Terceraevaluaciondd - HH, Fernando Jorquera Arias

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TERCERA EVALUACIÓN DEL MÓDULO

“DERECHOS HUMANOS”.
NOMBRES Y APELLIDOS: FERNANDO ANDRES JORQUERA ARIAS.-

RECOMENDACIONES:

1.- Prepare sus respuestas.


2.- Lea las preguntas con atención.
3.- Debe responder las preguntas formuladas y sólo lo que se consulta;
con brevedad, exactitud y RESPALDO LEGAL.
4.- Todas las respuestas ponderan un punto, o menos si están
incompletas
5.- La escala de evaluación es la siguiente:

Puntaje Nota
0.0 1.0
1.0 1.0
2.0 2.0
3.0 3.0
4.0 4.0
5.0 5.0
6.0 6.0
7.0 7.0
EVALUACIÓN

1. ¿POR QUÉ SE DENOMINAN DERECHOS HUMANOS?

RESPUESTA:

Se denominan derechos humanos porque son inherentes a todos los seres


humanos, sin distinción alguna de nacionalidad, lugar de residencia, sexo,
origen nacional o étnico, color, religión, lengua, o cualquier otra condición.

CARACTERISTICAS:

- Progresivos
- No discriminatorios
- Universales.
- Supraestatales.
- Igualitarios.
- Irrenunciables.
- Imprescriptibles.
- Inviolables.
- Obligatorios.
- Inalienables.
DEBERES: Se encuentran estipulados en la “DECLARACION AMERICANA
DE LOS DERECHOS Y DEBERES DEL HOMBRE” aprobada en la Novena
conferencia Internacional Americana de Bogotá, Colombia 1948.

2. MENCIONE LOS PRINCIPIOS EN QUE SE SUSTENTAN LOS


DERECHOS HUMANOS.

RESPUESTA:

Los principios que sustentan los derechos humanos son:

1) LIBERTAD
2) IGUALDAD
3) DIGNIDAD
4) JUSTICIA
5) BIEN COMUN

3. ¿SEGÚN SU OPINION, DE QUE MANERA INCIDEN LOS DD.HH. EN


LA ACTIVIDAD DE SEGURIDAD PRIVADA?.

RESPUESTA:

Es importante recordar la necesidad de conocer los Derechos


Humanos en la Seguridad Privada, para que el personal que labora en
esta área los respeten, conozcan, hagan uso de los marcos normativos
y de los estándares
nacionales e internacionales relacionados con este tema, así es
primordial la labor y el compromiso de la Superintendencia de
Vigilancia y Seguridad Privada, entidad que a través de la Política
Institucional de Derechos Humanos, formalizó el compromiso de
respeto y garantía de los Derechos Humanos, por parte del personal
que labora en seguridad, con el objetivo de evitar que el ejercicio de
sus actividades propias, provoquen o contribuyan a impactar
negativamente los Derechos Humanos de sus usuarios.

Recordemos los Principios Orientadores:

Respeto, es objetivo velar por que los Derechos Humanos sean


respetados, en el ámbito interno de la entidad y extremadamente por
sus grupos de interés.
Promoción, Es necesario que los Derechos Humanos sean divulgados,
conocidos, comprendidos e interiorizados, promoviendo la cultura por
el respeto, la garantía y la educación de los mismos.
Garantía, es fundamental adoptar las medidas necesarias para
garantizar el disfrute de los Derechos Humanos, velando por la
aplicación del ordenamiento jurídico colombiano y estándares
internacionales.
Líneas de Acción:
Describe dos Líneas de Acción a Nivel Interno y Externo.
A Nivel Interno: Entre otros, rechaza cualquier tipo de discriminación,
por motivos de edad, raza, color, sexo, religión opciones políticas,
nacionalidad, orientación sexual o cualquier otra condición física.
Colabora para mantener un entorno laboral libre de acoso y abuso o
violencia. Dispone y fortalece los mecanismos de quejas y denuncias
para atender, registrar e investigar los reclamos relacionados con
posibles casos de violación a los Derechos Humanos.

A Nivel Externo: Se debe asegurar que el personal operativo de los


servicios de vigilancia y seguridad privada, cuente con formación en
Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario, es por esto
que en el pensum de nuestros programas destinamos varias horas a
este tema, generando una cultura de Derechos Humanos en el sector
de la Vigilancia y Seguridad Privada.

4. ¿CUAL ES LA CLASIFICACION DE LOS DERECHOS HUMANOS?

