Historia de La Seguridad UNES

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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del poder popular para Relaciones, Interiores, Justicia y Paz


Universidad Nacional Experimental De La Seguridad (UNES)
Programa Nacional De Formación: Policía Nacional
Barquisimeto – Estado. Lara

Jaime. José. C.I.: 28.268.026

Yépez. Ibrahim. C.I.:30.301.861

Pérez. Moisés. C.I.:30.395.663

Delgado. Joel. C.I.:29.805.786

Ambiente N° -1

Prof.: Marlene Arrieche

Materia: Hist. De La Seguridad

Fecha.: 26 de marzo del 2021


Los cambios del Estado venezolano a partir de 1999, luego de la
promulgación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
proponen redimensionar la tradicional idea de ciudadanía, que más allá del
reconocimiento expreso de unos derechos, se consolida con su ejercicio.

El presente trabajo tiene como objetivo analizar la política pública nacional


de seguridad ciudadana, durante el período comprendido entre

1999-2005, por ser éste un período clave para el proceso de reforma del
Estado venezolano y para la redefinición de un sistema tendente a garantizar
la seguridad ciudadana, entendida como la preservación de derechos y
libertades reconocidas a las personas.

A tal efecto, se exponen los elementos de un modelo de seguridad ajustado a


los principios constitucionales de un Estado social y democrático. El de
Derecho, y se pone en relieve la importancia del estudio de la política pública
nacional de seguridad ciudadana, por ser ésta un buen revelador de los
valores y objetivos del Estado en la materia.

Se realiza una especial referencia al desarrollo de la producción jurídico


penal, por ser lo jurídico una importante forma a través de la cual se
proyectan las políticas públicas en la vida social. Debe aclararse que más que
un análisis profundo, se ofrece una panorámica de algunos cambios que se
han sucedido en ésta área.
Si bien la obtención del monopolio de la violencia física sería pieza clave
para el fortalecimiento del Estado el aparato policial como tal no estaba
formalmente desarrollado aún. Hasta las primeras décadas del siglo XX el
aparato represivo por excelencia había sido el Ejército Nacional. La policía
como aparato represivo del Estado no surgirá sino a partir de su definitiva
institucionalización durante el Gobierno de López Contreras, pues los cuerpos
policiales aislados y desordenados que funcionaron durante la Dictadura
gomecista no estaban ni estructural ni funcionalmente organizados. Tampoco
estaban preparados para garantizar el mantenimiento del orden interno ni
para enfrentarse al conflicto social y político que se estaba generando en la
sociedad. Por ello, la necesidad de crear una institución policial que se
erigiera principalmente en garante del orden público nacional: un aparato
policial.

El Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (PNB) es la principal fuerza de


seguridad civil a nivel federal o nacional de Venezuela, es una de las
instituciones adscritas al Ministerio del Poder Popular para Relaciones
Interiores, Justicia y Paz. Es encargada de la vigilancia, patrullaje policial y
seguridad ciudadana en todo el territorio nacional, a través de sus
numerosos servicios se encarga de las investigaciones penales, orden público,
inmigración, policía turística, entre otros. Cuenta con 11 servicios
importantes que le dan vida a esta institución. Comenzó a operar el 20 de
diciembre de 2009. La formación académica de sus funcionarios depende
exclusivamente de la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad
(UNES).
La Policía Técnica Judicial (PTJ), hoy Cuerpo de Investigaciones Científicas
Penales y Criminalísticas (CICPC), es un cuerpo policial que se creó mediante
el Decreto Nº48 del 20 de Febrero de 1958, para sustituir a la abolida
Seguridad Nacional en las funciones de Investigación judicial que asumía esta
organización. La Ley de Policía Judicial de 1975, modificada en 1988, la
convierte en una Dirección del Ministerio de Justicia y le atribuye las
principales competencias en Policía Judicial. La PTJ adquirió, en la práctica, el
monopolio casi absoluto de la fase de instrucción del proceso penal, con la
consecuente reducción del debido proceso y las garantías legales (Antillano,
2007 siguiendo las ideas de Brown). Cuando este cuerpo se fundó regía en
Venezuela un sistema procesal mixto, predominantemente inquisitivo,
previsto en el Código de Enjuiciamiento Criminal, vigente desde 1926. Debido
a ello, de sus 50 años de existencia, 41 ha estado ejerciendo la investigación
penal con bastante autonomía y discrecionalidad, toda vez que en ese
sistema, si bien la fase de sumario era formalmente dirigida por los tribunales
de primera instancia en lo penal y los tribunales de instrucción, la PTJ
realizaba las actividades propias de la investigación sin recibir órdenes
directas de las instancias judiciales, a quienes únicamente le informaba de
sus actuaciones. Incluso tenían facultades de aprehensión de las personas sin
orden judicial.

