Biografía Doctor David Benavente

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 9

Escuela Glorias Navales

Ninhue

BIOGRAFÍA
DOCTOR DAVID BENAVENTE SEPÚLVEDA
(HIJO ILUSTRE DE NINHUE)

Alumna: Dafne Crisóstomo


Profesor: Fernado Fernández
Curso: 6º Año Básico
INTRODUCCIÓN

El presente trabajo narra la vida de un sobresaliente médico e hijo Ilustre


de la Comuna de Ninhue…el Doctor David Benavente Sepúlveda.

Quien es reconocido por su valor humanitario y profesional como cirujano


ejemplar, desempeñado labores de jefaturas, y procedimientos vinculados a
la cirugía experimental y la neurocirugía.

También fue un destacado Filántropo, poseía la generosidad ilimitada con


los pobres. Médico hospitalario, médico de gente humilde.

En Ninhue es conocido por su legado de hombre sencillo y humilde, que


vivenció su vocación a la medicina y construyó la Casona denominada
“Caseron Rancho Grande”.
BIOGRAFÍA DOCTOR DAVID BENAVENTE

(HIJO ILUSTRE DE NINHUE)


Uno de los grandes Maestros y padres de la cirugía moderna chilena. De
destacada valor humanitaria y profesional como cirujano ejemplar,
desempeñado jefaturas, desarrollando con medios básicos la cirugía
experimental y la neurocirugía, llegando a ser el primer médico chileno que
había realizado trepanaciones humanas y cirugías neuroquirúrgicas
reparadoras.

El año 1874 el Dr. José Joaquín Aguirre, decano de la Facultad de Medicina de


la Universidad de Chile, tuvo la visión de enviar a jóvenes y destacados
médicos recién egresados a Europa. Entre ellos estuvo el Dr. Benavente quien
estuvo en Alemania estudiando Anatomía humana, formando a su regreso
parte del equipo docente de esa facultad, siendo reconocido como un
destacado profesor de anatomía y embriología y como un eximio dibujante.
Su principal labor asistencial la realizó como cirujano en el Hospital del
Salvador. En el año 1914 llegó a ser Presidente de la Sociedad Médica de
Chile y fue director de la Revista Médica de Chile, alcanzando un prestigio
profesional que trascendió América Latina. Fue un médico sabio, generoso,
modesto que ejerció la medicina con entrega ilimitada sin discriminar en su
clientela a los más pobres y desposeídos y sin buscar retribución económica,
llegando a ser un sabio solitario que vivió sus ideales de libertad y fraternidad
con admirable consecuencia.

En los círculos masónicos se le recuerda porque, logró por su desinteresada


filantropía y vida ejemplar ser nominado al cargo de Gran Maestro de la Gran
Logia de Chile en el año 1925, alcanzando el más alto grado de Gran
Soberano y Gran Inspector General, en el grado XXXIII y último de la
masonería capitular. 

El Dr. Benavente fue un gran profesional de la medicina y un gran cirujano de


su época que aportó mucho a la salud, que por ello se le encuentra
nominado entre los que formaron parte de la historia de la medicina y por lo
mismo muchas entidades médicas y civiles hoy día lo recuerdan, pero nada
de eso pudo haber ocurrido si un pequeño acontecimiento en su pre
adolescencia no hubiera sucedido, hecho que muchos desconocen y que
forma parte de "su otra biografía".

El pequeño David nació el 17 de diciembre de 1863, entre los áridos montes


de rulo, a escasos kilómetros al oriente del pueblito de Ninhue, en la
provincia de Ñuble, en una pobre y humilde casa campesina de piso de tierra
y murallas de barro, de parto natural, atendido por sus abuelos maternos. Su
madre, la joven Lucía Sepúlveda, era hija de unos obreros campesinos de una
gran hacienda de la localidad, que había cursado su embarazo sin que se
supiera quién era el padre del niño, ya que era soltera y sin una relación
sentimental conocida. Una vez que el pequeño David, más delgado y
pequeño que los demás niños de la localidad, hubo cumplido los años
necesarios, lo inscribió en la escuelita rural para que recibiera su educación
básica y lo motivó para perseverar en ella. El "huachito" David Sepúlveda
perseveró en su intento hasta estar listo para rendir años después el examen
final, vivenciando en el intertanto, la pobreza, el hambre, el frío, la tristeza y
la soledad. En su pre adolescencia el examen oral era dado ante una comisión
formada por los profesores de la escuelita, al que solían sumarse los
principales dueños de las haciendas locales que eran benefactores de la
misma y que deseaban ver el fruto de sus donaciones. A esa comisión asistió
en esa oportunidad el rico hacendado Wenceslao Benavente Carvajal, quien
poseía grandes ancestros históricos por ser hijo de Don Manuel José
Benavente Bustamante y de Doña Mariana Carvajal Vargas y Roa.