RESPUESTA:

Los derechos humanos se clasifican como individuales y colectivos.

Estos comprenden materias de:

- Derechos Civiles.
- Derechos Políticos.
- Derechos Económicos.
- Derechos sociales y culturales.

5. ¿EXPLIQUE QUE SE ENTIENDE POR UN ESTADO


DEMOCRATICO?

RESPUESTA:

Se entiende por un Estado Democrático que este debe ser elegido


mediante sufragio universal e informado, donde se encuentren
debidamente separados los poderes del Estado y sean respetados en
el ejercicio independiente de cada uno de ellos, dentro de los requisitos
es que el Estado sea un garante permanente del respeto y difusión de
los derechos humanos.

Su base legal se encuentra sustentada en la constitución política de la


república en su artículo Nº4

6. ¿DE QUE MANERA SE GARANTIZAN LOS DD.HH. EN SU


RELACION CON LA ACTIVIDAD EMPRESARIAL?

RESPUESTA:

1. Los Estados deben proteger contra las violaciones de los derechos


humanos cometidas en su territorio y/o su jurisdicción por terceros,
incluidas las empresas. A tal efecto deben adoptar las medidas
apropiadas para prevenir, investigar, castigar y reparar esos abusos
mediante políticas adecuadas, actividades de reglamentación y
sometimiento a la justicia.

2. Los Estados deben enunciar claramente que se espera de todas las


empresas domiciliadas en su territorio y/o jurisdicción que respeten los
derechos humanos en todas sus actividades.

3. En cumplimiento de su obligación de protección, los Estados deben:

a) Hacer cumplir las leyes que tengan por objeto o por efecto hacer
respetar los derechos humanos a las empresas, evaluar periódicamente si
tales leyes resultan adecuadas y remediar eventuales carencias;

b) Asegurar que otras leyes y normas que rigen la creación y las


actividades de las empresas, como el derecho mercantil, no restrinjan sino
que propicien el respeto de los derechos humanos por las empresas;

c) Asesorar de manera eficaz a las empresas sobre cómo respetar los


derechos humanos en sus actividades;

d) Alentar y si es preciso exigir a las empresas que expliquen cómo tienen


en cuenta el impacto de sus actividades sobre los derechos humanos.Los
Estados deben adoptar medidas adicionales de protección contra las
violaciones de derechos humanos cometidas por empresas de su
propiedad o bajo su control, o que reciban importantes apoyos y servicios
de organismos estatales, como los organismos oficiales de crédito a la
exportación y los organismos oficiales de seguros o de garantía de las
inversiones, exigiendo en su caso, la debida diligencia en materia de
derechos humanos.

4. Los Estados deben ejercer una supervisión adecuada con vistas a


cumplir sus obligaciones internacionales de derechos humanos cuando
contratan los servicios de empresas, o promulgan leyes a tal fin, que
puedan tener un impacto sobre el disfrute de los derechos humanos.

5. Los Estados deben ejercer una supervisión adecuada con vistas a


cumplir sus obligaciones internacionales de derechos humanos cuando
contratan los servicios de empresas, o promulgan leyes a tal fin, que
puedan tener un impacto sobre el disfrute de los derechos humanos.

6. Los Estados deben promover el respeto de los derechos humanos por


parte de las empresas con las que lleven a cabo transacciones
comerciales.

7. Puesto que el riesgo de violaciones graves de los derechos humanos es


mayor en zonas afectadas por conflictos, los Estados deben tratar de
asegurar que las empresas que operan en tales contextos no se vean
implicadas en abusos de este tipo, adoptando entre otras las siguientes
medidas:

a) Colaborar en la fase más temprana posible con las empresas para


ayudarlas a determinar, prevenir y mitigar los riesgos que entrañen sus
actividades y relaciones empresariales para los derechos humanos;

b) Prestar asistencia adecuada a las empresas para evaluar y tratar los


principales riesgos de abusos, prestando especial atención tanto a la
violencia de género como a la violencia sexual;

c) Negar el acceso al apoyo y servicios públicos a toda empresa que esté


implicada en graves violaciones de los derechos humanos y se niegue a
cooperar para resolver la situación;

d) Asegurar la eficacia de las políticas, leyes, reglamentos y medidas


coercitivas vigentes para prevenir el riesgo de que las empresas se vean
implicadas en graves violaciones de los derechos humanos.

8. Los Estados deben asegurar que los departamentos y organismos


gubernamentales y otras instituciones estatales que configuran las
prácticas empresariales sean conscientes de las obligaciones de derechos
humanos del Estado y las respeten en el desempeño de sus respectivos
mandatos, en particular ofreciéndoles la información, la capacitación y el
apoyo pertinentes.

