Arbotantes Craneales
Arbotantes Craneales
Arbotantes Craneales
Neuroanatomía
ARBOTANTES CRANEALES:
IMPLICANCIA ANATÓMICA EN FRACTURAS.
Craneal Buttress: Anatomical Implication in Fractures.
Resumen Abstract
At the present time cranial traumatisms, and therefore fractures of greater complexity exist
En la actualidad existen cada vez más traumatismos encefalocraneales, y por lo tanto more and more as a consequence of the technology advance.
fracturas de mayor complejidad producto del avance de la tecnología. El objetivo de este
trabajo es instaurar una clasificación regional de fracturas en relación a los arbotantes y The objective of this work is to establish a regional classification of fractures in relation to
analizar el comportamiento de cada tipo de fractura a fin de aportar herramientas para el the buttresses and to analyze the behaviour of each type of fracture in order to contribute
manejo del trauma craneal tools concerning the handling of the cranial trauma.
Se analizaron 12 cráneos humanos sometidos a máxima presión a fin de evaluar el Twelve human skulls submitted to maximum pressure were analyzed in order to regionally
comportamiento de los trazos fracturarios en relación a sus zonas fuertes y débiles evaluate the behaviour of the fracturary outlines in relation to their strong and weak zones
clasificándose regionalmente a las fracturas de cráneo según sus áreas débiles o regiones classifying the skull fractures according to their weaker areas or regions in: class I, class II,
en: clase I, clase II, y clase III, realizándose luego su comparación con 82 pacientes and class III, making its comparison with 82 patients who were admitted with diagnosis of
ingresados con diagnostico de traumatismo de cráneo y fractura de cráneo asociada. traumatism and associated fracture of skull.
Existe una mayor incidencia de hombres (82,5%), y una edad media de 33,21 años, A greater incidence of male (82.5%) was analyzed, and one average age of 33.21 years,
relacionándose con etiología, trauma abierto, aparición de fistulas, fracturas del macizo being related to etiology, open trauma, appearance of fistulas, fractures of the face bulk,
facial, Glasgow coma scale, pacientes operados (21,2%) y Glasgow outcome scale. Glasgow coma scale, operated patients (21.2%) and Glasgow outcome scale.
El esqueleto craneal, recubierto exteriormente por un periostio delgado esta tapizado en su Cranial skull is covered outside by periosteum and is upholster inside by dura. These bones
cara interna por la duramadre. Estos huesos están constituidos por dos láminas de tejido are made out of two sheets of compact tissue, the internal tablet and the external one.
compacto, la lámina o tabla interna y la lámina o tabla externa, entre las cuales se Between the sheets there is a spongy tissue layer called diploe which influences directly on
interpone una capa más o menos gruesa de tejido esponjoso llamado diploe que influye the fracture index.
directamente sobre su índice de fractura.
We consider that the anatomical knowledge of the cranial region and its buttresses, as well
Consideramos que el conocimiento anatómico de la región craneal y de sus arbotantes, así as a regional classification of its weaker areas, is an anatomical tool that allows to infer the
como una clasificación regional de sus áreas débiles, es una herramienta anatómica que behavior of the fractures, its correlation with encephalic injuries and therefore the prognosis
permite inferir el comportamiento de las fracturas, su correlación con lesiones encefálicas y of the patient, as well as in the bioengineering for the conformation of security elements
por consiguiente el pronóstico del paciente, así como también en la bioingeniería para la before the cranial trauma.
conformación de elementos de seguridad ante el trauma craneal.
PALABRAS CLAVE: arbotantes craneales; cráneo; fracturas; trauma craneal; glasgow coma KEY WORDS: craneal buttress; skull; fractures; head trauma; glasgow coma scale
scale.
* Autor: *1-6 Jefe de Trabajos Prácticos, Tercera Cátedra de Anatomía, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires. *2Auxiliares Docentes, Tercera Cátedra de Anatomía,
Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires.
