da casi siempre la reacción de la quitina (pared celular
quitinosa).
Almacenan lípidos y glucógeno en sus células. No poseen células móviles en ninguna etapa de su
ciclo vital. Pueden vivir en asociaciones simbióticas con organismos autótrofos, como algas o
plantas superiores, formando líquenes y micorrizas.
El cuerpo vegetativo es casi siempre filamentoso, sencillo o frecuentemente ramificado, uni o
pluricelular (septado). El filamento fúngico aislado se denomina hifa; el conjunto de hifas,
micelio. El protoplasma dentro de las hifas está interrumpido a intervalos regulares por paredes
transversales, que dividen a cada hifa en compartimientos o células. Estos tabiques
transversales se llaman septos. Hablamos de hifa tabicada o septada. En hongos filamentosos
más sencillos, los septos sólo se forman en la base de los órganos reproductores, en este caso las
hifas son cenocíticas o no septadas.
Nutrición
Pueden vivir como parásitos y obtener su alimento a expensas de organismos vivos o pueden
ser saprófitos, descomponiendo materia orgánica muerta.
Los hongos obtienen su alimento en forma disuelta, son absorbedores; las moléculas de dicho
alimento deben tener un tamaño suficientemente pequeño como para atravesar las paredes y
las membranas celulares. Por lo tanto el hongo debe escindir las moléculas grandes en pequeñas
para poder absorberlas. Esto lo logra segregando enzimas extracelulares (exoenzimas) que
actúan sobre el sustrato, digiriendo el alimento fuera del cuerpo del hongo.
Reproducción y multiplicación
La multiplicación se verifica mediante diversas clases de esporas: cuando estos habitan en el
agua producen zoósporas flageladas, desnudas, en general de simetría radiada pero en vida
terrestre las esporas se encuentran revestidas por una membrana y son de formación endógena
(endosporas) o exógena (conidios). La célula que origina conidios se denomina célula
conidiógena y es llevada, de a una o en grupos, por una hifa especializada o conidióforo. →
Esporas → reproducción ASEXUAL
En el proceso sexual se copulan gametas (isogamia, anisogamia y oogamia), gametangios
(gametangiogamia) e incluso pueden copularse dos células del talo no diferenciadas
específicamente como células sexuales (somatogamia).
En tanto, muchas veces suele predominar la multiplicación vegetativa por gemación (levaduras
unicelulares), fisión binaria y por fragmentación del talo (frecuentemente hongos
unicelulares).
Ciclo de vida
En hongos superiores el ciclo de vida es trifásico. Hay una fase haploide, representada por las
esporas y el micelio originado por ellas; una fase dicariótica, resultante del proceso sexual
(somatogamia), donde ocurre un retarde de la cariogamia después de la plasmogamia (unión de
citoplasma); y una fase diploide representada por la cigota. En la dicariofase se forman células
con un núcleo de cada progenitor. Este par de núcleos forma el denominado “dicarión”y la fase
correspondiente es la dicariofase o fase dicariótica (n+n).
En algunas células dicarióticas, generalmente las ubicadas en los extremos de las hifas, se
produce la cariogamia, con la formación de núcleos cigóticos (2n) que es seguida por una
división reduccional (meiosis) con la formación de esporas (n). Una vez maduras y liberadas, las
esporas germinan originando nuevas hifas haploides.
Gracias al retardo de la cariogamia y al desarrollo de células dicarióticas que se multiplican, la
cantidad de esporas producidas en un solo proceso sexual es particularmente elevada.
En forma simultánea al desarrollo de hifas dicarióticas fértiles, el micelio del hongo se organiza
en pseudo-tejidos por entrelazamiento de sus filamentos. Estos pseudo-tejidos formados por
hifas haploides o
dicarióticas, forman
un cuerpo fructífero
característico, que
incluye a las células
dicarióticas donde se
van a formar los
núcleos cigóticos y
posteriormente las
esporas.
Los cuerpos
fructíferos pueden
ser abiertos o
cerrados. Constituyen
la estructura más
llamativa y conocida
del hongo.
Hay dos grandes
grupos de hongos
superiores que
presentan este tipo
de ciclo de vida
trifásico:
Ascomycetes y
basidiomycetes.
Sus cuerpos
fructíferos reciben
los nombres de ascocarpos y basidiocarpos, portadores de ascosporas y basidiosporas.
Un ejemplo de ascocarpo es el apotecio. Los apotecios son cuerpos fructíferos con forma de
copa, con el himenio (capa fértil de ascosporas) en su parte superior.
El basidiocarpo más conocido es el pileado u hongo de
sombrero. El himenio del hongo de sombrero se
encuentra en la parte inferior del mismo, tapizando
laminillas que irradian desde el centro hasta el borde
del sombrero o píleo.
Anatomía fúngica
Líquenes y micorrizas
En líquenes, hifas de hongo y algas inferiores forman una mezcla que ha llegado a constituir, sin
embargo, una unidad morfológica y fisiológica. Las algas que forman líquenes (antes llamadas
gonidios) son cianofíceas unicelulares o filamentosas o clorofíceas. De los hongos, casi todos
son ascomicetes y en casos muy raros, basidiomycetes.
Morfología
La forma depende en algunos casos de la constitución del alga, pero por lo común es la forma del
hongo la que prepondera.
● Líquenes gelatinosos: Viven en la tierra o cortezas; en ellos las hifas del hongo penetran
en el mucílago de una colonia de Nostoc (cianobacterias).
● Filamentosos: El hongo envuelve en forma de telaraña una cianofícea filamentosa.
● Crustáceos: Crecen lentamente en la superficie de rocas, tierra o cortezas, el talo está
íntimamente unido al sustrato, en el que penetra hasta cierto punto.
● Foliosos: Presentan talos aplanados y comúnmente lobulados, unidos por su cara
inferior al sustrato a través de cordones de hifas (rizinas).
● Fruticulosos: Se fijan al sustrato por una base muy estrecha y se ramifican a modo de
arbusto.
Histología
Estructura homómera: las algas se distribuyen de modo más o menos homogéneo en el talo →
líquenes gelatinosos
Estructura heteromera: las algas se sitúan en una capa bien definida, paralela a la superficie
superior. En relación con su situación en el talo, las algas liquénicas están adaptadas a la baja
intensidad de luz. En la capa cortical superior las hifas se juntan a menudo en un
pseudoparénquima compacto. → líquenes foliosos, fruticulosos y algunos crustáceos
● Corteza superior pseudoparenquimática: formada por hifas
● Capa gonidial: formada por algas
● Médula: hifas dispuestas laxamente
● Corteza inferior: rizinas o rizoides
La estructura puede variar ya que no todos los líquenes presentan capa gonidial. Cuando la capa
gonidial está ausente y las algas se distribuyen de manera uniforme por el talo, se lo llama
estructura homómera. Cuando la capa gonidial está bien delimitada, se designa como
heterómera.
Hongo y alga viven en simbiosis; el hongo envuelve el alga y en la gran mayoría de los casos
envía haustorios que penetran en el interior de las células del alga o bien sólo en la membrana
de las mismas. El hongo provee protección contra la desecación y luz intensa lo que le permite al
alga crecer y este toma los compuestos orgánicos que el alga sintetiza. Como resultado
metabólico del liquen, se producen sustancias liquénicas especiales que ni el alga o el hongo son
capaces de sintetizar independientemente.
Reproducción y multiplicación
La reproducción sexual la lleva a cabo el hongo con la formación de cuerpos fructíferos carentes
de algas. El nuevo liquen se formará cuando el hongo en germinación cuentre un alga.
Dada su capacidad para erosionar rocas, los líquenes pueden actuar como pioneros en la
colonización de ambientes, preparando el sustrato para las plantas.
Son bio-indicadores de contaminación atmosférica por su sensibilidad a ciertos contaminantes
como el dióxido de azufre (SO2) que produce alteraciones en la fotosíntesis y en la economía
hídrica. En las zonas muy contaminadas estos organismos no crecen.
Micorrizas
Ciertos hongos juegan un papel crucial en la nutrición mineral de algunas plantas
vasculares. Las micorrizas o “raíces fúngicas” establecen un íntimo contacto con las
raíces vegetales y establecen una asociación simbiótica de beneficio mútuo entre raíces
y hongos.
En la mayoría de plantas vasculares se establecen micorrizas. El papel fundamental de
estas es la transferencia directa de fósforo desde el suelo hasta las raíces. A cambio, la
planta aporta hidratos de carbono al hongo simbiótico. Uno de los aspectos más
fascinantes es que, en ciertas condiciones, pueden actuar de puente entre plantas
huéspedes de micorrizas permitiendo el paso de productos de la fotosíntesis, fósforo y
otras sustancias.
Endomicorrizas
Se dan en el 80% de plantas vasculares. El componente fúngico es un zigomicete. Las hifas
fúngicas penetran en las células corticales de la raíz vegetal y en su interior forman ovillos,
protuberancias o ramificaciones diminutas.
Ectomicorrizas
Son características de algunos grupos de árboles y arbustos de regiones templadas. El
hongo envuelve la raíz pero no penetra en sus células. El micelio se extiende mucho
hacia el interior del suelo y juega un papel importante transfiriendo carbono orgánico a
la planta. A menudo los pelos radicales desaparecen, evidentemente su función ha sido
reemplazada por hifas fúngicas. Mayoritariamente se forman con basidiomicetes pero
en algunas están implicados ascomicetes, incluidas las trufas.
Briófitas
Las Briofitas son plantas (Reino Plantae) parcialmente adaptadas a la vida terrestre. Los
cuerpos de estas plantas suelen designarse como “talos intermedios”, ya que crecen en
hábitats húmedos y sombríos pero aún no son independientes del agua, y, no siendo
acuáticas, no sobreviven sin una provisión constante de humedad.
Con las plantas vasculares comparten los siguientes caracteres:
● pigmentos: clorofila a y b y carotenoides.
● pared celular de celulosa.
● almidón como sustancia de reserva, acumulado en plástidos.
● esporangios y gametangios pluricelulares, rodeados siempre por una envoltura
de células estériles (adaptación a la vida terrestre).
MUSGOS
El gametófito de los musgos presenta dos fases: una filamentosa, protonema, producida
al germinar la espora, y otra típicamente foliosa (“planta” de musgo) formada a partir de
pequeñas yemas del protonema. Generalmente el protonema muere al formarse el
gametófito folioso.
Los esporofitos suelen desarrollarse en el extremo de las ramas principales o laterales
del gametofito. Constan de una seda alargada, que lo eleva por sobre el gametofito, y son
verdes (fotosintéticos) hasta su madurez.
El crecimiento del esporofito dentro del arquegonio hace que éste se desgarre y quede
parte de tejido arquegonial (n) sobre la cápsula, a modo de capuchón, denominándose
cofia o caliptra.
La cápsula del esporofito posee una tapa u opérculo que cae a la madurez, descubriendo
una abertura rodeada por un anillo de dientes higroscópicos, el peristomio. El
peristomio regula la salida de las esporas.
HEPÁTICAS
Los gametófitos de las hepáticas pueden ser talosos o foliosos; son aplanados, postrados y
presentan simetría dorsiventral.
Una de las hepáticas más comunes es Marchantia sp., que presenta un gametófito taloso
acintado, dicotómicamente ramificado. El talo es relativamente delgado, con una zona dorsal
clorofílica y una zona ventral incolora, reservante. La zona dorsal tiene delimitadas cámaras
poligonales que se conectan con el exterior por medio de poros. La zona ventral lleva rizoides
unicelulares.
Los gametangios de Marchantia están elevados sobre el talo y contenidos en estructuras
especiales: arquegonióforos y anteridióforos, portadores, respectivamente, de arquegonios en
posición ventral y anteridios en posición dorsal. Los esporofitos poseen una seda corta y,
durante su desarrollo, quedan ubicados en los arquegonióforos, con la cápsula hacia abajo.
El gametófito de esta hepática se multiplica vegetativamente por medio de propágulos
multicelulares situados en estructuras semejantes a pequeñas canastas denominadas
conceptáculos.
Exigencias de la vida en tierra firme
Los problemas de adaptación que tuvieron que vencer las plantas para su vida en tierra firme se
puede resumir en 4 grupos:
● Balance hídrico
● Alimentación
● Problemas mecánicos
● Reproducción, propagación y dispersión
Problemas mecánicos: Las plantas terrestres tuvieron que evitar por medio de
refuerzos mecánicos que sus cuerpos se rompan o aplasten. Esta es la función de los
diferentes tejidos de sostén y la aparición de la lignina, permitiendo la formación de
paredes celulares lo suficientemente fuertes como para permitir la existencia de plantas
grandes, capaces de sostenerse solas y de alcanzar alturas lo más grande posible. La
fijación de la planta al suelo también corresponde a la raíz.
Reproducción, propagación y dispersión: El caso más sencillo es el viento el que realiza el
transporte de esporas y semillas. Estas estructuras deben ser, por tanto, muy ligeras, para
poder ser dispersadas por el viento de manera efectiva. Se deben producir, además, en gran
número, ya que el transporte eólico depende mucho del azar, de si se encuentra pareja sexual
idónea, o de si llegan al entorno adecuado las estructuras reproductoras.
Las plantas terrícolas más evolucionadas se sirven de animales para el transporte de sus
semillas y otros propágulos reproductores. El mejor ejemplo es el transporte del polen y la
fertilización de las flores por los insectos.
Bajo el grupo de cormófitas se agrupan todas aquellas plantas cuyo cuerpo vegetativo está
compuesto por un cormo. Este concepto caracteriza un grado de organización determinado
pero no una unidad taxonómica. Las cormófitas pertenecen a dos grupos sistemáticos; helechos
y plantas con semilla (espermatofitas). Colocar estas plantas dentro de las cormófitas se basa en
e nivel de organización del esporofito, que es dominante en ellas. Los gametofitos de las
cormófitas, por el contrario, pertenecen todavía al nivel de organización del talo.
Crecimiento en talófitos
En los talófitos más complejos pueden aparecer estructuras similares (análogos) a las del cormo
(raíz, tallo y hojas), pero estructuralmente diferentes (rizoides, cauloides y filoides), resultado
de fenómenos de convergencia evolutiva (análogos pero no homólogos). Puede aparecer en
estos casos cierta diferenciación de tejidos y son denominados talos hísticos.
El desarrollo del talo a partir de la célula inicial puede ser básicamente de dos tipos:
● Haplóstico: divisiones sólo transversales, se origina un filamento de una fila de células.
● Polístico: divisiones transversales y longitudinales, se origina un filamento de varias filas
de células.
Una mayor complejidad del talo puede observarse en:
● Ramificaciones, apicales o laterales, producto de un cambio en la dirección del huso
mitótico.
● Crecimiento heterótrico: aparecen filamentos postrados sobre el sustrato de los que
salen filamentos erectos.
● Paso de ejes simples o uniaxiales a ejes multiaxiales formados por varias filamentos.
Clasificación:
1. Región distal: células o grupos de cél iniciales en el extremo del ápice (pteridófitas: célula apical;
gimnospermas y angiospermas: ápice florales, meristema latente y células madres centrales).
Zona homogénea y meristemática.
2. Región subdistal: se inician los centros de crecimiento o puntos donde se diferencian los
primordios foliares (loci); son células relacionadas con la actividad meristemática. No hay
diferencias histológicas.
3. Región organogénica: zona de crecimiento de los primordios foliares, que aparecen como
protuberancias de los locus. Comienza la diferenciación histológica.
4. Región subapical: se ensancha el tallo, se agrandan los primordios foliares (sin ser verdaderas
hojas); alargamiento de los entrenudos y se diferencian los tejidos externos del eje.
5. Región de maduración: cesa la actividad meristemática con diferenciación histológica; las hojas
son verdaderas y aparecen los tejidos jóvenes.
