Arbitraje

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ISSN 2415-2277 (en línea)

Agosto 2016 / Número 26 / Año 3

Arbitraje
ARBITRAJE

CONTENIDO

Doctrina práctica
Perspectiva arbitral de la teoría general del Estado de Kelsen
Alejandro Verástegui Gastelú. .. ...... ...... ...... ...... ...... ...... ... 313

Nos preguntan y contestamos


¿En el proceso de ejecución de laudos se encuentra limitado el acceso
al recurso de casación?... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... .. 327

Reseña de jurisprudencia
Causal de recusación conocida después de emitido el laudo puede
ser controvertida en un proceso de anulación (Cas. N.° 1486-2015
La Libertad) ... ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . ..... . 330
Área práctica
Doctrina Arbitraje

doctrina práctica

Doctrina práctica
Perspectiva arbitral de la teoría general del
Estado de Kelsen
Alejandro Verástegui Gastelú*
Universidad Nacional Federico Villarreal

SUMARIO

1. El Estado para Hans Kelsen.— 2. El arbitraje.— 3. Arbitraje en el Estado desde


la teoría kelseniana.— 4. Conclusiones.— 5. Referencias bibliográficas.

Resumen Abstract
¿La teoría general del Estado kelseniana Can the Kelsenian General Theory of the
puede aplicarse al arbitraje en la actuali- State be currently applicable to arbitra-
dad?, ¿el arbitraje cumple o no los requi- tion?, Does arbitration meet or not the
sitos para constituirse como un órgano requirements to be an organ of the “mate-
del Estado “material”?, ¿la concepción rial” State?, Does the concept of arbitra-
del arbitraje como jurisdicción permite tion as jurisdiction enables attributing to it
atribuir las mismas funciones a este que the same functions as the Judicial Power?
al Poder Judicial? Keywords: Hetero-compositive form /
Palabras clave: Forma heterocompositiva / Kelsen’s Theory of the State / Arbitration
Teoría del Estado de Kelsen Title: Arbitration perspective of Kelsen’s
General Theory of the State
Recibido: 30-06-16
Aprobado: 11-08-16 Author: Alejandro Verástegui Gastelú
Publicado en línea: 01-09-16

* Abogado con estudios de Maestría en Derecho Constitucional y Derechos Humanos en la Universidad


Nacional Mayor de San Marcos. Maestría en Filosofía en la especialidad de Epistemología por la misma
casa de estudios. Socio del estudio jurídico “Verástegui & Asociados”.

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Actualidad

Civil Arbitraje Alejandro Verástegui Gastelú

1. El Estado para Hans Kelsen definirlo desde la sociología, por ser un


El presente artículo nace como una ente eminentemente jurídico.
especie de rebeldía jurídica, escaparnos Para otros teóricos por ejemplo
de la figura del mero técnico del derecho, Carl Schmitt el derecho es producto
no ceñirnos a interpretar el artículo de del poder, de la política, sin embargo,
un código, por ello analizaremos aquí, Kelsen refutaría indicando, señores,
señores lectores, la epistemología de ¿qué poder está detrás del derecho?,
Hans Kelsen al sustentar su teoría ¿dónde está el carácter político? Si bien
general del Estado, si esta es acorde al tenemos una organización política, el
funcionamiento del arbitraje y si aún derecho se impone al fin, y sirve para
sirve en la época actual. juzgar a los mismos que en un momento
determinado pretendieron pervertirlo o
Carnelutti dice:
utilizarlo a sus antojos, quedando al final
nuevamente el Estado como el orden
jurídico nacional, no un ente maligno
“ El arbitraje es una
forma heterocompo-
detrás del mismo, no un ser o alma fan-
sitiva (una solución
tástica que anima al mismo, sino como
al litigio) dada por lo que es, un grupo de normas jurídicas.
un tercero imparcial, Como ejemplo actual podemos ver a
un juez privado o Alberto Fujimori quien junto a su asesor
varios, generalmen- Vladimiro Montesinos pretendían un
te designado por las tercer gobierno marchando en contra
partes contendientes; y en ausencia
de su consentimiento, el juez público
de la misma Constitución Política
nacional, será el encargado de desig- promulgada por ellos, y cuando los
narlo, el cual tiene un procedimiento miembros del Tribunal Constitucional
establecido en la ley adjetiva, pero no interpretaban a su favor los sacaron
menos riguroso que el de un proceso y persiguieron, sin embargo, hoy en día

jurisdiccional . con el mismo orden jurídico nacional;
es decir, el Estado sancionó a quienes no
Para nuestro autor no existe el de- la respetaron, quienes no se apegaron a
recho en sentido absoluto, existen los derecho. Entonces Kelsen nos diría,
órdenes jurídicos nacionales y el orden frente a este capítulo de la reciente
jurídico internacional, y justamente el historia peruana: “ya ven, no hay poder
Estado no es otra cosa que el mismo detrás del derecho que vaya a someterse
orden jurídico nacional; es decir, el Es- al final al mismo”.
tado peruano sería el orden jurídico del Pero entonces sobre esta forma de
Perú, el derecho peruano es el Estado ver al Estado, ¿qué actos se imputan al
peruano, asimismo para Kelsen no Estado? En esta teoría los actos que se
existe una forma de analizar el Estado o

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imputan al Estado son todos los actos Aplicando el análisis sobre la teoría
que acaban dándose en cumplimiento desarrollada las respuestas son coheren-
de la norma jurídica o incumplimiento tes, ya que a quien sancionamos ante
de la misma, que activaría las sanciones las funciones y omisiones del Estado es
penales o administrativas correspon- en realidad a los funcionario públicos,
dientes. En cuanto a los órganos del no al Estado en realidad, no al orden
Estado serían dos: una de manera amplia jurídico, sino a las personas que tenían
y otra de manera restringida o mate- las funciones de hacer o no hacer algo.
rial, en la primera hablamos de todos Entonces entendiendo al Estado como
los miembros de la comunidad, en el orden jurídico nacional también se
segundo caso, solo de los funcionarios concluye que no existe el acto antijurí-
públicos: son aquellos que son nombra- dico nacional, porque el mismo orden
dos o electos para una función, actividad jurídico no se autoobliga, pero algunos
principal en la función otorgada y tienen dirían: “yo he visto o llevado un caso
derecho al salario que se paga con cargo judicial donde responsabilizan al Estado
al erario público. que tiene que indemnizar a una perso-
Entendiendo al Estado como per- na” y, es más, que hay normas que, al
sonificación del orden jurídico nacio- contradecir a otras, el mismo sistema
nal, Kelsen se pregunta si el Estado es jurídico nacional las expulsa. Pero esto
sujeto de deberes y derechos. Nosotros no contradeciría en nada la propuesta
sancionamos las conductas, analizamos de Kelsen, al contrario también tiene
las mismas, pero las normas jurídicas no explicación, porque lo que sí existe es
son conductas, describen conductas en el acto antijurídico internacional. Es
algunos casos pero no son conductas; decir que el orden jurídico nacional
entonces un orden jurídico no puede te- (Estado) sí es sancionado por el orden
ner una conducta, por lo que el Estado, jurídico internacional, a través de los
así entendido, no puede ser sancionado, Órganos Internacionales, quienes utili-
porque sería entender que el mismo or- zan la normativa internacional, dentro
den jurídico nacional se está autosancio- de las cuales se ordenará al Estado que
nando, por lo que desaparece el debate repare a quienes ha causado un daño.
teórico que existía en la Alemania de Es decir, el origen de estas reparaciones
su tiempo, sobre la “autoobligación del se haya en el choque que existiría entre
Estado”, al no ser el Estado una tercera el orden jurídico nacional con el inter-
persona. Entonces surgen las preguntas: nacional; y además el Estado, al ser el
¿a quién sancionamos ante las funciones orden jurídico, tiene que respetar la ley
y omisiones imputadas al Estado?, ¿exis- de leyes, que no puede ser contradecida
te el acto antijurídico nacional?, ¿quién y respetándose la hartamente conocida
sanciona al Estado?, ¿cuándo el Estado pirámide kelseniana, es decir, todo en-
repara el daño? talla perfectamente en esta estructura

