Angela Valle

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EDICIÓN BICENTENARIO

NADA ES DE NADIE NUNCA


Ángela Valle
POETAS DEL BICENTENARIO

NADA ES DE NADIE NUNCA


Ángela Valle
MARY MORALES
"Pájaro vio el cielo y se voló"
acrílico sobre lienzo
2021
Nada es de nadie nunca
Ángela Valle
Colección: Poetas del Bicentenario. N° 6.

La imagen de portada de esta plaquette digital es una pintura que tiene por título “El pájaro vio el cielo
y se voló” de la joven pintora hondureña Mary Morales, promesa de nuestro arte.

Editores: Armando Maldonado, Salvador Madrid y Néstor Ulloa.


Conceptos y diseños: Ediciones MALPASO.
Corrección: Iveth Vega.
Distribución y promoción: Diario EL HERALDO y Diario LA PRENSA.

Director del Festival de Los Confines: Salvador Madrid.


Jefa de redacción de Diario EL HERALDO: Glenda Estrada.

Esta breve colección de poemas es de libre circulación. No se permite su comercialización.


Se permite citar los textos para fines académicos, de investigación o de enseñanza, siempre
y cuando se den los créditos de autoría.

Una producción de Inversiones Culturales Honduras para el Festival de Los Confines 2021.
HONDURAS DE LA POESÍA

Un país es una memoria que se forma con el testimonio de sus seres humanos.
A veces ese testimonio es dulce y hermoso, otras veces, es amargo y cruel; pero
lo más importante es comprender que los hombres, las mujeres, las niñas y los
niños, siempre tendrán la posibilidad de soñar y transformar la historia de su
patria.

Honduras desde siempre ha sido un país de poetas luminosos cuyas creaciones


han celebrado la vida y el amor, han sido severas contra el poder infame y la
injusticia; con claridad han ofrecido profundas miradas a través del tiempo,
especialmente donde la historia ha callado o donde el poder ha pretendido
borrar la verdad.

La poesía en cierto modo es el arte de contener un instante, un maravilloso don


humano que emerge como evidencia sensible de un testimonio esencial por
medio de las palabras.

Diario EL HERALDO y Diario LA PRENSA, en el Bicentenario de la


Independencia de Honduras y Centroamérica, le invitan a conocer algunas de
las voces más relevantes de la poesía hondureña en la colección de "Poetas del
Bicentenario" que ha preparado el Festival de Los Confines, junto con Ediciones
Malpaso y Editorial Efímera con el apoyo de la Unión Europea, Centro Cultural
España en Tegucigalpa, Gobierno de la República de Honduras, Plan
International Honduras y la Universidad Pedagógica Nacional Francisco
Morazán, para que miles de personas puedan acceder de manera gratuita a la
lectura, contribuyendo de este modo a la educación y al conocimiento de
nuestra cultura.

Lea y comparta la poesía de Honduras, eso nos permitirá conocer ese otro país
que soñamos: justo y equitativo, nuestro al fin, luminoso como el sol de las
mañanas para que alumbre el presente y el futuro de nuestra tierra.
Ángela Valle
ÁNGELA VALLE

Nació en Comayagüela en 1927 y murió en 2003. Entre


sus obras destacan Iniciales (1961) y Lúnulas (1969). Fue
redactora de los diarios El Día y El Pueblo.
En 1967 la Escuela Superior de Profesorado Francisco
Morazán le otorgó el Primer Premio Nacional de Poesía
Juan Ramón Molina.
CERTIDUMBRE

Porque me cedes la palabra, digo:


Nada es de nadie nunca. Y sin embargo
cómo nos afanamos todos, todos,
en retener, en poseer algo precioso.

Nadie es de nadie nunca, ni los hijos.


Ni el más cercano amor, ni el más lejano.
¡Y cómo nos besamos! ¡Con que estrago
se nos va incinerando en eso el cuerpo!

El, que me juraba, lo sabía.


Nada era de él, y nada mío
¡y éramos dueños aún del infinito…!

Era tan solo de los dos, la idea


devoradora, torturante y cierta:
¡Nadie es de nadie solo que lo quiera!

8
LOS DESHEREDADOS

Grande es la tierra, amado, sin embargo, no es nuestra.