Centro quiescente: gobierna la actividad meristemática. “Se ha visto que, tanto en el ápice caulinar
como en el radical, el lugar donde antes se pensaba que había la mayor cantidad de división suele
ser un centro de reposo relativo (centro quiescente)”
Se ha demostrado que, como fenómeno general, las células iniciales que son responsables de la
distribución celular original en buena parte cesan de ser mitóticamente activas durante el crecimiento
posterior de la raíz. Son sustituidas en esta actividad por células localizadas más profundamente en
el cuerpo de la raíz. Esto ha llevado a desarrollar el concepto de centro quiescente en el meristema
apical. Según este concepto las células más distales en el cuerpo de la raíz (las primeras iniciales de
pleroma y periblema) se dividen pocas veces, muestran poco cambio de tamaño, y tienen bajas
velocidades de síntesis de ácidos nucleicos y proteínas. El centro quiescente excluye a las iniciales
de la cofia, y es de forma hemisférica o discoide. En algunas especies contiene entre 500 y 1000
células en ápices con 125mil a 250mil células meristemáticas. El centro quiescente es de volumen
variable en relación con el tamaño de la raíz. En raíces con centro quiescente las iniciales
mitóticamente activas aparecen justo por fuera de la superficie proximal del centro quiescente.
El estado quiescente de las células apicales distales no significa que estas células se hayan vuelto
permanentemente inactivas. Este centro no está completamente desprovisto de divisiones en
condiciones normales. En raíces dañadas el centro quiescente e capaz de repoblar el meristema.
También reanuda la división luego de un período de latencia inducido por el frío. Cuando se extirpa la
cofia, las células quiescentes comienzan a crecer hasta regenerarla.
Las células del centro quiescente se dividen unas diez veces más lento que las células adyacentes.
Meristemos abiertos y cerrados: hay dos tipos de organización meristemática en la raíz. El tipo
cerrado se caracteriza por tener tres partes bien diferenciadas morfológicamente en el grupo de
células iniciales: una da lugar a la corteza, otra a la estela, y otra a la caliptra. En estos meristemos
hay además dos grupos de plantas según quién dé lugar a la epidermis. En un grupo la epidermis
tiene un origen común con la caliptra (típico de dicotiledóneas; a esta parte del meristemo se le llama
dermatocaliptrógeno), en otro la epidermis tiene el mismo origen que las células del parénquima
cortical (típico de monocotiledóneas; a esta parte del meristemo se le llama caliptrógeno).
Los meristemos de tipo abierto son aquellos en los que es difícil distinguir grupos de células o límites
entre grupos de células iniciales que dan lugar a los diferentes tejidos de la raíz. Por ejemplo, no hay
una clara separación entre el cuerpo de la raíz y la cofia, y el centro quiescente no se distingue muy
bien. También se distinguen dos grupos de plantas. Aquellas en los que cualquier célula inicial del
meristemo puede dar lugar a cualquier tejido y aquellos en los que las células iniciales se colocan
alrededor del centro quiescente y según la posición darán lugar a diferentes tejidos. Pero parece que
ambos tipos de organización se pueden dar en la misma planta según las condiciones. La cebolla es
un meristemo abierto.
● Meristemas primarios:
Protodermis → epidermis
Fundamental → parénquima + colénquima/esclerénquima
Procambium → Xilema/floema
● Meristemas secundarios
Procambium → cambium → Floema II / Xilema II
Parénquima + epidermis → Felógeno (cambium suberoso) → Súber/ felodermis
Según su función:
● Crecimiento meristemático
● Revestimiento → epidermis/rizodermis
● Fotosíntesis, reservante, relleno → parénquima
● Conducción → xilema y floema
● Mecánicos o de sostén → colénquima y esclerénquima
Según morfología
Tricomas (meristemoides)
● Pelos → reducen la transpiración
● Escamas → absorben
● Papilas → reflejan
Estomas
● Células oclusivas con cloroplastos
● Microfibrillas radiales
● Ostiolo (espacio entre células oclusivas)
● Se disponen en la cara abaxial de la hoja
Pelos unicelulares: Pueden tener forma papilosa, tubular o acicular, algunas veces pueden
también ser ramificados. Su membrana puede ser delgada y blanda o muy engrosada, rígida,
lignificada, calcificada o silicificada; en algunos casos su extremo es punzante. Siempre se
distingue la parte enclavada en la epidermis, el pie, de la porción sobresaliente, el cuerpo del
pelo.
Pelos urticantes: Unicelulares. En estos se encuentra engrosada la pared celular por la base del
pelo con carbonato cálcico, mientras que el ápice del mismo engrosamiento es de sílice,
existiendo una zona fácil de ruptura. Cuando el animal toca la cabeza de este pelo, la misma se
desprende, inyectando el contenido urticante del pelo en el tegumento del animal, gracias a la
presión de turgencia ejercida por una gran vacuola.
Pelos glandulares: Pueden ser tanto uni o pluricelulares. Muchas veces los pelos pluricelulares
glandulares constan de un pedúnculo y una cabeza uni/pluricelular, la cual constituye la parte
secretora del pelo.
pelos escamosos o peltados: Pluricelulares. Consisten en una superficie en forma de disco, la
cual puede estar sujeta a un pedúnculo, que la eleva un poco sobre la epidermis, o bien
directamente al pie, encontrándose en este caso más cerca de la epidermis dicha estructura.
Pelos pluricelulares: Constituidos por filas no ramificadas de células. Cuándo todos los
elementos celulares se ramifican con regularidad y se hallan densamente dispuestos, se forman
indumentos de carácter lanoso.
Los pelos intervienen muchas veces en la misión específica de la epidermis, tanto así que los
revestimientos sedosos formados por pelos vivientes, que se hallan en hojas muy jóvenes a
veces, al aumentar la superficie, contribuyen a favorecer la transpiración.
Con mucha mayor frecuencia, sin embargo, un denso indumento blanquecino de pelos muertos
sirve para reducir la pérdida de agua al crear un espacio sin viento, en el que se acumula vapor
de agua; al mismo tiempo protege contra la radiación solar directa.
Pelos en forma de gancho: impiden que los tallos volubles o trepadores de plantas trepadoras
resbalen y se caigan.
Rizodermis
No se encuentra cutinizada ni revestida por cutícula alguna. Se trata de un tejido precisamente
especializado en el sentido de ser permeable al agua y capaz de una activa absorción de la
misma. A pocos milímetros de distancia del ápice radical, aparecen en la epidermis de la raíz
unas importantes formaciones apendiculares, los pelos radicales. Estos aumentan la superficie
de absorción. Son evaginaciones tubulosas de las células, de membrana muy tenue, que se hace
viscosa a consecuencia de la mucilaginización de sus capas externas. Solo viven unos pocos días.
Los tricoblastos son células epidérmicas que se diferencian para dar lugar a los pelos radicales.
El crecimiento de los pelos radicales es muy activo, estando normalmente el núcleo desplazado
por la alta vacuolización y situado en el extremo que está en crecimiento.
Normalmente una cutícula muy fina cubre la pared celular del pelo radical y superficialmente,
pueden existir sustancias mucilaginosas, lo cual se ha interpretado como un modo de suavizar el
rozamiento durante la penetración del pelo a través del suelo.
Endodermis
Es una capa celular cuya diferenciación es muy interesante, ya que sus células difieren en cuanto
a estructura y fisiología. En las células endodérmicas jóvenes se observa sobre las paredes
anticlinales (radiales y transversales) la llamada banda de Caspary. Dicha banda resulta de un
engrosamiento de la pared celular que va acompañado de una serie de cambios químicos.
Contiene lignina y suberina (la banda).
La membrana plasmática de una célula endodérmica va sujeto de algún modo a dicha banda. En
la región de la pared correspondiente a la banda de Caspary, no se observan plasmodesmos, en
contraposición con lo que ocurre en el resto de las células endodérmicas.
Durante el desarrollo primario de raíz, las células endodérmicas tienen la capacidad para crecer
adicionalmente, como ocurre durante la iniciación endógena de las raíces laterales a partir del
periciclo. Aparte de esto, durante el engrosamiento secundario de algunas raíces, siguen
dividiéndose anticlinalmente las células endodérmicas en las primeras etapas del dicho
crecimiento.
En algunas gimnospermas y en muchas pteridofitas y angiospermas, permanece la endodermis
en su forma primaria y se desprende conjuntamente con el resto del córtex al tener lugar el
crecimiento secundario y formarse la peridermis. En angiospermas que no experimentan
crecimiento secundario, se deposita en la parte interna de la pared primaria de las células
endodérmicas una lámina casi continua de suberina y posteriormente se deposita sobre dicha
suberina (centrípetamente) una capa de celulosa. Este tipo de endodermis característico de
monocotiledóneas puede terminar con las paredes lignificadas. En coníferas se detiene el
desarrollo de la endodermis cuando se deposita la suberina en la parte interna de la pared
primaria.
Exodermis
Suele estar constituida por células con sus paredes suberificadas y es comparable a la
hipodermis que se presenta en algunos tallos. Puede ser una sola capa celular o varias, y en lo
que respecta a su estructura y características citoquímicas es similar a la endodermis, ya que se
deposita también sobre la pared interna de la pared primaria una lámina casi continua de
suberina, la cual es luego a su vez recubierta por capas de celulosa que se desarrollan
centrípetamente. También se deposita frecuentemente lignina en las paredes de las células
exodérmicas y en algunos casos, se ha podido observar también bandas de Caspary.
Peridermis
Normalmente la peridermis reemplaza a la epidermis en tallos y raíces con crecimiento
secundario. Está formada por un tejido suberógeno protector, muerto a la madurez y tiene unas
paredes muy suberificadas, por el cambium suberógeno o felógeno; y por la felodermis, un
tejido parenquimático vivo.
Lenticelas
En tallos y raíces con peridermis, el intercambio gaseoso se realiza mediante lenticelas, que son
zonas de la epidermis en que el felógeno (o cambium suberógeno) es más activo que en otras
zonas y da lugar a una formación tisular con muchos espacios intercelulares. Además, en las
zonas de lenticelas, el mismo felógeno contiene numerosos espacios intercelulares.
Las lenticelas empiezan a formarse durante el desarrollo de la primera peridermis y en el tallo,
generalmente aparecen por debajo de un estoma o grupo de estomas. En la superficie del tallo o
de la raíz, las lenticelas aparecen como áreas emergentes circulares, ovaladas o alargadas.
Parénquima
Es un tejido vegetal constituido por células que representan el menor grado en la escala de
diferenciación. Son células poco especializadas y forman el tejido fundamental de la planta,
encontrándose en la médula y el córtex de tallos, raíces, mesófilo de la hoja, pulpa de frutos,
endosperma de semilla y demás. Este tejido puede ser considerado el precursor de los otros
tejidos debido a que el cuerpo de las plantas primitivas está formado exclusivamente por células
parenquimáticas. En este tejido puede darse la fotosíntesis, respiración, almacenamiento de
reservas, secreción y excreción. En el xilema y floema estas células ayudan en el transporte de
agua por elementos traqueales no vivos y en el transporte de savia elaborada por elementos
cribosos.
Por el bajo nivel de diferenciación tienen gran plasticidad, es decir, son capaces de reanudar la
actividad meristemática en determinadas circunstancias.
Origen y estructura celular
Su origen es diverso; el parénquima del córtex y la médula, así como el del mesófilo de la hoja y
la flor se diferencia a partir del meristema fundamental. Por otra parte, el parénquima asociado
con tejido vascular primario y secundario también puede diferenciarse a partir del procambium
y el cambium vascular; también puede diferenciarse a partir del cambium suberoso en
organismos con crecimiento secundario, constituyendo la felodermis. En general estas células
presentan una variada estructura debido a la variedad de las funciones que realizan. Poseen
características celulares básicas comunes a todas ellas:
- células vivas con pared celular primaria no muy gruesa (aunque en las del xilema
secundario puede tener pared secundaria)
- ser bastante vacuolizadas
- ser más o menos isodiamétricas aunque su forma varía debido a las tensiones a que se
encuentran sometidas dentro del tejido.
Suelen estar asociadas dejando poco espacio intercelular aunque hay excepciones como el
parénquima esponjoso de las hojas. Los espacios se forman por separación de las células por su
lámina media o por lisis de algunas.
Tipos de parénquima.
Hay dos grupos: clorofílico y de reserva.
Clorofílico
Función: El parénquima clorofiliano o clorénquima es el tejido fotosintético por excelencia,
los cloroplastos se encargan de captar la energía lumínica transformándola en energía
química.
De día, durante cierto período de tiempo, los cloroplastos pueden contener almidón de
asimilación.
Localización: Especialmente en el mesófilo de las hojas, en tallos jóvenes y generalmente
en las partes verdes de la planta, a veces inclusive en la médula.
Parénquima de reserva.
Puede sintetizar y reservar distintas sustancias. El mismo protoplasma puede almacenar
en simultáneo varias reservas, en forma sólida o fluída. El hialoplasma puede contener
disueltos azúcares y otros hidratos de carbono o sustancias nitrogenadas en forma de
aminoácidos. La reserva más frecuente es el almidón, que está en el parénquima del
córtex y de la médula, de los tejidos conductores, frutos y semillas; también en hojas de
dicotiledóneas mientras que en monocotiledóneas la reserva más frecuente son los
azúcares solubles. Los sitios donde se acumulan estas sustancias son en vacuolas,
plástidos o paredes celulares.
Localización. El parénquima reservante se encuentra en raíces engrosadas (zanahoria,
remolacha), tallos subterráneos (tubérculo de papa, rizomas), en semillas, pulpa de frutas,
médula y partes profundas del córtex de tallos aéreos. Su estructura depende de la
sustancia almacenada.
Almidón: se acumula en amiloplastos, en células poliédricas con pequeños espacios
intercelulares
Laminar: El engrosamiento es más fuerte sobre las paredes tangenciales que sobre las
radiales. Cuando se presenta este colénquima suele estar dispuesto debajo de la epidermis.
XILEMA PRIMARIO
Contiene los elementos básicos del xilema, sin organización alguna. Se origina a
partir del procambium. En tallos, hojas y partes florales se presenta junto con el floema
primario asociados en cordones, los haces vasculares. En la raíz el xilema primario forma
un cuerpo central con o sin parénquima en el centro, o dispuesto en cordones. Está
integrado por protoxilema, parte temprana y metaxilema, parte tardía. El pasaje de una a
otra parte es gradual, lo que hace difícil su distinción.
El protoxilema se diferencia en las partes primarias del cuerpo de la planta qe no
han completado su crecimiento y diferenciación. Está formado por elementos conductores,
con engrosamientos de la pared secundaria en forma helicoidal o anular, y rodeado por
células parenquimáticas. En el vástago madura entre tejidos que se alargan activamente por
lo que está sujeto a tensiones. Sus elementos traqueales se estiran y destruyen; cuando
son destruidos, pueden quedar completamente anulados o parcialmente colapsados,
apareciendo como canales abiertos llamados lagunas protoxilemáticos. En la raíz, los
elementos del protoxilema persisten más porque maduran más allá de la región de máximo
crecimiento.
El metaxilema se inicia en el cuerpo primario de la planta que aún está creciendo,
pero madura luego que se ha completado el alargamiento. Está por lo tanto menos afectado
por la extensión primaria de los tejidos que lo rodean. Es más complejo que el protoxilema,
presenta más elementos traqueales que células parenquimáticas, con engrosamientos
helicoidales densos, reticulados, escalariformes o punteados. Las células parenquimáticas
pueden estar dispersas o en filas radiales. Los elementos traqueales son retenidos luego de
haberse completado el crecimiento, pero dejan de funcionar luego que se produce el xilema
secundario. En plantas que carecen de crecimiento secundario, sigue funcionando en los
órganos maduros.