Desde siempre ha estado adscrito orgánicamente al Ministerio de Relaciones


Interiores y justicia, y hasta el cambio del sistema procesal de 1999 estuvo
bajo la dirección de los jueces a los efectos de sustanciar la averiguación
sumarial. Función de investigación la investigación penal comporta las
acciones, técnicas, medios y procedimientos para investigar la comisión de
delitos e identificación de los autores, como actividad de auxilio al Ministerio
Público (CONAREPOL, 2007). Queralt (1999), señala que la “policía” judicial
cumple dos grandes funciones: la de Investigación de los delitos con
anterioridad a la entrada en juego de la autoridad judicial y la Realización de
misiones específicas que ésta o el Ministerio Público le encomienden dentro
de Un caso concreto. Colomer (2003:7-8), distingue tres grupos de funciones,
más específicas, que debe realizar la “policía” judicial: la primera con
relación al autor del delito, a fin de lograr su identificación, ya sea por
iniciativa propia o por orden judicial o fiscal; la segunda se relaciona con la
averiguación de las circunstancias que rodearon a la comisión del delito y la
realización de las primeras actuaciones una vez descubierto el mismo; y por
último, con relación a la víctima del delito y la capacidad de auxiliarla
inmediatamente.

Pues el cuerpo de investigaciones no debe intervenir en materia de “orden


público.”

El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC),


antes conocido como Policía Técnica Judicial (PTJ) y en sus orígenes como
Cuerpo Técnico de Policía Judicial (CTPJ), es el principal organismo de
investigaciones penales de Venezuela. Se encarga del esclarecimiento
científico de los delitos con miras a la posterior aplicación de la justicia por
los órganos competentes.

Los funcionarios de dicho cuerpo especial, son formados en la Universidad


Nacional Experimental de la Seguridad (UNES). Su actual director es el
Comisario General Douglas Rico
Esta idea nace desde el General Cipriano Castro, cuando conoce la historia de
los bomberos de Panamá (fundado en 1887) siente la necesidad de instalar
bomberos en caracas. En 1902, planteó el proyecto Bomberil y lo redacta,
pero para esa época fue difícil, recordamos la invasión de las potencias
extranjeras y quedó engavetado, luego su enfermedad, su viaje a Alemania y
la traición de su gran compadre “amigo”. Los incendios en caracas eran
tragedias que aumentaban, tenían mucho trabajo, los voluntarios y los
hombres del aseo urbano capitalino. En 1928 le plantearon la idea de crear el
cuerpo de bomberos en el Distrito Federal, y el Presidente Juan Vicente
Gómez, lo considero PELIGROSO y lo vetó, en forma ignorante y ruda, no
creía en nada, ni en nadie y prohibió, hasta los comentarios, porque sus
allegados y adulantes le hablaban, de la antigua idea de Castro.

En Venezuela. Transcurría la década de los años 20 y Caracas se


desenvolvía pacíficamente. Sus habitantes se recogían a tempranas horas de
la noche. Pero muchas veces la quietud de los días y las noches se
interrumpía con el sonar de las campanas de las iglesias, avisando que un
incendio se había producido en la vecindad y amenazaba con propagarse,
muchas de las veces sin poder hacer nada al respecto por la falta de una
acción organizada que arremetiera contra el fuego que consumía todo lo que
consiguiera a su paso, arrojando fuertes pérdidas. Cuando se originaba un
incendio, cosa frecuente, el método usado era trasladar al sitio un viejo carro
cisterna llamado La Benemérita, del cual bajaban un recipiente o tonel
grande, con un pitón y una rustica goma adaptada y llenándolo
pacientemente con baldes de agua, mientras dos personas subiendo y
bajando un balancín lanzaban agua a baja presión. Cursiva Las llamadas de
emergencia se hacían directamente a la policía, donde se guardaban las
cisternas y el personal que salía a combatir el incendio eran civiles y agentes
del orden público. Con el crecimiento de los pueblos y ciudades, se va
presentando también el peligro de las calamidades y tragedias públicas:
incendios, derrumbes, inundaciones, temblores, etc. Es por esto que surge la
necesidad de crear el Cuerpo de Bomberos para enfrentar esas emergencias,
disminuyendo las secuelas negativas que dejan en el seno de la población. En
las principales ciudades del país se han organizado, a tal efecto, las
instituciones bomberiles, que día a día prestan invalorables servicios a la
colectividad.

