Modos de Adquirir La Propiedad
Modos de Adquirir La Propiedad
Modos de Adquirir La Propiedad
Definición. “Un concepto que tiene raíces en el derecho romano sostiene que los civilistas,
especialmente los latinos, denominan modos de adquirir la propiedad a aquellos actos
jurídicos, o en oportunidades simplemente hechos que tienen por objeto y dan como
resultado precisamente la adquisición del derecho de propiedad sobre un bien”.3 En
algunos casos, y para ciertos supuestos, la palabra modo se emplea como en contraposición
a la palabra título, a efecto de resaltar, en la teoría del titulo y del modo, uno de los dos
elementos requeridos para la adquisición del dominio. “Los modos de adquirir la propiedad
son aquellos hechos jurídicos a los cuales la ley reconoce la virtud de hacer surgir el
dominio de un determinado sujeto”.4 Los hechos a los que se refiere la doctrina, pueden
devenir de la naturaleza como en el caso de aluvión; de la legislación, como en el caso de la
expropiación forzosa, y de la voluntad humana plasmada en la realización contractual,
constituyendo los dos últimos, en rigor de la técnica, actos jurídicos por ser calificadas por
la participación del hombre. En el derecho romano la propiedad podía adquirirse de dos
maneras: per universitatem (a titulo universal) y a título singular. Se realizaba la
adquisición en la primera forma cuando el adquiriente sucedía al transmisor en una
universalidad patrimonial, todos sus elementos activos y pasivos, derechos reales, créditos
y 3 Brañas, Alfonso. Manual de derecho civil. pág. 309,310. 4 Vásquez Ortiz, Carlos.
Derecho civil sustantivo los bienes y demás derechos reales. pág. 39. 28 obligaciones. Se
operaba este medio principalmente en la sucesión por causa de muerte. Se adquiría a título
singular cuando la adquisición tenía por objeto una o más cosas singulares. “Los medios de
adquirir el dominio a titulo singular se dividían en dos clases: medios del derecho civil (ius
civile ) y medios del ius gentium. Los primeros fueron instituidos por el ius civile, con
destino exclusivo a los ciudadanos romanos. Los segundos fueron creación del ius gentium,
y se extendían a los no ciudadanos, como a los peregrinos. Los medios adquisitivos propios
del ius civile fueron: la mancipatio, la in iure cessio, la usucapio, la adjudicatio y la lex. Los
del ius gentium fueron: la ocupación, la tradición, la accesión, la especificación, la
percepción de frutos, la confusión y la commixtio”.5 Dicho autor hace referencia también
de cómo se regulaban los modos de adquirir la propiedad dentro del derecho civil en época
romana, de lo cual se hace un breve resumen a continuación:
Mancipatio. Era una transmisión del derecho de dominio de una persona a otra bajo el
símbolo de una venta y con el empleo de la forma ritual y solemne denominada per aes et
libram. Debían comparecer el enajenante y el adquiriente en presencia de cinco ciudadanos
romanos púberes y otro ciudadano que en ese acto solemne se denominaba libripens, el cual
tenía en sus manos una balanza. El adquiriente afirmaba su derecho de dominio en términos
solemnes golpeando la balanza con una moneda de cobre que entregaba al enajenante como
símbolo de precio. El enajenante asentía a todo aquello y de ese modo quedaba operada la
adquisición, quedando el adquiriente como propietario ex iure quiritium (propietario
quiritario). 5 Medellin, Carlos. Lecciones de derecho romano. pág. 83. 29 La mancipatio
daba el dominio al adquiriente, mas por si sola no le daba la posesión, si la cosa no era
materialmente entregada por el enajenante.
In iure cessio. Era un medio solemne y simbólico. Las dos partes enajenante y adquiriente,
comparecían ante el magistrado figurando un juicio de reivindicación de la cosa cuyo
dominio pretendía adquirirse. Si la cosa era mueble o el fragmento de ella. El adquiriente,
tocando la cosa mueble o el fragmento del inmueble afirmaba, en presencia del magistrado
y del enajenante, ser suya, según el derecho civil. El enajenante declaraba ser cierta tal
afirmación y en vista de ello el magistrado declaraba propietario al adquiriente.
Ocupación de bienes muebles. Dispone que pueden adquirirse por ocupación, las cosas
muebles o semovientes (ganado de cualquier especie) que no pertenecen a ninguno,
observándose lo dispuesto en leyes especiales (Artículo. 589). Especifica el Código que son
bienes muebles que pueden ser objeto de ocupación, las piedras, conchas y otras
substancias que se encuentren en las riberas del mar, de los ríos y arroyo de uso público y
que no presentan señales de dominio anterior; y que pueden también ser objeto de
ocupación las cosas cuya propiedad abandonan voluntariamente su dueño (Artículo. 591).
Respecto a los bienes inmuebles, dispone el Código que no pueden adquirirse por
ocupación; los que no están reducidos a propiedad particular, pertenecen a la nación
(Artículo. 590).
Ocupación de bienes mostrencos. Según el Código Civil, es bien mostrenco todo bien
mueble o semoviente (ganado de cualquier especie), al parecer extraviado y cuyo dueño se
ignore (Artículo 596). El Código regula esta clase de ocupación obligando a informar a la
autoridad municipal más cercana sobre el encuentro de uno de esos bienes, para que haga
pública esa circunstancia, fije un término a fin que se presente el dueño, y si no apareciere
proceda a la venta en pública subasta de lo encontrado. A la persona que hubiere
encontrado el bien corresponde el diez por ciento del valor de la venta más el pago de los
gastos. Leyes especiales de carácter administrativo regulan la ocupación de animales sin
dueño, tales por ejemplo, las relativas a la caza y pesca, enjambres de abejas, etc.
http://biblioteca.usac.edu.gt/tesis/04/04_7792.pdf