Tienes La Vida Eterna

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Cristo en vosotros, la esperanza de la gloria.

"

Estudios Biblicos Devocionales   Ama Cristo Indice

   "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único


Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado" (Juan 17:3).

¿Tiene Usted la Vida Eterna?

Jesucristo dijo: "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios
verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado" (Juan 17:3). ¿Cómo obtiene usted
la vida eterna? ¿Ha experimentado esto?  ¿Cuál es este conocimiento de la vida
eterna?

La vida eterna es la vida de Dios producida en nosotros por Su Espíritu Santo. Esta resulta
de  un encuentro personal con un Dios santo que en Su gracia nos perdona nuestros pecados
sobre la base de la muerte expiatoria de Jesucristo. Nadie puede tener Su vida y no ser
cambiado. Dios es santo y Su Espíritu nos hace conscientes de nuestro pecado y de nuestra
profunda necesidad personal de Su gracia. Es por Su gracia que nosotros nos convertimos a
Cristo, quien es nuestro Salvador. Este conocimiento se produce sólo cuando el Espíritu de
Dios está trabajando de antemano para que sea posible, y siempre nos cambia, el resultado
en una respuesta del corazón y la verdadera devoción a Él.

Cuando nosotros somos concientes del Dios verdadero y viviente, nosotros somos
enfrentados con nuestro pecado y depravación en oposición a Su santidad y justicia. Todos
nosotros somos corruptos y Él es totalmente santo. "La paga del pecado es muerte"
(Romanos 6:23). Nuestro pecado bloquea nuestra entrada en la presencia de un Dios justo.

¿Alguna vez ha sido molesto saber que usted al final debe tratar con Uno que no tiene
pecado, que no puede tolerar el pecado en cualquier forma y que debe juzgarlo?

Todo el conocimiento de Dios comienza con Su santidad y la realidad de tu pecado.

Es bueno recordar que no podemos engañar a Dios. Él siempre esta consciente de lo que
nosotros somos y de lo que nosotros pensamos y hacemos. Sólo el necio dice, "! Ningún
Dios!" “! Ningún Dios!" Nada toma al SEÑOR Dios por sorpresa. "Por cuanto todos
pecaron y están destituidos de la gloria de Dios" (Romanos 3:23).

Aquí es donde la buena noticia de Jesucristo es tan importante para nosotros. Dios aplica
estas verdades a nosotros personalmente. El regalo gratuito de Dios es la vida eterna a
aquellos que responden a Su oferta gratuita de la gracia salvadora.

Jesucristo fue a la cruz y murió por los pecadores. "Porque Cristo, cuando aún éramos
débiles,  a su tiempo murió por (en lugar de y en nombre de) los impíos" (Rom. 5:6).
Además, "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores,
Cristo murió por nosotros" (v. 8).

Nosotros no tenemos excusa, porque Dios ha tomado todas las medidas para demostrar Su
amor por los pecadores perdidos. Él nos ha hecho conscientes de Su santidad, de nuestros
pecados, y la gracia salvadora de Dios por la fe en la muerte de Jesucristo.

Las buenas noticias son las que usted acaba de leer es "poder de Dios para salvación a todo
aquel que cree. . . Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como
está escrito: "Pero el justo por la fe vivirá" (Romanos 1:16-17). Nuestro Dios santo y justo
es "justo y el que justifica al que es de la fe de Jesús" (3:26). Él puede ser así porque Jesús
pagó nuestra deuda por el pecado.

La vida eterna es el conocimiento personal de Dios que se ha revelado a nosotros por la


aplicación de estas verdades por la obra de su Espíritu Santo. La vida eterna se encuentra en
este conocimiento de Él en la persona y obra de Jesucristo.

La plenitud de la revelación personal de Dios de Sí Mismo se encuentra en Aquel que


murió por nosotros, pagó el precio de nuestros pecados, se levantó de entre los muertos, ha
satisfecho la justicia de Dios, y se ha instalado en nuestros corazones por Su Espíritu que
mora en nosotros. Esta es la vida eterna, conocerle a Él en Su gracia salvadora.

¿Lo conoce usted a Él? Conocer a Dios en una relación personal, íntima, de amor con Él es
tener la vida eterna.

Dios ha hecho la provisión para borrar todos los pecados que usted ha cometido, y por lo
tanto eliminar todo obstáculo a Su presencia santa. ¿Vendrá usted valientemente  a Su trono
de la gracia sabiendo que todos sus pecados están bajo Su sangre? "Yo he venido para que
tengan vida y para que la tengan en abundancia" (Juan 10:10 b). Conocerlo en la gracia
salvadora es tener la vida eterna.
Pasos para estar en paz con Dios
1. Reconoce el Plan de Dios para ti.   
Dios te ama y quiere que tú experimentes su paz y vida. Él desea
tener una íntima y eterna relación contigo. La Biblia dice: “De tal
manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para
que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida
eterna” (Juan 3:16).

2. Reconocer que tenemos un problema.


Estamos separados de Dios porque hemos
escogido desobedecerle. La Biblia dice: “por
cuanto todos pecaron y están destituidos de la
gloria de Dios” (Romanos 3:23). Nada que
podamos hacer nos va a permitir cruzar el espacio
que nos separa de Dios. Buenas acciones, ser
miembro de una iglesia, bautismo son todos
pequeños puentes que no van a ningún lugar. Nuestro problema es
peor. Somos muertos espirituales. “Porque la paga del pecado es
muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor
nuestro” (Romanos 6:23).
 