Fue el 24 de febrero de 1936, cuando se crea la Junta Organizadora,


compenetrándose con las necesidades de la comunidad. El Gobierno del
General López Contreras emitió una Resolución por la cual se creaba una
Comisión de Estudios que se encargara de organizar una institución bomberil,
siendo su Primer Comandante el Sr. Enrique Paris Ambard. Esta Junta estuvo
integrada por los Señores Carlos Anglade, R. Chirinos, Eliodoro Ocanto y el
mismo E. Paris Ambard. Realizados los primeros estudios, fue invitado por el
Gobierno del Distrito Federal, para visitar a caracas, el Comandante Primer
Jefe del Cuerpo de Bomberos de Panamá, Coronel Juan Antonio Guizado, la
invitación fue aceptada y así se tuvo la ventaja de una cooperación técnica.
La Comisión de Estudios preparo una organización definitiva del Cuerpo de
Bomberos de Caracas. Creyó conveniente el Gobierno del Distrito Federal
enviar a Panamá a una persona que se encargara de estudiar la organización
del Cuerpo de Bomberos de esa localidad y comisiono al Sr. Enrique Paris
Ambard, quien a su regreso trajo un vasto material para la organización de la
institución bomberil local, también tramito lo conducente para la venida de
un Oficial de Panamá a fin de que ejerciera el cargo de Instructor General. El
instructor que llego a Caracas fue el Sub-Teniente Roberto Martínez León,
quien estuvo ocho meses ofreciendo magníficos resultados sobre las técnicas
de combate de incendios, tácticas, recursos materiales, planificación y otros
conocimientos sobre la ciencia o arte de Bomberos. Fue remplazado por el
Capitán Rufino Loscher Blanco, quien fue contratado hasta fines de 1948. El
Cuerpo de Bomberos de Caracas tiene como misión primordial, responder
por la seguridad de las vidas y los bienes de la población de la jurisdicción, en
casos de las calamidades como las ya mencionadas.

Fue creado el 5 de julio de 1937, feliz coincidencia de que su fundación fuese


un Aniversario de la Firma del Acta que declaro nuestra Independencia. La
primera guardia permanente fue inaugurada el 1ro. De Mayo de 1937, con
una dotación de 37 hombres y 5 carros bombas, en esa oportunidad fue
nombrado Comandante el Sr. Enrique Paris Ámbar. Entre otros, han sido
Comandantes del Cuerpo de Bomberos de Caracas: Carlos Anglade, Carlos
Básalo Rodríguez, Ernesto López, Capitán Evencio Pulgar, Coronel Victoriano
Jordán Petit, Teniente Coronel Humberto Ovalles, Teniente Coronel José
Octavio González, Coronel Publio Alvarado Ruiz y el Coronel Ángel Ramón
Freytes. El carro bomba Broakway (Modelo 1936) fue el pionero fundador del
Cuerpo de Bomberos de caracas, estuvo prestando sus servicios en forma
ininterrumpida hasta 1958, en la actualidad se encuentra mecánicamente en
buenas condiciones y en exhibición en el Museo del Transporte. Por sus
meritorias intervenciones, ha salvado numerosas vidas y bienes materiales.
Larga es la lista de los integrantes que a través de los años han ofrendado sus
vidas al servicio de esa causa tan noble y desinteresada.