Las células de los elementos traqueales primarios tienen una variedad de
espesamientos de pared secundaria. Las diferentes formas de paredes aparecen en series
ontogénicas específicas que indican un aumento progresivo en la extensión de la superficie
de la pared primaria cubierto por material de pared secundaria. En los elementos traqueales
tempranos las paredes secundarias asemejan anillos no conectados unos con otros
(espesamientos anulares). Los que se diferencian luego tienen espesamientos helicoidales
(espirales). Luego, células con espesamientos que pueden caracterizarse como hélices con
vueltas interconectadas (escalariformes). Éstos están seguidos por células con
espesamientos como redes o reticulados, y finalmente por elementos punteados.
No todos los tipos de espesamientos se observan en el xilema de una planta dada o
parte de ella, sino que se suceden unos a otros. Esta gradualidad hace imposible que se
pueda asignar decididamente tipos precisos de espesamientos de pared al protoxilema y al
metaxilema.
XILEMA SECUNDARIO
Forma parte del cuerpo con crecimiento secundario de la planta, y deriva del
cambium, cuya actividad periódica produce células fusiformes (traqueidas, tráqueas, fibras y
parénquima) y células radiales (células parenquimáticas del sistema radial). En cada
estación de crecimiento el cambium produce cierta cantidad de xilema secundario
constituyendo el anillo de crecimiento; en cada anillo se diferencian dos zonas: una poco
densa o leño temprano (de primavera) y otra más densa o leño tardío (de verano).
Está compuesto por dos sistemas diferentes de células: el axial (longitudinal o
vertical) y el radial (transversal u horizontal) o sistemas de radios. El sistema axial contiene
células o filas de células con sus ejes mayores orientados verticalmente en el tallo o la raíz,
paralelos al eje principal o longitudinal de ambos órganos. El radial está formado por filas de
células orientadas horizontalmente en relación con el eje del tallo o raíz, radios. Los radios
están formados por células vivas, parenquimáticas, estrechamente relacionados con las del
sistema axial, de modo que existe un radio de células vivas que comunican la médula con el
floema. Este radio puede variar en espesor, ser multiseriado (dos a varias células de ancho)
o uniseriado (una célula de ancho).
Capas o anillos de crecimiento: La actividad del cambium es periódica, y produce
en cada estación de crecimiento una cierta cantidad de xilema secundario, constituyendo
una capa o anillo de crecimiento. Cada una es producto de una estación, pero diversas
condiciones ambientales pueden inducir la formación de más de una capa de crecimiento.
Cada capa se puede dividir en leño temprano y leño tardío, siendo que el primero es menos
denso que el segundo ya que en el temprano predominan células de mayor diámetro, con
paredes más delgadas, y en el tardío las células son más angostas, con paredes más
gruesas. En los anillos de crecimiento se ve claramente el límite que separa el leño tardío
de una estación del leño temprano de la siguiente,ya que entre ambos el contraste es
marcado; en cambio el pasaje del leño temprano al tardío en una misma capa de
crecimiento es más gradual. Los volúmenes relativos de leño temprano son afectados por
las condiciones ambientales; en condiciones adversas hay un aumento relativo del leño
tardío generalmente. La aptitud para desarrollar capas de crecimiento está determinada por
la constitución genética de las diferentes especies.
El desarrollo del xilema secundario está muy influido por los factores que controlan la
actividad cambial. El funcionamiento intermitente del cambium que es estacional, se refleja
en la producción de incrementos de crecimiento en la madera. En términos generales, la
hormona auxina alcanza altos niveles cuando se dan condiciones que promueven el
crecimiento del vástago y el desarrollo continuado de las hojas. Las células producidas en el
xilema en ese momento son anchas del tipo del leño temprano. A la inversa, las condiciones
que afectan negativamente al crecimiento del vástago, rebajan el nivel de auxina difusible e
inducen la formación de células angostas y achatadas del tipo del leño tardío.
FLOEMA
El floema es el tejido conductor de alimentos, se encuentra asociado con el xilema
en el sistema vascular. Consta de varios tipos celulares y puede ser clasificado desde el
punto de vista del desarrollo como un tejido primario y secundario. El floema primario deriva
del procambium, y el floema secundario del cambium vascular, reflejando la organización de
éste meristema ya que tiene un sistema axial y uno radial.
El tejido floemático se encuentra menos esclerosado y es menos resistente que el
xilemático. Se encuentra en posición próxima a la periferia del tallo y raíz, modificándose en
relación con el aumento de la circunferencia del eje, e interrumpiéndose por la peridermis.
Tipos celulares
Los tejidos floemáticos primario y secundario contienen las mismas categorías de
células, pero el primario no está organizado en dos sistemas, el axial y el radial.
- Elementos cribosos: son las células más especializadas del floema. Poseen
protoplastos ontogénicamente modificados con una actividad metabólica restringida,
mantienen una estrecha conexión con los elementos cribosos contiguos a través de
áreas de la pared denominadas áreas cribosas atravesadas por poros.
La pared celular de los elementos cribosos varía en espesor pero es visiblemente
más gruesa que las de las células parenquimáticas que los rodean. Son paredes muy
gruesas.
Las áreas cribosas son áreas de la pared provistas de poros, a través de los cuales
se conectan entre sí los protoplastos de elementos cribosos adosados vertical o
lateralmente. Los poros varían de diámetro, las áreas cribosas con poros más grandes
generalmente se hallan en las paredes terminales. Las partes de la pared en que están las
áreas cribosas más diferenciadas (poros más grandes), se llaman placas cribosas.
Los poros están tapizados con calosa, un carbohidrato que da glucosa por hidrólisis.
La calosa se acumula a medida que el elemento criboso envejece. El poro se va
estrechando hasta obliterarse completamente, quedando el elemento criboso inactivo o
muere. Cuando las células están en estado funcional la calosa es poca o está ausente; se
sintetiza muy rápidamente en respuesta a lesiones; su depósito es una respuesta a los
estímulos internos.
Elementos del tubo criboso unidos mediante las áreas cribosas forman tubos
cribosos. Un tubo criboso es una serie de miembros de tubos cribosos conectados extremo
con extremo por medio de placas cribosas. Los extremos pueden ser transversales o más o
menos inclinados y superpuestos.
- Células cribosas: alargadas, delgadas, con extremos puntiagudos; se
superponen unas con otras y se comunican por medio de placas cribosas
poco evolucionadas y áreas cribosas (áreas atravesadas por poros)
- Células anexas o acompañantes: son células especializadas en relación con
la asociación funcional que presentan con los elementos cribosos. Están
conectadas a los elementos mediante plasmodesmos y su longevidad
depende también de ellos. Sus núcleos y nucleolos son grandes, contienen
plastos, mitocondrias grandes y numerosas, y retículo endoplasmático.
Presentan abundancia de ribosomas; están vacuoladas en diversos grados.
Están vinculadas a los elementos conductores con el fin de funcionar como
células de carga y descarga de los mismos. El intercambio constante de
azúcares establece gradientes de sacarosa que están relacionados con la
determinación de la velocidad y dirección del movimiento. Estas sustancias
pueden ser además fuente de energía para el mecanismo de traslado en los
mismos conductos.
La vinculación entre elementos y células acompañantes se da
mediante campos de puntuación primaria y por áreas cribosas. Cuando la
célula del tubo pierde el núcleo, depende de la célula anexa para sobrevivir,
ya que su núcleo controlará la función de ambas.
- Células parenquimáticas: están destinadas a la reserva de sustancias
ergásticas tales como almidón, taninos y cristales. Aquellas que forman
cristales pueden dividirse en células pequeñas, que contienen cada una un
solo cristal, se encuentran asociadas con fibras o esclereidas, y tienen
paredes lignificadas con espesamientos secundarios. Las células
parenquimáticas asociadas a elementos cribosos funcionan en la carga y
descarga de los tubos. En el floema primario toman aspecto alargado
horizontalmente, y en el secundario, verticalmente.
- Células de esclerénquima y fibras: las fibras son comunes tanto al floema
primario como secundario. En el primario aparecen en la parte más externa
del tejido, en el secundario en diversos tipos de distribución entre otras
células floemáticas del sistema axial. Pueden ser septadas o no, y estar vivas
o no a la madurez. Su función es de almacenamiento. Las esclereidas
pueden aparecer en combinación con las fibras o solas, y presentarse tanto
en el sistema axial como radial del floema secundario. Se diferencian
especialmente en las zonas más viejas del floema como resultado de una
esclerosis de las células parenquimáticas. La esclerosis puede estar
precedida por el crecimiento intrusivo de las células, ocasionando una
ramificación y/o alargamiento de las esclereidas.
La distinción entre fibras y esclereidas no es clara, especialmente si
las esclereidas son largas y delgadas; los tipos celulares intermedios son las
fibroesclereidas.
FLOEMA PRIMARIO
FLOEMA SECUNDARIO
Hidatodos
En muchas monocotiledóneas y dicotiledóneas, aparecen en los ápices foliares, en los dientes
del borde de la hoja o simplemente frente al extremo de los grandes nervios foliares, grupos de
pequeñas células parenquimáticas sin clorofila, que segregan agua líquida. Estas células,
llamadas epitemas, se sitúan debajo de los estomas acuíferos especiales y junto con dichos
estomas constituyen hidatodos epitémicos.
Además de estos tejidos secretores parenquimáticos pueden también eliminar agua líquida los
hidatodos epidérmicos que a veces son grupos de células epidérmicas metamorfoseadas y
otras veces pelos pluricelulares: hidatodos tricomáticos.
Tricomas
Son apéndices epidérmicos de forma, estructura y funciones muy diversas. Dentro de estos se
consideran los pelos glandulares y protectores, las escamas, diferentes tipos de papilas y
también pelos radicales.
Se diferencian de las espinas por ser exclusivamente epidérmicos. Pueden encontrarse en toda
la planta, pudiendo ser persistentes o bien con un período de vida muy corto. De los que
persisten, algunos mantienen protoplasma vivo mientras que otros lo pierden y quedan
finalmente secos.
En Pinguicula se adhieren también pequeños animales a las cabezuelas glandulares viscosas de
los pelos de la cara superior de la hoja. En ambos casos los animales capturados mueren pronto,
las substancias solubles de su cuerpo se aíslan químicamente por acción de los fermentos
segregados por las glándulas digestivas y son captados a continuación por pelos absorbentes.
Se ha demostrado que, como fenómeno general, las iniciales que son responsables de la
distribución celular original en buena parte cesan de ser mitóticamente activas durante el
crecimiento posterior de la raíz. Son sustituidas en esta actividad por células localizadas más
profundamente en el cuerpo de la raíz. Esto ha llevado a desarrollar el concepto de centro
quiescente en el meristema apical (más desarrollado previamente en Meristemas).
La primera raíz en una planta con semilla se desarrolla a partir del meristema apical en el extremo de
la raíz del embrión. Ésta, se denomina raíz principal o raíz primaria. En las gimnospermas y
dicotiledóneas, la raíz principal y sus raíces laterales ramificadas constituyen el sistema radicular.
Esta condición se llama alorricia y genera una raíz pivotante o axonomorfa en la que el eje principal
está más desarrollado que sus ramificaciones o raíces laterales.
No siempre la raíz adulta proviene de la radícula embrional. En Pteridofitas y monocotiledóneas se
encuentra otro modo de desarrollo radicular diferente del alorrícico, conocido como homorricia, en el
que no hay raíces principales.
La Homorricia Pteridofítica se conoce como homorricia primaria (atrofia temprana de la raíz
embrional) y la homorricia monocotiledónea se conoce como homorricia secundaria (atrofia de la raíz
primaria que llega a desarrollarse, pero no sobrevive por mucho tiempo).
En las Monocotiledóneas, la primera raíz generalmente vive un tiempo relativamente breve y el
sistema radicular está formado por raíces adventicias, que nacen del vástago, a menudo en conexión
con yemas axilares. Aunque estas raíces se ramifican, forman un sistema bastante homogéneo, al
que se conoce como sistema radicular fibroso. Aparecen en sitios no habituales de la planta (como
hojas) o bien se originan a consecuencia de traumatismos (en hojas que sufrieron lesiones o tallos
con tratamiento hormonal)
Dicot
Epidermis/rizodermis
La rizodermis está formada generalmente por una sola capa de células no cutinizadas, permeables al
agua y sin estomas. Son células activas en la absorción y llevan pelos radicales.
La protodermis de las raíces de monocotiledóneas es apartada como un derivado de las iniciales que
también dan origen a la corteza. En las dicotiledóneas, la protodermis está separada por divisiones
periclinales (en T) de las derivadas de la capa de iniciales que forma la cofia. En raíces que no tienen
estratos distinguibles de iniciales, la protodermis tiene un origen común con la cofia y la corteza, y no
está claramente definida en las etapas tempranas del desarrollo.
En las raíces jóvenes la epidermis está especializada como un tejido absorbente y generalmente
lleva pelos radicales, que son extensiones tubulares de las células epidérmicas. En algunas plantas,
las células protodérmicas que dan origen a los pelos absorbentes son más pequeñas que sus
hermanas y muestran otras características que indican especialización como formadoras de pelos o
tricoblastos.
Los pelos radicales surgen como pequeñas papilas en la región donde la división celular se va
reduciendo, y alcanza su máximo desarrollo a un nivel de la raíz donde por lo menos el primer xilema
está maduro.
Los pelos radicales aumentan notablemente la superficie absorbente de la raíz. Se cree que una
parte relativamente pequeña de la totalidad de los pelos radicales es suficiente para la transpiración y
el crecimiento de la planta. Esto sería particularmente importante cuando la humedad está
desigualmente distribuida en el suelo. La función absorbente no está restringida a los pelos radicales,
ya que otras células epidérmicas absorben también.
En la parte absorbente de la raíz, se ha identificado sobre la epidermis, incluso en los pelos radicales,
una cutícula delgada. Si la epidermis es persistente puede mostrar eventualmente una cutinización
notable.
En las raíces aéreas de plantas tropicales y epífitas, así como en algunas monocotiledóneas
terrestres, la epidermis se desarrolla dando un tejido multiseriado (epidermis múltiple) llamado
velamen. Éste consta de células muertas, compactamente dispuestas, y que a menudo tienen
espesamientos de pared secundaria en forma de numerosas y angostas fajas. El velamen se
interpreta generalmente como un tejido de absorción; en otras plantas funciona como un tejido de
protección mecánica y reducción de la pérdida de agua de la corteza.
La cofia se interpreta como una estructura protectora del meristema apical, que facilita el crecimiento
de la raíz al penetrar en el suelo. Consta de células parenquimáticas vivas derivadas del meristema
apical por divisiones que aportan células que se alejan cada vez más del ápice. Esta parte del
meristema apical a menudo aparece como un meristema diferente llamado caliptrógeno. A medida
que las nuevas células se producen, las células de la periferia de la cofia son descartadas.
Las condiciones ambientales afectan el desarrollo de la cofia.
Las puntas de las raíces que crecen en el suelo están revestidas de cantidades más o menos
grandes de mucílago. La cofia parece ser la principal fuente del mismo, aunque este material aparece
también en la superficie de la raíz joven a niveles libres de cofia y extendiéndose hasta la zona
pilífera.
La cofia ha sido considerada por mucho tiempo como un órgano que controla la georreacción de la
raíz. Cuando las raíces que crecen normalmente hacia abajo son colocadas horizontalmente, el
crecimiento prosigue en la zona de alargamiento según una curva hasta alcanzar la orientación
normal hacia abajo. Si se extirpa la punta de la raíz o cofia el crecimiento no se detiene, pero la
reacción geotrópica se pierde hasta que se regenera la cofia.
El lugar de percepción de la gravedad en la cofia es la columna central de células en cuales los
amiloplastos actúan como estatolitos.
La reacción geotrópica de la raíz es afectada por la luz, así como por la gravedad.
