Grecia se ubica en el sur de la península balcánica y limita con el Mar Egeo, Jónico y Mediterráneo. La antigua cultura griega se originó en esta región y se expandió por la península griega y las costas de Turquía e Italia. Los griegos fundaron colonias a lo largo del Mediterráneo en España, Francia y Egipto. Bajo Alejandro Magno, Grecia conquistó territorios desde Turquía hasta Afganistán. La cultura griega era marítima y se organizaba en
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Grecia se ubica en el sur de la península balcánica y limita con el Mar Egeo, Jónico y Mediterráneo. La antigua cultura griega se originó en esta región y se expandió por la península griega y las costas de Turquía e Italia. Los griegos fundaron colonias a lo largo del Mediterráneo en España, Francia y Egipto. Bajo Alejandro Magno, Grecia conquistó territorios desde Turquía hasta Afganistán. La cultura griega era marítima y se organizaba en
Grecia se ubica en el sur de la península balcánica y limita con el Mar Egeo, Jónico y Mediterráneo. La antigua cultura griega se originó en esta región y se expandió por la península griega y las costas de Turquía e Italia. Los griegos fundaron colonias a lo largo del Mediterráneo en España, Francia y Egipto. Bajo Alejandro Magno, Grecia conquistó territorios desde Turquía hasta Afganistán. La cultura griega era marítima y se organizaba en
Grecia se ubica en el sur de la península balcánica y limita con el Mar Egeo, Jónico y Mediterráneo. La antigua cultura griega se originó en esta región y se expandió por la península griega y las costas de Turquía e Italia. Los griegos fundaron colonias a lo largo del Mediterráneo en España, Francia y Egipto. Bajo Alejandro Magno, Grecia conquistó territorios desde Turquía hasta Afganistán. La cultura griega era marítima y se organizaba en
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Grecia es un estado de Europa meridional, miembro de la Unión Europea (UE) situado
en el extremo sur de la península balcánica en el litoral del mar Mediterráneo. Limita
con el Mar Egeo, el Jónico y el Mediterráneo, entre Albania y Turquía. La cultura de la Antigua Grecia surgió al sur de los Balcanes, en el este Mediterráneo. En sus momentos de mayor apogeo se arraigó en toda la península griega, entre el mar Jónico y el mar Egeo, expandiéndose hacia el norte y hacia las costas de la actual Macedonia y Bulgaria, así como las costas opuestas de la actual Turquía, y el sur y este de Italia. Continuando con lo antes descrito, la civilización griega fundó también poblaciones a lo largo de la costa mediterránea europea, en territorio actual de España y Francia, así como en la costa del actual Egipto. Además, durante el período helenístico, bajo el liderazgo del conquistador Alejandro Magno, Grecia se anexionó los territorios de las actuales Turquía, Egipto, parte de Libia, Siria, Jordania, Palestina, Israel, Armenia y la antigua Mesopotamia. Y llegó a cubrir, en el momento de mayor expansión del imperio, el antiguo Imperio Persa en los territorios actuales de Irak, Irán, Kuwait, Afganistán, Pakistán y parte de Uzbekistán y Turkmenistán. Por su parte, la cultura griega antigua era una cultura eminentemente marítima, dado su emplazamiento en el corazón del Mediterráneo, y se organizaba político- socialmente en ciudades-estado, llamadas polis, de las cuales las principales fueron Atenas, Esparta, Corinto y Tebas. Además, en todas sus ciudades se hablaba el griego y cultivó ampliamente la filosofía, las artes, la política y la guerra. A pesar de la evidente fragmentariedad política de su civilización, los griegos tenían consciencia de ser un pueblo único y singular. Asimismo, tenían una religión politeísta, de imaginario vasto y complejo, que rendía culto a numerosas deidades mayores y menores, reunidas en el panteón Olímpico. Eran lideradas por Zeus, dios padre y de los cielos, junto a sus hermanos Poseidón, dios de los mares, y Hades, dios del Inframundo. También, En sus ciudades se practicó la esclavitud, a pesar de ser los inventores de la democracia y de que el nacimiento en familias de abolengo no representaba realmente ningún beneficio particular en la polis. Los esclavos solían ser cautivos vencidos durante la guerra, o ciudadanos que infringían las leyes y eran apresados. Pero, a diferencia de otros sistemas esclavistas, los esclavos no eran tratados de manera infrahumana, sino que formaban un estamento inferior en la sociedad griega. Estaban al servicio de sus amos, pero obtenían un pago por su trabajo (dádivas) y pudiendo formar una familia en relativa libertad. Además, eran frecuentes los esclavos del Estado, convertidos en servidores públicos o en cuidadores de templos. Los esclavos liberados por sus amos no se convertían en ciudadanos, sino que formaban junto a los extranjeros parte de los metecos: residentes libres sin derecho a participación política. En este orden de ideas, cuando los romanos conquistaron a los griegos, fascinados por la robusta cultura que hallaron, pasaron a asimilarla como propia, por tal motivo, la cultura griega y la romana terminaron siendo muy semejantes y casi indisolubles. Sólo se limitaron a cambiar los nombres de todo al latín, pero respetando un enorme porcentaje del contenido original de la cultura helénica. Así nació la cultura greco- romana o grecorromana, en la que Zeus pasó a llamarse Júpiter, Afrodita pasó a Venus, Ares pasó a Marte, entre otros. Por otro lado, tal vez uno de los eventos bélicos más significativos de la Antigüedad, la Guerra de Troya se convirtió en la historia en un hito central para comprender el poderío de Grecia y la conformación de su identidad en el Mediterráneo. De acuerdo a los registros históricos, la guerra de Troya sucedió entre los años 1194 y 1184 y tuvo lugar en la ciudad de Troya que se ubicaba en aquel entonces en la región de Asia Menor, territorio que hoy pertenecería a Turquía. Cabe mencionar, que la guerra de Troya representó el enfrentamiento entre los troyanos y los griegos (que en aquel entonces se llamaban aqueos ya que todavía no se encontraba conformada del todo la identidad posterior griega) debido a cuestiones territoriales, a botines robados y a poderíos navieros. La versión histórica de la guerra difiere, como ocurre con muchos mitos, de la historia mítica. El resultado de este enfrentamiento fue la invasión de la ciudad de Troya por los aqueos y la posterior destrucción de la tradición troyana. Es importante destacar, que Troya resultaba ser de gran importancia para la civilización egesaquea debido a su estratégica ubicación geográfica, ya que, tenía la Costa de Anatolia, en un lugar estratégico para controlar el paso por el Helesponto, un estrecho que comunica el Mediterráneo con un pequeño mar, la Propóntide, que a través del estrecho del Bósforo comunica a su vez con el Mar Negro. El Mar Negro, ofrecía grandes posibilidades para el comercio, alejado del disputado Mediterráneo y con una extensa costa llena de pueblos no muy civilizados a los que se podía ofrecer artículos de lujo a cambio de minerales y otras materias primas. Algunos comerciantes llegaron incluso a China por esta vía, de donde importaban artículos exóticos, como el Jade. Así pues, Troya estaba en condiciones de aprovecharse directa e indirectamente de este comercio, sin más que exigir un tributo a todo el que quisiera cruzar el Helesponto. Aquella Troya dominaba el estrecho paso de los Dardanelos desde una buena posición: la bahía de Besika, a los pies la ciudad, era el último refugio invernal para las naves en ruta hacia el mar Negro, en espera de corrientes y unas muy buenas condiciones climáticas. Esta posición estratégica la convirtió imprescindible en la red comercial que unía a las sociedades mediterráneas y orientales con los ricos territorios asiáticos del mar Negro. Finalmente, podemos decir que la civilización griega fue una de las más importantes en la historia de la humanidad; aunque no lograron crear un país unificado, desarrollaron una cultura extraordinaria, dejándonos un legado perdurable que podemos percibir a diario en el mundo que nos rodea. Hoy en día nuestras ideas sobre política, medicina, historia y arte son en gran parte herencia de los antiguos griegos, sirviendo de guía para pensar y razonar acerca los principios de la lógica y la verdad; dejando grandes aportes en muchas áreas como la filosofía, historia, matemáticas, política, arquitectura, escultura, arte, teatro, deporte, ciencia, entre otras.
Antigüedad Clásica: Una guía fascinante de la antigua Grecia y Roma y cómo estas civilizaciones influyeron en Europa, el norte de África y Asia occidental