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El espesor de los huesos que conforman el cráneo se haya Hay que tener en cuenta, además, que los sostenes mismos
repartido desigualmente, pero no sin orden; ya que al lado de presentan puntos débiles, precisamente por ellos es por donde las
porciones gruesas y sólidas se encuentran segmentos delgados y irradiaciones de las fracturas pasan de un área débil a otra o, si se
poco resistentes. Teniendo en cuenta la situación recíproca de prefiere, de uno de los compartimientos al inmediato. El punto
estos <puntos fuertes> y de estos <puntos débiles>, puede decirse débil del sostén frontoetmoidal esta a nivel de la lamina cribosa del
esquemáticamente que el cráneo está construido por el estilo de etmoides; el del sostén occipital está situado por detrás de cada
un barco, con una armazón solida (parte reforzada o arbotantes) y, cóndilo occipital. En cuanto a los puntos débiles de los sostenes
en los intervalos, por piezas más débiles (Zins y Whitaker, 1983). laterales, ocupan, para el sostén orbitoesfenoidal, el punto de
En base a esta comparación, en un barco los puntos de resistencia implantación de las alas del esfenoides (agujero óptico, hendidura
(puntos fuertes) son: una pieza anteroposterior, la carena, piezas esfenoidal, agujero redondo mayor y oval, etc.), y para el sostén
laterales o varengas y el puente (figura 1). petromastoideo, la porción del peñasco donde están excavadas la
cavidades del oído. Finalmente otro de los puntos débiles es el
punto de unión de los sostenes con la pieza basilar.
MATERIALES Y MÉTODO.
Fig. 1. Estructuras que componen el armazón de un barco en
similitud con las estructuras de soporte craneal. Se analizaron 12 cráneos humanos sometidos a máxima presión a
fin de evaluar el comportamiento de los trazos fracturarios en
En el cráneo, la pieza basilar extendida del agujero occipital a la relación a sus zonas fuertes y débiles, realizándose luego su
silla turca corresponde a la carena, mientras que la pieza sincipital comparación con 82 pacientes ingresados al Hospital Militar
corresponde al puente. En cuanto a las varengas, están Central y Hospital Luciano de la Vega entre enero del 2005 y
representadas por seis zonas espesas, de las cuales una es enero de 2009 con diagnostico de traumatismo de cráneo y
anterior y la otra posterior, y las otras cuatro laterales, son fractura de cráneo asociada, mediante un análisis retrospectivo de
simétricas de dos en dos. las historias clínicas y tomografías de cerebro, excluyéndose
aquellos que tenían compromiso de otra cavidad politraumatismo).
Estas seis piezas de refuerzo que no son otras que los arbotantes Definimos a los arbotantes en medial anterior, medial posterior,
de cráneo descriptos por Felizet, se encuentran conformadas por lateral anterior y lateral posterior (figura 2).
un arbotante anterior ubicado en la región frontoetmoidal y que
une la pieza la pieza sincipital a la pieza basilar; uno posterior,
representado por la pieza occipital que va del sincipucio a la pieza
basilar, después de haber rodeado el agujero occipital; dos
anterolaterales, conformados por las piezas orbitoesfenoidales,
uniéndose con la base por el ala menor del esfenoides, y por
último; dos posterolaterales, representados por las piezas
petromastoideas extendidas del sincipucio a la mastoides y de
ésta, por el peñasco, hasta la apófisis basilar (Testut y Latarjet,
1984). Entre los puntos reforzados o arbotantes, el tejido óseo es
delgado o frágil para formar las áreas intermedias a los sostenes
(puntos débiles). Estas superficies son en número de tres.
Primero, el área frontoesfenoidal, que corresponde al
compartimiento anterior de la base. Segundo, el área
esfenopetrosa, que constituye el compartimiento medio y tercero, Fig. 2. Vista basal craneal (A), superior (B), inferior (C) y
el área occipitopetrosa, que forma el compartimiento posterior. lateral (D); los arbotantes (verde ) medial anterior (MA), medial
posterior (MP), lateral anterior (LA) y lateral posterior (LP),
así como la pieza basilar (PB) y la pieza sincipital (PS) (rojo).
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En base a esta definición, se clasificó regionalmente a las fracturas Así por ejemplo en una fractura clase II el sitio de impacto se sitúa
de cráneo según sus áreas débiles o regiones en: clase I, situadas entre los arbotantes laterales anterior y posterior (figura 4); o bien
entre el arbotante medial anterior y lateral anterior; posterior; y una fractura clase II-II (figura 5) donde el sitio de impacto se ubica
clase III entre el lateral posterior y medial posterior (figura 3). entre los arbotantes laterales anterior y posterior (clase II),
continuándose hacia el lado opuesto, atravesando la pieza basilar,
continuando hacia la región entre los arbotantes laterales anterior
y posterior contralaterales (clase II).
RESULTADOS.