CORTEZA
Es una capa uniseriada de células ubicada entre la estela y la corteza parenquimática. Esta capa
celular tiene caracteres distintivos y sus células se disponen sin espacios intercelulares. Las
paredes celulares presentan en áreas restringidas, depósitos de una sustancia impermeable al
agua, la suberina. Como también reacciona a los colorantes de la lignina, se la designa como
lignosuberina. Esta, se deposita en las células jóvenes sobre las paredes radiales y transversales
formando las bandas de Caspary. Esta etapa persiste hasta la madurez en pteridofitas y la
mayoría de dicotiledóneas.
En monocotiledóneas y algunas gimnospermas se deposita por aposición sobre las bandas de
Caspary una lámina casi continua de suberina en las paredes radiales, transversales y tangensial
interna. Este engrosamiento se ve en C.T. con forma de “U” o herradura. En algunas especies
también se deposita lignosuberina sobre la pared tangencial externa, formando una “O” en C.T..
en la endodermis en U o en O no se depositan capas adicionales de lignosuberina en algunas
células endodérmicas enfrentadas a los corcones del xilema; estas células se denominan células
de paso.
La función de la endodermis es limitar el paso de sustancias desde la corteza al cilindro central.
Es una barrera efectiva para el movimiento del agua a través de paredes celulares y espacios
intercelulares; asegura que solo penetren en el tejido vascular aquellas sustancias que pueden
atravesar la membrana plasmática ejerciendo una acción selectiva. Otra función adicional es
mecánica, ya que sus células engrosadas son resistentes y protegen las células delicadas del
floema.
Está situada debajo de la epidermis. Sus células pueden tener bandas de Caspary pero por lo
común parecen tener una laminilla de suberina cubierta por una pared celulósica. La exodermis
contiene un solo tipo de células o células cortas y largas; pueden ser varias capas. A veces se
cutiniza o suberifica. Si la epidermis se desintegra, la exodermis pasa a ser la capa protectora
más externa en raíces cuya corteza no se desprende. Esto sucede en muchas monocotiledóneas.
Se encuentra rodeando los tejidos conductores y formando el tejido mas externo del cilindro
central. Se compone enteramente de células parenquimáticas y a veces, puede contener
esclerénquima. Es generalmente uniestratificado pero puede ser multiseriado. Es un tejido de
suma importancia porque da origen a las ramificaciones de las raíces, el felógeno y una parte del
cambium vascular.
Estas formaciones son posibles porque las células del periciclo conservan su capacidad para la
división celular y el crecimiento, aún después de haber alcanzado su madurez fisiológica.
Es la capa limitante de la estela. En las plantas con semillas el periciclo de la raíz se origina de la
misma parte del meristema apical que los tejidos vasculares.
Estela
Se denomina estela al conjunto de haces de los órganos axiales, junto con la endodermis, el
periciclo y la médula (caso de que existan). En los diferentes grupos de cormófitos la estela se ha
formado de manera muy diferente. Sin embargo, filogenéticamente tal vez exista un origen
común (teoría estélica). Suelen distinguirse los siguientes tipos:
● Protostela: haz conductor central y concéntrico, a menudo (no siempre) con xilema
interno. Se considera especialmente primitiva: era característica de las plantas
terrestres más antiguas y se encuentra todavía en las formas jóvenes de muchos
pteridófitos.
● Actinostela: Haz recio, central, cuyo xilema (interno) es estrellado en sección
transversal y alberga floema entre sus radios. También aparecía en pteridofitos
primitivos y en la actualidad está muy difundida en licopodios. También el cilindro
central de la raíz corresponde a este tipo de estela, sólo que en ella, no desemboca
ningún cordón de los rastros foliares.
● Polistela: Sistema de haces centrales paralelos al eje y en su mayoría concéntricos, que
se distribuyen por toda por toda la sección del tallo. Probablemente, la polistela proceda
de la actinostela a través de una escisión progresiva. La plectostela se interpreta como
una forma intermedia.
● Sifonostela: Cordón tubular de haces conductores con médula central, como aparece en
determinados pteridófitos.
● Dictiostela: el típico “tubo fascicular” de la mayoría de los pteridofitos. Este sistema
reticulado de haces está formado por cordones de rastros foliares, cada uno de los cuales
constituye un haz conductor central con una vaina hística envolvente de periciclo y
endodermis.
● Eustela: es el tipo de estela de las dicotiledóneas herbáceas. Corresponde en conjunto a
un haz conductor concéntrico con médula incluida, por lo que el tejido conductor está
dividido por los radios medulares en varios haces aparentemente independientes. Cada
uno de éstos no es concéntrico, sino colateral. Toda estela, sin embargo, está rodeada de
una endodermis común. Y en las plantas leñosas dicotiledóneas (filogenéticamente más
primitivas que las plantas perennes y herbáceas), la división de una haz conductor
concéntrico en varios o muchos haces parciales colaterales no ha tenido lugar todavía o
no ha progresado tanto.
● Atactostela: Monocotiledóneas. Puede reducirse a una haz conductor concéntrico, pero
aquí también los haces individuales son colaterales, y se bosqueja una, por lo menos,
vaina hística común para toda la estela.
Laguna parenquimática
Si se recorre la columna del cilindro central del tallo formada por los tejidos vasculares, se
observará que un haz vascular se desvía hacia la periferia del tallo para luego penetrar en la
hoja. Se establece así, una continuidad entre el sistema vascular caulinar y foliar. El haz vascular
que se desvía para penetrar en la hoja se llama rastro o traza foliar. A la región parenquimática
que ocupa el lugar dejado por el haz vascular se llama laguna foliar. Las estructuras son mucho
más complejas porque puede haber dos o más hojas por nudo del tallo, también se pueden
desviar varios haces vasculares para la misma hoja, los cuales pueden permanecer
independientes o fusionarse. Por otro lado, se le suman los haces que se desvían hacia la yema
axilar, etc. Así puede haber varias trazas foliares con una laguna foliar o con varias lagunas
foliares y viceversa.
Tipos de haces
● Haz vascular colateral: el xilema se ubica hacia un lado y el floema (por encima) hacia
el otro lado
● Haz vascular colateral cerrado: haz vascular colateral sin cambium vascular.
Característico de las Angiospermas-Monocotiledóneas.
● Haz vascular colateral abierto: haz vascular colateral con cambium vascular.
Característico de las Gimnospermas y Angiospermas-Dicotiledóneas.
● Haz vascular bicolateral abierto: como un haz colateral abierto al que se le suma
floema interno.
Teoría de la enación
Según esta teoría, a partir de un tallo aparece una “excresencia o enación”que consiste en una
protuberancia que en un primer momento no presenta ninguna diferenciación del cordón
vascular; luego a partir de este cordón aparece una estructura lateral, similar al tubo principal
pero de menor tamaño. Una vez formada esta estructura, los haces vasculares podrían penetrar
en ellos, dando lugar a los micrófilos.
→ La mayoría de las psilofitas son organismos extintos hace ya 350 millones de años y fueron
los primeros vegetales con haces conductores que colonizaron la tierra. Poseían un tallo verde
fotosintético sin hojas y fijo al sustrato por rizomas horizontales, no disponían de verdaderas
raíces. El orden psilofitales lo componían especies ya extintas, entre ellas, las del género Rhymia.
Con la desaparición de las psilofitales, las licopodofitas alcanzaron su máximo desarrollo hace
300 millones de años, durante el carbonífero. En la actualidad están reducidas a plantas
herbáceas, perennes y de organización cormófita completa sin crecimiento secundario. Suelen
presentar ramificación dicotómica, aunque una de las ramas se desarrolla más que la otra y
parecen monopódicos. Presentan micrófilos y tienen un único nervio central sin ramificar y
dispuesto espiralmente alrededor del vástago. Además poseen hojas modificadas, esporofilos,
donde se encuentran los esporangios.
Por otro lado, en los micrófilos el mesofilo no están aún dividido en parénquima esponjoso y en
empalizada y los haces de floema no poseen placas cribosas.
Existen 4 órdenes de licopodios:
Licopodiales → Lycopodium
Selaginelales → Selaginella
Isoetales y Lepidodendrales.
Con el paso del tiempo, dos procesos evolutivos marcaron el desarrollo de éstas plantas y la
progresiva complejidad estelar del grupo: la progresiva parenquimatización central de los ejes
vasculares y la aparición del megafilo, comúnmente conocidos como frondes con vernación
circinada característica. La lámina puede ser simple o varias veces dividida (pinnada,
bipinnada).
Hoja gimnospérmica
En Pinus varía la forma del corte transversal, de suborbicular a triangular, según sea el número
de hojas que presenta cada especie en los braquiblastos.
La epidermis está formada por células con paredes gruesas, fuertemente cutinizadas, a veces los
lúmenes están completamente obliterados. Por debajo de la misma hay una capa, la
hipodermis, con células de paredes gruesas y lignificadas.
Los estomas están distribuidos siguiendo líneas paralelas al eje de la hoja. La hipodermis se
interrumpe a la altura de los estomas, de manera que en corte, éstos se muestran
profundamente hundidos, las células oclusivas, situadas más profundamente que las células
epidérmicas, están en contacto con las del mesófilo.
En las hojas aciculares de Pinus el tejido vascular está representado por dos hacecillos con
xilema hacia la cara adaxial y floema hacia abajo. Los haces están rodeados por un tejido
particular, el tejido de transfusión, típico de Gimnospermas, que comprende dos clases de
células: las parenquimáticas, vivas, con paredes celulósicas, y las traqueidas de transfusión,
muertas, con paredes lignificadas con puntuaciones areoladas. Este tejido puede observarse en
la mayor parte de las gimnospermas, varía en cantidad y disposición.
El tejido de transfusión está separado del parénquima clorofiliano por una capa de células con
paredes muy gruesas: endodermis o vaina protectora. En estados tempranos presenta banda
de Caspary, y a la madurez tiene paredes secundarias lignificadas con la suberina confinada a las
paredes anticlinales. La endodermis está presente en Pinaceae, Ginkgo y Cycas. En Sequoia
sempervirens, Metasequoia glyptostroboides y Araucaria excelsa los haces vasculares están
rodeados sólo por una vaina parenquimática.
Megafilo angiospérmico
Las hojas son expansiones laterales de gran importancia funcional que se presentan en el tallo.
Estas pueden clasificarse en microfilos o megafilos, según su origen.
En cuanto a la morfología, en las angiospermas, el tejido fotosintético de la hoja se presenta en
forma de una estructura laminar, el limbo. En las hojas sésiles, el limbo se une directamente al
tallo, mientras que en los demás casos se presenta un apéndice, el pecíolo, el cual se inserta en
el tallo por la llamada base foliar.
En la mayor parte de monocotiledóneas y en unas pocas dicotiledóneas, la base de la hoja
presenta un marcado ensanchamiento o vaina que rodea al tallo. Cuando existe un sólo limbo, la
hoja es simple, mientras que cuando hay más de uno, tenemos una hoja compuesta, llamándose
en este caso a cada uno de sus limbos folíolos y al eje central al que van unidos, raquis.
Cuando las hojas tienen apéndices basales, se denominan estípulas, las cuales a veces son verdes
y llevan a cabo la fotosíntesis, pero cuya principal función es proteger a las hojas jóvenes
durante su desarrollo.
En algunas plantas (acacias) el limbo de las hojas es pequeño y es sustituido en su función
fotosintética por el pecíolo, que adopta una forma muy aplanada. Este tipo de órgano
especializado recibe el nombre de filodio.
En cuanto a la nerviación de las hojas (disposición de los tejidos conductores), suele haber en las
dicotiledóneas un nervio principal y una red de nervios secundarios (nerviación reticulada),
mientras que en monocotiledóneas suele encontrarse una serie de nervios de similar calibre y
más o menos paralelos.
Aunque la mayoría de las hojas tienen simetría dorsiventral, pueden a veces ser aplanadas
lateralmente (iris) o ser cilíndricas (coníferas) o tener forma tubular (plantas insectívoras).
Origen de la hoja
De acuerdo con la filotaxis, es decir, con el patrón determinado que sigue la disposición de las
hojas en el tallo, se van formado los primordios de las mismas en el meristemo apical.
A los lados del meristemo apical, a distancia variable del extremo, ocurren diferentes procesos
que preceden a la formación de un primordio foliar.
Normalmente, cuando se va a formar un primordio, tienen lugar divisiones periclinales en un
grupo de células situadas en el flanco apical, a menudo en la segunda o tercera capa de células,
aunque pueden ocurrir también a veces en la capa superficial (mayoría de coníferas y algunas
monocotiledóneas). En las dicotiledóneas, la capa superficial de células no sufren generalmente
divisiones periclinales, sino sólo anticlinales, para dar lugar a la epidermis del primordio de la
hoja. Si la hoja va a tener una inserción estrecha en el tallo, las divisiones que le van a dar origen
se encuentran bien localizadas en el meristemo apical. Por el contrario, si la hoja va a tener una
amplia base o incluso va a envainar al tallo, las divisiones empiezan en un sitio definido del
meristemo apical, pero luego se propagan lateralmente.
Desarrollo de la hoja
El crecimiento de la hoja es resultado de la actividad de
varios meristemas: apical, adaxial, marginal, laminar e
intercalar. De la actividad relativa de estos meristemos,
los cuales funcionan simultánea o secuencialmente,
resulta la amplia variedad que existe en el reino vegetal
en cuanto a la forma de la hoja.
En los primeros estadíos, el primordio foliar muestra un
crecimiento apical, formandose una estructura alargada.
En muchas especies el crecimiento es más rápido en el
lado abaxial del primordio, por lo que normalmente se
curva el primordio sobre el meristemo apical del que
origina, proporcionando protección al mismo.
Mientras que en helechos tiene lugar un crecimiento
apical prolongado, gracias a la actividad de la célula
apical, en angiospermas y gimnospermas esto no ocurre,
sino que el crecimiento apical se detiene bastante pronto
durante el desarrollo del primordio. El crecimiento
posterior de la hoja en longitud se origina por medio de
divisiones celulares y crecimiento en todo el primordio,
de manera que las divisiones se detienen primero en el
extremo de la hoja y es en la base de la misma donde
dicha detención tiene lugar más tarde.
En cuanto al crecimiento en amplitud (aumento de
superficie) del limbo de la hoja, el mismo tiene lugar
gracias a la aparición de meristemas marginales cuando
el primordio foliar ha alcanzado cierto tamaño.
Lateralmente aparecen pequeñas protuberancias
(meristemos marginales) y mediante la actividad de
estos meristemos se forman las distintas capas celulares
que constituyen el mesófilo de la hoja. En las hojas que
tienen pecíolo, este crecimiento marginal no tiene lugar
en la región basal del eje foliar, la cual se transformará
en pecíolo. Cuando cesa el crecimiento marginal, puede
incrementarse la superficie de la hoja gracias a la
actividad de diversas capas celulares de la lámina, en las
cuales tienen lugar, principalmente, divisiones anticlinales (perpendiculares a la superficie
foliar). A esto es lo que se denomina meristemo laminar.
Por lo que respecta al engrosamiento dorsiventral de la hoja, en muchas dicotiledóneas éste es
resultado de la actividad del meristemo adaxial, banda de células situadas debajo de la
epidermis adaxial, generalmente en el eje foliar. Estas células se dividen periclinalmente y
aumenta de este modo el groso, especialmente del pecíolo y el nervio principal.
Histología de la hoja desarrollada
Si nos referimos al limbo de la hoja de las angiospermas, se encuentran en el mismo una
epidermis superior e inferior (adaxial y abaxial), el mesófilo (tejido fundamental) y el sistema
vascular, formado por los nervios.