9. Los Estados deben mantener un marco normativo nacional adecuado


para asegurar el cumplimiento de sus obligaciones de derechos humanos
cuando concluyan acuerdos políticos sobre actividades empresariales con
otros Estados o empresas, por ejemplo a través de tratados o contratos de
inversión.

10. Los Estados cuando actúen en calidad de miembros de instituciones


multilaterales que tratan cuestiones relacionadas con las empresas,
deberán:

a) Tratar de asegurarse de que esas instituciones no limiten la capacidad


de los Estados miembros de cumplir su deber de protección ni pongan
trabas a la observancia de los derechos humanos por las empresas;

b) Alentar a esas instituciones, en el marco de sus respectivos mandatos y


capacidades, a promover el respeto de los derechos humanos entre las
empresas y a ayudar a los Estados que lo soliciten a cumplir su deber de
protección contra las violaciones de los derechos humanos cometidas por
empresas, en particular mediante iniciativas de asistencia técnica, fomento
de la capacidad y sensibilización;

c) Inspirarse en estos Principios Rectores para promover el mutuo


entendimiento y la cooperación internacional en la gestión de problemas
relacionados con las empresas y los derechos humanos.
11. Las empresas deben respetar los derechos humanos. Eso significa
que deben abstenerse de infringir los derechos humanos de terceros y
hacer frente a las consecuencias negativas sobre los derechos humanos
en las que tengan alguna participación.

12. La responsabilidad de las empresas de respetar los derechos


humanos se refiere a los derechos humanos internacionalmente
reconocidos – que abarcan, como mínimo, los derechos enunciados en la
Carta Internacional de Derechos Humanos y los principios relativos a 16
los derechos fundamentales establecidos en la Declaración de la
Organización Internacional del Trabajo relativa a los principios y derechos
fundamentales en el trabajo.

13. La responsabilidad de respetar los derechos humanos exige que las


empresas:

a) Eviten que sus propias actividades provoquen o contribuyan a provocar


consecuencias negativas sobre los derechos humanos y hagan frente a
esas consecuencias cuando se produzcan;

b) Traten de prevenir o mitigar las consecuencias negativas sobre los


derechos humanos directamente relacionadas con operaciones, productos
o servicios prestados por sus relaciones comerciales, incluso cuando no
hayan contribuido a generarlos.

14. La responsabilidad de las empresas de respetar los derechos


humanos se aplica a todas las empresas independientemente de su
tamaño, sector, contexto operacional, propietario y estructura. Sin
embargo, la magnitud y la complejidad de los medios dispuestos por las
empresas para asumir esa responsabilidad puede variar en función de
esos factores y de la gravedad de las consecuencias negativas de las
actividades de la empresa sobre los derechos humanos.

15. Para cumplir con su responsabilidad de respetar los derechos


humanos, las empresas deben contar con políticas y procedimientos
apropiados en función de su tamaño y circunstancias, a saber:

a) Un compromiso político de asumir su responsabilidad de respetar los


derechos humanos;

b) Un proceso de diligencia debida en materia de derechos humanos para


identificar, prevenir, mitigar y rendir cuentas de cómo abordan su impacto
sobre los derechos humanos;

c) Unos procesos que permitan reparar todas las consecuencias negativas


sobre los derechos humanos que hayan provocado o contribuido a
provocar.
16. Para asumir su responsabilidad de respetar los derechos humanos, las
empresas deben expresar su compromiso con esta responsabilidad
mediante una declaración política que:

a) Sea aprobada al más alto nivel directivo de la empresa;

b) Se base en un asesoramiento especializado interno y/o externo;

c) Establezca lo que la empresa espera, en relación con los derechos


humanos, de su personal, sus socios y otras partes directamente
vinculadas con sus operaciones, productos o servicios;

d) Se haga pública y se difunda interna y externamente a todo el personal,


los socios y otras partes interesadas;

e) Quede reflejada en las políticas y los procedimientos operacionales


necesarios para inculcar el compromiso asumido a nivel de toda la
empresa.

