El Sida Monografia
El Sida Monografia
El Sida Monografia
Otras teorías sugieren que el sida surgió a causa del excesivo uso de drogas y de
la alta actividad sexual con diferentes parejas. También se planteó que la
inoculación de semen en el recto durante la práctica de sexo anal, combinado con
el uso de inhalantes con nitrito llamados poppers, producía supresión del sistema
inmune. Pocos especialistas tomaron en serio estas teorías, aunque algunas
personas todavía las promueven y niegan que el sida sea producto de la infección
del VIH.
La teoría más reconocida actualmente, sostiene que el VIH proviene de un virus
llamado «virus de inmunodeficiencia en simios» (SIV, en inglés), el cual es idéntico
al VIH y causa síntomas similares al sida en otros primates.
En 1984, dos científicos franceses, Françoise Barré-Sinoussi y Luc Montagnier del
Instituto Pasteur, aislaron el virus de sida y lo purificaron. El Dr. Robert Gallo,
estadounidense, pidió muestras al laboratorio francés, y adelantándose a los
franceses lanzó la noticia de que había descubierto el virus y que había realizado
la primera prueba de detección y los primeros anticuerpos para combatir a la
enfermedad. Después de diversas controversias legales, se decidió compartir
patentes, pero el descubrimiento se le atribuyó a los dos investigadores originales
que aislaron el virus, y solo a ellos dos se les concedió el Premio Nobel conjunto,
junto a otro investigador en el 2008, reconociéndolos como auténticos
descubridores del virus, aceptándose que Robert Gallo se aprovechó del material
de otros investigadores para realizar todas sus observaciones. En 1986 el virus
fue denominado VIH (virus de inmunodeficiencia humana). El descubrimiento del
virus permitió el desarrollo de un anticuerpo, el cual se comenzó a utilizar para
identificar dentro de los grupos de riesgo a los infectados. También permitió
empezar investigaciones sobre posibles tratamientos y una vacuna.
En esos tiempos las víctimas del sida eran aisladas por la comunidad, los amigos
e incluso la familia. Los niños que tenían sida no eran aceptados por las escuelas
debido a las protestas de los padres de otros niños; éste fue el caso del joven
estadounidense Ryan White. La gente temía acercarse a los infectados ya que
pensaban que el VIH podía contagiarse por un contacto casual como dar la mano,
abrazar, besar o compartir utensilios con un infectado.
Respecto al contagio madre-hijo, se puede hacer mucho con una buena inversión
en medicinas para África, como ya se hace en los países ricos. Por egoísmo o por
otros motivos no claros, el mundo desarrollado no está ayudando como debería en
este punto. Hoy es posible reducir el contagio materno-filial a porcentajes muy
bajos con un buen seguimiento médico del embarazo y del parto, y con ayudas
para evitar una lactancia peligrosa.
Si uno ha sido contagiado por el virus del SIDA, tiene una responsabilidad muy
grave de evitar relaciones de cualquier tipo, incluso con preservativo (condón).
Algunos critican fuertemente la posición de la Iglesia sobre este punto, pero tal
posición tiene a su favor razones de peso. Cuando se trata de una enfermedad
contagiosa y que implica peligro de muerte, no basta con reducir el riesgo de
contagio como se puede hacer con el preservativo (dicen que resulta eficaz en un
90% de los casos). Lo que hay que hacer, entonces, es optar por el medio más
seguro (con una seguridad del 100%): abstenerse de relaciones sexuales o de
comportamientos peligrosos (compartir jeringas para drogarse, etc.).
Algunos, sin embargo, preguntan: si una persona contagiada (seropositiva) quiere
tener relaciones “peligrosas”, ¿no sería bueno aconsejarle el uso del preservativo?
La pregunta es un poco parecida a la de aquel que preguntaba: si alguien está
decidido a matar a un enemigo, ¿le invitamos al menos a usar un narcótico para
que la víctima no sufra? ¿Podemos proponerle un curso de puntería para que sus
disparos no hieran a otros que pasen por el lugar donde está la víctima?
Freddy Mercury
En 1991 hubo otro caso muy conocido, el del cantante británico Freddie Mercury,
líder del grupo Queen, fallecido a los 45 años.
Mercury anunció en un comunicado que tenía Sida el 23 de noviembre y falleció a
consecuencia de la enfermedad tan solo un día después, cinco años después de
que le hubieran diagnosticado la misma.
En aquel momento la lista de famosos fallecido por el virus ya empezaba a ser
larga.
Héctor Lavoe
cantante de salsa puertorriqueño, cuya personalidad, estilo y cualidades de su voz
lo llevaron a una exitosa carrera artística en todo el ámbito de la música latina y
salsera durante los años 1970 y 1980, también padeció la enfermedad.
Murió de SIDA en 1993, cinco años después de haber sido diagnosticado, en una
época en que todavía no existían los retrovirales, y que por lo tanto convertía el
contagio en una garantía de fallecimiento en la mayoría de los casos.
El Sida y la literatura
Desde su aparición y reconocimiento público en la sociedad occidental, a
principios de los años ochenta. el Sida ha sido visto como una catástrofe
imprevisible y contagiosa emparentada con las pestes medievales. El hecho de
que su transmisión se realice por la vía de la sangre y de los fluidos sexuales,
disparó la imaginación del horror y de la paranoia y no faltaron voces que
consideraron el Sida como un juicio a la sociedad. Pese a los años transcurridos.
esta visión persiste todavía. El miedo al contagio de lo desconocido. arraigado en
el corazón del hombre, caldo de cultivo también de la xenofobia y del desprecio a
lo olro. Necesita ver fantasmas para protegerse de sus propias pesadillas. Esta
paranoia explica la creencia turbadora de quienes piensan que la propia sociedad
ha generado esa enfermedad. El Sida adquirió, por tanto. un estigma moral, algo
que ya parecía erradicado de nuestra visión del mundo. "En el siglo veinte -ha
escrito Susan Sontag- se ha vuelto imposible moralizar sobre las epidemias -salvo
las de transmisiónsexual".
Este carácter unido a la ausencia de un medio eficaz para combatirlo, ha
convertido el Sida en un peligro desconocido, peligro que ha introducido la reserva
y la precaución en las conquistas sexuales logradas en la década de los sesenta.
A diferencia de otras enfermedades igualmente consideradas enemigos públicos.
como la tuberculosis, ya erradicada en términos de amenaza colectiva y el cáncer.
todavía sin soluciones absolutas, el Sida se ha presentado como un huésped
avasallador que revierte en los comportamientos sociales, condicionando la libre
sexualidad y las motivaciones afectivas, especialmente en los llamados grupos de
riesgo. De ahí que las campañas de prevención se hayan centrado. sobre todo. en
una información que destacaba, con especial nitidez, los factores no contagiosos.
... FRANCISCO SOLANO con el fin de despejar esas connotaciones de alarma
social a la manera de una plaga bíblica que el Sida había suscitado en nuestra
sociedad. nuestra realidad social que no puede ignorarse sin una grave mutilación
de nuestra sensibilidad. El Sida existe con la misma evidencia que existe la
injusticia, y por lo mismo es susceptible de modificación, al menos en su
correspondencia simbólica y en su inflación metafórica, como difusión inevitable
del mal. Por lo demás , nada impide imaginar que. en un futuro próximo, pasado
mañana, como quien dice. Pueda encontrarse una solución científica, un método
de curación definitiva. Como sucedió con la tuberculosis y con algunas tipologías
del cáncer. Mientras tanto, la instalación del Sida como Poco a poco, a pesar de
que aún no se dispone. para los portadores del virus, de un método efectivo de
defensa o de curación, los componentes irracionales, pseudoreligiosos y
catastrofistas han cedido, afortunadamente, ante una realidad que reclama de los
ciudadanos, sobre todo, comprensión, sensatez y una piedad sin reservas morales
frente al sufrimiento ajeno.
El Sida, en el estado actual de la cuestión, está hoy tan insertado en Los libros de
Hervé Guibert, magníficamente escritos, van más allá de la literatura y de sus
géneros, son otra cosa, imposible de definir que, por su condición extrema, tocan
directamente esa zona transparente del corazón humano donde se cristaliza el
pavor y la piedad, esa zona que expulsa la indiferencia y convierte la lectura en un
vínculo de solidaridad con las víctimas del Sida.
La más terrible enfermedad de nuestro tiempo, ha arraigado ya en los más
diversos ámbitos del espíritu. a través de una necesidad de expresión que va más
allá de sus anécdotas. Su relevancia no ha pasado desapercibida. por tanto, para
la literatura. Aunque todavía no pueda hablarse en el sentido artístico del término-,
de una literatura específica de esa enfermedad. No obstante, el Sida ha
establecido ya un factor narrativo concreto, aunque todavía circunscrito y
empecinado al mundo gay o al documento confesional. sin romper por ello su
inmediatez social con los llamados grupos de riesgo.
Así pues, además de la ingente documentación científica y social que ha
generado. también el Sida ha sido abordado. Casi desde sus primeras
manifestaciones, desde presupuestos literarios. Tal vez convenga decir antes de
Consecuencias psicológicas en personas con VIH-SIDA.
Las personas que viven afectadas con el VIH-SIDA, sufren una serie de
consecuencias emocionales que deben ser atendidas a nivel psicológico, de la
misma manera que en otras enfermedades crónicas. Sin embargo, no sólo existen
efectos psicológicos asociados al miedo que supone esta enfermedad a nivel
físico, sino también al fuerte componente de rechazo social que genera.
Al igual que en cualquier enfermedad crónica, existen una serie de consecuencias
psicológicas en personas con VIH-SIDA, algunas relacionadas con la amenaza
que supone al bienestar del paciente y otras al grave rechazo que genera a nivel
social. Por ello, la intervención psicológica es fundamental, y debe contemplar
tanto aspectos relacionados directa como indirectamente con la enfermedad.
Si crees que puedes tener alguna infección de transmisión sexual (ITS) porque
has tenido prácticas de riesgo, hazte una prueba en una clínica ginecológica.
Agenda cita inmediata.
Así, las consecuencias psicológicas en personas con VIH-SIDA se dan tanto en el
plano psicológico como social, y pueden provocar gran malestar, interfiriendo en el
bienestar de la persona: tristeza o estados depresivos, fatiga, temor, ira, culpa,
aumento de violencia familiar por un alto estrés, ruptura de relaciones laborales y
familiares, soledad y aislamiento, entre otras.
Fase previa a la recogida de resultados
Cuando una persona conoce que ha realizado prácticas de riesgo y que puede
haber contraído el VIH, puede experimentar un estado de mucha ansiedad, pues
existe una gran incertidumbre ante el qué va a ocurrir. Por ello, se puede generar
estrés e inquietud hasta que se reciben los resultados.
Al poco tiempo de haber recibido el diagnóstico, algunos pacientes pasan por una
fase de duelo, donde en un inicio puede darse la negación, pasando por una fase
de enfado o resentimiento, una fase de tristeza y por último la aceptación del
diagnóstico, donde comienza una verdadera adaptación a la nueva condición de
vida.
Inicio de la medicación
Cada vez hay un mayor control del VIH y una perspectiva más positiva de cara al
futuro
Los nuevos medicamentos tienen menos efectos secundarios y son más eficaces
para evitar que el virus VIH se multiplique en el cuerpo. Además, los programas de
prevención y detección temprana han mejorado, y el comienzo temprano del
tratamiento es clave para tener una vida larga y saludable.
El VIH es el virus que causa el SIDA. Este afecta el sistema inmunitario, haciendo
que te enfermes más fácilmente. El VIH se propaga en las relaciones sexuales,
pero los condones ayudan a que te protejas.
Una vez contraído, el virus permanece en tu cuerpo de por vida. No existe cura
para el VIH, pero hay medicamentos que ayudan a que te mantengas sano
durante más tiempo y que disminuyen las posibilidades de que contagies a otras
personas. El tratamiento es muy importante (por eso es vital hacerte la prueba).
Prácticamente todas las personas que tienen VIH y no se tratan mueren a causa
del virus. Pero con medicamentos, los infectados por el VIH pueden mantenerse
sanos y vivir muchos años.
¿Cuál es la diferencia entre VIH y SIDA?
El VIH es el causante del SIDA. SIDA es una sigla que significa síndrome de
inmunodeficiencia adquirida. VIH y SIDA no son lo mismo. La gente con VIH no
siempre tiene SIDA.
Sin tratamiento, generalmente toma 10 años para que alguien con VIH desarrolle
SIDA. El tratamiento desacelera el daño que causa el virus y ayuda a que los
infectados se mantengan sanos durante varias décadas.
Hace muchos años, había personas que se contagiaban por recibir transfusiones
de sangre infectada. En la actualidad, donar o recibir sangre en cualquier centro
médico es totalmente seguro. Los médicos, los hospitales y los bancos de sangre
no usan las agujas más de una vez y la sangre que se dona se somete a análisis
para verificar que no esté infectada con el VIH u otras infecc Tu Farmacéutico
informa
Información general sobre el SIDA
¿Qué es el SIDA?
El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA) es una enfermedad causada
por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH). Este virus ataca
fundamentalmente al sistema inmunitario, destruyendo las defensas del organismo
y haciendo que la persona infectada padezca enfermedades y tumores.
El VIH
El VIH forma parte del grupos de los virus ARN ; es decir, cuyo material genético
se encuentra de forma de ARN (ácido ribonucleico), en lugar de ADN (ácido
desoxirribonucleico).
Epidemiología
Según datos del Registro Nacional de SIDA existen 86.663 casos diagnosticados
de SIDA en nuestro país (datos publicados en noviembre de 2017) desde el
comienzo de la epidemia (datos acumulados desde 1981). En concreto en el año
2016 (últimos datos publicados), se notificaron 607 casos. El 80,8% de los
diagnósticos recayeron en hombres, y la edad media al diagnóstico se mantiene
en torno a los 44 años.
Prevención
Dado que no existe un tratamiento que cure definitivamente la enfermedad, la
medida más eficaz es la profilaxis:
Tratamiento
Hace más de una década que se empezaran a utilizar en Europa los
medicamentos que se prescriben con mayor frecuencia para tratar el SIDA en la
actualidad: los llamados antirretrovirales.
Todos los fármacos anti-VIH tienen dos limitaciones importantes: por un lado, la
incapacidad de erradicar totalmente el virus, incluso mediante politerapia, es decir
combinaciones de fármacos, y por otro lado, la aparición de resistencias.
El VIH es el virus que se transmite de persona a persona. Con el correr del tiempo,
el VIH destruye un importante tipo de células del sistema inmunitario
(denominadas células CD4 o células T) que nos protegen de las infecciones.
Cuando alguien no tiene suficientes células CD4, el cuerpo no puede combatir las
infecciones de la manera en que lo haría normalmente.
El SIDA es una enfermedad causada por el daño que el VIH produce en el sistema
inmunitario. Una persona llega a la etapa SIDA cuando contrae infecciones raras y
peligrosas o tiene un número extremadamente bajo de células CD4. El SIDA es la
fase más grave de la infección por VIH y, con el tiempo, termina provocando la
muerte.
Tener sexo vaginal ,anal u oral (sin protección)Compartir agujas o jeringas para
drogarse, hacerse perforaciones en el cuerpo, tatuajes, etc.Ser punzado con una
aguja que tiene sangre infectada con el VIHTener heridas o ampollas abiertas que
entran en contacto con sangre, semen (esperma) o secreciones vaginales
infectados con VIH
En Bolivia, la forma de transmisión más frecuente es el sexo sin protección.
Puedes protegerte y proteger a tu pareja usando condones o barreras de látex
bucales cada vez que tienen relaciones sexuales y evitando compartir agujas.
El VIH no se transmite por la saliva, de modo que nadie transmite por dar un beso,
compartir alimentos o bebidas, o usar el mismo tenedor o la misma cuchara. El
VIH tampoco se transmite por abrazarse, darse la mano, toser o estornudar. Y
tampoco puedes infectarte por sentarte en el inodoro.
Hace muchos años, había personas que se transmitian por recibir transfusiones de
sangre infectada. En la actualidad, donar o recibir sangre en cualquier centro
médico es totalmente seguro. Los médicos, los hospitales y los bancos de sangre
descartan las agujas después de usarlas y la sangre que se dona se somete a
análisis para verificar que no esté infectada con el VIH ni ningún otro
microorganismo.
¿Cuáles son los síntomas del VIH/SIDA?
En general, quienes viven con el VIH no presentan síntomas inmediatamente, de
modo que pueden desconocer su situación. Pueden transcurrir años antes de que
se manifieste la infección.
Una persona llega a etapa SIDA cuando tiene un recuento muy bajo de células
CD4 o sufre infecciones raras (denominadas oportunistas) o algunos tipos de
cáncer . En general, esto sucede alrededor de 10 años después de contraer el VIH
y no recibir tratamiento. Con tratamiento, se puede demorar mucho la aparición del
SIDA.
Las señales del SIDA incluyen lo siguiente:
Hay millones de personas que viven con el VIH; de ninguna manera estás solo/a.
La mayoría de la gente contrae al menos una infección de transmisión sexual
durante su vida, y tener una infección por VIH u otra ITS no es algo vergonzoso ni
indigno. No significa que eres una persona "sucia" o mala.
La infección por VIH no tiene cura, pero hoy más que nunca existen
medicamentos que ayudan a las personas que viven con VIH a llevar vidas más
prolongadas y más sanas. Los tratamientos contra el VIH denominados
antirretrovirales (TAR) pueden atenuar el daño que causa el virus. Aunque te estés
sintiendo bien, consulta al médico lo antes posible para informarte sobre las
mejores formas de mantenerte sano.
Es fundamental que les comuniques a todas las personas con las que mantengas
relaciones sexuales que eres VIH-positivo. No es una conversación fácil, pero es
importante.
¿Cómo les digo a los demás que soy VIH positivo?
Tal vez te asuste admitir que eres VIH-positivo, pero hablar seguramente te
aliviará. Puedes apoyarte en un buen amigo o familiar que no sea crítico y en
quien confíes para mantener en reserva lo que hablen. Los asesores y los grupos
de apoyo también son fuente de alivio y pueden ayudarte a encontrar la forma de
hablar con los demás sobre tu infección. Ten cuidado con quien hablas sobre tu
situación; a veces, la gente con VIH es víctima de una injusta discriminación.
No hay una sola manera de hablar con tus parejas sobre el VIH, pero te daremos
algunos consejos básicos que te serán de utilidad:
Trata de mantener la calma y recuerda que no eres el/la único/a en esta situación.
Millones de personas viven con el VIH y muchas de ellas tienen pareja. Trata de
entablar la conversación con una actitud calma y positiva. Vivir con el VIH es una
cuestión de salud, no implica nada sobre ti como persona.Infórmate sobre VIH y
SIDA. Existen muchos mitos sobre el VIH. Por eso, lee información objetiva y
prepárate para responder las preguntas de tu pareja. Dile a tu pareja que existen
medicamentos que pueden ayudarte a vivir muchos años y evitar la transmisión.
Tener sexo más seguro también ayuda a protegerte a ti y a tu pareja.Busca el
momento justo. Elige un momento sin distracciones en el que no puedan
interrumpirte y un lugar privado y relajado. Si estás nervioso, puedes hablar
primero con un amigo que conozca tu situación o con un asesor, o practica
hablando contigo mismo. Tal vez suene extraño, pero practicar en voz alta lo que
tengas para decir puede ayudarte a detectar qué es lo que quieres decir y ganar
confianza para el momento de hablar con tu pareja.La seguridad primero. Si tienes
temor de que tu pareja te agreda, tal vez sea mejor comunicárselo por teléfono,
correo electrónico o mensaje de texto, o en casos extremos, puedes no decirle
nada.Evita jugar a las acusaciones cuando hables con tu pareja. Si uno de los dos
dio positivo durante la relación, no significa necesariamente que hubo infidelidad.
El VIH tarda algunos meses en aparecer en las pruebas, y la mayoría de la gente
no presenta síntomas durante años. Por eso, mucha gente no sabe que tiene VIH
y es difícil determinar cuándo y dónde contrajo el virus. Lo más importante es que
ambos se hagan pruebas. Si se determina que solo uno de los dos tiene el virus,
infórmate sobre cómo proteger al otro del VIH.Es muy importante que les
comuniques a tus ex parejas que tienes VIH para que también se hagan las
pruebas. El Centro departamental de vigilancia, información y referencia ITS/
VIH/SIDA (CDVIR), puede apoyarte.
¿Qué debo saber si tengo VIH y tengo una cita?
Algunas personas, al enterarse de que son VIH-positivos, sienten que su vida
amorosa terminó, pero eso no es así. Las personas que viven con VIH pueden
tener relaciones románticas y sexuales entre sí o con parejas que son VIH-
negativos. Hay sitios web de citas y grupos de apoyo para quienes viven con el
VIH que pueden ayudarte a encontrar una pareja que también sea seropositiva.
Entonces, ¿cuándo debes comunicarle a una pareja con la que comienzas a salir
sobre tu condición de portador? Tal vez no sea necesario decírselo la primera vez
que salen, pero tienes que hacérselo saber antes de tener relaciones sexuales. Un
buen momento quizá sea cuando la relación empieza a encaminarse en ese
sentido y percibes que puedes confiar en la persona.
Es recomendable que te hagas las pruebas si tuviste sexo sin protección o si las
pruebas de tu pareja dan positivo. También debes realizarte una prueba si
compartiste agujas (para inyectarte drogas, hacerte perforaciones en el cuerpo o
tatuajes). Si estás embarazada, hazte las pruebas de VIH en la primera consulta
prenatal.
Las pruebas de ITS, incluidas las de VIH, no siempre forman parte del chequeo de
salud o ginecológico habitual; de modo que es posible que debas pedir que te las
hagan. Ser sincero/a es fundamental con el médico para que puedan ayudarte a
determinar qué pruebas necesitas. No tengas vergüenza: tu médico está para
ayudarte, no para juzgarte. (Si el médico te juzga porque le pides una prueba de
VIH, quizá sea el momento de cambiarlo o denunciarlo a las Servicio
Departamental de Salud).
La idea de realizarse una prueba puede asustar un poco, pero trata de tomarlo con
calma. Las pruebas de ITS son parte habitual del cuidado de la salud que como
persona responsable debes atender. Las pruebas de VIH son rápidas y,
usualmente, indoloras. Y en caso de que sea VIH-positivo, es mejor saberlo
cuanto antes para empezar el tratamiento.
En lo que respecta al VIH, algunas actividades sexuales son más seguras que
otras.
Darse besos con la boca abierta (si las personas tienen llagas o sangrado en la
boca)Practicar sexo vaginal con condónPracticar sexo anal con condónSexo oral
sin condón ni barrera bucal Estas actividades son de "alto riesgo"
Es decir, millones de personas se transmiten el VIH de esta manera:
No existe ninguna vacuna que proteja contra el VIH, pero es mucha la gente que
está trabajando en ello.
¿Qué es la profilaxis de preexposición y cómo previene la infección por VIH?
La profilaxis de preexposición es un método que ayuda a prevenir una infección
por VIH y que consiste en tomar una píldora por día. Reduce el riesgo de
transmisión. Cuando la profilaxis de preexposición se combina con condones y
otros métodos de prevención, es más efectiva. Es posible que la profilaxis de
preexposición no funcione si saltas dosis. Incluso si se la utiliza correctamente, no
hay ninguna garantía de que la profilaxis de preexposición funcione.
Puntos importantes
Todas las mujeres embarazadas seropositivas deben tomar medicamentos contra
el VIH para prevenir la transmisión maternoinfantil del virus y proteger su propia
salud.
