NIQUITAO
NIQUITAO
NIQUITAO
Patrimonio Inmueble
José Gregorio Briceño
Muy buenas tardes, yo vengo a mostrar una experiencia de un pueblo muy sencillo, de
gente muy sencilla, pero antes quiero brindar mi gratitud a todos los organizadores de
este evento, en especial a la doctora Graciela Pantin, a Elizabeth Monascal, por cuanto
nosotros hemos sido objeto de la labor mecénica de la Fundación Polar.
Como todos creo que conocen, patrimonio, o patrimonium, del latín, lo que heredé de
mi padre, es fácil imaginarse que una herencia, o en este caso vamos a hablar de
patrimonio cultural, de una manifestación concreta de esa herencia cultural, una
herencia se la puede dilapidar de hoy para mañana, llega fácil y se va fácil, y es un poco
lo que ha ocurrido con nuestros patrimonios construidos.
Quiero contarles que nosotros como organización somos una fundación cultural, como
organización nacimos como respuesta o como haciendo un homenaje a un movimiento
cultural que nació en los años 50, que creo que fue alrededor de todo el país, aquel
movimiento que se llamó Juntas Promejoras, y pienso que pareciera que estamos
condenados a ese ciclo, que cada 20 años como que surgiera un movimiento en el caso
de nuestro pueblo. Ese movimiento cultural de los años 60, que nació e insurgió en
nuestro pueblo, también con gente con un sentido de pertenencia y una raigambre muy
fuerte por no perder su contacto con su lugar de origen, nació paralelamente a una
función de mecenasgo que la tomó un señor, un anciano ya de 80 años, y les quiero
contar que éste señor a esa edad como que se desató a ofrecer a la población un
proyecto de vida, donó una casa importante, señorial, que luego con los años
administraciones sucesivas la fueron dilapidando, la fueron devastando hasta casi
convertirla en una ruina.
Digo que este movimiento surgió paralelamente a este mecenas. Tan es así, y que
estamos hablando de patrimonio, que el grupo familiar entorno a este señor debió
inhabilitarlo para que su patrimonio no estuviese condenado al fracaso. La familia lo
inhabilitó y este señor cesó en su acción de mecenasgo sobre esta comunidad.
Veinte años después, en los años 80 nacimos como agrupación, como fundación cultural
y un poco como homenaje a esta organización que hubo allí. Entonces, surge esta
reivindicación, esta casa a la que les hago mención, donde funcionó o funciona aún esta
Junta, se llama Junta Promejora, fue la primera casa donde hubo tertulias literarias en el
pueblo, el primer cine, las veladas culturales donde había teatro, era la casa de
habitación de la poetisa más importante de este centro poblado, fue liceo, fue lugar de
fiestas, de fiestas populares de ferias y en algún momento también se convirtió en algo
disfuncional hasta fue un lugar para cárcel, hubo un momento en que la cárcel no daba
abasto o lo estaban reconstruyendo e incluso fue eso, fue cárcel.
De huellas, porfías y desafío. De huellas y porfías, porque ha sido una lucha bastante
durante, luchar por preservar este patrimonio.
¿De dónde venimos? Venimos de un centro poblado tradicional que hoy día detenta la
calificación de bien de interés cultural, a través del Instituto de Patrimonio Cultural que
fue una lucha bastante fuerte que logramos en el año 95.
Niquitao: Este es el pueblo y allí viene capitaneado por el patrón San Bernabé. Su
ubicación: Está en el Municipio Boconó y es una de las 11 parroquias, es la Parroquia
Monseñor Jaúregüi y lleva su nombre por un excelentísimo barón prácticamente muy
conocido en toda la Cordillera Andina y fue maestro, ductor de personalidades en el
Colegio La Grita de varios presidentes como Medina y otros y está ubicado en el
estado Trujillo.
Hay unas referencias impostergables que yo le llamo como dos accidentes: 1. Accidente
histórico porque fue escenario de guerra durante la II República en el año 1813, en
donde tuvo una destacada actuación José Félix Ribas y el general Urdaneta.
Tomamos este concepto de patrimonio cultural del Convenio Andrés Bello, y de uno de
los países signatarios del Convenio porque nos pareció de lo más amplio y de lo más
sistemático.
El patrimonio cultural de la nación está constituido por todos los bienes y valores
culturales que son expresión de la nacionalidad, tales como la tradición, las costumbres
y los hábitos. Así como el conjunto de bienes materiales e inmateriales, muebles e
inmuebles que poseen un especial interés histórico, estético, plástico, arquitectónico,
urbano, arqueológico, ambiental, ecológico, lingüístico, sonoro, musical, literario,
bibliográfico, museológico, antropológico; las manifestaciones, los productos y las
representaciones de la cultura popular.
