Es el acto de observar, examinar, pensar o considerar algo con detenimiento para conocerlo y comprenderlo, aplicando para lograrlo la inteligencia y el entendimiento, afín de adquirir en consecuencia el conocimiento, memorizando el contenido. Cuando esto sucede, el individuo que acepta la concepción lineal del tiempo, adquiere memoria del pasado, anhelo del futuro y vive el presente con ciertos momentos de felicidad por lo adquirido, que contribuyen a mantener ese equilibrio inestable que llamamos salud. ¿Entonces que es el síntoma? En la materia médica y por ende en los repertorios, encontramos el rubro: Gran dificultad para estudiar. Como todo síntoma homeopático y por el hecho de serlo, el paciente debe sentir que algo que hacía habitualmente bien, ya no puede hacerlo. Este síntoma yo lo considero concomitante y no troncal. Ya que debiéramos preguntar que le ha pasado a la persona, para que consecuentemente esto suceda como un síntoma más, de una totalidad sintomática característica de desequilibrio miasmático de la fuerza vital. Aquí cuando esto sucede como desarrollo de una enfermedad crónica homeopática, sin lugar a dudas surgirá un policresto totalizador como medicamento de fondo. Ahora bien hay casos donde esto se presenta como una manifestación aguda intercurrente, apsórica, sin que haya nada más que configure una totalidad y aún a veces en el curso de un tratamiento con un medicamento similar a la totalidad y aquí necesariamente debemos complementar. Esta es la razón por la cual en el rubro hay medicamentos policrestos y otros de los llamados chicos Estos medicamentos chicos de complemento, tienen una acción que podríamos llamar puntual, agregan lo que le falta al similar. En este rubro está el Acido Ribonucleico, que como ya describí, en el artículo Aclarando Dudas, publicado en la revista Homeopatía Número 1 del 2020, este medicamento presenta: Concentración muy dificultosa para cualquier trabajo intelectual. Además de cansancio, laxitud y somnolencia, con indiferencia a las cosas habituales. Este medicamento es un importante estimulante psicofísico y de la libido y se lo utiliza a la dinamización 200C. El otro medicamento complementario, es más chico aún. Figura en dicho rubro como: Okoubaka Aubrevillei. Como también estudiamos los medicamentos chicos, aunque no sean policrestos, veamos que podemos decir de él. Es una planta que ha sido utilizada por los chamanes de África Occidental, especialmente en Ghana, Nigeria y Costa de Márfil. Crece en la selva, puede alcanzar 40 metros de altura y su tronco puede tener un diámetro de hasta 3 metros. Se utilizaba la corteza del árbol para tratar numerosas intoxicaciones, además de alejar los malos espíritus, de allí que esté considerado en dicha región: Árbol sagrado. Llega a Europa, más precisamente a Alemania, como obsequio a la Dra. Kunst, médica homeópata, quien se lo lleva le dice que era efectivo para el tratamiento de todo tipo de envenenamientos. Esta médica comienza a realizar dinamizaciones homeopáticas a partir de la corteza del árbol y experimentó su eficacia en varios tipos de intoxicaciones. Tiene además acción en afecciones del tracto gastrointestinal, especialmente cuando son el resultado de una intoxicación previa o una infección. También actúa en las intoxicaciones por metales pesados. En los trastornos de concentración para estudiar, es más efectivo si la causa se debiera a haber padecido infecciones o intoxicaciones, como resultado de haber ingerido alimentos contaminados con insecticidas o pesticidas, por rociados de frutas y verduras. Sería efectivo en los pacientes que por intoxicación o idiocincracia a determinados químicos, presentan dificultad para estudiar. Se utiliza en dinamizaciones en escala decimal, desde la D2 a la D10. ES decir cerca de la materia, precisamente porque su acción es organotrópica. Así vemos como es importante la causalidad, para determinar si un síntoma es debido a una totalidad miasmática crónica o por el contrario a una causa externa puntual. Esta es la diferencia entre un policresto y un medicamento chico. En relación al rubro Esfuerzo Mental, de por sí muy amplio, voy a tomar solamente, un sub rubro para evidenciar los cambios temporales que se producen en los síntomas en cuanto a la época en la cual fueron realizadas las patogenesias. Este dice incapacidad para el esfuerzo mental: Por malos efectos del gas de luz. A comienzos del siglo XIX, se comenzó en Europa a utilizar el gas para la iluminación, esto fue un gran avance tecnológico, ya que mejoró la vida nocturna. La patogenesia de Causticum, remedio único en este sub rubro, fue realizada por Hahnemann en 1834, época del apogeo de la iluminación a gas, razón por la cual pudo aparecer este síntoma en la experimentación. Como este síntoma sigue figurando en los repertorios y hoy ya no es útil, sería lo que se llama un anacronismo, o sea: Situar una cosa en un tiempo que no se corresponde con el que le es propio. De repetir la patogenesia de causticum hoy, este síntoma no aparecería. En la actualidad este síntoma, hasta podría dar lugar a confusión, ya que hoy se entiende clínicamente por hacer luz de gas, a una forma de abuso psicológico que consiste en presentar información falsa para hacer dudar a la víctima de su memoria, de su percepción o de su cordura. Afortunadamente, los síntomas importantes, los que tienen que ver con la condición humana, aquellos que trascienden las épocas, no varían. De allí la seguridad que da en la enfermedad crónica y cuando están indicados, los grandes policrestos totalizadores. En el rubro ESCRIBIR hay un curioso síntoma, atribuída su inclusión a Calvin Knerr, que expresa: Le escribe a sus mejores amigos vilesas, o cosas ofensivas. Único medicamento Lac caninum. Para entender este síntoma debemos entender el núcleo mórbido de este medicamento. Su baja autoestima hace que se sienta poco valioso, tiene ilusiónes de ser despreciada e insultada. Esta paranoia hace que escriba a sus amigos lo antedicho. LEER: Hay un medicamento en este rubro, que tiene los siguientes síntomas: Le resulta difícil leer. Debe leer el texto dos veces por que no lo comprende: y cuando lee Lo hace como un orador. Diríamos que lee con elocuencia, como para persuadir, donde la expresión enfática, en realidad revela la falta de comprensión del texto. Este medicamento es agnus castus. Es un medicamento triste, con la idea que pronto morirá, con discernimiento y comprensión disminuida, cuya melancolía sexual, hace que esté indiferente y cansado de la vida. Importante medicamento en los casos de apatía sexual, con impotencia y agotamiento de la libido. Finalizo reiterando que todo síntoma homeopático, por el hecho de ser el fenómeno que manifiesta el desequilibrio de la fuerza vital, siempre tiene un cómo, un porque y un para qué. Solo debemos hallarlo.
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Dr. Juan Carlos Pellegrino
Profesor Titular Emérito de la AMHA www.jcpellegrino.com.ar