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teórica creada por Kelsen en su obra no del Perú del asilo concedido a Haya
Teoría general del derecho y del Estado, de la Torre, y Manuel Odría no pudo
que lo que hace es desarrollar un poco sacarlo a la fuerza, sometiéndose el caso
más su Teoría pura del derecho. a la justicia internacional, porque la
Finalmente, en cuanto a los ele- embajada es “ámbito espacial de validez
mentos del Estado que conocemos del orden jurídico” de Colombia, en este
desde la escuela: territorio, población caso descrito. Así, pues, podemos ver
y gobierno, para el enfoque kelseniano que esta forma de entender el territorio
esta es una clasificación por así decirlo se ajusta mejor a la realidad, ya que
infantil, y adhiere una nueva forma de cuando una embajada se cierra, esa por-
entenderlos. Por ejemplo, en cuanto al ción de tierra no es devuelta al país que
territorio no se refiere al área geográfica tuvo su embajada, lo único que sucede
o porción de tierra, sino entiéndase el es que desaparece el ámbito espacial de
elemento de territorio como “ambito validez de determinado orden jurídico
espacial de validez del orden jurídico”, de un país determinado y vuelve a tener
lo que permite entender la no existencia validez el de otro. Por otro lado, tenemos
de la unidad territorial. Por ejemplo, las también como elemento del Estado al
Malvinas pertenece a Inglaterra pero no tiempo, al darse como “ámbito temporal
está unida geográficamente a Inglaterra de validez del orden jurídico” pudiendo
como territorio, entendido en la manera explicarse los nacimientos y muertes de
clásica, sino que en las Islas Malvinas el los Estados.
orden jurídico vigente es el de Inglaterra,
y tal como se ha explicado el Estado es 2. El arbitraje
igual al orden jurídico, concluyendo Para Carnelutti1, el arbitraje es
entonces en que si en las Islas Malvinas una forma heterocompositiva (una
rige el orden jurídico inglés entonces solución al litigio), dada por un tercero
rige el Estado inglés. Lo mismo funciona imparcial, un juez privado o varios,
para las embajadas en todos los países, generalmente designado por las partes
los cuales se interpretan como si fuesen contendientes. Y en ausencia de su
un área geográfica de un país dentro de consentimiento, el juez público nacio-
otro, teniendo que respetarse el mismo nal, será el encargado de designarlo, el
incluso cuando una persona ingresa y cual tiene un procedimiento establecido
pide asilo político. Este fenómeno se en la ley adjetiva, pero menos riguroso
entiende adecuadamente bajo la lupa que el de un proceso jurisdiccional. Al
del análisis kelseniano porque en aquella finalizar tal procedimiento se llega a una
embajada está rigiendo el orden jurídico
del país de procedencia, por ejemplo, el 1 Carnelutti, Francesco, Estudios de derecho
4 de enero de 1949, el Embajador de procesal, vol. V, t. II, traducción de De Santia-
go Melendo, Buenos Aires: Ed. EJEA, 1959,
Colombia en Lima informó al Gobier- p. 518.

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resolución, la cual recibe el nombre de sustraerse de la intervención de los órga-


laudo, empero, la eficacia de la ejecución nos judiciales estatales”.
radica en la voluntad de las partes o de la Se configura el arbitraje, siguiendo
intervención judicial oficial, dependien- a Briseño4, “cuando dos o más sujetos
do de las variantes con las que se haya acuerdan someter sus diferencias ju-
acordado llevar el arbitraje. rídicas a la decisión de un tercero. La
De igual forma, este mismo jurista discusión jurídica, la trilogía de sujetos,
nos dice que el arbitraje comercial puede el acuerdo y la decisión del pleito, son
ser definido como un medio o técnica las notas que permanecen constantes.
mediante el cual tratase de resolver las Para Cantuarias y Aramburú5,
diferencias surgidas entre las partes a el arbitraje “es un medio privado de
través de la voluntaria sumisión de las solución de controversias, mediante
mismas al fallo o laudo que debe rendir la intervención y decisión de terceros
una tercera persona o comisión, no también privados, a quienes las partes de
investida de autoridad jurisdiccional. manera voluntaria han decidido someter
Para el profesor Lohman Luca de su conflicto, aceptando de antemano
Tena2 el arbitraje es “la institución que acatar su decisión”.
regula el acuerdo de voluntades por el Castillo Freyre y Vasquez Kun-
cual dos o más partes deciden someter ze6 señalan que “[e]l arbitraje es la ma-
a uno, o más, terceros que aceptan el nifestación más elemental de la adminis-
encargo, la solución de un cierto con- tración de justicia. En el presente estado
flicto de derecho privado, respecto del de la evolución histórica, solo puede
cual dichas partes tienen capacidad de ser concebido como una sustracción
disposición, obligándose previamente a legalmente autorizada a la jurisdicción
no llevar la controversia a los tribunales estatal. Se origina mediante un contrato
ordinarios sin el previo fallo arbitral, privado por el que dos o más sujetos de
el cual deberá expedirse con arreglo a derecho deciden someter un conflicto
ciertas formalidades”. con relevancia jurídica a la decisión re-
Sara Feldtein y Hebe Leonardi3 solutoria, definitiva y exclusiva, de uno
entienden que “el arbitraje es un método
de solución de controversias mediante el 4 Briseño, Humberto, El arbitraje en el derecho
cual, en ciertas ocasiones, la ley permite privado, México: Ed. Imprenta Universitaria,
1963, p. 21.
5 Cantuarias Salaverry, Fernando y Aram-
burú Yzaga, Manuel, El arbitraje en el Perú:
2 Lohmann Luca De Tena, Juan Guillermo, El desarrollo actual y perspectivas futuras, Lima:
arbitraje, vol. V, Lima: Fondo Ed. de la PUCP, Editor Fundación M. J. Bustamante de la
1989, p. 39. Fuente, 1994, p. 39.
3 Feldstein De Cárdenas, Sara y Leonardi 6 Castillo Freyre, Mario y Vásquez Kunze,
De Herbón, Hebe, El arbitraje, Buenos Aires: Mario, El juicio privado: La verdadera reforma
Abeledo Perrot, 1998, p. 12. de la justicia, Lima: Ed. Palestra, 2007, p. 283.

