Resumen Historia Del Arte 4
Resumen Historia Del Arte 4
Resumen Historia Del Arte 4
Para comprender mejor el contexto, dichas discusiones tuvieron lugar, durante 1955,
este año da comienzo a un nuevo capítulo en Argentina: el derrocamiento militar de
Perón y la implementación de un programa desarrollista despierta a una sociedad
eufórica, construida sobre discursos aportados por artistas, críticos, las instituciones
oficiales y privadas y los medios de comunicación. Aquí, la ciudad aparece como un
escenario de diversas transformaciones en un proceso de apertura y emancipación
artística. Es en este renacimiento del país “Liberado de la dictadura” que surge el
llamado “nuevo arte”, un concepto que aparece como un corte radical y divergente
respecto al arte “tradicional” o predominante hasta entonces, marcando el fin del arte
moderno y el inicio del arte contemporáneo. A partir de entonces, los artistas se
expanden organismos cada vez más amplios y heterogéneos, el público se torna
masivo, el arte se encuentra por fuera de los museos y galerías y las obras son
pensadas de manera diferente cambiando los roles del espectador.
Se comienza a ver una “obsesión internacional” que refleja los esfuerzos por introducir
el arte argentino a circuitos internacionales, ya sea con participaciones en las finales,
becas nacionales o programas apoyados por el FNA. Argentina buscaba, como otros
países sudamericanos, destacarse en las nuevas maneras de concebir el arte y
generar una identidad propia en el proceso.
Desde fines de los 50, por lo tanto, el eje de la cuestión del arte se desplaza: el límite
autoimpuesto de que las “obras de arte” deben parecer “obras de arte”. El arte se
libera de su propia narrativa sostenida por el mecanismo excluyente de lo
“artísticamente correcto”. Esta falta de narrativa o de “estilo correcto” es lo que sugiere
Danto el concepto de arte posthistórico: Ya no hay ningún arte más verdadero que
otro. Los artistas que participaron de este proceso, dentro de los cuales se destacan
Alberto Greco, Kenneth Kemble, Rubén Santantonín, Marta Minujin, Luis Felipe Noé y
Jorge de la Vega, propusieron poéticas diversas que contribuyeron a romper con el
territorio cercado polo artísticamente correcto.
*Alberto Greco: En 1962 publicó la primera versión del manifiesto Vivo Dito.
Publicado en forma de afiche, fue utilizado por Greco para empapelar las calles de
Italia con su proclama “el artista enseñará a ver no con el cuadro sino con el dedo”. El
arte Vivo Dito busca mostrar la realidad sin retoque ni transformación artística. Es ante
todo la aventura de lo real y el contacto directo con las cosas.
*Rubén Santantonín: En 1961 exhibió por primera vez un grupo de piezas realizadas
con cartones, trapos, cables y yeso que el llamo “cosas”, ni esculturas, ni pinturas, ni
objetos (entendiendo a la cosa como la prevalencia del humano sobre los objetos, la
poesía vital del objeto).
*Julio Le Parc: En 1960 fundó y lideró el grupo de investigación de arte visual. Éste
grupo, creo estructuras penetrables, salas de juego, laberintos y todo tipo de objetos
manipulables que proponen al espectador situaciones de participación activa. La
primera versión de su manifiesto “Basta de mistificaciones!” fue escrita en el 61 y
distribuida como panfleto, y en 1964 aparece una nueva versión en Argentina.
El objetivo de sus obras era sacar al espectador de su posición apática que le hace
aceptar de manera pasiva, no sólo aquello que se le impone como arte, si no todo un
sistema de vida.
1. En 1963, en París, decidió destruir todas las obras de una manera creativa,
apuntalando un punto de vista particular que tenía acerca de la muerte del arte. Sentía
que el arte es una forma de intensificar la vida, de impactar al contemplador. Entonces,
organizó una exhibición junto con Lourdes Castro y Miguel Otero, que concluiría con la
destrucción de sus obras (momento que Marta considera su primer Happening). Fue
una muestra que se realizó en un terreno baldío, duró 20 días y estaba conformada
por objetos collage de Castro, puertas o persianas con cartas plagadas de Otero y
colchones salpicados de Minujín.