A partir del año 1999 con esta gesta patriótica y revolucionaria, de inclusión,
justicia social, participación protagónica y despertar del pueblo soberano en
todos los rincones de la patria, y con el nacimiento de una nueva
Constitución para la refundación de la República Bolivariana de Venezuela,
por primera vez en la historia de los abnegados e incansables Bomberos y
Bomberas, hombres y mujeres de azul, se incorpora en el novísimo texto
constitucional el artículo 332, que reconoce a los Cuerpos de Bomberos y
Bomberas como “órganos de seguridad ciudadana”, cuyo fin primordial,
entre otros, es “(…) proteger a los ciudadanos y ciudadanas, hogares y
familias, apoyar las decisiones de las autoridades competentes y asegurar el
pacífico disfrute de las garantías y derechos constitucionales (…)”, en
coordinación con lo establecido en el artículo 55 de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, el cual señala de manera categórica que:
“Toda persona tiene derecho a la protección por parte del Estado a través de
los órganos de seguridad ciudadana regulados por Ley, frente a situaciones
que constituyan amenaza, vulnerabilidad o riesgo para la integridad física de
las personas, sus propiedades, el disfrute de sus derechos y el cumplimiento
de sus deberes”.
Seguidamente en el año 2001, en el marco de la Ley Habilitante aprobada por
más de las tres quintas partes de los diputados y diputadas que integraban la
Asamblea Nacional, se promulga el DECRETO CON FUERZA DE LEY DE LOS
CUERPOS DE BOMBEROS Y BOMBERAS Y ADMINISTRACIÓN DE
EMERGENCIAS DE CARÁCTER CIVIL, publicado en la Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela N° 5.554 Extraordinario de fecha 13 de
noviembre de 2001 y el Decreto con Fuerza de Ley de Coordinación de
Seguridad Ciudadana, publicado en la Gaceta Oficial de la República
Bolivariana de Venezuela N° 37.318 de fecha 6 de noviembre de 2001, cuyos
instrumentos también pasarían a reforzar la Ley Orgánica de Seguridad de la
Nación.

1. Ley de Bomberos y Bomberas y Administración de Emergencias de


Carácter Civil. Análisis y Propuestas.
2. Reglamento de la Ley de Bomberos y Bomberas y Administración de
Emergencias de Carácter Civil. Propuestas.
3. Fondo Nacional de Bomberos y Bomberas y Administración de
Emergencias de Carácter Civil.
4. Reglamento del Estatuto de la Función Bomberil.
5. Conformación del Consejo Nacional de Comandantes.

Quienes inician los trabajos para la estructuración del proyecto de conversión


y adecuación, previa socialización a nivel nacional de la novísima Ley del
Cuerpo de Bomberos y Bomberas y Administración de Emergencias de
Carácter Civil del Distrito Capital del 2010, para su aplicación en todo el país.
En Venezuela, el 7 de noviembre de 1943 a través del Decreto N° 175, se crea
la Junta Nacional de Socorro, adscrita al Ministerio de Sanidad y Asistencia
Social, con el fin de prestar asistencia a las personas que resultaron afectadas
por las inundaciones ocurridas en ese año.

Pasaron 15 años para que, el 21 de mayo de 1958, el mismo Ministerio creara


la División de Socorro y Defensa Civil, cuyo comité consultivo, estaba
integrado por: la Cruz Roja de Venezuela, la Sanidad Militar, la Gobernación
del Distrito Federal, los Seguros Sociales (servicios médicos), el Hospital
Universitario y dos miembros del ministerio; posteriormente, se amplió con
representantes del Cuerpo de Bomberos del Distrito Federal, la Asociación
Scout de Venezuela, el Radio Club Venezolano y el Aeroclub Caracas.

En julio de 1961 se crea, por Decreto Presidencial, la Comisión Nacional de


Socorro, cuyo objetivo principal era coordinar la ayuda y asistencia técnica a
sectores y personas afectadas por eventos naturales y/o tecnológicos.