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o más terceros denominados árbitros, positiva, en virtud del cual una tercera
que son designados por las partes o persona, objetiva e imparcial, nombrada
por algún mecanismo establecido por por las partes mediando convenio, re-
ellas. Así, la decisión resolutoria de los suelve en base a una potestad específica
árbitros o laudo, será de cumplimiento el conflicto intersubjetivo de intereses
obligatorio para las partes en virtud de jurídicos, en caso de ser la materia sus-
que el ordenamiento jurídico establece ceptible de disposición por las personas
que los contratos son ley para las partes. afectadas por la discrepancia”.
La ejecución de la decisión arbitral, en
caso esta sea necesaria, queda siempre Importante
en manos del Estado”.
Del Aguila7 señala que “el arbitra- El arbitraje se entiende como una al-
je es una manifestación tangible de la ternativa que complementa el siste-
ma judicial puesta a disposición de
autonomía de voluntades que detentan la sociedad para la solución pacífica
las partes para alcanzar una solución de las controversias. Y que constitu-
heterocompositiva de sus diferencias, a ye una necesidad, básicamente para
través de una vía alternativa a la ofrecida la solución de conflictos patrimonia-
por el Poder Judicial”. les de libre disposición y, sobre todo,
para la resolución para las controver-
Viene a ser, según Pereyra Cam- sias que se generen en la contrata-
pos , “[…] un sistema de solución de
8
ción internacional, postura la cual es
conflictos en que la voluntad de las par- compartida por el Tribunal Constitu-
tes se somete a la voluntad de un tercero. cional en la sentencia: STC N.° 6167-
En el fondo del arbitraje existe un pacto 2005-PHC/TC, entre otras.
o convenio entre los litigantes en el sen-
tido de que someterán sus voluntades a El reconocido jurista Diez–Picazo
la convicción y al pronunciamiento del nos dice al respecto que el arbitraje es
tercero con el compromiso de cumplir “aquella institución consistente en que
con lo que por él se decida”. dos o más personas pacten entre sí que
Según Juan Gómez9, “el arbitraje un tercero resuelva un litigio ya surgido
es una institución jurídica heterocom- entre ellas, excluyendo que los tribunales
conozcan del mismo”10.
7 Del Águila Ruiz De Somocurcio, Paolo, En sí el arbitraje es un mecanismo
“Arbitraje institucional o arbitraje ad-hoc de solución de conflictos, mediante el
¿He ahí el dilema?”, en Revista Peruana de
Arbitraje, vol. 1, Lima: 2005, p. 231.
8 Pereyra Campos, Santiago, “Aplicación del nal, vol. II, Barcelona: Editorial Bosch, 1995,
arbitraje a los conflictos individuales del tra- p. 843.
bajo”, en Revista Uruguaya de Derecho Procesal, 10 Diez - Picazo, Ignacio, Derecho Procesal Ci-
vol. 4, Montevideo: 1995, p. 533. vil, Madrid: Ed. Centro de Estudios Ramón
9 Gómez Colomer, Juan, Derecho Jurisdiccio- Araces, 2000, p. 574.

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cual dos partes enfrentadas por una con- especialmente porque los organismos
troversia deciden recurrir a un tercero institucionales están destinados especí-
llamado árbitro quien dará la solución ficamente a esa específica función. Otra
definitiva del conflicto. Los árbitros semejanza con el proceso judicial es que
son personas especializadas en el tema comparte los principios constitucionales
materia del conflicto. de la tutela jurisdiccional efectiva, el de-
El arbitraje se entiende como una bido proceso —garantía del derecho de
alternativa que complementa el siste- defensa, independencia e imparcialidad
ma judicial puesta a disposición de la del árbitro, resolución y cumplimiento
sociedad para la solución pacífica de de los laudos.
las controversias. Y que constituye una Para Ventas Sastre11, “[...] es un
necesidad, básicamente para la solución mecanismo privado mediante el cual
de conflictos patrimoniales de libre dis- dos partes deciden, en base al principio
posición y, sobre todo para la resolución de la autonomía de la voluntad, some-
para las controversias que se generen en ter a la decisión de uno o más árbitros
la contratación internacional, postura una controversia jurídica relativa a una
la cual es compartida por el Tribunal materia de libre disposición”.
Constitucional en la sentencia: STC Por otro lado, la Cámara de Co-
N.° 6167-2005-PHC/TC, entre otras. mercio de Barranquilla12, lo ha de-
El arbitraje, por el modus operando finido como un mecanismo establecido
para la solución del conflicto, implica en la Constitución Política y en la ley,
una solución coactiva e imparcial, como mediante el cual, las partes involucradas
el proceso judicial administrado por un en un conflicto de carácter transigible,
tercero designado con las formalidades delegan expresamente su solución a un
legales por las partes. El árbitro o tri- tribunal de arbitramento, integrado
bunal arbitral compone o resuelve el por uno o tres árbitros especialistas en
conflicto con o sin colaboración de los el tema a dirimir, el cual queda transi-
interesados, instituyendo el laudo arbi- toriamente investido de la facultad de
tral que se caracteriza por su cualidad administrar justicia, profiriendo una
de cosa juzgada equiparable al de una decisión denominada laudo arbitral,
sentencia judicial, así como de imperio la cual tiene los mismos efectos de una
vía actuación judicial ante el incumpli- sentencia proferida por los jueces de la
miento, por ello el arbitraje se aproxi- República.
ma a la actuación del proceso judicial
porque son comunes, pero se diferencia 11 Ventas Sastre, Rosa, “¿Viabilidad de un
de ellos por su forma de constitución Arbitraje en Materia Penal?”, Lima: 2009,
Recuperado de <http://goo.gl/00vxLN>.
(elección del tercero por las partes y no
12 Cámara de Comercio de Barranquilla,
por el aparato jurisdiccional), y muy “¿Qué es el Arbitraje?”. Recuperado de
<http://goo.gl/m1kmJY>.

