Caso Worldcom
Caso Worldcom
La ética como práctica frecuente ligado al de ejercer la labor contable, dentro del ocaso de la compañía
WorldCom se ha visto la pérdida de dicho valor moral. Ya que no se reflejó información real de la
situación económica y financiera de la compañía, dicha información se ha visto inmerso que fue
elaborada sin el elemento de la fehaciencia, verosímil y fidedigna. Mas, por el contrario, ha estado
envuelto en un ocultamiento de información.
En los últimos años los Estados Financieros ha refleja una utilidad antes de impuestos de siete millones
de dólares. Importes no reales. No obstante, que lo correcto debía ser pérdidas.
La justificación para no reflejar un resultado contable real fue para no mostrar la quiebra de la corporación
WorldCom. Asimismo, el servicio que percibían, los clientes ascendían en promedio veinte millones.
La compañía inició, junto a su competidor AT&T en 1983, como LDDS. Estos precedentes para brindar
sus servicios y hacer uso de sus redes locales tuvieron que pagar a proveedores, configurándose gastos
erogables, con efectos en resultados del ejercicio. En el sentido que dichos desembolsos ha de permitir
mantener la fuente productora y los mismos generar ingresos en forma directa dentro del periodo.
Esta entidad dio paso a realizar actividad económica con seiscientos cincuenta millones de soles, pero al
poco tiempo llegó a adeudarse por un millón y medio de dólares. Debido a que no existía capacidad de
direccionamiento. En dicho contexto, aparece Ebbers, un personaje que fue el artífice del apogeo y
decadencia de Worldcom. A través de las gestiones realizadas por este, LDDS empezó a cotizar en la
Bolsa de Valores en 1989 después de la fusión con Advantage Companies.
Años después, LDDS se había convertido en el cuarto operador posicionado en el servicio de redes
dentro de los Estados unidos. Y para 1995 los accionistas de la empresa cambiaron la denominación por
WorldCom. Ya con la nueva denominación llegó a comprar la compañía MFS Comunications Company
por doce millones cuatrocientos mil dólares en 1996. Al año siguiente hace la fusión con MCI por cuarenta
y dos millones de dólares siendo está la operación más cara dentro la saga estadounidense.
Tras el intento fallido de 1999 sobre la fusión la compañía Sprint, competidor directo. Ebbers queda sin
orientación estratégica para direccionar la compañía. Consecuentemente inicia el proceso de decadencia.
Dentro del ámbito de crecimiento la compañía buscaba a ser los mejores con mayor valor en la bolsa de
Wall Street. Para ello, con tal de generar ingresos; presión existe sobre ello, sin darse cuenta a futuro, los
costos incurridos para generarlos fueron superiores. En relación a lo anterior, WorldCom ha de firmar
arrendamientos a largo plazo con precio fijo con la finalidad de obtener capacidad de red necesaria para
satisfacer el crecimiento previsto de la demanda sobre los clientes. Dicho contrato tenía cláusulas en
contra de la compañía y que al finalizar el siglo XX a consecuencia de la menor demanda de servicios
surge la recesión económica tras el estallido de la burbuja tecnológica. El cual consistía en bajar precios
de oferta para poder subsistir en el mercado.
Proceso por el cual los demás competidores mostraban recesión de ingresos, pérdidas en resultados,
mientras que la compañía mantenía una ratio de 42% de gastos sobre ingresos. En miras de mantener
este ratio en los próximos semestres incurrieron en dos grandes prácticas: liberación de provisiones y
capitalización de costos.
La primera consistía en provisionar gastos por arrendamiento de líneas de redes bajo el principio del
devengando, en tanto no se hayan contado con comprobante sustentatorio. La figura de provisionar fue
que posteriormente se ha de revertir a través de una cuenta de ingresos. Consecuentemente a ello la
utilidad debía de incrementarse. Ocultándose de esa manera las pérdidas reales. A través de estos
asientos contables se revirtieron tres mil trescientos millones de dólares durante los años 1999 y 2000.
Para salvaguardar la información real a futuro haciendo un análisis se determinó que los pagos futuros
que se iban a efectuar superaban las ya provisionadas. Generándose la siguiente interrogante, cómo
deberían acreditar un pasivo haciendo cumplir la partida doble, un principio contable fundamental. Para
dar salida a ello, motivo por el cual nace la idea de capitalización de gastos. De modo tal, que se
mantenga el ratio de 42% del costo sobre ingreso. La otra detonante que confirmaría la caída de
WorldCom consistía en que cada trimestre tras el anterior los ingresos disminuían.
La capacidad sobrante en línea de redes que causaría salida de flujo de caja, implicaba que debía ser
capitalizado. Para el 2001 se llegó a capitalizar setecientos setenta y un millones de dólares dentro de las
partidas de inversión en el rubro de obras en curso. Provisionándose por depreciación, a fin de año
doscientos veintisiete millones de dólares.
Cooper, encargado del área de auditoría interna, en sospechas de lo evidenciado. En el cual constató
asientos sin sustento alguno dio a conocer la existencia de gastos que fueron capitalizados
inapropiadamente.
Para 2002, la compañía manifestó que los beneficios en Estados Financieros fueron inflados en tres mil
ochocientos millones de dólares durante los último cinco trimestres. Tras este acontecimiento el
Departamento de Justicia inició una investigación de responsabilidad penal a los responsables de
direccionar WorldCom.
Tras lo expuesto, se entiende que se ha tipificado responsabilidad penal en la medida que han generado
perjuicio económico al Estado. Por otra parte, los Estados Financieros son un reflejo de las transacciones
que realiza una entidad, a la vez estas se sustentan en otros comprobantes. Cuya justificación permite los
registros de asientos contables. Y que no pueden ser elaborado solamente para beneficios de unos
cuantos. Y que a futuro contraiga responsabilidades.