El 29 de julio de 1967 se produce un movimiento sísmico, cuya intensidad en


la zona epicentro fue de 8.0 en la escala de Richter y en Caracas 6.5, el cual
ocasionó graves daños en el Distrito Federal y numerosas pérdidas humanas;
a raíz de este evento se crea el Comando Unificado Médico Asistencial
(CUMA), integrado por los organismos de salud del Estado y del Distrito
Federal

Sin embargo, es el 16 de junio de 1969 cuando se emite el Decreto


Presidencial número 96, a través del cual se crea un organismo con las bases
de la futura Defensa Civil como lo es el Fondo de Solidaridad Social
(FUNDASOCIAL). Este organismo tenía por misión la coordinación de las
tareas de prevención y las labores de reparación de los daños que pudieran
ocasionar eventos en la colectividad.
Como dijimos anteriormente, este organismo fue el primer intento de crear
algo parecido a Defensa Civil, por eso el 7 de septiembre de 1971, por el
Decreto Presidencial número 702, se crea la Comisión Nacional de Defensa
Civil, cuyas funciones serían las de planificar y coordinar las acciones de
prevención, educación y reparación de daños que pueda ocasionar cualquier
desastre. Esta comisión estaba presidida por el Ministerio de Relaciones
Interiores, e integradas por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), Ministerio
de la Defensa (MD), Ministerio de Transporte y Comunicaciones (MTC),
Ministerio de Sanidad y Asistencia Social (MSAS), Oficina Central de
Coordinación y Planificación (CORDIPLAN), Cruz Roja de Venezuela y un
representante del sector privado.

El 12 de noviembre de 1974 se emiten los Decretos N° 532 Y 533. El primero


modificó e Decreto N° 96 Y el segundo estableció que Defensa Civil era parte
integrante de la Defensa Civil Nacional además creó las comisiones regionales
de Defensa Civil, las cuales funcionaran en cada entidad federal.

A fin de reforzar lo anterior, el 18 de agosto de 1976, se promulgó la Ley


Orgánica y Defensa, la cual se refiere en el título V, artículos 27, 28, 29 y 30, a
La Defensa civil y establece que el Presidente de la República, oído al Consejo
Nacional de Seguridad y Defensa, dictará todas las disposiciones para regular
la organización y funcionamiento de la Defensa Civil.

El 10 de agosto de 1979, por Decreto Presidencial No. 231, la Comisión


Nacional de Defensa Civil pasó a formar parte del Consejo Nacional de
Seguridad y Defensa y adecuó sus funciones a la Organización de la
Administración Pública Central. Sin embargo, ante un desastre las
organizaciones trabajaban en paralelo, lo cual era totalmente ilógico. Por eso,
el 3 de octubre de 1986, por resolución No. 28, se disuelve FUNDASOCIAL,
quedando en escena solamente Defensa Civil. Ésta reglamentó sus funciones
y actividades el 18 de septiembre de 1996, a través del Decreto Presidencial
No. 1.636 y publicado en Gaceta Oficial No. 36.136 de fecha 29 de enero de
1997, el cual contempla el “Reglamento Parcial No. 3 de la Ley Orgánica de
Seguridad y Defensa relacionado con la Defensa Civil”. El 15 de diciembre de
1999 se aprueba, en Referéndum Nacional, la nueva Constitución de
Venezuela, la cual en su Capítulo IV, referido a los Órganos de Seguridad
Ciudadana, Art. 332, establece que el Ejecutivo Nacional constituirá: “una
Organización de Protección Civil y Administración de Desastres”, Es o se hizo
efectivo a partir de su aparición en Gaceta Oficial No. 5.557 (Extraordinaria)
de fecha 13 de noviembre de 2001, en la cual se indica el “Decreto con
Fuerza de la Ley de la Organización Nacional de Protección Civil y
Administración de Desastres”. A partir de este momento se oficializa el
cambio de Defensa Civil por Protección Civil y se establece en dicho decreto
los objetivos, misión, y funciones de la nueva organización.

Todo evento violento, repentino y no deseado, capaz de alterar la estructura


social y económica de la comunidad, produciendo grandes daños materiales
y numerosas pérdidas de vidas humanas y que sobrepasa la capacidad de
respuesta de los organismos de atención primaria o de emergencia para
atender eficazmente sus consecuencias. (Decreto con Fuerza de la Ley de la
Organización Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres,
2001)

Situación con graves daños, por la pérdida significativa de vidas,


infraestructura y medios de subsistencia, entre otros, que sobrepasa la
capacidad de respuesta local, la cual es derivada de procesos geológicos,
meteorológicos, biológicos, incendios forestales, cósmicos, entre otros.
Situación con graves daños, por la pérdida significativa de vidas,
infraestructura y medios de subsistencia, entre otros, que sobrepasa la
capacidad de respuesta local; y es derivada de acciones humanas y resulta en
derrames de materiales peligrosos, incendios, explosiones conflictos bélicos,
terrorismo, entre otros.