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“El arbitraje es un método de resolución incluso más antiguo que el proceso


de disputas alternativo a la Administración del Poder Judicial. En efecto, fue en el
de Justicia. Se caracteriza por ser un pro-
cedimiento privado e informal, por el que
Derecho Romano donde el arbitraje se
las partes acuerdan someter determinada configuró como un sistema organizado
disputa a una o varias personas impar- para obtener una solución pacífica a las
ciales (árbitros) a las que autorizan para controversias surgidas entre familiares o
que resuelvan la controversia mediante familias mediante la decisión de terceros
una decisión definitiva y obligatoria para
las partes. Cuando una disputa se somete imparciales.
a arbitraje, se excluye el recurso a la Ad- En la actualidad, no cabe duda
ministración de Justicia en relación con
de la importancia que ha adquirido el
esa disputa. Por eso, es imprescindible el
consentimiento de ambas partes. Una vez arbitraje como método de resolución
que las partes han pactado el sometimiento de controversias alternativo al sistema
a arbitraje, cada parte está vinculada por jurisdiccional.
dicho pacto. A arbitraje se puede someter
tanto una disputa ya existente entre las 2.1. Naturaleza jurídica del arbitraje
partes como una eventual disputa futura
(por ejemplo, cuando en un contrato las Tres son las corrientes que propo-
partes pactan someter a arbitraje cualquier nen interpretaciones sobre esta cuestión.
disputa que surja en el futuro en relación
con el mismo). La primera de ellas es la teoría privatista
La decisión de los árbitros se denomi-
o contractualista, que equipara al arbi-
na laudo, tiene el mismo valor de cosa traje a un contrato privado, como una
juzgada que una sentencia, y también se manifestación de la soberanía y poder de
puede ejecutar forzosamente. Una de las disposición de las partes sobre sus rela-
características más relevantes del laudo es ciones jurídicas. La falta de imperio, de
que no se puede recurrir como se recurre
una sentencia, no existe una “segunda ins- los laudos arbitrales, y la no pertenencia
tancia arbitral”. Frente el laudo solo cabe de los árbitros al sistema judicial estatal
interponer ante los tribunales ordinarios llevan a considerar a esta corriente como
una demanda de anulación, que sólo pue- instituto privado. La segunda corriente
de basarse en motivos formales y tasados
(por ejemplo, que los árbitros hayan de-
corresponde a la jurisdiccional o pro-
cidido sobre cuestiones que las partes no cesalista, que se fundamenta en el ca-
sometieron a su conocimiento), y que, en rácter jurisdiccional de esta institución;
general, no permite una revisión de fondo equipara la función del árbitro con la
de la decisión adoptada por los árbitros.”13 capacidad decisoria al juez, asimilando
El arbitraje es un mecanismo de al laudo con la sentencia, características
solución de conflictos cuyo origen es que señalan el carácter público del arbi-
traje. La tercera es la teoría mixta, para
los adscritos a esta corriente el arbitraje
13 Gonçalves Pereira, Cuatrecasas, “El Ar- es en su origen un negocio de derecho
bitraje: ¿Qué es y cuáles son sus ventajas e
inconvenientes?”. Recuperado de <http://goo. privado, como creación de la voluntad
gl/bYpR5o>. de los particulares, pero procesal por

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las sujeciones y las limitaciones a que munidades campesinas y nativas (artícu-


esta voluntad es sometida, ante el au- lo 149); lo que no vulnera el principio
xilio del poder judicial por la carencia de igualdad ante la ley, previsto en el
de coercibilidad, cuando de ejecución numeral 2 del artículo 2 de la Constitu-
forzosa se trata. ción, siempre que dichas jurisdicciones
Sobre la jurisdicción, en la Cons- aseguren al justiciable todas las garantías
titución Política de 1993 se consagra el vinculadas al debido proceso y a la tutela
principio de unidad y la exclusividad de judicial efectiva.15

la función jurisdiccional en el artículo Si bien la institución del arbitraje


139, numeral 1: “No existe ni puede ha sido reconocida constitucionalmente
establecerse jurisdicción alguna inde- como una jurisdicción16 de excepción, a
pendiente, con excepción de la arbitral partir de la vigencia de la Constitución
y la militar. No hay proceso judicial de 1979 (artículo 233, numeral 1). Esta
por comisión o delegación”. Por lo que, disposición constitucional se ha repro-
se entiende “como regla general, que ducido, a su vez, en el referido artículo
corresponde al Poder Judicial el avoca- 139, numeral 1), con lo cual muchos
miento único y singular del estudio, así juristas indican que el tema sobre la
como la solución de los diversos tipos naturaleza jurídica está cerrado, sin em-
de conflictos jurídicos (principio de bargo, el debate en torno a la naturaleza
unidad), prohibiéndose al legislador jurídica del arbitraje es permanente.
que atribuya la potestad jurisdiccional Pongámonos a pensar en que la
a órganos no conformantes del Poder Constitución reconoce naturaleza ju-
Judicial (principio de exclusividad)”14. risdiccional al arbitraje como resultado
Tradicionalmente, se ha reservado de un consenso entre los legisladores, lo
el término jurisdicción para designar cual no la otorga ipso iure la calidad de la
la atribución que ejercen los órganos misma, sino que tiene que basarse en la
estatales encargados de impartir justicia argumentación jurídica, además de no-
y aplicar las disposiciones previstas en tar esto de los consensos en las ciencias
la ley para quien infringe sus mandatos. sociales: muy poca seriedad del método
Entonces, se encuentran legiti-
mados los fueros especiales: militar y 15 Tribunal Constitucional, Expediente N.°
arbitral (numeral 1 del artículo 139), 6167-2005-PHC, Lima: 9 de marzo de
2006, ff. jj. n.os 5 - 7.
constitucional (artículo 202), y de co- 16 Condiciones que definen la potestad jurisdic-
cional: (i) conflicto entre las partes, (ii) interés
social en la composición del conflicto, (iii)
14 Álvarez Miranda, Ernesto y Canales Cama, intervención del Estado mediante el órgano
Carolina, “El papel de la jurisprudencia judicial, como tercero imparcial y (iv) Aplica-
Constitucional en el desarrollo de la Jurisdic- ción de la ley o integración del Derecho [STC
ción Arbitral”, en Arbitraje, Lima: Editorial N.° 0023-2003-AI/TC, Lima: 28 de octubre
Palestra, p. 25. de 2004, (f. j. n.° 13)].

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científico. Si bien tenemos que obedecer la teoría jurisdiccionalista del arbitraje,19


lo que la ley ordena o prohíbe, no por por encontrar cada una de ellas funda-
ello debemos de dejar de cuestionarla mento en el orden marco constitucional.
y más aún cuando su contenido es de Criticamos la postura del Tribunal
orden teórico. Constitucional que solo reconoce la
Así tenemos opiniones contrarias doctrina de naturaleza jurídica juris-
que se basan en que el arbitraje no puede diccional, en la cual se ha argumentado
constituir una expresión de la jurisdic- que su verdad estaría al considerar la
ción, pues, salvo que el concepto se jerarquía de la norma constitucional que
utilice en sentido lato, su configuración le da este reconocimiento (artículo 138
contiene intrínsecamente una renuncia y 139 de la Constitución Política del
a esta, porque el árbitro es incapaz de Perú). En este sentido, la resolución del
desarrollar funciones de carácter públi- Tribunal Constitucional del 28 de febre-
co, lo que ocasionaría que se quiebre el ro del 2006 (Expediente N.° 6167-2005
principio fundamental de la unidad de PHC/TC) reconoce plenamente la in-
la jurisdicción17. dependencia jurisdiccional del arbitraje
Veamos, en abstracto, esta legiti- al señalar que “[e]ste tribunal reconoce
mación proviene de la voluntad general la jurisdicción del arbitraje y su plena
plasmada por el constituyente en las y absoluta competencia para conocer y
Cartas de 1979 y 1993; mientras que resolver las controversias sometidas al
en el marco de una determinada con- fuero arbitral sobre materias de carácter
troversia es el principio de autonomía disponible, con independencia juris-
de la voluntad de los privados, previsto diccional y, por tanto, sin intervención
en el artículo 2, numeral 24-a, de la de ninguna autoridad administrativa o
Constitución, el elemento que legitima judicial ordinaria”.
la intervención de los árbitros en la re- Asimismo, el fundamento jurídico
solución del conflicto.18 11 el Tribunal Constitucional refiere:
Me inclino más por la opción mixta “La facultad de los árbitros para resolver
o ecléctica, a favor de una naturaleza un conflicto de intereses no se funda-
jurídica propia que conjuga las caracte- menta en la autonomía de la voluntad
rísticas de la teoría contractualista y de de las partes del conflicto, prevista en
el artículo 2 numeral 24 literal a de la
Constitución, sino que tiene su origen
17 Monroy Palacios, Juan José, “Arbitraje,
jurisdicción y proceso”, en Revista Peruana
y, en consecuencia, su límite, en el ar-
de Derecho Procesal, n.º 10. Lima: 2008, pp. tículo 139 de la propia Constitución”,
141-151.
18 Landa Arroyo, César, “El arbitraje en la
Constitución de 1993 y en la jurisprudencia 19 Cantuarias y Yzaga, El arbitraje en el Perú:
del Tribunal Constitucional”, en Themis n. º desarrollo actual y perspectivas futuras, ob. cit.,
53, Lima: 2007, p. 31. pp. 44-45.