Epidermis
Normalmente es uniestratificada, a excepción de algunas plantas en las que se presentan una
epidermis múltiple. En la epidermis se encuentran los diferentes tipos celulares ya mencionados
anteriormente (epidérmicas, células oclusivas de los estomas, con sus células anexas y diversos
tipos de tricomas.
Lo más normal es que las células epidérmicas de la hoja, a excepción de las oclusivas de las
hojas, no presenten cloroplastos bien desarrollados.
Sobre la epidermis se presenta una cutícula más o menos desarrollada. En las plantas de hábitat
muy húmedo(higrófitas) y moderadamente húmedo (mesófitas), las paredes de las células
epidérmicas son delgadas, mientras que cuando el hábitat es muy seco (xerófitas) se presentan
dichas paredes engrosadas y lignificadas, resultando bastante común que la epidermis sea
pluriestratificada.
Mesófilo
Constituye generalmente el tejido fotosintético, es el tejido fundamental de la hoja. En la
mayoría de las dicotiledóneas se presentan en el mesófilo dos tipos de parénquima bien
diferenciados: parénquima en empalizada y esponjoso.
El parénquima en empalizada, generalmente en el haz del limbo, las células son normalmente
alargadas, contienen muchos cloroplastos y se disponen bastante regularmente en una o más
capas. A veces éstas células pueden ser casi isodiamétricas o incluso de forma irregular.
Es el parénquima clorofílico más especializado, disponiéndose los cloroplastos durante la
fotosíntesis junto a la pared de manera que van realizando un movimiento más o menos circular
a lo largo de la misma, debido a corrientes citoplasmáticas (ciclosis).
El parénquima esponjoso por su parte está constituido por células irregulares, ramificadas, de
formas variadas, separadas entre sí por grandes espacios intercelulares. Estas células también
contienen cloroplastos pero en menor medida que el parénquima en empalizada.
La estructura esponjosa o lagunar del mesófilo permite un gran intercambio de gases entre el
tejido fotosintético y el medio ambiente, ya que existe una continuidad entre los espacios
intercelulares y las cámaras subestomáticas de los estomas.
En muchas dicotiledóneas y monocotiledóneas, las células que rodean a los haces vasculares de
la hoja se diferencian de las células vecinas del mesófilo debido a que son normalmente
mayores, presentan menos cloroplastos y a veces se observa en ellas almidón. Asimismo,
pueden presentar en las paredes celulares más engrosadas. Estas células forman las llamadas
vainas de los haces, las cuales pueden considerarse como una endodermis de la hoja, ya que se
observan a veces las bandas de Caspary típicas de las células endodérmicas de la raíz.
Sistema vascular
El sistema de haces vasculares de la hoja, su nerviación, tiene una importancia fundamental para
su morfología. En la mayoría de las dicotiledóneas existe un nervio medio y una serie de nervios
laterales, formándose una red vascular en la cual el diámetro de los nervios va disminuyendo
conforme se ramifican los mismos (nerviación reticulada). Por el contrario, la mayor parte de las
monocotiledóneas presentan un conjunto de nervios paralelos de similar calibre, conectados
lateralmente por nervios menores (nerviación paralela).
Los nervios pueden estar formados un solo haz vascular o por el conjunto de haces. Según el
tamaño de los haces vasculares, existen diferencias, tanto cualitativas como cuantitativas, en
cuanto a la composición histológica, ya que mientras los haces mayores presentan una cantidad
de xilema y floema similar a la que existe en el pecíolo y en la traza foliar, no ocurre así para los
haces menores.
Si los haces vasculares son colaterales, se encuentra generalmente el xilema en el lado adaxial y
el floema en el abaxial. En el caso de que los haces sean bicolaterales, puede faltar el floema
adaxial en los nervios pequeños.
En cortes transversales de los nervios, pueden observarse los haces vasculares que los
componen formando un círculo, un semicírculo o bien distribuirse de forma irregular. Cuando el
nervio está formado por un solo haz vascular, puede el mismo ser circular o de media luna.
Mientras los nervios mayores, en las dicotiledóneas, pueden presentar tejidos primarios y
secundarios, en los nervios menores se observan únicamente tejidos primarios. Por otra parte,
mientras que en los nervios mayores se observan vasos y tubos cribosos, en los nervios
pequeños no existen vasos, sino que en ellos los únicos elementos traqueales son las traqueidas,
con engrosamientos de pared secundaria anulares o helicoidales. En la parte final de las
ramificaciones más pequeñas, puede haber como únicos elementos del floema, células
parenquimáticas.
Existe una relación muy estrecha entre el sistema vascular de la hoja y el mesófilo de la misma,
por lo que se observan en este último muy pocos espacios que no presenten nervios. Al parecer,
hay una relación directa entre el desarrollo de los tejidos fotosintéticos de la hoja y el desarrollo
de sus tejidos conductores.
Hojas modificadas
● Antófilos: piezas florales (flor, pétalos, estambres, carpelos)
● Brácteas: hojas protectoras. Ej: Cala
● Catáfilas: hojas modificadas y reducidas que generalmente protegen a las yemas de la
planta que se hallan en reposo, particularmente en órganos subterráneos de reserva
como bulbos y rizomas. Ej: Cebolla.
● Espinas foliares: Modificaciones agudas, muy ricas en tejidos de sostén y como
consecuencia, rígidas; Ej: cactus.
● Digestivas. Ej: Plantas carnívoras.
● Zarcillos foliares: son órganos filamentosos, simples o ramificados, haptotrópicos que la
planta utiliza exclusivamente para trepar. Tienen origen por transformación del limbo
foliar o de otra parte de la hoja. Ej: zapallo, zarcillos.
● Filodios: se le da este nombre a un pecíolo dilatado y lámina que sustituye a la lámina de
la hoja, por lo general totalmente abortada. Se presenta en algunas especies de Acacia.
Ciclos de vida.
Comprende su desarrollo desde las estructuras vitales con las cuales se inició hasta que
alcanza la madurez y es capaz de producir estructuras semejantes a aquellas de las
cuales provino.
Alternancia de generaciones.
Es el ciclo llamado digenético haplodiplonte. Es la existencia de dos individuos distintos
morfológicamente (gametofito y esporofito), que pueden ser independientes o no y que
se reproducen de modo distinto. En general, la alternancia comienza con la formación
de un individuo diploide, el esporofito, que mediante R! origina una serie de esporas
haploides. Estas, al germinar desarrollan un nuevo individuo haploide, el gametofito,
distinto al esporofito y sobre el que se desarrollan los gametangios que producen
gametas. Por fusión de estas gametas se forma un cigoto diploide . Se produce tanto por
la alternancia de generaciones como por las fases nucleares (haploide y diploide). En la
mayoría de los vegetales una generación se desarrolla a expensas de otra, de la cual se
nutre. En otras son fisiológicamente independientes.
Los ciclos se clasifican según la cantidad de generaciones que tienen, los ciclos
monogenéticos tienen 1 sola generación, los digenéticos tienen 2 generaciones y los
trigenéticos, 3.
Se considera ciclo monogenéticos a los que su generación es haploide (monogenético
haplodiplonte). Como la única generación es haploide, también las gametas lo son,
formadas por divisiones mitóticas de los gametangios. Tras la F! la 1ra división del
cigoto es meiótica.
Otro tipo de ciclo monogenético es aquel cuya generación es 2n y se llama
monogenético diplonte. En este ciclo los individuos 2n darán por R! las gametas n .
Después de la F! el cigoto originará nuevos individuos 2n por sucesivas M! (Reducción
gamética)
Las plantas desarrollaron algunas adaptaciones que las ayudaron a abordar estos problemas en
la tierra seca. Una de las primeras y más importantes fue la evolución de los tejidos vasculares.
Los tejidos vasculares forman un "sistema de tuberías" en las plantas; transportan agua y
minerales desde el suelo hacia las hojas para la fotosíntesis y también alimento (azúcar disuelta
en agua) desde células fotosintéticas hacia otras células en la planta para el crecimiento o el
almacenamiento. La evolución de los tejidos vasculares revolucionó el reino de las plantas. Los
tejidos permitieron que las plantas crecieran grandes y soportaran periodos de sequía en
ambientes terrestres severos.
8.2 Pteridófitos
Las pteridofitas reúnen numerosos grupos de plantas vasculares. Incluyen helechos
(isosporados) y varias clases de plantas afines con los helechos isosporados o más raramente,
heterosporados. Representan un taxón numeroso, complejo y diverso, así como muy antiguo. Se
habría originado en el Devónico inferior y algunos de los linajes primitivos han llegado hasta la
actualidad, mientras que muchos otros se han extinguido.
Son cormófitas con alternancia de generaciones bien manifiesta, independientes en el tiempo y
espacio. La generación esporofítica (dominante) más desarrollada que la gametofítica, se
encuentra diferenciada en raíz, tallo y hoja.
Las raíces difieren, por su ontogenia, de las raíces de otras plantas vasculares: son plantas
homorrícicas (homorrizia I) en las cuales el polo radicular original, lateral en el embrión, se
atrofia tempranamente, ya que aquél está vinculado durante las primeras etapas del desarrollo
por medio de un haustorio al gametofito nutriente. Sólo cuando la madurez del esporofito hace
necesaria una mayor proporción de nutrientes, éste se separa del gametofito y produce una raíz
definitiva que recibe el nombre de caulógena.
Los tallos son rizomas rastreros, suberectos o erectos.
La progresiva parenquimatización central de los ejes vasculares y la aparición del megafilo son
responsables de la progresiva complejidad estelar del grupo.
Las expansiones laminares pueden ser de tres tipos:
● Enación: sin vascularización. Ej: Psilotum.
● Microfilos: Cuyo único nervio es un haz vascular formado por xilema y escaso
parénquima floemático. Ej: Licopodios
● Megafilos: Conocidos comúnmente como frondas, con vernación circinada. La lámina
puede ser simple o varias veces dividida (pinnada, bipinnada).
● Los esporofilos son expansiones laminares asociadas a esporangios.
Los helechos son plantas herbáceas, de tamaño variable. Algunos desarrollan un rizoma erguido,
fuertemente sustentado por bases foliares leñosas y esclerosadas persistentes y alcanzan hasta
dos metros de altura: helechos “arborescentes” de aspecto palmiforme.
Habitan preferentemente zonas de clima moderado y humedad más o menos constante. Por lo
general se trata de plantas umbrófilas, aunque algunas familias actuales presentan adaptaciones
relacionadas al xeromorfismo y halomorfismo.
Esporangios
Pueden estar asociados con ejes caulinares o más comúnmente con expansiones laminares. Los
microfilos llevan esporangios solitarios en la axila de la cara adaxial. Estos esporofilos pueden
agruparse en áreas fértiles determinadas: estróbilos.
Los megafilos llevan numerosos esporangios por fronde fértil. Se distribuyen y asocian en forma
variada, pero siempre aparecen en la cara abaxial. En algunos casos los esporangios se
distribuyen por toda la superficie de la lámina, condición denominada acrosticoide pero en
otros grupos se agrupan constituyendo soros. Cuando los esporangios se sueldan entre sí por
sus paredes constituyen sinangios.
Soros → homosporía
Estróbilos → heterosporia
Los soros son muy variables en forma, protección y posición en la lámina. Pueden ser:
● Desnudos
● Protegidos por el margen reflexo de la lámina que forma un pseudoindusio
● Protegidos por una formación epidérmica membranacea o indusio
A veces los soros se ubican uno a continuación del otro, formando conjuntos notablemente
alargados, llamados cenosoros.
8.3 Gimnospermas
Las gimnospermas son plantas antiguas descendientes de las Progimnospermas del Devónico.
Exhiben una larga historia evolutiva que llega hasta el presente, en el curso de la cual muchos
grupos alcanzaron su apogeo y se extinguieron, en tanto que otros llegaron hasta la actualidad.
Los caracteres más importantes del grupo desde el punto de vista evolutivo y biológico son: la
aparición de óvulos y la formación de semillas.
Los óvulos se asocian a grupos de ramas modificadas para la protección (estróbilos) o retienen
un tipo ancestral de posición terminal sobre los ejes.
La aparición del óvulo se relacionó con el desarrollo de una semilla, órgano de latencia que
protege al embrión hasta que se presentan condiciones favorables para su desarrollo. La semilla
es el resultado de la maduración del óvulo después de la fecundación y su aparición es una
ventaja evolutiva muy grande respecto de los grupos que no la poseen.
Las plantas con semilla se agrupan en 5 divisiones: Cycadophyta, Gingkophyta, Coniferophyta,
Gnetophyta y Anthophyta.
Desde el punto de vista del hábito general de la planta, las gimnospermas muestran dos modelos
o tendencias:
● Cicadoides: plantas de aspecto palmiforme; ejes columnares no ramificados; hojas
divididas con plan pinnado y estructuras caulinares internas con xilema escaso en
relación al parénquima cortical y medular (estructuras manoxílicas). Las estructuras de
reproducción se asocian a ejes u hojas y ocasionalmente aparecen en estróbilos.
● Coniferoides: plantas con aspecto de árboles de copa cónica (monopodios); hojas
reducidas por lo común xeromorfas y estructuras caulinares internas con marcado
desarrollo del xilema y escaso parénquima (estructuras picnoxílicas). Las estructuras
reproductoras se asocian a estróbilos simples o compuestos.
Progimnospermas.
- aparecen al final de la era Paleozoica.
- características intermedias entre los trimerófitos y las gimnospermas.
- las únicas plantas leñosas del Devónico que tenían xilema y floema secundario.
- Pueden haber derivado de los trimerófitos, de los que se diferencian porque tienen una
ramificación más elaborada y sistema vascular más complejo.
- Se considera que los helechos pueden haber derivado de ellas.
- Se cree que la ramificación (tridimensional y con protostela) de las progimnospermas
del orden Aneurophyton podía haber sido la percusora de las hojas de helechos con
semilla.
- Otro grupo de progimnosperas es Archaeopteris, también del Devónico. Tenía un
sistema de ramificación lateral se disponía en un solo plano y tenía estructuras
laminares que se consideraban hojas. Las ramas más grandes tenían médula .
- La mayoría era homospóricas
- Los fósiles datan de al menos 10 m de altura
Gimnospermas.
- Semilla desnuda: semilla y óvulo expuestos sobre la superficie de los esporofilos o
estructuras análogas.
- El gametofito femenino produce más de un arquegonio, o sea que se fecunda más de una
ovocélula
- Poliembronaria: dentro de un solo óvulo pueden desarrollarse varios embriones
- No requiere agua para transportar la gameta masculina a la ovocélula, el grano de polen
viaja con el viento hasta allí (polinización anemófila)
- Luego de la polinización, el gametofito masculino produce un tubo emergente, el tubo
polínico, cuando este se rompe libera dos gametas.
Coníferas.
-Comprende pinos, secuoyas, piceas y abetos.
- Carbonífero superior: las cordaitales de este período eran coníferas primitivas.
-Hojas con resistencia a la sequía, que esta relacionado con la diversificación de esta división
durante el Pérmico, que se caracterizó por tener clima seco y frío.
-Distribución en grandes bosques en casi todo el mundo.
Pinos
- hojas aciculares (forma de aguja), en plántulas están implantadas en forma
independiente, en espiral sobre el tallo. Después de uno o dos años el pino produce sus
hojas en fascículos, que contienen cada uno un número característico de hojas. Cada
fascículo es una rama de crecimiento limitado.
- Las hojas son capaces de crecer en condiciones áridas.
- La mayoría de los pinos retiene las acículas durante hasta 4 años.
- En los tallos el crecimiento secundario comienza pronto y produce la formación de
grandes cantidades de xilema 2ro.
- El xilema consta principalmente de traqueidas y el floema de células cribosas.
- Al principio del crecimiento secundario la epidermis es reemplazada por peridermis.
