Predica Alabanza
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Predica Alabanza
1.1. Los salmos como experiencias vividas que nos dan paz
¿Cómo sería ser miembro de la iglesia del AT? ¿Qué creían? ¿Cuál era su experiencia de Dios,
personal y colectiva? ¿Su religión les hacía felices o les era una carga? ¿Eran seres extraños de
otra época o nuestros hermanos y hermanas de hace mucho tiempo? Al mirar por la ventana de
Salmo descubrimos que aquí, sin duda, tenemos al mismo Dios que ahora se nos ha revelado en
Cristo, y aquí tenemos a gente de la misma naturaleza que nosotros enfrentando la misma clase
de vida que nosotros, y descubriendo que su Dios aumenta sus alegrías y lleva sus cargas.
Ver a David en una situación tan difícil, y ver que escribe este salmo de confianza en Dios, nos
permite reflejarnos en él y saber cómo debemos actuar, encontrar un refuerzo un descanso
Lo que nosotros vivimos no es único, todos pasamos por inmensas dificultades, y es entonces
necesario que podamos recurrir a las expresiones, poemas y meditaciones que hombres en
situación muy parecida, expresaban
Huía de Saúl
Tuvo que humillarse, era un Rey
Temía por su vida
2. Aún en la adversidad
David está en una situación desfavorable, dice en los versículos 1 y 2 del salmo 56 dice:
Vemos, como lo mencionábamos anteriormente que David se encuentra en una situación que es
perjudicial para él, teme por su vida y se siente humillado, esta introducción se contrasta con
los versículos 9 -10 y 11, donde las palabras expresadas por David demuestran una seguridad
mayor
Vemos entonces una fuerte tensión en esta parte, a la vez que David es objeto del desprecio del
hombre, es también objeto del cuidado de Dios, y es una situación en la que comúnmente nos
encontramos, pues somos atacados por el enemigo y no estamos exentos, pero debemos
recordad que también somos objeto del cuidado de Dios y que bajo sus salas él nos mantiene
seguro
Viviera entre estas dos tensiones es natural entonces de la persona que anda en Cristo
3. Fe en la palabra
La fe en la Palabra y en las promesas de Dios vence a cualquier temor terrenal que nos pueda
acechar, muchas veces hablamos de temor y pensamos en lo común, temor a que me roben, temor a
perder un ser querido, a la inseguridad en general.
Pero hay temores que son aún más profundos y que son de mayor importancia para tratar, el temor a
que será de nuestras vidas, el hecho de que nada este asegurado, perder el empleo, caer en la ruina,
al futuro incierto, un montón de dudas existenciales que luego se convierten en temor
En el día que temo,
Yo en ti confío.
En Dios alabaré su palabra;
En Dios he confiado; no temeré;
¿Qué puede hacerme el hombre?
Es entonces en esa situación de vulnerabilidad que confiamos en Dios, cualquiera puede tener
confianza y fe en una situación de prosperidad, pues siente que posee algún tipo de salvavidas, “yo
confió en que Dios el día de mañana me dará sustento, yo creo en que Dios me sustenta siempre, si
decimos esto con el dinero en el bolsillo, resulta más fácil, el reto está en confiar cuando no se tiene
nada”
En el día que temo, en el día que estoy vulnerable, que no tengo nada a favor y que parece que no
voy a conseguir la victoria, yo en ti confió, confió en que somos más que vencedores, en que nada
me separara el amor de Dios, es que en el estamos seguros
6. Conclusiones
¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de
alabarle, Salvación mía y Dios mío (Salmos 42:5)
Confiemos en Dios en medio de la adversidad, confiemos en que su palabra se hará efectiva en
medio de nosotros
6.2. Conózcanosle por medio de su palabra, para poder tener esta confianza y esta
seguridad a la hora de alabarle