17. Con el fin de identificar, prevenir, mitigar y responder de las


consecuencias negativas de sus actividades sobre los derechos humanos,
las empresas deben proceder con la debida diligencia en materia de
derechos humanos. Este proceso debe incluir una evaluación del impacto
real y potencial de las actividades sobre los derechos humanos, la
integración de las conclusiones, y la actuación al respecto; el seguimiento
de las respuestas y la comunicación de la forma en que se hace frente a
las consecuencias negativas. La debida diligencia en materia de derechos
humanos:

a) Debe abarcar las consecuencias negativas sobre los derechos


humanos que la empresa haya provocado o contribuido a provocar a
través de sus propias actividades, o que guarden relación directa con sus
operaciones, productos o servicios prestados por sus relaciones
comerciales;

b) Variará de complejidad en función del tamaño de la empresa, el riesgo


de graves consecuencias negativas sobre los derechos humanos
y la naturaleza y el contexto de sus operaciones; c) Debe ser un proceso
continuo, ya que los riesgos para los derechos humanos pueden cambiar
con el tiempo, en función de la evolución de las operaciones y el contexto
operacional de las empresas.

18. A fin de calibrar los riesgos en materia de derechos humanos, las


empresas deben identificar y evaluar las consecuencias negativas reales o
potenciales sobre los derechos humanos en las que puedan verse
implicadas ya sea a través de sus propias actividades o como resultado de
sus relaciones comerciales. Este proceso debe:

a) Recurrir a expertos en derechos humanos internos y/o independientes;


b) Incluir consultas sustantivas con los grupos potencialmente afectados y
otras partes interesadas, en función del tamaño de la empresa y de la
naturaleza y el contexto de la operación.

19. Para prevenir y mitigar las consecuencias negativas sobre los


derechos humanos, las empresas deben integrar las conclusiones de sus
evaluaciones de impacto en el marco de las funciones y procesos internos
pertinentes y tomar las medidas oportunas.

a) Para que esa integración sea eficaz es preciso que:


i) La responsabilidad de prevenir esas consecuencias se asigne a los
niveles y funciones adecuados dentro de la empresa;
ii) La adopción de decisiones internas, las asignaciones
presupuestarias y los procesos de supervisión permitan ofrecer
respuestas eficaces a esos impactos.

b) Las medidas que deban adoptarse variarán en función de:


i) Que la empresa provoque o contribuya a provocar las
consecuencias negativas o de que su implicación se reduzca a una
relación directa de esas consecuencias con las operaciones, productos
o servicios prestados por una relación comercial;
ii) Su capacidad de influencia para prevenir las consecuencias
negativas.

20. A fin de verificar si se están tomando medidas para prevenir las


consecuencias negativas sobre los derechos humanos, las empresas
deben hacer un seguimiento de la eficacia de su respuesta. Este
seguimiento debe: a) Basarse en indicadores cualitativos y cuantitativos
adecuados; b) Tener en cuenta los comentarios de fuentes tanto internas
como externas, incluidas las partes afectadas.

21. Para explicar las medidas que toman para hacer frente a las
consecuencias de sus actividades sobre los derechos humanos, las
empresas deben estar preparadas para comunicarlas exteriormente, sobre
todo cuando los afectados o sus representantes planteen sus inquietudes.
Las empresas cuyas operaciones o contextos operacionales implican
graves riesgos de impacto sobre los derechos humanos deberían informar
oficialmente de las medidas que toman al respecto. En cualquier caso, las
comunicaciones deben reunir las siguientes condiciones: a) Una forma y
una frecuencia que reflejen las consecuencias de las actividades de la
empresa sobre los derechos humanos y que sean accesibles para sus
destinatarios; b) Aportar suficiente información para evaluar si la respuesta
de una empresa ante consecuencias concretas sobre los derechos
humanos es adecuada;28 c) No poner en riesgo, a su vez, a las partes
afectadas o al personal, y no vulnerar requisitos legítimos de
confidencialidad comercial.
22. Si las empresas determinan que han provocado o contribuido a
provocar consecuencias negativas deben repararlas o contribuir a su
reparación por medios legítimos.

23. En cualquier contexto, las empresas deben:

a) Cumplir todas las leyes aplicables y respetar los derechos humanos


internacionalmente reconocidos, dondequiera que operen;

b) Buscar fórmulas que les permitan respetar los principios de derechos


humanos internacionalmente reconocidos cuando deban hacer frente a
exigencias contrapuestas;

c) Considerar el riesgo de provocar o contribuir a provocar violaciones


graves de los derechos humanos como una cuestión de cumplimiento de
la ley dondequiera que operen.

24. Cuando sea necesario dar prioridad a las medidas para hacer frente a
las consecuencias negativas, reales y potenciales, sobre los derechos
humanos, las empresas deben ante todo tratar de prevenir y atenuar las
consecuencias que sean más graves o que puedan resultar irreversibles si
no reciben una respuesta inmediata.