 
 
 

3. Responder al remedio de Dios 


Dios te ama tanto que ha enviado a su Hijo,
Jesucristo, quien  se puso en el espacio para que tu
pudieras llegar a Dios. Cristo hizo eso al pagar por
nuestros pecados cuando él murió en la cruz y se
levantó de su tumba. La Biblia dice: “Cristo,
cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por
los impíos. . . Pero Dios muestra su amor para con nosotros, en que
siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:6,
8).
 
 
 
 

  4. Recibe al Hijo de Dios como tu


Señor y Salvador.
Tu cruzas el puente hacia la familia de Dios
cuando por fe le pides a Cristo venir a tu vida.
Este es un paso de fe. La Biblia dice: “Si
confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y
crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre
los muertos, serás salvo, porque con el corazón se cree para
justicia, pero con la boca se confiesa para salvación” (Romanos
10:9, 10).
 

Ora para  recibir a Cristo ahora mismo.


 ¿Estás tú dispuesto a dejar todo pecado e
infidelidad y por fe recibir a Jesucristo en tu
corazón y en  tu vida? Tu puedes usar la
siguiente oración si viene de tu corazón:

"Señor Jesús, Yo soy un pecador. Yo sé que no


puedo salvarme a mí mismo. Yo ahora sé que
Cristo murió en mi lugar en la cruz para
perdonar mis pecados. Yo sé que Cristo se levantó de los muertos y
que vive. Yo te confieso mis pecados, me arrepiento y pongo mi fe
en ti para que me salves. Yo quiero que tú me salves por toda la
eternidad. Gracias por darme vida eterna. Amen."

5. Descansa en la perfecta paz de Dios.


 La Biblia dice: "Justificados, pues, por la fe,
tenemos paz para con Dios por medio de
nuestro Señor Jesucristo” (Romanos
5:1). “Ahora, pues, ninguna condenación hay
para los que están en Cristo Jesús" (Romanos
8:1).

Que las bendiciones ricas de nuestro Señor Jesucristo se derramen


sobre ti.

Descubre un lugar para ti


Como una evidencia de permitir a Jesús tomar el control de nuestras
vidas queremos identificarnos con él. En el Nuevo Testamento la
manera de identificarnos con Jesús es confesándolo públicamente e
identificándonos  con  él en el bautismo y congregarnos en una
iglesia. La Biblia dice: “ todo aquel que invoque el nombre del
Señor, será salvo” (Romanos 10:13).
Es natural para ti como cristiano querer conocer mejor a Jesús y
estar completo en él. Es a través de tu obediencia que vas a permitir
a Jesús estar involucrado en cada parte de tu vida íntima. Permite a
Jesús que te guíe, té de completa dirección y controle tu vida. Esto te
llevará a la madurez en una relación personal con Dios. Si deseas la
madurez cristiana necesitas asociarte con otros creyentes quienes
también han experimentado a Jesús al igual que tu. Busca una buena
Biblia, una iglesia cristo céntrica y se parte de  dicha asociación.

¿Se entregó  usted por Fe a Cristo?


Si así lo hizo, ¿Dónde está ahora, conforme a la promesa del  Señor?
En la vida eterna. ¿En qué basa usted su confianza? En la promesa
de Dios en la Biblia. ¿Le engañaría  Dios? ¿Puede Dios mentirle?
Por supuesto que no.
“Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna y esta
vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo tiene la vida; el que no
tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas os he escrito a
vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis
que tenéis vida eterna y para que creáis en el nombre del Hijo de
Dios” (1 Juan 5:11-13).
Agradezca a Dios porque ahora usted tiene vida eterna.

¿Qué  ocurrió cuando  usted se entregó a Cristo?


En el momento en que usted se entregó a Cristo por fe, grandes
cosas le ocurrieron:
1. Usted  pasó de muerte a vida (Juan 5:24).
2. Sus pecados fueron perdonados (Colosenses 1:14).
3. Usted fue hecho un hijo de Dos (Juan 1:12).
4. Usted está libre de temor (Juan 8:36).
5. Usted es una nueva criatura en Cristo (2 Corintios 5:17).
¿Puede usted imaginar algo más glorioso que le haya sucedido? Dé
gracias a Dios ahora por lo que El ha hecho en usted por medio de
Cristo. 

¿Qué   hacer ahora que Ud. cree en Cristo como


su Salvador?
1. Lea la Biblia todos los días. “No sólo de pan vivirá el hombre,
sino de toda palabra que sale de la boca de Dios" (Mateo 4:4).

2. Ore a Dios siempre. “Orad sin cesar. Dad gracias en todo,


porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo
Jesús” (1 Tesalonicenses 5:17, 18). Orar es conversar con Dios.

3. Confiese a Dios cada pecado. “Si confesamos nuestros pecados,


él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de
toda maldad" (1 Juan 1:9).
4. Cuente a otros su experiencia. Jesús dijo: "Vuélvete a tu casa y
cuenta cuán grandes cosas ha hecho Dios contigo” (Lucas 8:39).
5. Congréguese con otros creyentes. “No dejando de congregarnos,
como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto
más, cuanto veis que aquel día se acerca” (Hebreos 10:25).

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