Los conos masculinos son pequeños. Los microsporofilos son membranosos y se disponen en
espiral y cada uno lleva microsporangios, que portan la célula madre de la microspora. En
primavera sufren R! y cada célula madre de la microspora da 4 microsporas (n), que por M!
formarán el grano de polen con dos núcleos, el generativo que formará la gameta, y la célula del
tubo que formará el tubo polínico.
● Cada microspora se rodea de una pared celular especializada (intina y exina)
● División asimétrica: la célula del tubo se lleva todo el citoplasma
● División del núcleo espermático
El grano de polen es muy liviano ya que tiene 2 cámaras eríferas y es dispersado por el viento
(polinización anemófila) hasta la micrópila de los óvulos.
En la polinización el grano de polen se adhiere a una gota de líquido pegajoso que hay encima
del micrópilo y toma contacto con el nucelo. Luego las escamas se juntan y protegen al óvulo.
Poco después que el polen toma contacto con el nucelo, germina y forma el tubo polínico.
Aproximadamente un mes después de la formación del tubo polínico es cuando se forman las 4
megasporas. Se forma el megagametofito. Aproximadamente 15 meses después se forman los
arquegonios. La célula generativa del polen sufre M! formando dos tipos de células, una estéril y
otra espermatógena. Antes de que el tubo polínico alcance el gametofito femenino, la célula
espermatógena se divide produciendo 2 gametas masculinas. Recién ahí madura el grano de
polen. El tubo polínico alcanza la ovocélula y se produce la fecundación. El núcleo de una
gameta masculina fecunda la ovocélula y el otro degenera. Se producen varios embriones pero
solo uno sobrevive. Durante la formación del embrión el tegumento se convierte en la cubierta
seminal.
La semilla de coníferas consta de dos generaciones esporofíticas; la cubierta celular y el embrión
y de una generación gametofítica, el prótalo, que es el tejido nutricio.
En la madurez las escamas se separan y las semillas aladas se dispersan.
Cicadofitas
- Apariencia de palmeras
- Aparecieron en el Pérmico superior.
- Abundantes en el Mesozoico
- Existen 10 géneros con 100 especies
- Alcanzan los 18 m de altura o más.
- tronco característico por las bases de las hojas caídas
- las hojas funcionales están agrupadas en la parte superior del tallo, por eso parecen
palmeras
- se distinguen de las palmeras porque las cica tienen crecimiento secundario lento.
- unidad de reproducción: las hojas más o menos reducidas portadoras de esporangios
agrupados en estructuras similares a conos en el ápice de la planta
- los conos seminíferos y portadores de polen si sitúan en plantas diferentes.
Ginkgo
- hojas en forma de abanico, con dos lóbulos (flabeliformes)
- venación dicotómica
- alcanza los 30 m de altura
- a diferencia de las demás gimnospermas, su hoja es caduca, en otoño las hojas se
vuelven doradas
- Ginkgo biloba es el único sobreviviente de la especie.
- Los óvulos y microsporangios están en individuos diferentes igual que en las cicas.
- los óvulos se sitúan por pares en el extremo de cortos péndulos y en el otoño producen
semillas con cubierta carnosa
- la fecundación puede ocurrir cuando las semillas cayeron de la planta, el embrión se
forma durante fases posteriores de la maduración de la semilla, que ocurren en el suelo.
- Como la semilla posee ácido butírico, despide un olor rancio
- los microsporofilos se agrupan en conos, cada microsporofilo porta 2 microsporangios.
Hábitos
Monopodial : coniferoides
Columnar/simpodial : cycadoneas
8.4 Angiospermas
Las angiospermas, o plantas con flores, son las plantas con semillas protegidas
dentro de frutos, cuyas flores presentan verticilos. En ellas surge como adelanto
evolutivo la aparición de la flor, un órgano reproductivo cuya función principal es
albergar y proteger al gametofito, a la semilla que en su interior contendrá al embrión,
además de facilitar aún más la polinización y fecundación del óvulo.
La aparición de los primeros esbozos florales se produce por la transformación
de meristemas vegetativos en meristemas reproductivos. Los primeros pasos en dicha
transformación son cambios fisiológicos que dan como resultado condiciones
metabólicas dentro de las células meristemáticas que alteran el patrón de diferenciación
del meristema. En algunas especies, el meristema transformado se convierte en un
primordio de inflorescencia con cierto número de desarrollos florales; en otras, sólo una
flor se diferencia del meristema transformado.
El primer cambio visible de la transformación meristemática se manifiesta en un
cambio de configuración. El crecimiento de la porción central queda aparentemente
detenido y el meristema comienza a aplastarse en el ápice en lugar de tomar forma
cónica. Se desarrollan pequeñas protuberancias en el meristema modificado, dispuestas
en espiral o anillos concéntricos. Dichas protuberancias son los primordios de las flores.
En un principio, las partes esenciales de las flores se encuentran encerradas
dentro de sépalos cobertores constituyendo un botón flor o pimpollo. Luego, ocurre la
expansión del mismo dando una flor abierta, etapa de la floración denominada antesis.
Las partes esenciales de las flores son únicamente los estambres y pistilos. La
complejidad metabólica dentro de las células de las partes florales en desarrollo es
probablemente mayor que en cualquier otro vegetal. Las hormonas desarrollan un
papel fundamental en la iniciación floral. La actividad respiratoria es más alta en los
meristemas florales jóvenes. También son mayores los niveles asimilatorios, y la
movilización hacia las flores en desarrollo de alimentos, agua compuestos
mineralizados y hormonas.
La floración, a pesar de ser un estado morfofisiológico muy complejo, sólo
representa una fase relativamente transitoria del crecimiento. El crecimiento vegetativo
y la posterior fructificación son procesos de considerable duración, y fisiológicamente
similares. Ambos dependen de las condiciones nutritivas de la planta, siendo que la
floración depende de la acción hormonal.
Cuándo el cáliz y la corola se distinguen perfectamente, se dice que la flor tiene perianto. De ser
el caso contrario, ya no se habla de sépalos ni pétalos, sino de tépalos. En este caso, la flor tiene
perigonio.
Hablamos de perigonio corolino si los tépalos parecen pétalos y si esos se parecen a sépalos,
hablamos de perigonio calicino.
ANDROCEO
Es el verticilo fértil asociado al origen del gametofito masculino; consta de estambres
constituidos por un filamento y una antera, integrada a su vez por dos tecas unidas entre sí por
tejido conectivo, cada una de las cuales contiene dos sacos polínicos o microsporangios (en su
interior se encuentra el tejido esporógeno que da origen a los granos de polen).
Según la fusión o no de sus estambres, el androceo puede ser:
● Monadelfo: Estambres fusionados entre sí por sus filamentos formando uno solo en
conjunto
● Diadelfo: Estambres fusionados entre sí por sus filamentos formando dos grupos
● Poliadelfo: Estambres fusionados entre sí por sus filamentos formando varios grupos
● Libre: Estambres libres
Según la longitud de los filamentos estaminales:
● Androceo didínamo: dos estambres más largos y dos más cortos
● Androceo tetradínamo: cuatro estambres largos y dos cortos.
Pueden hallarse además estambres estériles, conocidos como estaminodios, que sirven
para la atracción de polinizadores.
GINECEO
Verticilo fértil relacionado con el gametofito femenino, consta de carpelos. Los carpelos
forman una cavidad llamada ovario que puede formarse por la fusión de un solo carpelo o más
de uno. Cada ovario es una unidad que contiene en su interior los rudimentos seminales, óvulos,
originados de células iniciales de las paredes internas placentarias; éstos óvulos se encuentran
asentados en áreas denominadas placentas. En el interior de los óvulos ocurrirá, por medio de
meiosis, la megasporogénesis, y posterior a ésta, la megagametogénesis.
Según el número de carpelos el ovario puede ser unicarpelar, dialicarpelar o
pluricarpelar. Los carpelos a su vez, delimitan en su interior una o varias cavidades
denominadas locus o lóculos, y según el número de estos lóculos, el ovario puede ser unilocular,
bilocular, o plurilocular. Los carpelos soldados se alargan formando un tubo macizo o hueco
denominado estilo, el cual sirve para que el estigma, receptor del polen, pueda proyectarse.
Ovario, estilo y estigma se denominan en conjunto pistilo.
Según la fusión o no de los carpelos, el gineceo puede ser:
● Gamocarpelar o sincárpico: carpelos soldados entre sí
● Dialicarpelar o apocárpico: carpelos libres entre sí
Tipos de placentaciones
La placentación hace referencia a la disposición de las placentas y óvulos que éstas
portan dentro del ovario. Existen diferentes tipo:
● PARIETAL: los carpelos se extienden uniéndose a los vecinos por los bordes
placentarios, constituyendo un solo lóculo; los óvulos se insertan en placentas sobre la
pared ovárica.
● AXILAR: representa ovarios gamocarpelares pluriloculares, en los que cada carpelo
limita un lóculo, encontrándose los óvulos en la parte central del ovario.
● CENTRAL: una columna central se extiende a lo largo del ovario donde se ubican las
placentas con los óvulos
● BASAL: similar a la central, la columna central se acorta y ocupa sólo la base del ovario.
Allí se disponen los óvulos
● APICAL: la columna central ocupa la porción apical
● MARGINAL: en ovarios dialicarpelares o unicarpelares, los óvulos se hallan sobre los
nervios marginales.
ÓVULOS
Los óvulos nacen de la placenta, región situada donde se han fusionado entre sí los márgenes de
un simple carpelo o bien de varios. Los dos haces ventrales de dichos márgenes se unen también
entre sí y alimentan a la placenta y los óvulos. El número de placentas de un ovario suele ser
igual al número de carpelos.
Cada óvulo está formado por la nucela o parte central, rodeada por uno o dos tegumentos y va
unido a la placenta por un filamento o funículo. En el extremo libre del óvulo queda una
abertura que deja el tegumento o tegumentos, llamada micropila. A la región donde establecen
conexión los tegumentos con el funículo se la denomina chalaza.
Una célula de la nucela, generalmente, de la capa situada inmediatamente por debajo de la más
externa, en la zona del micrópilo, se diferencia para dar lugar a la célula madre de la
macrospora.
La nucela es considerada, por ello, como el macrosporangio.
Inflorescencias
Son pequeñas flores en forma de ramillete (agrupadas) que se originan por la ramificación del
pedúnculo floral, dejando que cada rama forme una flor.
Racimosas Cimosas
Cotiledones 2 1
POLINIZACIÓN
Es el traslado de polen desde las anteras al estigma de las flores.
El polen puede llegar de dos formas:
● Autopolinización o autogamia: fenómeno que tiene lugar en flores
hermafroditas que son fecundadas por su propio polen. La máxima expresión de
autogamia es la cleistogamia, proceso en que las flores no se abren y se
autopolinizan.
● Polinización cruzada o alogamia: se produce cuando el grano de polen que
llega al estigma procede de otra flor. Esta forma es la más común y se ve
favorecida por diversas modificaciones florales, una de las cuales es la
heterostilia: la producción de estambres y estilos de diferente longitud,
observándose así flores de dos clases: unas con estambres largos y estilos cortos
o brevistilas y otras con estambres cortos y estilos largos o longistilas.
También puede haber diferencia temporal de maduración en estambres dentro de una
misma flor; se habla entonces de protandria o protoginia.
→ anemogamia:polinización por el viento
→ Hidrogamia: polinización por el agua
SEMILLAS
A partir del óvulo fecundado se desarrolla la semilla dentro del fruto. Durante ese
desarrollo tiene lugar la transformación del tegumento o tegumentos del óvulo en la
testa o cubierta seminal, mientras que la ovocélula fecundada o cigoto se transforma en
el embrión de la planta hija y el núcleo triploide o núcleo del endospermo se divide para
dar lugar al endospermo o albumen (tejido de reserva de nutrientes).
La testa o cubierta seminal, debido a su dureza e impermeabilidad, ofrece protección a
la misma.
El conjunto formado por el embrión en estado latente, acompañado de sustancias de
reserva y protegido por los tegumentos se denomina semilla. El hábito seminífero
implica la existencia de un esporofito joven (embrión) que inicialmente se desarrolla a
expensas del esporofito de la generación anterior y del cual se separa luego de haber
detenido su desarrollo.
Almacenamiento de sustancias
● Protaladas: las sustancias de reserva se acumulan en el gametofito femenino. Ej:
Gimnospermas.
● Endospermadas: las reservas se acumulan en el endosperma. Ej: cereales.
● Perispermadas: las reservas se acumulan en el perisperma, tejido derivado del
núcleo. Ej: pimienta, remolacha, clavel.
● Exalbuminadas: Semillas que reservan las sustancias alimenticias en los
cotiledones. Ej: poroto, garbanzo, lentejas.
Las principales sustancias de reserva son hidratos de carbono, lípidos y proteínas. Los
hidratos de carbono se almacenan como almidón dentro de amiloplastos. Las proteínas
se acumulan en forma de cristales o como proteína amorfa, envueltas por una unidad de
membrana; y los lípidos como triglicéridos en esferosomas o cuerpos lipídicos. Las
semillas suelen reservar sólo una de éstas sustancias siendo los lípidos la forma más
común por sus altos rendimientos energéticos. Casos como el maní o cereales presentan
las tres sustancias al mismo tiempo.
Germinación
Se define como la aparición y desarrollo, a partir del embrión, de aquellas estructuras
esenciales que van a dar origen a la planta adulta.
La primera etapa es la imbibición, es decir, la absorción del agua. Con la imbibición
comienza la activación metabólica y con ello la activación de enzimas a la vez que se
produce también síntesis enzimática. Éstas van a degradar las sustancias de reserva
para formar azúcares a partir del almidón y lípidos. Con éstas sustancias como materia
prima, comienza el proceso de división y alargamiento celular del embrión. El
crecimiento del embrión produce la ruptura del tegumento y la emergencia de la
radícula o de la plúmula, según la especie.
FRUTOS
Un fruto es un ovario maduro. Estos encierran a los primordios foliares que se convertirán en
semillas.
→ Frutos simples o monotalámicos: Se desarrollan a partir de una sola flor.
→ Frutos agregados: Se desarrollan a partir de una sola flor que tiene varios carpelos
(dialicarpelar).
→ Frutos compuestos o politalámicos o infrutescencia: Todas las flores de una inflorescencia
participan en el desarrollo de una estructura que parece un solo fruto pero que en realidad está
formada por muchos.
● El fruto procede del desarrollo de las paredes carpelares del ovario, formando el
pericarpo que rodea el fruto.
● Epicarpo → parte externa del fruto (cara abaxial)
● Endocarpo → parte interna (cara adaxial)
● Mesocarpo → situación intermedia (mesófilo)
Los frutos pueden ser secos, con dehiscencia su mayoría y formados células muertas a la
madurez o también pueden ser carnosos, en contraposición, formados por células vivas.
Dehiscencia: Sistema de abertura natural del pericarpio de ciertos frutos o de las anteras de un
estambre, para dar salida a la semilla o al polen.
Tipos de dehiscencia
● Por nervadura media o loculicida
● Por la línea de unión o septicida
● Por ambas o septifraga
● Por endocarpio leñoso
● Por el receptáculo (eucalipto)
● Porifera (amapola)
Frutos agregados
Flujo volumétrico
El flujo volumétrico es el movimiento global del agua (o de algún otro líquido). Ocurre como
respuesta a la diferencia de energía potencial del agua que habitualmente se denomina
potencial hídrico.
Un ejemplo sencillo de que el agua posee un potencial hídrico lo tenemos en el agua que hay
detrás de una presa o en la que hay en lo alto de una cascada. A medida que el agua cae, su
energía potencial puede ser convertida en energía mecánica mediante una rueda hidráulica o en
energía mecánica y eléctrica por una turbina hidroeléctrica.
