Discurso Publicitario

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EL DISCURSO PUBLICITARIO

Hoy en día la publicidad nos rodea en casi todos los aspectos de nuestra vida, jugando
un papel importante en lo que solemos llamar sociedad. La publicidad esta definida por
un gran numero de estrategias en las que además de dar a conocer algo (como servicios
o objetos) a un público previamente meditado, se intenta otorgar cierta reputación a lo
que es publicitado. Teniendo en cuenta la finalidad de la publicidad, el lenguaje humano
ha generado una manera propia en la que se recogen multitud de técnicas para influir
sobre las personas, a esta forma de expresión se le ha denominado Discurso publicitario.
El discurso publicitario es un tipo de comunicación comercial y contemporánea que
recoge múltiples conceptos presentes en el ámbito social, tanto si es de manera escrita o
si es de manera oral.

Lo primero que se tiene en cuenta a la hora de publicitar cualquier clase de servicio, es


el público al que va dirigido, en base a si este publico es mayor o menor, se utilizará un
estilo de lenguaje u otro. Debido a que el principal objetivo de la publicidad es persuadir
al receptor para que tome la decisión de comprar el servicio o el producto, el discurso
publicitario se nos presenta como un estilo en el que predominan el lenguaje
connotativo y denotativo. El primero de estos dos se puede apreciar mayormente cuando
se hacen referencias a la juventud, la belleza, la sensualidad, etc. Mientras que el
lenguaje denotativo se utiliza a la hora de presentar estadísticas, datos del producto,
ubicaciones, etc. Es en este apartado en el que la publicidad presenta su mayor
diferencia frente a la propaganda, ya que la publicidad hace un mayor uso de lenguaje
connotativo valiéndose de elementos subjetivos.

Una vez conocido el público al que la publicidad va dirigida es cuando realmente


comienza el proceso para determinar el mensaje que se va a enviar. Dicho mensaje esta
notoriamente dividido en tres apartados: el eslogan, el cuerpo y el cierre. El primero de
estos apartados se diferencia por su intención de ser recordado por el receptor, este está
cuidadosamente elaborado para que además de recoger características del producto,
pueda ser fácilmente relacionado con la imagen del emisor. El eslogan es reconocible
por su parecido con el lenguaje literario, valiéndose del uso de onomatopeyas,
aliteraciones, rimas… El cuerpo del mensaje emplea un lenguaje cotidiano, para que
resulte familiar al receptor y así sea más cómodo al ser escuchado o leído. Este amplía
la información emitida por el eslogan y es la parte del mensaje en el que mas
información es emitida. Por último, tenemos el cierre del mensaje el cual normalmente
se diferencia por estar acompañado de la marca del producto o anagramas que la
referencian. Actualmente, se vaya a donde se vaya, uno se va a encontrar rodeado de
publicidad, ya sea en carteles, revistas o videos,

La manera en la que el discurso publicitario influye en el receptor ha sido un tema


tratado e investigado por multitud de personas a lo largo de la historia. Esas numerosas
investigaciones han terminado creando lo que es ahora el discurso publicitario. A
diferencia de como solía ser, ahora esta estudiado y preparado al milímetro para influir
en el receptor. Según los más recientes estudios, las personas de entre 16 y 25 años son
las más fáciles de influenciar a la hora de realizar grandes compras o inversiones, es por
esto que es el intervalo de edad mas buscado por las grandes marcas. Actualmente, se
vaya a donde se vaya, uno se va a encontrar rodeado de publicidad, ya sea en carteles,
revistas o videos, es uno de los factores mas importantes a la hora de manipular el
pensamiento de cada uno. Este bombardeo de información hace que poca publicidad sea
la que es recordada. La publicidad que queda recordada por nosotros suele ser la que
publicita un servicio u objeto con la intención de cubrir nuestras necesidades. Sin
embargo, hay casos excepcionales en los que, a pesar de no cubrir una necesidad previa,
es la misma publicidad la que hace creer al receptor que tiene una necesidad, este es
conocido por ser un método de publicidad muy poco ético. Este método de publicidad
se visto como un método poco ético puesto que manipula al receptor por medio de
mensajes ocultos más allá de la cara visible del mensaje. Popularmente conocida como
publicidad subliminal, es considerada como publicidad ilegal. Otro método ilegal de
discurso publicitario es la publicidad en la que el mensaje hace hincapié en como es
superior al resto, poniendo a otras marcas de ejemplo, y de esta manera haciéndole
pensar al receptor que lo que usa de diario no es nada comparado a lo publicitado.

Es bien sabido que la publicidad siempre ha buscado afectar a su público, pero es la más
moderna publicidad afecta de distintas maneras a su receptor, esto sucede debido a la
forma en la que el discurso publicitario es planteado. El discurso publicitario está
planteado de forma que esté centrado en las emociones, los afectos y la emotividad.
Tanto el discurso publicitario como la imagen que este da están enfocados en ofrecer
estímulos al receptor, algunos métodos de los que se vale son mensajes positivos,
satisfacción, belleza o incluso una imagen favorecedora hacia el producto o servicio
anunciado. Es aquí donde podemos apreciar y corroborar su uso de lenguaje
connotativo. La filosofía central que engloba la gran mayoría de discursos publicitarios
se puede resumir con una única frase: aquel que se identifique con los conceptos que
presenta el discurso y se reconoce en ellos mismos, querrá probar dicha marca, producto
o servicio. A pesar de que la publicidad lleve presente en la humanidad desde el año
1625, en el que el periódico británico Mercurius Britannicus publicó el primer anuncio
publicitario, ha sido en estos últimos 20 años cuando el discurso publicitario ha
empezado a tener mas en cuenta la psicología. Ha sido así como el discurso publicitario
ha terminado afectando mucho más a la población de hoy en día comparado a como
solía ser.

Son muchos los ejemplos de discurso publicitario que se muestran día a día en nuestra
vida cotidiana, esto no lo hace algo negativo. A pesar de la gran cantidad de voces que
se han alzado en contra de la influencia que el discurso publicitario ejerce sobre
nosotros, apoyándose en que el discurso publicitario es responsable del consumo en
masa, cosificación humana, racismo, compras impulsivas o el sexismo, se ha podido
comprobar que no hay apenas ejemplos de una influencia negativa sobre el receptor. El
discurso publicitario ofrece grandes beneficios al consumidor y la sociedad. Los
beneficios más notorios son la mejora de la capacidad de elección, la simplificación de
los procesos de compra y la constante búsqueda de la innovación comercial. Es por esto
que en mi opinión el discurso publicitario no merece ser cambiado. A lo largo del texto
hemos comprobado que ha evolucionado a lo largo del tiempo, es así que con el paso de
los años irá mejorando y aportando muchos más beneficios a la sociedad. Siempre que
el discurso publicitario continúe siendo un método ético de persuasión este favorecerá
de muchas maneras tanto al emisor como al receptor.
Bibliografía

EL IMPACTO DE LA PUBLICIDAD EN LA SOCIEDAD – Teresa García sanchez,

miperiodicodigital.com, 3/5/16

La publicidad y la creación de necesidades, 15/11/2002, ABC

CORTINA, A.: Ética mínima. Introducción a la filosofía práctica??. Madrid, Tecnos, 1986.

¿Qué es la publicidad? Para qué sirve, ventajas y cómo puede ayudar a tu empresa,
cyberclick.es, octubre 2021

Retórica del discurso publicitario. Una interpretación textual, Isabel María Sonia Sárdon

Navarro, 1997,

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