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accidente de moto sin casco (36,8%). Por otro lado la presencia de que cuando hay dos regiones involucradas, este porcentaje se
tres regiones comprometidas está ligada fuertemente a una caída incremente significativamente (30,9%), siendo del 100% cuando
superior a los 3 metros (100% de los casos de sujetos con tres hay tres regiones comprometidos (figura 9).
regiones involucradas) (figura 7). No se observó que una relación
significativa entre clases de fracturas particulares y causa del
trauma Asociación lineal por lineal χ2(1) =,035; p = 0,85.
Fig. 7. Cuadro donde se evidencia el porcentaje de distribución de Fig. 9. Cuadro donde se evidencia la relación entre cantidad de
las diferentes etiologías del trauma con respecto a la cantidad de regiones comprometidas y la existencia o no de fístula de liquido
regiones comprometidas. cefalorraquídeo.
Relación entre clases de fracturas y Trauma Abierto. A su vez encontramos una relación significativa entre clases de
Se observa una relación significativa entre la cantidad de regiones fracturas y aparición de Fístulas (Asociación lineal por lineal χ2 =
comprometidas y trauma abierto o cerrado. Asociación lineal por 17,266; p < 0,001). Teniendo en cuenta que la ausencia de fístulas
lineal χ2(1) = 5,322; p < 0,05. De acuerdo con este análisis en es lo más frecuente (81,2%), se observó que su aparición está
general hay una mayor frecuencia hacia un trauma abierto más fuertemente relacionada con las clases II-I-III y II-III-III (100%
(59,3%), mientras que particularmente la frecuencia con una para cada una), y por aquellas que impliquen las fracturas clase I
región comprometida tiende a ser similar en el trauma abierto y (100%) (figura 10).
cerrado. En cambio cuando la cantidad de regiones es superior a
dos, la frecuencia parece inclinarse al trauma abierto (69,6% de Fig. 10. Cuadro
los casos con dos regiones comprometidas, y 100% de los casos donde se
con tres regiones comprometidas) (figura 8). evidencia la
relación entre las
Relación entre clases de fracturas y Aparición de Fístulas de diferentes clases
líquido cefalorraquideo. de fracturas y la
Se observa una relación significativa entre la cantidad de regiones existencia de
comprometidas y la aparición de Fístulas (Asociación lineal por fístula de liquido
lineal χ2(1)= 18,221; p < 0,001). Cuando hay una región cefalorraquídeo.
comprometida, la aparición de fístulas es escasa (7,2%), mientras
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Relación entre clases de fracturas y fracturas del macizo facial (Le es poco significativa la presencia de cirugía (2,5% de los casos),
Fort). pero cuando la cantidad de regiones asciende a dos y tres la
Se observa una relación significativa entre las regiones frecuencia de cirugía tiende a ser del 50% de los casos (figura 14).
comprometidas y las fracturas del macizo facial o fracturas de Le
Fort (tabla 1) (Asociación lineal por lineal χ2(1) = 4,225; p <0,05.)
De acuerdo con este estudio, si bien la mayor frecuencia está
dada por ausencia de fracturas de macizo facial (85,7%), cuando
existe fracturas clase I evidenciamos una clara preponderancia de
fracturas de macizo facial (98,2%) (figura 11), existiendo, a su vez,
una relación significativa en fracturas Le Fort III (100%) con
fractura que incluyan clase I (p<0.05).
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Cooper PR. Head injury. Baltimore, Williams & Wilkins. Vol 2, p 65-68,
1987.
Los casos con compromiso de dos o más regiones agravan Tiedemann K. Gross sectional anatomy. In: Ja-necka IP. Skull Base
francamente el estado del paciente y por consiguiente su Surgery: Anatomy, Biology, and Technology. Philadelphia, Pa: Lippincott-
pronóstico, evidenciado por mayor incidencia de trauma abierto Raven; 75-149, 1997.
conllevando mayor probabilidad de infección aumentando la
morbimortalidad; menores valores de GCS de ingreso y por Tuli S, Tator CH, Fehlings MG, Mackay M. Occipital condyle fractures.
Neurosurgery 1997, 41(2): p. 368-376.
consiguiente mayor incidencia de cirugías. A su vez, a mayor
número de regiones involucradas, menor es el GOS estableciendo Zins JE, Whitaker LA: Membranous versus endochondral bone:
una relación inversamente proporcional, siendo considerablemente Implications for craniofacial reconstruction. Plast Reconstr Surg 1983,
peor el pronóstico ante el compromiso de dos o más de estas 72:778-785.
regiones.
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