25. Como parte de su deber de protección contra las violaciones de


derechos humanos relacionadas con actividades empresariales, los
Estados deben tomar medidas apropiadas para garantizar, por las vías
judiciales, administrativas, legislativas o de otro tipo que correspondan,
que cuando se produzcan ese tipo de abusos en su territorio y/o
jurisdicción los afectados puedan acceder a mecanismos de reparación
eficaces.

26. Los Estados deben adoptar las medidas apropiadas para asegurar la
eficacia de los mecanismos judiciales nacionales cuando aborden las
violaciones de derechos humanos relacionadas con empresas, en
particular considerando la forma de limitar los obstáculos legales, prácticos
y de otros tipos que puedan conducir a una denegación del acceso a los
mecanismos de reparación.

27. Los Estados deben establecer mecanismos de reclamación


extrajudiciales eficaces y apropiados, paralelamente a los mecanismos
judiciales, como parte de un sistema estatal integral de reparación de las
violaciones de los derechos humanos relacionadas con empresas

28. Los Estados deben estudiar la forma de facilitar el acceso a los


mecanismos de reclamación no estatales que se ocupan de las
violaciones de los derechos humanos relacionadas con empresas.

29. Para que sea posible atender rápidamente y reparar directamente los
daños causados, las empresas deben establecer o participar en
mecanismos de reclamación eficaces de nivel operacional a disposición de
las personas y las comunidades que sufran las consecuencias negativas.

30. Las corporaciones industriales, las colectividades de múltiples partes


interesadas y otras iniciativas de colaboración basadas en el respeto de
las normas relativas a los derechos humanos deben garantizar la
disponibilidad de mecanismos de reclamación eficaces.

31. Para garantizar su eficacia, los mecanismos de reclamación


extrajudiciales, tanto estatales como no estatales, deben ser:

a) Legítimos: suscitar la confianza de los grupos de interés a los que


están destinados y responder del correcto desarrollo de los procesos de
reclamación;

b) Accesibles: ser conocidos por todos los grupos interesados a los que
están destinados y prestar la debida asistencia a los que puedan tener
especiales dificultades para acceder a ellos;

c) Predecibles: disponer de un procedimiento claro y conocido, con un


calendario indicativo de cada etapa, y aclarar los posibles procesos y
resultados disponibles, así como los medios para supervisar la
implementación;

d) Equitativos: asegurar que las víctimas tengan un acceso razonable a


las fuentes de información, el asesoramiento y los conocimientos
especializados necesarios para entablar un proceso de reclamación en
condiciones de igualdad, con plena información y respeto;

e) Transparentes: mantener informadas a las partes en un proceso de


reclamación de su evolución, y ofrecer suficiente información sobre el
desempeño del mecanismo, con vistas a fomentar la confianza en su
eficacia y salvaguardar el interés público que esté en juego;

f) Compatibles con los derechos: asegurar que los resultados y las


reparaciones sean conformes a los derechos humanos internacionalmente
reconocidos;

g) Una fuente de aprendizaje continuo: adoptar las medidas pertinentes


para identificar experiencias con el fin de mejorar el mecanismo y prevenir
agravios y daños en el futuro; Los mecanismos de nivel operacional
también deberían:

h) Basarse en la participación y el diálogo: consultar a los grupos


interesados a los que están destinados sobre su diseño y su
funcionamiento, con especial atención al diálogo como medio para
abordar y resolver los agravios.

7. ¿QUÉ COMPROMISOS TIENE EL ESTADO DE CHILE, EN


RELACION A LOS DD.HH. Y LA ACTIVIDAD EMPRESARIAL?

RESPUESTA:
En el marco de la publicación de los Principios Rectores sobre las
Empresas y los Derechos Humanos de Naciones Unidas, que Chile
suscribió como miembro del Consejo de Derechos Humanos de la
ONU; en 2013 el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo creó el
Consejo de Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible,
instancia público-privada que tenía por finalidad elaborar políticas
públicas en materia de responsabilidad social, con el objeto de
contribuir al cuidado del medio ambiente y bienestar social.

