Lingüística Objetivos
Lingüística Objetivos
Lingüística Objetivos
Objetivo[editar]
El objetivo de la lingüística teórica es la construcción de una teoría general de la estructura de
las lenguas naturales y del sistema cognitivo que la hace posible, es decir, las
representaciones mentales abstractas que hace un hablante y que le permiten hacer uso del
lenguaje.
El objetivo es describir las lenguas caracterizando el conocimiento tácito que los hablantes
tienen de ellas y determinar cómo las adquieren estos. Ha existido cierta discusión sobre si la
lingüística debe considerarse una ciencia social o más bien parte de la psicología. En las
ciencias sociales la conciencia de los participantes es parte esencial en el proceso; sin
embargo, la conciencia de los hablantes no parece desempeñar ningún papel relevante ni en
el cambio lingüístico, ni en la estructura de las lenguas. Aunque ciertamente la conciencia del
hablante sí tiene un papel en áreas incluidas normalmente dentro de la lingüística, como
la sociolingüística o la psicolingüística, esas dos áreas no son el núcleo principal de
la lingüística teórica sino disciplinas que estudian aspectos colaterales del uso del lenguaje.
El objetivo de la lingüística aplicada es el estudio de la adquisición del lenguaje y la aplicación
del estudio científico de la lengua a una variedad de tareas básicas como la elaboración de
métodos mejorados de enseñanza de idiomas. Existe un considerable debate sobre si la
lingüística es una ciencia social, ya que solo los seres humanos usan las lenguas, o
una ciencia natural porque, aunque es usada por los seres humanos, la intención de los
hablantes no desempeña un papel importante en la evolución histórica de las lenguas ya que
usan las estructuras lingüísticas de manera inconsciente. Esto fue estudiado por F. de
Saussure, quien llegó a la conclusión de que los cambios de una lengua se producen
arbitrariamente por variaciones involuntarias que realiza el sujeto, y que la lengua varía en la
historia. Por eso plantea que el estudio de la lengua debe realizarse diacrónica y
sincrónicamente. En consecuencia, Saussure deja a un lado la historia de las lenguas y las
estudia sincrónicamente, en un momento dado del tiempo. En particular, Noam
Chomsky señala que la lingüística debe ser considerada parte del ámbito de la ciencia
cognitiva o la psicología humana, ya que la lingüística tiene más que ver con el
funcionamiento del cerebro humano y su desarrollo evolutivo que con la organización social o
las instituciones, que son el objeto de estudio de las ciencias sociales.
Para situar el ámbito o el objetivo de una investigación lingüística, el campo puede dividirse en
la práctica según tres dicotomías importantes: