Precursor - José Baquíjano y Carrillo de Córdoba
Precursor - José Baquíjano y Carrillo de Córdoba
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Ejercicio
Información personal
Nacimiento 13 de marzo de 1751
Lima
Fallecimiento 24 de enero de 1817
Sevilla
Profesión Abogado
Catedrático
Familia
Índice
1Biografía
2Obras
3Véase también
4Enlaces externos
Biografía[editar]
Hijo del acaudalado matrimonio entre Juan Bautista de Baquíjano, Conde de
Vistaflorida, y María Ignacia Carrillo de Córdoba y Garcés de Mansilla,
descendiente de conquistadores y fundadores de Lima. Siguiendo la tradición
de la nobleza, como segundogénito fue destinado por su familia a la carrera
académica. Realizó sus estudios de latinidad en el Real Colegio de San Martín
y luego ingresó al Seminario Conciliar de Santo Toribio. Posteriormente optó
grados de Bachiller en Cánones, y de Doctor en Leyes y Cánones en
la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, a los trece años. Recibido de
abogado ante la Real Audiencia en 1769, fue secretario del obispo electo
del Cuzco, Agustín de Gorrichátegui, participando en el IV Concilio Limense y
viajando en su compañía al Cuzco, aunque pronto regresó a Lima.
Nombrado asesor del Tribunal del Consulado y del Cabildo de Lima, a poco
viajó a España, a solicitar alguna posición que estuviera de acuerdo con sus
merecimientos personales y antecedentes familiares. Sin embargo, su
dispendiosa conducta y afición a los juegos de azar, le ocasionaron recibir la
orden de abandonar la corte en 1776.
De vuelta en Lima obtuvo las cátedras sanmarquinas de Instituta en 1778 y de
Vísperas de Leyes en 1780. Como profesor de la Universidad de San Marcos,
lideró un movimiento modernizador de la enseñanza que difundía el
enciclopedismo y el concepto de la libertad de prensa. Miembro y fundador de
la Sociedad de Amantes del País 1790, fue además uno de los ilustres
colaboradores del Mercurio Peruano, en cuyas páginas publicó sus ideas.
Baquíjano escribió el Elogio a Jáuregui en la Universidad de San Marcos
en 1781, discurso con el que le dio la bienvenida al virrey Agustín de Jáuregui y
en el que destaca su protesta al sistema colonial, pues sabía que el cambio era
necesario e ineludible. Sin embargo, no apoyó la ruptura con España.
En 1790, fundó, junto a fray Diego Cisneros y los miembros de la Sociedad
Filarmónica, la Sociedad de Amantes del País, de la que fue presidente
hasta 1793. Baquíjano escribió, bajo el nombre de Cefalio, diversos artículos
históricos y económicos a través del periódico de la Sociedad, el Mercurio
Peruano.
En 1792, se le concedió la Orden de Carlos III y al año siguiente se trasladó a
España por invitación de su hermano mayor, José Agustín, conde de
Vistaflorida. Durante el viaje hizo una parada en La Habana, en donde fue
hecho socio de la Sociedad Patriótica y escribió artículos. En España, fue
personero de la Universidad de San Marcos y el Cabildo ante la Corte y fue
hecho alcalde honorario del Crimen de Lima. En 1797 consiguió el cargo de
alcalde propietario del Crimen y, por intervención del ministro Gaspar Melchor
de Jovellanos, el de juez de Alzadas de los tribunales del Consulado y Minería
de Lima. Sin embargo, dos años antes, Baquíjano había pedido su relevo como
personero y tomado la decisión de regresar al Perú por haberle llevado su
afición al juego a tener pocos medios de subsistencia en la Corte y no haber
conseguido los propósitos por los que había sido enviado.
En 1799, al no poder regresar al Perú por la guerra de España con Gran
Bretaña, abandonó Madrid y se trasladó a Cádiz, ciudad asediada por los
británicos, en la que enfermó gravemente de fiebre amarilla. En 1802, pudo
regresar al Perú y en 1806 el virrey José Fernando de Abascal lo nombró
vicepresidente de la Junta Conservadora del Fluido Vacuno y años después
juez director de estudios de San Marcos y visitador del Convictorio de San
Carlos.
En 1807 fue ascendido a oidor y ese mismo año falleció soltero en Génova su
hermano mayor, de quien heredó el Condado de Vistaflorida y sus mayorazgos
(1809). La herencia dejada por su hermano le permitió rehacer su fortuna y con
ella se dedicó a la filantropía y a la protección de algunas iglesias de Lima.
En 1812, el Consejo de Regencia de España lo nombró consejero de estado
por lo que al año siguiente partió por tercera vez a España acompañado del
joven marqués de Torre Tagle. En 1814, juró como consejero e hizo de su casa
de Madrid el centro de los americanos liberales temerosos de las
tendencias absolutistas de Fernando VII, de cuyas represalias pudo librarse por
la protección del peruano duque de San Carlos y el mexicano Manuel de
Lardizábal; sin embargo, la caída de estos lo expuso a las iras reaccionarias y
fue confinado en Sevilla.
Finalmente falleció en 1817, en Sevilla.
Obras[editar]
Efigie de Baquíjano y Carrillo en el Panteón de los Próceres en Lima.