Formando parte de la comisión examinadora, Don Wesceslao lamentó mucho


la ausencia de su hermano Juan Nepomuceno, quien gustaba mucho de
compartir con él estos momentos, el que lamentablemente había fallecido de
un infarto al miocardio varios años antes. La presencia de Don Wenceslao ese
día formando parte de la comisión sería el gran acontecimiento que
cambiaría la vida y el futuro del adolescente David, ya que frente a la
comisión él hizo gala de su memoria, preparación e inteligencia, algo
totalmente inusual entre los rurales alumnos que solían dar su examen de
educación básica, sorprendiendo gratamente a Don Wenceslao al apreciar
que respondía con exactitud y conocimiento todas las preguntas que se le
hacían, luciéndose en un examen oral brillante, como el que nunca Don
Wesceslao había visto durante todos los años que había formado parte de
esa instancia. Es por esto, que maravillado y asombrado, felicitó a los
profesores que lo habían preparado para ese examen tan sobresaliente y
luego les preguntó por el origen y antecedentes familiares de David. Los
profesores le contaron que se llamaba David Sepúlveda, hijo de la Sra. Lucía,
una humilde y pobre campesina que vivía en una de las viviendas de su
hacienda, lo que llenó a Don Wenceslao de un legítimo orgullo. Como
ubicaba a la Sra. Lucía y sabía que vivía sola, sin marido, acompañada de sus
padres, les preguntó quién sería entonces el padre de David. Ahí se produjo
un largo silencio y miradas cómplices entre los profesores que sí conocían la
respuesta. "Es hijo natural de su hermano Don Juan Nepomuceno... su hijo
póstumo", le contestaron en voz baja. De seguro Don Wenceslao no dudó de
esa respuesta, ya que había advertido en David ciertas características
hereditarias faciales y corporales parecidas a sus hijos y sobrinos, junto a la
destacada inteligencia de su hermano Juan, que hacían que David fuera todo
un Benavente, además algo sabía de las correrías amorosas de su fallecido
hermano. Después de ratificar esa respuesta con la Sra. Lucía y con permiso
de ella, teniendo contactos en Concepción, hizo trámites para trasladarlo a
esa ciudad facilitándole todos los medios económicos para que en un sistema
de internado, completara su educación secundaria en un liceo penquista,
considerando que por su inteligencia sobresaliente se le debería dar una
oportunidad para continuar su educación y evitar así que tan sólo llegara a
ser un desconocido e inculto campesino rural. Sabiendo lo que era el
esfuerzo, sacrificio, dedicación y autosuperación, el joven David se graduó en
su liceo con notas sobresalientes obteniendo la mayor distinción de su
promoción, manifestando ahora su deseo de estudiar Medicina en la
Universidad de Chile de Santiago. En su casa patronal de Ninhue, Don
Wesceslao, más sorprendido aún, llamó ahora a una reunión familiar
integrada por Doña Elena Serrano Vásquez, viuda de Don Juan Nepomuceno,
los hermanastros de David, Manuel Arístides y Juan, su propia señora e hijos
y les comunicó de la existencia de David, un hijo póstumo de Don Juan, junto
a sus destacados logros escolares alcanzados y su deseo de continuar su
educación profesional estudiando Medicina, explicándoles que éste no
contaba con un apellido paterno ni con medios económicos para lograrlo.
Acordando entonces, en memoria del fallecido y ausente Don Juan,
reconocerle su parentesco paterno, concediéndole usar su apellido, junto
con apoyarlo económicamente con todo lo necesario para que lograra
recibirse de médico en Santiago, pasando entonces a ser conocido de ese
momento en adelante como David Benavente Sepúlveda, heredando además
toda la ascendencia histórica de los Benavente. En la Facultad de Medicina
nuevamente se destacó entre los estudiantes por su inteligencia y capacidad
de estudio, responsabilidad y trabajo, graduándose con el más alto puntaje
de su promoción.

En el año 1935, a sus 72 años, a pesar de todo el gran prestigio alcanzado


como cirujano capitalino y teniendo un amplio reconocimiento en los círculos
masónicos, se retiró a su Ninhue querido a disfrutar de su solitaria vejez,
construyendo su casa en lo alto de una colina, denominándola "Rancho
Grande", gozando de la buena lectura, de la música y de la naturaleza, tres de
sus grandes amores. Ya muy anciano y cercano a su muerte dejó estipulado
en su testamento que posterior a su fallecimiento deseaba tener su entierro
en el cementerio local, pero haciendo saber que no quería que en dicho acto
se le realizara algún tipo de discurso, palabras de despedida o
reconocimiento. Falleciendo en Ninhue el 16 de febrero de 1949, a los 86
años, realizándose sus funerales según sus deseos. Fue todo el pueblo de
Ninhue y sus alrededores, especialmente el campesinado, que conocía su
historia de niño, el que lo reconoció y acogió como uno de los suyos y en
masa se aglomeró para brindarle en silencio su último adiós.

Fue nominado Maestro de Cirugía por la Sociedad en el año 1945 y con


orgullo se puede afirmar que se recuerda su nombre, ya que año tras año, en
cada uno de los Congresos, se le hace entrega de la distinción y premio Dr.
David Benavente al mejor trabajo experimental realizado durante el año. 
CONCLUSIÓN

Finalmente, después de conocer la vida e historia del gran médico cirujano


de Chile…se puede concluir que es un gran orgullo para la Comuna de
Ninhue, ya que nació aquí, realizó sus primeros estudios básicos en este
pueblito y nunca lo olvidó, pues a pesar de su gran éxito como médico
cirujano, siempre prevaleció en él su humildad, generosidad y decidió vivir
sus últimos días en su pueblo natal, construyendo también una casona, con el
objetivo de dejar un hospital para Ninhue o un hogar de adultos mayores.

Y aún hoy en día en Chile, los premios más importantes otorgados por la
Sociedad de Cirujanos de Chile, llevan el nombre del Dr. David Benavente.

También podría gustarte