Guia Rosh Jodesh AniAMI v01
Guia Rosh Jodesh AniAMI v01
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DE ROSH JODESH
ראש חודש
Es importante tomar real conciencia de la necesidad de observar los Rosh Jódesh, ya que el Eterno estab-
leció la luna para fijar los tiempos proféticos. Cada persona debe estar atenta al anuario establecido por
D-os en las Escrituras para que pueda conocer cada uno de los Moadim –Convocaciones de Kedusha- que
el Eterno dio en herencia a su pueblo Israel. Se debe recordar que cada Moed –convocación- ordenada por
D-os tiene características y connotaciones espirituales particulares que solo pueden ser aprovechadas en
su momento asignado.
El Rosh Jódesh tiene una capacidad única de renovación, así como la luna es renovada cada mes, de la
misma manera el pueblo de Israel renueva sus fuerzas espirituales en cada comienzo de mes. Es por ello
que existe la costumbre de realizar una comida festiva en este día, con cantos, oraciones, expresiones de
alegría, estudio de la Toráh y dar Tzedaká a los necesitados, ya que cada de estas acciones (acompañadas
con una Emunah shelemah) tienen un potencial de atraer la bondad divina al hogar y a todo el pueblo de
Israel. Este día posee una fuerza especial otorgada desde el cielo en la cual por medio de una Teshuvá
genuina se pueden incluso cambiar decretos desfavorables. Es por ello que en este día buscamos en un
ambiente familiar atraer la bondad divina.
En el día de Rosh Jódesh algunos tienen por costumbre realizar medio ayuno previo a la celebración del día,
esto es con la finalidad de aumentar el sentimiento de Teshuvá y humildad que se debe tener al momento
de presentarse delante del Creador. Es necesario realizar un examen de introspección de conducta en cada
Rosh Jódesh y verificar cuales son las mitzvot que requieren de nuestra atención y que debido al afán
del mundo fueron descuidadas.
Rosh Jódesh es un momento para compartir en familia que no podemos dejar pasar ni permitir que nos sea
robada esta gran bendición con tanto significado espiritual y profético.
En aras de unificación del Kadosh, Baruj hu, con la finalidad de bendecir, glorificar y exaltar su
Nombre por sus milagros y prodigios que siempre hace a favor nuestro y de su pueblo Israel.
Con el objetivo de rectificar la raíz espiritual en los ámbitos superiores del precepto de Rosh
Jódesh, para así complacer y cumplir la voluntad de nuestros Creador. Nos encontramos reuni-
dos en este comienzo de mes de (mencionar el mes), en este primer día del mes, para consa-
grar el Nombre del HaShem por medio de la unión familiar y gracias a los méritos interpuestos
por Yeshúa el Mesías, ya que a través de él podemos tener acceso a la rica herencia espiritual
(rosh Jódesh) entregada a nuestro noble pueblo Israel, del cual ahora somos coherederos y
coparticipe de los pactos y promesas, de la Fe y de la Torá, y del Mashiaj.
“Que la dulzura del Eterno esté sobre nosotros. Que Él establezca para nosotros la obra de
nuestras; que afirme la obra de nuestras manos”. (Tehilim 90:17)
La siguiente bendición es dicha al momento de llegar a una ocasión especial, ya sea un estreno de una casa,
vestimenta, una festividad bíblica o un evento de mitvot importante
Bendito eres Tú, Eterno, Eloah nuestro, soberano Rey del Universo, que nos ha hecho vivir,
nos ha preservado y nos ha hecho llegar (sanos y salvos) a esta temporada”.
En la época que el Beit Hamikdash estaba en pie, en cada Rosh Jódesh era ofrecido para el
Eterno una ofrenda de ascensión compuesta por: dos terneros, un carnero y siete corderos sin
defecto. Y tres décimas medidas de sémola revuelta con aceite para la oblación para cada tern-
ero. Y dos décimas medidas de sémola revuelta con aceite para la oblación para cada carnero.
Y un décimo de sémola revuelta con aceite para la oblación para cada cordero, cada una junto
a sus libaciones. Convirtiéndolas como ofrendas de ascensión con una fragancia agradable
para Adonay. Estas eran las ofrendas de ascensión de cada Rosh Jódesh en Rosh Jódesh para
los meses del año. Ofrendas agradables para Adonay.
HaShem entrego los Rosh Jódesh a su pueblo como señal de amor, señal de renovación
espiritual, señal de expiación, señal de observancia, señal de tiempos proféticos y señal de
pacto entre Él y su pueblo.
Sea tu voluntad, oh Eterno, D-os nuestro, D-os de nuestros padres y D-os de nuestro adón
Yeshúa, que reconstruyas Tu Casa sagrada y bajo la dirección del Melej haMashiaj, y reúne a
los dispersos de las tribus de Israel en tu ciudad, haznos ascender con alegría a nuestra tierra e
implántanos dentro de nuestras fronteras. Restablece el servicio del Templo, donde junto al
Mashiaj cantaremos los salmos de tu siervo David. Y serán escuchados por toda la creación
cuando sean recitados delante de tu altar. En el ofreceremos las ofrendas de agradecimientos
y alabanzas junto a los Justos de las naciones y junto aquellos que han hecho la conversión gen-
uina al Eloah de Israel, y que han abrazado y se han acobijado bajo los méritos de aquél que en
obediencia completa dio su vida en el madero y resucito al tercer día, y ascendió a los cielos
para sentarse a la diestra del Padre.
Elohenu. D-os nuestro, D-os de nuestros padres y D-os de nuestro adón Yeshúa, sea Tu
voluntad que ascienda, venga y llegue, que sea vista, sea aceptada, sea escuchada, sea con-
siderada y sea recordada delante de Ti nuestra memoria y la memoria de nuestros padres; que
sea recordada delante de Ti la Sagrada Casa de Yerushaláyim, tu ciudad, la memoria del
Mashiaj hijo de Tu siervo David y la memoria de todo Tu pueblo, la casa de Israel; para rescate,
para bien, para gracia, para bondad, para misericordia, para una vida buena y para la paz, en
este día primero del mes a fin de tener misericordia de nosotros y recordar los méritos de nues-
tros Ribí Yeshúa delante de Ti.
Zojrenu. Recuérdanos, oh Eterno, D-os nuestro, en este día para bien, consideramos en él
para bendición y sálvanos en él para una vida buena. Y envía a Yeshúa como Mesías ben David
para completar la geulah de la humanidad.
Elohenu. D-os nuestro, D-os de nuestros padres y D-os de nuestro adón Yeshúa, inaugura
para nosotros este mes para bien y para bendición, para regocijo y para alegría, para salvación
y consolación, para sustento y mantenimiento, para vida buena y para paz, para perdón de
pecados y disculpa de iniquidades. Y que este novilunio sea el fin y el término de todas nuestras
tribulaciones; que sea comienzo y principio de redención para nuestras almas. Pues Tú esc-
ogiste a Tu pueblo Israel de entre las naciones y les prescribiste los decretos de los novilunios.
Bendito eres Tú, Eterno, que consagra a Israel y los novilunios.
Yehí. Sea la voluntad del D-os del Cielo establecer la Casa de nuestra vida y restaurar Su pres-
encia a ella, prontamente y en nuestros días. Y digan Amén.
Yehí. Sea la voluntad del D-os del Cielo tener misericordia de nuestros remanentes y detener la
plaga, el destructor, la espada, el hambre, el cautiverio y el despojo de sobre nosotros y de todo
su pueblo Israel. Y digan: Amén
Yehí. Sea la voluntad del D-os del Cielo mantener para nosotros a todos los Jajamin de Israel,
tanto a ellos como a sus esposas, sus hijos y discípulos, en cualquier lugar que residan.
Y Digan: Amén
Yehí. Sea la voluntad del D-os del Cielo que desde los cuatro confines de la tierra escuche-
mos y se nos anuncien buenas nuevas, nuevas de salvaciones y consolaciones-.
Y digan: Amén.
Mi. Que Aquél que hizo milagros a nuestros ancestros y nos redimió de Mitzrayim, Él nos
redima y restaure a sus descendientes a sus fronteras. Con buen signo, para nosotros en
este rosh Jódesh (mencionar el mes). Que el Kadosh, bendito es, lo renueve para nosotros
y para todo su pueblo Israel, en cualquier lugar que estén, para bien y para bendición, para
gozo y alegría, para salvación y consolación, para un buen sustento y un buen mantenimien-
to, para buenas nuevas (en invierno: para lluvias en su momento propicio; en verano: para
rocíos de bendición), para curación completa y para redención cercana. Y digan: Amén
La madre, con su cabeza cubierta, enciende las luces y luego confiesa la siguiente bendición.
"Bendito seas Tú, Eterno, Soberano del universo y Rey del Mundo, que has consagrado
a tu pueblo Israel con tus preceptos y que por los méritos interpuestos por el Mashiaj
Yeshua, nos has acercado, y nos has hecho participe del precepto de encender la candela
del Rosh Jodesh".
La madre, con su cabeza cubierta, enciende las luces y luego confiesa la siguiente bendición.
Sea tu voluntad, Adonay, D-os nuestro y Rey del universo, que tengas compasión y miseri-
cordia de mí, y que actúes con gran bondad hacia mí al concederme hijos que cumplan Tu
voluntad y que sean temerosos y observen tus leyes y mandamientos con motivos puros.
Que ellos irradien Luz de la Fe obediente, y sean imitadores de los pasos de Yeshúa el
Mesías prometido a Israel. Que estas luminarias que encendemos traigan luz al mundo,
como está escrito: “Pues el precepto es candela, y la Torá es luz”, y también ten compasión
y misericordia de mi esposo (mencionar el nombre del esposo), y concédele una larga vida
y años de paz, con bendición y prosperidad. Y ayúdale a cumplir Tu voluntad con integridad.