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Doctrina práctica Perspectiva arbitral de la teoría general del Estado ...

lo que me recuerda a los evangelistas, orden jurídico nacional, entonces ahí se


cristianos, etc. y su ilógico fundamento encuentra el Estado.
de la existencia de Dios porque la biblia
lo dice. ¿Sabía usted que?

3. Arbitraje en el Estado desde la teoría El arbitraje es un mecanismo de so-


kelseniana lución de conflictos cuyo origen es
incluso más antiguo que el proceso
Tal como podemos ver en el nu- del Poder Judicial. En efecto, fue en
meral anterior, la discusión de si la el derecho romano donde el arbitraje
naturaleza es jurisdiccional o contrac- se configuró como un sistema organi-
tual se dice que está cerrada porque la zado para obtener una solución pací-
Constitución Política actual lo ha deli- fica a las controversias surgidas entre
familiares o familias mediante la deci-
mitado como jurisdiccional, con lo que sión de terceros imparciales.
podemos ver como hay quienes tratan
a la Constitución Política como una
especie de dogma (ojo nos referimos al Teniendo en cuenta estas dos pre-
análisis teórico de la misma que es algo misas, cabría preguntarnos qué sucede
que no puede cerrarse, no discutimos cuando dos partes en un proceso arbitral
su cumplimiento), es decir, una actitud deciden someterse a una normativa ar-
nada científica. Creo que el derecho no bitral extranjera. Supongamos que una
es una ciencia, es más una técnica, pero empresa ficticia “Pacifico del Norte”
estoy convencido que sí podemos hacer demanda a su distribuidor “Papelería
ciencia en el derecho si seguimos el mé- los Antipacificos”, pero ambas empresas
todo científico, por ejemplo, comparar tuvieron su origen en Estados Unidos,
el principio de presunción de inocencia y sus dueños son los ciudadanos esta-
con el método del falsacionismo de Karl dounidenses que radican en Perú, y por
Popper, entre otros. sentirse más cómodos deciden someter
su proceso arbitral ante la Cámara de
Retornando a nuestro tema, nues-
Comercio de Lima pero bajo la norma-
tra premisa es que el Estado es el orden
tiva de la Cámara de Comercio Inter-
jurídico nacional, entonces, la Ley
nacional. En ese caso tenemos ante el
de Arbitraje, Decreto Legislativo N.°
proceso que el orden jurídico aplicable
1071, es parte del Estado, dentro de esta
no es el nacional, sino el foráneo; en ese
estructura teórica.
momento imaginemos una audiencia ar-
Otra premisa es en los elementos del bitral de fijación de puntos controverti-
Estado, al entender que el territorio es el dos, todos sentados en la mesa, acaso un
espacio de validez normativo, podemos kelseniano podría decir señores en este
identificar que donde tiene vigencia el momento no estamos en Perú, porque la
norma aplicable al presente proceso no

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Actualidad

Civil Arbitraje Alejandro Verástegui Gastelú

es nacional. ¿Cabría tal observación?, ¿se Lo otro sería preguntarnos si el ár-


cae la fórmula Kelseniana para entender bitro es un órgano del Estado en sentido
al Estado? amplio o en sentido material o restringi-
do. Recordemos que en la primera habla-
Importante mos de todos los miembros de la comu-
nidad, es decir, en cuanto a esa postura
La Constitución reconoce naturaleza efectivamente todos somos órganos del
jurisdiccional al arbitraje como resul- Estado por el hecho de activar y poner
tado de un consenso entre los legisla- en uso la normativa nacional, es decir, el
dores, lo cual no la otorga ipso iure la árbitro sí es órgano del Estado en sentido
calidad de la misma, sino que tiene que amplio. En cuanto a la segunda postura
basarse en la argumentación jurídica,
además de notar esto de los consensos donde solo los funcionarios públicos son
en las ciencias sociales: muy poca serie- órganos del estado, el mismo Kelsen nos
dad del método científico. Si bien tene- indica que son aquellos que son nombra-
mos que obedecer lo que la ley ordena dos o electos para una función, actividad
o prohíbe, no por ello debemos de de- principal en la función otorgada y tiene
jar de cuestionarla y más aún cuando derecho al salario que se paga con cargo
su contenido es de orden teórico.
al erario público. En el caso del árbitro
quienes lo nombran o designan son las
En realidad, solo reafirmamos partes o el Centro de Arbitraje, es decir,
la propuesta de Kelsen, ya que si se particulares no el Estado (teóricamente
permite que se sometan las partes a es contradictorio el arbitraje de Arbitra
una normativa extranjera es porque el Perú y OSCE, al ser órganos estatales
propio orden jurídico nacional, es decir administrando arbitrajes), y por más que
el Estado, así lo establece al permitir a en algunos casos el Estado sea parte en
las partes elegir la norma bajo la cual se el proceso, en ese momento el Estado
regirán en el arbitraje, supongamos que actúa como un particular, además que
el arbitraje no se encuentre en la Cons- el árbitro que ingresa a un caso no tiene
titución Política ni se diga nada sobre una relación laboral con la persona que
su validez, entonces las partes podrían lo designa y mantiene una postura propia
llevar a cabo sus procesos arbitrales, pero ante lo que tiene que resolver, la actividad
sus laudos no tendrían título ejecutivo, principal lógicamente es la asignada al
es decir no podrían ser ejecutados por un ingresar a dirigir el arbitraje, y sobre los
juez al carecer de coertio el arbitraje; todo honorarios, estos provienen de las partes
quedaría como una especie de pacto en el proceso, no del erario público; la
de caballeros parecido a la negociación excepción sería si la parte que pagó el
como medio alternativo de solución de proceso arbitral es un órgano del Esta-
conflictos (exceptuando la negociación do. En si vemos que no se cumplen los
colectiva que sí está legislada). requisitos dados por Kelsen para ser un

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Doctrina práctica Perspectiva arbitral de la teoría general del Estado ...

órgano del Estado de manera material, el arbitraje se configuró como un


pero sí de manera amplia. sistema organizado para obtener una
Entonces, podemos concluir que solución pacífica a las controversias
el arbitraje no es la excepción en cuan- surgidas entre familiares o familias
to a la teoría ofrecida por Kelsen y mediante la decisión de terceros
perfectamente se adecúa a la misma; imparciales.
es más, las circunstancias actuales del • Naturaleza del arbitraje: a) teoría
derecho internacional son pares con la privatista o contractualista, b) teo-
misma teoría. ría jurisdiccional o procesalista, c)
teoría mixta.
4. Conclusiones • La Constitución Política de 1993
establece una naturaleza jurisdic-
• Para Kelsen no existe el derecho
cional al arbitraje como resultado de
en sentido absoluto, existen solo
un consenso entre los legisladores, lo
órdenes jurídicos nacionales y el
cual no le otorga ipso iure la calidad
orden jurídico internacional.
de la misma, sino que tiene que ba-
• Derecho peruano es lo mismo que sarse en la argumentación jurídica,
Estado peruano. además de notar esto de los consen-
• ¿Qué actos se imputan al Estado? sos en las ciencias sociales: muy poca
Todos los actos que acaban dándo- seriedad del método científico. Si
se en cumplimiento de la norma bien tenemos que obedecer lo que
jurídica o incumplimiento (acto la ley ordena o prohíbe, no por ello
antijurídico) de la misma realizados debemos de dejar de cuestionarla y
por la comunidad en general. más aún cuando su contenido es de
• Son órganos del estado: a) sentido orden teórico.
amplio: todos los miembros de la • Necesitamos debates epistemológi-
comunidad, b) sentido restringido cos en el derecho, ya que podemos
o material: funcionarios públicos. aplicar el método científico, por
• El territorio como elemento del ejemplo, al comparar el principio
Estado no es el área geográfica, sino de presunción de inocencia con el
el “ámbito espacial de validez del método del falsacionismo de Karl
orden jurídico”. Popper, entre otros.
• El arbitraje, es un mecanismo de • El arbitraje no es la excepción en
solución de conflictos cuyo origen cuanto a la teoría ofrecida por
es incluso más antiguo que el pro- Kelsen y perfectamente se adecua
ceso del poder Judicial. En efecto, a la misma, así como el derecho
fue en el derecho romano donde internacional también lo hace.

Número 26 • Agosto 2016 • pp. 313-326 Actualidad Civil 325


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Actualidad

Civil Arbitraje Alejandro Verástegui Gastelú

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Nos preguntan y contestamos

NOS PREGUNTAN Y CONTESTAMOS

Nos preguntan y contestamos


Contenido
CONSULTA ¿En el proceso de ejecución de laudos se encuentra limitado el acceso al recurso de casación?

CONSULTA
Una entidad municipal ha sido vencida en el fuero arbitral y enfrenta
actualmente un proceso judicial de ejecución de laudo en el cual se
ha desestimado su contradicción en primer grado, y una vez apelado
el auto, la decisión ha sido confirmada por la Sala Superior. Con el
propósito de revertir el auto de vista que ordena proseguir con la
ejecución, la entidad municipal interpone un recurso de casación,
el cual una vez conocido por una sala civil de la Corte Suprema es
declarado improcedente, considerándose que este recurso solo es
admisible cuando el laudo ha sido anulado total o parcialmente en
aplicación del artículo 64.5 de la Ley de Arbitraje. Se nos consulta
si una norma que limita la casación en el contexto de un proceso de
anulación de laudos es aplicable también en el proceso de ejecución
del mismo.

El recurso de casación es de carácter En el proceso de anulación de lau-


extraordinario, y la garantía de la plu- dos el recurso de casación se encuentra
ralidad de la instancia —recogida en el limitado por el artículo 64.5 del Decreto
art. 139.6 de la Constitución— no le Legislativo N.° 1071, Ley que norma
alcanza. Este recurso solo opera cuando el Arbitraje, que establece: “5. Contra
la resolución impugnada ha sido emitida lo resuelto por la Corte Superior solo
por una Sala Superior con vocación de procede recurso de casación ante la Sala
concluir el proceso; y para su proceden- Civil de la Corte Suprema, cuando el
cia, recurrente debe adecuar el recurso laudo hubiera sido anulado en forma
a los presupuestos, requisitos y causales total o parcial”. En todos los demás
contemplados en la ley que son más casos, cuando la Sala Superior haya
exigentes que los recursos ordinarios. desestimado la demanda de anulación,

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Actualidad

Civil Arbitraje

no procederá el recurso casatorio a favor tenga incidencia directa sobre la decisión


del impugnante vencido en el arbitraje. cuestionada.
Para el caso del proceso de ejecución Entonces, ¿cómo debe entenderse
de laudos, la Ley de Arbitraje contiene la norma que prohíbe a juez admitir
un vacío respecto al trámite a seguirse recursos que entorpezcan la ejecución?
ante la Corte Suprema; simplemente, Con esta prescripción está en juego la ca-
y de manera general, prescribe: “4. La pacidad del juez de ejecución en advertir,
autoridad judicial está prohibida, bajo tras la lectura del recurso presentado,
responsabilidad, de admitir recursos que si el medio impugnatorio posee un fin
entorpezcan la ejecución del laudo” (art. dilatorio por sustentarse en argumentos
68.4 del D. Leg. N.° 1071). temerarios y, de ser así, aquel pueda
A nuestro criterio, resulta evidente rechazarlo de plano,1 poder que tiene
que la Ley de Arbitraje ha restringido el algunas restricciones .
recurso de casación en los procesos de En tal sentido, la Sala Civil Supre-
anulación de laudos, pero no posee una ma que conozca del recurso de casación
norma con igual tenor cuando aborda en el marco de un proceso de ejecución
la ejecución judicial del laudo. En tal de laudos deberá evaluar el recurso sin
sentido, al ser el artículo 64.5 de la mayor exigencia de la que establece el
Ley de Arbitraje una norma de carácter Código Procesal Civil y, por ende, cual-
restrictiva, no es posible aplicarla por ana- quier forma de integración de las reglas
logía para cubrir el supuesto vacío que se exclusivas del proceso de anulación al de
origina por la falta de regulación expresa ejecución de laudos debe considerarse
del trámite del recurso de casación en lo contraria a derecho.
que respecta a la actividad de ejecución
del laudo.
Sostenemos que es un “supuesto va- 1 Cfr. Para Arrarte Arisnabarreta: “[E]sta
sanción [sobre la prohibición de admitir cual-
cío” debido a que al carecer la normativa quier recurso o articulación que entorpezca la
arbitral de una regulación expresa sobre ejecución del laudo] carece de eficacia práctica,
los requisitos para acceder al recurso toda vez que —como sabemos— todo acto
procesal se reputa válido hasta que no se de-
de casación, lo que debe finalmente clare expresamente lo contrario, en aplicación
aplicarse son los supuestos, causales y del principio de la ‘eficacia del acto iniciado’,
limitaciones contenidos en el Código por lo que, más allá del mandato de la norma,
las resoluciones que admiten impugnaciones
Procesal Civil como si se tratara de son eficaces y la morosidad impecablemente
cualquier otro proceso que ha agotado real. Arrarte Arisnabarreta, Ana María,
sus dos instancias, pero se le permite al “Apuntes sobre la ejecución de laudos arbitra-
les y su eficacia a propósito de la intervención
afectado denunciar alguna infracción judicial”, en Diké. Portal de información y
normativa (sustantiva o procesal) que opinión legal, p. 20. Recuperado de: <http://
bit.ly/2bxO449>.