Cualquier suceso capaz de alterar el funcionamiento cotidiano de una


comunidad, pudiendo generar víctimas o daños materiales, afectando la
estructura social y económica de la comunidad involucrada y que puede ser
atendido eficazmente con los recursos propios de los organismos de atención
primaria o de emergencias de la localidad. (Decreto con Fuerza de la Ley de la
Organización Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres,
2001)

Es la declaratoria oficial, emitida por la primera autoridad civil del Municipio,


Estado o Nación, oída la opinión del Comité Coordinador de Protección Civil y
Administración de Desastres respectivo, que permite la activación de
recursos técnicos, humanos, financieros o materiales, con el objeto de
reducir los efectos dañosos ante la ocurrencia inminente de un fenómeno
natural técnicamente previsto. (Decreto con fuerza de la Ley de la
Organización Nacional de Protección y Administración de Desastres, 2001).
Es la declaratoria oficial, emitida por la primera autoridad civil del Municipio,
Estado o Nación, oída la opinión del Comité Coordinador de Protección Civil y
Administración de Desastres respectivo, que permite la activación de
recursos técnicos, humanos, financieros o materiales, con el objeto de
atender o enfrentar los efectos dañosos causados por un fenómeno natural o
tecnológico que ha generado un desastre. (Decreto con fuerza de la Ley de la
Organización Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres,
2001).

Son los órganos de Seguridad Ciudadana cuya misión natural es la atención


de emergencias, tal es el caso de los cuerpos de policías y bomberos.
(Decreto con fuerza de la Ley de la Organización Nacional de Protección Civil
y Administración de Desastres, 2001).

Son las instituciones públicas o privadas que, en virtud de su especialidad o


recursos, ante una emergencia pueden ser llamadas a colaborar en la
atención por los organismos de atención primaria. (Decreto con fuerza de la
Ley de la Organización Nacional de Protección Civil y Administración de
Desastres, 2001).

Son aquellas instituciones públicas o privadas que, de manera eventual,


pueden aportar recursos o informaciones necesarias en el proceso de
protección y administración de desastres. (Decreto con fuerza de la Ley de la
Organización Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres,
2001).

El 15 de diciembre de 1999, la nueva Constitución de la República Bolivariana


de Venezuela, impone al Ejecutivo Nacional la obligación de establecer, de
conformidad con la Ley: “una Organización de Protección Civil y
Administración de Desastres”. Esta se hizo efectiva a partir de 2001 con el
“Decreto con Fuerza de Ley de la Organización Nacional de Protección Civil y
Administración de Desastres”.

Según esta ley: “Protección Civil es el conjunto de disposiciones, medidas y


acciones destinadas a la preparación, respuesta y rehabilitación de la
población ante desastres”.

“La Organización de Protección Civil y Administración de Desastres está


especialmente dedicada a prestar la asistencia por parte del Estado y a
coordinar la participación ciudadana, frente a situaciones de desastres”.

“La Organización de Protección Civil y Administración de Desastres”


(nacional, estatales y municipales, cada una de ellas dentro del ámbito de su
propia competencia territorial) están dedicadas a:

• Ejecutar la Política Nacional de Protección Civil y Administración de


Desastres.

• Garantizar la coordinación de los esfuerzos interinstitucionales.

• Dotar de recursos materiales y equipos.

• Entrenar el personal de Protección Civil

• Realizar los programas educativos formales e informales, de preparación de


la ciudadanía frente a desastres.
El aparato “represivo” en Venezuela (especialmente el Ejército) surge para
garantizar principalmente la seguridad y protección de las instituciones y la
autoridad establecida, asegurando por un lado el predominio del poder
político y, por el otro, la continuidad de las actividades petroleras y
conservación de la confianza de los capitales extranjeros. La creación de un
aparato policial centralizado fue el resultado de una situación social y política
caracterizada por fuertes conflictos que amenazaron la estabilidad del poder
político, propiciando el desarrollo de un aparato que se adaptaba fácilmente
a las políticas contingentes del gobierno nacional y que, convertida en fuerza
en sí misma, su prioridad era garantizar el orden público interno y la
seguridad de las instituciones del Estado.

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