¿A qué nos dedicamos? Cuando surgimos como grupo organizado se nos ocurrió a
propósito del Festival de Volantines que se da en Paraguaná en el estado Falcón,
creamos un festival de juegos tradicionales que se llamó "Reencuentro con los sueños
de ayer y de siempre". Eso se lleva a cabo por tres años consecutivos durante la
festividad de Semana Santa, sin pensar que estábamos trabajando en función del
patrimonio cultural intangible pues por cuanto la actividad lúdica del hombre reflejada
en los juegos tradicionales está allí presente.
Durante estas actividades de formación cultural aparece con más fuerza la defensa del
patrimonio edificado, hubo un momento que sentimos realmente una amenaza bastante
fuerte cuando en las proximidades del estado Trujillo se están construyendo chalets
seudo suizos de una manera incontrolable, fue el caso de La Puerta en el estado Trujillo,
y nos armamos sobre manera y cerramos fila en favor de la defensa de este patrimonio
construido.
La Corporación de Los Andes elaboró un Plan Local de Turismo y como apéndice a ese
Plan Local de Turismo, se anexó una ordenanza municipal de protección del casco
histórico. Eso trajo una corriente bastante enfrentada de intereses y finalmente no pudo
llegar con éxito que esa ordenanza fuera aprobada por la Alcaldía del Municipio
Boconó, fuimos prácticamente en nuestra primera intención casi derrotados, pero
seguimos trabajando en función de crear una corriente de pensamiento a favor de este
patrimonio edificado. Nos nucleamos como grupos organizados, y una de las primeras
gestiones que hicimos, en ese momento en el año 94 estaba naciendo el Instituto del
Patrimonio Cultural en Caracas, la ley estaba fresca, caliente y empezamos a gestionar
que Niquitao fuera declarado bien de interés cultural y ese movimiento se llevó en el
pueblo conjuntamente con las otras organizaciones.
Entre los logros que tenemos como Fundación , está la de formación de líderes
comunitarios, la creación, dotación de la escuela de música de la comunidad, que hoy
día tiene una matrícula de 70 niños. Desde sus comienzos la Fundación apoyó incluso
en la gestión cultural.
Desde el comienzo de esta escuela de música, nosotros apoyamos incluso el pago de los
profesores, luego viene la declaratoria nacional de patrimonio en el año 1995, también
luchamos por una legislación en materia ambiental, que es el Monumento Natural Tetas
de Niquitao, que estuvo también en la mira de entrar una carretera que estaba afectando
todas las nacientes de agua, las cuencas hidrográficas del lugar, y hubo también desde
Niquitao una corriente de opinión bastante fuerte en favor de este Monumento, que hoy
día es Monumento declarado con su guardaparques, o sea, que es un área bajo régimen
de protección especial.
En materia urbanística, habiendo logrado ya una declaratoria cultural el año 95, nos
movimos para acceder a legislación en materia urbanística. En ese sentido, logramos un
plan especial de urbanismo y el paso siguiente era una ordenanza municipal de
conservación del casco histórico. Todo eso fue de una manera sistemática, no fue el
estado, fue la organización civil, fue la comunidad, fue la participación comunitaria que
fue logrando todas estas cosas.
Siempre pensamos que la legislación es una panacea para hacer freno o para hacer
frente a cualquier avasallamiento que deteriore nuestros ámbitos patrimoniales; sin
embargo, la experiencia nos dice que es más la participación que la misma legislación,
que logra frenar todo este avance de deterioro.
Posteriormente, hemos continuado con un proyecto según convenios suscritos con otros
organismos, hemos obtenido recursos del Fondo de Fortalecimiento Social, del Consejo
Nacional de Cultura, del Instituto del Patrimonio Cultural y de otros organismos.
Por último, la experiencia que venimos a compartir con ustedes, es la creación de una
escuela-taller. ¿Por qué una escuela-taller? Una escuela-taller que tuviese como fin la
calificación de mano de obra especializada en arquitectura de tierra, por cuanto la
mayoría digamos del patrimonio edificado, muy modesto, arquitectura popular, es de
bahareque y del tapial. Esa creación de la escuela-taller Niquitao fue posible gracias a
la acción del Instituto del Patrimonio Cultural y debo señalar que un poco el padre de la
criatura de esa declaratoria nacional, es el arquitecto Leopoldo Provenzali, a quien
auguramos el mayor de los éxitos hoy día en su labor de presidente del Instituto del
Patrimonio Cultural, o sea, que luego de cinco años podemos retomar lo que
comenzamos.
