Hitos y Protagonis

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hitos y protagonistas

Hitos y Protagonistas - Pérgola - Dengue: ¿endemia o epidemia?


Dengue: ¿endemia o epidemia?
Federico Pérgola
Director del Instituto de Historia de la Medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires

A unque el título de este artí-


culo es llamativo, refleja lo
que ocurre con ciertas afecciones
transmisibles. El dengue puede actuar
–y de hecho actúa– en algunas regio-
nes como endemia, mientras que en
otras lo hace con la característica de
las epidemias: pasa por sobre el de-
mos (pueblo) y tras un determinado
tiempo se retrae. Ejemplos paradig-
máticos de uno y de otro tipo de las
modalidades de estas infecciones son
la endemia del Chagas en Argentina
y la epidemia de Peste Negra que
asoló Europa y Asia en el siglo XIV.
Una se establece, se hace crónica y
su daño es lento pero persistente; la
otra es artera, pega fieramente y deja
un desastre social y económico en la
zona afectada.
Si bien el tema ya ha sido abordado la misma palabra dengue es de origen de Hipócrates, Galeno, Celso) no la
en Argentina,1 nunca está de más español. Por su benignidad la deno- consignan. Pese a las grandes equivo-
profundizarlo dada su importancia minaron ‘la piadosa’; por el exantema, caciones medievales en cuanto a la
epidemiológica en el resto de los paí- ‘calentura roja’; porque la adquirían al categorización de los males humanos,
ses sudamericanos comprometidos llegar a Filipinas o América, ‘fiebre de todo indica que el dengue también
por la enfermedad. aclimatación’ o ‘chapetonada’; por co- estuvo ausente.
Es interesante y hasta pintoresco el incidir en la época de los dátiles, ‘fie- ¿Cuáles son las primeras noticias de
origen del término dengue. El imagi- bre datilera’, etc. Lo envarado, melin- la afección? Todo parece iniciarse con
nario popular siempre relaciona los droso y presuntuoso de la marcha la colonización de Indonesia y de la
síntomas de la afección con hechos lumbálgica ha motivado los nombres América ecuatoriana. El hito cronoló-
de la vida cotidiana o los homologa burlones, más o menos castizos, de gico sería 1779, cinco años antes de
con enfermedades frecuentes y cono- ‘Don Simón’, ‘Rosalía’, ‘pantomima’, que se desatara la primera epidemia
cidas. Esto dice Pedro-Pons:2 ‘trancazo’. Con este último nombre la europea con epicentro en Cádiz y
“La palabra dengue alude a la mar- enfermedad se confundía con la gri- Sevilla. Estudiada por Nieto de Pina,
cha especial, presuntuosa, dandy, me- pe, razón por la cual deben admitirse recibió el mote de “calentura benigna
lindrosa, denguera, con que el sujeto con ciertas reservas las descripciones de Sevilla”. Otros consideran que el
se ve obligado a caminar debido a las y nombres del siglo pasado (Nota del primer caso fue reportado por Benja-
mialgias lumbares que lo envaran. autor: se refiere al XIX). Los ingleses min Rush en 1789, quien acuñó el
Dandy fever la denominan los ingle- la han llamado también giraffe fever, término de fiebre rompehuesos o
ses; fiebre quebrantahuesos (break seven days fever, bouquet fever, etc.” quebrantahuesos.
bone fever) en Filadelfia; aburabaku, El mundo antiguo parece no haber En 1824, el dengue llegó a la India.
los árabes; fiebre sellar, etcétera. conocido esta enfermedad; al menos, Desde esa misma fecha azotó en los
Los españoles han sido los que han las crónicas de los médicos griegos y veranos a Siria, Grecia, Libia, Chipre,
dado más nombres a esta infección: romanos más destacados (la escuela Turquía e Italia, y recrudeció a mitad
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del siglo. En 1928, Grecia padeció una hemorrágica, sumamente peligrosa Organización Mundial de la Salud, en
epidemia con medio millón de afec- sobre todo en los niños. 1995 hubieron 275.000 casos de
tados solamente en Atenas. Dos eminentes investigadores, dengue en América (incluye todas las
En 1906, Thomas Lane Barcroft Kraus y Rosenbusch, se ocuparon del Américas), de los cuales 7.715 fueron
(1860-1933), médico graduado en la dengue en Argentina.3 En 1916 expre- de dengue hemorrágico. Dos años
Universidad de Edimburgo, demostró saban lo siguiente: “Por la monografía después, se estimaba que en el mun-
que el transmisor de la enfermedad de Leichtenstern, de la obra de Nor- do se presentaron 50 millones de
era un mosquito del género Aedes: el thnagel, vemos que el dengue apare- casos, entre ambos tipos.
Aedes aegypti. Un año después, Ash- ció por primera vez en Río de Janeiro En 2010 se registraron cifras alar-
burn y Craig descubrieron que su en el año 1864. En la extensa literatu- mantes en cuanto al desarrollo de la
agente etiológico era un virus. ra de Dorr y Rus sobre el dengue, no enfermedad. En efecto, hasta el mes
Pero como toda historia tiene su se encuentra constatación científica de setiembre de ese año en Brasil se
contrapartida y depende de quien la sobre su existencia en el Brasil y Re- habían registrado 942.153 casos,
cuenta, existe otra versión que afirma pública Argentina, de tal modo que no mientras que fueron más de 5.100 en
que el término dengue proviene de podemos hablar de una constatación Bolivia, 130.000 en Colombia –seve-
una frase de la lengua swahili, Ka- científica del dengue en esta última ramente afectada–, y 8.277 en Para-
dinga pepo, que describe a la enfer- república”. guay. Argentina se vio favorecida por-
medad causada por un espectro. Los Ambos autores también sugieren que no registró formas hemorrágicas,
defensores de esta teoría animista que la etiología de la enfermedad aunque entre 2009 y 2010 se produ-
suponen que dinga deriva de la pala- correspondería a un virus filtrable. jeron poco más de 27.000 casos de
bra española dengue, con lo cual que- Señalan que los “filtrados por bujías dengue.
daría en pie la primera de las hipóte- de Berkefeld por vía intravenosa son Volvamos a la prevención, tal vez la
sis. tan infecciosos como la sangre no única forma que tenemos los huma-
Otra referencia poco sustentable filtrada”. nos de defendernos de esta ende-
alude a una enciclopedia médica chi- Todos estos datos reafirman una moepidemia, en virtud de que no
na de la época de la dinastía Jin (265 idea generalizada: en las primeras dé- existe tratamiento específico ni vacu-
a 420 d. C.), que menciona una en- cadas del siglo pasado, poco y nada nas contra las diferentes cepas de
fermedad relacionada con el vuelo de se hablaba del dengue en las zonas dengue, y que los insecticidas han
los insectos y las aguas venenosas, subtropicales. Como dice Bodino:4 generado resistencia parcial en el gé-
aunque bien podría significar cual- “Luego de la Segunda Guerra Mun- nero Aedes. Corresponde destacar
quier otro mal de origen palustre. dial, se produjo una pandemia global también que el dengue es una enfer-
Entre 1950 y 1975 se manifestó de dengue en el sudeste asiático, que medad urbana por excelencia, incre-
con fuerza el llamado dengue hemo- se ha intensificado durante los últi- mentada por los reservorios –muchos
rrágico. mos 15 años. Las epidemias causadas de ellos de desechos como las cu-
Los primeros casos de dengue clá- por múltiples serotipos son cada vez biertas de coches– que permiten el
sico comprobados por laboratorio tu- más frecuentes, la distribución geo- desarrollo del vector. Sobre este últi-
vieron lugar en el Caribe y Venezuela gráfica del virus se ha expandido y el mo es donde debemos acentuar la
Rev Argent Salud Pública, Vol. 3 - Nº 10, Marzo 2012

en 1963/64 con el serotipo DEN-3. El dengue en su forma hemorrágica ha lucha. ¿Qué ocurre, entonces? Es la
DEN-1 apareció en 1977 también en emergido en la región del Pacífico y sociedad que debe comprometerse a
el continente americano y en la mis- de las Américas.” llevarla a cabo y ese comprometerse
ma zona indicada, procedente de Ja- Probablemente este virus haya per- tiene las características de una orden
maica. Mucho antes, en 1953/54, se manecido durante años (o siglos) en que ha de cumplirse para el bien de
había detectado el serotipo DEN-2 en algún sistema ecológico cerrado, pero todos aquellos que pueden enfermar.
Trinidad y Tobago y en casos endémi- el cambio climático que se insinuaba Sin este compromiso, las autoridades
cos. y que hoy es una realidad (a pesar de sanitarias poco pueden hacer.
El dengue es endémico en muchos la incredulidad de algunos) permitió
países y tiene un estrecho vínculo con expandir el agente vector, el mosquito REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1
Pérgola F. Historia de las endemias en la Argentina,
la estación del año y el desarrollo de Aedes aegypti, y una afección sin tra-
Buenos Aires, Salud Investiga, 2011.
mosquitos del género Aedes, por lo tamiento conocido y con una forma 2
Pedro-Pons A, et al. Enfermedades infecciosas,
que puede considerarse estacional. grave como el dengue hemorrágico. intoxicaciones, enfermedades profesionales y por
Las epidemias son explosivas, de po- Esto genera un problema sanitario agentes físicos, enfermedades alérgicas. Barcelona,
cas semanas de duración pero con mayor, cuyo único ataque eficaz es la Salvat, 1968.
3
Kraus R, Rosenbusch F. El dengue en la República
habituales recurrencias. Y justamente prevención. Amerita esta estrategia el
Argentina, La Prensa Médica Argentina, Buenos
allí está el peligro: si el mismo seroti- auge que ha tomado la enfermedad Aires, Nº 1, pp. 4-6, 10 de junio de 1916.
po virósico aparece en una persona tanto en Asia como en toda América. 4
Bodino JA. Dengue y dengue hemorrágico, Revista
por segunda vez, ocasiona la forma Las cifras son elocuentes: según la del Hospital de Niños, Nº 174, pp. 280-285, 1997.

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