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Nos preguntan y contestamos

Finalmente, esta actuación contro- Peruano, 01-08-16), que sin embargo es


vertida de la Sala Suprema se ha eviden- contraria a innumerables decisiones que
ciado en la práctica, como ha ocurrido le antecedieron, las cuales sí declararon
en la Casación N.° 4147-2015-Lima2 (El procedente el recurso de casación inter-
puesto, al margen de fundarlo o no3.
2 Sala Civil Permanente, (ponente: Sra. Jueza Fundamento legal
Columba del Carpio), Casación N.° 4147-
2015 Lima, Lima: 11 de diciembre del 2015. • Ley que norma el Arbitraje: arts.
En esta resolución se sostiene que: “[S]i bien
es cierto del Decreto Legislativo que norma 64.5 y 68.4.
el arbitraje permite objetar lo resuelto por la • Código Procesal Civil: arts. 386 al
Corte Superior en el trámite del recurso de
anulación, cierto es también que el medio im- 388.
pugnatorio idóneo reconocido por la norma
es el recurso de casación, el que se encuentra
restringido solo al supuesto que el laudo
hubiera sido anulado total o parcialmente 3 Entre otros, Sala Civil Transitoria, (po-
por la Sala Superior, en aplicación del inciso nente: Sr. Juez Víctor Ticona), Casación N.°
5 del artículo 64 del Decreto Legislativo N.° 02994-2010 Lima, Lima: 27 de junio del
1071, que norma el arbitraje, que en el caso 2011; cuya importancia radicó en poner en el
de autos [proceso de ejecución de laudo] no se debate jurídico la extensión del laudo arbitral
ha presentado alguno de estos supuestos, por frente a terceros y ser uno de los pocos casos en
lo que el presente recurso de casación deviene el que aparece como parte Rodolfo Orellana
en improcedente”. Rengifo.

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Civil Arbitraje

RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia

Cas. N.° 1486-


2015 La Libertad Causal de recusación conocida después de
emitido el laudo puede ser controvertida en
un proceso de anulación
CAS. N.° 1486-2015 LA LIBERTAD
Publicado en Sentencias en Casación, Año XX, N.° 715
(El Peruano, 30-06-2016, p. 78835)
Proceso Anulación de laudo arbitral
Decisión Improcedente
Normas aplicables Ley de Arbitraje: arts. 28.3 y 63.1
Fundamentos jurídicos “[E]l laudo arbitral de derecho expedido por el referido Tribunal Arbitral, se encuentra
relevantes afectado de nulidad de conformidad con lo dispuesto en el literal c) del numeral 1 del
artículo 63 de la Ley General de Arbitraje, toda vez que el árbitro […] se encontraba
impedido de laudar por tener relación de afinidad con el abogado del demandado
[…]; y, por otro lado, la norma contenida en el artículo 28.3 de la Ley de Arbitraje
prescribe que “Un árbitro solo podrá ser recusado si concurren en él circunstancias que
den lugar a dudas justificadas sobre su imparcialidad o independencia, o si no posee las
calificaciones convenidas por las partes o exigidas por la ley”; y, que la demandante […]
manifiesta haber tomado conocimiento del hecho antes descrito, días después de expe-
dido el laudo arbitral, por lo que, habiendo concluido el proceso arbitral, la recusación
deviene en intrascendente, quedando solo la vía judicial para resolver la controversia”.

TEXTO DE LA CASACIÓN

CAS. N.° 1486-2015 LA LIBERTAD

Lima, uno de junio del dos mil quince.

VISTOS: Con los expedientes acompañados; y,

CONSIDERANDO:
PRIMERO.- Que, se procede a calificar el recurso de casación interpuesto por el deman-
dado Proyecto Especial Chavimochic a fojas ciento noventa y siete, contra la Sentencia de
fojas ciento ochenta y cuatro, su fecha doce de setiembre del dos mil catorce, que declara
fundado el recurso de anulación interpuesto por Juan Carlos Iturbe Sánchez, en calidad
de Gerente General de la Compañía Integral de Vigilancia y Seguridad Sociedad Anó-
nima Cerrada, contra el laudo arbitral contenido en la resolución número diez, de fecha
veintiséis de febrero del año dos mil trece, expedido por el Tribunal Arbitral del Centro
de Conciliación y Arbitraje del Colegio de Ingenieros del Perú - Consejo Departamental
de La Libertad; en consecuencia declara nulo el laudo arbitral y ordena que se expida

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Reseña de jurisprudencia

uno nuevo. Por lo que es pertinente examinar si el recurso extraordinario cumple con los
requisitos que exigen los artículos 386, 387 y 388 del Código Procesal Civil, modificados
por la Ley N.° 29364.
SEGUNDO.- Que, antes de revisar el cumplimiento de los requisitos necesarios para el
recurso de casación, se debe tener presente que este es extraordinario, eminentemente
formal y técnico, por lo que tiene que estar estructurado con estricta sujeción a los requi-
sitos que exige la norma procesal civil para su admisibilidad y procedibilidad, es decir, se
debe puntualizar en cuál de las causales se sustenta, si es: i) en la infracción normativa; o,
ii) en el apartamiento inmotivado del precedente judicial. Debe presentar además, una
fundamentación precisa, clara y pertinente respecto de cada una de las referidas causales,
así como demostrar la incidencia directa de la infracción sobre la decisión impugnada.
Que esta exigencia es para lograr los fines de la casación: nomofiláctico, uniformizador
y dikelógico. Siendo así, es obligación procesal de la justiciable recurrente saber adecuar
los agravios que denuncia a las causales que para la referida finalidad taxativamente se
encuentran determinadas en la norma procesal civil, pues el Tribunal de Casación no está
facultado para interpretar el recurso extraordinario, ni para integrar o remediar las caren-
cias del mismo o dar por supuesta y explícita la falta de causal, tampoco para subsanar de
oficio los defectos incurridos por la casacionista en la formulación del referido recurso.
TERCERO.- Que, en ese sentido, se verifica que el recurso de casación cumple con
los requisitos para su admisibilidad, conforme lo exige el artículo 387 del Código
Procesal Civil modificado por la Ley N.° 29364, toda vez que se ha interpuesto:
i) Contra la sentencia expedida por la Tercera Sala Especializada en lo Civil de la
Corte Superior de Justicia de La Libertad a fojas ciento ochenta y cuatro que, como
órgano jurisdiccional de segunda instancia, pone fin al proceso; ii) Ante el referido
órgano jurisdiccional que emitió la resolución impugnada; iii) Dentro del plazo de
diez días contados desde el día siguiente de notificada la sentencia de revisión que
se impugna; pues esta fue notificada al recurrente el dieciséis de enero del dos mil
quince, conforme a la constancia de fojas ciento noventa y tres, y el referido recurso
de casación lo interpuso el treinta de enero de dicho año; es decir, dentro del décimo
día de notificado; y, iv) Adjunta el recibo del arancel judicial por el presente recurso.
CUARTO.- Que al evaluar los requisitos de procedencia dispuestos en los cuatro incisos
del artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado por la Ley N.° 29364, en lo que
le resulta aplicable, y en concordancia con el requisito especial del numeral 5 del artículo
64 del Decreto Legislativo N.° 1071 que Norma el Arbitraje. Entonces, se tiene que: al
presente recurso de casación no le es aplicable o exigible el cumplimiento del requisito
previsto en el inciso 1 del artículo 388 del Código aludido, que dispone: “(...) Que el
recurrente no hubiera consentido previamente la resolución adversa de primera instancia,
cuando esta fuere confirmada por la resolución objeto del recurso; (...)”, pues el presente
recurso de anulación de laudo arbitral, constituye la única vía de impugnación del laudo,
que se presenta ante la Sala Superior y se tramita en este proceso especial, es decir, es
instancia propia.
QUINTO.- Que, el recurrente sustenta su recurso de casación, en la primera causal, pre-
vista por el artículo 386 del Código Procesal Civil, a cuyo efecto denuncia: A) Infracción
normativa del artículo artículos 28.1 y 28.3, así como del literal c) numeral 1 del artículo