Que así sea Tu voluntad. “Que la dulzura del Eterno este sobre nosotros. Que El establezca
para nosotros la obra de nuestras manos; que afirme la obra de nuestras manos” (Salmo
90:17). “Que la expresión de mi boca y la meditación de mi corazón sean aceptables delate
de Ti, oh Eterno, mi Roca y mi Redentor” (Salmo 19:14)
Para lavar las manos se debe verter tres veces aguas sobre la mano derecha y luego tres veces sobre la
mano izquierda. Después de haberse lavado las manos y recitado la bendición, no se puede hacer ninguna
interrupción hablada hasta después de hacer dicho la bendición sobre el pan. El orden de las bendiciones
es pan, vino, mezonot, ha’ets, adama y shehakol. En Shabat primero se hace la bendición del vino y luego
del pan. Alterando el orden establecido, es por ello que en Shabat se cubre el pan para no desplazarlo de
su primer lugar. En otros días no es necesario cubrir el pan. ya que primero se bendice sobre en pan sigui-
endo el orden primario. Si la persona desea cubrir el pan no hace mal.
Yeshúa dijo: “Yo soy el pan que imparte vida, el que a mi viene nunca tendrá hambre.
Porque yo soy el pan de Elohim que desciende del cielo y da vida al mundo”.
Lejayim ¡A la vida!
Inmediatamente se procede a realizar la bendición sobre la copa con fruto de la vid y luego se bebe de ella:
Baruj atá Adonay Elohenu Mélej Bendito eres Tú, Eterno, D-os nuestro,
ha´olam boré perí haguefen. Soberano del Universo, creador del fruto
Amen. de la vid. Amen.
Dijo nuestro Ríbi Yeshúa: “Yo soy el Vino, vosotros las ramas de la vid. El que se mantiene
íntimamente unido a mi (como Mashiaj de Israel), este lleva mucho fruto; porque separados
de mi nada podéis hacer”. (Yohanan/Juan 15:5)
Esta berajá se dice sentado, no se debe distraer cuando la hace y hacerlo con respeto y agradecimiento al
Creador. Se acostumbra entre semana retirar los utensilios de metal sobre la mesa cuando se dice la berajá.
Después de haber comido se acostumbra lavarse los dedos hasta los nudillos. Esta bendición se llama
Máyim jaronim -Aguas Postreras.
Bendito eres Tú, Eterno, Eloah nuestro, Soberano del Universo, el Eloah por cuya bondad
nos alimenta, tanto a nosotros como a todo el mundo, con gracia, benevolencia, holgura y
misericordia. Él proporciona el pan a todas las criaturas porque Su benevolencia es eterna.
Y por Su inmensa bondad nunca nos faltó ni nos faltará jamás el sustento. Pues HaShem
alimenta y sustenta a todos, Su mesa está preparada para todos y HaShem prepara alimento
y sustento para todas las criaturas que creó con Su misericordia y Su inmensa bondad, tal
como está escrito en el salmo 145: “Tu abres Tu mano y satisfaces el deseo de todo ser
vivo”. Y también está escrito: “No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que
sale de la boca de HaShem” Bendito” Bendito eres Tú, Eterno, que sustenta a todos
y alimentas a todos.
Restaura hoy el reinado de tu justo Mashiaj, y reconstruye el Beit Hamikdash (Sagrada Casa)
el lugar donde te elevaremos las ofrendas de alabanzas y agradecimientos bajo la dirección
del Mashiaj Yeshúa. Bendito eres Tú, Eterno, que reconstruyes tu Sagrada Casa, y traes
de vuelta a Yeshúa como Mashiaj ben David, que sea muy pronto y en nuestros días.
(En voz baja:) Amén.
Que el D-os misericordioso bendiga esta mesa sobre la que hemos comido; que la provea
de todos los manjares del mundo y sea como la mesa de nuestro Padre Abraham, dispuesta
para todo el que tiene hambre y sed. Que no falte en este mesa ningún tipo de bien. Que el
D-os misericordioso bendiga al dueño de esta casa; a él, a sus hijos, a su esposa y a todo
lo que es suyo. Que D-os conserve a todos sus hijos y que sus bienes se multipliquen. Que
el Eterno bendiga su hogar, y que el producto de sus manos sea bien recibido. Que sus
negocios y los nuestros prosperen y estén cercanos. Que no se le presente ni a él ni a
nosotros ninguna situación que induzca al pecado, ni a pensamientos de iniquidad. Que
siempre este alegre y gozoso, durante todos los días; con riquezas y honores, desde ahora
y para siempre. Y que él y nosotros siempre seamos vistos desde el cielo a través de los
méritos del Mashiaj Yeshua. Amen.
BENDIGAMOS
Canción Sefardí
Una vez concluido esta hermosa canción sefardí, se desean unos a otros: