Titulo Viii 2

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TITULO VIII: ALBACEAS

Artículo 778.- Nombramiento de albacea

El testador puede encomendar a una o varias personas, a quienes se denomina


albaceas o ejecutores testamentarios, el cumplimiento de sus disposiciones de última
voluntad.

Artículo 779.- Formalidad del nombramiento

El nombramiento de albacea debe constar en testamento.

Artículo 780.-  Pluralidad de albaceas

Cuando hay varios albaceas testamentarios nombrados para que ejerzan el cargo
conjuntamente, vale lo que todos hagan de consuno o lo que haga uno de ellos
autorizado por los demás. En caso de desacuerdo vale lo que decide la mayoría.

Artículo 781.- Responsabilidad solidaria de los albaceas

Es solidaria la responsabilidad de los albaceas que ejercen conjuntamente el cargo,


salvo disposición distinta del testador.

Artículo 782.- Ejercicio concurrente o sucesivo del albacea

Si el testador no dispone que los albaceas actúen conjuntamente, ni les atribuye


funciones específicas a cada uno de ellos, desempeñarán el cargo sucesivamente, unos
a falta de otros, en el orden en que se les ha designado.

Artículo 783.- Personas impedidas para ser albaceas

No puede ser albacea el que está incurso en los artículos 667, 744, 745 y 746.

Artículo 784.- Albaceazgo por personas jurídicas

Pueden ser albaceas las personas jurídicas autorizadas por ley o por su estatuto.

Artículo 785.- Excusa y renuncia del albacea

El albacea puede excusarse de aceptar el cargo, pero si lo hubiera aceptado, no podrá


renunciarlo sino por justa causa, a juicio del juez.
Artículo 786.- Plazo para aceptación del cargo

Mientras el albacea no acepte el cargo o no se excuse, el juez al que corresponda


conocer de la sucesión, a solicitud de parte interesada, le señalará un plazo prudencial
para la aceptación, transcurrido el cual se tendrá por rehusado.

Artículo 787.- Obligaciones del albacea

Son obligaciones del albacea:

1. Atender a la inhumación del cadáver del testador o a su incineración si éste lo


hubiera dispuesto así, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 13.

2. Ejercitar las acciones judiciales y extrajudiciales para la seguridad de los bienes


hereditarios.

3. Hacer inventario judicial de los bienes que constituyen la herencia, con citación de
los herederos, legatarios y acreedores de quienes tenga conocimiento.

4. Administrar los bienes de la herencia que no hayan sido adjudicados por el testador,
hasta que sean entregados a los herederos o legatarios, salvo disposición diversa del
testador.

5. Pagar las deudas y cargas de la herencia, con conocimiento de los herederos.

6. Pagar o entregar los legados.

7. Vender los bienes hereditarios con autorización expresa del testador, o de los
herederos, o del juez, en cuanto sea indispensable para pagar las deudas de la
herencia y los legados.

8. Procurar la división y partición de la herencia.

9. Cumplir los encargos especiales del testador.

10. Sostener la validez del testamento en el juicio de impugnación que se promueva,


sin perjuicio del apersonamiento que, en tal caso, corresponde a los herederos.

Artículo 788.- Personería específica de los albaceas


Los albaceas no son representantes de la testamentaría para demandar ni responder
en juicio, sino tratándose de los encargos del testador, de la administración que les
corresponde y del caso del artículo 787, inciso 10.

Artículo 789.- Carácter personal del albaceazgo

El albaceazgo es indelegable; pero pueden ejercerse en casos justificados algunas


funciones mediante representantes, bajo las órdenes y responsabilidad del albacea.

Artículo 790.- Posesión de bienes por el albacea

Si el testador no instituye herederos, sino solamente legatarios, la posesión de los


bienes hereditarios corresponde al albacea, hasta que sean pagadas las deudas de la
herencia y los legados.

Artículo 791.- Actos de conservación del albacea

Los herederos o legatarios pueden pedir al albacea la adopción de medidas necesarias


para mantener la indemnidad de los bienes hereditarios.

Artículo 792.- Albacea dativo

Si el testador no hubiera designado albacea o si el nombrado no puede o no quiere


desempeñar el cargo, sus atribuciones serán ejercidas por los herederos, y si no están
de acuerdo, deberán pedir al juez el nombramiento de albacea dativo.

Artículo 793.- Remuneración del albacea

El cargo de albacea es remunerado, salvo que el testador disponga su gratuidad.

La remuneración no será mayor del cuatro por ciento de la masa líquida.

En defecto de la determinación de la remuneración por el testador, lo hará el juez,


quien también señalará la del albacea dativo.

Artículo 794.- Rendición de cuenta del albacea

Aunque el testador le hubiera eximido de este deber, dentro de los sesenta días de
terminado el albaceazgo, el albacea debe presentar a los sucesores un informe escrito
de su gestión y, de ser el caso, las cuentas correspondientes, con los documentos del
caso u ofreciendo otro medio probatorio. Las cuentas no requieren la observancia de
formalidad especial en cuanto a su contenido, siempre que figure una relación
ordenada de ingresos y gastos.

También cumplirá este deber durante el ejercicio del cargo, con frecuencia no inferior
a seis meses, cuando lo ordene el Juez Civil a pedido de cualquier sucesor. La solicitud
se tramita como proceso no contencioso.

El informe y las cuentas se entienden aprobados si dentro del plazo de caducidad de


sesenta días de presentados no se solicita judicialmente su desaprobación, como
proceso de conocimiento.

Las reglas contenidas en este artículo son de aplicación supletoria a todos los demás
casos en los que exista deber legal o convencional de presentar cuentas de ingresos y
gastos o informes de gestión.

Artículo 795.- Remoción del albacea

Puede solicitarse, como proceso sumarísimo, la remoción del albacea que no ha


empezado la facción de inventarios dentro de los noventa días de la muerte del
testador, o de protocolizado el testamento, o de su nombramiento judicial, lo que
corresponda, o dentro de los treinta días de haber sido requerido notarialmente con
tal objeto por los sucesores.

Artículo 796.- Cese del cargo del albacea

El cargo de albacea termina:

1. Por haber transcurrido dos años desde su aceptación, salvo el mayor plazo que
señale el testador, o que conceda el juez con acuerdo de la mayoría de los herederos.

2. Por haber concluido sus funciones.

3. Por renuncia con aprobación judicial.

4. Por incapacidad legal o física que impida el desempeño de la función.

5. Por remoción judicial, a petición de parte debidamente fundamentada.

6. Por muerte, desaparición o declaración de ausencia.


Artículo 797.- Obligación de albacea de cumplir con la voluntad del testador

El albacea está facultado durante el ejercicio de su cargo y en cualquier tiempo


después de haberlo ejercido, para exigir que se cumpla la voluntad del testador.
Carece de esta facultad el que cesó por renuncia o por haber sido removido del cargo.

TITULO IX: RENOVACIÓN, CADUCIDAD Y NULIDAD DE LOS TESTAMENTO.

Capítulo primero: Revocación

Artículo 798.- Revocación del testamento

El testador tiene el derecho de revocar, en cualquier tiempo, sus disposiciones


testamentarias. Toda declaración que haga en contrario carece de valor.

Artículo 799.- Forma de revocar

La revocación expresa del testamento, total o parcial, o de algunas de sus


disposiciones, sólo puede ser hecha por otro testamento, cualquiera que sea su forma.

Artículo 800.- Reviviscencia de testamento anterior

Si el testamento que revoca uno anterior es revocado a su vez por otro posterior,
reviven las disposiciones del primero, a menos que el testador exprese su voluntad
contraria.

Artículo 801.- Revocación parcial de testamento

El testamento que no es revocado total y expresamente por otro posterior, subsiste en


las disposiciones compatibles con las de este último.

Artículo 802.- Revocación del testamento cerrado

El testamento cerrado queda revocado si el testador lo retira de la custodia del notario


Artículo 803.- Validez del testamento cerrado como ológrafo

Tanto en el caso previsto en el artículo 802 como en el de su apertura por el testador,


el testamento cerrado vale como ológrafo si se conserva el pliego interior y éste reúne
las formalidades señaladas en la primera parte del artículo 707.

Artículo 804.- Revocación de testamento ológrafo

El testamento ológrafo queda revocado si el testador lo rompe, destruye o inutiliza de


cualquier otra manera.

Capítulo segundo: Caducidad

Artículo 805.- Caducidad de testamento

El testamento caduco, en cuanto a la institución de heredero:

1. Si el testador deja herederos forzosos que no tenía cuando otorgó el testamento y


que vivan; o que estén concebidos al momento de su muerte, a condición de que
nazcan vivos.

2. Si el heredero renuncia a la herencia o muere antes que el testador sin dejar


representación sucesoria, o cuando el heredero es el cónyuge y se declara la
separación judicial por culpa propia o el divorcio.

3. Si el heredero pierde la herencia por declaración de indignidad o por desheredación,


sin dejar descendientes que puedan representarlo.

Artículo 806.- Preterición de heredero forzoso

La preterición de uno o más herederos forzosos, invalida la institución de herederos en


cuanto resulte afectada la legítima que corresponde a los preteridos. Luego de haber
sido pagada ésta, la porción disponible pertenece a quienes hubieren sido instituidos
indebidamente herederos, cuya condición legal es la de legatarios.

Artículo 807.- Reducción de disposiciones testamentarias

Las disposiciones testamentarias que menoscaban la legítima de los herederos, se


reducirán, a petición de éstos, en lo que fueren excesivas.
Capítulo tercero: Nulidad

Artículo 808.- Nulidad y anulabilidad de testamento

Es nulo el testamento otorgado por menores de edad. Es anulable el de las demás


personas comprendidas en el artículo 687.

Artículo 809.- Anulabilidad de testamento por vicios de voluntad

Es anulable el testamento obtenido por la violencia, la intimidación o el dolo. También


son anulables las disposiciones testamentarias debidas a error esencial de hecho o de
derecho del testador, cuando el error aparece en el testamento y es el único motivo
que ha determinado al testador a disponer.

Artículo 810.- Nulidad por falsa muerte de heredero

Cuando un testamento ha sido otorgado expresando como causa la muerte del


heredero instituido en uno anterior, valdrá éste y se tendrá por no otorgado aquél, si
resulta falsa la noticia de la muerte.

Artículo 811.- Nulidad por defectos de forma

El testamento es nulo de pleno derecho, por defectos de forma, si es infractorio de lo


dispuesto en el artículo 695 o, en su caso, de los artículos 696, 699 y 707, salvo lo
previsto en el artículo 697.

Artículo 812.- Anulabilidad por defectos de forma

El testamento es anulable por defectos de forma cuando no han sido cumplidas las
demás formalidades señaladas para la clase de testamento empleada por el testador.
La acción no puede ser ejercida en este caso por quienes ejecutaron voluntariamente
el testamento, y caduca a los dos años contados desde la fecha en que el heredero
tuvo conocimiento del mismo.
Artículo 813.- Nulidad y anulabilidad de testamentos especiales

Los testamentos especiales son nulos de pleno derecho cuando falta la forma escrita,
la firma del testador o de la persona autorizada para recibirlos. Son anulables en el
caso del artículo 812.

Artículo 814.- Nulidad de testamento común

Es nulo el testamento otorgado en común por dos o más personas.

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