La mayoría de los medicamentos contra el VIH se pueden usar durante el
embarazo sin problema. En general, los medicamentos contra el VIH no aumentan
el riesgo de que se presenten defectos de nacimiento.
En general, las mujeres embarazadas seropositivas pueden usar los mismos
regímenes de tratamiento contra el VIH recomendados para las mujeres no
embarazadas, a menos que el riesgo de cualquier efecto secundario conocido
para una mujer embarazada o su bebé sea mayor que el beneficio del tratamiento.
Las mujeres embarazadas seropositivas deben empezar a tomar los
medicamentos contra el VIH tan pronto como sea posible. En general, las mujeres
que ya están tomando medicamentos contra el VIH cuando quedan embarazadas
deberían continuar tomándolos durante el embarazo.
A las mujeres con una carga viral alta o desconocida cerca del momento del parto
se les recomienda un parto programado por cesárea para prevenir la transmisión
maternoinfantil del VIH. La cesárea se programa para la semana 38 de embarazo
(2 semanas antes de la fecha estimada del parto).
¿Deben las mujeres seropositivas tomar los medicamentos contra el VIH durante
el embarazo?
Sí. Todas las mujeres embarazadas seropositivas deben tomar los medicamentos
contra el VIH para prevenir la transmisión maternoinfantil del virus. Los
medicamentos contra el VIH impiden que el virus se reproduzca (se multiplique), lo
que reduce la concentración del VIH en el cuerpo (también llamada carga viral).
Una carga viral baja durante el embarazo reduce la probabilidad de que cualquier
infección por el VIH pase de madre a hijo durante el embarazo y el parto. El tener
una concentración menor del VIH en el cuerpo ayuda también a mantener a la
futura mamá sana.
En la mayoría de los casos, las mujeres que ya tienen un tratamiento eficaz contra
el VIH deben continuarlo durante el embarazo. Sin embargo, el régimen de
tratamiento podría cambiar durante el embarazo. Por ejemplo, puede ser
necesario un cambio de medicamentos contra el VIH para evitar un mayor riesgo
de efectos secundarios durante el embarazo. A veces, cambiar la dosis de un
medicamento contra el VIH puede compensar los cambios relacionados con el
embarazo que hacen que sea más difícil para el cuerpo absorber el medicamento.
Sin embargo, antes de hacer cualquier cambio a su tratamiento contra el VIH, las
mujeres deberían siempre consultar con sus proveedores de atención médica.
Las mujeres con una carga viral alta (más de 1.000 copias/mL) o una carga viral
desconocida cerca de la hora del parto, deben recibir un medicamento contra el
VIH llamado zidovudina (marca comercial: Retrovir) por medio de una inyección
intravenosa.
Las mujeres, con la ayuda de sus proveedores de atención médica, pueden decidir
cuáles medicamentos contra el VIH tomar durante el parto y si es recomendable
programar una cesárea para prevenir la transmisión maternoinfantil del VIH.
¿Siguen las mujeres seropositivas tomando medicamentos contra el VIH después
del parto?
La atención prenatal para las mujeres con el VIH incluye consejería sobre los
beneficios de continuar con los medicamentos contra el VIH después del parto. El
uso de por vida de estos medicamentos previene que el VIH se convierta en SIDA
y reduce el riesgo de transmitir el VIH. Junto con sus proveedores de atención
médica, las mujeres con el VIH toman decisiones acerca de continuar o cambiar
sus medicamentos contra el VIH después del parto.
En general, los niños nacidos de mujeres con el VIH reciben zidovudina por 4 a 6
semanas después del nacimiento. (En ciertas situaciones, un bebé podría recibir
otros medicamentos contra el VIH además de la zidovudina.) El medicamento
contra el VIH protege a los bebés de contraer cualquier infección por el VIH que
pudo haber pasado de la madre al niño durante el parto. Para información
adicional, lea la hoja informativa de infoSIDA sobre la Prevención de la transmisión
maternoinfantil del VIH después del parto.