Número 26 • Agosto 2016 • pp. 330-333 Actualidad Civil 331


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Actualidad

Civil Arbitraje

63 de la Ley General de Arbitraje, Decreto Legislativo N.° 1071. B) Infracción norma-


tiva por aplicación indebida del artículo 305.2 del Código Procesal Civil. C) Infracción
normativa por afectación al debido proceso y motivación de las resoluciones judiciales
(vulneración de los artículos 50 inc. 6, 121 último párrafo, 122 incisos 3 y 4, y artículo
139 incisos 3 y 5 de la Constitución Política del Perú). Sostiene el casacionista que la
ley aplicable para resolver el recurso de anulación de laudo arbitral, es la Ley General de
Arbitraje, N.° 26572, porque los hechos contenidos y analizados en el Laudo Arbitral ex-
pedido el veintiséis de febrero de dos mil trece, materia de anulación, sucedieron durante
su vigencia, y no dentro de la vigencia del Decreto Legislativo N.° 1071. En este sentido,
existe una infracción directa en la resolución impugnada, ya que el Colegiado ha resuelto
la materia litigiosa, aplicando dispositivos normativos contenidos en una norma no vi-
gente, y con carácter retroactivo, afectando de nulidad su decisión. Que la parte actora en
su demanda, peticiona la anulación del laudo, por las causales contenidas en los incisos 2
y 3 del artículo 73 de la Ley N.° 26572; que las partes hubieran propuesto alguna recu-
sación o en su defecto hubieran cuestionado algún acto emitido por el Tribunal Arbitral,
que haya puesto en duda su imparcialidad, entonces si tal petición hubiera sido resuelta
por el Tribunal, y solo en caso de ser denegada, podría considerarse como un supuesto de
anulación de laudo, lo que no ha ocurrido en el caso sub materia, pues CIVISE S.A.C. no
ha expuesto ningún cuestionamiento contra el Dr. Valera Malca o contra las actuaciones
del Tribunal Arbitral durante el procedimiento, que haya ameritado pronunciamiento.
SEXTO.- Que, se verifica que la casacionista incumple con las dos obligaciones procesa-
les exigidas por los incisos 2 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, modificado
por la Ley 29364; pues, respecto a las denuncias de los acápites A), B) y C): se verifica
y controla que la decisión, contenida en la sentencia de vista, cumple con garantizar el
derecho al debido proceso, ya que contiene una motivación adecuada, coherente, precisa
y suficiente, toda vez que los Jueces utilizaron correctamente su apreciación para sustentar
su decisión, en la valoración conjunta y razonada de los medios probatorios aportados por
las partes al proceso; que ha resuelto la controversia planteada ante el órgano jurisdiccio-
nal al determinar con claridad y precisión que: Por un lado, el laudo arbitral de derecho
expedido por el referido Tribunal Arbitral, se encuentra afectado de nulidad de confor-
midad con lo dispuesto en el literal c) del numeral 1 del artículo 63 de la Ley General
de Arbitraje, Decreto Legislativo N.° 1071, toda vez que el árbitro Soto Neyra Medina
se encontraba impedido de laudar por tener relación de afinidad con el abogado del de-
mandado Proyecto Especial Chavimochic doctor Valera Malca; y, por otro lado, la norma
contenida en el artículo 28.3 de la Ley de Arbitraje prescribe que “Un árbitro solo podrá
ser recusado si concurren en él circunstancias que den lugar a dudas justificadas sobre su
imparcialidad o independencia, o si no posee las calificaciones convenidas por las partes
o exigidas por la ley”; y, que la demandante Compañía Integral de Vigilancia y Seguridad
S.A.C., manifiesta haber tomado conocimiento del hecho antes descrito, días después de
expedido el Laudo Arbitral, por lo que, habiendo concluido el proceso arbitral, la recusa-
ción deviene en intrascendente, quedando solo la vía judicial para resolver la controversia
por lo que aplican supletoriamente el artículo 305.2 del Código Procesal Civil.
OCTAVO [sic].- Que, en conclusión el recurrente, no ha cumplido con los requisitos de
procedencia establecidos en los incisos 2 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil.

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Reseña de jurisprudencia

En tal contexto fáctico y jurídico, y de conformidad con lo dispuesto por el artículo 392
del Código Procesal Civil, reformado por la mencionada ley, corresponde desestimar el
recurso de casación en todos sus extremos. Por estos fundamentos: Declararon IMPRO-
CEDENTE el recurso de casación interpuesto por el demandado Proyecto Especial Cha-
vimochic a fojas trescientos cincuenta y cinco, contra la Sentencia de fojas ciento ochenta
y cuatro, su fecha doce de setiembre del dos mil catorce; DISPUSIERON la publicación
de la presente resolución en el diario oficial El Peruano, bajo responsabilidad; en los
seguidos por Compañía Integral de Vigilancia y Seguridad S.A.C., con el Proyecto Espe-
cial Chavimochic y otros, sobre anulación de laudo; y, los devolvieron. Interviene como
ponente la Jueza Suprema señora del Carpio Rodríguez. Por licencia del señor Juez Su-
premo Almenara Bryson, integra esta Sala Civil el señor Juez Supremo Miranda Molina.
SS. WALDE JÁUREGUI, DEL CARPIO RODRÍGUEZ, MIRANDA MOLINA,
CUNYA CELI, CALDERÓN PUERTAS.

Número 26 • Agosto 2016 • pp. 330-333 Actualidad Civil 333


ISSN 2313-4828 (impresa) • ISSN 2415-2277 (en línea)

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