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La Alimentacion
La alimentación es la ingesta de alimentos por parte de los organismos para obtener energía y nutrición. En los seres humanos, factores como gustos, edad, actividad física, economía e cultura influyen en la alimentación. Las plantas realizan la fotosíntesis para producir sus propios alimentos, mientras que los animales obtienen nutrientes a través de la digestión de otros organismos. Promover una alimentación saludable requiere esfuerzos coordinados entre gobiernos, sector público y privado para crear un entorno
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La alimentación es la ingesta de alimentos por parte de los organismos para obtener energía y nutrición. En los seres humanos, factores como gustos, edad, actividad física, economía e cultura influyen en la alimentación. Las plantas realizan la fotosíntesis para producir sus propios alimentos, mientras que los animales obtienen nutrientes a través de la digestión de otros organismos. Promover una alimentación saludable requiere esfuerzos coordinados entre gobiernos, sector público y privado para crear un entorno
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LA ALIMENTACION
La alimentación es la ingestión de alimento por parte de los organismos para proveerse
de sus necesidades alimenticias, fundamentalmente para conseguir energía y desarrollarse. En el ser humano, la alimentación de cada persona varía según numerosos factores: gustos, edad, actividad física, medios económicos o disponibilidad de productos en la región en la que habita. La cultura también influye en la alimentación, ya que, para productos similares, en cada lugar existen diferentes costumbres y tradiciones. Enfoque biológico Los animales y otros heterótrofos deben comer para poder sobrevivir, como los carnívoros, que comen a otros animales, los herbívoros comen plantas, los omnívoros consumen tanto plantas como animales, o los detritívoros, que se alimentan de detritos. Los hongos realizan una digestión externa de sus alimentos, secretando enzimas, y que absorben luego las moléculas disueltas resultantes de la digestión, a diferencia de los animales, que realizan una digestión interna. Las reacciones químicas necesarias para la vida dependen de la aportación de nutrientes. En los organismos superiores estos nutrientes son sintetizados por fotosíntesis (vegetales), o elaborados a partir de compuestos orgánicos (animales y setas). Existen otras fuentes energéticas para los microorganismos: por ejemplo, algunas arqueas obtienen su energía produciendo metano o por oxidación de ácido sulfhídrico o azufre. Alimentación vegetal Las plantas son en su mayoría organismos autótrofos. Son capaces de sintetizar compuestos orgánicos a partir de sales minerales y de la energía solar a través de la función clorofílica o fotosíntesis. Alimentación animal Los animales son organismos heterótrofos, dependen de una o más especies distintas para su nutrición. Los alimentos son transformados en nutrientes mediante la digestión. El régimen alimentario, ya sea carnívoro o herbívoro, tiene una gran influencia en el comportamiento animal, y determina su condición de depredador o presa en la cadena trófica. Pueden tener un comportamiento alimentario omnívoro o más específico, como folívoro, piscívoro, carroñero, nectarívoro, saprófago, etc. Tal como otros animales, el hombre depende de su ambiente para asegurar sus necesidades fundamentales de alimento. Cómo promover una alimentación sana La alimentación evoluciona con el tiempo, y en ella influyen muchos factores socioeconómicos que interactúan de manera compleja y determinan modelos dietarios personales. Entre esos factores cabe mencionar los ingresos, los precios de los alimentos (que afectarán la disponibilidad y asequibilidad de alimentos saludables), las preferencias y creencias individuales, las tradiciones culturales, y los factores geográficos y ambientales (incluido el cambio climático). Por consiguiente, el fomento de un entorno alimentario saludable y, en particular, de sistemas alimentarios que promuevan una dieta diversificada, equilibrada y sana, requiere la participación de distintos sectores y partes interesadas, incluidos los gobiernos, el sector público y el sector privado. Los gobiernos desempeñan un papel fundamental en la creación de un entorno alimentario saludable que permita a las personas adoptar y mantener prácticas alimentarias sanas. Las medidas que las instancias normativas pueden adoptar para generar entornos alimentarios saludables incluyen: Armonización de las políticas y los planes de inversión nacionales, en particular las políticas comerciales, alimentarias y agrícolas, con el fin de promover la alimentación saludable y proteger la salud pública mediante medidas orientadas a: aumentar los incentivos a los productores y vendedores minoristas para que cultiven, utilicen y vendan frutas y verduras frescas; reducir los incentivos a la industria alimentaria que le permiten mantener o aumentar la producción de alimentos procesados con altos niveles de grasas saturadas, grasas trans, azúcares libres y sal/sodio; alentar la reformulación de productos alimentarios a fin de reducir los contenidos de grasas saturadas, grasas trans, azúcares libres y sal/sodio, con miras a suprimir las grasas trans de producción industrial; aplicar las recomendaciones de la OMS sobre comercialización de alimentos y bebidas sin alcohol para niños; establecer normas para fomentar prácticas alimentarias saludables mediante la disponibilidad asegurada de alimentos saludables, nutritivos, inocuos y asequibles en centros preescolares, escuelas y otras instituciones públicas, así como en el lugar de trabajo; examinar instrumentos normativos y voluntarios (por ejemplo, reglamentos de comercialización y normas sobre etiquetado nutricional) e incentivos o desincentivos económicos (por ejemplo, tributación y subsidios) para promover una dieta saludable; y alentar a los servicios transnacionales, nacionales y locales de alimentos y sus puntos de venta, a mejorar la calidad nutricional de sus productos, asegurar la disponibilidad y asequibilidad de opciones saludables y revisar los tamaños y precios de las porciones.