Debo hablar un poco de los antecedentes de esta escuela-taller, una vez que logramos
legislación, en este caso la declaratoria de bien de interés cultural, no queríamos
conformarnos únicamente con legislación, debíamos actuar rápido, en el sentido que ya
los cultores o los maestros artesanos, que han cultivado estas técnicas tradicionales, la
mayoría están muy mayores o ya han muerto, entonces hemos querido rescatar, y para
fines demostrativos creamos esta escuela taller.
Estas son actividades puntuales que se han elaborado, Niquitao rescate técnicas
tradicionales de construcción, la lucha por la conservación del patrimonio histórico.
Luego, en los años 80, el gobierno español, a través de los programas de escuela taller y
casas de oficio, el Instituto Nacional de Empleo, el Ministerio del Trabajo y Seguridad
Social y el Fondo Social Europeo, crean este programa de escuelas-taller, a fines de
recuperar o de rehabilitar patrimonio construido, e incluso lo hace de una manera muy
sistemática, incluso hacen legislación para que los ayuntamiento, las municipalidades,
estén obligadas a emplear a estos jóvenes en trabajos de restauración, o sea, que estas
escuelas tienen sentido en cuanto se puede restaurar patrimonio construido en distintas
disciplinas, en la parte de incluso jardinería y ornato y casas importantes, lugares
públicos.
En Lara está la arquitectura del barro en honor a Fruto Vivas y tenemos noticias que
existe el Proyecto Paria en el Estado Sucre, y en el Centro Jacinto Lara, también del
Estado Lara.
¿Qué ofrecemos? Hasta ahora capacitación para maestros de oficio queriendo como
ganarlos para que no se nos vaya de las manos ese patrimonio aunque muy modesto,
este patrimonio de arquitectura popular andina, y estos maestros de oficio luego se
convierten en instructores.
Ahora, para el caso de los jóvenes aprendices, que su edad está comprendida entre 14 a
25 años enseñamos albañilería en técnicas tradicionales, carpintería, plomería, herrería,
alfarería, electricidad y jardinería.
Bajo esta perspectiva de aprender haciendo hemos restaurado como efecto demostrativo
la sede de la escuela-taller en trabajo conjunto con los jóvenes y con maestros, el
servicio de mantenimiento gratuito en instituciones de la comunidad, caso de las
instalaciones eléctricas de la escuela básica de la comunidad y también de la biblioteca
pública.
Muy importante, tenemos una fábrica de adobes con más de 40.000 unidades destinadas
a la construcción de la escuela de música. Y por parte de los participantes, mayor
sensibilidad sobre valores patrimoniales locales, incidiendo en su identidad, sentido de
pertenencia, autoestima.
Las limitaciones las vamos a leer muy rápido porque ya realmente hemos superado
muchas de las que tuvimos en los comienzos. Los financiamientos logrados hasta ahora
han sido por montos bajos, por lapsos muy cortos, dan pocas oportunidades de
consolidación a proyecto; requerimiento de dotación de maquinaria en los talleres de
trabajo, y en este caso, por último, la ausencia de una política divulgativa de
sensibilización y formación sobre los valores patrimoniales, manteniendo una altísima
desinformación en las comunidades, autoridades, turistas, etc., incidiendo en el
deterioro y pérdida de los mismos. Estamos hablando acá de políticas culturales del
Estado, en el caso de turismo y de la alcaldía que realmente no cumplen con esa labor, y
también la baja capacidad empleadora de los organismos públicos.
Planes son muchos, realmente nos sentimos participando en este evento de lo más
privilegiados, y poder compartir esta experiencia con ustedes, sabemos que es una
comunidad o un pueblo que puede ser cualquier pueblo de Venezuela y que tiene una
perspectiva de realmente retomar esa propuesta inicial a partir de los convenios
suscritos, el caso del patrimonio cultural. Esa casa de que les hablé al comienzo, es un
poco el norte nuestro restaurarla como centro cultural, y resulta que tenemos el
proyecto, el proyecto de arquitectura lo hemos comprado, por administración directa
hemos elaborado esos 40.000 adobes, y tenemos otro proyecto que es el de la Escuela
de Música, también hemos adquirido por administración directa el proyecto, incluso hay
un proyecto también elaborado de un museo de la comunidad.