Tú y yo desposeídos vagabundos que sueñan,
jamás hemos tenido siquiera una parcela
para fijar el nido y arraigar en ella.

Grande es la tierra, amado, y más que nada buena,


Yaciendo en su regazo tibio como la abuela,
nuestros besos han sido temblor de vida nueva.
(Ni un acre de tierra daremos en herencia).

¡Oh! tal vez nuestros hijos amarían más la patria


conscientes y seguros , si nos perteneciera
un huerto familiar, girando con la esfera…

Así como nosotros, hay millones de seres.


Nacer, crecer, amar, parir, morirse un día,
sin que una sola cuarta de tierra se posea…

9
REVUELO

Mira que tu llegada


Me ha aturdido los pájaros del alma…
Que tu sola mirada
Causó revuelo a mis aves enlutadas…
Mi aletear insólito
se ha dejado escuchar con tu presencia.
Mira que temblorosas
buscan el nido y lloran al no hallarte.
Debes saber que han huido
sacudidas por vientos inauditos
las golondrinas de mis sueños, lejos
desde que tú has venido.
Ven, encierra una a una
con amorosa mano las bandadas
que asustadizas vuelan
y por la tarde de la vida anidan
bajo tu alero, amor, y para siempre.

10
POEMA A LA NIÑA NUEVA

Para Katia

Hay una niña nueva este lunes. Acaso


se formó su mirada a la luz de los astros.

Su piel novísima es pétalo, seda, lirio nonato


sus manos son tan finas, sus deditos son blancos.

La suave lana de los cobertores la envuelve cálida


y hay un aroma grato de talco y leche de madre.

Rodeándola; se encuentran sobre su cuerpo endeble


las miradas de todos interrogantes, leves.

Penetrar a su alcoba es casi prohibido, tiene


mil guardianes esquivos que firmes la protegen.

Nuestras pisadas toman cariz de vuelapluma


al querer acercarnos ansiosos a su cuna.

Hay una niña nueva en la familia ahora


sonrosada, dormida, pequeñita, graciosa.

Sobre el velo vital que le guardaba, irrumpe


como una maravilla de níveo capullo.

Para qué en el transcurso de la vida, sonría


y pronuncie mi nombre su dulce vocecita.

Pedacitos de concha de nácar sus uñas finas


y surcos de emoción todas sus arruguitas.

Para que cubra el patrio sus pasos felices


y sea verdad, amado, todo lo que me dices.

11
LAS CASAS
DONDE HE VIVIDO

Las casas donde yo he vivido, de construcciones tan variables,


que hoy tenían portón y aldaba y mañana verjas y enjambres
a la orilla de callejuelas tortuosas e intransitables,
acogieron mi permanencia en ellas como las madres,

Eran el nido de ocasión para mis labios y mis oídos.


Sus techos como ramajes abríanse contra los vientos y alejábanse
bajo la lluvia y contra el odio, cubriéndome, quietos mares,
con dureza firme y tensa, de la intemperie y las maldades.

Eran para mi ser amigas acogedoras de aleros gratos,


baluarte que mi desvalida presencia abrigaron. Sauces
acunándose, navíos surtos en bahías sondeables.

Yo las recuerdo a todas horas, las pueblerinas, las de ciudades


y en cada una deposito mi palabra como una llave.

12
LAS CALLES SON LAS MISMAS

Las calles son las mismas, iguales los andenes,


las paredes prosiguen su rutina de guardia,
solo es diferente
el amor que se escapa de mí.

Las mismas personas nos rodean,


iguales las horas y los días,
y tan solo es distinto el saber que te amo.

Igual es mi ropaje y tu afán proletario


al de todas las gentes que nos miraron siempre
solo que hoy, el amor sobredora las cosas.

Y nos hace sentirnos como a dos escogidos,


silenciosos al vernos con las almas ardientes,
Abrasados de un fuego sin ascuas que sonroja

13
ÍNDICE

3 “El pájaro vio el cielo y se voló” de la pintora

Mary Morales

5 Honduras de la poesía

6 Fotografía de Ángela Valle

7 Biografía de Ángela Valle

8 Certidumbre

9 Los desheredados

10 Revuelo

11 Poema a la niña nueva

12 Las casas donde he vivido

13 Las calles son las mismas


POETAS DEL BICENTENARIO

Gracias al apoyo de

Inversiones
Culturales
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