En el ámbito de sus labores, la entidad encomendó al Ministerio de


Relaciones Exteriores la elaboración de un plan de acción en derechos
humanos y empresas, proyecto fortalecido en el III Foro Anual de
Derechos Humanos y Empresas de Naciones Unidas, realizado en
Ginebra en diciembre de 2014, donde se comprometió
internacionalmente el desarrollo de la iniciativa. En tal contexto, el Plan
de Acción Nacional de Derechos Humanos y Empresas (PAN) fue
publicado oficialmente el 21 de agosto de 2017, con el objeto de
incorporar un enfoque de derechos humanos en el quehacer diario de
las empresas, a través de la adopción de los Principio Rectores Sobre
las Empresas y los Derechos Humanos. Luego de ser traspasado
desde el Ministerio de Relaciones Exteriores al Ministerio de Justicia y
Derechos Humanos, que delegó su coordinación a la Subsecretaría de
Derechos Humanos, la institución asumió la Secretaría Ejecutiva del
Comité Interministerial de Derechos Humanos y Empresas. En
términos generales, el trabajo de la Subsecretaría de Derechos
Humanos en torno al proceso de implementación del se ha focalizado
en tres líneas de acción:

 Consolidar la agenda de derechos humanos y empresas en la


actividad empresarial.
 Cumplimiento de la primera versión del plan.
 Proceso de elaboración de la segunda versión de la política pública.

La Subsecretaría de Derechos Humanos ha desarrollado iniciativas


orientadas a consolidar una cultura de respeto de los derechos
humanos en la actividad empresarial, transmitiendo la relevancia de
incorporar el enfoque de derechos en el quehacer de las empresas. En
marzo de 2019, la institución suscribió un convenio de colaboración
con la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), con el
objeto de promover acciones conjuntas en capacitación y promoción de
derechos humanos en el ámbito empresarial, considerando los
Principios Rectores que estableció Naciones Unidas (2011) en la
materia. En la misma línea, se han desarrollado encuentros con
gremios empresariales, donde se ha transmitido la relevancia de
incorporar el enfoque de derechos humanos en sus empresas socias,
donde se destacan reuniones con representantes del Consejo Minero
(2019), Cámara de Comercio de Santiago (2019), Generadoras de
Chile (2019), Bolsa de Santiago (2020), Confederación de la
Producción y el Comercio (2020) y Salmón Chile (2020). Por otro lado,
la Subsecretaría de Derechos Humanos participó activamente en el
proyecto “Guías Chile de Derechos Humanos y Empresas”,
desarrollado por Fundación Casa de la Paz en 2020. La iniciativa
consistió en la elaboración de dos guías con recomendaciones para
que las empresas integren a sus prácticas el enfoque de derechos
humanos, enfatizando el cuidado de grupos de especial protección:
migrantes y adultos mayores. En términos internacionales, la institución
ha mencionado la relevancia de fortalecer la agenda en derechos
humanos y empresas, destacando los progresos del Plan de Acción
Nacional (PAN) en la materia. En términos específicos, ha participado
en el Foro de Empresas y Derechos Humanos de Naciones Unidas
(2018 y 2019), Consulta Regional sobre Empresas y Derechos
Humanos para América Latina y el Caribe (2019) y Foro Regional
sobre Planes Nacionales de Acción y Políticas Públicas en Empresas y
Derechos humanos (2019 y 2020). En el marco de la propagación
global del COVID-19, la entidad fortaleció las acciones orientadas a
incorporar los derechos humanos al quehacer empresarial,
considerando las implicancias de la emergencia sanitaria en las
empresas. En tal contexto, se organizó el seminario “Mensajes Clave
de los Instrumentos Internacionales sobre Conducta Empresarial
responsable: Retos y Oportunidades para su Implementación en Chile”,
con el objeto de analizar los nuevos desafíos en la materia. Fue
realizado en junio de 2020, en colaboración con la Subsecretaría de
Relaciones Económicas Internacionales, considerando la alianza con el
proyecto Conducta Empresarial Reponsable en América Latina y
Caribe (CERALC), financiado por la Unión Europea. En la misma línea,
la Subsecretaría suscribió un convenio de colaboración con la
Organización Internacional del Trabajo (OIT) y Fundación Chile
Mujeres, con el objeto de elaborar un manual de buenas prácticas para
el teletrabajo. La iniciativa fue publicada oficialmente el viernes 5 de
marzo del año en curso, con el horizonte de orientar la adopción de
mejores prácticas en la materia, enfatizando temas relacionados a
derechos humanos y género. El desarrollo de la iniciativa fue apoyado
por el Comité 360, instancia liderada por la Subsecretaría de Derechos
Humanos. En términos específicos, el grupo fue convocado en octubre
de 2020, con el objeto de recoger sus perspectivas sobre la materia, lo
que contribuyó a enriquecer el manual.

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