La presión es otra fuente de potencial hídrico. Si ponemos agua en una pera de goma y la
apretamos, este agua, como el agua de lo alto de la cascada, posee un potencial hídrico y se
moverá hacia dónde haya un menor potencial hídrico. ¿Podemos hacer que el agua que cae
vuelva a subir por acción de la presión? Sí, pero sólo si el potencial hídrico producido por la
presión supera al potencial hídrico producido por la fuerza de gravedad. El agua se mueve
desde donde el potencial es mayor hacia donde es menor, sea cual sea la razón de la
diferencia.
Imbibición
El agua posee una tremenda cohesión debido a la diferencia de carga entre uno y otro extremos
de sus moléculas. De manera similar, debido a su diferencia de carga, las moléculas de agua
pueden adherirse tanto a superficies cargadas positivamente como negativamente. Muchas
grandes moléculas biológicas como la celulosa, tienden a desarrollar cargas cuando están
mojadas y así atraen las moléculas del agua. La adherencia de las moléculas de agua es
responsable de otro fenómeno biológicamente importante denominado imbibición.
La imbibición es el movimiento de las moléculas de agua hacia sustancias como la madera o la
gelatina, que se hinchan o aumentan el volumen resultado de la adhesión de las moléculas de
agua.
Difusión
Las sustancias que se mueven de una zona de alta concentración a otra de menor concentración
se dice que se mueven a favor del gradiente. La difusión sólo tiene lugar a favor del gradiente.
Una sustancia que se mueve en dirección contraria, hacia una concentración más alta de sus
propias moléculas, se mueve en contra del gradiente. Cuanto mayor sea el gradiente cuesta
abajo (la mayor diferencia de concentración) más rápido será el flujo neto.
El concepto potencial hídrico es útil para comprender la difusión. Una alta concentración de
soluto (sustancia disuelta) en una zona, como la esquina de un recipiente, implica una baja
concentración de agua y por lo tanto, un bajo potencial hídrico. Si la presión es igual en todo el
recipiente, las moléculas de agua, puesto que se mueven a favor del gradiente, viajarán desde la
zona con alto potencial hídrico hasta la zona con bajo potencial hídrico. La zona del recipiente
con agua pura posee un mayor potencial hídrico que la zona que contiene agua más alguna
sustancia en disolución. Cuando se alcanza el equilibrio dinámico, el potencial hídrico es el
mismo en todo el recipiente.
Las características fundamentales de la difusión son:
● Cada molécula se mueve independientemente de las otras
● Sus movimientos son aleatorios
El resultado final de la difusión es que la sustancia difundida se halle distribuida de manera
uniforme al final del proceso. La difusión puede definirse como la dispersión de las sustancias
por el movimiento de sus iones o moléculas, que tiende a equilibrar sus concentraciones a
través del sistema.
Difusión y células
Es por excelencia un proceso lento, excepto a través de distancias muy cortas. Sólo es eficiente si
el grande de concentración es grande y el volumen relativamente pequeño.
A menudo, en una célula se producen materiales en un lugar y se usan otros. Así se establece un
gradiente de concentración entre dos áreas y los materiales pueden difundirse a favor del
gradiente desde el lugar de producción hasta el de utilización.
La mayoría de las moléculas orgánicas son polares (hidrófilas) y por ello no se pueden difundir
libremente a través de las barreras lipídicas de las membranas celulares. Sin embargo, el
dióxido de carbono y oxígeno, que son solubles en lípidos, se mueven libremente a través de
dichas membranas. El agua también entra y sale libremente. Pero puesto que el agua es
insoluble en lípidos, este hecho ha llevado a los biólogos a postular la presencia de poros en la
membrana que permitan el paso de las moléculas de agua (y de algunos pequeños iones).
Ósmosis
A pesar de que las membranas celulares permiten el paso del agua, se lo bloquean a la mayoría
de las sustancias disueltas. (Estas sustancias son los solutos y el agua es el disolvente de la
disolución). Este tipo de membrana se denomina permeable diferencial y la difusión del agua a
través de ella se denomina ósmosis.
La ósmosis se desarrolla en forma de un flujo neto de agua desde una solución con alto potencial
hídrico hasta una solución con bajo potencial hídrico. En ausencia de otros factores que influyen
como la presión, el movimiento o la difusión de agua por ósmosis tendrá lugar desde una zona
con baja concentración en soluto (y por lo tanto con alta concentración de agua) hasta una zona
con alta concentración de soluto (y baja concentración de agua). La presencia de soluto
disminuye el potencial hídrico, creando un gradiente de potencial hídrico a favor del cual se
mueva el agua.
La ósmosis implica un aumento de presión si las moléculas de agua continúan difundiéndose, a
través de la membrana, hacia zonas con baja concentración de agua.
Como se observa en la figura, si el agua está separada de una disolución por una membrana
semipermeable (una membrana que permite el paso del agua pero no de los solutos), el agua
pasará a través de la membrana y hará que la disolución se eleve en el tubo hasta que se alcance
el equilibrio, esto es, hasta que el potencial hídrico sea el mismo a ambos lados de la membrana.
Si se ejerce una presión suficiente en la parte superior del tubo, se puede evitar la entrada de
agua en el mismo. La presión que se debe aplicar a una disolución para impedir la entrada de
agua se denomina presión osmótica.
La expresión presión osmótica se utiliza también para expresar la reducción de potencial
hídrico causada por el soluto. Un aumento de la concentración de soluto aumenta la presión
osmótica y disminuye el potencial hídrico de una solución.
El movimiento del agua es afectado no por lo que hay disuelto en ella, sino o la cantidad de
soluto que contiene -el número de partículas de soluto (moléculas o iones).
La palabra isotónico fue concebida para describir las soluciones que tienen igual número de
partículas disueltas y que por ello ejercen iguales presiones osmóticas. No hay movimiento neto
de agua a través de una membrana que separa dos soluciones isotónicas, a menos que se ejerza
una presión física en uno de sus lados. Comparando soluciones con distintas concentraciones, la
solución que contiene menos soluto, y que por lo tanto, ejerce menos presión osmótica se
denomina hipotónica y la que tiene más soluto y ejerce una mayor presión osmótica se
denomina hipertónica.
En la ósmosis, las moléculas de agua pasan a través de una membrana permeable
diferencial hacia una solución hipertónica hasta que el potencial hídrico es igual a ambos
lados de la membrana.
Turgencia
Si se introduce una célula vegetal en una solución hipotónica, el protoplasma se expande y la
membrana citoplasmática se estira ejerciendo una presión contra la pared celular. Sin embargo,
la célula vegetal no llega a romperse gracias a la pared celular relativamente fuerte que la
contiene.
Las células vegetales tienden a acumular dentro de sus vacuolas soluciones relativamente altas
en concentraciones de sales y también pueden acumular azúcares, ácidos orgánicos y
aminoácidos. Como resultado, las células vegetales constantemente absorben agua por ósmosis,
creando su propia hidrostática interna. Esta presión contra la pared celular mantiene su rigidez
o turgencia.
El transporte pasivo se cumple a través de los componentes de la bicapa lipídica o por
estructuras proteicas: canales iónicos y las permeasas. El transporte pasivo puede ser a través
de la bicapa lipídica,y se denomina difusión simple, o a través de los canales iónicos, que se
denomina difusión facilitada.
El transporte activo tiene lugar exclusivamente a través de las permeasas las cuales se
denominan transportadores o carriers.
Transpiración
Se define como la pérdida de vapor de agua por cualquier parte del cuerpo vegetativo, si bien las
hojas son, con mucho, los órganos principales de transpiración. ¿Por qué las plantas pierden tan
grandes cantidades de agua por transpiración? Esta pregunta se puede contestar considerando
los requerimientos para la principal función de la hoja, la fotosíntesis, fuente de todo el alimento
para el cuerpo entero de la planta. La energía necesaria para la fotosíntesis viene de la luz solar.
Por lo tanto, para fotosintetizar al máximo, una planta debe exponer una superficie máxima a la
luz solar. Pero la luz es sólo uno de los requerimientos para la la fotosíntesis: el cloroplasto
también necesita dióxido de carbono. En la mayoría de las circunstancias el dióxido de carbono
es fácilmente obtenible del aire que rodea a la planta pero para que el dióxido de carbono entre
en la célula, que lo hace por difusión, tiene que estar en solución, porque la membrana
citoplasmática es casi impermeable a la forma gaseoso del dióxido de carbono. Por lo tanto, el
gas debe tomar contacto con la superficie celular húmeda. No obstante, dondequiera que se
exponga el agua al aire, se produce la evaporación. La absorción de dióxido de carbono para la
fotosíntesis y la pérdida de agua por transpiración están inseparablemente enlazadas en la vida
de las plantas verdes.
MODELO TENSO-COHESO-TRANSPIRATORIO
La transpiración es el transporte de agua desde el suelo hasta la atmósfera pasando a través del
sistema vascular de la planta. A medida que el agua se evapora sobre la superficie de las hojas,
las raíces incorporan más desde la solución del suelo, convirtiéndose así el transporte
ascendente del agua en un sistema continuo que es posible gracias a la cohesión y adhesión de
las moléculas de agua. La transpiración genera fuerzas de tensión (similar a un hilo estirado)
sobre este “agua-suelo-planta-atmósfera”, por ello se le da el nombre de modelo
tenso-coheso-transpiratorio. El ascenso del agua en contra de la gravedad se produce gracias a
varios fenómenos físicos, que dependen tanto de la estructura interna de las plantas, como de
las propiedades físicas del agua como a continuación se intenta explicar:
● Presión radicular: Las células de la raíz tienen una concentración de solutos mayor que
la del agua en el suelo. Esta entra en el interior de la raíz por ósmosis. La continua
entrada produce una presión radicular para que la savia bruta ascienda por el tallo. Esta
presión no es suficiente en plantas con gran altura.
● Transpiración: Ocurre en las hojas y se basa en la pérdida de agua por evaporación. Al
aumentar la transpiración aumenta la absorción de agua a través de las raíces. La
pérdida de agua por evaporación hace una fuerza capaz de absorción de agua en la raíz y
es capaz de conducirla por el xilema hasta el resto de la planta. Esta fuerza aspirante
ejerce una presión denominada tensión y que tira de cada molécula de agua hacia arriba.
● Tensión-cohesión: Las moléculas de agua están unidas entre sí por enlaces de
hidrógeno. Permite una cohesión elevada y hace que la tensión que puede soportar una
columna de agua no llegue a romperse. En este mecanismo interviene la adhesión de
agua a las paredes de los vasos leñosos.
Para poder entender más el origen de la tensión generada en el xilema, es necesario tener en
cuenta que desde las últimas terminaciones xilemáticas de las hojas, el agua sigue su camino
hacia el exterior, a través del parénquima hasta alcanzar las paredes celulares que limitan los
espacios intercelulares del mesófilo, para entonces liberarse a través de los estomas
(transpiración). A medida que aumenta la transpiración, disminuye el potencial hídrico de las
paredes evaporantes, incrementándose la diferencia de potencial, originando un
desplazamiento del agua hacia los estomas. Esta caída del potencial hídrico se transmite al
mesófilo y de allí a todo el xilema, provocando el ascenso de la columna de agua.
De esta forma, mientras haya transpiración, el potencial hídrico de la raíz se mantendrá más
bajo que el del suelo y la absorción de agua se producirá espontáneamente. Debido a que el
ascenso del agua en las plantas, se explica fundamentalmente por la tensión que se genera en el
xilema sumada a las fuerzas de cohesión y adhesión de las moléculas de agua, se ha propuesto
un modelo denominado tenso-coheso-transpiratorio.
Tasa transpiratoria
La tasa transpiratoria está afectada por algunos factores como la concentración de dióxido de
carbono en los espacios intercelulares (y a la inversa, la exposición de la hoja al dióxido de
carbono del aire), la luz, la temperatura, la humedad atmosférica, las corrientes de aire y la
disponibilidad del agua del suelo. La mayoría de estos factores tienen efecto en el
comportamiento de los estomas. Las aperturas y cierres estomáticos están controlados por
cambios en la turgencia de las células oclusivas, que están exactamente correlacionadas con los
cambios en el nivel de ion potasio en dichas células.
El ácido abscísico y la luz azul también intervienen en el movimiento estomático. Los estomas se
abren cuando las células oclusivas se vuelven turgentes y se cierran cuando se vuelve flácidas.
Componentes estructurales
Algunos elementos minerales sirven de componentes estructurales de las células ya sea como
parte de su estructura física o como parte de las estructuras químicas relacionadas con el
metabolismo celular. El calcio se combina con el ácido péctico en la lámina media de la pared
celular vegetal, el fósforo interviene en el esqueleto de la hélice de ADN y ARN y en los
fosfolípidos de las membranas celulares. El nitrógeno es un componente esencial de los
aminoácidos, clorofila y nucleótidos. El azufre se encuentra en dos aminoácidos y por lo tanto, es
un importante elemento estructural de proteínas.
El suelo
Es el principal medio en que crecen las plantas. Los suelos, además de soporte físico, deben
proporcionarles continuamente los nutrientes inorgánicos, así como el agua y el entorno
gaseoso adecuado para los sistemas radicales. La comprensión de los orígenes de los suelos y
sus propiedades químicas y físicas respecto a los requisitos de crecimiento de la planta es
decisiva para planificar la fertilización de los campos de cultivo.
Suelos y agua
Aproximadamente el 50% del total del volumen del suelo representa el espacio poroso, que está
ocupado por proporciones que varían en agua y aire, dependiendo de la humedad. Cuando no
más de la mitad del espacio poroso está ocupado por agua, se puede obtener la cantidad de
oxígeno necesario para el crecimiento de la raíz y otras actividades biológicas.
Después de una lluvia intensa o de riego, los suelos retienen cierta cantidad de agua y
permanecen húmedos aún cuando la gravedad ha hecho desaparecer el agua sobrante. Si los
fragmentos que constituyen el suelo son grandes, los poros y los espacios entre ellos serán
grandes; el agua se filtrará rápidamente a través del suelo y quedará relativamente poca
cantidad para el crecimiento de la planta.
Gracias a sus poros más finos, los suelos arcillosos pueden retener mucha más cantidad de agua
en contra de la gravedad. Así, los suelos arcillosos pueden contener de tres a seis veces más agua
que el volumen equivalente de arena. El porcentaje de agua que un suelo puede mantener en
contra de la acción de la gravedad recibe el nombre de capacidad de campo.
Si a una planta se la deja crecer indefinidamente en una muestra de suelo y no se añade agua,
llegará un momento en que será incapaz de absorber a la suficiente velocidad y se debilitará
hasta marchitarse. Si la marchitez es importante, las plantas no pueden recuperarse incluso si se
colocan en una cámara húmeda. El porcentaje de agua remanente en un suelo cuando se da
dicha marchitez irreversible es el punto de marchitez permanente o punto de marchitez del
suelo.
Enzimas
Son proteínas solubles que catalizan todas las reacciones metabólicas que tienen lugar en los
seres vivos, las aceleran y permiten que se realicen a la temperatura propia de la célula. Gracias
a ellas, sustancias se transforman en otras y se puede expresar así la acción génica.
Ciclo de Krebs
Representa la ruta de degradación aerobia no sólo de carbohidratos sino también de
lípidos y aminoácidos. Se realiza en el interior de las mitocondrias (estroma
mitocondrial) y es denominado ciclo del ácido tricarboxílico.
Una molécula de AcetilCoA, procedente de la descomposición del piruvato de la
glucólisis, se une al oxalacetato (4 átomos de C) y da lugar a citrato (6 átomos de C).
Este, a su vez, sufre una hidratación que conduce hasta el isocitrato (6 carbonos) el cual
se transforma en cetoglutarato por pérdida de un grupo carboxilo. Una posterior
descarboxilación da lugar a succinato, fumarato y malato, todos ellos de 4 carbonos,
hasta que finalmente el malato se transforma en oxalacetato, con lo que se cierra el
ciclo. En el curso de esta ruta tienen lugar diferentes deshidrogenaciones mediadas por
NAD y FAD, que actúan como transportadores de hidrógenos, llevando los mismos hasta
la cadena respiratoria. Una vez aquí, se produce en el proceso de fosforilación oxidativa
un total de 36 ATP, que representan el balance energético de una vuelta del ciclo.
Fotosíntesis
En la fotosíntesis, la energía lumínica se convierte en energía química y el carbono se fija en
compuestos orgánicos. La ecuación generalizada es:
→ 6 CO2 + 6 h2o = C6 H12 O6 + 6O2 ←
● Proceso anabólico
● Proceso endergónico: consume energía
Fórmula general de la fotosíntesis → 6 CO2 + 6 H20 + luz + nutrientes = C6 H12 O6 + 6 O2
● Se fija el CO2 atmosférico
● Se produce energía química y materia orgánica (hidratos de carbono)
● Se libera O2, resultante de la ruptura de la molécula del agua
Dos fases
● Fase luminosa: Ocurre en los tilacoides. Utilizando luz como fuente de energía se
forma NADPH (poder reductor), ATP y O2 como desecho.
● → Fotoexcitación
● → Fotoreducción
● → Fotolisis del agua
● → Fotofosforilación o producción de ATP
● Fase oscura: Se utiliza el poder reductor y ATP para la fijación del carbono en
compuestos orgánicos. Ocurre en el estroma mediante el ciclo de Calvin. Como
resultado, se forman carbohidratos.
Las plantas CAM para su fotosíntesis dependen en gran medida de la acumulación nocturna de
carbono, ya que durante el día sus estomas permanecen cerrados, minimizando las pérdidas de
agua. Lógicamente, esta situación es ventajosa en las condiciones de alta intensidad lumínica y
de déficit hídrico en las que viven estas plantas. Si toda la obtención del CO2 atmosférico de las
plantas CAM tiene lugar de noche, la eficiencia en utilización del agua por dichas plantas puede
ser muchas veces mayor que en una planta C3 o C4. En períodos de prolongada sequia, algunas
plantas CAM pueden cerrar sus estomas tanto durante el día como la noche y mantener sus
tasas metabólicas bajas mediante la fijación del CO2 respiratorio a través de la acumulación del
ácido málico, seguido por la fijación del CO2 gracias al ciclo de Calvin que tiene lugar el día
siguiente.
A partir de las consideraciones realizadas en torno a las fotosíntesis C3, C4 y CAM, es posible
que ya haya quedado claro que el mecanismo fotosintético no es el único factor que determina
dónde vive una planta. A pesar de que éste es un importante factores, los tres mecanismos
tienen ventajas e inconvenientes y una planta sólo puede competir satisfactoriamente cuando
los beneficios del tipo de fotosíntesis que realizan compensan otros factores. Por ejemplo, a
pesar de que las plantas C4 generalmente toleran temperaturas más altas y condiciones más
secas que las especies C3, a temperaturas inferiores a 25° C puede ser que no compitan
satisfactoriamente con ellas, en parte debido a una mayor sensibilidad al frío que la presentan
las plantas C3. Además, las plantas CAM, que están mejor adaptadas a condiciones muy áridas,
conservan el agua cerrando sus estomas durante el día. Esta práctica, sin embargo, reduce de
forma importante su capacidad para obtener y fijar el CO2. Por lo tanto, las plantas CAM crecen
lentamente y están en desventaja frente a especies C3 y C4 en condiciones no tan extremas. Así,
en cierta forma, cada tipo de fotosíntesis que se da en una planta es víctima de su propio
mecanismo.
Giberelinas.
Se descubrió en 1926 cuando E.Kurosawa en Japón investigaba una enfermedad del arroz
llamada “ enfermedad enloquecedora de las plántulas de arroz” caracterizada porque las plantas
crecían desmesuradamente, eran endebles y se quebraban con facilidad. La causa de estos
síntomas era una sustancia química producida por Gibberella fujikuroi, un hongo parásito de las
plántulas, de ahí su nombre. Se presenta en cantidades variables en toda la planta pero la mayor
concentración se encuentra en las semillas inmaduras. Varían en estructura y actividad
biológica. La más estudiada es la GA (ácido giberélico). Tienen efectos sorprendentes sobre el
alargamiento del tallo en plantas intactas. La respuesta de más general de las plantas superiores
es un incremento notable de los brotes, los tallos se vuelven delgados y largos y las hojas
palidecen. Estimulan tanto la división celular como la elongación y afectan tanto a las hojas
como a los tallos.
Giberelinas y mutantes enanos
Los resultados más manifiestos son cuando se aplica esta hormona a plantas con enanismo
debido solo a un gen mutante. Cuando la planta sufre tratamiento con esta hormona es
imposible diferenciarla de una planta normal.
Giberelinas y la semilla. En algunas plantas la latencia de la semilla puede interrumpirse sólo
por acción del frío o la luz. En la lechuga por ejemplo, estas hormonas pueden sustituir el frío o a
la luz en la latencia provocando el desarrollo del embrión, estimula la elongación celular
haciendo que la raíz rompa la cubierta seminal del fruto.
Giberelinas y juventud
Algunas plantas son diferentes en su etapa juvenil y adulta y eso se evidencia en la hoja; la
hiedra es un ejemplo, las hojas juveniles enraizan rápido, las adultas no, las ramas adultas
florecen, las juveniles no. Si se corta el meristema apical de la rama adulta, las yemas axilares se
desarrollan y forman nuevas ramas adultas pero si se le aplica giberelina se desarrollan ramas
juveniles.
Giberelinas y desarrollo del polen
En algunas plantas como en los lirios se demostró que esta hormona estimula la germinación del
polen y el crecimiento del tubo polínico.
¿Cómo actúan las giberelinas? Se cree que activan determinados genes provocando la síntesis de
ARNm que a su vez dirigen la síntesis de enzimas. No se ha probado que actúen directamente
sobre los genes.
Tipos adaptativos
Según la duración de la vida de los vástagos y según la situación y protección de las yemas
persistentes durante la época desfavorable del año (invierno o períodos secos) los cormófitos
pueden dividirse en 5 formas etológicas:
● Fanerofitas: mantienen sus yemas perdurantes a más de 50 cm sobre el suelo.
Pertenecen a este tipo todos los árboles y arbustos, de hoja perenne y caduca, la mayoría
de plantas trepadoras, así como muchas hierbas altas de países intertropicales cálidos y
húmedos y por último, epífitos.
● Caméfitos (matas): mantienen sus yemas perdurantes próximas al nivel del suelo, entre
10-50 cm. En los climas con mucha nieve quedan cubiertos por ésta y gozan, por ello, de
eficaz protección contra el frío; la nieve es un mal conductor de calor. Pertenecen a este
tipo muchas plantas leñosas reptantes o decumbentes de las tundras boreales y de alta
montaña pero también muchas ericáceas de las landas oceánicas.
● Hemicriptófitos: Las yemas perdurantes quedan al ras del suelo. Forman parte de este
tipo plantas cespitosas (gramíneas), aquéllas bienales o perennes que producen una
roseta de hoja aplicada al suelo, las hierbas perennes que carecen de roseta y cuyas
yemas perdurante se sitúan en la base del tallo folioso muerto, así como hierbas
provistas de estolones epigeos.
● Criptófitos o geófitos: Poseen sus yemas perdurantes aún mejor protegidas, bajo la
superficie del suelo, en rizomas o bulbos.
● Terófitos o plantas anuales: Atraviesan los períodos adversos en estado de reposo
embrional, pues su cuerpo vegetativo anual muere totalmente y quedan sólo como
órganos perdurantes las semillas, dotadas de gran resistencia. Pertenecen a este tipo los
cereales de verano así como muchas malas hierbas de campos.
ESPECTRO BIOLÓGICO
Es un diagrama de barras donde presenta los porcentajes de especies de cada tipo biológico en
una región determinada. Dan una imágen de la fisonomía de la vegetación e indirectamente
permite interpretar diferencias ecológicas de los sitios estudiados. El espectro más informativo
ponderando cada tipo biológico en función de su densidad, cobertura, frecuencia y biomasa es
un espectro biológico ponderado.
Según la influencia de diversos factores ambientales se puede obtener la siguiente clasificación
biológica.
Factor hídrico
Xerófitas: Plantas capaces de soportar una gran sequía de su ambiente, sobre todo del suelo,
por lo menos durante cierto tiempo. Son xeromorfos, es decir, se hallan provistos de
dispositivos encargados de dificultar la pérdida de agua y también tienen muy largas raíces a fin
de absorber basta agua del suelo casi seco.
Hay dos formas de adaptación xeromórfica
Aparición de espinas
Son formaciones agudas, aleznadas, muy ricas en tejidos de sostén y como consecuencias,
rígidas. Pueden ser ramificadas o sencillas y se producen por transformación de la hojas o de
partes de éstas.
Las espinescencia se halla difundida sobre todo en los vegetales típicos de regiones áridas
(desiertos, estepas, bosques secos) pero también aparecen como defensa contra herbívoros.
Suculencia
Numerosos xerófitos no sólo limitan extraordinariamente la pérdida de agua, sino que además
almacenan este líquido en tejidos acuíferos especiales durante los cortos períodos de lluvia y lo
reservan para las épocas de penuria, con frecuencia prolongadas. A veces es la epidermis la que
se desarrolla constituyendo un tejido acuífero y otras veces son células subepidérmicas.
Palustres: Sufren períodos de alta sequía y de alta humedad. Durante la sequía aparece un
tejido mecánico bien desarrollado y características epidérmicas xeromórficas, en humedad hay
aerénquima muy desarrollado, hojas reducidas y reducción del tejido vascular.
Higrófitos: Plantas que viven en una atmósfera muy húmeda y reciben del suelo un abundante
abastecimiento de agua. Presentan como los hidrófitos, particularidades estructurales que
favorecen la transpiración (higromofía). Sometidas estas plantas a ambientes secos, se
marchitan.
Mesófitas: Provisión normal de agua. Se encuentra en lugares donde no sobra ni falta agua. No
desarrolla estructuras anatómicas especiales para disminuir o aumentar la absorción de agua.
Posee hojas grandes, de espesor moderado, epidermis con delgada cutícula,muchos estomas,
mesófilo con espacios intercelulares medianos, gran desarrollo de tejidos conductores y
mecánicos, raíces con pelos absorbentes y reproducción sexual.
Factor lumínico
Importa más su escasez que su exceso ya que el exceso puede ser perjudicial ya que exalta la
actividad cloroplástica un nivel máximo, por lo que la fotosíntesis tiende a aumentar mientras
que la escasez provoca una debilitación del sistema mecánico y una reducción de la actividad
fotosintética.
Bejucos (lianas) o plantas trepadoras: Sin gasto excesivo de materiales, sin troncos
columniformes, pueden elevar en poco tiempo sus hojas por encima de la sombra del bosque
trepando por encima de otros vegetales o también por rocas y muros. Ej: zarcillos.
Epífitas: Prosperan sobre otras en zonas de alta humedad en búsqueda de luz. Fuerte
tendencia al xeromorfismo porque el epifitismo implica adaptaciones que van desde
formas membranosas hasta características xeromórficas definidas. Carecen de raíz, la
absorción es mediante tallo y hojas. Disminuye el espesor de la cutícula para la
absorción. Hojas con mesófilo con grandes espacios intercelulares para amplio
intercambio gaseoso. Estomas salientes y con vaina de drusas que refuerzan el sistema
mecánico.
Hay trepadoras, arraigadas al suelo, de soporte mediante espinas, aguijones y pecíolos
rastreros, radiculares con raíces caulógenas o verdaderas, con zarcillos caulinares,
foliares y volubles.
Verdaderas: no arraigadas al suelo sino que se desarrollan directamente sobre otras
plantas, usando a la planta hospedante solo como soporte. Falta de raíces o escaso
desarrollo. En caso de ser aérea hay velamen para la acumulación de agua y el
parénquima central puede ser clorofiliano, tallo absorbente con disminución de la
superficie foliar para evitar la transpiración.
Esciofitas: Plantas de selva tropical o bosques que son afectadas por la escasez de luz,
por lo que deben ascender sobre otras plantas en su busca. Para esto tienen una
epidermis pluriestratificada con células de empalizada cónicas que en conjunto actúan
como espacios intercelulares para realizar un amplio intercambio gaseoso, los estomas
son salientes, se reducen las raíces y hay transformación del cormo. Pueden ser
terrestres o acuáticas.
Factor salino
La sal en el suelo, como en el agua puede ser un factor limitante en déficit o en exceso.
Oligótrofa: estación con menor contenido de sal pero capaz de sostener vida vegetal.
Eutrofa: estación con mayor contenido salino.
El contenido salino del agua viene de la descomposición de la roca madre pero puede tener
cambios por la influencia climática: en clima de mucha humedad las sales son muy lavadas y la
evolución del suelo evoluciona en sentido oligótrofo; en climas muy secos, las sales permanecen
en el suelo formando suelos salinos en sentido eutrofo.
Halófitas: Crecen en suelos con exceso de sal, lo que presenta un factor limitante para el
desarrollo de la vegetación ya que provocan una gran pérdida de agua. Posee cutícula fina,
epidermis no engrosada, poco desarrollo de tejido mecánico y estomas en superficie. Posee
parénquima acuífero. Mucha sal en el suelo determina una elevada presión osmótica. En
solución a esto, la planta aumenta su propio potencial osmótico para poder absorber más
cantidad de agua, lo que conlleva a desarrollar suculencia. La acumulación de agua responde a
diferencias de presión osmótica y no a una real necesidad de reservar agua. No hay mecanismos
para frenar la transpiración. Para eliminar la sal la epidermis posee glándulas salinas de
eliminación (pelos glandulares pluricelulares de eliminación pasiva, se rompe la punta del pelo,
se elimina la sal y se deposita en la superficie foliar) o poros cuticulares y células secretoras
donde hay microvellosidades en las paredes donde se acumula la sal que luego se elimina.
Silicícolas: En suelos silíceos (ph ácido), arenosos y excesivamente lavados, puede faltar
actuando como factor limitante las sales y el complejo coloidal que retiene el agua. En regiones
húmedas y frías se desintegra el humus, que produce que se corroa las capas superiores del
suelo formando una capa muy dura. Se caracteriza por tener una marcada tendencia al
xeromorfismo generalizado, son perennes con esclerosamiento foliar (atrofia), clorénquima,
micorrizas que ayudan en la desintegración del humus y pocas exigencias nutricias, por eso
crece lento.
ADAPTACIONES A LA NUTRICIÓN
La pérdida de los
dispositivos asimiladores ha
conducido a la formación de
nuevos caracteres
estructurales, por ejemplo,
el desarrollo de haustorios
que permiten a los parásitos
penetrar en el cuerpo del
hospedante, hasta las vías
conductoras del mismo y
utilizar el contenido de ellas
para la nutrición.
Unidad 11 fitogeografía
reemplazada por biomas
Caméfitas. Plantas con la parte inferior leñosa y persistente, las yemas caulinares se encuentran a
menos de 25-30 cm por encima del suelo, sobre brotes aéreos cortos, rastreros o rectos. Aparecen
aquí los subarbustos y matas fruticosas y sufruticosas. Ejemplo: Bromelia serrae
○ Caméfitos sufruticosos: Acinos alpinus.
○ Caméfitos fruticosos: Vaccinium myrtillus.
○ Caméfitos pulviniformes: Armeria.
○ Caméfitos rosulados: Bromelia.
○ Caméfitos suculentos: Sedum brevifolium.
○ Caméfitos graminoides: Avena sativa.
○ Caméfitos espaldera: Loiseleuria procumbens.
○ Caméfitos reptantes: Hieracium mixtum.
○ Caméfitos erráticos: Tillandsia